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DRA.

ANABELA GATANI
SEMIOLOGÍA
HISTORÍA CLINICA
UNIDAD 1

HISTORIA CLÍNICA

“La HC es un documento médico, científico, legal, económico y humano.”


En primer lugar, la HC es la narración ordenada y detallada de la anamnesis, examen
físico y de la elaboración intelectual del médico, así mismo, permiten emitir un
diagnóstico de salud o enfermedad

• Documento medico: refiere las características de la enfermedad


desde un punto de vista médico. Debe surgir, de su lectura, claridad
del razonamiento médico, con cierto orden y buena letra.

• Documento científico: la descripción de los hallazgos y de las


manifestaciones evolutivas debe servir para el mejor conocimiento
de la enfermedad. La patología medica surge de la síntesis de las
diferentes observaciones de una enfermedad.

• Documento legal: todos los datos pueden emplearse como


testimonios de la enfermedad y justificación de las medidas
diagnósticas y terapéuticas implementadas.

• Documento económico: el conjunto de las mediad tomadas tiene un


costo que deberá ser cancelado por la institución, la obra social o el
paciente.

• Documento humano: debe reflejar la relación establecida entre el


médico y el paciente con el objetivo fundamental de la curación o el
alivio de la enfermedad.
ESTRUCTURA
1. Anamnesis:
I. Datos personales.
II. Motivo de consulta o motivo de internación.
III. Enfermedad actual y sus antecedentes.
IV. Antecedentes personales
a. Fisiológicos
b. Patológicos
c. De medio
d. Hábitos
V. Antecedentes hereditarios y familiares.
2. Examen físico
3. Resumen semiológico
4. Consideraciones o impresiones diagnosticas
5. Evolución diaria
6. Epicrisis

ANAMNESIS: es el interrogatorio que el facultativo efectúa a su paciente y/o


<familiares o allegados, acerca de características de la enfermedad y de los
antecedentes. Se debe indicar si es directa (paciente), indirecta (familiar) o
mixta.
Es la parte más importante de la HC, ya que permite hacer el diagnostico en
más del 50%. Es conveniente que, si el paciente recuerda algo fuera de este
orden, se lo escuche con atención. Lo que se escriba en la HC debe tener una
finalidad: ser útil para la comprensión de la enfermedad. En la redacción, no
emplear el lenguaje del paciente, sino el del médico.
I. Datos personales: se colocan los datos que identifican al paciente,
como: nombre, edad, nacionalidad, ocupación, estado civil, domicilio.
II. Motivo de consulta o internación: es la portada médica en la cual se
deben consignar los síntomas o signos y su cronología. Se debe
reconocer el motivo por el paciente fue a la consulta.

1 DATOS PERSONALES

Bajo este acápite se colocan los datos que identifican al enfermo desde
un punto de vista civil, como: nombre, edad, estado civil, nacionalidad,
ocupación, domicilio y persona responsable, en caso necesario.
Nombres y apellidos: Etiquetan la historia clínica. Es útil añadir la
dirección y número de teléfono. Orientan sobre la nacionalidad y grupo
étnico.

Grupo étnico: Es conocida la incidencia racial de algunas enfermedades.


Según Cuatrefages: “Cada raza tiene sus características patológicas de la
misma manera que presenta sus peculiares rasgos físicos. Insistiremos
sobre el particular al ocuparnos en la exploración de los distintos
sistemas o aparatos.”

Edad: Anotaremos la real o cronológica y entre paréntesis, la aparente.


Cotejando ambas, nos daremos cuenta de si el sujeto lleva bien los años o
está envejecido. Existe una evidente relación cronológica entre la
mayoría de las enf3ermedades y los diferentes períodos de la vida, los
cuales, a su vez, imprimen a aquéllas un curso evolutivo distinto;
recuérdese, por ejemplo, el mejor pronóstico de las enfermedades,
exantemáticas, glomerulonefritis aguda, hepatitis vírica u neumonía y,
por otro lado, el curso acelerado de los procesos malignos y leucemia en
la infancia y adolescencia en relación con las edades adulta y senil.

Como regla general en la que caben muchas excepciones diremos que en


la infancia y adolescencia predomina las enfermedades agudas e
inflamatorias (exantemáticas, glomerulonefritis agudas, hepatitis vírica,
reumatismo poli articular aguda, parotiditis epidémica, tuberculosis
pulmonar serosas, etc.); en la adulta o viril, las metabólicas (diabetes,
litiasis renal o biliar, etc.) y profesionales y en la vejez y procesos
vasculares atróficos, y tumorales malignos.

Sexo: En la mayoría de los países, los hombres viven menos que las
mujeres. Como causa se citan la mayor incidencia de enfermedades y
taras hereditarias, forma de vida tensa, abuso de alcohol y tabaco, y
condiciones biológicas, si bien es cierto que las mujeres enferman con
más frecuencia también lo es que se recuperan con mayor rapidez. En el
varón, son frecuentes los procesos coronarios, respiratorios, gástricos, y
hepáticos crónicos. En las mujeres, privan los procesos biliares, bocio,
anemia hipocroma, poliartritis crónica primaria, distonía neurovegetativa
e hipertensión esencial. La frecuencia de litiasis urinaria es triple en el
varón en lo que concierne a la pielitis y pielonefritis, el predominio del
sexo varía según la edad; en la niñez existe igual proporción en ambos
sexos, desde los 15 a los 50 años existe un claro predominio del sexo
femenino (vida sexual activa), posteriormente a partir de los 50 años, la
preponderancia es masculina, la mayoría de las veces por problemas
prostáticos.
1.2 MOTIVO DE CONSULTA O INTERNACION

El motivo de consulta o internación es la caratula medica de la historia


clínica y debe tener como finalidad dar, pocas palabras, una orientación
hacia el aparato o sistema afectado y la evolutividad del padecimiento.

Para esta se deben consignar los síntomas o signos y su cronología.


Así, por ejemplo: “tos, fiebre y expectoración, de 3 días de evolución”,
indica un proceso de respiración agudo; o: “dolores y deformidad de las
articulaciones de la mano, de 3 años de evolución”, orienta hacia una
enfermedad articular crónica.

Es frecuente que en el motivo de ingreso se escriba: “enviado por el Dr.


NN para su diagnóstico y tratamiento”. De más está señalar que esta
frase carece de valor médico, dado que no se menciona el problema que
llevo al enfermo a consultar con un profesional.

En casos especiales, la internación tiene como finalidad la realización de


un procedimiento diagnostico (p. ej.… toma de biopsia, cateterismo, etc)
o terapéutico (p. ej.… plan de quimioterapia antineoplásica), y este
constituirá el motivo de internación.

Se debe tener en cuenta que los síntomas o signos que el paciente refiere
como queja principal no siempre coinciden con el motivo de internación,
que en última instancia implica una elaboración intelectual del médico
que integra lo relatado por el paciente, los hallazgos del examen físico y
los exámenes complementarios iniciales. Por ejemplo, a un paciente que
consulta solo por padecer anorexia y astenia se lo interna porque en el
examen físico se detecta una hepatomegalia con dureza pétrea, en otro
caso, ese mismo motivo de consulta inespecífico determina la internación
por el hallazgo de una cifra de urea de 250 mg/dl.

1.3 ENFERMEDAD ACTUAL Y SUS ANTECEDENTES

Así como en el motivo de consulta de internación se debe ser sucinto y


no aportar pormenores, en la enfermedad actual se recomienda la
redacción precisa y en orden cronológico de todo el padecimiento del
paciente, comenzando con las primeras manifestaciones de la
enfermedad.

Se toma nota de los datos en forma cronológica, dejando que el enfermo


exponga libremente, sin interrupciones, los acontecimientos tal cual los
ha vivido, luego se realiza un interrogatorio dirigido con el fin de ordenar
y completar la exposición.
En este capítulo no hay que limitar las referencias a los síntomas o signos,
sino que se debe describir todo lo vinculado con la enfermedad, como:
los médicos que atendieron al paciente, las medidas diagnosticas que se
instrumentaron, los tratamientos indicados y cumplidos, su resultado y
las modificaciones en la calidad de vida que provoco la enfermedad.

Las preguntas que habitualmente se formulan son:

• ¿Cuándo empezó a sentirse enfermo?


