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Constitucional

Curso 2023-24
Nombres y apellido: Pablo Adrián Lupu

PRÁCTICA: La Constitución como Fuente del Derecho


SENTENCIA STC 37/2012, de 19 de marzo

A) Esta sentencia resuelve una cuestión de inconstitucionalidad planteada por un


Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Elche, contra un artículo de la Ley sobre el
Tráfico, Circulación de Vehículo a Motor y Seguridad Vial, tal como ha sido interpretado
con carácter vinculante por distintas Sentencias de la Sala de los Contencioso–
Administrativo del Tribunal Supremo (de los años 2004 y 2008) por su posible
contradicción con el art. 9.3 C.E. Al resolver el TC nos recuerda la doctrina vinculante
sobre los principios del Ordenamiento español.

Preguntas:

1. Explique brevemente el conflicto que da lugar al caso.

El conflicto que da lugar al caso se centra en una cuestión de inconstitucionalidad planteada


por un Juzgado de los Contencioso-Administrativo de Elche. El Juzgado cuestiona a
constitucionalidad de un artículo específico de la Ley sobre el Tráfico, Circulación de
Vehículo a Motor y Seguridad Vial. La base de la controversia radica en la interpretación de
dicho artículo, que ha sido considerado viinculante, por varias Sentencias de la Sala de los
Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, emitidas en los años 2004 y 2008.

El Juzgado de Elche defiende que la interpretación dada al artículp por estas Sentencias del
Tribunal Supremo podría estar en contradicción con el artículo 9.3 de la Constitución
Española (C.E.), y por lo tanto, plantea una cuestión de inconstitucionalidad al Tribunal
Constitucional (TC). El artículo 9.3 de la CE establece el principio de interdicción de la
arbitrariedad de los poderes públicos y la obligación de estos de someterse a la ley.

2. Lea los fundamentos jurídicos del 2º al 7º y responda razonadamente las


siguientes cuestiones:

a) Lea el fundamento jurídico 2º. ¿Se puede plantear ante el TC una cuestión
de inconstitucionalidad contra una interpretación legal de un precepto
establecido por la jurisprudencia del TS (¿doctrina legal Vinculante del
recurso en interés de ley del artículo 100?7 de la LJCA y para qué vale.
Enúncielas.

El fundamento jurídico 2º nos proporciona información sobre el origen de la cuestión de


inconstitucionalidad y menciona la interpretación vinculante por distintas Sentencias de la
Sala de los Contencioso–Administrativo del Tribunal Supremo (TS) en relación con un
artículo de la Ley sobre el Tráfico, Circulación de Vehículo a Motor y Seguridad Vial.
Ahora, contestando a la pregunta, la respuesta es afirmativa. Aunque el Tribunal Supremo,
emite jurisprudencia que es vinculante para los demás tribunales inferiores, incluyendo los
Juzgados de lo Contencioso-Administrativo, el Tribunal Constitucional (TC) puede ser
llamado a pronunciarse sobre la constitucionalidad de dicha interpretación. El TC tiene la
competencia para revisar y decidir sobre la constitucionalidad de las normas, incluso
cuando estas han sido interpretadas por el TS.

El artículo 100.7 de la Ley de Jurisdicción Contencioso-Administrativa (LJCA) establece el


recurso en interés de ley, y se puede interponer ante el TS cuando existen sentencias
contradictorias de distintos Tribunales Superiores de Justicia o Audiencias Provinciales
sobre la interpretación de una norma, y se busca unificar criterios.

El objetivo del recurso en interés de ley es fijar una doctrina legal vinculante para los
tribunales inferiores en casos similares. Si el TS admite el recurso, su decisión crea una
doctrina legal que debe ser seguida por los tribunales inferiores al resolver casos similares.
Este mecanismo busca garantizar la coherencia y uniformidad en la interpretación y
aplicación del derecho.

