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Apuntes de clases- Derecho Constitucional1

DERECHO CONSTITUCIONAL ORGÁNICO

Unidad 1: TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN


1.- El constitucionalismo. Génesis. Evolución. Situación actual.
2.- Conceptos de Constitución.
3.- Clasificación de las Constituciones.
4.- Supremacía constitucional y Sistemas de Justicia Constitucional.
5.- Poder Constituyente: Clases. Límites.
6.- Reforma constitucional de la Constitución Política de la República de Chile.

1. El constitucionalismo. Génesis. Evolución. Situación actual.

1.1. El constitucionalismo.

El derecho Constitucional es la rama del Derecho público que estudia el


conjunto de normas jurídicas que se refieren a la organización del Estado, de
su gobierno y de los derechos fundamentales.2

El constitucionalismo jurídico corresponde a las teorías que explican y estudian la


posición que ocupa la Constitución dentro del ordenamiento jurídico y algunos
autores lo distinguen del constitucionalismo político, para hacer referencia a la
relación de la Constitución con el poder y a su limitación por medio de la
constitución. Sin embargo, lo cierto es que esa es una mirada estrictamente
positivista, que pretende extraer del derecho las realidades político-sociales. La
Constitución es una institución política tanto como una norma jurídica, por ello
ambas perspectivas están estrechamente relacionadas con el constitucionalismo.

En tal sentido un famoso autor constitucionalista, Loewenstein, explica que han


pasado muchos años desde que el ser político ha aprendido que la sociedad justa
depende de la existencia de límites impuestos a los detentadores del poder en el
ejercicio de ese poder, y que con el tiempo se habría reconocido que la mejor
forma de alcanzar este objetivo sería haciendo constar frenos que la sociedad
desea imponer en forma de un sistema de reglas fijas, destinadas a limitar el
ejercicio del poder política.3 Esa norma fundamental sería la Constitución.

1
Priscilla Brevis Cartes
2
Molina Guaita, Hernán: Instituciones Políticas
3
Loewenstein, Karl. (2018) Teoría de la Constitución. Editorial Ariel, p. 149.
El modelo vigente de normas Constitucionales tiene unos 250 años, y es fruto de
una larga evolución política y normativa. La etapa moderna de la evolución se
encuentra marcada por la revolución inglesa de mediados del siglo XVII, y
francesa del siglo XVIII, así como las situaciones de los totalitarismos y los
esfuerzos de democratización que se observan desde mediados del siglo XX.
Sieyes, en el siglo XVIII en Francia, acuña el concepto de poder constituyente,
para designar a ese pueblo soberano que tiene la legitimidad suficiente para
dotarse a sí mismo de un ordenamiento normativo constitucional.
Durante el siglo XIX, tras la revolución Francesa, la burguesía consolidó
económica y normativamente su triunfo con el surgimiento del Estado liberal, ello
se reflejaría en el contenido de la Constitución.
El proceso de consolidación de constituciones escritas está marcado por
Norteamérica. Posteriormente, en la segunda mitad del siglo XX se expande en
todo Occidente, y el siglo XXI estará marcado por los llamados
neoconstitucionalismos, con especial atención en Latinoamérica.
La historia del constitucionalismo es la historia de la búsqueda de las limitaciones
al poder absoluto, así como el esfuerzo de establecer una justificación ética a la
autoridad.4
El constitucionalismo democrático del siglo XX, basado en la soberanía popular y
superado el sufragio censitario, entiende que es el pueblo soberano quien legitima
y acepta, a través de una decisión política, la forma en que se ha de gobernar por
medio de la constitución. Es entonces en la Constitución donde se establecen
límites al ejercicio del poder, así como métodos de control y se protegen los
derechos fundamentales de las personas. En esta norma se consagra los
principios fundamentales del Estado de Derecho, como la división de poderes, el
principio de legalidad y los derechos fundamentales
Durante el siglo XX, varios autores construyen la teoría de la Constitución en
términos jurídico-formales, identificándola con la norma de mayor autoridad formal
del ordenamiento jurídico, principalmente Kelsen y Jellinek .
El Constitucionalismo moderno representa por tanto una síntesis de esta evolución
y que se configura con ciertas pautas o principios mínimos: El principio de
supremacía Constitucional; Protección de derechos fundamentales y sus
garantías; Separación de funciones; titularidad del poder constituyente.
La Constitución establecerá la validez del resto del ordenamiento jurídico, en tanto
el resto del ordenamiento jurídico se ajuste a esta norma suprema.

4
Loewenstein, Karl. (2018) Teoría de la Constitución. Editorial Ariel, 150.
 Génesis del Estado Constitucional de Derecho Contemporáneo: Dos grandes
hitos.

