FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES, EDUCACIÓN COMERCIAL Y

DERECHO
CARRERA EN LINEA

SEGUNDO NIVEL
PARALELO C8 – GRUPO #8
ASIGNATURA:
Derechos Humanos
DOCENTE:
Marìa Mercedes Barreno Salinas
ESTUDIANTES:
Copara Herrera Marcos Fabricio
Lucas Ramírez Alberto Javier
Marcillo Peralta Narcisa De Jesús
Molina Muñoz Galo Gustavo
Nagua Sallo María Eugenia
Rodríguez Díaz Gabriela Alexandra
TEMA:
Identificar los antecedentes básicos en el reconocimiento e interpretación de los
Derechos Fundamentales.
FECHA DE ENTREGA
15 DE OCTUBRE DEL 2023
 ÍNDICE
RESUMEN………………………………………………………………………………………………………1

1. INTRODUCCIÓN........................................................................................................................................ 4
3. DESARROLLO............................................................................................................................................ 7

3.1. SISTEMA INQUISITIVO..............................................................................................................................7

3.1.1. Definición............................................................................................................................................7
3.1.2. Semejanzas.........................................................................................................................................7
3.1.3. Diferencias..........................................................................................................................................8
3.2. SISTEMA ACUSATORIO.............................................................................................................................9
3.2.1. Definición............................................................................................................................................9
3.2.2 Semejanzas………………………………………………………………………………………………………………………9
3.2.2. Diferencias…………………………………………………………………………………………………………………………...12
3.3. SISTEMAS MIXTOS................................................................................................................................ 13
3.3.1 DEFINICIÓN................................................................................................................................................14
3.3.2. Semejanzas.......................................................................................................................................14
3.3.3. Diferencias........................................................................................................................................15
4. RESULTADOS:.......................................................................................................................................... 17
5. CONCLUSIÓN:......................................................................................................................................... 19
6. RECOMENDACIÓN:.................................................................................................................................. 21
7. REFERENCIAS Y BIBLIOGRAFÍAS............................................................................................................... 23
Resumen

Los Derechos Fundamentales son prerrogativas inherentes a todos los seres humanos,
consagradas en instrumentos internacionales como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos (1966). Estos derechos, que incluyen la vida, la libertad, la igualdad y la no
discriminación, son esenciales para la creación de sociedades equitativas y justas.
Reconocidos como derechos inherentes a todos los seres humanos, se encuentran en constante
evolución y reinterpretación en el contexto jurídico actual (Declaración Universal de Derechos
Humanos, 1948). Estos derechos, que incluyen la vida, la libertad, la igualdad y la dignidad, son
fundamentales para el desarrollo de sociedades justas y equitativas.
La argumentación judicial es un proceso esencial en la interpretación y aplicación de los
Derechos Fundamentales. Según Alexy (2002), la argumentación judicial implica un análisis
lógico y razonado de los hechos y normas jurídicas aplicables a un caso concreto. Esta
argumentación debe ser coherente, consistente y justificada, teniendo en cuenta tanto los
principios jurídicos como los valores éticos y morales.

El debido proceso es un principio jurídico fundamental que garantiza la justicia y la equidad en

el procedimiento judicial. Este principio, consagrado en la mayoría de las constituciones
modernas, asegura que toda persona tiene derecho a un juicio justo y equitativo (U.S.
Constitution, Amendment V, 1791). El debido proceso incluye el derecho a ser oído, el derecho
a un juicio público y el derecho a un juicio por jurado, entre otros (Dubose, 2023).

La interpretación de estos derechos es un desafío constante para los operadores jurídicos. La

argumentación judicial, como sostiene Habermas (1996), es una herramienta crucial en este
proceso. Requiere un análisis riguroso y razonado de las normas y hechos aplicables, y debe ser
coherente y justificada, siempre con miras a la realización de los Derechos Fundamentales.

El principio del debido proceso es otro componente esencial en la protección de los derechos
fundamentales. Garantiza que todas las personas tengan derecho a un juicio justo y equitativo,
incluyendo el derecho a ser oído, el derecho a un juicio público y el derecho a la presunción de
inocencia (Constitución de los Estados Unidos, Enmienda V, 1791). Este principio también
implica el derecho a la asistencia letrada y el derecho a un recurso efectivo (Moro, 2021).

Introducción
Los Derechos Fundamentales, inherentes a todos los seres humanos, son esenciales para la
libertad, la justicia y la paz en el mundo. Se basan en el reconocimiento de la dignidad
intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana
(Asamblea General de las Naciones Unidas, 1948). Como Nelson Mandela, activista
sudafricano por los derechos civiles, expresó: "Privar a las personas de sus derechos humanos
es poner en tela de juicio su propia humanidad" (Amnesty International, n.d.).
El reconocimiento y la interpretación de estos derechos han evolucionado a lo largo del tiempo,
y han sido influenciados por diversos factores históricos, culturales y jurídicos. La Declaración
Universal de Derechos Humanos, por ejemplo, fue un hito en la historia de los derechos
humanos que estableció por primera vez los derechos humanos fundamentales que deben ser
protegidos (Amnesty International, n.d.).
En el contexto del sistema judicial, la interpretación de los Derechos Fundamentales es un
proceso complejo que requiere un equilibrio entre la letra de la ley y los principios
fundamentales de justicia y equidad. La Suprema Corte de Justicia de México ha sostenido que
la interpretación histórica es un método hermenéutico de carácter subsidiario, que se utiliza
cuando otros métodos interpretativos no proporcionan suficientes elementos para comprender el
alcance de alguna disposición constitucional.
En cuanto a la relación entre los Derechos Fundamentales y el debido proceso, es importante
destacar que el debido proceso es un principio fundamental que garantiza que todas las personas
tienen derecho a un juicio justo y a un trato justo por parte del sistema judicial. Este principio
está estrechamente relacionado con los Derechos Fundamentales y juega un papel crucial en su
protección y promoción. Como se establece en el Artículo 7, de la Declaración Universal de
Derechos Humanos: "Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual
protección de la ley" (Amnesty International, n.d.).
El objetivo de este estudio es profundizar en el reconocimiento e interpretación de los Derechos
Fundamentales, incluyendo su interrelación con la argumentación judicial y el debido proceso.
Se busca examinar la evolución histórica y cultural de estos derechos y cómo han influido en el
desarrollo jurídico y social contemporáneo. Esta investigación tiene como finalidad contribuir
al entendimiento y valoración de los Derechos Fundamentales como pilares de justicia y
equidad en nuestra sociedad.