En el contexto del fundamento jurídico 2º, la cuestión de inconstitucionalidad planteada ante


el TC podría relacionarse con la posible contradicción entre la interpretación vinculante del
TS y la Constitución, por lo que lleva al TC a ejercer su función de control de
constitucionalidad y garantizar la coherencia del ordenamiento jurídico.

b) 3ª ¿Dónde está el problema de constitucionalidad?: ¿en la concreta y


obligatoria interpretación de la Ley de Seguridad Vial que se impone para
los tribunales inferiores en este caso, o en la capacidad del TS para
establecer obligatoriamente una interpretación vinculante? ¿cuáles son
los principios constitucionales vulnerados?

Parece que el problema de constitucionalidad que se puede apreciar es la posible


contradicción entre la interpretación vinculante establecida por el Tribunal Supremo (TS) en
relación con un artículo de la Ley de Seguridad Vial y los principios constitucionales,
especialmente el principio de igualdad consagrado en el artículo 14 de la Constitución
Española.

En la concreta y obligatoria interpretación de la Ley de Seguridad Vial, el TC podría


cuestionar si la interpretación específica y vinculante de la Ley de Seguridad Vial realizada
por el Tribunal Supremo se ajusta a los principios constitucionales, especialmente el
principio de igualdad.

Mientras que en el caso de la capacidad del TS para establecer obligatoriamente una


interpretación vinculante, de igual manera hay una posibilidad de que podría
cuestionarse la capacidad del Tribunal Supremo para establecer de manera obligatoria una
interpretación vinculante que afecte a los tribunales inferiores. Esto podría plantear
interrogantes sobre los límites de esa capacidad y su conformidad con la distribución de
competencias y principios constitucionales.

En cuanto a los principios constitucionales vulnerados, serían los siguientes.


Primero, estaría el Principio de Igualdad (artículo 14 CE). Si la interpretación vinculante
afecta de manera desigual a ciertos grupos o situaciones, podría vulnerar el principio de
igualdad. Después, encontramos el Principio de Legalidad (artículo 9.3 CE). Aquí, podría
cuestionarse si la interpretación vinculante del TS se ajusta a los principios generales del
ordenamiento jurídico y si respeta los límites impuestos por la Constitución. Y el tercer
principio es el de Separación de Poderes. En este caso, si se argumenta que la capacidad
del TS para establecer una interpretación vinculante excede los límites del poder judicial y
afecta la esfera de otros poderes del Estado.

c) ¿quién tiene capacidad para determinar que una concreta doctrina legal
vinculante del recurso en interés de ley es o no constitucional? Se
recomienda leer primero el fundamento jurídico 12º.

Para determinar la constitucionalidad de una concreta doctrina legal vinculante del recurso
en interés de ley, la capacidad recae en última instancia en el Tribunal Constitucional (TC).
El fundamento jurídico 12º ofrece las razones y argumentos específicos y necesarios que
respaldan la decisión del Tribunal Constitucional en el caso particular. Aun así, es muy
importante destacar que el TC es el órgano supremo encargado de interpretar y velar por el
cumplimiento de la Constitución Española.

3. Lea el fundamento jurídico 8ª, y responda razonadamente la siguiente cuestión. ¿qué


significa el principio de seguridad jurídica para el TC?

Después de leer el fundamento jurídico 8ª, se puede explicar con cierto conocimientos el
principio de seguridad jurídica para el TC. Es un concepto fundamental en el ámbito jurídico
que implica la certeza y previsibilidad en la aplicación de las normas legales. Para el TC, el
principio de seguridad jurídica es esencial en varios aspectos. En primer lugar, encontramos
la Interpretación Coherente. El TC busca interpretar y aplicar las normas legales de manera
coherente y consistente a lo largo del tiempo. Esto contribuye a evitar interpretaciones
arbitrarias o cambiantes que puedan generar incertidumbre en el orden jurídico. En segundo
lugar, estaría la Protección de Derechos Fundamentales. La seguridad jurídica garantiza la
protección de los derechos fundamentales de los ciudadanos al ofrecer un marco legal claro
y estable. Los ciudadanos deben poder confiar en la estabilidad de las normas y en la
coherencia en su aplicación. Después, evitar Sorpresas Legales. El TC siempre intenta
evitar sorpresas legales al garantizar que las interpretaciones y aplicaciones de las normas
legales sean predecibles. Esto permite que los individuos y entidades conozcan las reglas
del juego y ajusten su comportamiento de manera acorde y razonable. Y último, contribuir a
la Estabilidad Social: La seguridad jurídica es un pilar de la estabilidad social y del Estado
de Derecho. Un orden jurídico predecible y coherente contribuye a la paz social y a la
confianza en las instituciones.

