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Todos los productos y contenidos ofrecidos por Salud Nutriclínica (tales como,
programas y cursos de nutrición, actividad física y vida saludable, libros, vídeos,
artículos, posts, podcast, Vlogs y video-tutoriales) tienen naturaleza meramente
informativa y divulgativa y en ningún caso constituye servicio médico o
sanitario de ningún tipo ni sustituye la consulta con un médico especialista, por
lo que no deben ser aplicados sin la aprobación previa y supervisión de un
médico o profesional de la salud especializado, particularmente en casos de
personas con patologías, lesiones, limitaciones o anomalías físicas o
nutricionales o cualquier otra condición especial.
Nos han enseñado todo al revés, y la evidente prueba de ello es que la humanidad
está sufriendo una epidemia de enfermedades crónicas y degenerativas como
nunca antes en la historia.
En el año 1850 se documenta el primer caso de Alzheimer, sin noticias de nuevos
casos hasta 1980, ni más ni menos que 130 años después, donde se registró el
segundo y los casos se multiplicaron.
quizás por infección de alguna bacteria cuyo antibiótico aún no existía, sin
embargo ahora cada vez son más las personas que fallecen a causa de
enfermedades que escaseaban en nuestros ancestros.
Debemos abandonar la idea de que todos los problemas de salud son genéticos y
que nos tocan porque sí, por mala fortuna. El ser humano es una máquina
compleja y eficiente con variaciones genéticas selectivamente favorables para no
enfermar, pero tenemos un sistema de salud que no soluciona los problemas de
raíz, tan sólo a taponar síntomas para vivir más años (polimedicados)... ¡pero
viviendo muchísimo peor!
Pongo este ejemplo puesto que los aborígenes australianos eran cazadores-
recolectores, sin rastro de enfermedades modernas, con % graso bajo, sin caries
dental, con densidad ósea, un ratio omega 3/6 adecuado y probablemente
glucemias muy estables, elevada densidad mitocondrial y alta presión parcial de
oxígeno en los tejidos.
Generación tras generación siguiendo la coherencia genética, comiendo lo que
sus genes esperan, y por supuesto recorriendo kilómetros en busca de alimento.
Usaban su energía con el estómago vacío para encontrar recompensa.
Pero cuando aterrizó el capitán de la Marina Real británica comenzó la
aniquilación cultural y pasaron de basar su alimentación en un enfoque paleo con
frutos recolectados y animales cazados, a basar su dieta en trigo, harinas, azúcares
y leche, además no tenían que desplazarse para buscar la comida.
Como resultado los aborígenes se volvieron obesos, diabéticos e hipertensos. Es lo
que sucede cuando le das al organismo comida moderna que nunca antes en la
historia ha consumido.
¿Te suena la historia de los aborígenes? Es exactamente lo mismo que nos ha
pasado a nosotros. El 99% de nuestra genética se forjó en el paleolítico, con comida
que daba la naturaleza y no con productos, pero tras la revolución industrial llegó
la agricultura mecanizada, la malnutrición, el sedentarismo... ¡y la coca cola! y con
ello las enfermedades de la civilización, que son responsables de millones de
muertes cada mes. Actualmente, por cada minuto que pasa mueren 3 diabéticos
y se le amputa el pie a más de 7. La alimentación saludable limita alimentos, pero
resulta mucho más limitado que te quiten un pie.
¡Maldito Hipócrates, siempre tiene razón!
Quiero que tengas siempre espíritu crítico para afrontar las recomendaciones
oficiales, que te informes más allá de lo que nos dice la televisión y los medios de
comunicación y que por supuesto recuerdes que la profesión médica siempre ha
sido presa de tácticas corruptas de la industria. Recuerda que nos mintieron con
el tabaco, lo recomendaron, siendo la causa principal de multitud de tipos de
cáncer, el daño generado es irreparable, y nadie se hizo responsable.
Recomendaron el azúcar como si de la panacea se tratara, te dijeron que era súper
necesario para el cerebro (pese a que el hígado lo puede fabricar aún sin
consumirlo). Te vendieron que el azúcar te daba energía y te quitaba el hambre,
que te mantenía delgado, nutrido, reforzado y además te vigoriza.
1. COMBATE LA OXIDACIÓN
Durante millones de años hemos conectado los pies con la tierra porque esta es
una batería, con carga positiva hacia el interior y negativa hacia la superficie.
Cuando pisamos la tierra ganamos electrones que neutralizan los radicales libres
producidos y la sobrecarga positiva, generando un balance y evitando la oxidación
y el envejecimiento, calibrando así el sistema nervioso, las hormonas y
permitiendo el buen funcionamiento del corazón, por eso mismo nos hacen un
electrocardiograma cuando pretenden comprobar la presencia de anomalías en
la actividad eléctrica del corazón. El cuerpo es eléctrico y la tierra es la red que nos
suministra la electricidad para funcionar y no enfermar.
2. REDUCE LA INFLAMACIÓN
Aquí los resultados de un estudio sobre el cambio de una persona que estaba
muy inflamada como podemos comprobar (lo rojo indica inflamación) tras 30
minutos de earthing. Impresionante.