 El constitucionalismo liberal
Las primeras Constituciones se configuran inspiradas en el liberalismo
político, que llega hasta nuestros días.
Este primer constitucionalismo veía la amenaza en el poder absoluto del rey
absoluto, y luego en el Estado. Por ello se construye desde la idea de una
libertad negativa, es decir como no interferencia. El clásico autor Isaiah
Berlin lo explica como la libertad negativa, que le exigiría al Estado no
hacer: soy libre en la medida en que ninguna persona o grupo de personas,
ni el Estado, interfieren en mi actividad. Las constituciones son
esencialmente un límite al poder absoluto.
En ese contexto, las primeras consagraciones de derechos constitucionales
surgen lo que se ha denominado derechos de libertad o de primera
generación, lo que es un análisis desde un punto de vista histórico. Son los
derechos civiles y políticos.
Los derechos civiles corresponderán, en principio, a todos aquellos
derechos que implican un ámbito de autonomía de las personas, los cuales
no deben ser afectados por el Estado. En la base de estos derechos, como
fundamental, está el derecho a la igualdad ante la ley. Este derecho es
consagrado como una igualdad formal o igualdad ante la ley, consagrando
la idea que en una sociedad no hay persona ni grupo privilegiado,
consagrándose con la idea de hacer desparecen todo tipo de privilegio.
Esta igualdad ante la ley no debe entenderse en el sentido que el Estado no
pueda hacer diferencias entre las personas, sino que no debe hacer
diferencias arbitrarias.
Dentro de los derechos civiles también se encuentran el derecho a la vida,
el derecho de propiedad, las libertades de movimiento, de culto y de
expresión, por mencionar algunos casos. El Estado asumirá un deber
negativo, o sea, un “no hacer”, los órganos estatales “no pueden vulnerar
estos derechos”.
Los derechos políticos son entendidos como los derechos de los
ciudadanos para intervenir en la toma de decisiones estatales.
 El Constitucionalismo Social

El Constitucionalismo liberal se hizo insuficiente para dar respuesta a las


necesidades y requerimientos del cuerpo social del Estado, principalmente
el surgimiento de la Cuestión Social. Con industrialización, las
desigualdades sociales se hacen más latentes, los ciudadanos comienzan a
formular exigencias de políticas que permitieran a las personas acceder a
bienes y servicios básicos tales como vivienda, salud, educación, agua
potable, pensiones justas, etc.
Ello exige del Estado, principal garante del bien común, un activo, distinto
del concebido en su creación. No basta un estado abstencionista, que “no
viole mis derechos”, sino que se requiere de un Estado mucho más activo.
Se sigue protegiendo la libertad, pero la libertad es entendida de otro modo.
El clásico autor Isaiah Berlin plantea estos dos conceptos de libertad,
aquella libertad negativa, de no interferencia, que le exigiría al Estado no
hacer, y esta otra libertad del estado social, la libertad positiva, que protege
la idea de autodominio, es decir, refiere el deseo por parte del individuo de
ser su propio dueño: quiero que mi vida y mis decisiones dependan de mí
mismo, y no de fuerzas exteriores. Pero para ello se requieren pisos
mínimos. Esos pisos mínimos son exigidos al Estado.
Cambia por lo tanto la idea de igualdad, ya no basta que todos sean
formalmente iguales ante la ley. Se requiere que el Estado busque alcanzar
una igualdad sustantiva, material, es decir, de resultado.
Se introducen entonces en las Constituciones los llamados, desde una
perspectiva cronológica histórica, derechos de segunda generación, los
derechos sociales. Son derechos que exigen del Estado una determinada
prestación, no se satisfacen con la mera abstención del Estado, sino que
exigen actividad e inversión estatal. Es el caso del derecho a la salud, a la
educación, a las pensiones, a la vivienda, etc.
Las primeras Constituciones sociales, es decir que introducen estos
derechos sociales son la Constitución Mexicana de 1917, y la Constitución
alemana de Weimar de 1919. La Constitución de Weimar es un referente
para este tipo de Constitucionalismo. En el plano teórico Peter Haberle
señala que sería H. Heller quién propago el “Estado social” con vistas a la
constitución de Weimar. El estado social de derecho en la actualidad es un
elemento esencial en el Estado Constitucional. Las fórmulas varían de una
constitución a otra, pero apuntan a los mismo, un Estado Constitucional
comprometido con la justicia social.5
Sobre la base de este constitucionalismo social, el desarrollo histórico fue
incorporando otros elementos, como el énfasis en la democracia y sus
principios, y luego del fascismo y nacismo, la limitación que los derechos
humanos imponen al actuar democrático como su esencia. Desde tal
perspectiva se comenzó a hablar de un Constitucionalismo social
democrático o Estado Constitucional democrático de derecho.
Luego han existido otros énfasis, como el neoconstitucionalismo, el
constitucionalismo latinoamericano, que incorpora derechos de tercer ay
cuarta generación, 6 o el constitucionalismo humanista, que refiere a
aquellos textos constitucionales donde el centro es la persona humana.
Ellos hacen énfasis por tanto a la evolución del diseño y de las praxis
constitucional tras la segunda guerra mundial, pero mantienen como
estructura la corriente del Estado Constitucional democrático de Derecho.
En tal sentido, por ejemplo, se habla de neoconstitucionalismo para
referirse a el constitucionalismo de la segunda mitad del siglo XX, y que
presentaría características de una Constitución que ampara una serie de
derechos fundamentales y garantías, constituciones rígidas.
.

Características del constitucionalismo contemporáneo: Estado


constitucional democrático de derecho:

a. Eficacia o vinculación directa


b. Supremacía Constitucional.
c. Respeto y protección de los derechos fundamentales.
d. Separación de poderes.
e. Titularidad poder constituyente en el pueblo