4. Por último y en relación con el voto particular del Magistrado Pérez Tremps sobre la
interpretación dada por la sentencia sobre el principio de seguridad jurídica, ¿qué otros
elementos esenciales de este principio a porta el voto particular?

El principio de seguridad jurídica se refiere a la certeza y previsibilidad de la aplicación de


los procedimientos legales. Los principios principales de este principio son los siguientes:
Ley y previsibilidad: Las leyes deben ser claras y fáciles de entender para que las personas
tengan la oportunidad de ver las consecuencias de sus acciones. Requisitos legales de
estabilidad del sistema: evitar cambios repentinos e inesperados en la ley y garantizar la
estabilidad del sistema legal. : Los ciudadanos deben confiar en que el sistema legal no
cambiará repentinamente y que se protegerán las expectativas razonables.
PREGUNTAS DE AUTO EVALUACIÓN:
1. ¿Cuáles son las garantías de la supremacía de la constitución que se establecen en
nuestro Texto fundamental?

La supermacía de la Constitución es un principio fundamental en muchos sistemas jurídicos,


incluido el español. En el nuestro Texto Fundamental, hay varias garantías de la supermacía
de la Constitución establecidas en la propia Constitución de 1978. A continuación, se
destacan algunas de las principales garantías que refuerzan la posición de la Constitución
como norma suprema. Una de las garantías más importantes es la jerarquía normativa. La
Constitución establece en el artículo 1.1 que se fundamenta en la indisoluble unidad de la
Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza
el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran, y la solidaridad
entre ellas. Además, reconoce que la soberanía nacional reside en el pueblo español, del
que emanan los poderes del Estado. Después, estaría el control de Constitucionalidad. En
este caso, el TC en España tiene la función específica de controlar la constitucionalidad de
las leyes y demás disposiciones normativas. Cualquier individuo puede interponer un
recurso de inconstitucionalidad ante el TC, solicitando que se declare la inconstitucionalidad
de una norma. Otra garantía que podemos nombrar es la supermacía en el Ordenamiento
Jurídico. Aquí, el artículo 9.1 de la Constitución establece que los ciudadanos y los poderes
públicos están sujetos a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico. Esto refuerza la
posición central de la Constitución en el sistema legal. Y por último, se debe mencionar el
respeto a los derechos fundamentales. Al igual que todas las constituciones, la española
garantiza derechos fundamentales y libertades públicas en su Título I. En ningún memento,
ninguna ley, disposición normativa o astuación de los poderes deben ir en contra de los
derechos que son reconocidos por la Constitución. Los tribunales respetan estos derechos
importantes y pueden manifestar nulas las disposiciones que los vulneren.

2. ¿cuál es el sistema de control de constitucionalidad que se establece en la


Constitución española de 1978?

El sistema de control de constitucionalidad establecido en la Constitución Española de 1978


se basa principalmente en el control judicial a través del Tribunal Constitucional (TC). Aquí
se presentan los elementos clave de este sistema. En primer lugar, es indispensable
mencionar el Tribunal Constitucional. El TC es el órgano supremo encargado del control de
constitucionalidad en España. Se configura como un tribunal independiente y autónomo con
la función específica de interpretar y garantizar el cumplimiento de la Constitución.