• ¿Cómo comenzó la enfermedad?
• ¿Con qué síntomas se presentó?
• ¿Cómo evolucionaron estos síntomas?
• ¿Es la primera vez que se presenta?
• ¿Tuvo algo parecido antes?
• ¿A qué atribuye su enfermedad?
• ¿Qué precedió al estado de enfermedad?
• ¿Realizo alguna consulta médica?
• ¿Qué exámenes complementarios se le efectuaron?
• ¿Qué diagnósticos se realizaron?
• ¿Qué tratamiento recibió?
• ¿Qué repercusión general ha provocado la enfermedad?

Es importante que se cuente con todos los documentos que testimonian


las medidas diagnósticas y terapéuticas implementadas con anterioridad
y no repetir innecesariamente procedimientos costosos o de escaso valor
para el diagnóstico.
En ocasiones, las instituciones que tratan a los enfermos no entregan a
éstos los protocolos de los exámenes realizados. En estos casos, es
conveniente ponerse en contacto con la institución con el objeto de
obtener copia de la documentación clínica del paciente.
Por otro lado, si el paciente tiene antecedentes personales claramente
relacionados con la enfermedad actual, estos deben consignarse al
comienzo de este apartado. Por ejemplo: “paciente con antecedentes de
hipertensión arterial, diabetes y dislipidemia que en el día de la fecha
presentó dolor retro esternal”.
1.4 ANTECEDENTES PERSONALES

a) Fisiológicos: se indagará sobre los aspectos relacionados con su


nacimiento (parto normal o patológico, peso al nacer), crecimiento y
maduración (tipo de lactancia, lenguaje, marcha y dentición).
En la mujer se consignará la edad de la menarca, el ritmo menstrual, la
fecha de la última menstruación, el comienzo de las relaciones sexuales,
los embarazos, partos y lactancias.

b) Patológicos: Se debe tener presente, cuando se investiga estos


antecedentes, que el hombre tiende a olvidar los hechos desagradables de
su pasado, de ahí la frase: “todo tiempo pasado fue mejor”, en general,
porque no se recuerda lo malo. Las enfermedades forman parte de los
hechos negativos y hay una tendencia natural al no recordarlo. Esto
significa que la anamnesis debe ser cuidadosa y repetida. Para establecer
la posibilidad de enfermedades, conviene preguntar cuándo se ha
realizado consultas médicas, o bien si hubo alguna internación y la causa
que la motivo.
Para olvidar olvidos u omisiones es recomendable establecer un orden tal
como:
• Enfermedades de la infancia
• Enfermedades medicas
• Antecedentes alérgicos
• Antecedentes quirúrgicos y traumáticos

b.1 Enfermedades de la infancia


Son las más difíciles de recordar y puede ser muy útil la presencia de
algún familiar mayor del enfermo para obviar los olvidos. Son
interesantes por las secuelas posibles.
Así, el sarampión puede determinar la aparición de bronquiectasias; la
parotiditis, en su localización pancreática, diabetes insulinodependiente y
en su localización genital problemas de la fertilidad, la rubeola se debe
investiga en las mujeres ya que, si no fue padecida, es de buena práctica
la vacación, antes de la edad fértil, dado que esta enfermedad puede
producir malformaciones graves en el feto si se presenta durante el
embarazo.
En las personas jóvenes que han sido vacunadas contra la mayoría d las
enfermedades es lógico que estas no se hayan padecido. En estos casos,
se debe averiguar si de completaron todas las dosis necesarias para una
inmunidad sostenida.

b.2 Enfermedades médicas: A veces no resulta fácil recordarlas.


Conviene preguntar en primer lugar por las consultas médicas realizadas
a lo largo de la vida, cuáles fueron los diagnósticos efectuados y cuales las
medidas terapéuticas instituidas. Es útil para evitar omisiones, interrogar
sobre síntomas o diagnósticos correspondientes a los distintos aparatos o
sistemas. Ejemplo:
• Respiratorio: Tos, expectoración, hemoptisis, asma, neumonía,
pleuresía, bronquitis, tuberculosis.
• Cardiovascular: Hipertensión arterial, dolor precordial, infarto de
miocardio, las palpitaciones, disnea, edema, arritmias, soplos,
claudicación intermitente, enfermedad de chagas, fiebre
reumática.
• Gastrointestinales: Náuseas, vómitos, dolor epigástrico, diarrea,
constipación, anorexia, ictérica, cólico vesicular, enterorragia,
melena, úlcera gastroduodenal, hepatitis.
• Nefrourológico: Cólico renal, disuria, hematuria, dolor lumbar,
infección urinaria, enfermedades venéreas.
• Endocrino-metabólicas: Diabetes, obesidad, hiperuricemia, gota,
afecciones tiroideas, hormonoterapia, corticoterapia.
• Inmunohematológico: Anemia, problemas de la coagulación,
mononucleosis, sida.
• Nervioso: Cefalea, mareo, vértigo, convulsiones, alteraciones
motoras, depresión, meningitis.
• Ginecológicos: Alteraciones del ciclo, amenorrea, menopausia
(edad y síntomas), ginecorragia, partos, abortos, anticonceptivos.

b.3 Antecedentes alérgicas

El tema de las alergias es muy importante ya que puede tener graves


consecuencias para la persona. Entre los alergenos, que son las
sustancias ante las cuales se desencadenan las respuestas alérgicas, hay
varios que se deben investigar:

1. Medicamentos: alergia a penicilina o alguno de sus derivados, a


cefalosporinas, fenitoína, carbamazepina, medios de contraste
usados en radiología, etc. Algunas de las reacciones que se pueden
presentar son exantema cutáneo, edema, colapso circulatorio,
broncoobstrucción, espasmo laríngeo. Las personas con mucha
frecuencia dicen ser alérgicas a algún medicamento y en realidad
es otro efecto (p.ej.: una intolerancia digestiva). Ante la duda,
conviene no correr riesgos. Si se sabe que una persona es alérgica
a algún medicamento, se debe destacar (p.ej.: anotarlo con letras
grandes en la carátula de la carpeta).
2. Alimentos. Algunas personas presentan alergias a mariscos,
pescados, nueces, maní, huevo, leche, algunos condimentos y
aditivos.
3. Sustancias que están en el ambiente. Es el caso de pólenes, pastos,
ambientes húmedos cargados de antígenos de hongos, polvo de
ácaros, contaminación del aire con productos químicos, etc. Las
personas con rinitis alérgicas y asma tienden a reaccionar a estos
estímulos.
4. Sustancias que entran en contacto con la piel. Puede ser el caso de
detergentes, algunos jabones, productos químicos, metales, látex
y otros.
5. Picaduras de insectos: abejas, avispas, etc.

ALERGIA A LOS MEDICAMNETOS ALERGIA POR PICADURAS DE INSECTOS

b.4 Antecedentes quirúrgicos y traumáticos

En esta parte se deben precisar las enfermedades, operaciones y


traumatismos que el paciente ha tenido a lo largo de su vida. Por
supuesto, se precisarán aquellas patologías que sean más significativas.
Si en la anamnesis se mencionó alguna enfermedad de la cual el paciente
es portador, en esta sección se entregan los detalles. Por ejemplo, si se
mencionó que era diabético, en esta parte se precisa desde cuánto, cómo
ha evolucionado y con qué se trata.

Si el paciente ha recibido transfusión de sangre o sus derivados, se


menciona en esta sección.

C) ANTECEDENTES SOCIALES Y PERSONALES.

En esta sección se investigan aspectos personales del paciente que


permitan conocerlo mejor. La intención es evaluar y comprender cómo su
enfermedad lo afecta y qué ayuda podría llegar a necesitar en el plano
familiar, de su trabajo, de su previsión, de sus relaciones interpersonales.

Tal como ya se mencionó, alguna información que podría haber ido en la


primera parte de la Historia Clínica, o sea, en la Identificación del
Paciente, se podría traspasar a esta sección. Es el caso del estado civil o
las personas con las que vive. Del mismo modo se pueden incluir en esta
sección aspectos sobre su composición familiar, el tipo de casa que
habita, si dispone de agua potable, si hay animales domésticos; nivel de
educación que tiene, actividad que desarrolla, la previsión o seguro de
salud que dispone, etcétera.