5
Haberle, Peter. (2018). El Estado Constitucional. Instituto de Investigaciones Jurídicas, Universidad
Nacional Autónoma de México. p.212.
6
Los derechos de tercera generación han sido desarrollados tras las guerras mundiales, como el derecho a la
paz, de autodeterminación, al medio ambiente, al buen vivir, entre otros. Los derechos humanos de cuarta
generación, desarrollados a finales del s. XX y principios del XXI, protegen el acceso a las nuevas tecnologías
de la ciudadanía, como el derecho a la reputación digital, la estima digital, la libertad y responsabilidad
digital, la privacidad virtual, entre otros.
a.- La eficacia directa de la Constitución
Las constituciones por mucho tiempo fueron consideradas textos políticos,
superiores, que establecían las directrices del Estado y principios fundamentales;
pero no normas aplicables al caso concreto por los tribunales.
Las Constituciones antes eran vistas como norma de normas: mandatos al
legislador y los poderes públicos, pero no como derechos de los ciudadanos.
Ello sufre un cambio, influenciado por el modelo Norteamericano: La constitución
pasa a ser vista como norma de aplicación directa; que establece obligaciones,
pero también derechos. Las normas constitucionales no son meras declaraciones
programáticas, sino normas vinculantes a los poderes públicos y a los ciudadanos.

b. Supremacía Constitucional
La Constitución es concebida como aquella norma de mayor jerarquía dentro del
ordenamiento jurídico del Estado. Esto se traduce en que la norma de inferior
jerarquía debe conformarse con la superior. La supremacía constitucional
configura entonces una pirámide normativa compuesta por diferentes escaños,
entre los cuales existen relaciones de validez formal e interna.

c. Respeto y protección de los derechos fundamentales


El Estado está concebido en la idea moderna como una institución jurídica al
servicio de la persona, por tanto, en el ser humano y su respecto encuentra un
límite infranqueable. El Estado, por tanto, consagra y garantiza un conjunto de
derechos humanos, que con un envoltorio jurídico reconocen principios éticos
mínimos para una convivencia pacífica. Los textos internacionales de derechos
humanos, que toman especial fuerza tras la Segunda Guerra Mundial, irán dando
forma a un andamiaje de derechos que se consideran estándares de legitimidad
del actuar de los Estados. Estos derechos incorporados a las Constituciones son
denominados derechos fundamentales o derechos constitucionales. Son
considerados hoy piedra angular de los Estados constitucionales de Derecho, su
substancia y contenido esencial.

c. Separación de poderes.
La teoría de la separación de poderes apunta a la configuración de los límites del
poder en los estados contemporáneos. Sin embargo, desde la teoría se le
comenzaron a formular diversas críticas. La finalidad entonces de la separación de
funciones es distribuir el ejercicio del poder político, como también controlar el
ejercicio del poder. Lo que se llama popularmente “poderes” del Estado debe
entenderse como algo descriptivo, de lo que en realidad son las funciones del
Estado.
d. Titularidad poder constituyente en el pueblo
Con esta teoría de la soberanía popular, el pueblo es el soberano, se manifiesta
tanto directamente como por medio de sus representantes. El Estado
Constitucional entonces se vincula con esta característica con la democracias y
sus principios.

1.2. Conceptos de Constitución

1.2.1.- Conceptos: Perspectivas de análisis.


La palabra constitución deriva de la expresión latina “Constitutivo”, que significa
organización, disposición, situación.
El concepto de Constitución puede ser entendido desde distintas perspectivas o
con distintos acentos.
a.- La palabra constitución como Estructura. En este caso, la palabra
“Constitución” alude a una determinada forma de ser de algo. Esto puede ser
usado en un contexto corriente, como también político. En lo político, podrá aludir
a la forma de una institución política.
b. La Constitución como Limitación al Poder. Aquí la palabra tiene un
enfoque particular, refiere a su origen histórico como ley limitadora del poder
soberano, como la Carta Magna, los cuales fueron concebidos en su origen, como
documentos que buscaban obtener una limitación al ejercicio del poder de un
soberano que detentaba poderes absolutos.
c. La Constitución como Pacto Social. Las Constituciones pueden ser
entendidas desde una perspectiva teórica y política como un Pacto Social que da
origen a una sociedad organizada, esto es, a un Estado. La constitución refleja el
pacto originario, el acuerdo político fundamental que da estructura al Estado.
d. La Constitución como Cuerpo Normativo. En este caso, el término
Constitución se utiliza para nombrar al documento que contiene las normas
fundamentales que regulan los aspectos más relevantes de la convivencia política.

1.2.2.- Concepto jurídico y contenido de una Constitución

Durante el curso usaremos el concepto de Constitución para referirnos a la norma


jurídica fundamental que organiza las relaciones de poder en el Estado. Desde
esta perspectiva, la Constitución es un conjunto de reglas que se tienen por
fundamentales y esenciales para preservar la forma política del Estado, su sistema
de principios y reglas, y el sistema de fuente formales del derecho
 Concepto:

La Constitución es la norma jurídica fundamental que regula el Estado, su


gobierno, los derechos fundamentales de las personas y que tiene
supremacía sobre otras normas del ordenamiento jurídico.

 Características de una Constitución entendida como concepto


jurídico:

- Es una norma Jurídica: Se configura como un conjunto de preceptos que


poseen carácter obligatorio. Impone deberes directos a los sujetos privados
y públicos, que deberán ser obedecidos por todos los habitantes del
Estado. Así también consagra derechos y garantías.

- Es la norma fundamental: Dentro de la Jerarquía Normativa Interna de un


Estado, ocupa la posición más alta, y que debe ser respetada por todos los
demás creadores de normas jurídicas. (supremacía Constitucional). Este
principio, denominado “Supremacía Constitucional” se encuentra
consagrado en los arts. 6º y 7º de la CP de 1980, y en el fondo, consiste en
reconocer que no existe, a nivel interno, otra norma de mayor rango
normativo que la Constitución.