En segundo lugar, el TC tiene jurisdicción para conocer y decidir sobre las cuestiones de
constitucionalidad que le sean planteadas. Puede ejercer tanto un control abstracto como un
control concreto. Posteriormente, el TC puede realizar un control abstracto de las normas,
es decir, evaluar la constitucionalidad de leyes, reglamentos y otras disposiciones
normativas en abstracto, sin conexión directa con un caso concreto. Después de lo dicho
anteriormente, además de eso, puede realizar un control concreto en el contexto de casos
específicos que le sean sometidos. Este control se activa cuando se plantea una cuestión
de constitucionalidad en el curso de un proceso judicial ordinario, y el tribunal ordinario
remite la cuestión al TC para su resolución. Más tarde, el TC puede conocer de recursos de
inconstitucionalidad presentados por determinados sujetos, como el Gobierno, el Defensor
del Pueblo, 50 diputados, 50 senadores, y los órganos colegiados ejecutivos de las
Comunidades Autónomas. Estos recursos tienen como objetivo impugnar leyes y otras
disposiciones por considerarlas contrarias a la Constitución. Seguidamente, hay que
destacar que el TC puede conocer de incidentes de ejecución de sus propias sentencias,
garantizando así que las resoluciones del tribunal se cumplan de manera efectiva.
Finalmente, la Constitución tiene como finalidad establecer la supremacía de sus
disposiciones sobre cualquier otra norma del ordenamiento jurídico. Por lo tanto, cualquier
norma contraria a la Constitución carece de validez.

3. Diferencias y semejanzas entre los sistemas difusos y concentrados de control de


Constitucionalidad?

Cabe mencionar que los sistemas de control son de dos tipos: sistemas difusos y sistemas
concentrados. Estas clasificaciones se realizan conforme la distribución de la función de
control entre diversos tribunales. Para empezar, tanto los sistemas difusos como los
concentrados se diferencian en lo siguiente. Primero, en los difusos, todos los tribunales
(incluyendo a los ordinarios que encuentran la solución de casos civiles y penales) ejercen
el control de constitucionalidad. Después, cualquier juez posee la potestad de plantear y
decidir cuestionar la constitucionalidad durante el curso de un caso concreto. A posteriori,
durante el control de la constitucionalidad, el poder se distribuye entre varios tribunales. Por
lo tanto, el poder se descentraliza para garantizar el respeto a la Constitución. Más tarde, es
importante añadir que durante este control imprescindible se aprecia un gran número de
actores involucrados. Mientras que en el caso de los tribunales concentrados, pasa
prácticamente lo contrario. El control de la constitucionalidad es ejercido por un o pocos
tribunales especializados para este proceso, hay únicamente un tribunal que posee la
responsabilidad de realizar el control de constitucionalidad, la función de control está
centralizada en un tribunal determinado (concentración del poder) y actuan menos
tribunales en el proceso de control de constitucionalidad. Sin embargo, también podemos
encontrar ciertas semejanzas entre los tribunales difusos y los concentrados. Sin ninguna
duda, la principal similitud de ambos es la garantía de supremacía constitucional. En otras
palabras, ambos tipos de tribunales poseen como prioridad asegurar la supremacía de la
Constitución sobre otras normas. La segunda igualdad es que en los dos, se lleva a cabo
una revisión judicial porque es primordial que las leyes y actos sean conformes con la
Constitución. Después, se ha de añadir que los sistemas que hemos estado explicando
estan preparados para respetar y dar protección a derechos y principios fundamentales
establecidos. Para acabar, las decisiones relacionadas con la constitucionalidad tienen una
influencia grande en el sistema legal y en la protección de derechos fundamentales.

4. ¿Cuál es la eficacia de la Constitución como norma jurídica y que consecuencia tiene


esta afirmación en el desarrollo constitucional’ es decir, ¿cuál es la eficacia jurídica de
los preceptos constitucionales que no se desarrollan legislativamente?

