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Inquisition Et Chocolat
Inquisition Et Chocolat
Méndez María Águeda. Una relación conflictiva: la Inquisición novohispana y el chocolate. In: Caravelle, n°71, 1998. Senteurs
et saveurs d'Amérique latine. pp. 9-21;
doi : https://doi.org/10.3406/carav.1998.2804
https://www.persee.fr/doc/carav_1147-6753_1998_num_71_1_2804
Résumé
RÉSUMÉ- En Nouvelle Espagne, le chocolat avait été le précurseur de la monnaie. Par la suite,
encensé, utilisé dans des rituels et consommé seulement par les élites, il a joué un rôle dans la
sorcellerie, généralement pour des démarches de type amoureux (retours d'affection, surveillance des
maris, apaisement de mauvais caractères, assujetissement). Il servait aussi a jeter ou combattre des
sorts et à deviner l'avenir. Les documents inquisitoriaux de la Nouvelle Espagne des XVIe, XVIIe et
XVIIIe siècles (Archivo General de la Nación, Mexico) indiquent que tant ceux qui fournissaient la
matière que ceux qui la consommaient constituaient une culture marginale de la survivance, en une
sorte de révolte masquée contre un ordre et des conditions qui leur étaient étrangers et qui leur avaient
été imposés.
C.M.H.LB. Caravelle
n° 71, pp. 9-21, Toulouse, 1998
PAR
5 Sophie D. Coe y Michael Coe, op. cit., pp. 94-95. También indican que otra gran
preocupación de los españoles era el estreñimiento crónico, debido a una dieta a base de
carne y manteca, con pocas verduras y frutas. En su opinión, los españoles buscaban con
la misma avidez y ¿por qué no?, añado, urgencia, tanto afrodisíacos como laxantes.
6 Ibid., pp. 150-154.
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7 En el siglo XVII, por ejemplo, cuando parecieron decaer las disidencias graves, los
inquisidores no permanecieron ociosos, aunque el visitador Medina Rico protestaba de lo
contrario. A falta de causas de más envergadura, siempre se podía recurrir a las
supersticiones y hechiceríaa. Tales prácticas, motivo de la vigilancia constante del
Tribunal, no ocupaban su atención cuando había un problema mayor. En la segunda década
del siglo, por ejemplo, aumentaron las denuncias, pero en los diez años siguientes
disminuyó notablemente el volumen de las acusaciones que merecieron un proceso
formal, y entre los años 1642-1649, período de la represión encarnizada contra los
judaizantes, hubo un mínimo de supersticiones o hechicerías. Esto no significa que no las
hubiera, pues hay pruebas de que algunas matronas judías hacían uso de la hechicería
amorosa y, en menor medida, de ritos supersticiosos para aumentar sus ingresos, lo cual
indica que este tipo de conocimientos se cultivaba en más de un ámbito social. Además,
hubo otro incremento de tales actividades en el año 1672. (Cf., María Águeda (coord.),
Catálogo de textos marginados novohispanos. Inquisición: siglo XVII. Archivo General de la
Nación (México), El Colegio de México, Archivo General de la Nación y Fondo Nacional
para la Cultura y las Artes, México, 1997. Prólogo, pp. 11-12 y fichas catalográficas,
passim).
° La localización y descripción de los textos inquisitoriales que siguen y de muchos otros
se halla en: Méndez, María Águeda (coordj, Catálogo de textos marginados novohispanos.
Inquisición: siglos XVIII y XIX. Archivo General de la Nación (México), Archivo General de
la Nación, El Colegio de México y Universidad Nacional Autó-noma de México, México,
1992 y Méndez, María Águeda (coord.), op. cit., (véase nota anterior). El Catálogo
correspondiente al siglo XVI está en etapa de investigación.
La Inquisición y el chocolate !3
Para empezar, nos llamó la atención el uso del chocolate para escribir
quejas al Santo Oficio y así lograr que le hicieran caso a Mathías Ángel,
alias Mathías Encher, pues llevaba mucho tiempo encerrado por « ser el
sussodicho herege sacramentado y para que sea castigado »9. El acusado
era « natural de la ciudad de Amburgo, de la provincia de Alemania,
vezino y cassado en la ciudad de Sevilla ». Su delito se resumía a que,
... siendo el sussodicho cristiano baptizado y confirmado, y gozando
como tal de las gracias, privilegios e immunidades de que gozan y deben
gozar los fieles cathólicos cristianos apostólicos romanos, contraviniendo
a la profession hecha en el Santo Baptismo, ha hecho, cree, predica y
enseña nuestra Santa Madre Iglessia cathólica romana y Ley Evangélica,
hereti cando y passándose a la maldita y diabólica secta de los calvinistas...
(fol. 96r).
Su lamento plañidero en cuanto al poco caso que le hacían (el proceso
comenzó en 1651, y en el año 1670 seguía quejándose) « dice lo escrivió
con un popote y con el chocolate que le llevaban para beber. Y dicho
lienso, dixo, lo rompió de unos calsones blancos biejos, y lo dicho tiene
lo contenido en lo escrito en dicho lienso y pertenece a su defensa... [se le
acusa de] proterbo, y da su razón por qué no lo es » (fol. 268r).