- Es la norma fundante: Dentro del sistema de fuentes, es norma de


normas, pues regula la generación de las otras normas del ordenamiento
jurídico. Es la norma a partir de la cual se construye todo el ordenamiento
jurídico. La validez de toda norma, dice Kelsen, depende de si ha sido
dictada en conformidad a otra norma, la cual a su vez, ha de ser de superior
jerarquía. Por ello, que los órganos del Estado resultan obligados no sólo
por la Constitución, sino también “por las normas dictadas conforme a ella”
(art. 7° CPR).

 Características de las normas constitucionales:

 Son dictadas por el poder constituyente, manifestación del poder


soberano.
 Limita los órganos del Estado y sus titulares (distribución de
funciones)
 Es la norma suprema del Estado: Jerárquicamente superior, prima
sobre otras normas del ordenamiento jurídico.
 Contiene principios y normas fundamentales del Estado y las
personas.
 Contenido de las constituciones

Las constituciones contienen una parte orgánica y una dogmática.

-La parte orgánica regula la organización principal del Estado: El sistema


político: las funciones o poderes del Estado, por ejemplo, en la Constitución
Chilena: Presidente de la República, Congreso Nacional, Poder Judicial,
Ministerio Público, Tribunal Constitucional, Tribunales Electorales,
Contraloría General, Fuerzas Armadas, de Orden y Seguridad, Consejo de
Seguridad Nacional, Banco Central, y los órganos integrantes del Gobierno
y Administración Interior (Intendencias, Gobiernos Regionales,
Municipalidades).

-La parte dogmática consagrará principios y derechos fundamentales


(derechos humanos) y sus garantías.

1.3.- Clasificación de las Constituciones

Las Constituciones pueden ser clasificadas desde distintas perspectivas: 7

- Consuetudinarias o escritas
- Flexibles, rígidas o pétreas
- Sumarias o extensas
- Otorgadas, pactadas o democráticas
- normativas, nominales y semánticas

 Consuetudinarias y escritas

Las constituciones escritas son aquellas que constan en un documento que se


ha elaborado expresamente, a fin de regular la organización del Estado, su
gobierno y derechos esenciales de las personas. Son Constituciones escritas
prácticamente la totalidad de las Constituciones del mundo, salvo la Inglesa. Las
Constituciones escritas podrán tener preámbulo o no. El Preámbulo, es una
sección que no está compuesta de artículos, pero es fundamental para poder
conocer la orientación de la Constitución, y además, para efectos de una correcta
interpretación de la misma. Las Constituciones contiene una parte orgánica y una
dogmática, como se indicó.

7
Molina Guaita, Hernán: “Instituciones Políticas”. Fondo publicaciones Facultad de ciencias
jurídicas y sociales, Universidad de Concepción, séptima edición 2001, pp 193-198.
Las constituciones consuetudinarias son aquellas que se expresan
predominantemente por medio de la costumbre; lo que no excluye que la integren
también ciertas normas escritas “satute law”. Ejemplo clásico Inglaterra

 Flexibles, Rígidas y Pétreas

Esta clasificación atiende a la forma en que se modifica la Constitución


Las constituciones flexibles, son aquellas en que sus normas se modifican con
cuórums bajos y mecanismos similares a los de una ley. En un extremo puede ser
modificada de la misma manera en que se crean las leyes.
Las Constituciones rígidas son aquellas en que las normas constitucionales
pueden ser modificadas mediante mecanismos distintos y más agravados que el
que se exige para las leyes. Puede ser por el órgano, el procedimiento o los
quórums.
Las Constituciones pétreas son aquellas que buscan ser inmodificables.
Normalmente algunas normas constitucionales tienen el carácter de pétreas y no
toda la Constitución.

 Sumarias y extensas

Las Constituciones breves o sumarias se limitan a consagrar los principios


fundamentales y las reglas esenciales del Estado, de gobierno y derechos de las
personas.
Las Constituciones extensas o desarrolladas descienden también a detalles y
regula materias que son propias de ley.
Podrá existir un camino intermedio desde luego.

 Otorgadas, pactadas y democráticas

Las Constituciones otorgadas serían aquellas que fueron concedidas por el


Monarca por su propia voluntad, o gobierno autoritario, comprometiéndose a
someterse a ellas.
Las Constituciones pactadas serían por una parte concedidas por el monarca,
pero también sometidas a la aprobación de una asamblea oligárquica o similar.
Las Constituciones democráticas son aquellas que se inspiran en el principio de
soberanía popular, de modo que surgen de su manifestación. Podrá ser ejercido
ese poder constituyente mediante mecanismos representativos o semidirectos.

 Normativas, nominales y semánticas

Clasificación radica en la concordancia entre el texto constitucional y la realidad


