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Perspectiva Psicoanalítica

La perspectiva psicoanalítica se refiere al estudio de las fuerzas inconscientes


que motivan nuestro comportamiento. Esta perspectiva fue fundada por
Sigmund Freud al inicio del siglo XX, en una época marcada en Europa por
la herencia victoriana y con una profunda actitud conservadora, de hipocresía
y de represión sexual.

El psicoanálisis se interesa en investigar los conflictos del inconsciente,


originados en las experiencias tempranas de relación con nuestros padres y
que se manifiestan en nuestras emociones y relaciones con los demás. Se
trata de explorar las fuerzas inconscientes que nos provocan malestar, para
eventualmente ponerlas bajo control.

"El niño es el padre del hombre"

En esta frase, atribuida a Freud, se encierra el contenido esencial de su teoría


psicoanalítica. Después de atender a un sin número de pacientes con
alteraciones emocionales Freud llegó a la conclusión de que los desórdenes
afectivos y de la personalidad se originaban en experiencias traumáticas
reprimidas, vividas durante algún periodo de la niñez.

Según Freud los cimientos de la personalidad se forman durante los primeros


años de vida, cuando los niños enfrentan conflictos entre la necesidad de
satisfacer los impulsos biológicos innatos y los requerimientos de las normas
sociales. Así, la personalidad se desarrolla de acuerdo a la forma en que
nuestra psique (consciente e inconsciente) va resolviendo el conflicto entre
nuestros impulsos innatos de placer y agresividad, y las fuerzas represoras
definidas por la sociedad, manifiestas en forma de reglas, normas y leyes.
Hagamos un breve resumen con las principales aseveraciones de la teoría
freudiana.

 La motivación inconsciente influye en el desarrollo de la personalidad.


 Los pensamientos y sentimientos que tenemos en la mente, de los
cuales no somos conscientes, tienen una gran influencia en nuestro
comportamiento.
 Las fuerzas del inconsciente controlan una gran parte de nuestra
conducta ya que están compuestos de pensamientos, deseos,
sentimientos y recuerdos que han sido reprimidos por nuestra
conciencia, pues por su naturaleza sexual o agresiva, son generadores
de tensión y ansiedad.
 Aunque no nos demos cuenta del contenido de nuestros pensamientos
inconscientes, ellos tienen una poderosa influencia en las decisiones
que tomamos cotidianamente, como las relacionadas con nuestro
trabajo, actividades sociales, pasatiempos e incluso nuestros hábitos
de limpieza.
 Los pensamientos inconscientes también tienen influencia sobre los
síntomas que se manifiestan en un trastorno psicológico.

El conflicto entre los impulsos innatos y la normatividad cultural, siempre


presente a lo largo de nuestra vida, tiene lugar en el aparato intrapsíquico,
donde interactúan, de forma muy dinámica, tres estructuras psíquicas: Ello,
Yo y Superyó.

En el ello reside el principio del placer, su naturaleza es completamente


inconsciente y busca la satisfacción inmediata de nuestras necesidades
sexuales y agresivas.

El yo trata de satisfacer las demandas del ello de la mejor forma posible, pero
sin permitir que se desboque y cause problemas. El yo opera bajo el
principio de la realidad, manteniendo nuestros deseos en un plano realista
y bajo control. Así esos deseos podrán brindarnos placer por periodos largos
de tiempo, en lugar de traer dolor y caos a nuestra vida.

El yo tiene la importante tarea de mediar entre los deseos primitivos y


salvajes del ello y las restricciones impuestas por el superyó.

El Superyó es el conjunto de prohibiciones morales introyectadas o


interiorizadas. Ejerce una función de autoridad y censura moral, que
obligan al yo a luchar contra los impulsos del ello.

Algunos aspectos relevantes del superyó son:

 Constituye la conciencia que representa las normas y valores sociales.


 El superyó va más allá que el yo, considerando no solamente lo real,
sino también lo ideal.
 Nos indica cómo debemos comportarnos, de acuerdo con nuestra
sociedad representa el principio del deber.
 Utiliza principios acerca de la moralidad los cuales provienen de
nuestros padres y nuestra cultura y nos dan un fuerte sentido del bien
y del mal.
 Nos puede hacer sentir muy orgulloso o muy culpables de nuestras
acciones.
 Siempre se opone a los requerimientos del ello.

De acuerdo con Freud, la personalidad se va estructurando desde los


primeros años de vida, conforme transitamos por una serie de etapas de
desarrollo psicosexual y que explican cómo la energía producida por el ello
en su búsqueda de placer (líbido), se transfiere a diversas zonas erógenas,
que son áreas sensoriales de placer sensual y erótico de nuestro cuerpo.
Conozcamos lo que corresponde a las etapas del desarrollo psicosexual.
ETAPA CARACTERÍSTICAS

Desde el nacimiento hasta los 18 meses de edad,


Oral
aproximadamente. El niño obtiene la mayor parte de su
Relativo a la
placer en la boca, por medio del chupetear y el morder. El
boca.
niño es completamente dependiente de su madre.