Asimismo, cuando de « ligar » e impedir las relaciones con otras
mujeres -como para deshacerse de tales maleficios— se trataba, se echaba
mano del chocolate. Así, Andrés Acevedo, de Yangüitlán,
... dixo, que aviendo él y Gonçalo de Robles, presbítero y don Francisco
de las Casas ydo a visitar a Antonio López del Real, vezino del mismo
pueblo, que a la sazón estava enfermo, le preguntó que de qué estava
enfermo, y respondió que de ciertos nacidos o bultos que tenía en la
barriga. Y que se sentía ligado, de tal suerte que no era ya para casada Y
que el Azebedo y los demás dixeron que qué avía sido la causa.
Respondió, que una xícara de chocolate que le avían dado en una casa...
(Vol. 243, s/exp., fol. 331r).
Hicieron llamar a una india que le dio otra bebida, con la cual « le
quitó la ympotencia » {ibid.).
Los documentos que se utilizan pertenecen a los siglos XVI, XVII y XVIII, pero se ha
preferido su inclusión por temas, y no cronológicamente, para mayor claridad. Todos
ellos se encuentran en el Archivo General de la Nación de México (en adelante AGN), en
el grupo documental Inquisición, por lo que no se repetirá esta información. Se han
resuelto las abreviaturas, se ha respetado la ortografía y se ha modernizado la acentuación
y puntuación. Los subrayados, cuando no se especifique lo contrario, son míos.
9 México, 1651. "Processo y caussa criminal qontra Mathías Ángel (alias) Enquel,
alemán. Por sospechas de herege". (Vol. 461, exp. s/núm.) Sus escritos, en pedazos de tela
cortados de un pantalón de manta, algunos terminados en vainica deshilada finamente
cosida, se encuentran entre los fols. 275v y 278r. Las piezas de tela están muy bien
conservadas, son fáciles de leer, pues el chocolate ha resistido bien el paso de los años y,
por tanto, comprueban uno de los posibles significados del dicho popular: "las cuentas
claras y el chocolate espeso" .
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Ï" Mérida de Yucatán, 1672. "Denunciaciones que an echo en Mérida qontra Getrudes
del Rey y otras personas". Vol. 621, exp. 10, fols. 247r-249v
H Yucatán, 1580-1584. "Octavo cuaderno de testificaciones reçividas en el obispado de
Yucatán". Vol. 235, s/exp., fols. 87r-88r (Ia numeración).
La Inquisición y el chocolate ¡5
también que sería sierto el que la quisiese dicho ombre que tenía. Y que
remordiéndole la conciencia, se quitó los quiomates que traía cosidos en
las naguas y se los dio a bever, pero que como pecadora y flaca se tornó a
baler de ellos, moliéndolos y dándoselos a bever al dicho ombre, pero que
en ninguna cosa de lo que hizo bido ny experimentó effecto alguno...,
aunque lo deseó esta confesante...^
y, en el otro, que es sólo la denuncia, y en el que no se nos informa si
Ysavel de los Angeles, vecina de Puebla, no obstante el uso de un
conjuro, tuvo más suerte:
Sobre dar chocolate echo con agua de menstruo para atraer hombres, y
hacerlos venir diciendo:
Con dos te miro,
con dos te ato,
la sangre te bebo
y el corazón te mato.
Y mientras lo decía, tener en la mano una cinta naranjada, y viar de unas
doradillas que le havía dado un indio, que havía encendido, para dárselas,
una candela delante de un mico... 15
Y, por último, el uso de la bebida mezclada con unos polvos no
identificados, para adivinar. Juana de Villanueba, esposa del pastelero
Francisco de Soto, declaró ante el Santo Oficio que:
... como abrá siete messes, poco más o menos, que un día entró en su
cassa un moço llamado Diego, que no save su apellido, que es español, de
officio pastelero... Como conocido desta declarante la rogó lo dejasse
dormir dos o tres noches en la dicha su cassa, y esta declarante le dijo que
fuesse norabuena, y assí le acomodó en una de las salas de la dicha su
cassa, adonde el dicho mozo Diego llevó su colchón. Y la primera noche,
esta declarante lo llamó a cenar y cenó con ella y con María de Ocampo,
su hermana. Y aviendo cenado, el dicho Diego llamó a un yndio llamado
Juan, que servía desta declarante... y le mandó que le fuere a traer
quartilla de una bela y quartilla de carbón, y se lo trajo. Y el dicho Diego,
encendió el carbón en brasero y en un jarro de chocolate pusso a calentar
una poca de agua y pidió un tecomate a esta declarante, que se lo dio, y
entrándose él en su aposento, y cerrando su puerta, por una endedura
16 Sin lugar, 1654. Legajo sin portada [Contra Pedro García. Por mal hombre, mal
cristiano, embustero y alumbrado]. Pedro García "El Engañamundo" llevaba una vida sin
freno. Le gustaba seducir mujeres, mentir, extorsionar y entregarse a los placeres corporales,
como beber chocolate y comer. (Vol. 438 (2a parte), exp. 9, fols. 351r-356v).