social destinada a regir, por tanto no podrá ser hecha solo analizando el texto
constitucional. Es Karl Loewenstein quién la postula. El punto d epartida de esta
clasificación radica en la tesis de que una constitución escrita no funciona por sí
misma una vez que haya sido adoptada por el pueblo, sino qe es lo quelos
detentadores y destinatarios del poder hacen de ella en la práctica (Loewenstein,
2018, p. 217)
Las constituciones normativas son aquellas que coinciden con el proceso
político que se vive en el Estado, ya sea porque la constitución domina el proceso
político o porque el proceso político se somete a las normas de la Constitución. Se
ha dicho que para que una constitución sea viva, debe ser efectivamente vivida
por destinatarios y detentadores del poder, necesitando un ambiente favorable
para su realización. Para que una constitución sea viva no es suficiente entonces
que sea valida en sentido jurídico, sino para que sea real y efectiva, la constitución
debe ser observada por todos y solo en ese caso de habla de una constitución
normativa, pues sus normas dominan el proceso político o el proceso del poder se
adapta a las normas de la constitución y se someten a ella. la Constitución es
como un traje que sienta bien y se lleva realmente”. (Loewenstein, 2018, p. 217)
Se trata de una Constitución realmente vivida por los detentadores y destinatarios
del poder.
Las Constituciones nominales son aquellas jurídicamente validas, pero la
dinámica del proceso político no se adapta a ellas. La situación de hecho no
permite que se respeten las normas constitucionales. Se ha dicho que en tal caso
la constitución carece en realidad de existencia, pues los presupuestos sociales y
económicos existentes , como educación política, clase media independiente, etc,
no permiten una concordancia entre las normas constitucionales y las dinámica da
la vida política. La situación de hecho no permite por ahora la completa
integración, pero la esperanza persiste en la sociedad La función primaria de esta
constitución nominal será educativa y el objetivo es que en un futuro no muy lejano
se convierta en una constitución normativa vivida por la sociedad. Es un traje que
queda grande “el traje cuelga cierto tiempo en el armario y será puesto cuando el
cuerpo nacional haya crecido”. (Loewenstein, 2018, p. 218)
Las Constituciones semánticas son aquellas plenamente aplicadas, pero es
solo la formalización de la existencia de situaciones donde el poder político está
puesto al servicio exclusivo del poder factico, de modo que la constitución no
juega ningún rol en la limitación del poder. Si bien la constitución es plenamente
aplicada su realidad ontológica no es sino la formalización de la existencia de una
situación de poder político en beneficio exclusivo de los detentadores del poder
fáctico, que disponen del aparato coactivo del Estado. En lugar de servir a la
limitación del poder , la constitución s un instrumento para estabilizar y eternizar la
intervención d ellos dominadores fácticos. “el traje no es absoluto un traje, sino un
disfraz”. (Loewenstein, 2018, p. 218 y 219)

1.3.2.-Estructura de la Constitución Chilena de 1980 vigente:

La Constitución chilena se ajusta a un modelo de Constitución Escrita, se


consideraba una constitución rígida por la mayoría de la doctrina (hasta antes de
las modificaciones para dictar una nueva constitución), es más bien sumaria,
aunque no extremadamente, dada las condiciones o deslegitimidad de origen,
puede ser considerada como pactada, aunque ello es debatible.

Su estructura básica es la siguiente:

 No cuenta con Preámbulo, sino que se inicia inmediatamente con el


articulado.

 La parte dogmática está compuesta por los tres primeros


Capítulos:

 El Capítulo I (“Bases de la Institucionalidad”)

- Declara como principios fundamentales sobre los cuales se


estructura el Estado:
1. El principio que todas las personas nacen libres e iguales en
dignidad y derechos.
2. La familia es el núcleo de la sociedad.
3. El principio de subsidiariedad.
4. Los emblemas nacionales como elementos distintivos de la identidad
y unidad nacional.
5. La Forma de Estado.
6. La Forma de Gobierno
7. El principio de soberanía nacional y de ejercicio de la misma por
parte del pueblo.
8. El principio de la soberanía limitada por el respeto a los derechos
fundamentales.
9. El Estado de Derecho y sus elementos principales: supremacía
constitucional, juridicidad y responsabilidad.
10. El principio de probidad.
11. El principio de publicidad y transparencia.
12. El principio que el Terrorismo es por esencia contrario a los
Derechos Humanos.

 El Capítulo II (“Nacionalidad y Ciudadanía”)

- Establece quiénes tienen nacionalidad chilena y cómo se puede perder.


- Establece quiénes son chilenos
- Cómo se suspende el derecho a sufragio y cómo se pierde la
ciudadanía chilena.
- Establece la acción de reclamación por pérdida o desconocimiento de la
nacionalidad ante la Corte Suprema por actos de los órganos
administrativos.

 El Capítulo III (“Derechos y Deberes Constitucionales”)

- Establecido derechos fundamentales reconocidos por el Estado


expresamente en su texto (además de los indicado en el capítulo primero y
la clausula de remisión a tratados internacionales de derechos humanos
ratificados por Chile y vigentes del artículo 5to inciso segundo).
- El art. 19, contiene un listado de 26 numerales.
- También se establecen las acciones constitucionales de protección de
derechos, como son la acción de protección y la acción de amparo
- Se fijan determinados deberes para las personas y para los grupos
intermedios.

 La parte orgánica se encuentra contenido en el resto del texto


constitucional.

- Se refiere a la regulación de una serie de instituciones:


- Capítulo IV: Gobierno
- Capítulo V: Congreso Nacional
- Capítulo VI: Poder judicial
- Capítulo VII: Ministerio Público
- Capítulo VIII: Tribunal Constitucional
- Capítulo IX : Servicio Electoral y Justicia Electoral
- Capítulo X: Contraloría general de la República
- Capítulo XI: Fuerzas armadas, de orden y seguridad pública
- Capítulo XII: Consejo de seguridad nacional
- Capítulo XIII: Banco Central
- Capítulo XIV: Gobierno y administración interior del Estado
- Capítulo XV: Reforma de la constitución y del procedimiento para elaborar
una nueva Constitución de la República.
La Constitución sólo contemplaba mecanismos rígidos de reforma
Constitucional, sin embargo, con fecha 24 de diciembre de 2019 se
publicó en el Diario Oficial la Ley N°21.200 “Modifica el Capítulo XV
de la Constitución Política de la República” con el fin de establecer
un procedimiento para elaborar una nueva Constitución de la
República. “Del procedimiento para elaborar una Nueva Constitución
Política de la República”, artículo 130 a 143..