Toda esta información servirá para conocer mejor al paciente como


persona, saber con qué recursos cuenta para enfrentar su enfermedad y
cuál es el grado de apoyo familiar, laboral, previsional y social del que
dispone.

También puede ser el lugar para mencionar aspectos específicos de sus


creencias, de su religiosidad, de los aspectos a los cuales no quisiera ser
sometido en su tratamiento.
Otros aspectos a investigar son antecedentes sobre la actividad sexual,
exposición a enfermedades infecciosas o profesionales y viajes
efectuados en los meses anteriores.

Antecedentes médicos familiares

d) Hábitos

Entre los hábitos que se investigan destacan:

1. El hábito de fumar (tabaquismo). Se debe precisar cuántos


cigarrillos fuma la persona cada día y cuántos años lleva fumando.
En el caso de haber dejado de fumar, se precisa la cantidad de años
que han pasado desde que lo dejó, y una estimación de cuánto
fumaba. Una forma de resumir esta información es usando el
concepto "paquetes-año". Por ejemplo, si una persona fumó 1
cajetilla al día durante 40 años, se dice que fumó 40 paquetes-año.
Como el daño por fumar se considera acumulativo, los 40
paquetes-año también pueden corresponder a fumar 2 cajetillas
durante 20 años, o múltiplos equivalentes.

2. La ingesta de bebidas alcohólicas. Una forma de evaluar este tipo


de ingesta es mediante una estimación de la cantidad de alcohol
ingerida. Se identifica el licor y las cantidades ingeridas. Ejemplo:
En números redondos, 340 mL de cerveza, 115 mL de vino y 43 mL
(una copa) de un licor de 40 grados, contienen aproximadamente
10 g de etanol. Un litro de vino contiene aproximadamente 80 g de
etanol. No son recomendables ingestas de más de 150 g diarios de
etanol en el hombre, por el riesgo de dañar el hígado.
También se debe precisar qué papel desempeña en la vida diaria
la ingesta de bebidas con alcohol y qué grado de control tiene la
persona sobre esta ingesta.

3. Tipo de alimentación. Este aspecto tiene especial importancia de


precisar en personas obesas, en quienes han bajado mucho de
peso, pacientes diabéticos, con dislipidemias, afecciones
coronarias, personas constipadas o que sufren diarreas frecuentes.
El énfasis se pondrá dependiendo de cada caso.

4. Uso de drogas no legales: consumo de marihuana, cocaína, etc

1.5 ANTECEDENTES FAMILIARES

En esta sección se precisan enfermedades que presenten o hayan


presentado familiares cercanos como los padres y hermanos, por la
posibilidad que algunas de ellas tengan transmisión por herencia. Es este
sentido es importante investigar la presencia de hipertensión, diabetes
mellitus, alteraciones de los lípidos, antecedentes de enfermedades
coronarias, cánceres de distinto tipo (p.ej.: de mama o colon),
enfermedades cerebrovasculares, alergias, asma, trastornos
psiquiátricos, enfermedades genéticas y otras (gota, hemofilia, etc.).

En algunos casos es conveniente dibujar un genograma en el que los


hombres se identifican con un cuadrado y las mujeres con un círculo y se
grafican dos o tres generaciones, identificando al paciente con una flecha
y con alguna otra marca las demás personas afectadas por la
enfermedad.

EXÁMEN FÍSICO: percepción y hallazgo de signos físicos. Esto se consigue


siguiendo un orden y un empleo adecuado de maniobras exploratorias
específicas.
1. Inspección: primero se mira,
2. Palpación: luego se toca,
3. Percusión: se golpea,
4. Auscultación: y se escucha.
El medico siempre debe estar situado a la derecha del paciente. El
examen se realiza de lo general a lo particular y con criterio
topográfico (cabeza, tórax, abdomen, extremidades) evaluando
todos los aparatos y sistemas.
Impresión general
➢ Nivel de conciencia: es lo primero que se observa cuando ingresa el
paciente. Va desde la vigilia hasta el coma.
➢ Orientación temporoespacial: ¿Qué día es hoy? ¿Dónde estamos?
¿Cuántos años tiene?
➢ Actitud y postura: actitud compuesta es cuando no se observan
anormalidades.
➢ Decúbito: importante señalar si el decúbito es obligado o preferencial.
➢ Habito constitucional: medio lineo (atlético), longilíneo (asténico), o
brevilineo (pícnico). Se debe tener en cuenta la estatura, longitud de las
extremidades, perímetro torácico y abdominal, la adiposidad y el
desarrollo muscular.
➢ Fascies: gestualidad, color y simetría del rostro. Fascies compuesta es
cuando no hay alteraciones.
➢ Estado de nutrición: cuidadosa anamnesis alimentaria, uso de
parámetros antropométricos.
➢ Estado de hidratación: se evalúa mediante la inspección y palpación. Por
ejemplo, signos de sobrehidratación (signo de Godet, edema,
quemosis), signos de deshidratación (legua y axilas secas, signo del
pliegue).
Sistema tegumentario:
• Inspección: cambios de color, tumoraciones, cicatrices, trofismo,
circulación venosa, varices, depósitos de pigmentos en la piel.
• Palpación: temperatura cutánea, piel seca y húmeda.
Faneras son todas las manifestaciones pilosas: cabellos craneanos,
pestañas, cejas, barba y bigote, vello axilar, pubiano, corporal, uñas.
Sistema celular subcutáneo:
• Palpación: edema en MMII (pacientes ambulatorios) y en región sacras
(enfermos en cama), característico de IC, IR y hepática. Nódulos, tofos
gotosos, lipomas, quistes sebáceos. Estudias las mamas, su trofismo y
nódulos.
Sistema linfático:
• Palpación: los grupos ganglionares más accesibles son los submaxilares,
los de la cadena carotidea en el cuello, los de la nuca, los
supraclaviculares, axilares, epitrocleares y los inguinales. La patología
puede ser tumoral o inflamatoria/infecciosa.
Sistema venoso superficial:
• Inspección: trayecto de las venas superficiales, especial atención a
varices, flebitis, trombosis.
Sistema osteoarticulomuscular
Huesos: forma y asimetrías (inspección), sensibilidad a la presión (palpación)
Articulaciones: movilidad activa y pasiva (inspección), dolor y deformidades
(palpación).
Músculos: movimientos activos y pasivos (inspección), tono, fuerza y trofismo.
Por ejemplo, hipotonía es característica de lesión de la neurona motora
inferior; atrofia, en los inmovilizados, ancianos. El tono esta aumentado en
lesiones de la primera neurona del sistema piramidal (espasticidad) y
extrapiramidal (rigidez).
Cabeza:
• Inspección: diámetros, pabellones auriculares, ojos, anexos, fosas
nasales, labios, cavidad bucal, grado de higiene y conservación de las
piezas dentarias, lengua, mucosa yugal, amígdalas y fauces.
Cuello:
• Inspección: simetría, presencia de edema, tumoraciones, latidos,
ingurgitación yugular, fistulas.
• Palpación: crepitaciones, adenopatías, bocio, latidos, frémitos, craqueo
laríngeo, movilidad cervical.
• Auscultación: soplos carotideos y sobre la glándula tiroides.
Tórax: se examinan los aparatos respiratorios y circulatorio.
• Inspección: aspectos constitucionales o malformaciones (tórax
piriforme, en carena, en tonel, etc.), asimetrías, color, cicatrices,
movimientos, latidos y tumoraciones.
Aparato respiratorio:
• Inspección:
Tipo respiratorio costoabdominal (masculino) y costal superior
(femenino).
Frecuencia respiratoria 12-24 resp x min.
Profundidad respiratoria superficial (hipopnea) o profunda (batipnea).
Ritmo respiratorio y signos de dificultad ventilatoria.
• Palpación: temperatura, nódulos, puntos dolorosos, expansión de
vértices y bases pulmonares, elasticidad del tórax y vibraciones vocales.
• Percusión: sonoridad, matidez o submatidez en las distintas regiones.
Excursión de las bases pulmonares y se percute la columna.
• Auscultación: ruidos respiratorios normales en las distintas regiones,
aparición de ruidos agregados, auscultación de la voz como
broncofonía, pectoriloquia áfona.
Aparato circulatorio:
• Inspección: latidos localizados y generalizados, choque de punta (5to
EIH).
• Palpación: maniobra de Dressler, frémitos o frotes.
• Percusión: carece de aplicación práctica.
• Auscultación: ruidos normales y patológicos, los silencios, soplos.
Abdomen: se investiga el aparato digestivo y el genitourinario.
• Inspección: forma, simetría, cicatrices, circulación colateral y latidos.
• Percusión: útil para el diagnóstico de la ascitis.
• Palpación: mano de escultor de Merlo, permite la percepción de la
temperatura y ayuda a disminuir el tono de la pared. Tono, tensión,
trofismo de los músculos, puntos dolorosos.
La palpación profunda permite examinar las vísceras huecas y órganos
sólidos.
• Auscultación: presencia o no de ruidos aéreos y soplos.
Aparato genital:
• Inspección: genitales externos.
• Palpación: testículos, epidídimo, próstata (tacto rectal), útero y anexos
(tacto vaginal).
Sistema nervioso:
• Inspección: funciones cerebrales superiores.
• Palpación: fuerza muscular y reflejos, marcha, sensibilidad superficial y
profunda, coordinación estática y dinámica.

