RESUMEN DE LOS ARTICULOS CIENTIFICOS

“HABILIDADES MOTORAS E INTELIGENCIA EN NIÑOS CON TRASTORNO

DEL ESPECTRO ALCOHOLICO FETAL”

“LOS VIDEOJUEGOS ACTIVOS MEJORAN LA APTITUD MUSCULAR Y LAS

HABILIDADES MOTORAS EN NIÑOS CON SOBREPESO U OBESIDAD”

Autor: Abel Ramiro Sanchez Pareja

En el siguiente resumen abordaremos los temas ya mencionados en los títulos en base a

los artículos científicos brindados por el docente universitario para su análisis y
explicación de esta.

1. HABILIDADES MOTORAS E INTELIGENCIA EN NIÑOS CON

TRASTORNO EL ESPECTRO ALCOHOLICO FETAL (FASD):
Es un trastorno diverso del desarrollo neurológico resultante de la exposición
prenatal al alcohol (PAE), las tasas de prevalencia del FASD son difíciles de
medir, pero se estima que en la actualidad 4% de la población canadiense sufre de
este trastorno, incluso se llega a mencionar que puede ser más común que el
autismo, la parálisis cerebral y el síndrome de Down combinados. La directriz
canadiense, Trastorno del espectro alcohólico fetal: una guía para el diagnóstico a
lo largo de la vida, es utilizado y en la práctica clínica para el diagnóstico y fue
implementados en diferentes países. Para su evaluación se toma en consideración
un deterioro severo en tres o mas de los 10 dominios del neuro desarrollo:
habilidades motoras, neuroanatomía/neurofisiología, cognición del lenguaje,
rendimiento académico, memoria, atención, función ejecutiva, regulación afectiva
y conductual adaptativa y habilidades sociales comunicación social. El FASD
afecta áreas del cerebro contribuyendo a una amplia gama de deficiencias en el
desarrollo motor fino y grueso, salud mental, AVD, desarrollo social y a largo
plazo déficit de atención, consumo de sustancias o problemas con la ley. Los
déficits de habilidades motoras finas y gruesas están bien documentados en niños
con FASD, sin embargo, las pruebas motoras no se realizan de forma rutinarias
durante las evaluaciones de diagnostico de FASD. Se estima que las prevalencias
de discapacidades motoras finas y gruesas en niños con FASD es del 51% y 37%
respectivamente. La alteración en el desarrollo motor fino y grueso afecta en
actividades cotidianas como comer, vestirse, cepillarse los dientes y peinarse,
pero, también afecta en las actividades académica como dibujos, uso de tijeras y
participación en juegos y actividades sociales, mientras que en el desarrollo
grueso afecta en las habilidades motoras como el equilibrio, coordinación,
habilidades con el balón, etc. Dado que las habilidades motoras son importantes
para su desarrollo y la ejecución de actividades físicas por lo tanto un déficit grave
puede tener significativos en su calidad de vida. Existe una suposición clínica de
que existe una correlación positiva entre la habilidad motora y la inteligencia, sin
embargo, un estudio que evaluó una relación entre la coordinación motora y la
inteligencia en niños con desarrollo típico y niños con problemas de coordinación
motora se encontró que solo el 19% de la variación en los resultados motores se
explicaba por las puntuaciones intelectuales. En general, la evidencia de la
investigación describe que la relación entre la coordinación motora y la
inteligencia no son concluyentes. Es importante una aclaración de la relación
entre las habilidades motoras y la inteligencia entre los niños con sospecha de
FASD para informar la inclusión de las habilidades motoras en la evaluación y
pautas de diagnóstico.
Como principal objetivo fue determinar la relación entre las habilidades motoras
y la inteligencia en niños y jóvenes con PAE evaluados para detectar FASD
controlando la atención y función ejecutiva como posible factor de confusión,
plantearon la hipótesis de que encontraría una correlación justa entre las
habilidades motoras y la inteligencia, las habilidades de atención y función
ejecutiva actuarían como variables de confusión. En el método de investigación
se utilizo el diseño transversal con todos los datos recopilados en el mismo
momento para niños individuales, la recopilación duro 7 años para alcanzar un
tamaño de muestra adecuado, se utilizó un equipo multidisciplinario de la Clínica
de Especialidades Pediátricas Camrose de los Servicios de Salud de Alberta, se
evaluó a niños y jóvenes para detectar FASD entre el 2010 y 2017, se excluyeron
los registros médicos que no incluían los puntajes de las pruebas de la Batería de
Evaluación del Movimiento para Niños (MABC-2) y la escala de inteligencia
Wechsler para Niños (WISC) o si el niño había recibido una prueba genética u
otro diagnóstico neurológico, que impide un diagnóstico de FASD. Inicialmente
se identificaron expedientes de 134 niños, 61 no cumplieron con los criterios de
inclusión, por lo tanto, se incluyeron 73 archivos en el análisis. Se corrigieron los
datos de 73 archivos de niños y jóvenes. Un miembro del equipo de investigación
extrajo los datos y un segundo miembro del equipo de investigación verifico su
exactitud. De los 73 niños, 50 (68%) recibieron un diagnóstico de FASD, 48
(66%) eran varones y la edad media fue de 10 años 5 meses. La correlación entre
las habilidades motoras y la inteligencia que baja y estadísticamente no
significativa en la muestra de niños y jóvenes con FASD y PAE. Como discusión
el hallazgo contradice la suposición clínica de una relación en las habilidades
motor y la inteligencia. Los efectos diferenciales de la PAE sobre la inteligencia
y las habilidades motoras pueden deberse a la variación en el área del cerebro
afectada, sutiles diferencias estructurales del cerebro pueden provocar déficits de
inteligencia, pero no de función motora y viceversa, otros factores, incluido los
niveles y el momento de la PAED, la exposición a la nicotina y otras drogas, la
nutrición de la madre y el trauma, también pueden influir en el desarrollo
 diferencial de las capacidades motoras y cognitivas. Los fisioterapeutas y los
Terapeutas Ocupacionales a menudo son excluidos de los equipos de diagnostico
a pesar de las evidencias clínicas y de investigación de frecuentes déficits motores
gruesos y finos en niños con FASD, en conclusión, esta investigación confirmó
que las habilidades motoras y la inteligencia son constructos distintos, sugiriendo
que deben evaluarse por separado para un diagnostico de FASD, ayudara a los
equipos clínicos a realizar diagnósticos mas precisos, definiendo mejor el papel
del fisioterapeuta y la terapia ocupacional en la evaluación y en el diagnóstico del
FASD.