Palabras clave:
Derechos Fundamentales, Reconocimiento, Interpretación, Argumentación Judicial, Debido
Proceso, Evolución, Influencias Históricas, Influencias Culturales, Influencias Jurídicas,
Justicia, Equidad.

Antecedentes

Los derechos fundamentales, la argumentación judicial y el debido proceso

son conceptos esenciales en la teoría y práctica del derecho y la justicia. Estos
conceptos han evolucionado a lo largo de la historia y han desempeñado un papel
crucial en la protección de los derechos individuales en las sociedades
democráticas.
Antecedentes de los Derechos Fundamentales:

Los derechos fundamentales tienen sus raíces en la antigüedad, en las

primeras civilizaciones y filosofías que reconocían la importancia de ciertos
derechos inherentes a la humanidad. Por ejemplo, en la antigua Grecia, filósofos
como Sócrates y Platón discutieron la noción de justicia y los derechos individuales
en sus escritos. Sin embargo, fue en la antigua Roma donde se desarrollaron
algunos de los primeros conceptos legales que influyeron en la concepción moderna
de los derechos fundamentales.

El concepto romano de "ius naturales" (derecho natural), sostenía que

existían derechos inherentes a todas las personas simplemente por su condición
humana. Esto sentó las bases para la idea de que algunos derechos trascienden las
leyes y gobiernos particulares y deben ser reconocidos y protegidos
independientemente de las circunstancias.

Durante la Edad Media, la Iglesia Católica desempeñó un papel importante en

la formulación de la teoría de los derechos naturales y en la defensa de los
derechos individuales. Pensadores como Santo Tomás de Aquino argumentaron que
ciertos derechos eran divinamente otorgados y no podían ser negados por las
autoridades terrenales.

La Revolución Inglesa del siglo XVII y la Revolución Estadounidense del siglo

XVIII, marcaron hitos significativos en la promoción de los derechos
fundamentales. La Carta Magna de 1215, en Inglaterra, estableció restricciones al
poder del monarca y sentó las bases para la idea de que incluso los gobernantes
estaban sujetos a la ley. La Declaración de Derechos de 1689 en Inglaterra y la
Declaración de Independencia de los Estados Unidos en 1776 enfatizaron la
importancia de ciertos derechos, como la libertad de expresión, religión y el derecho
a un juicio justo.

Evolución de los Derechos Fundamentales:

La Declaración de Independencia de los Estados Unidos, escrita

principalmente por Thomas Jefferson, fue un documento revolucionario que
proclamaba que "todos los hombres
son creados iguales" y tienen derechos inalienables, incluyendo "la vida, la libertad y
la búsqueda de la felicidad". Esta declaración influyó en la redacción de la
Constitución de los Estados Unidos y, posteriormente, en la Declaración Universal de
Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 1948.

La Declaración Universal de Derechos Humanos, en particular, estableció un

marco global para los derechos fundamentales que debe ser respetado por todos
los estados miembros de las Naciones Unidas. Estos derechos incluyen el derecho
a la vida, la libertad, la seguridad, la igualdad ante la ley, la no tortura, y la libertad,
de pensamiento, conciencia, religión y expresión, entre otros.

En Europa, la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano,

adoptada durante la Revolución Francesa en 1789, también fue un hito importante
en la promoción de los derechos individuales. Esta declaración influyó la redacción
de las constituciones europeas y la posterior adopción de la Convención Europea de
Derechos Humanos en 1950, que estableció la Corte Europea de Derechos
Humanos para supervisar la protección de los derechos fundamentales en Europa.

A medida que avanzaba el siglo XX, se produjeron avances significativos en

la protección de los derechos fundamentales. Después de la Segunda Guerra
Mundial y el horror del Holocausto, se crearon las Naciones Unidas y se adoptaron
numerosos tratados internacionales de derechos humanos para prevenir futuras
atrocidades. Además, la jurisprudencia de las cortes nacionales e internacionales,
como la Corte Suprema de los Estados Unidos y la Corte Europea de Derechos
Humanos, contribuyó a la interpretación y aplicación de los derechos fundamentales
en casos concretos.

Argumentación Judicial:

Es un componente esencial de la toma de decisiones en los sistemas legales.

A lo largo de la historia, los jueces han tenido que justificar sus decisiones y razonar
legalmente sus veredictos. La tradición de la argumentación judicial se encuentra en
las raíces de las primeras sociedades legales, incluyendo la antigua Roma y la
jurisprudencia de la Iglesia Católica.

Sin embargo, uno de los desarrollos más significativos en la argumentación

judicial, se produjo en la Inglaterra medieval, con la creación de los tribunales
comunes. Los jueces comenzaron a registrar sus decisiones y argumentos, lo que
sentó las bases para la
jurisprudencia como fuente de derecho. La common law inglesa, basada en
precedentes y en la interpretación de la ley por parte de los jueces, influyó en el
desarrollo del sistema legal en otros lugares, incluyendo los Estados Unidos.

En los Estados Unidos, el sistema de argumentación judicial se encuentra en

el corazón del sistema de common law. Los jueces en los tribunales federales y
estatales emiten opiniones escritas que explican sus razonamientos legales en
casos específicos. Estas opiniones se convierten en precedentes legales que deben
seguirse en casos similares en el futuro. Esto garantiza una cierta coherencia en la
aplicación de la ley y permite a las partes en litigio, entender la base de la decisión
judicial.