1' Véase, Federica Sodi Miranda y David Aceves Romero, "El uso y abuso del chocolate
en la Nueva España", Actas del Primer Congreso Internacional sobre la Inquisi-ción
novohispana, Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco (Departamento de
Historia), Universidad Nacional Autónoma de México (Instituto de Investiga-ciones
Antropológicas y Dirección de Historia y Filosofía de la Medicina), México (en prensa).
También, Noemí Quezada, Sexualidad, amor y erotismo. México prehispánico y México
colonial, Universidad Nacional Autónoma de México-Plaza y Valdés Editores, México,
1996, en especial los capítulos "El erotismo y lo prohibido" y "El maleficio amoroso",
pp. 233-279.
18 C.M.H.LB. Caravelle
18 Para un estudio muy completo sobre este apasionante tema, véase, Georges Baudot,
"Sociedad colonial y desviaciones. Marginalidad y resistencia cultural en el México de los
virreyes", Poder y desviaciones: Génesis de una sociedad mestiza en Mesoamérica (Georges
Baudot, coord.), Siglo XXI Editores-Centro de Estudios Mexicanos y Centroamericanos
de la Embajada de Francia (CEMCA), México, 1998, pp. 63-102.
19 Cf. Miguel León-Portilla, op. cit., p. 29.
20 Georges Baudot, " Nezahualcóyotl: vingt-deux chants...", p. 43. (La traducción es
mía).
La Inquisición y el chocolate !9
ni me ha de moler a mí
quien viniere a visitarme.
(Romance 49)21;
tiempos en que, como en 1625, Thomas Gage hace anotaciones acerca
de que en España « a veces puede resistirse con una buena comida o una
buena cena todas las veinticuatro horas », pero en las tierras bajas de
México, observa que no es tan fácil, ya que:
... dos o tres horas después de haber hecho una comida, en la cual nos
habían servido tres o cuatro platos de carnero, vaca, ternera, cabrito,
pavos y otras aves y animales de caza, no podíamos estar de debilidad de
estómago y casi nos caíamos de desmayo, de modo que nos veíamos precisados
a confortarnos y reponernos con una jicara de chocolate, un poco de
conserva o algunos bizcochos, de los cuales nos proveían en
abundancia. . .22
Épocas cuando se hacían « meriendas de espeso chocolate en
compañía de amigos »23, o como en 1662, año en que Matheo Jaramillo, autor
de la época, pedía al Santo Oficio que le pagaran la representación de una
comedia ante el Santo Oficio:
...digo que como es uso y costumbre representar una [comedia] a este
Santo Tribunal el día de la festividad del glorioso San Pedro Mártir, la e
representado con mi compañía, y siempre se ha estilado darnos veynte pessos
para chocolate por la representación de dicha comedia y para que yo, en
nombre de dicha mi compañía, los aya y cobre. A Vuestra Señoría
Illustrísima pido y suplico se sirva de mandar despacharme librança para
que el receptor deste Santo Officio me dé y pague los dichos veynte
pessos que en ello rezeviré24.
Qué curiosos y lejanos nos parecen hoy en día los usos y abusos del
chocolate de antaño, cuando releemos las descripciones erótico-culinarias
en Como agua para chocolate de Laura Esquivei, o volvemos a leer con
regodeo uno de los tantos fragmentos invaluables de Gabriel García
21 Obras completas de Sor Juana Inés de la Cruz (edición, prólogo y notas de Alfonso
Méndez Planearte), Fondo de Cultura Económica, México, 1976, (Ia reimp.), t. 1, Lírica
personal, p. 147.
22 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales (introducción y edición
de Elisa Ramírez Castañeda), Fondo de Cultura Económica y Secretaría de Educación
Pública, México, 1982, p. 132.
23 Willard F. King señala que Antonio de León Pinelo, en su entretenida Cuestión moral
si el chocolate quebranta el ayuno eclesiástico (1636), incluye el dato de que los mexicanos
solían tomar chocolate tres veces al día y, en ocasiones festivas, hasta seis veces más. (Cf.,
Juan Ruiz de Alarcón, letrado y dramaturgo. Su mundo mexicano y es-pañol (trad, de
Antonio Alatorre), El Colegio de México, México, 1989, p. 67). Agradezco a Sara Poot-
Herrera el haberme indicado esta mención.
24 México, 1662. "Peticiones de Gerónimo Ortiz de Torres, autor de comedias murió
este autor y de Matheo Jaramillo, autor de comedias". AGN, Inquisición, vol. 595,
expediente 16, fol. 234r.
20 C.M.H.LB. Caravelle
25 Cien años de soledad, Editorial La Oveja Negra, Bogotá, Colombia, 1981, (7a reimp.),
pp. 74-75.
26 Philippe Sollers, "Esa consternante voluntad para normalizar el sexo", La Jornada
semanal, (suplemento cultural del periódico La Jornada, México) 178 (2 de agosto de
1998), 7.
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