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Insuficiencia cardíaca
La insuficiencia cardíaca (IC) o insuficiencia cardíaca congestiva (ICC) se produce cuando el corazón es incapaz
de bombear sangre lo suficientemente rápido como para satisfacer las demandas metabólicas de tejidos o bien
puede hacerlo, pero a costa de aumentar las presiones de llenado. Es la fase final de muchas cardiopatías
crónicas desarrolladas gradualmente a/p de efectos acumulados de la sobrecarga de trabajo o cardiopatía
isquémica.
Puede suceder en ocasiones problemas agudos ICC súbita.
Cuando la sobrecarga aumenta o la función cardíaca se compromete, hay mecanismos fisiológicos que
mantienen la PA y la perfusión de órganos.
1. Mecanismo de Frank-Starling: el aumento de volúmenes de llenado dilata el corazón enlaces
cruzados de actina y miosina mejora contractilidad mejora el volumen sistólico (VS).
2. Adaptaciones miocárdicas: como la hipertrofia con o sin dilatación de las cavidades cardíacas.
Remodelación ventricular
3. Activación de sistemas neurohumorales: para aumentar la función cardíaca y/o regular volúmenes de
presión de llenado. Esto es: lib de NA; activación de SRAA; liberación de PNA.
Estos son mecanismos adaptativos fisiológicos para mantener un GC normal ante perturbaciones agudas, pero
a veces se superada la capacidad de hacerlo. Pueden superponerse cambios patológicos como: apoptosis de
miocitos o alteraciones citoesqueléticas intracelulares y depósito de MEC, produciendo así trastornos.
Posiblemente el deterioro progresivo de la función de contracción disfunción sistólica, de lugar a
insuficiencia cardíaca, reflejada una de la fracción de eyección (FE). El valor normal de la FE está entre 45-
65%. También se acepta que la IC e fruto de la incapacidad del corazón para expandirse y llenarse durante la
diástole disfunción diastólica.
HIPERTROFIA CARDÍACA
El incremento del trabajo mecánico por sobrecarga (de Presión o Volumen) o las señales tróficas miocitos
aumenten de tamaño incremento tamaño y peso cardíaco. Los miocitos hipertróficos presentan núcleos
aumentados de tamaño por el aumento del ADN resultante de la replicación de este en ausencia de división
celular.
En la hipertrofia por sobrecarga de presión los sarcómeros se disponen en paralelo expandiendo el
área transversal de los miocitos en ventrículos y causando incremento concéntrico del grosor de la
pared. Esto se conoce como hipertrofia concéntrica.
En la hipertrofia por sobrecarga de volumen los nuevos sarcómeros se disponen en serie a los
preexistentes, generándose así la dilatación ventricular. A esto se le denomina hipertrofia excéntrica.
Como consecuencia, en la dilatación el grosor de la pared puede ser mayor, igual o menor al normal.
La hipertrofia cardíaca es importante en la cardiopatía clínica: pacientes con HT sistémica, cardiopatía
isquémica, estenosis aórtica, insuficiencia mitral o miocardiopatía dilatada.
Esta hipertrofia de los miocitos no se acompaña por un incremento de capilares, por lo que el aporte de
oxígeno y nutrientes al corazón (sobre todo con hipertrofia x sobrecarga de presión) es menor que en un
corazón normal. Irónicamente el consumo de oxígeno en el corazón hipertrofiado aumenta por la mayor carga
de trabajo.
Producción
Metabolismo Acumulación de Cesa la
fosfato de
aeróbico lactato (nocivo) contractilidad
cretina y ATP
Sólo la isquemia grave de entre 20-30 minutos o más, produce un daño irreversible necrosis a los
miocitos cardíacos. Este retraso en el inicio de la lesión miocárdica permanente sirve de base para DX
rápido de IM agudo, a fin de permitir una intervención coronaria precoz y establecer reperfusión y
recuperación de la mayor cantidad de miocardio de riesgo que sea posible.