Evolución de la Argumentación Judicial:

A medida que las sociedades y los sistemas legales evolucionaron, la

argumentación judicial también evolucionó. Con el tiempo, los jueces se han
convertido en figuras altamente especializadas y se han desarrollado técnicas
formales de argumentación legal. Uno de los sistemas de argumentación judicial
más influyentes es el sistema de precedentes de la common law.
Este sistema, que se basa en la creación y seguimiento de precedentes
judiciales, ha sido adoptado por muchos países de tradición legal anglosajona. Los
jueces se basan en casos anteriores para tomar decisiones en casos actuales, lo
que brinda estabilidad y predictibilidad al sistema legal. En sistemas legales de
tradición civil, como el sistema continental europeo, la argumentación judicial tiende
a ser más codificada y se basa en la aplicación de la ley escrita. Sin embargo, la
argumentación sigue siendo un elemento esencial en la interpretación de las leyes y
en la adaptación de las normas a situaciones cambiantes.

Además de la argumentación basada en precedentes y en la ley, la

argumentación judicial también puede incluir consideraciones de equidad, justicia y
valores fundamentales. Los jueces a menudo deben equilibrar los intereses en
conflicto y tomar decisiones que reflejen los principios fundamentales de la sociedad
en la que operan.

El Debido Proceso:

El debido proceso es un concepto que se remonta a la antigua Roma y a la

noción de que todas las personas tienen derecho a un proceso legal justo y
equitativo antes de ser privadas
de sus derechos o propiedades. Durante siglos, esta idea ha sido fundamental en la
protección de los individuos contra el abuso de poder por parte de las autoridades
gubernamentales.

En Inglaterra, el concepto de debido proceso se desarrolló a lo largo de los siglos y

se plasmó en la Carta Magna de 1215. Este documento estableció restricciones al
poder del monarca y garantizó que los ciudadanos no fueran privados de sus
derechos o propiedades excepto mediante el "debido proceso legal".

En los Estados Unidos, el debido proceso está consagrado en la Quinta y

Decimocuarta Enmiendas de la Constitución. La Quinta Enmienda prohíbe la
privación de la vida, la libertad o la propiedad sin el debido proceso legal, mientras
que la Decimocuarta Enmienda establece el mismo principio a nivel estatal. Estas
enmiendas han sido fundamentales en la protección de los derechos civiles y civiles
de los ciudadanos estadounidenses.

Evolución del Debido Proceso:

El concepto de debido proceso ha evolucionado significativamente a lo largo del

tiempo para abordar cuestiones cambiantes y desafíos legales. En el siglo XX, la
jurisprudencia de la Corte Suprema de los Estados Unidos ha ampliado la aplicación
del debido proceso para incluir no solo procedimientos legales formales, sino
también derechos sustantivos y protección contra la arbitrariedad gubernamental.

Un hito importante en esta evolución fue el caso de "Procedimiento debido" de 1905,

donde la Corte Suprema reconoció que el debido proceso no se limita solo a
cuestiones de procedimiento, sino que también implica la protección de ciertos
derechos sustantivos. Este enfoque se ha desarrollado aún más en casos
posteriores, como "Roe v. Wade" (1973), que reconoció el derecho al aborto como
un aspecto del debido proceso, y "Obergefell v. Hodges" (2015), que estableció el
derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo como un derecho
fundamental.

Además, el debido proceso ha sido fundamental en la protección de las

libertades civiles durante tiempos de crisis, como la Primera y Segunda Guerra
Mundial y la lucha por los derechos civiles en la década de 1960. La Corte Suprema
ha desempeñado un papel clave en equilibrar la necesidad de seguridad nacional
con la preservación de los derechos individuales.
Interconexión de los Conceptos:
 Los derechos fundamentales, la argumentación judicial y el debido proceso
están intrínsecamente relacionados en la configuración de sistemas legales justos y
equitativos. Los derechos fundamentales proporcionan el contenido y la sustancia
de las decisiones judiciales, ya que establecen los estándares mínimos que deben
respetarse en cualquier proceso legal. La argumentación judicial es el proceso
mediante el cual los jueces justifican sus decisiones en función de la interpretación y
aplicación de los derechos fundamentales y otras leyes. El debido proceso garantiza
que este proceso de argumentación sea justo y equitativo, protegiendo los derechos
de las partes involucradas en el litigio.

Cuando una persona o entidad gubernamental es acusada de violar los

derechos fundamentales de otra, el debido proceso garantiza que el proceso legal
sea imparcial, transparente y justo. Los jueces, al aplicar la ley y tomar decisiones
judiciales, deben considerar los derechos fundamentales y seguir los procedimientos
establecidos para garantizar que se respeten estos derechos. La argumentación
judicial desempeña un papel crucial en la justificación de las decisiones judiciales y
en la protección de los derechos fundamentales, ya que los jueces deben explicar y
fundamentar sus decisiones en términos legales sólidos.

En resumen, los derechos fundamentales, la argumentación judicial y el

debido proceso tienen profundas raíces históricas y evolucionaron a lo largo del
tiempo para convertirse en los pilares fundamentales de sistemas legales
democráticos y justos. Estos conceptos están interconectados en la protección de
los derechos individuales y la garantía de que las decisiones judiciales sean
coherentes, basadas en la ley y respetuosas de los principios fundamentales de
justicia. A medida que las sociedades continúan desarrollándose y enfrentando
nuevos desafíos, estos conceptos seguirán siendo fundamentales para la
preservación de la justicia y los derechos humanos en todo el mundo.

Naturaleza

Los derechos fundamentales, la argumentación judicial y el debido proceso

son elementos fundamentales en la naturaleza del sistema legal y la administración
de justicia en las sociedades democráticas. Cada uno de estos conceptos
desempeña un papel esencial en la protección de los derechos individuales y en la
garantía de un proceso legal justo y equitativo.

Derechos Fundamentales: La naturaleza de los derechos fundamentales

radica en su carácter inherente a la condición humana. Estos derechos son
considerados universales, inalienables e indivisibles, lo que significa que están
disponibles para todas las personas,
independientemente de su origen, raza, religión o nacionalidad. La esencia de los
derechos fundamentales reside en la idea de que cada individuo posee ciertos
derechos básicos simplemente por ser humano.