3. REDUCE EL ESTRÉS Y MEJORA EL SUEÑO
Los pies deben estar libres, por algo nacimos descalzos y no con zapatos, es
importante para que los huesos, tendones y músculos cobren su postura natural,
lo cual mejorará tu postura corporal y facilitará combatir el dolor lumbar. Con
zapatos incómodos y apretados que fuerzan al pie a tener una postura antinatural
que no le corresponde estamos perdiendo la forma natural de los pies. Después
de añadir earthing en tu estilo de vida te cambia completamente la forma del pie,
además de que ganamos fuerza, energía y equilibrio.
Los niños que se crían en zonas rurales alrededor de animales y naturaleza con
familias numerosas, desarrollan asma, alergias y enfermedades autoinmunes con
bastante menor frecuencia que los otros niños criados en zonas urbanas y aislados
a a nuestro favor
en multitud de ocasiones permitiendo fortalecer el sistema inmunológico.
La exposición a la naturaleza aumenta los niveles de las células natural killers, que
nos protegen del cáncer matando a las células tumorales, de la hormona
adiponectina, que nos protege de la enfermedad cardiovascular y de la hormona
DHEA que nos protege de la diabetes y contribuye a una buena regulación de los
niveles de azúcar en sangre.
- Andar descalzo a diario por el césped, el barro, las rocas, las piedras o la playa.
Tiene la capacidad de dañar el cerebro, 400 estudios hablan del fluoruro como
neurotoxina. 71 estudios en humanos relacionan la exposición alta al fluoruro con
inteligencia reducida, otros 3 estudios en humanos con desarrollo fetal deficiente
y 9 estudios en embarazadas con coeficiente intelectual reducido en sus hijos.
CONSEJOS
4. Filtrar el agua del grifo con un buen filtro de ósmosis inversa para eliminar
toxinas.
Solemos asociar entrenar la fuerza con el culturismo o con competir en
powerlifting, pero nada más lejos de la realidad, entrenar la fuerza consiste en
aplicar tensión mecánica en el músculo y se consigue con múltiples deportes
como el crossfit o el pilates, aunque el gimnasio usando peso libre o máquinas es
el más común y altamente efectivo.
Nos han contado que para perder grasa hay que comer poco y moverse mucho,
cuando realmente hay que comer mejor y entrenar mejor. Cuando trabajamos el
músculo inducimos mejoras metabólicas enormes como la mejora de la
sensibilidad a la insulina y la bajada de la inflamación, reparamos tejidos dañados,
mejoramos la función mitocondrial optimizando la quema de energía (y de grasa
corporal) y ganamos masa muscular que aumenta el gasto energético en reposo.
Tiempo atrás las madres ponían a sus hijos vísceras, ya que son
alimentos baratos y muy nutritivos, sin embargo, se ha perdido dicha
tradición, y ahora, las nuevas generaciones odian el sabor de las
vísceras. Una lástima, puesto que por ejemplo el hígado es el alimento
más nutritivo del planeta. En tan sólo 200 g de hígado encontramos
los requerimientos mínimos de casi todos los micronutrientes
esenciales:
- Azúcares
- Glifosato
- Omeprazol
- Estrés crónico
- Aceites de semillas
- Gluten
- Exceso de fármacos
- Aflatoxinas (cacahuete)
- Glutamina
- Zinc (tanto suplemento como alimentos ricos en zinc como el marisco y las
aves)
- Ayuno intermitente (al menos 13-14 horas diarias, pueden ser más)
Siempre hay un ciclo para todo, de hecho, multitud de cosas de la vida son cíclicas:
las estaciones, el día y la noche, la luz y la oscuridad, comer y ayunar, anabolismo
determinadas y de noche otras. Cenar tarde no es buena idea, puesto que sucede
lo siguiente:
2. Accede a la luz natural durante el día lo máximo que puedas, intenta dar
una caminata bajo la luz solar o incluso hacer ejercicio físico al aire libre.
5. Evita cenar tarde, come cuando haya luz diurna natural, cena a las 19:00-
19:30 como muy tarde.
6. Una vez anochece, es recomendable usar luces rojas (de infrarrojos mejor)
o fuego (velas). El rojo no interfiere en el ciclo circadiano.
EL SOL ES MEDICINA
AUMENTA MEJORA
1. ELEVA LA TESTOSTERONA
No es casualidad que las células que componen los genitales, tanto masculinos
como femeninos, estén repletas de receptores de vitamina D.
La vitamina D es responsable de la salud sexual, estudios han demostrado que la
deficiencia de vitamina D provoca problemas de fertilidad, bajo recuento de
espermatozoides y una muy baja cantidad de espermatozoides móviles.
4. MEJORA LA FERTILIDAD
Gracias por leer esta guía, ahora es momento de cuidarse y poner en prácticas las
herramientas para no ser víctima del sistema y tomar las riendas de tu salud.
Porque te quiero sano, fuerte y libre de fármacos.
Un fuerte abrazo,
Alejandro.