en estado líquido tiene una apariencia similar. Cualquier líqui- externo.
es necesario que ese fragmento de la realidad sea
do transparente e incoloro sería, entonces, agua. También es
posible que otros alumnos usen el término .. agua·· como sinó-
nimo de .. líquido·· y que esto constituya una forma imprecisa de
utilizar un lenguaje todavía poco farhiliar para ellos. Para
otros, si se calentó parafina, no es posible obtener luego otra
cosa que parafina. Lo que habitualmente llamamos .. datos·· -a
to que muchas veces queremos dotar de objetividad- no son
los mismos para las distintas personas, aun cuando nos ubi-
quemos ante al mismo fenómeno. porque la observación no se
realiza exclusivamente con los sentidos. Como dijimos en el
capítulo anterior, no existen datos ··universales .. en un experi-
mento ya que un sujeto consigue apreciar, selectivamente.
algunos de estos potenciales datos, llamados ··observables".
En términos de José A. Castorina 11988]:
Conocer no es mirar, observar, leer el mundo experiencial-
mente y luego expresarlo en términos lingüísticos. [...] El
conocimiento es una acción desde el punto de vista psicológi-
co [...] que tiende a otorgar significación a lo que está fuera
del organismo. [...] Hay conocimiento en la medida en que el
sujeto procede a incorporar las situaciones del mundo exter-
,. no a la acción esquemática (a sus esquemas de conocimien-
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....1 to). En este sentido se habla de vínculos prácticos. de praxis .
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:::> de acción transformadora que atribuye significado a aquello
~ sobre lo que se actúa.
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zw Siguiendo a Castorina, una acción sobre un objeto es .. lo
ü dos a ese objeto.
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que se puede decir .. o ··to que se puede pensar" sobre el
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mismo. Agregamos que aquello sobre lo que se actúa. en
o cuyo caso el docente no se entera de la diversidad de ideas].
<( situación de clase, está mediado por el proyecto de enseñan-
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u za que tenga el docente.
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o Ahora bien, si para que se produzca conocimiento se
o va admitir que los alumnos realizarán interpretaciones dife-
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debe incorporar y significar las situaciones del mundo
advertido por el sujeto. Esto aporta elementos para pensar
la enseñanza. ya que la observación del mundo suele estar
tan poco problematizada que normalmente no nos llama ta
atención ni nos formulamos preguntas acerca de ello.
Dirigir la atención sobre la ocurrencia de un fenómeno,
transformarlo en objeto de interés, es una responsabilidad
de la enseñanza. Un hecho tan frecuente como la caída de
las hojas de algunos árboles en otoño puede pasar inad-
vertido. pero también puede convertirse en una situación
de enseñanza y de aprendizaje. ¿A qué se debe el cambio
en el color de las hojas de los árboles? Si se llama la aten-
ción sobre el fenómeno, el alumno podrá elaborar ciertas
hipótesis. Algunos vincularán esto con la acción del sol
. .
otros con un proceso de envejecimiento o muerte de cier-
tas partes del vegetal. otros dirán que no recibieron los
nutrientes necesarios. que están enfermas, que es por el
frío o el viento. entre muchas posibles ideas. Para los
alumnos. el objeto "hojas amarillas·· puede generar diver-
sos significados. En la situación de aprendizaje es posible
favorecer una movilización del estado de conocimiento del
alumno. Para ello el estudiante debería interactuar con
otros compañeros. observar con determinada intención el
fenómeno. recibir información del docente y leer textos. De Vl
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esta manera se abrirían oportunidades para generar una ü
actividad interna que propicie una reestructuración de los ü
esquemas de conocimiento y así otorgar nuevos significa- o
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Las propuestas de enseñanza tanto pueden obturar len
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como favorecer la aparición en clase de distintas posturas <(
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frente al estudio del mismo objeto. Desde nuestra perspecti- •Z
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