Estos derechos incluyen, entre otros, el derecho a la vida, la libertad de

expresión, la libertad de religión, la igualdad ante la ley y la protección contra la
tortura y el trato inhumano. La naturaleza de los derechos fundamentales implica
que son protegidos y garantizados por la ley, y ningún gobierno o entidad puede
privar a una persona de estos derechos sin un fundamento legal válido.

Argumentación Judicial: La naturaleza de la argumentación judicial reside

en su papel en la toma de decisiones legales y la interpretación de la ley. En un
sistema judicial, los jueces y magistrados deben fundamentar y justificar sus
decisiones en función de la legislación, precedentes legales y principios jurídicos. La
argumentación judicial implica el proceso mediante el cual se presentan argumentos
legales, se interpretan y aplican las leyes y se llega a una conclusión razonada en
un caso específico.

La naturaleza de la argumentación judicial varía según el sistema legal y las

tradiciones jurídicas de un país. Sin embargo, en todos los casos, implica una
evaluación objetiva de los hechos y la ley, con el objetivo de llegar a una decisión
que refleje la justicia y el imperio de la ley. La argumentación judicial no solo es
esencial para garantizar la imparcialidad y la coherencia en el sistema legal, sino
que también promueve la transparencia y la rendición de cuentas en el proceso
judicial.

Debido Proceso: La naturaleza del debido proceso se basa en la garantía de

un proceso legal justo y equitativo. Este principio se deriva de la idea de que
ninguna persona puede ser privada de sus derechos o propiedades sin la
oportunidad de defenderse y sin un proceso adecuado. El debido proceso implica
que todas las personas tienen derecho a un juicio imparcial, a ser informadas de los
cargos en su contra, a la asistencia legal y a un recurso efectivo.

La naturaleza del debido proceso se extiende más allá de la mera formalidad

procesal. También implica la protección contra la arbitrariedad y el abuso de poder
por parte de las autoridades gubernamentales. En este sentido, el debido proceso
se convierte en una garantía fundamental para prevenir la privación injusta de la
libertad o la propiedad de los individuos.
 Interconexión de los Conceptos: La naturaleza de estos tres
conceptos está profundamente interconectada en el sistema legal. Los
derechos fundamentales proporcionan el contenido y el propósito de la
argumentación judicial y el debido proceso. Cuando se plantea una cuestión
legal que involucra la violación de los derechos fundamentales de una
persona, la argumentación judicial se convierte en el medio mediante el cual
se defienden y protegen esos derechos.

La argumentación judicial, a su vez, es esencial para garantizar que

las decisiones judiciales respeten los derechos fundamentales y sigan los
principios del debido proceso. Los jueces deben fundamentar sus decisiones
en argumentos legales sólidos y, al hacerlo, deben tener en cuenta los
derechos fundamentales en juego. La argumentación judicial, por lo tanto,
actúa como un mecanismo de control para evitar la arbitrariedad y garantizar
que las leyes se apliquen de manera justa y equitativa.

El debido proceso actúa como un marco para garantizar que la

argumentación judicial sea justa y equitativa. Implica que todas las partes en
un caso tengan igualdad de condiciones y oportunidades para presentar sus
argumentos y defender sus derechos fundamentales. El debido proceso es
esencial para asegurar que el sistema legal sea imparcial y que las
decisiones judiciales sean respetuosas de los derechos individuales.

Para finalizar, podemos comprender que la naturaleza de los derechos

fundamentales, la argumentación judicial y el debido proceso es intrínseca a
la protección de los derechos individuales y a la garantía de un sistema legal
justo y equitativo. Estos conceptos trabajan en conjunto para asegurar que
las leyes se apliquen de manera justa, que las decisiones judiciales sean
razonadas y que las personas sean protegidas contra la arbitrariedad y el
abuso de poder. Como pilares fundamentales de la justicia y el estado de
derecho, estos conceptos desempeñan un papel vital en la preservación de
las libertades individuales y en la promoción de sociedades democráticas y
equitativas.
Características de los derechos fundamentales:
Los derechos fundamentales son un concepto central en el ámbito del derecho
y la filosofía política, son aquellos derechos inherentes a todas las personas y
protegidos por la Constitución y la ley, cuyas características principales, son las
siguientes:
- Universalidad: Los derechos fundamentales son inherentes a todas las
personas, independientemente de su origen étnico, religión, género,
nacionalidad u otras características. Son derechos humanos universales.
- Inalienabilidad: Los derechos fundamentales no pueden ser renunciados ni
transferidos, y nadie puede ser privado de ellos arbitrariamente.
- Irrenunciabilidad: Los derechos fundamentales no pueden ser renunciados
voluntariamente, ya que su protección es esencial para la dignidad humana.
- Indivisibilidad: Los derechos fundamentales están interconectados y se
complementan mutuamente. No se pueden separar sin afectar la efectividad
de otros derechos.
- Igualdad: Los derechos fundamentales garantizan la igualdad ante la ley y
protegen contra la discriminación por motivos de raza, género, religión,
orientación sexual, etc.
- Justiciabilidad: Se refiere a la capacidad de un asunto o controversia para
ser sometido a un proceso judicial, es decir, para que pueda ser tratado y
resuelto por un tribunal de justicia. Implica que una cuestión legal o un
derecho pueda ser objeto de un litigio legal y que las partes involucradas
puedan presentar sus argumentos y pruebas ante un tribunal para obtener
una decisión judicial.
- Evolución: Los derechos fundamentales pueden evolucionar y adaptarse a
las cambiantes circunstancias sociales y culturales.
- Protección constitucional: Los derechos fundamentales en Ecuador están
consagrados en la Constitución de la República del Ecuador y tienen un
estatus constitucional.
- Limitación por el bien común: Los derechos fundamentales pueden ser
limitados en circunstancias excepcionales para proteger el bienestar general
o los derechos de otras personas, pero estas limitaciones deben ser
proporcionales y justificadas.
- Derechos económicos, sociales y culturales: Además de los derechos
civiles y políticos, se reconoce los derechos económicos, sociales y
culturales como parte de su sistema de derechos fundamentales.
- Protección de grupos vulnerables: se refiere a medidas y políticas
diseñadas para garantizar que las personas o comunidades que enfrentan
desventajas, discriminación o dificultades específicas reciban un trato
equitativo y una protección especial en el ámbito legal, social y económico.
Estos grupos suelen ser considerados vulnerables debido a factores como
su edad, género, discapacidad, orientación sexual, origen étnico, condición
económica o social, entre otros.