RESUMEN SEMIOLÓGICO: constituido por los datos positivos de la anamnesis y del


examen físico. Tiene doble funcionalidad:
➢ Es una HC abreviada de fácil y rápida lectura.
➢ Sirve de base para las consideraciones diagnósticas.

CONSIDERACIONES DIAGNÓSTICAS: es la base para la toma de decisiones diagnósticas


y terapéuticas para optimizar las ecuaciones costo-beneficio y riesgo-beneficio.
Se fundamentan los síndromes que surgen de los signos y síntomas recogidos a través
de la anamnesis y del examen físico. Sobre la base de estos síndromes se hacen
diagnósticos diferenciales y presuntivos.

EVOLUCION DIARIA: evolución de la enfermedad hasta el alta médica o institucional.


Se deja consignado los estudios (resultados), informes, modificaciones, datos
mensurables, conclusiones.
EPICRISIS: es el momento intelectivo culminante de la HC y se confecciona en el
momento del alta, fallecimiento o derivación.
Se consignan los datos de relevancia médica, como ser los datos del paciente,
sus antecedentes patológicos relevantes y la signo sintomatología que motivo
su internación. Los diagnósticos diferenciales y los exámenes complementarios,
el tratamiento instituido, los resultados obtenidos, la evolución. Además, se
consigna el diagnóstico de alta, el pronóstico del paciente, la terapéutica
posalta y su seguimiento.

Conceptos a tener en cuenta

• Semiología: es la ciencia que estudia las propiedades generales de los sistemas


de signos, como base para la comprensión de toda la actividad humana.
• Semiología médica: rama de la medicina que estudia la identificación de las
diversas enfermedades, dividiéndose en dos ramas: semiotecnia (técnicas de la
búsqueda del signo) y clínica propedéutica (reúne e interpreta los signos y
síntomas para llegar a un diagnostico).
• Síntoma: manifestación subjetiva de enfermedad (es percibido por el paciente)
ej, dolor.
• Signo: manifestación objetiva de enfermedad, descubierta por el medico
mediante el examen físico, ej, fiebre.
• Síndrome: conjunto de signos y síntomas relacionados entre sí. Comparten
fisiopatología, pero obedecen a distintas etiologías.
• Enfermedad: conjunto de signos y síntomas que corresponden a una sola
causa.
• Patognómico: signo o síntoma característico de una enfermedad y que, por lo
tanto, basta por si solo para establecer el diagnóstico.

UNIDAD 2 INTRDUCCIÓN. CONCEPTOS


PRINCIPALES

La semiología: es la parte de la medicina que se ocupa del estudio y del arte de


explorar los síntomas y signos de las enfermedades y demás estados mórbidos, con
objeto de llegar a su más exacto y completo conocimiento, ya sea para sus fines
prácticos o especulativos.
Es, pues, la ciencia y el arte que nos lleva al conocimiento de "la enfermedad y del
enfermo", hecho previo e inexcusable a todo intento médico de cualquier orden que
éste sea.
DIVISIÓN
I. SEMIOTÉCNIA. Que se ocupa del estudio y de la enseñan de los diversos métodos,
procedimientos, recursos, técnicas y reglas que se deben poner en práctica para
buscar, poner de relieve reconocer los sintomas y signos necesarios al mejor y más
completo conocimiento de los estados patológicos y anormales.
II. SEMIOGRAFÍA
Tiene hoy un significado más amplio del que le asignaba la vieja sintomatología, pues
no sólo debe entenderse por tal la simple inscripción o gráfica que por métodos
adecuados se obtiene de ciertos síntomas y signos, sino también su 'descripción" y
"caracterización", única forma de llegar a darles una calificación' que les haga útiles
para el diagnóstico y el pronóstico.
IIISEMIOGÉNESIS: Dentro de la semiología, la Semiogénesis se encarga del estudio y
determinación del origen de los signos y síntomas del cuerpo humano del paciente

IV. PROPEDEUTICA CLÍNICA


Se ocupa de la enseñanza preparatoria necesaria para llegar a hacer "clínica", es decir,
llegar a conocer la enfermedad del enfermo y estar así en condiciones, previo cono
cimiento de nosología y de terapéutica, de establecer un diagnóstico, un pronóstico y
un tratamiento adecuados. que permita poder orientar adecuadamente el examen del
enfermo y la interpretación de los síntomas y signos que, con técnica, también
adecuada, se recojan en la exploración de sus órganos. De ambas cosas se ocupa la
propedéutica clínica apoyándose, especialmente, como veremos, en la patología
general y en la biotipología.
DIVISIÓN DE LA SEMIOLOGÍA

SINTOMAS Y SIGNOS
. SINTOMAS
DEFINICIÓN
Todo hecho o fenómeno que acontece juntamente con la enfermedad, que es quien lo
determina, y que, captado, subjetiva u objetivamente por el enfermo, y objetivado por
el médico, advierte a aquél de su estado de enfermedad y sirve, a éste, para reconocer
ese mismo estado de enfermedad.
Son, pues, los síntomas manifestaciones objetivas o subjetivas que acompañan a todo
estado mórbido, y por medio de los cuales el médico entra en conocimiento del
mismo. Síntomas son una cefalea una tos, una taquicardia, una hepatomegalia, una
oliguria, etc.,
CLASIFICACION
A. Según la manera de ponerse de relieve o de llegar a su conocimiento, los síntomas
pueden ser:
Subjetivos: Cuando es el auto-análisis y la introspección del enfermo el que los pone
de relieve, y llegan al conocimiento del médico porque aquél se los refiere o porque
éste le interroga ayudándole a recordarlos y describirlos. Tales son todos los que
corresponden a las alteraciones del sensorio. de la sensibilidad, del intelecto, de la
afectividad y de estados psíquicos diversos; ejemplo: un dolor, una sensación de
distención, una ceguera, un estado angustioso, una palpitación, una anestesia, etc.
. Objetivos: Cuando es el médico quien, mediante los métodos que le da la semiología,
los pone de manifiesto y los aprecia, pues se trata siempre de fenómenos objetivables,
es decir, que se reconocen por medio de los sentidos, ya directa o indirectamente.
Estos síntomas escapan, muchas veces, de la esfera, objetiva del enfermo, puesto que
no sólo son del dominio de los sentidos del que explora, sino también de su intelecto.
Los ve y los hace, puede Subjetivo-objetivos: Pueden denominarse así aquellos
síntomas que se evidencian objetiva y subjetivamente a la vez, como el vómito, las
palpitaciones, una disnea, etc.; y también aquellos que siendo "exclusivamente
subjetivos" el médico puede objetivar
con diversos procedimientos o maniobras, por ejemplo, una anestesia, un dolor, una
sordera, etc.
B.Según sea la manifestación que los determina, los síntomas pueden ser;
- 1) Anatómicos; Llamados también somáticos" o "físicos", cuando los síntomas se
refieren a alteraciones de tamaño, de forma, de relación o de estructura de órganos o
de tejidos, ejemplo: una hepatomegalia, una sinistrocardia, una atrofia muscular, etc.
Si las alteraciones anatómicas son de índole "microscópica", se habla de síntomas
"anatomo-patológicos"; por ejemplo: una hiperplasia, una degeneración tisular, etc.

