Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
¿Qué es oratoria?
¿Oratoria?
Demóstenes fue el orador que fue considerado el mejor dentro de este arte.
Cicerón fue quien la perfeccionó en la República Romana. Él escribió
varios discursos y tratados que han llegado a nosotros casi en su totalidad.
Tipos de oratoria
Sin embargo, como con todo lo que involucra a una audiencia, esta
definición puede variar agregando principios como la elocuencia, la
capacidad para lidiar con objeciones e, incluso, la interacción con los
espectadores.
Es un error pensar que todo esto lo puede lograr una persona únicamente
con una buena comunicación verbal.
Más que eso, es esencial tener como base un mensaje muy bien
estructurado para no dejar que la audiencia pierda su atención o capte
información que sea diferente de lo que se pretende.
Por todas sus características, no sorprende que en Occidente este arte tenga
su origen en la Grecia clásica: el primer manual que buscó guiar su uso
proviene de la región que hoy se conoce como Sicilia.
Incluso las personas que han pasado parte de sus vidas con temor a mostrar
proyectos o ideas en público tienen la posibilidad total de dominar esta
habilidad de comunicación. Para empezar, te explicaremos los obstáculos
que deben ser superados:
Nerviosismo
El miedo
Al menos eso es lo que nos dice nuestro subconsciente. Una buena manera
de superar esta timidez es profundizar el conocimiento del público.
Después de todo, sabemos que lo desconocido siempre da más miedo.
Es más difícil prepararse para un discurso de dos horas que uno de cinco
minutos. No necesariamente ya que, si se tiene todo el tiempo que hace
falta para pronunciar un discurso, eso significa que hay mucho margen
para transmitir el mensaje principal. Pero cuando se dispone de un tiempo
limitado para exponer una idea, entonces es importante hacerlo de
manera efectiva.
Una técnica simple, como establecer contacto visual, puede ser necesaria
para provocar la conexión, la empatía y el engagement de la audiencia.
(Nivel de compromiso de un servicio o marca)
A esa pausa para pensar que está acompañada por un «éééééé» o el espacio
entre una oración y otra que está lleno con un ¿»ok»?
Para concluir
1) Practica
3) Conoce a tu público
¿Quiénes son? ¿Qué van a buscar? ¿Qué esperan de ti? ¿Qué puedes
ofrecerles? Pensar un discurso no alcanza, hay que pensarlo de acuerdo a
un determinado público, al que previamente se necesita imaginar.
5) Imagina
Por lo general, las personas pueden prestar atención a una charla durante
aproximadamente 20 minutos. Ese es el tiempo ideal, en el que deberías
poder decir todo lo que necesites. Si tienes que superarlo, pero tu discurso
es fluido el exceso de tiempo no marcará la diferencia, pero si te extiendes
y solo aburres a tus oyentes las cosas no saldrán del todo bien.
¿Qué es un orador?
Si bien el orador puede tener otros objetivos (por ejemplo, contar una
historia), siempre quiere provocar algún tipo de efecto en su
audiencia (convencerlos de su postura, motivarlos, informar un
descubrimiento, alertarlos, plantear un problema, interesarlos en una
historia, etc.).
Presencia
Un buen orador debe moverse para mostrar entusiasmo y trasmitirlo a su
audiencia.
Su presencia no debe ser estática sino que debe moverse para dirigirse a
distintos sectores del público y para mostrar su entusiasmo y transmitirlo a
la audiencia.
Preparación
Credibilidad
Dicción
Las palabras deben ser pronunciadas de forma correcta pero también clara,
con una modulación distintiva de cada consonante y vocal.
Vocabulario
Si es necesario utilizar una palabra específica debe explicarse antes su
significado.
Ritmo
Argumentación
El
buen orador debe mostrarse convencido y firme en su posición.
Gestualidad
La gestualidad tanto del rostro como del cuerpo debe ser utilizada para
enfatizar los mensajes verbales, para favorecer la empatía del público o
para mantener el dinamismo de la exposición.
En
ocasiones es necesario utilizar la segunda persona del singular.
Más que miedo, podíamos llamarlo ansiedad escénica. Ante una situación
de este tipo, se genera una descarga de adrenalina (también llamada
epinefrina), un neurotransmisor que hace que el sistema nervioso se active
y se produzcan los siguientes síntomas a nivel fisiológico:
Sudoración
Escalofríos
Malestar estomacal.
Sequedad en la boca
Tierra, trágame
A nivel cognitivo hay una confusión mental que altera la percepción, una
vocecita interna que vive los peores escenarios posibles, proyectando el
fracaso o reviviendo escenas incómodas del pasado. La auto exigencia o el
miedo al ridículo se pueden apoderar de nuestros pensamientos y nublar
nuestro cerebro hasta llegar al bloqueo mental y llegar a los temidos
“quedarse en blanco”.
¿Qué es un discurso?
Preciso. Debe exponer un tema y sus argumentos de manera que pueda ser
comprendido por la audiencia.
Según la estructura:
Según el área:
Ejemplos de discursos
Discurso político:
“(…) Por eso tenemos que empezar por reconocer que, por más leyes que
existan sobre el papel, por más declaraciones maravillosas que figuren en
las constituciones, por más bellas palabras que se hayan pronunciado en las
últimas décadas en las cumbres internacionales o en los pasillos de
Naciones Unidas, las viejas estructuras de poder y privilegio, de injusticia y
explotación nunca desaparecieron del todo”.
Barack Obama
Discurso religioso:
Discurso empresarial:
Discurso académico:
¿Qué es la retórica?
Se trata de una disciplina que atraviesa numerosos campos del saber, entre
los que están la literatura, la política, el periodismo, la publicidad, la
educación, el derecho, etc.
Los elementos que la retórica estudia son en principio de tipo verbal, o sea,
pertenecientes al lenguaje, pero no únicamente hablado: la expresión
escrita e incluso el uso conjunto de imágenes y texto bien puede resultar de
su interés, especialmente en las formas contemporáneas de elaboración de
discursos.
Los inicios de esta disciplina datan de la antigüedad grecorromana. En la
Antigua Grecia era ampliamente estudiada, y comprendida como la
capacidad de persuadir a los demás mediante palabras habladas.
Figuras retóricas
También conocidas como figuras literarias, las figuras retóricas son giros o
recursos estilísticos, es decir, mecanismos del lenguaje que sirven para
ilustrar, embellecer o enriquecer estilísticamente el discurso.
Preguntas retóricas
Por su parte, las preguntas retóricas o erotemas son aquellas que no esperan
por una respuesta del interlocutor, sino que cumplen con una función
expresiva: dar énfasis a lo dicho, sugerir una afirmación o un estado
anímico determinado. En ese sentido, funciona como una figura retórica
también. Por ejemplo:
Conviene aclarar que todas las obras literarias están escritas con un
lenguaje fuera de lo ordinario o alejado de lo común, no sólo en verso sino
también en prosa. Pero aun así los usos de recursos literarios le imprimen
un sello único, singular, a la obra; algo que forma
parte del estilo de cada escritor.
También hay que decir que muchos de estos recursos literarios pueden
darse en la lengua común, como formas de juego, de énfasis o de potenciar
lo dicho, pero no es el usual de la utilización de la lengua hablada. Los
chistes, los relatos orales y varias formas de expresión semejante son
abundantes en giros ingeniosos del lenguaje.