Características de la argumentación judicial:

En primer lugar, debemos recordar que es un proceso fundamental en el
sistema legal en el cual se presentan y defienden argumentos legales ante un
tribunal para resolver un caso. A continuación, se presentan sus características:
- Legalidad y normatividad: La argumentación judicial se basa en leyes,
precedentes y normas legales establecidas.
- Jurisprudencia: Los argumentos a menudo se sustentan en decisiones
judiciales previas que establecen precedentes legales.
- Evidencia: La argumentación judicial se apoya en pruebas y evidencias
presentadas en el tribunal.
- Razonamiento lógico: Se utiliza el razonamiento deductivo e inductivo
para construir argumentos sólidos.
- Retórica jurídica: La presentación efectiva de argumentos es crucial, y se
emplean técnicas retóricas específicas.
- Equidad y justicia: Los argumentos a menudo apelan a conceptos de
equidad y justicia para persuadir al tribunal.
- Contradicción y contrapartes: La argumentación judicial implica la
refutación de argumentos presentados por la contraparte.
- Preparación y conocimiento legal: Los abogados deben tener un
profundo conocimiento de las leyes y el caso en cuestión.
- Jurisdicción y competencia: La argumentación judicial varía según la
jurisdicción y la competencia del tribunal.
- Integridad y ética: La argumentación judicial debe llevarse a cabo con
integridad y de acuerdo con los códigos éticos profesionales.
- Estructura formal: La argumentación judicial en Ecuador sigue una
estructura formal y procesal definida por las leyes ecuatorianas y los
códigos de procedimiento.
- Notificación y audiencia: Las partes involucradas deben ser notificadas de
los procedimientos judiciales y tienen derecho a ser escuchadas durante el
proceso.
- Oralidad: El sistema legal ecuatoriano ha avanzado hacia un mayor énfasis
en la oralidad en los procedimientos judiciales.
- Medios de prueba: Las partes pueden presentar medios de prueba, como
documentos, testigos y peritajes, para respaldar sus argumentos.
- Recursos judiciales: Las partes tienen el derecho de apelar decisiones
judiciales ante instancias superiores.
- Tutela judicial efectiva: Las personas tienen derecho a una tutela judicial
efectiva para la protección de sus derechos.
- Códigos de procedimiento: Ecuador tiene códigos de procedimiento
específicos para distintas ramas del derecho, como el Código Orgánico
General de Procesos (COGEP) y el Código Orgánico Integral Penal (COIP),
que regulan los procedimientos judiciales.
- Precedentes jurisprudenciales: La jurisprudencia ecuatoriana, incluyendo
las decisiones de la Corte Nacional de Justicia, también es relevante en la
argumentación y puede influir en las decisiones judiciales futuras.
- Pluralismo jurídico: Ecuador reconoce el pluralismo jurídico, lo que
significa que existen diferentes sistemas legales que coexisten, incluyendo
el sistema legal estatal y los sistemas legales indígenas.
Características del debido proceso:
El debido proceso es un principio fundamental en el sistema legal que garantiza
que las personas sean tratadas de manera justa y de acuerdo con la ley; en el
Ecuador está consagrado en la Constitución del país y se rige por sus propias
leyes y jurisprudencia, estas son sus características:
- Garantía constitucional: El debido proceso en Ecuador está garantizado
en la Constitución de la República, que establece los principios
fundamentales del sistema legal ecuatoriano.
- Acceso a la justicia: El sistema legal debe garantizar el acceso a la justicia
para todas las personas, sin discriminación.
- Legalidad: El debido proceso exige que las leyes sean claras y aplicadas
de manera predecible.
- Derecho a la defensa: Las personas tienen el derecho a ser asistidas por
un abogado defensor durante todo el proceso legal.
- Notificación y audiencia: Las partes involucradas deben ser notificadas de
los procedimientos legales y tener la oportunidad de ser escuchadas.
- Imparcialidad: Los tribunales y otros organismos deben ser imparciales y
no mostrar favoritismo hacia ninguna de las partes.
- Evidencia y argumentación: Las partes tienen derecho a presentar
evidencia y argumentos en su defensa.
- Presunción de inocencia: En casos penales, se presume la inocencia del
acusado hasta que se demuestre su culpabilidad más allá de toda duda
razonable.
Se presume la inocencia del acusado, hasta que se demuestre su
culpabilidad en un juicio justo.
- Juicio justo y equitativo: El proceso legal debe ser justo, imparcial y
equitativo, y se garantiza el derecho a un juicio público y sin dilaciones
indebidas.
- Derecho a un intérprete: Las personas que no hablen el idioma oficial,
tienen derecho a un intérprete durante el proceso legal.
- Juicio por jurado: En muchos sistemas legales, se garantiza el derecho a
un juicio por jurado imparcial.
- Protección contra la autoincriminación: Las personas no pueden ser
forzadas a declarar en su contra.
- Derecho a la prueba: Las partes tienen derecho a presentar pruebas y
argumentos en su defensa.
- Recursos judiciales: Las partes tienen el derecho de apelar decisiones
judiciales y recibir una revisión imparcial.
- Debido proceso sustantivo: Además del proceso legal adecuado, el
debido proceso sustantivo protege contra leyes o actos gubernamentales
que sean arbitrarios o injustos.
- Acceso a la justicia: El debido proceso implica que las personas tengan
acceso a recursos legales y no se les niegue injustamente el acceso a la
justicia.
- Protección de derechos humanos: Ecuador es signatario de acuerdos
internacionales de derechos humanos que influyen en el debido proceso,
como la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
- Derecho a la tutela judicial efectiva: Garantiza que todas las personas
tengan acceso a un proceso judicial justo y equitativo para la resolución de
sus disputas legales.
Es importante tener en cuenta que el debido proceso en Ecuador, puede estar
sujeto a cambios en las leyes y regulaciones, por lo que es fundamental
consultar las fuentes legales y jurisprudencia actualizadas, para comprender
completamente su funcionamiento en el contexto ecuatoriano.
Características de los Derechos Fundamentales:
Universalidad: Marcos sabe que tiene derechos inherentes a su humanidad
y que no puede ser discriminado por su origen étnico.
Presunción de Inocencia: Se presume la inocencia de Marcos hasta que se
demuestre su culpabilidad más allá de toda duda razonable.
Due Process (Debido Proceso):
Acceso a un Abogado: Marcos tiene el derecho de ser asistido por un
abogado defensor competente desde el inicio del proceso.
Notificación y Audiencia: Marcos es notificado adecuadamente de los
cargos en su contra y tiene la oportunidad de comparecer ante un tribunal
imparcial para defenderse.
Derecho a la Prueba: Marcos puede presentar pruebas y testigos en su
defensa durante el juicio.
Argumentación Judicial:
Presentación de Argumentos: El abogado de Marcos presenta argumentos
sólidos y pruebas contundentes que cuestionan la validez de la evidencia en
su contra.
 Contradicción de la Acusación: El abogado de Marcos refuta las
afirmaciones de la fiscalía y demuestra inconsistencias en el caso en su
contra.
Respeto por la Ley: El tribunal escucha de manera imparcial los argumentos
y la evidencia presentada por ambas partes, asegurando que se siga la ley
y se respeten los derechos de Marcos.
Resultado: Gracias a la comprensión y aplicación de las características de
los derechos fundamentales, el debido proceso y una argumentación judicial
sólida, Marcos es declarado inocente en un juicio justo y equitativo. Sus
derechos fundamentales fueron protegidos, y el proceso legal garantizó la
justicia y la igualdad ante la ley.