La Constitución es efectiva porque posee la capacidad de establecer las bases y principios


fundamentales que rigen un país concreto, así como la responsabilidad de hacer cumplir los
derechos y obligaciones que recoge en su listado. La eficacia de la Constitución como
norma jurídica puede evaluarse desde diversas perspectivas, y su aplicación efectiva puede
variar según el sistema legal de cada país. En términos generales, se refiere a la capacidad
de las disposiciones constitucionales para generar efectos legales y ser implementadas en
la realidad. Esta eficacia puede depender de factores como la claridad de los términos
utilizados, la existencia de mecanismos de aplicación y el nivel de desarrollo legislativo y
judicial. En muchos sistemas legales, es común clasificar los preceptos constitucionales en
dos categorías principales: normas autoejecutables y normas programáticas. Las normas
autoejecutables son disposiciones claras y específicas que pueden aplicarse directamente
sin requerir legislación adicional, siendo de aplicación inmediata y vinculante. Por otro lado,
las normas programáticas establecen objetivos o principios generales, pero necesitan
legislación adicional para su implementación, siendo más amplias y menos específicas,
dejando al legislador la responsabilidad de desarrollar leyes específicas para su aplicación.

En lo que respecta a la eficacia de los preceptos constitucionales que no se desarrollan


legislativamente, las consecuencias pueden variar. En algunos casos, esto puede conducir
a un vacío legal o a una falta de protección efectiva de los derechos o principios
establecidos en la Constitución. La ausencia de legislación que desarrolle y aplique estas
normas puede dificultar a los ciudadanos hacer valer sus derechos en la práctica. Además,
la falta de desarrollo legislativo puede tener un impacto en la eficacia global de la
Constitución y minar la confianza en el sistema legal. Esto podría dar lugar a situaciones en
las que, a pesar de tener derechos constitucionales reconocidos, la carencia de leyes
específicas para garantizar su aplicación efectiva limite la protección real ofrecida por la
Constitución.

5. ¿Cómo quedan vinculados los jueces ordinarios en España por la disposición


derogatoria de la Constitución?

La disposición derogatoria de la Constitución Española, presente en su artículo 81, clarifica


la manera en que deben ser tratadas las leyes anteriores una vez que la Constitución entra
en vigor. Este artículo establece que todas las disposiciones legales que sean incompatibles
con la Constitución quedan derogadas, perdiendo su validez jurídica en la medida en que
contravengan las normativas constitucionales. Este alcance abarca incluso las leyes
anteriores a la Constitución que resulten inconsistentes con sus principios y disposiciones.
En lo que respecta a los jueces ordinarios en España, la Constitución se posiciona como la
norma suprema del ordenamiento jurídico del país. Dicha Carta Magna establece los
principios fundamentales del Estado y garantiza derechos y libertades fundamentales. Por lo
tanto, los jueces ordinarios tienen la obligación de aplicar y respetar la Constitución en el
ejercicio de sus funciones y toma de decisiones. La disposición derogatoria de la
Constitución vincula a los jueces ordinarios al especificar que todas las normativas y
disposiciones en conflicto con la Constitución quedan derogadas. Esto implica que los
jueces están compelidos a interpretar y aplicar las leyes considerando los principios
constitucionales. Su responsabilidad es asegurar que cualquier norma o acción que infrinja
los principios constitucionales sea declarada nula o inaplicable en el ámbito jurídico.

6. ¿Quiénes pueden solicitar la declaración de inconstitucionalidad de una norma, a


