Está en la página 1de 2

CONCEPT

Investigación:

El fuego
Virus: Es una reacción química exotérmica de oxidación que
1. En biología, un virus es una entidad microscópica que consiste involucra la liberación de calor, luz y productos de
en material genético (ADN o ARN) rodeado por una capa de combustión. En términos más simples, es una reacción
proteína. Los virus no pueden llevar a cabo funciones vitales por sí en la que un material combustible se combina con
mismos y dependen de infectar células hospedadoras para oxígeno en el aire para liberar energía en forma de calor
reproducirse. y luz. El fuego es una fuerza natural que ha sido utilizada
por los seres humanos durante miles de años para
2. En informática, un virus es un programa malicioso diseñado cocinar, calentarse y realizar otras actividades, pero
para replicarse y propagarse a través de sistemas informáticos. también puede ser peligroso si no se controla
Estos programas pueden dañar o tomar el control de un adecuadamente.
dispositivo o red sin el consentimiento del usuario.
Metafóricamente :
-La Pasión: El fuego a menudo se asocia con la pasión
Anomalía: ardiente. Puede representar la intensidad de las
-Cambio o desviación respecto de lo que es normal, regular, emociones, como el amor apasionado o la dedicación
natural o previsible. apasionada a un objetivo.
-Desviación o discrepancia de una regla o de un uso. -El deseo: Al igual que una llama que arde con fuerza, el
-Defecto de forma o de funcionamiento. fuego puede simbolizar el deseo intenso o la lujuria.
-Malformación, alteración biológica, congénita o adquirida. -Destrucción: En un sentido metafórico, el fuego también
puede representar la capacidad de destruir y arrasar con
todo a su paso, lo que puede relacionarse con la ira.

Furia
La furia es una emoción que se expresa a través del resentimiento o la irritabilidad. Sus efectos físicos incluyen aumento de la presión sanguínea y
de los niveles de adrenalina
Sinonimo: Ira. Sentimiento de enfado muy grande y violento. Violencia de los elementos de la naturaleza. Freud propuso que la ira era una
expresión débil de impulsos y conductas agresivas. Planteó que todos los humanos tienen un instinto agresivo que llevan a la persona a necesitar
expresar su ira.
Existen diferentes tipos de ira:
Ira reactiva: es una respuesta inmediata a un insulto, amenaza, ofensa, que se recibe o percibe como algo injusto. Ira pasivo-agresiva: implica
atacar indirectamente a la otra persona, sabotearla o hablar mal sobre ella a sus espaldas. Ira evitativa: consiste en actuar como si todo estuviera
bien, cuando realmente no lo está.
Furioso: que tiene gran violencia y fuerza.
ÍGNEA FURIA
En un día apacible, donde el alma reposa en la serenidad de la rutina; todo parece estar en su lugar,
hasta que un estímulo específico, a menudo trivial, se convierte en la chispa que desencadena el
caos. Puede ser una palabra mal interpretada, una mirada despectiva o una acción que desafía la
paciencia. Ahí se esconde, en el rincón más oscuro de la psique humana, un fenómeno singular, a
veces confundido con una chispa. El ataque de ira, un fuego interno que despierta y quema todo a su
paso, consume la lógica y la empatía, dejando solo cenizas en su estela. Las palabras se convierten
en brasas ardientes que hieren a las personas, y las acciones pueden ser destructivas como un
incendio incontrolable, que se propaga tal como un virus implacable, infectando cada célula
nerviosa, sin preocuparse en corroer al huésped.
El corazón late con fuerza, como un tambor frenético en medio de una tormenta.
La sangre hierve y las manos tiemblan, incapaces de contener la marea que esta a punto de
desbordarlo todo. El rostro se torna escarlata, los músculos se tensan y el aliento se vuelve
entrecortado. El humo de la ira envuelve los pensamientos, nublando la visión y distorsionando la
realidad. Sumergido en una especie de trance, donde la lucha por el control parece inútil.
Con el tiempo, la tormenta se calma, pero el daño ya está hecho. Las relaciones quedan fracturadas,
los objetos destrozados, y el arrepentimiento llega como una ola de conciencia, pero a menudo es
demasiado tarde.
Una anomalía emocional que pone a prueba el autocontrol dejando cicatrices imborrables a su paso,
que tal vez, al final, no valían la pena.

También podría gustarte