DERECHOS FUNDAMENTALES, ARGUMENTACION JUDICIAL Y EL

DEBIDO PROCESO
Conceptos y definiciones
Los derechos fundamentales son el conjunto de derechos, inherentes a los
ciudadanos y establecen las libertades y garantías básicas que permiten su
pleno desarrollo, entre ellos se encuentran el derecho a la vida, a la integridad
física, a la libertad personal, a la propiedad privada, a la igualdad ante la ley,
entre otros. Estos derechos no pueden ser restringidos arbitrariamente por el
Estado. Para proteger el ejercicio de los derechos fundamentales dentro de
cualquier proceso legal, se establece la garantía del debido proceso, este
consiste en el conjunto de normas y principios que buscan asegurar un juicio
justo e imparcial, evitando condenas arbitrarias o injustas.

El debido proceso se fundamenta en principios como la legalidad, al exigir que

cualquier actuación judicial se base en leyes previas, y el derecho de defensa,
que implica la garantía de contar con asistencia letrada. Otros elementos
centrales son:
- Independencia judicial: el juez debe ser independiente de las partes y
del gobierno.
- Imparcialidad judicial: el juez debe ser imparcial y no debe tener
prejuicios contra ninguna de las partes.
- Legalidad: el proceso debe estar basado en la ley.
 - Publicidad: el proceso debe ser público, salvo en casos excepcionales.
- Oralidad: el proceso debe ser oral, salvo en casos excepcionales.
- Confrontación: las partes deben tener la oportunidad de confrontarse
entre sí.
- Presunción de inocencia: toda persona es inocente hasta que se
demuestre lo contrario.
- Derecho a la defensa: toda persona tiene derecho a la defensa de un
abogado.
- Derecho a la prueba: toda persona tiene derecho a presentar pruebas en
su defensa.
- Derecho a un juicio justo: toda persona tiene derecho a un juicio justo,
que se desarrolle respetando sus derechos fundamentales.
La relación entre derechos fundamentales y debido proceso es directa, y el
objetivo principal del debido proceso es crear las condiciones procesales para
que los derechos sustantivos de las personas sean efectivamente protegidos,
de nada serviría formalmente reconocer derechos fundamentales si en la
práctica estos pueden ser violados impunemente por un proceso injusto o
arbitrario.
Uno de los ámbitos donde el debido proceso adquiere mayor relevancia es en
la argumentación judicial. Esta consiste en la capacidad de los abogados de
exponer de forma lógica y convincente sus argumentos frente al juez dentro de
un proceso, con el fin de defender los derechos e intereses de sus
representados.
Para que exista una correcta argumentación judicial es imprescindible el
respeto por el debido proceso. El abogado debe poder acceder al expediente,
presentar pruebas, contrainterrogar testigos y contraargumentar las posiciones
de la contraparte en audiencia pública frente a un juez imparcial. Solo así podrá
desplegar sus capacidades argumentativas.
La argumentación judicial requiere el dominio de destrezas como la claridad,
concisión, poder de convicción y persuasión, uso estratégico de pruebas, y
capacidad retórica. Un profesional el derecho debe estudiar a fondo su caso,
preparar sus argumentos de forma lógica, y exponerlos con seguridad y
elocuencia frente al juzgador.
Cuando se viola el debido proceso se afecta directamente la calidad de la
argumentación judicial. Si el abogado no puede acceder al expediente, se
restringe arbitrariamente la presentación de pruebas o testigos, o el juez no es
imparcial, la argumentación se ve frustrada, impidiendo que los derechos
fundamentales sean debidamente defendidos.
La violación sistemática del debido proceso genera graves daños; puede
derivar en prácticas como la tortura para obtener confesiones, el
encarcelamiento sin pruebas, juicios sumarios, entre otros. Por ello, garantizar
su vigencia debe ser una prioridad de los Estados democráticos de derecho,
para lograrlo, se requieren medidas como la capacitación de jueces y
abogados, reformas procesales garantistas, protocolos de investigación
respetuosos de derechos humanos, y el establecimiento de instituciones
transparentes de control. Solo cuando los operadores de justicia interiorizan la
importancia del debido proceso es posible también elevar los estándares de
argumentación judicial.
Para garantizar el debido proceso es necesario que los Estados adopten
medidas para asegurar que los procesos judiciales se desarrollen de forma
justa y equitativa. Estas medidas pueden incluir la capacitación de los jueces, la
reforma de la legislación procesal y la creación de instituciones independientes
que puedan supervisar el funcionamiento de la justicia.
El debido proceso protege a las personas de la arbitrariedad del poder y
garantiza que sus derechos fundamentales sean respetados.
Cuando se viola el debido proceso, las personas pueden ser condenadas
injustamente o sufrir otros daños.
Algunos ejemplos de violación del debido proceso son los siguientes:
- Un juicio sin la presencia de un abogado.
- Un juicio en el que no se presentan pruebas.
- Un juicio en el que el juez no es independiente.
- Un juicio en el que la persona no tiene derecho a defenderse.
- Una condena basada en pruebas falsas.
 Conclusiones:
Los derechos fundamentales, la argumentación judicial y el debido proceso tienen
profundas raíces históricas y evolucionaron a lo largo del tiempo para convertirse en
los pilares fundamentales de sistemas legales democráticos y justos. Estos conceptos
están interconectados en la protección de los derechos individuales y la garantía de
que las decisiones judiciales sean coherentes, basadas en la ley y respetuosas de los
principios fundamentales de justicia. A medida que las sociedades continúan
desarrollándose y enfrentando nuevos desafíos, estos conceptos seguirán siendo
fundamentales para la preservación de la justicia y los derechos humanos en todo el
mundo. (Galo Molina)
- Los derechos fundamentales, al ser inherentes a la condición humana,
proporcionan la base moral y legal sobre la cual se construyen las leyes
y los sistemas judiciales. La argumentación judicial es el proceso
mediante el cual se aplican y defienden estos derechos en casos
concretos, asegurando que las decisiones judiciales sean razonadas y
basadas en la ley. El debido proceso, a su vez, garantiza que este
proceso sea justo y equitativo, protegiendo a las personas contra la
arbitrariedad y el abuso de poder. (María Nagua).
- Los derechos fundamentales, el debido proceso y la argumentación
judicial son elementos cruciales en la preservación de la justicia, la
equidad y el respeto de los derechos humanos en cualquier sistema
legal. Los derechos fundamentales son los pilares sobre los cuales se
construye una sociedad justa e inclusiva, mientras que el debido proceso
garantiza que la aplicación de la ley sea imparcial y que las personas
sean tratadas con dignidad y respeto. La argumentación judicial es el
medio a través del cual se defienden y protegen estos derechos, y su
calidad y aplicación adecuada son esenciales para la toma de
decisiones judiciales justas y equitativas. (Marcos Copara).
- La argumentación judicial y el debido proceso son fundamentales para