El primer rasgo detectable de necrosis es la pérdida de integridad de membrana del sarcolema, que permite
que las macromoléculas intracelular pasen al intersticio, y en último término a la microvasculatura y vasos
linfáticos. Este escape de proteínas miocárdicas intracelulares a la circulación es la base de la realización de
pruebas sanguíneas, sensibles al daño irreversible a los miocitos e importantes para el tratamiento de los IAM.
Con isquemia prolongada sigue la lesión microvascular.
Característica Tiempo
La isquemia es más prolongada en el subendocardio, por lo que la lesión
irreversible de miocitos isquémicos se produce primero en la zona Inicio de reducción de ATP Segundos
subendocárdica. Con isquemia más extendida, un frente de onda de Pérdida de contractilidad < 2 min
muerte celular se desplaza por el miocardio para englobar la mayor
ATP reducido
parte del grosor transmural y la amplitud de la zona isquémica.
Al 50% de lo normal 10 min
La localización, tamaño y morfología de un IAM dependen de:
Al 10% de lo normal 40 min
Lesión celular irreversible 20-40 min
Lesión microvascular <1h
- La localización, gravedad y velocidad de desarrollo de obstrucciones coronarias
- El tamaño del lecho vascular perfundido x vasos obstruidos
- Duración de la oclusión
- Necesidades metabólicas del miocardio en riesgo
- Alcance de los vasos colaterales
- Presencia, localización y gravedad del espasmo arterial coronario.
- Otros factores: FC, ritmo y oxigenación de la sangre.
La necrosis afecta aproximadamente a la ½ del grosor del miocardio en 2-3 horas desde el comienzo de
la isquemia y suele se transmural en 6h. Las áreas del miocardio perfundidas x las arterias coronarias
mayores permiten hacer la relación con las obstrucciones vasculares específicas y las áreas infartadas.
Habitualmente la DAI (descendente anterior izquierda) irriga la mayor parte de la punta del corazón,
pared anterior del VI y 2/3 anteriores del tabique interventricular. La a. coronaria que irriga el tercio
posterior del tabique se denomina dominante. En una circulación dominante derecha, 80% de los
casos, la ACD irriga toda la pared libre ventricular derecha, pared posterobasal del VI y el tercio
posterior del tabique. Si bien existen anastomosis, es poca la sangre que pasa; si la obstrucción se gesta
lentamente en el tiempo, entonces estas colaterales se hacen más importantes.
PATRONES DE INFARTO.
Infarto transmural. Los IM causados x oclusión de un vaso epicárdico son
transmurales, la necrosis se produce en todo el espesor de la pared Infarto de miocardio con
ventricular en la distribución coronaria afectada. Suele asociarse a una elevación del segmento ST
combinación de ateroesclerosis coronaria crónica, cambio agudo en la placa (IMEST)
y trombosis superpuesta.
Infarto subendocárdico (no transmural): como la zona subendocárdica es menos perfundida, es a su
vez, el área más vulnerable a la disminución del flujo. Un infarto
Infarto de miocardio sin
subendocárdico suele afectar al tercio interno de la pared ventricular,
elevación del segmento ST
puede producirse por rotura de placa, seguida de un trombo coronario que
(IMSEST)
se lisa antes que la necrosis miocárdica se extienda a todo el grosor de la
pared. Este tipo de IM también se debe a reducción intensa y prolongada de la PA, como suele
producirse en el shock superpuesto a estenosis coronaria crónica.
Microinfarto multifocal. Se observa cuando hay patología que afecta solo a vasos intramurales
menores. Esto en contexto de microembolización, vasculitis o espasmo vascular, cuyas consecuencias
pueden ser muerte súbita cardíaca o una cardiopatía dilatada isquémica miocardiopatía de
tokotsubo o “síndrome del corazón roto” como consecuencia de estrés emocional.