2) Funcionales; A los que también se llama "fisiológicos", cuando traducen una


alteración funcional, por ejemplo: una arritmia cardíaca, una parálisis, una poliuria,
una polifagia, un vómito, etcétera. veces a nuestra comprobación por deficiencias o
insuficiencia de
los actuales métodos de examen del enfermo.

C. Según su valor diagnóstico se tienen:


1) Sintomas generales: Así denominados porque son comunes o genéricos a gran
cantidad de distintos estados mórbidos; tal ocurre con los síntomas prodrómicos de las
enfermedades infecciosas, pues todas ellas se inician con cefalea, decaimiento,
inapetencia, estado febril, etc., y también con una gran cantidad de síntomas
subjetivos, objetivos, anatómicos, funcionales, etc., como taquicardia, palidez, edema,
pérdida de peso, fatiga, etc.
2) Sintomas triviales: Son aquellos que tienen poca-significación clínica, ya sea porque
son frecuentes en pequeñas indisposiciones o trastornos mórbidos fugaces, o ya sea
porque no aportan elementos de juicio de importancia para el diagnóstico o
pronóstico.

SIGNO
CLASIFICACIÓN DE LOS SIGNOS
Signo guion, llamado también "esencial" -cardinal" o también "crucial" u "orientador";
es todo aquel, como lo indican sus diversas denominaciones, que, orienta y guía en el
camino a seguir para el conocimiento de la enfermedad; implica casi un diagnóstico,
por ejemplo: una hipertensión arterial, que orienta hacia las enfermedades
cardiovasculares que se acompañan de hipertensión. etc
Casi todos los síndromes y muchas enfermedades presentan un signo "cardinal" o
"guía", que es como el eje en alrededor del cual se agrupan y giran, los demás
sintomas y signos que constituyen la enfermedad
son comunes un sin número de procesos mórbidos, hecho éste que justifica su
denominación de "plurívocos" (recurrentes)
Signos patognomónicos, llamados también "unívocos" o "específicos; eran, según la
vieja sintomatología, todos aquellos síntomas que indicaban "inequívocamente la
enfermedad que aquejaba al enfermo"; así, el dolor en la fosa iliaca derecha, la
palidez, etcétera, indicaban respectivamente "apendicitis". "neumonía" y "anemia".
Nuestros actuales conocimientos no nos permiten aceptar la existencia de estos
sintomas patognomónicos.
pues ya hemos visto que por regla general un mismo síntoma es común a distintas
enfermedades, en razón de su mecanismo fisiopatogenético; tal como acontece con
los anteriores ejemplos a los cuales asignaba, equivocadamente, la vieja clínica, el
valor de "sig-
nos patognomónicos".
Signos etiológicos; son aquellos que expresan y se refieren a la causa misma de la
enfermedad y están constituidos, podría decirse, por aquélla, la cual, por
procedimientos semiológicos especiales, puede ponerse de manifiesto; por ejemplo: la
presencia de amebas en las heces fecales de un disentérico; la del bacilo de Koch en el
esputo de un pulmonar; en fin, los resultados positivos de las diversas sero-reacciones
específicas, biológicas, experimentales, etc., que certifican cada una de ellas, la
existencia del agente o "causa específica" productor de la enfermedad.
Signos positivos: Son aquellos que concurren en el cuadro mórbido o son propios o
frecuentes en el mismo; por ejemplo: la taquicardia en la enfermedad de Basedow; la
coluria en una ictericia; el dolor en una artritis, etc.
Signos negativos; son los que, por no encontrarse en el conjunto sintomático que se
estudia, excluyen un diagnóstico pesan para dudar del mismo; ejemplo: la falta; la falta
de "megaloblastos”, en un síndrome anémico, ETC
ENFERMEDAD
DEFINICION Y CONCEPTO
"el conjunto de alteraciones estructurales y funcionales que se producen en nuestro
organismo al reaccionar contra estímulos nocivos". Y debe conocerla porque éste es el
trámite previo para poder combatirla en sus distintas manifestaciones "afectivas",
"intelectuales" y "orgánicas".
clasificación
A) Según a duración y marcha las enfermedades
des se dividen en:
1) Agudas: las caracterizadas por la rapidez de su curso, la intensidad de sus sintomas y
por la precocidad de su éxito, que se presenta, por lo general, dentro de los quince
días de su iniciación.; por ejemplo: la neumonía, la gripe, la amigdalitis aguda, la
septicemia pestosa, la meningitis aguda, etc.
2) Subagudas: Que son aquellas cuya duración es mayor que las anteriores, por lo
general de uno a dos meses, y cuyos sintomas van ganando intensidad con el pasar de
los días, y que cuando curan regresan lentamente; por ejemplo: la fiebre tifoidea, la
tuberculosis en alguna de sus formas, la brucelosis, la bronconeumonía, etc.
3) Crónicas: Las que se inician insidiosamente, cuya marcha tiene alternativas muy
variables y cuya duración es siempre muy larga, a veces, indefinida; que rara vez curan
de una forma total
y que cuando lo hacen, no muy frecuentemente, dejan secuelas, por ejemplo: el
cáncer, la úlcera gastro-duodenal, la tuberculosis, la sífilis, las enfermedades
metabólicas, etc.
B) En su etiología: Cuando se tiene en cuenta para su clasificación la causa de mayor
importancia, o la causa específica, se las divide en:
1) Hereditarias, las que se deben a la herencia directa o indirecta, en general, las
llamadas "genopatías".
2) Congénitas, las que se presentan en el momento del nacimiento
3) Familiares, las que atacan a varios miembros de una misma
familia y tienen un origen hereditario.
4) Constitucionales, las que se deben a trastornos de la constitución individual,
diátesis, anomalías constitucionales, malformaciones, etc.
5) Infecciosas y parasitarias, las que tienen por agente especifico "gérmenes", "virus",
"protozoarios", etc.
6) Tóxicas y químicas, las que se deben a venenos o tóxicos de origen animal o
químico.
7) Traumáticas y físicas, las que se deben a causas físicas de cualquier orden,
contusiones, influencias climáticas, gases, acciones eléctricas, etc.
8) Psíquicas y mentales, las que están representadas por neurosis, demencias,
psicosis, etc.
.
C) Según la evolución y éxito:
1) Curables: Las que, por tener tratamiento de reconocida eficacia, específico o no,
evolucionan, salvo complicaciones, hacia la salud, y, también, las enfermedades
triviales y trastornos pasajeros que por sí mismos nunca ponen en peligro la vida y
curan; por ejemplo: indigestiones, gripe, sarampión, difteria, neumonitis, etc.
2) Incurables: Las que no tienen un tratamiento que asegure su curación y que
evolucionan hacia la cronicidad o la muerte; ejemplo: las neoplasias malignas
avanzadas, las leucemias, las esclerosis renales, las miocarditis crónicas, etc.
3) Recidivantes: Las que vuelven a presentarse después de un período de completa
salud; ejemplo: erisipela, neumonía
4) Secuelizantes: Las que dejan, después de curar total o aparentemente, afecciones
en algún órgano o tejido; ejemplo: las amigdalitis, que dejan afecciones renales; el
reumatismo poli articular agudo, que deja lesiones cardíacas; la poliomielitis anterior
aguda. que deja parálisis, etc.
5) Latentes: Las que no dan síntomas subjetivos u objetivos manifiestos, por lo menos
para el enfermo, y aparentan eclosionar en ocasión de algún factor intercurrente;
ejemplo: algunas neoplasias, las insuficiencias de algunos órganos, etc.
6) Inmunizantes: Las que después de curar dejan al organismo en condiciones de no
contraer más esa misma enfermedad; ejemplo: sarampión, tifoidea (que da
inmunidad relativa), etc.
7) Sensibilizantes o alergizantes: Aquellas que dejan como secuela estados de
hipersensibilidad específica o no, que se evidencian con manifestaciones anafilácticas
o alérgicas; ejemplo: intoxicaciones alimenticias o químicas, tuberculosis, sífilis,
lesiones hepáticas, parasitosis. etc.
8) Letales: Aquellas que llevan fatalmente a la muerte; ejemplo: las graves infecciones,
los graves envenenamientos, las graves insuficiencias orgánicas, el cáncer intratable.
etc
Estadios
Incubación: Que comprende desde el momento del contagio hasta la aparición de los
primeros síntomas; su duración es variable según sea la enfermedad; así, en la
escarlatina es de cuatro a siete días, en la gripe de horas, en el tétanos, de doce días a
un mes, en la sífilis de quince a treinta días, etc.
Pródromo: Que se caracteriza por los primeros síntomas subjetivos que anuncian el
estado de enfermedad; síntomas que son los mismos para casi todas las
enfermedades, por lo que se los ha llamado generales"; tales son la sensación de
malestar, el decaimiento, la cefalea,
Invasión: Así llamada porque los clásicos creían que el síntoma que la caracterizaba
indicaba la irrupción de la enfermedad en el organismo; por ejemplo: el "escalofrió" en
las enfermedades
infecciosas, anunciaba la invasión de los gérmenes patógenos. Hoy se sabe que este
síntoma está íntimamente ligado a la reacción febril y no a la invasión de los gérmenes,
pues, las bacteriemias han sido comprobadas mucho antes de toda reacción y
discurren, a veces, sin dar tal manifestación.
Incremento: Es el periodo en el cual se intensifican los síntomas y el síndrome se halla
ya completo.
Acmé llamado así para expresar que es el momento en que aparecen los "exantemas"
en las enfermedades eruptivas; también se lo llama "fastigum" porque es el momento
en que los sintomas de la enfermedad adquieren mayor intensidad; este período
marca el comienzo del siguiente.
Estado: Periodo caracterizado porque el cuadro morboso se mantiene estacionario en
su más acabada expresión.
Declinación: O periodo "terminal", que puede acontecer bruscamente por "crisis", o
lentamente por "lisis".