1.4.- Supremacía constitucional y Sistemas de Justicia Constitucional.

La supremacía Constitucional significa afirmar que la Constitución es la norma


jurídica fundamental del ordenamiento jurídico estatal. Dentro del Estado las
normas tienen distinto valor y jerarquía. La Constitución es concebida como
aquella norma de mayor jerarquía dentro del ordenamiento jurídico del Estado.
Esto se traduce en que la norma de inferior jerarquía debe conformarse con la
superior.
El principio de supremacía de la Constitución representa uno de los pilares
básicos del constitucionalismo.
La primera medida de protección en general estará en la propia constitución, la
que señalará su superlegalidad, estableciendo que ninguna norma o precepto
legal, decreto o reglamento puede prevalecer frente a disposiciones expresas de
la Constitución. Por ejemplo establecer su rigidez, en tanto las normas
constitucionales establecen en general procedimientos más agravados para su
modificación, es decir no podrán ser modificados en los mismos términos que las
leyes ordinarias. Si tuvieran los mismos procedimientos que las leyes ordinarias
dichas constituciones serían flexibles. Desde luego su rigidez no significa que ellas
seas irreformables o pétreas.
Además, es posible contemplar acciones o garantías especiales, por medio de
garantías para sus destinatarios: remedios jurídicos de índole procesal destinados
a reintegrar los preceptos constitucionales violentados, es decir por medio de
acciones constitucionales (protección de principios y derechos fundamentales)
Este mecanismo se combina con los propios de control de constitucionalidad de
las leyes. Los mecanismos de control de constitucionalidad de las leyes pueden
ser diverso, según el tipo de órgano que ejerce el control se distingue entre control
político, control jurisdiccional y control mixto.
Nos detendremos en el tipo de control concentrado V/s el difuso.
El control difuso, opera cuando el resguardo de la supremacía de las normas
constitucionales lo ejercen los propios tribunales de justicia, y en particular se
entrega a los superiores el control de constitucionalidad de las leyes. El control
difuso o jurisdiccional de la constitución se gestó en Estados Unidos, a través de
su Corte Suprema, y se estableció como un precedente en el famoso caso
Marbury versus Madison en 1803. Posteriormente, en 1920 surgirán los dos
primeros tribunales constitucionales europeos se formaron en Chequia y Austria.
El control concentrado lo ejerce un tribunal especial, un tribunal constitucional
llamado a controlar la constitución de las leyes. Se denomina control concentrado
de constitucionalidad por recaer en un órgano especial, el tribunal Constitucionl.
También se denomina mixtos, porque tienen un contenido político y uno técnico,
que deriva de su nombramiento y conformación. Uno de los principales
cuestionamientos a los tribunales constitucionales se refiere a que los jueces
constitucionales aparecen como legisladores negativos, declarando las leyes
inaplicables o incluso inconstitucionales, sin haber sido electos popularmente.
El control de constitucionalidad también se clasifica atendida su oportunidad, es
decir desde la perspectiva de cuándo opera, si antes de la entrada en vigencia de
la ley o una vez que la ley ya es vigente. Puede ser un control a priori o a
posteriori.

El control a priori o preventivo tiene lugar durante la tramitación de los


proyectos legislativos.

El control a posteriori o represivo actúa cuando el texto legal ya se encuentra


vigente.

En chile, con la Constitución Política de 1833, existía un control político radicado


en el congreso, en tanto el art. 164 de la Constitución Política de 1833 establecía
que “Sólo el Congreso, conforme a lo dispuesto en los artículos 40 y siguientes,
podrá resolver las dudas que ocurran sobre la inteligencia de alguno de sus
artículos”.
La Constitución Política de 1925 estableció, por primera vez un control externo al
del Congreso Nacional en su art. 86, incorporando un control judicial de
Constitucionalidad. Se creó el recurso de inaplicabilidad por inconstitucionalidad
de la ley radicado en la Corte Suprema, la que estaba llamada a apreciar si las
leyes se adecuaban a la Carta Fundamental. El recurso de inaplicabilidad por
inconstitucionalidad se constituía como una acción constitucional, esto es, se
solicitaba como acción. Era un control represivo o a posteriori de la
constitucionalidad, pues se verificaba respecto de preceptos legales vigentes.
Tenía efectos limitados y no erga omnes, en la medida que la sentencia
pronunciada por la Corte Suprema sólo producía efectos en la gestión de que se
trataba y respecto de las partes involucradas en ésta.
En Chile, la Constitución del 80 inicialmente estableció un sistema mixto. Por un
lado, el control a priori estaba radicado en un tribunal Constitucional. Sin embargo,
hasta 2005 el control a posteriori estaba radicado en la Corte Suprema.
El constituyente de 1980 estableció entonces un Tribunal Constitucional que
originalmente solo intervenía en la formación de nuevas normas.
La ley Nº 20.050, publicada en el Diario Oficial de 26 de agosto de 2005,
introducen diversas modificaciones a la Constitución Política de 1980, entre ellas,
respecto del Tribunal Constitucional, viene a concentrar en este órgano en control
a priori y a posteriori de la constitucionalidad de las leyes, pasando por tanto el
conocimiento y fallo de los recursos de inaplicabilidad desde la Corte Suprema al
Tribunal Constitucional. Además, se confía al Tribunal Constitucional la posibilidad
de declarar inconstitucional, con efectos generales, un precepto legal que
previamente haya sido declarado inaplicable, ya sea procediendo de oficio o
mediante el ejercicio de una acción pública.