2. LOS VIDEOJUEGOS ACTIVOS MEJORAN LA APTITUD MUSCULAR Y

LAS HABILIDADES MOTORAS EN NIÑOS CON SOBREPESO U
OBESIDAD:
Los niños y adolescentes con sobrepeso y obesidad muestran una fuerza muscular
mayor que los niños adolescentes con peso normal porque el exceso de peso
implica un estímulo crónico de entrenamiento durante las actividades de la vida
diaria, por el contrario cuando la fuerza muscular máxima se normaliza con
respecto a la masa magra corporal, las personas con sobrepeso son mas débiles,
teniendo efectos negativos en el desempeño de fuerza donde implica el control de
su peso corporal como ejemplo una menor altitud al momento de saltar. El
sobrepeso y la obesidad se asocian a una fuerza y resistencia muscular deficientes.
En el artículo de investigación se utilizo los videojuegos activos como objetivo
principal examinando la influencia de una intervención con videojuegos activos
combinada con ejercicios multicomponente sobre la aptitud muscular en los niños
con sobrepeso y obesidad. Los autores plantearon la hipótesis de que los
videojuegos activos podían ayudar a mejorar la fuerza isométrica de los miembros
superiores e inferiores, el salto de altura en salto vertical, así como aumentar masa
magra. La motricidad y la actividad física, sin utilizar deportes clásicos
tradicionales, porque no es una opción atractiva para muchos niños con sobrepeso
y obesidad. Debido a la dificultad del proceso de reclutamiento se realizó una
aleatorización de 2:1 en el primer año, priorizando la intervención AGV, en total
se reclutaron 29 niños con sobrepeso u obesidad, 16 niños y 13 niñas, de 9 a 12
años, en caso de las niñas mencionan que se tomo en cuenta el no haber tenido la
menarquia, excluyendo también a los participantes que padecieran de patologías
que empeoraran con el ejercicio físico o que tuvieran alguna otra contraindicación
para su práctica, como criterios de exclusión también se tomo en cuenta a
participantes que realizan actividad física extracurricular regular de alto nivel o
alta intensidad, seguir alguna dieta especial y cualquier medicación que pueda
alterar la medición de las variables evaluadas. A todos los participantes se les
midió con un estadiómetro sin zapatos y sin ropa mínima con una precisión de 0.1
cm, el índice de masa corporal se calculo dividiendo el peso en kg por altura al
cuadrado. La actividad física y las conductas sedentarias se evaluaron antes y
después de la intervención utilizando acelerómetros calibrados en la mano
izquierda durante 7 días consecutivos configurado a una frecuencia de 30 Hz. Las
habilidades motoras se evaluaron en el grupo videojuegos activos utilizando la
prueba para el desarrollo motor grueso, tercera edición, que evalúa 13 habilidades
motoras fundamentales. El grupo de videojuegos activos participo en una
intervención de 5 meses con tres sesiones por semana en 60 minutos por sesión
que incluye el entrenamiento multicomponente, cada sesión esta compuesta por
10 minutos de calentamiento multiarticular, flexibilidad dinámica, activación
muscular, ejercicios de core, equilibrio y coordinación, luego realiza 45 min de
ejercicios con una combinación de videojuegos activos con ejercicios
multicomponentes. Los videojuegos incluidos fueron la Xbox 360° “Kinect sport,
en la Nintendo wii usaron wii sport, junst dance, Mario y Sonic en los juegos
olímpicos, tapetes de bailes usando dance dance revolución. En los resultados de
la investigación el principal hallazgo fue que los videojuegos activos tienen
potencial de mejorar las aptitudes musculares en niños con sobrepeso u obesidad,
y pueden tener un impacto en las variables de habilidades motoras de motoras.
Ambos grupos aumentaron la masa magra, fuerza de agarre, fuerza isométrica en
extensión de rodilla, por lo tanto parece necesario apostar por el entrenamiento de
fuerza en niños con sobrepeso y obesidad. Los videojuegos podrían ser una
estrategia interesante y prometedora para mejorar la aptitud muscular y luchar
contra la dinapenia pediátrica de niños con sobrepeso y obesidad. La intervención
duro 5 meses de videojuegos activas combinando con ejercicios multicorporales,
dando como resultado efectos positivos en las aptitudes musculares y la
competencia motora, esta intervención puede ser una estrategia potencial para
aumentar la actividad física y disminuir el tiempo de sedentarismo, en conclusión
con dificultades para conseguir mayor información sobre estudios realizados con
videojuegos activos en el articulo se mencionan 4 artículos actuales que evalúan
las diferentes variables, que fueron de ayuda para determinar que los videojuegos
activos con una combinación de ejercicios multicorporales ayuda a la ganancia de
masa magra significativa y a la destreza muscular en niños con sobrepeso, siendo
una alternativa mas llamativa para los niños, teniendo potencial de estudio con
diferentes variables y diferentes juegos didácticos.