La evolución temporal de los cambios en IM agudo y su reparación están en la tabla. Los infartos transmurales
afectan como mínimo una porción del VI (entre la pared libre y el tabique ventricular); abarcan casi toda la
zona de perfusión de la a. ocluida, excepto un anillo estrecho de miocardio subendocárdico que queda
preservado por la difusión de O2 y nutrientes.
Las frecuencias de afectación de cada uno de los 3 troncos de las arterias principales y zonas ppales son:
A. coronaria descendente anterior izquierda en un 40-50%: afectan la pared anterior del VI cerca de la
punta; la porción anterior del tabique y la punta circunferencialmente.
A. coronaria derecha en 30-40%: infartos que afectan la pared inferior / posterior del VI; la porción
posterior del tabique ventricular y la pared libre inferoposterior del VD.
CxI en 15-20%: infartos que afectan a la pared lateral del VI excepto la punta.
Un 15-30% de los IM debidos a obstrucción de una coronaria derecha se extienden desde la pared libre
posterior de la porción septal del VI a la pared del ventrículo derecho adyacente. El infarto aislado del VD es
infrecuente (solo un 1-3% de casos), al igual que el infarto de las aurículas.
La apariencia macroscópica y microscópica de un infarto depende del tiempo que transcurre entre el IM y la
muerte. El miocardio dañado experimenta una secuencia progresiva de cambios morfológicos que implican
necrosis coagulativa isquémica típica, el mecanismo que predomina de muerte celular en el IM (aunque
también puede producirse apoptosis), esto sigue de la inflamación y la reparación.
La detección morfológica inicial de IM agudo puede resultar difícil, sobre todo si la muerte sobreviene a las
pocas horas del inicio de síntomas. Los de < 12h de antigüedad no suelen verse macroscópicamente, no
obstante, si el infarto precedió a la muerte al menos 2-3h, es posible realzar el área de necrosis con la
inmersión de secciones de tejido en una solución de cloruro de trifeniltetrazolio. Esta tinción confiere color
rojizo al miocardio sano con la actividad de lactato deshidrogenasa preservada. El infarto se identifica como
una zona pálida no teñida. A las 12-24h del infarto es posible identificarlo macroscópicamente como un área de
color rojizo azulado causada por congestión y la sangre extravasada. En 3-7 días está rodeado de una zona
hiperémica muy vascularizada con la cicatrización del tejido de granulación. Posterior, el infarto estará cada
vez mejor definido, de color amarillo parduzco y blando. En las siguientes semanas, la región se convierte en
una cicatriz fibrosa.
Los cambios histológicos siguen una secuencia predecible. Dentro de las primeras 6-12h aparecen las
alteraciones típicas de la necrosis coagulativa fibras onduladas en la periferia del infarto, debidas a
contracciones del miocardio viable que hacen que las fibras muertas adyacentes no contráctiles, se alargan.
Otro cambio isquémico subletal en bordes de los infartos es la vacuolización del cardiomiocito, que refleja
acumulaciones intracelulares de sal y agua en el RS y marca miocitos viables, aunque apenas contráctiles.
El miocardio necrótico induce infl aguda 1-3 días dsp de la IM, seguida de una oleada de macrófagos que
retiran los cardiomiocitos necróticos y fragmentos de neutrófilos (más pronunciada 3-7 días dsp de IM). La zona
infartada es reemplazada progresivamente por tejido de granulación (más prominente a los 7-10 días), forma el
andamiaje provisional sobre el que se forma la cicatriz colágena densa; como los cardiomiocitos son c. de
diferenciación terminal, no se observa proliferación.
En la mayoría de los casos la cicatrización está muy avanzada al final de la 6° semana, pero la eficiencia de la
reparación depende del tamaño de la lesión original y de la capacidad de cicatrización de los tejidos del
afectado.
Un IM cicatriza desde la periferia hacia el centro, y en infartos grandes quizás no cicatricen tan rápido o tan
completamente como los pequeños.
Tipos de vegetaciones