1.5.- Poder Constituyente: Clases. Límites.

El poder constituyente es la voluntad originaria, extraordinaria y soberana de una


comunidad que dicta las normas fundamentales para la organización y
funcionamiento de su convivencia política.
El poder constituyente, es manifestación del poder soberano, es quien tiene la
capacidad o facultad para establecer o dictar una Constitución. Puede ser
originario o derivado.

La doctrina del poder constituyente fue desarrollada por Emmanuel Sieyés, a fines
del siglo XVIII, en 1789, en su obra ¿Qué es el Estado?. Para Sieyés, el poder
constituyente es un poder soberano, no está sujeto a ninguna norma previa, es un
poder pre-jurídico que actúa libre de toda forma y control.

Se distingue entonces entre “poder constituyente” y “poderes instituidos” o


“constituidos”. Los poderes constituidos son los que establece y regula la
Constitución en su texto. El poder constituyente es el que redacta esa constitución.
A su vez el poder constituyente puede ser originario o derivado.

Poder constituyente originario: Es aquel que actúa en la creación de la primera


Constitución o bien cuando se ha producida una ruptura constitucional, o cuando
opera todo el cuerpo social.
El poder constituyente originario tiene un carácter fundacional, como un estatuto
que regula la sociedad política y los poderes constituidos del Estado desde cero.
Crea una nueva Constitución.
El poder constituyente originario es aquel que permite que éste funde o vuelva a
refundar su orden jurídico luego de un proceso revolucionario o de un Golpe de
estado, o de una decisión pacífica del cuerpo político de una sociedad.8

Poder constituyente derivado: “Es aquel que está establecido en la propia


constitución, la que señala el órgano constituyente, el procedimiento y los
quórums.”
Es una continuidad jurídica constitucional, no existen rupturas. El poder
constituyente derivado se encuentra creado y regulado por la constitución vigente,
tiene limitaciones formales y materiales
La mayor parte de las constituciones excluyen la posibilidad de regular su propio
reemplazo. Esta situación genera un dilema legal y político.

 ¿Está sometido a límites el poder Constituyente originario?


Si no hay norma jurídica anterior y valida ¿tiene límites o es un poder absoluto?
El poder constituyente originario no estaría sometido a ninguna norma jurídica
positiva al interior del Estado en teoría, y a primera vista. Pero el Estado ya existía,
y se comprometió a nivel internacional ¿esos compromisos no son límites al poder
soberano del constituyente originario? ¿Habrán principios subsistentes pese a que
no existe norma que limite al poder originario?

Existirían principios que limitarían el poder constituyente originario, los derechos


humanos. Los derechos humanos serían la esfera de lo indecidible, dirían lo que
no puede decidir ni aún el poder constituyente dentro de un Estado democrático
de derecho.

8
Se sostiene por una parte que un poder constituyente derivado no podría dar lugar a una nueva
constitución; en cambio para otros sí sería posible. ZUÑIGA Urbina, Francisco. Nueva Constitución
y Operación Constituyente: Algunas notas acerca de la reforma constitucional y de la Asamblea
Constituyente. Estudios Constitucionales, Año 11, N° 1, 2013
En tal sentido Luigi Ferrajoli explica las limitaciones de la soberanía interna, en el
Estado, señalando que tendrían su origen en el nacimiento del Estado liberal, con
la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789. Entonces, el
principio de “división de poderes”, el principio de “legalidad” y los derechos
humanos limitarían el poder soberano y reconfigurarían el primer ideario de
soberanía que justificaba un poder absoluto en lo interno.
El poder constituyente derivado tiene los límites jurídicos que establece la
Constitución para la formación del órgano constituyente. El órgano constituyente
una vez conformado tiene el poder constituyente es manifestación del poder
soberano. ¿Qué lo limita? Se sostienen que también estaría limitado por las reglas
pre-establecidas y por principios y derechos fundamentales.

1.6.- Reforma constitucional de la Constitución Política de la República de


Chile.

Las reformas constitucionales es la facultad de modificar el texto constitucional. El


poder constituyente derivado opera a través de reformas constitucionales
parciales, con mayor o menor profundidad, pero teóricamente podría darse una
reforma constitucional total, dando paso a una nueva constitución.
La constitución de 1980 contemplaba procedimientos de reforma agravados, es
decir con quórums altos, calificándose de una constitución rígida.
Regulado actualmente en los artículos 127 y ss de la Constitución, se establece
que los proyectos de reforma constitucional pueden ser iniciados por mensaje del
Presidente de la República o por moción de cualquiera de los miembros del
Congreso Nacional. El proyecto de reforma necesitará para ser aprobado en cada
Cámara el voto conforme de las 3/5 partes de los diputados y senadores en
ejercicio; pero se establece un quorum distinto si la reforma recayere sobre los
capítulos I, III, VIII, XI, XII o XV, necesitará, en cada Cámara, la aprobación de las
2/3 de los diputados y senadores en ejercicio.
La Constitución contemplaba aquí un plebiscito. Establece en su artículo 128 que
si el Presidente de la República rechazara totalmente un proyecto de reforma
aprobado por ambas Cámaras y éstas insistieren en su totalidad por las dos
terceras partes de los miembros en ejercicio de cada Cámara, el Presidente
deberá llamar a un plebiscito dirimente.

