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Africa and the globalization process: western Africa,

1450–1850.

Reseñado por Julian Silva

Africa and the globalization process: western Africa, 1450–1850 es un artículo de Joseph

Inikori, y publicado por el Journal of Global History en marzo del 2007. El artículo de 24

páginas, publicado en inglés, cuenta con el respaldo del London School of Economics and

Political Science, quien publica el texto.

Con respecto al autor, Joseph Inikori es un profesor titular en la Universidad de Rochester

en el departamento de historia y miembro del consejo editorial del Journal of Global History.

Nacido el 21 de Agosto de 1941 en Nigeria, ha sido caracterizado por una larga trayectoria

académica, siendo profesor de pregrado y maestría desde la obtención de su doctorado en historia

en la Universidad de Ibadan en acuerdo con la London School of Economics en 1973. En cuanto

a su trabajo investigativo, este ha sido ampliamente influenciado por la evolución del orden

económico mundial dado a partir del siglo XVI, destacándose dentro de dicha área su estudio en

materia del impacto de los esclavos en la economía a partir del periodo enunciado. Se presentan

además, como área de estudio, el análisis de la evolución de las estructuras políticas, sociales y

económicas en las subregiones, dando a su análisis un enfoque de economía internacional.

Dentro de sus obras destacadas se encuentran: Africans and the Industrial Revolution in England

(2002), The Chaining of a Continent: Export Demand for Captives and the History of Africa

South of the Sahara, 1450-1870 (1992), The Atlantic Slave Trade: Effects on Economies,
Societies, and Peoples in Africa, the Americas and Europe, edited with Stanley L. Engerman

(1992), “The Slave Trade and the Atlantic Economies, 1451-1870," in The African Slave Trade

from the fifteenth to the nineteenth century (1979), entre otras.

En Africa and the globalization process: western Africa, 1450-1850 el autor pretende

establecer que “forced labour of Africans employed in plantation production of commodities for

Atlantic commerce between the mid-seventeenth and mid-nineteenth was central to the

development of the Atlantic economy” (Inikori, 2007, pg. 24-25). De este modo, se establece

como Inikori tuvo como objetivo establecer cuál fue el impacto de África en el proceso de

desarrollo de la economía en la cuenca del Atlántico dado entre el siglo XVII y el siglo XIX

previo a la globalización. Así, se establece como pregunta eje del escrito ¿cuál fue la contribución

a largo plazo de África al proceso de la globalización? Para responder dicha pregunta, el autor

plantea, en un primer momento, establece la definición de la globalización como un proceso

histórico. Seguido, hace una descripción de la evolución del comercio integrado de bienes en la

cuenca del Atlántico, destacando el papel de América en dicha evolución. Luego, con base en el

sustento teórico de las secciones anteriores, establece la contribución de África al proceso de

globalización en el largo plazo, siendo esta, a grosso modo, el aporte de mano de obra a América,

mencionando de igual forma los costos para África de dicha contribución. Finalmente elabora las

conclusiones.

Así pues, con el propósito de defender la tesis, el autor estipula inicialmente que el aporte

de esclavos por parte de África contribuyó en gran medida al desarrollo de la economía del

Atlántico al fomentar el paso de la producción para neta subsistencia, a la producción con fines

comerciales. Para describir dicha contribución, Inikori establece como problema existente previo

a la introducción de los esclavos africanos a América que:


“It was this general abundance of land that made it impossible to produce on a scale considerably

beyond the scope of family labour in the Americas at this time, because easy access to land meant

that few were willing to offer their labour for a wage without coercion” (Inikori, 2007, pg. 20).

Habría sido a partir de dicho predicamento, que se vería en la introducción de los esclavos

una oportunidad para el aumento en las tierras de cultivo, y en la extensión en la cual estas podían

ser cultivadas, ya que sería a través de una fuerza masiva de trabajo coaccionada que requería

mínimos costos de mantenimiento, que se habría aumentado la escala de producción de bienes de

consumo en América, aumentando de este modo las exportaciones americanas y por tanto

incentivando el comercio en la cuenca del Atlántico. Así, habría sido debido a los esclavos

africanos que se habría dado un aumento en la producción americana de bienes, que habría

devenido en un aumento en el comercio transatlántico.