quienes les corresponde declarar la inconstitucionalidad de una norma? ¿qué
consecuencias tiene dicha declaración?
En España, la declaración de inconstitucionalidad de una norma puede ser solicitada por
diversos actores y corresponde a ciertos órganos judiciales el poder llevar a cabo dicha
declaración. Los primeros que pueden solicitarlo son los ciudadanos y Entidades. Tanto
ciudadanos individuales como organizaciones no gubernamentales, entidades u otras partes
interesadas pueden presentar solicitudes ante el Tribunal Constitucional para que se declare
la inconstitucionalidad de una norma. Esto puede ocurrir cuando consideran que la norma
vulnera derechos o principios constitucionales. Después, estaría el Gobierno que, a través
de sus órganos competentes, también puede solicitar la declaración de inconstitucionalidad
de una normas. Además, lo pueden solicitar órganos judiciales. O sea, los jueces y
tribunales que se encuentran con casos en los que se cuestiona la constitucionalidad de
una norma pueden plantear una cuestión de inconstitucionalidad al Tribunal Constitucional.
Esta cuestión permite al tribunal constitucional decidir sobre la conformidad de la norma con
la Constitución.

De igual manera, es importante hablar de un cosa importante. En España, la declaración de


inconstitucionalidad recae en el Tribunal Constitucional. Este tribunal es el encargado de
interpretar la Constitución y velar por su cumplimiento. Tiene la facultad de declarar la
inconstitucionalidad de leyes, reglamentos u otras disposiciones normativas.

La declaración de inconstitucionalidad por parte del Tribunal Constitucional tiene varias


consecuencias importantes. Para empezar, si una norma es inconstitucional es considerara
nula. Por ello, carece de validez legal desde el momento en que se emite la declaración. A
posteriori, dependiendo de la decisión del Tribunal Constitucional, la nulidad puede poseer
efectos retroactivos, afectando situaciones pasadas, o ser prospectiva, aplicándose sólo a
partir de la fecha de la declaración. Y para acabar, se debe mencionar que la autoridad o
entidad responsable de la norma declarada inconstitucional está obligada a ajustar su
conducta y eliminar o modificar la normativa de acuerdo con la decisión del Tribunal
Constitucional.

7. ¿Cómo está configurado el TC español en relación con los demás órganos


jurisdiccionales y por qué?

El Tribunal Constitucional (TC) de España está configurado como un órgano jurisdiccional


específico y especializado en cuestiones de constitucionalidad. Su posición y funciones se
definen en la Constitución Española de 1978. Así es cómo está configurado el TC en
relación con los demás órganos jurisdiccionales y por qué. Primero, el TC es responsable
de ejercer el control de constitucionalidad en España. Esto implica revisar la conformidad de
las leyes y actos normativos con la Constitución. El TC está obligado a garantizar la
supremacía de la Constitución y proteger los derechos fundamentales. Segundo, el TC es
un órgano independiente y autónomo. Su posición de independencia es buscada para
asegurar que pueda ejercer sus funciones de manera imparcial y sin interferencias externas.
Esto contribuye a fortalecer el Estado de Derecho y la separación de poderes. Tercero, a
pesar de que el TC es un órgano jurisdiccional, se diferencia de los tribunales ordinarios
especialmente en su enfoque y competencias. Los tribunales ordinarios se ocupan de casos
civiles, penales y administrativos, mientras que el TC se centra exclusivamente en
cuestiones de constitucionalidad. Cuarto, el TC es capaz de realizar dos tipos de control:
control abstracto y control concreto. Po un lado, el control abstracto implica revisar la
constitucionalidad de las normas en abstracto, sin referirse a un caso concreto. El control
concreto, por otro lado, surge en el contexto de un caso específico que se lleva ante el
tribunal y que plantea una cuestión de constitucionalidad. Por último, el TC actúa como el
órgano de cierre del sistema judicial español en lo que respecta al control de
constitucionalidad. Sus decisiones se caracterizan por poseer un carácter vinculante y
definitivo, y ninguna otra autoridad puede revisar o anular sus decisiones en esta materia. Si
se pudiera hacer un resumen de lo mencionado anteriormente, el Tribunal Constitucional
español está configurado como un órgano especializado e independiente encargado de
garantizar la supremacía de la Constitución y el respeto de los derechos fundamentales. Su
posición única lo distingue de los tribunales ordinarios, y su función principal es asegurar la
conformidad de las leyes con la normativa constitucional.

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