fuera de un cierto número de enfermedades agudas y subagudas en las que es posible


reconocer estos "estadios", en las demás
la evolución es "irregular" y en su curso evolutivo pueden encontrarse:
"exacerbaciones"", "remisiones", "paroxismos”, “ataques", etcétera.

UNIDAD 3 EXAMEN DE ENFERMO

SUS TRES ETAPAS


A la anamnesis sigue la exploración o examen objetivo del enfermo por medio de las
diversas técnicas y métodos semiológicos en uso: clásicos y modernos, directos e
indirectos, físicos y funcionales, instrumentales o no. Pues, tiene por objeto revelar e
interpretar los síntomas y reconocer los signos, acto previo a todo juicio diagnóstico.
El examen del enfermo tiene que ser lo más completo posible nada debe pasarse por
alto ni descuidarse; a veces, cuestiones de detalles implican groseros errores. Para
evitar esto es menester proceder con método y orden, de acuerdo a un plan dado o
que va surgiendo del examen mismo del enfermo. Así no se cometerán olvidos y el
estudio semiológico será un todo orgánico.
Tres etapas sucesivas y obligadas deben cumplirse en la exploración de todo enfermo
para que no se olvide nada y el examen médico sea completo:
I.La exploración externa o inspección general.
II. La exploración somatoscópica y exámenes complementarios necesarios para
establecer la constitución individual del enfermo.
III La exploración especial o particular, física y funcional, de los diversos aparatos,
órganos y tejidos, y también, a veces. De determinada región, deteniéndose, agotando
y profundizando el examen en aquel sector que por el anterior examen o por la
anamnesis haya resultado el eje del proceso mórbido
SEMIOTECNIA.
La técnica de este método no puede ser más simple. Se puede decir que empieza al
primer contacto con el enfermo; desde ese preciso momento el clínico ya practica la
inspección general y caen dentro de su análisis ocular y juicio clínico la actitud, los
movimientos, los gestos, la expresión, etc., del paciente, para continuar en curso de la
anamnesis en la que se traduce,con nitidez, el estado psico-intelectual del enfermo, y
termina con la ectoscopía -propiamente dicha con la que se descubrirán las
alteraciones físicas de forma, volumen, color, relaciones, etc., y funcionales de
movimientos, expresión, colorido, etc., que presenta el exterior corporal del paciente.
Para la ectoscopía o examen ocular de la superficie corporal, el enfermo debe de estar
acostado con el cuerpo descubierto (totalmente o en parte), respetando en todo
momento las reservas que imponen las buenas maneras y el pudor, en un ambiente de
temperatura agradable
El médico se colocará a la derecha del enfermo y analizará ocularmente,
a veces ayudando con una palpación ligera, toda la superficie corporal del enfermo y a
éste mismo, en su estática y en su dinámica, para lo cual lo hará adoptar distintas
posiciones: de pie, sentado, en decúbito lateral y ventral (siempre que el estado del
enfermo lo permita), de suerte que pueda observarlo en todas esas normas estáticas.
Le examinará también haciéndole ejecutar algunos movimientos activos o pasivos, de
modo que también la inspección dinámica sea completa. Tanto la inspección estática
como la dinámica poseen su técnica particular para cada uno de los
múltiples fenómenos y parte del exterior orgánico que se estudie

La inspección general comprende y estudia lo siguiente:


1. Estado psico-intelectual;
2. decúbito;
3. marcha;
4. facies;
5. tegumentos y anexos;
6. tejido celular subcutáneo;
7. ganglios;
8. sistema muscular;
9. sistema osteoarticular;
10. estado de nutrición y
11. fiebre.
ESTADO PSICO-INTELECTUAL
IMPORTANCIA SEMIOLOGICA
La importancia semiológica de estas alteraciones radica en que,
siendo síntomas con posible valor de "signos orientadores" o de
"signos concurrentes", de posibles complicaciones en esfera piso-intelectual.

Estudia alteraciones de la conciencia, de la inteligencia, de la voluntad, del carácter, de


la memoria etc.).

ALTERACIONES DE LA CONCIENCIA
La conciencia es la facultad de percibir los estímulos internos y externos que nos
permite juzgar de la realidad de nuestra existencia, puede estar
comprometida y alterada en un sinnúmero de estados mórbidos, ya en el sentido de
una aminoración o "depresión", o en el de una exageración o "excitación".
La consciencia tiene dos elementos: el contenido y el nivel1 . El contenido es la suma
de todas las funciones mediadas a nivel cortical cerebral, incluyendo las cognitivas y las
emotivas.
A) Alteraciones por depresión:
Las principales son:
1) coma,
2) estupor,
3) sopor),
4) letargo,
5) lipotimia,
6) síncope
7) colapso y shock.