En segundo lugar, el autor establecería como precisamente debido a la introducción de la

mano de obra africana en la producción en América ya mencionada, y a la subsecuente alza en

exportaciones de América principalmente a Europa, se daría un cambio en los patrones de

consumo de la población europea. Para explicar el punto anterior, cabe mencionar que, según el

autor, la introducción de esta nueva mano de obra relativamente barata habría devenido en la

disminución los precios en Europa de los bienes producidos en América, lo que habría generado

el aumento del consumo de productos americanos en Europa. “The prices of other American

plantation commodities […] introduced the middle classes and the poor to novel habits of

consumption and opened up vast new sources of demand in Europe” (Inikori, 2007, pg. 21). Lo

anterior habría tenido como efecto principal que, al darse un aumento en a demanda de productos

americanos en Europa, se diera de forma paralela un aumento en el comercio entre América y

Europa, desarrollándose por tanto el comercio en la cuenca del Atlántico.


Finalmente, el autor establece como, debido al auge del comercio de esclavos hacia

América, la economía del Atlántico se ve afectada frente a una disminución en el comercio de oro

desde África occidental. Con relación a lo anterior, el autor enfatiza en los costos para África de

la contribución de esclavos a América para el desarrollo del proceso de globalización, pues sería

a través de dicho aporte de esclavos que se desincentivaría la producción interna de África,

acrecentándose en dicha región una tendencia de producción de subsistencia y de atraso en

general con relación a los sistemas productivos. De este modo, el autor estipula que, si bien el

mayor afectado fue África occidental, la disminución en la capacidad productiva africana tuvo

efectos en el comercio en la cuenca del Atlántico en tanto “The transformation of the Gold Coast

into a major exporter of captives to the Americas retarded the developing inter-regional

specialization and the growing commercialization of agriculture” (Inikori, 2007, pg. 23). Así,

Inikori establece que, si bien de manera general la contribución de mano de obra a América en la

forma de esclavos fue determinante para el florecimiento del comercio en la cuenca del Atlántico,

el uso de esclavos tuvo de igual forma un impacto negativo en el proceso de desarrollo de la

economía del Atlántico, en tanto llevo a un atraso importante en África occidental,

imposibilitando el comercio con dicha región de más productos además de los esclavos.

A partir de dichos argumentos, y de la descripción de la globalización como un proceso

histórico, el autor establece a manera de conclusión que la labor de determinar la contribución a

largo plazo y las pérdidas de África en el proceso de la globalización es una cuestión difícil ante

la percepción de la globalización como un fenómeno reciente y no desde su visión como un

proceso histórico, en el que conexiones de comercio conllevan paulatinamente al desarrollo de

una economía integrada. Bajo dicha lógica, el autor concluye que el proceso que habría llevado a

la integración de la economía en el siglo XIX comienza en el siglo XVI en la economía del


Atlántico, siendo el mismo impulsado en gran medida por el comercio de esclavos africanos,

trayendo consigo tanto la mejora del comercio en el Atlántico, como el retraso de África con

respecto al mundo en materia de producción y comercio de bienes, desarrollándose finalmente la

cuenca del Atlántico como el núcleo de la economía moderna.

Frente a lo visto a lo largo del texto, surge como pregunta: ¿Puede decirse que el aumento

del comercio en la cuenca del Atlántico a partir del siglo XVI es una muestra de un proceso

histórico que llevaría a la globalización, o debe entenderse dicho fenómeno como el inicio de la

globalización per se?

Referencias y bibliografía

Joseph E. Inikori (2007). Africa and the globalization process: western Africa, 1450–

1850. Journal of Global History, 2, pp 63-86. DOI: 10.1017/S1740022807002045

Universidad de Rochester. (s.f). Faculty. Joseph Inikori. https://bit.ly/3mSbLZy

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