garantizar un sistema legal justo, equitativo y respetuoso de los
derechos individuales en Ecuador y en cualquier sistema legal
democrático. Estos principios establecen las bases para la protección de
la dignidad humana y la promoción de la igualdad ante la ley. La
interacción entre estos conceptos garantiza que las leyes se apliquen de
 manera justa y que las decisiones judiciales estén respaldadas por
argumentos legales sólidos. (Alfredo Lucas)
- Los derechos fundamentales requieren para su efectiva protección de la
vigencia de garantías procesales como el debido proceso. Este crea las
condiciones para una argumentación judicial de calidad por parte de los
abogados. Cuando el debido proceso se viola, la argumentación judicial
se ve afectada y con ello la defensa de los derechos humanos. Su
fortalecimiento debe ser por tanto una tarea prioritaria. (Narcisa
Marcillo).
- El reconocimiento e interpretación de los derechos fundamentales son
elementos cruciales en cualquier sociedad democrática comprometida
con la protección de los derechos humanos y la promoción de la justicia.
A través del reconocimiento, las leyes y las constituciones reconocen la
existencia de derechos fundamentales inherentes a todas las personas,
independientemente de su origen, género, religión o nacionalidad. Este
reconocimiento establece la base para garantizar que estos derechos
sean respetados y protegidos por el Estado y que las personas puedan
vivir con dignidad. (Gabriela Rodríguez)
-
- Recomendaciones:
- Fomentar la educación y la conciencia pública sobre los derechos
fundamentales y el funcionamiento del sistema legal es fundamental.
Esto puede lograrse a través de programas educativos en escuelas y
comunidades, así como a través de campañas de concienciación
pública. Cuanto mejor informadas estén las personas sobre sus
derechos y cómo funcionan los tribunales, más capaces serán de
defender sus derechos y contribuir a la construcción de sociedades
justas y equitativas. (Galo Molina).
- Buscar fortalecer la protección de los derechos fundamentales,
promover un sistema legal más justo y equitativo, y garantizar la
confianza pública en el sistema judicial. La colaboración entre gobiernos,
sociedad civil y el sistema judicial es esencial para lograr estos objetivos
y mantener un estado de derecho sólido en las sociedades
democráticas. (María Nagua).
- Para mantener y fortalecer los derechos fundamentales, la
argumentación judicial y el debido proceso que son esenciales en la
justicia y el estado derecho; es fundamental que los sistemas deban
adaptarse a las cambiantes circunstancias sociales y tecnológicas, el
mantener la independencia de los poderes judiciales para garantizar la
toma de decisiones imparciales y basadas en la ley, conocer y
comprender nuestros derechos fundamentales y estar dispuestos a
defenderlos en situaciones donde puedan verse afectados,
apoyándonos en los profesionales del derecho, los mismos que deben
 ser conscientes de la importancia de un debido proceso adecuado y una
argumentación judicial sólida para garantizar la justicia en cada caso,
para lo cual, es necesario tener una educación legal, propender por la
transparencia y acceso a la justicia y fomentar el respeto por los
derechos humanos. (Marcos Copara).
- Fomentar la colaboración interdisciplinaria entre expertos en derecho y
profesionales de otras disciplinas, como la sociología, la psicología y la
antropología, en la interpretación y aplicación de los derechos
fundamentales. La comprensión de cómo estos derechos afectan a las
personas en la práctica y cómo se relacionan con los aspectos sociales,
culturales y psicológicos de la vida cotidiana puede enriquecer la toma
de decisiones judiciales y la formulación de políticas. (Alfredo Lucas)
- Se sugiere garantizar, que los jueces estén capacitados para aplicar el
debido proceso de forma justa e imparcial, garantizando así, que se
cumplan los estándares internacionales en materia de derechos
humanos de manera permanente. (Narcisa Marcillo)
- Reconocer e interpretar de los derechos fundamentales promoviendo la
educación y la conciencia pública sobre estos derechos, es esencial
para empoderar a las personas, fortalecer la democracia y garantizar
que los derechos sean respetados y protegidos en todo momento. Para
lograrlo, se pueden llevar a cabo las siguientes acciones como
campañas de concientización, capacitación para profesionales del
derecho, el fortalecimiento de las independencias judiciales, promover la
transparencia, entre otros. (Gabriela Rodríguez)
- Resultados:
- Se establece un sistema legal que refleja los principios del estado de
derecho, la justicia y la equidad, lo que contribuye a la construcción de
sociedades democráticas y equitativas donde los derechos individuales
son protegidos y respetados. (Galo Molina)
- Los derechos fundamentales, son considerados universales, inalienables
e indivisibles, forman la base de la argumentación judicial y el debido
proceso. Los derechos individuales, como el derecho a la vida, la
libertad de expresión y la igualdad ante la ley, son esenciales en la toma
de decisiones judiciales. (María Nagua)
- Un buen resultado de comprender las características de los derechos
fundamentales, el debido proceso y la argumentación judicial es la
protección de los derechos individuales y la preservación de la justicia
 en una sociedad democrática. A continuación se presenta un ejemplo
que ilustra cómo estas características pueden trabajar juntas en un caso
hipotético: Imaginemos que un ciudadano, Marcos, es acusado
injustamente de un delito grave en un país que reconoce y protege los
derechos fundamentales, respeta el debido proceso y fomenta una
sólida argumentación judicial. (Marcos Copara)
- Los principios de derechos fundamentales, argumentación judicial y
debido proceso, Ecuador puede lograr un sistema legal más sólido y
justo. Esto se traducirá en una mayor confianza en el sistema judicial,
una mejor protección de los derechos individuales y una sociedad más
equitativa en la que todas las personas, sin importar su origen o
condición, tengan la seguridad de que sus derechos serán respetados y
protegidos. Además, fortalecerá la posición de Ecuador en la comunidad
internacional como un defensor de los derechos humanos y el estado de
derecho. (Alfredo Lucas)
- La interconexión es la protección efectiva de los derechos
fundamentales de las personas a través de un proceso legal justo y
equitativo. Cuando se respeta el debido proceso, se crea un entorno en
el que los abogados pueden ejercer sus capacidades argumentativas de
manera efectiva para garantizar que los derechos fundamentales de sus
clientes sean debidamente defendidos. (Narcisa Marcillo)
- El reconocimiento e interpretación del debido proceso garantiza que
todas las personas tengan el derecho fundamental a un juicio justo e
imparcial, asegurando que se respeten sus derechos durante cualquier
proceso legal, actúa como escudo protector que evita la privación
arbitraria de los derechos individuales y asegura que cada una de las
personas tengan el derecho a defenderse. (Gabriela Rodríguez).

