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Carlos R. Hernández
La forma
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Immanuel Kant, Crítica a la Razón Pura, B 106. En ese pasaje Kant describe y
esquematiza las categorías de la razón pura en cuanto trascienden (estan en el
sujeto) a lo sensible y por ende, son conceptos generales que están antes de la
experiencia, además de explicar cómo son aplicadas en la experiencia.
Primer argumento: Cuando es percibido un ente, según la
epistemología kantiana (el mayor exponente del subjetivismo
formal) el sujeto cognoscente le otorga a esa cantidad de
materia una forma concreta para que sea un determinado ente,
ese proceso es dado por nuestras categorías de la razón, por lo
tanto, las personas que sostengan la tesis de que la forma es
subjetiva estarían de acuerdo con esto. Por lo que la forma es
algo que se produce en lo más íntimo del conocimiento
humano, sea el sujeto trascendental kantiano o la mente como
principio de unión de las ideas humeano.
El problema es que no hay razón para justificar que toda la
realidad es una interpretación de la mente, exceptuando al
ente humano, no tendría sentido decir que cuando yo veo a
una persona, yo soy el que le da forma a esa persona a partir de
las categorías de mí razón, siendo que esa persona antes no era
persona sino que era un cúmulo de materia caótica, pero aún
así esa misma persona diría lo mismo con respecto a mí, en
caso de que también me percibiese. Esto evidentemente iría ad
infinitum (porque un ente humano le daría la forma a otro ente
humano en el momento que lo percibe mediante sus sentidos,
pero a su vez este ente humano que es causa de otro ente
humano según la construcción que hace su mente, sería causa
de otro en tu mano y así indefinidamente en una serie de
procesos causales mentales infinitos, pero ciertamente un
infinito causal hacia el pasado es un absurdo ipso facto), lo
cual no es razonable. Por lo que —al menos— el ente humano
tiene una forma la cual no es determinada por las categorías de
la razón de otro ente humano, es decir, que al menos la forma
del ente humano es objetiva, depende de su misma
composición en cuanto ente. Por lo tanto, el kantiano (o mejor,
el subjetivista formal, para ser inclusivo) si quiere ser
coherente debe afirmar que al menos la forma del ente humano
es algo propio del humano en sí mismo, porque ya se
presupone que hay un sujeto que conoce, por lo que eso
conlleva a una simple razón: que el sujeto que construye el
mundo a partir de su mente ya es algo dado y consolidado,
como si ya tuviera una forma.
Segundo argumento: Siguiendo con el argumento anterior,
suponiendo que el subjetivista formal es intelectualmente
honesto y desea ser coherente, se enfrenta al segundo
problema: es una arbitrariedad enorme sostener que el ente
humano tiene una forma objetiva y el resto de la realidad tiene
una forma la cual es por derivación de nuestra interpretación
mental, ¿qué razón suficiente habría? Ninguna, en verdad
ninguna. Todo intento de aportar una razón suficiente va a
caer inevitablemente en una arbitrariedad, lo cual no es
razonable, y digo que no es razonable porque toda proposición
metafísica debe ser universal a toda la realidad de la que se
hable, en ese caso como la metafísica es el estudio más general
de las cosas en cuanto sus causas y principios, rechaza desde
sus bases un intento de proposición metafísica en la cual hay
un evidente parcialismo fundado únicamente en la
arbitrariedad del sujeto cognoscente.
Subartículo 2
La materia
Definición de materia
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Véase un ejemplo del primer caso mencionado en la muerte humana en dónde
todo humano llega a su límite como viviente y pierde irremediablemente su
forma sustancial sino darle paso a una nueva forma, y en el segundo caso
obsérvese los múltiples ejemplos de generación de la vida: un espermatozoide y
un ovocito están abiertos a la contrariedad de sus formas ya que su función
esencial es permitir la existencia de una nueva unidad sustancial humana.
algún sentido en alguna intensidad), afirmó que hay una mayor
primacía de actividad y pasividad según los modos radicales
que ser de la materia sine plus, la materia prima se dice «pura
pasividad» porque en tal modo de ser hay una mayor primacía
de sde ser pasible a recibir una forma sustancial, y la materia
segunda se dice «pura actividad» porque si bien la materia
segunda “hereda” cierta pasividad de la materia prima,
mayormente en la materia segunda hay una gran existencia de
operaciones que se sobreponen ante la pasividad, de modo que
la materia en cuanto ya constituida siempre va a ser
mayoritariamente operativa, ante todo.
Subartículo 4
La Privación