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EDUCACIÓN PERMANENTE Y TRANSFORMACIONES

La educación se reconoce como un proceso continuo en la vida


humana que trasciende las instituciones educativas. En las últimas
décadas, la "Educación Permanente" ha ganado importancia,
impulsada por la revolución científica y tecnológica, cambios en la
producción, y una mayor participación social. Los cambios
significativos en la sociedad han aumentado la necesidad de los
adultos de adaptarse a múltiples fuentes de información, buscar
capacitación continua en organizaciones complejas e integrarse en
grupos sociales para participar en la transformación de las
instituciones. Este enfoque desafía la idea tradicional de que la
educación es para la juventud y, en su lugar, abraza la noción de
que el ser humano está en constante búsqueda de su desarrollo,
rompiendo con el "mito de la madurez" y su asociación con la
educación adaptativa.
EDUCACIÓN PERMANENTE
El concepto de Educación Permanente se extiende más allá de las
aspiraciones individuales en un mundo en constante cambio. Se
plantea como una necesidad en las organizaciones sociales,
incluyendo las instituciones de salud, para impulsar programas de
desarrollo.
A pesar de que se ha reconocido la importancia de la Educación
Permanente en el sector de la salud, su implementación ha
enfrentado obstáculos. En 1975, se identificó una falta de
actividades de educación continua en las instituciones de salud, en
parte debido a la falta de apoyo y facilitación del proceso por parte
del sector de la salud.
A pesar de los esfuerzos en la región, la Educación Permanente en
el ámbito de la salud ha mostrado problemas importantes,
incluyendo:
 Dispersión y falta de continuidad en las actividades de
capacitación.
 Falta de alineación con los objetivos de las políticas de salud.
 Dependencia de recursos externos y escasa priorización.
 Limitada cobertura y alcance geográfico.
 Falta de coherencia entre la doctrina educativa y la
implementación concreta de los programas.
Estos desafíos subrayan la necesidad de una evaluación y mejora
en la implementación de programas de Educación Permanente en
el ámbito de la salud.
EPS
La Educación para la Salud (EpS) combina los conceptos de
educación y salud, pero no se trata de una simple suma aritmética
de ambos términos. Cada uno de estos conceptos tiene sus propias
raíces históricas y sociales en la estructura política y social de una
nación.
Tanto la educación como la salud tienen una larga historia que se
remonta a los orígenes de la humanidad. La educación es una
función social fundamental que ha estado presente a lo largo de la
historia del ser humano. Del mismo modo, la salud y la enfermedad
son procesos vitales que están influenciados por factores sociales,
económicos y laborales, y están relacionados con la participación
en la sociedad y el acceso a recursos y servicios.
Ambas disciplinas han experimentado revoluciones filosóficas y
sociales que han dado forma a su desarrollo y evolución a lo largo
del tiempo.
La educación y la salud solían desarrollarse como disciplinas
separadas, pero a lo largo del tiempo, comenzaron a converger y a
influirse mutuamente. Durante el siglo XVIII, la medicina cambió su
enfoque en la causalidad de las enfermedades, pasando de
explicaciones basadas en creencias mágicas a considerar factores
naturales y biológicos. Sin embargo, el conocimiento médico de la
época no permitía aún la integración completa de estos
conocimientos con aspectos socioeconómicos y psicológicos que
influyen en la salud. Al final del siglo XVIII, se comenzaron a
considerar factores externos relacionados con el trabajo, la
vivienda, la calidad del agua y las condiciones de vida como
determinantes de la salud. Este cambio en la perspectiva condujo al
surgimiento del modelo médico-social y la epidemiología. La
epidemiología, junto con las ciencias sociales, reveló la importancia
de los factores sociales en la salud y permitió la incorporación de
estas disciplinas en la medicina. Esto llevó a un enfoque más
amplio de la determinación social de la salud y a la aparición de la
Educación para la Salud como una disciplina que integra la
educación y la salud en beneficio de la comunidad.
En resumen, la articulación de la educación y la salud se ha
desarrollado a lo largo del tiempo, y la Educación para la Salud
juega un papel clave en la integración de ambas disciplinas para
promover el bienestar de la comunidad.
Grandes períodos en la evolución de la EPS:
Primer Período (Clásico): En esta etapa, se consideraba que la EpS
implicaba la transmisión de información con una intención
preceptiva. Se basaba en la idea de que los profesionales de la
salud eran los únicos con conocimientos necesarios y que los
individuos debían aceptar y cumplir sus indicaciones. Se centraba
en el cambio de comportamientos y estilos de vida, y se apoyaba en
modelos educativos basados en creencias en la salud y en la
comunicación persuasiva.
Segundo Período: Reconociendo las limitaciones de los enfoques
anteriores, este período se enfoca en la influencia de los factores
sociales, ambientales y económicos en las condiciones de salud de
las distintas clases sociales. Se considera un modelo político,
económico, ecológico y crítico, que busca reducir las desigualdades
sociales relacionadas con la salud. En este enfoque, la EpS se
concibe como un recurso que va más allá de la mera transmisión de
conocimientos; se enfoca en el desarrollo de la conciencia y la
participación de las personas en su contexto de vida. Se promueve
una EpS participativa, crítica y emancipadora, con énfasis en la
Educación Popular, que busca la interacción dialéctica entre las
personas y su realidad, así como el desarrollo de una conciencia
social.
Este segundo período se fundamenta en una visión crítica y
socioconstructivista, considerando que la salud y la enfermedad son
fenómenos que forman parte de un proceso histórico y que
trascienden lo puramente biológico.
Consideraciones Finales:
La Educación para la Salud (EpS) ha evolucionado a lo largo de la
historia, adoptando diversas perspectivas ideológicas y
metodológicas. Estas perspectivas pueden ir desde un enfoque que
se centra en las conductas individuales hasta otro que prioriza la
participación comunitaria y el cambio social. La EpS puede ser vista
como la transmisión pasiva de conocimientos para abordar
problemas de salud concretos o como un elemento central para el
desarrollo nacional en salud.
La forma en que se conceptualice la EpS tiene implicaciones
significativas en la práctica educativa en salud y en la formación de
profesionales en este campo. Comprender los modelos utilizados en
la EpS y analizar las concepciones subyacentes es esencial para
comprender la naturaleza del acto educativo, sus objetivos y
finalidades, así como el grado de empoderamiento de los
educandos.
En el ámbito de la formación de recursos humanos, es fundamental
considerar la postura teórico-conceptual desde la cual se aborda la
EpS. Esta postura determina los componentes curriculares, los
principios, los contenidos y las estrategias de aprendizaje
relevantes en la formación de profesionales en el campo de la EpS.
Ignorar las características y argumentaciones paradigmáticas en la
interpretación de la educación en salud puede llevar a tropiezos y
errores. La mezcla de diferentes modelos educativos sin una base
sólida puede resultar en enfoques pragmáticos y eclecticismos que,
en lugar de ser propuestas efectivas, tienen un valor limitado.
En fin, la EpS es una disciplina que ha evolucionado a lo largo del
tiempo y cuya comprensión y aplicación requieren una base teórica
sólida y una consideración cuidadosa de las perspectivas que la
sustentan. La EpS no solo implica la transmisión de información,
sino que también debe ser vista como un medio para empoderar a
las personas y promover la salud individual y colectiva.

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