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Acércate a ti mismo.

Intenta meditar

Haz lugar para que tu Alma se alinee con tu cuero y mente. Mantente

en el presente y atento a las señales pues tendrás respuestas

en lo sutil y luego traza tus metas y llévalas a cabo. Aprende a escucharte


Existen muchas técnicas terapéuticas que se pueden implementar en casa, para
mantener tu equilibrio emocional, el vaciado de alma es una de ellas. En Gestalt hay una técnica
conocida como la silla vacía; utilizada por Fritz Perls, en la que imaginas que se sienta frente a ti
alguna persona con la que tengas asuntos por resolver. La persona no está ahí, solo está la silla
vacía frente a ti.

En el sistema SETA, llamamos al alma de la persona con la cual requerimos resolver


alguna situación pendiente; sin tomar en cuenta el tiempo y el espacio. La persona con la cual
se va a realizar la sanación puede estar viva o desencarnada. Y el terapeuta te puede guiar para
un proceso previo de centrado; en caso de hacerlo junto a él. Pero siempre se le sugiere al cliente
hacerlo a solas, pues debe vaciar el alma de todo aquello que ha ido guardado y al estar con otra
persona en algunas ocasiones se siente cohibido para expresar el verdadero sentimiento
guardado e ir diciendo lo que necesita liberar, para expresar las emociones y escucharse en voz
alta con todo lo que trae a cuestas por tanto tiempo.

Esta técnica se puede utilizar para un sin fin de situaciones, como, por ejemplo, hablar
con tu Alma, la cual la puedes sentir como un juez interior, hablar con tu parte que no se motiva,
hablar con la ansiedad, hablar con la enfermedad, hasta con una situación que causo
determinado proceso de frustración en un momento determinado.

Cuando hay procesos de sanación con los padres por las heridas de abandono; ya sea
por separación de los padres, o por no estar uno de los progenitores al momento de nacer; o
por muerte de uno de ellos. Maltrato o sentimientos de enojo que se guardan con alguna
persona. En fin, realmente la puedes usar para resolver cualquier situación que traigas en tu
interior y que requiera de entablar diálogo, desahogar y resolver.

Aclarando que no está relacionado con nada esotérico ni raro, es simplemente darle voz
a cuestiones en tu interior que necesitan ser liberadas y escuchadas.

¿Qué es el vaciado?

Consta de imaginar que frente a ti está una persona sabia, luminosa, que te puede
orientar en un momento difícil, que te escucha empáticamente y sin juicios, que tiene palabras
positivas para ti para poder tomar una decisión en determinado momento; así como poder
comunicarte con la parte mas elevada de tu SER y encontrar aquellos dones y cualidades que
sientes que en algún momento se bloquearon.

Colocas frente a ti a esta persona, que puede sentirse como si fuera tu guía, tu terapeuta,
tu esencia o inclusive tu maestro espiritual (dependiendo de tus creencias).

Para sacar los procesos de dolor y frustración con otro ser humano; solo tienes que pedir
hablar con su alma y automáticamente podrás imaginar que esa persona está frente a ti.
Mientras sea con la intención de liberarte a ti mismo y sentirte mejor… ¿por qué no probarlo?

Como experiencia personal, hemos resuelto muchos conflictos en situaciones pasadas a


lo largo de nuestra vida; y muchas veces hemos terminado llorando y sintiendo una liberación
que nos ha dejado más ligeras y con sentimientos de libertad.

Pasos o metodología:

1. Encuentra un momento en el que no tengas distracciones a tu alrededor o personas que


te puedan escuchar (podrías también hablar en voz baja en caso de que no puedas estar
solo) siéntate cómodamente en un espacio donde frente a ti tengas un espacio libre.
2. Toma 3 respiraciones suaves y profundas y luego cierra los ojos lentamente; en esa
calma pide hablar con el alma de (das el nombre completo de la persona con quien
quieres hacer el vaciado de alma). Sin abrir los ojos espera unos segundos y déjate fluir
por la energía que sientes.
3. Imagina que llega esa persona con la que requieres sanar y sin abrir los ojos conéctate
con tu corazón, con los latidos…. Respira y solo comienza a expresar todo lo que se ha
guardado sin transformar las palabras para que no hieran, o para que se escuchen
bonitas, recuerda que la finalidad del vaciado es sacar tal cual los sentimientos
represados.
4. Puedes tener a mano un paño envuelto en forma de tubo; el cual si requieres golpear lo
puedes hacer, y así dejar salir las rabias o emociones más fuertes. Puedes decir en este
momento todo lo que en determinado momento de la vida se cayó, sin importar que
sea padres, hermanos, pareja, hijos, amigos, jefes, etc. (al principio puedes sentir que te
cuesta trabajo, pero puedes intentarlo con las siguientes frases)

últimamente me siento…
algo que me anda inquietando es que…

me molesta que…

me gustaría sentirme mejor respecto a…

estoy necesitando ayuda con…

Déjate fluir y si vienen recuerdos específicos también puedes describirlos. Lo importante


es conectarte con la realidad interior que se ha guardado. Nos podemos dar cuenta que
hay muchas cosas guardadas que ni siquiera teníamos en cuenta que nos causan
sentimientos negativos.

5. Después de sentir que ya es suficiente por el momento; se le dice al alma gracias por
escucharme, te libero y me libero, te perdono y me perdono, te puedes ir en paz que yo
en paz me quedo.
6. Respiramos profundo y podemos abrir los ojos.
7. Puedes luego darte un baño, quemar un incienso, poner una música de tu preferencia;
o simplemente no hacer nada.
8. Este ejercicio se puede realizar las veces que sea necesario. En el caso de procesos
fuertes se sugiere hacerlo varias veces.
9. Agradecete a ti y a tu guía por la sesión

Es una técnica que ayuda a mejorar todo tipo de relación, y a tomar decisiones en
situaciones en determinados momentos de la vida. A cerrar ciclos que creíamos imposibles de
hacerlo.

Para los procesos de duelo nos da la oportunidad de decirle a la persona todo lo que no se
le dijo antes y despedirse. Además de muertes traumáticas o partidas inesperadas se le puede
hasta reclamar por qué se marchó; ya al vaciar el dolor hay fortaleza para aceptar el duelo y
vivirlo de manera diferente.

El objetivo de estas sesiones no es tal cual encontrar una solución o tal cual una respuesta,
sino principalmente… desahogarte, escucharte a ti mismo, soltar la tensión emocional y mental
que traes acumulada.

Con eso es suficiente para que te sientas mejor respecto al tema que te inquieta, no tienes
que seguir pensando sobre eso o seguir dándole vueltas. Si quieres hacerlo, entonces date un
tiempo para hacerlo, solo hay que permitirse liberar.
Es normal si después te sientes cansado o agotado mentalmente…

Estas sesiones pueden durar de 15 minutos a 30 minutos, máximo una hora, no te


recomiendo que las alargues.

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