Coma
Es la pérdida más o menos total de la conciencia, de la sensibilidad y de la motilidad
voluntaria.
Si el enfermo no responde ni reacciona a ninguna clase de estímulos sensoriales o
sensitivos,
En el coma, el enfermo aparenta dormir: su facies es inexpresiva, ya vultuosa o lívida
(según sea la causa del coma); los párpados permanecen entornados y fláccidos; las
pupilas dilatadas o mióticas y no reaccionan o lo hacen muy perezosamente; su cuerpo
yace en resolución muscular completa; los miembros, cuando se los pretende levantar,
caen pesadamente; el pulso es amplio; la respiración ruidosa y con ritmo variable
(ritmo Cheyne-Stokes. o Kussmaul, etc.); los esfínteres incontinentes; y no hay
respuesta o es
muy leve, a los estímulos sensitivos y sensoriales
El coma puede instalarse bruscamente, constituyendo lo que se
denomina "ictus apopléctico" o apoplejía que se debe, por lo general, a lesiones
vasculares del cerebro; o bien puede instalarse lentamente, paso a paso, lo que suele
acontecer en los que obedecen a causas tóxicas o procesos corticales destructivos.
Los procesos mórbidos o causas que más frecuentemente dan
lugar al coma, son los siguientes:
a) Lesiones cerebrales: hemorragias, congestiones e isquemias
cerebrales, reblandecimiento, tumoraciones, meningitis, conmoción
traumática, etc. En estos casos se admite que la "lesión encefálica
en acción", pequeña o grande, sería el punto de partida de un
reflejo inhibitorio que, por las vías de asociación, determinaría un
apagamiento reflejo de las funciones cerebrales, o bien, que el
a la "isquemia cerebral”, aumento de la tensión intra-craneana"
b) Procesos endotóxicos: Uremia (coma urémico), acidosis diabética (coma diabético),
quemaduras graves, insuficiencia hepática (coma hepatógeno), etc. Estos estados de
intoxicación determinarían trastornos de irritación cerebral por isquemia o por
congestión o por edema de la masa encefálica debidos a la acción de los catabólicos
que en tales estados existen en circulación; o darían lugar a un verdadero
envenenamiento de las células nerviosas (lo más probable) y su consiguiente
alteración estructural y funcional, llegándose, en una o en otra forma, a la inhibición
cortical.
c) Causas exotóxicas: Opiáceos, barbitúricos, óxido de carbono, alcohol,
envenenamientos varios, etc. Aquí no cabe duda, dada la afinidad electiva de estos
tóxicos para con los elementos nerviosos del diencéfalo y de la corteza, que el coma se
debe a la impregnación de las frágiles neuronas con estos tóxicos, y a su consiguiente
parálisis o muerte.
d) Procesos infecciosos: En algunos cuadros infecciosos muy graves, como meningitis,
tifoidea, peste, neumonía, septicemia, etc.
En estos casos las toxinas microbianas, la hipertermia o las noxas
de la anormal desintegración metabólica que se produce en los tejidos de la
localización de la infección o en algunos órganos, como
el hígado y las glándulas endocrinas, por ejemplo, serían los causantes del coma por su
acción sobre las neuronas corticales.
e) Otras causas: Se mencionan, además: el "coma histérico", el "coma traumático", el
"coma reflejo", etc. imputables, como en los en casos anteriores, a inhibiciones reflejas
de origen neurógena o psicógeno.
El pronóstico del coma siempre es grave, su éxito letal es muy
frecuente; aunque no se puede decir que esté determinado por la
profundidad del coma, sino más bien por la causa o el proceso
mórbido que lo ha determinado.
Es, en todo caso, un "síntoma dominante" que exige un trata-
miento inmediato, y un "signo orientador" que nos lleva a considerar todas las
enfermedades (como las anteriormente enumeradas)
capaces de alterar el funcionalismo cortical: cuyas características"
y "circunstancias" se deberán establecer desde el primer momento.
interrogando a los allegados y con un examen somero del enfermo.
pues son éstas las que nos guiarán, con bastante precisión, a sos-
que lo produjo.
Entonces dividimos las causas en:
Enfermedades sin signos neurológicos de foco ni meningismo

• Metabólico: Acidosis metabólica: cetoacidosis diabética (cetonas,


hiperglucemia).
• Urémico (urea).
• Crisis addisonianos.
• Insuficiencia hepática.
• Hipoglucemia.
• Hipoxia
• . Toxico: Etanol. Barbitúricos. Opiáceos. etc.)
• Enfermedad generalizada: Ej. Sepsis. Colapso circulatorio o shock. Epilepsia.
• Encefalopatía hipertensiva.
• Hipertermia. Hipotermia. Contusión.
Enfermedad con irritación Meníngea (alteración del LCR):
• Hemorragia subaracnoidea.
• Meningitis Aguda.
• Encefalitis.
Enfermedad con signo de foco (SNC):

• Absceso cerebral.
• Tumor cerebral.
• Hematoma cerebral.
• Infarto cerebral.
• Hemorragia cerebral.

Los valores de los tres indicadores se suman y dan el resultado en la escala de


Glasgow. El nivel normal es 15 (4 + 5 + 6) que corresponde a un individuo sano. El valor
mínimo es 3 (1 + 1 + 1). La puntuación obtenida es empleada para determinar estado
clínico del paciente, pronóstico, indicaciones terapéuticas y realizar un seguimiento del
estado neurológico.
Cuando se emplea en un paciente con trauma craneoencefálico (TCE) se puede
clasificar como: • TCE Leve.... 13-15 puntos • TCE Moderado... 9-12 puntos •
TCE Severo.... 8 puntos o menos (Requiere intubación).
REPASAMOS
Estupor Es un estado que se caracteriza por una inconsciencia parcial con disminución
de la actividad de todas las facultades intelectuales.
El enfermo se presenta trascendiendo un aire de indiferencia o extrañeza que
le hace desentenderse del mundo circundante y
contestar a los requerimientos que se le dirigen en una forma in-
completa o incoherente: que sus movimientos sean lentos y su
sensibilidad esté como embotada. Se admite para el estupor la misma etio-
fisiopatogenia que para el coma. Puede presentarse en los mismos estados
mórbidos que éste; a veces, es una etapa previa del mismo.
El estupor se observa muy frecuentemente, por no decir siempre, en la tifoidea
(de aquí su nombre que significa "forma de
estupidez') y en todos los estados infecciosos prolongados o graves y con
temperatura elevada, como puede acontecer en las septicemias,
bronconeumonía, neumonía lobar, brucelosis, absceso del hígado,
etc.; y también en algunos estados Endo y exotóxicas, en especial,
la uremia y la acidosis diabética.
Sopor (de sopor= sueño profundo): Acompaña frecuente-
mente al estupor y suele también proceder al coma. Obedece por
consiguiente a las mismas causas y en su mecanismo hay que admitir, además
de la inhibición parcial del cerebro, una acción excitadora sobre la zona del
sueño de Von Ecónomo, situada en la región
posterior del tercer ventrículo.
El estado de sopor se caracteriza porque el enfermo está sumido
en un sueño profundo o en un estado de somnolencia del cual se le
saca con dificultad y en el que cae nuevamente en cuanto se le deja
quieto. Cuando se le interrumpe en su sueño, el enfermo tiene una
expresión de estupidez (estupor) más o menos intensa y en ningún
momento se consigue tenerlo en un despabilamiento completo.
Letargo
Es un estado de sueño permanente y más o menos profundo que se acompaña
de flaccidez muscular, disminución de la inteligencia y la hiperexcitabilidad
neuro-muscular.
Es un síntoma frecuente de la "encefalitis letárgica" y en algunas otras
encefalopatías, como polio encefalitis y tumores cerebrales. También se lo
observa, aunque más raramente, en algunas intoxicaciones y estados de
anoxemia,
Lipotimia Es la pérdida súbita, aunque pasajera, del conocimiento y de las fuerzas
acompañada de palidez de la facies y debilidad del pulso y de la respiración.
El enfermo en estado lipotímico acusa oscurecimiento de la
vista, obnubilación mental, ausencia de fuerza que le obligan a
recostarse, cierta ansiedad y temor de muerte; su facies se presenta
pálida y con sudor viscoso, su pulso ralo y pequeño, y la respiración superficial.
Este cuadro dura pocos minutos, rara vez puede
prolongarse. Se debe, siempre, a una isquemia cerebral determinada por la
disminución de la energía cardíaca o por espasmos de
sus vasos.
Se le observa en las convalecencias, en las enfermedades agotantes (neoplasias
malignas, tuberculosis, anemias, etc.), en las hemorragias, cardiopatías,
agotamientos físicos, neurosis, choques psíquicos, etc.
Síncope). Es la suspensión de la actividad cardíaca, con la consiguiente anemia
cerebral y sus consecuentes fenómenos de pérdida de la conciencia, de la
sensibilidad y de la motilidad; que no puede prolongarse sino por breves
instantes, so pena de entrañar la muerte. Se admite que un paro cardíaco de 4
a 8 segundos determina lo que se llama "un mareo", que uno de 8 a 12
segundos da lugar a
"un vahído" o desvanecimiento, y que uno de 15 o más segundos
(por lo común no más de noventa) implica un "síncope", cuya
duración no puede pasar nunca más allá de 3 a 5 minutos, sin que
produzca -como consecuencia de tan prolongada anemia cerebral-
procesos degenerativos irreversibles en las células nerviosas y, por
consiguiente, la muerte.
El síncope es común en las cardiopatías agudas y crónicas. miocarditis, y
cardioesclerosis; en el angor pectoris; en el
infarto cardíaco, en la enfermedad de Stokes-Adams; en las gran-
des hemorragias; en las anemias; en los choques psicógenos (grandes
impresiones o emociones en individuos ya predispuestos); en la
convalecencia, etc.
No es posible confundirlo con el coma, donde el pulso y la
respiración están presentes; más fácilmente puede serlo con la
lipotimia, con el colapso o con el shock a los que suele continuar y
poner término; pero en los cuales existe pulso, aunque filiforme y vestigios de
conciencia
Colapso y shock: Son términos que tienen un significado
clínico muy similar y que se emplean para designar estados, también,
muy semejantes; de aquí que se los use, a veces, sin distingo alguno.
Colapso (de collapsus caída) se reserva para denominar ciertos estados que
suelen presentarse en algunas enfermedades graves,
caracterizadas por una gran postración o adinamia extrema; pero
sin pérdida completa de la lucidez mental. Así se habla de colapso
periférico" para referirse a una grave depresión vaso-motora, con
caída de la presión venosa y arterial, pulso filiforme e irregular y
sensación de opresión y angustia. Por extensión suele hablarse de
"colapso cardíaco", de "colapso muscular", de "colapso nervio-
so", etc., para designar la preponderante decadencia de estos órganos o
sistemas. Se lo observa en las infecciones graves y en los
trastornos de consideración.