De los 18 meses a los 3 años de edad. Durante esta etapa


el niño adquiere un sentido de control sobre el ambiente
como resultado de su aprendizaje para utilizar el baño. Se
Anal
le llama etapa anal porque el placer proviene del control
Relativo al ano.
ejercido sobre los esfínteres de la vejiga y el ano. El niño
aprende que al controlar su evacuación puede controlar
parte de su entorno.

Comprende de los 3 a los 6 años de edad. Los sentimientos


de placer se asocian principalmente con los genitales. En
Fálica
esta etapa el niño se siente sexualmente atraído por su
Relativo al falo
progenitor del sexo opuesto al suyo y se siente celoso por
(miembro sexual
su progenitor del mismo sexo. Este complicado estado de
masculino).
cosas se conoce como complejo de Edipo en los varones y
complejo de Electra, en las mujeres.

Desde los 6 años hasta el inicio de la pubertad (11 ò 12


De latencia
años). Los deseos sexuales se adormecen, la energía se
Periodo concentra en cultivar las relaciones con los compañeros
de inactividad del mismo sexo y en las actividades escolares. Se adoptan
erótica. los roles de género y se consolida el superyó.

Genital

Relativo a los
órganos De la pubertad a la adultez. Los cambios hormonales

genitales, el pene vuelven a despertar la libido y se dinamiza la búsqueda del

en el hombre y la placer sensual y sexual que se asocia con los genitales.

vagina en la
mujer.

Como resultado de vivir en un mundo civilizado, nuestras necesidades


instintivas (impulsos del ello) no pueden ser totalmente satisfechas. Cuando
el control consciente que ejerce el yo sobre los impulsos del ello se ve
amenazado con ser insuficiente, nos sentimos ansiosos, entonces entran en
acción los mecanismos de defensa, los cuáles reducen o re direccionan la
ansiedad distorsionando o negando la realidad, lo cual representa un rechazo
inconsciente a aceptar la realidad.

Todos utilizamos mecanismos de defensa y son sanos, siempre y cuando no


interfieran con el desarrollo emocional normal. Para ver en qué consiste cada
uno de ellos revisémoslos:
 Represión: Consiste en desterrar de la conciencia, mediante un olvido
selectivo, los pensamientos, sentimientos y recuerdos que generan
ansiedad, frustración o conflictos; como cuando “olvidamos” aquellos
detalles de una mala experiencia amorosa. Olvidamos selectivamente
los compromisos desagradables, no así los neutrales y mucho menos
los agradables.

 Regresión: Cuando existe una gran presión sobre el yo, se retrocede


a una etapa temprana de desarrollo, para tratar de recuperar la
seguridad de épocas anteriores, como el niño que se vuelve a chupar
el pulgar o a mojar la cama cuando ingresa a la escuela o ante la
llegada de un hermanito; o bien, cuando un adulto, despedido de su
trabajo, se comporta como un adolescente incapaz de tomar decisiones
importantes.

 Formación reactiva: Implica decir lo contrario a lo que realmente


sentimos, cambiamos un impulso inaceptable en una situación
opuesta: por ejemplo un ferviente hedonista que niega sus propios
impulsos hablando de lo moral y lo correcto; o bien aquel que exhibe
un comportamiento machista exacerbado como defensa contra sus
deseos homosexuales.

 Proyección: Supone disfrazar nuestros impulsos amenazantes al


atribuirlos a los demás. Si no soportamos a alguien, pero no queremos
admitirlo, podemos entonces decir que esa persona nos odia. Cuando
alguien habla de otra persona, su discurso habla más de si mismo que
los demás.
 Racionalización: Justificamos nuestras malas acciones,
incapacidades, errores o conductas inaceptables y cubrimos la realidad
mediante razonamientos inconscientes para llevarlas a cabo; por
ejemplo, un alcohólico que explica que él bebe para ser sociable y
trabajar más y mejor.

 Desplazamiento: Cuando nuestra ira o cualquier otro sentimiento


inaceptable se remueve de su fuente original y se desplaza hacia algo
o alguien diferente; por ejemplo, un hombre enojado por su jefe puede
llegar a su casa y agredir a su esposa e hijos.

 Compensación: Cuando una persona se siente débil o inferior a los


demás, trata de superar ese sentimiento asumiendo retos enormes y
sometiéndose a enormes esfuerzos, físicos o intelectuales.

 Sublimación: Implica encauzar la energía de los impulsos


inaceptables del ello en tareas creativas, productivas y socialmente
aceptables, como el arte, el trabajo, el deporte y el estudio.

 La introyección: es un proceso psicológico por el que se hacen


propios rasgos, conductas u otros fragmentos del mundo que nos
rodea, especialmente de la personalidad de otros sujetos.
 Aislamiento: modo de quitar el afecto a la representación para poder
tener algo menos de relación y no angustiarse con el contacto que es
en realidad lo que teme el sujeto.

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