Además regula otro caso de discrepancia, estableciendo que si el Presidente


observare parcialmente un proyecto ya aprobado por ambas Cámaras, las
observaciones se entenderán aprobadas con el voto 3/5 o 2/3 partes de los
miembros en ejercicio de cada Cámara, según corresponda.
En caso tal caso se devolverá al Presidente la parte del proyecto que haya sido
objeto de insistencia para su promulgación, salvo que éste convoque a un
plebiscito respecto delas cuestiones en desacuerdo.
El artículo 129 regula dicho plebiscito.

Proceso constituyente en Chile


La constitución de 1980 contemplaba procedimientos de reforma, pero no
contemplaba un procedimiento para elaborar una nueva constitución.
Hoy, luego de la última modificación el Capítulo XV regula “Reforma de la
Constitución y del Procedimiento para Elaborar una Nueva Constitución de la
República”
Con fecha 24 de diciembre de 2019 se publicó en el Diario Oficial la Ley N°21.200
“Modifica el Capítulo XV de la Constitución Política de la República” con el fin de
establecer un procedimiento para elaborar una nueva Constitución de la
República. “Del procedimiento para elaborar una Nueva Constitución Política de la
República”, artículo 130 a 143.
El artículo 130 establece el llamado Plebiscito de entrada, que reguló que el
presidente de la República convocara mediante un decreto supremo exento a un
plebiscito nacional. Asimismo, estableció las cédulas electorales, indicando que la
primera contendrá la siguiente pregunta: “¿Quiere usted una Nueva
Constitución?”, la segunda cédula contendrá la pregunta: “¿Qué tipo de órgano
debiera redactar la Nueva Constitución?” contemplándose dos alternativas,
Convención Mixta Constitucional o Convención Constitucional.
En el plebiscito ya realizado, se determinó por mayoría que se iniciaba un proceso
constituyente y que el órgano sería una Convención Constitucional, elección ya
realizada según lo indicado en el artículo 131.
El artículo 132 establece los requisitos e incompatibilidades de los candidatos, así
indica que podrán ser candidatos a la Convención.
El artículo 133 referente al funcionamiento de la Convención, señala que dentro de
los tres días siguientes a la recepción de la comunicación, el Presidente de la
República convocará, mediante decreto supremo exento, a la primera sesión de
instalación de la Convención, señalando además, el lugar de la convocatoria. La
Convención deberá constituir una secretaría técnica, la que será conformada por
personas de comprobada idoneidad académica o profesional. Corresponderá al
Presidente de la República, o a los órganos que éste determine, prestar el apoyo
técnico, administrativo y financiero que sea necesario para la instalación y
funcionamiento de la Convención.
El artículo 135 entre otras disposiciones especiales señala que la Convención no
podrá intervenir ni ejercer ninguna otra función o atribución de otros órganos o
autoridades establecidas en esta Constitución o en las leyes. Mientras no entre en
vigor la Nueva Constitución en la forma establecida en este epígrafe, esta
Constitución seguirá plenamente vigente, sin que pueda la Convención negarle
autoridad o modificarla.
El artículo 136 dispone que se podrá reclamar de una infracción a las reglas de
procedimiento aplicables a la Convención, contenidas en este epígrafe y de
aquellas de procedimiento que emanen de los acuerdos de carácter general de la
propia Convención. En ningún caso se podrá reclamar sobre el contenido de los
textos en elaboración.
El artículo 137 indica que para la prórroga del plazo de funcionamiento de la
Convención, se deberá redactar y aprobar una propuesta de texto de Nueva
Constitución en el plazo máximo de nueve meses, contado desde su instalación, el
que podrá prorrogarse, por una sola vez, por tres meses.
El artículo 141 señala entre otras disposiciones que la Convención Constitucional
estará integrada por 155 ciudadanos electos especialmente para estos efectos.
El artículo 142 sobre el Plebiscito Constitucional establece lo siguiente:
Comunicada al Presidente de la República la propuesta de texto constitucional
aprobada por la Convención, éste deberá convocar dentro de los tres días
siguientes a dicha comunicación, mediante decreto supremo exento, a un
plebiscito nacional constitucional para que la ciudadanía apruebe o rechace la
propuesta. El sufragio en este plebiscito será obligatorio para quienes tengan
domicilio electoral en Chile.
El ciudadano que no sufragare será penado con una multa a beneficio municipal
de 0,5 a 3 unidades tributarias mensuales. No incurrirá en esta sanción el
ciudadano que haya dejado de cumplir su obligación por enfermedad, ausencia del
país, entre otras causales.
El proceso de calificación del plebiscito nacional deberá quedar concluido dentro
de los treinta días siguientes a la fecha de éste. La sentencia de proclamación del
plebiscito será comunicada dentro de los tres días siguientes de su dictación al
Presidente de la República y al Congreso Nacional.
Si la cuestión planteada a la ciudadanía en el plebiscito nacional constitucional
fuere aprobada, el Presidente deberá, dentro de los cinco días siguientes a la
comunicación de la sentencia convocar al Congreso Pleno para que, en un acto
público y solemne, se promulgue y se jure o prometa respetar y acatar la Nueva
Constitución Política de la República. Dicho texto será publicado en el Diario
Oficial dentro de los diez días siguientes a su promulgación y entrará en vigencia
en dicha fecha. A partir de esta fecha, quedará derogada la presente Constitución
Política de la República, cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado se
encuentra establecido en el decreto supremo Nº 100, de 17 de septiembre de
2005.

Referencias Bibliográficas

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Algunas notas acerca de la reforma constitucional y de la Asamblea Constituyente.
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