Bibliografía (Marcos Copara):

- Constitución de la República del Ecuador de 2008
- Código Orgánico Integral Penal (COIP) de Ecuador.
- Código Orgánico General de Procesos (COGEP) de Ecuador.
- Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José).
- Ronald C. Slye, "The Human Rights Movement and the History of
International Human Rights Law" (2017).
- Diego López Medina, "En Defensa del Ius Cogens" (2005).
- Charles W. Ehrhardt, "Evidence" (2020).
- Antonin Scalia y Bryan A. Garner, "Making Your Case: The Art of Persuading
Judges" (2008).
- David M. Walker, "Legal Writing and Analysis" (2019).
- Erwin Chemerinsky, "Federal Jurisdiction" (2019).
- Geoffrey C. Hazard Jr. y W. William Hodes, "The Law of Lawyering" (2020).
- Richard H. Susskind y Daniel Susskind, "The Future of the Professions: How
Technology Will Transform the Work of Human Experts" (2015).
- Cass R. Sunstein, "The Second Bill of Rights: FDR's Unfinished Revolution
and Why We Need It More than Ever" (2006).
- https://concepto.de/derechos-fundamentales/#ixzz8Ek7EdnJR

- De La Jara Basombrío, E. (2021). El derecho al debido proceso en sede

administrativa. Ius Et Veritas, 61, 12-23.

- Hernández Breña, W. (2020). El derecho de defensa y el debido

proceso. Anales De La Facultad De Derecho, 10(13), 303-322.

- Lancheros Gámez, J. (2022). Los principios del derecho procesal, el

debido proceso y su aplicación en la oralidad. Revista Boliviana De
Derecho, 34, 328-353.

- Landa Arroyo, C. (2021). Los principios del derecho procesal

contemporáneo. Revista Peruana De Derecho Procesal, 2(1), 249-268.

- Melgarejo Barreto, P. (2021). Principios del debido proceso. Revista

Boliviana De Derecho, 29, 444-469.

- Oliveros Maqueo, A. (2022). Justicia dialógica: la argumentación jurídica

como el arte de la persuasión razonable. Boletín Mexicano De Derecho
Comparado, 55(166), 1141-1162.
 - Sánchez Velarde, P. (2020). Manual de Derecho procesal penal. Lima:
Idemsa.

- Vargas Pinto, T. (2020). La prueba y su valoración en el proceso penal

acusatorio. Revista Chilena De Derecho, 47(1), 277-299.