Shock (en inglés) o choque (en castellano) se usa para designar


los estados de depresión vital, con obnubilación mental, pulso fili-
forme, ansiedad, hipotermia, oliguria, etc., que siguen a los graves
traumatismos, a las intervenciones quirúrgicas, perforaciones abdominales,
graves hemorragias, ataques anafilácticos, partos distócicos, etc.
Estos estados, o mejor, verdaderos síndromes, se caracterizan por
poner en grave peligro la vida y porque, cuando no es posible combatir
eficientemente la causa o proceso mórbido que los ha determinado, implican la
muerte.

MUERTE CEREBRAL
B) Alteraciones por excitación: Las principales son las siguientes:
1) delirios,
2) alucinaciones,
3) ilusiones.
4) irritabilidad,
5) incoherencia.
Delirios (de delirium fuera de surco). Son estados de
perversión de la conciencia por desorden de las facultades mentales.
con o sin alteración de la moral y de la motilidad, que llevan a
la asociación de ideas incompatibles, o a actitudes y actos desordenados. nados
e incoherentes, sin advertir el error, y como si fuesen cosas normales y lógicas.
Según la forma de instalarse y la ruidosidad de sus manifestaciones, el delirio
puede ser agudo, como el alcohólico, el vesánico,
etc., o crónico, como el urémico, el cardíaco, el infeccioso, etc.
Según el tipo y forma de sus manifestaciones, puede ser: tranquilo, como el
que se manifiesta en la asociación de ideas y esfera de la conciencia, o furioso,
como el que se acompaña de gestos, actitudes o palabras violentas.
Si el delirio acompaña a los estados de alienación mental se le
llama vesánico; si se acompaña de sueño o semisueño se le dice
onírico; en fin, según la causa, se habla de delirio tóxico o infeccioso o
traumático, etc.
El enfermo en estado de delirio no se da cuenta, no tiene con-
ciencia de la sinrazón y desorden de sus actos, de sus palabras o de
su estado, y una vez pasado el delirio no recuerda nada de lo acontecido. Sólo
en ciertos delirios vesánicos el delirante cree estar
en su sano juicio y razón y llega a defender sus absurdos e in-
coherencias.
Las mismas causas y estados mórbidos que hemos señalado al
ocuparnos del coma y de los demás estados de depresión en general,
son capaces de producir estados de delirio; con la única diferencia
(en cuanto a su mecanismo) de que en lugar de provocar "inhibición cortical",
determinarían, en cambio, la "irritabilidad" y
"desequilibrio cortical". De suerte que lo dicho respecto a la fisio-
patogenia del coma y del estupor vale. "mutatis mutandis', para la
fisiopatogenia de los delirios.
Esta paradójica forma de actuar de una misma causa estaría
condicionada por la intensidad del agente causal" o por la "modalidad
reaccional" del sujeto que la padece; puesto que las mismas causas y procesos
morbosos, son capaces, como hemos dicho, de
producir indistintamente estados de depresión o de excitación de
la conciencia.
.
Alucinaciones). Son aquellos estados en los que el enfermo tiene la convicción intima
de percibir algo inexistente; es una verdadera percepción sin objeto o causa que la
determine; una "forma estrictamente sensorial de laconciencia", como dice W. James.
Las alucinaciones acompañan frecuentemente a los delirios y
son, por lo general, estados pasajeros o intermitentes. Los tóxicos
internos o externos (los neurotropos ya mencionados) son su causa
más frecuente; así, por ejemplo, se las encuentra en la uremia, en
la acidosis, en ciertas infecciones, en las intoxicaciones por el opio,
la belladona, haschich, etc.
Según la esfera de la conciencia en que caen, las alucinaciones
pueden ser internas o cenestésicas, cuando la sensación y percepción
se refieren a un órgano interno, por lo común a una víscera; psíquicos, cuando el
enfermo cree que los pensamientos y acciones le
son dictados por voces o personas inexistentes; sensoriales, cuando
se trata de sensaciones irreales, ya de orden auditivo, visual, etc.
Semiológicamente las alucinaciones constituyen un síntoma común que se encuentra
con frecuencia en los individuos de fondo neurótico, y su valor pronóstico es de menor
gravedad que el de
los delirios.
Ilusiones Se trata, en estos casos, de percepciones erróneas por acción de la
imaginación exaltada o por engaño de los sentidos.

Irritabilidad e incoherencia: Son alteraciones que se refieren más al "carácter" y al


"humor" que a la conciencia. No hay, puede decirse, estado mórbido que no incida, de
una u otra forma, sobre estas características de la afectividad de la conducta.
por un mismo estado mórbido, ya sea benigno o grave; y su modalidad depende, por
consiguiente, más que de nada, del temperamento psíquico del enfermo. Los
individuos "sintónicos" (Bleuler)

Insomnio, es la falta de sueño o, más comúnmente, dificultad para dormirse y dormir


poco (hipodipnia), se observa, particularmente, en los hiperexcitables afectos de
neurosis de angustia, anemia, hipertensión, estados subfebriles, procesos dolorosos
(neoplasias u otros), asma bronquial, etc.
Hipersomnia o hiperdipnia, sueño prolongado y deseo de dormir durante el día, se
observa en el hipo excitable, particular-
mente en: histeria, astenia, hipotiroidismo, dispepsia hipotónica,
estados febriles, tumores cerebrales, etc.
Paradipnia o sueño agitado con ensueños terroríficos, movimientos y hasta estados
sonámbulos. Es frecuente en los neuropáticos y en las enfermedades con irritabilidad
cerebral: meningitis, traumatismos craneanos, tumores y absceso del cerebro, parálisis
general, hipertemia, caquexia, etc.
Narcolepsia sueño irresistible y profundo que se presenta en forma paroxismal en
cualquier circunstancia. Se observa en los tumores cerebrales que interesan el tercer
ventrículo, encefalitis letárgica, uremia, psiconeurosis, síndromes diencefálicos,
poliglobulia con cianosis intensas de cualquier origen, etc

SÍNCOPE: perdida transitoria de la conciencia debida a isquemia cerebral difusa por


depresión circulatoria.

TIPOS DE SÍNCOPES
diversas situaciones estimulan el nervio vago,
Sentarse por mucho tiempo. Estrés.
Cualquier dolor.. Estimulaciones no
1) VASOVAGAL placenteras como: Donar sangre., exposición
prolongada al calor, emociones extremas,
hambre, ansiedad, conglomeración de
personas, etc

NEUROVEGETATIVO:

Se ponen mal en 2)-HIPOTENSIÓN • Ocasional en sujetos normales


marcha los ORTOTÁTICA • Medicamentos
mecanismos de • Disminución del volumen extravascular
vasoconstricción • Neuropatía periférica

• Miccional
3)-REFLEFJOS • Tusígeno
• Estado doloroso agudo
• Hipersensibilidad del seno carotideo

• Obstrucción del flujo de salida


• Hipertensión pulmonar
1)- MECÁNICOS • Cardiopatía congénita
• miocardiopatía

CARDIOGÉNICO

• Bradiarritmias
2)-ELÉCTRICOS • Taquiarritmia
• Disminución de la diástole
• Hipoxémico
• Anémico
CARDIOVASCULAR • Hiperventilación
Por alteración química • Hipoglucemia
• Vértigo
A nivel cerebral • Migraña
• Epilepsia

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