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Curso: Derecho Constitucional y Teoría del Estado | Prof.

Eddy Chávez Huanca

TEMA: EL PRECEDENTE CONSTITUCIONAL VINCULANTE


Fuente: El control constitucional
Jesús Martin Ocampos Mogollón. Lima: Jurista Editores, 2019., pp. 74-82.

En el marco de este acápite he considerado conveniente dedicar algunas líneas a un tema sumamente importante en
la estructura constitucional, como lo es el tema del “precedente vinculante”, introducido en nuestro sistema jurídico
con la entrada en vigencia del Código Procesal Constitucional. Como es sabido y lo hemos visto anteriormente una
sentencia del Tribunal Constitucional tiene los siguientes elementos:(i) ratio decidendi o razón suficiente, (ii) obiter
dicta o razón subsidiaria o accidental, (iii) decisum o fallo constitucional. El primer elemento es la base de la decisión
del Tribunal, es su fundamento directo, es decir, que sin esta razón la sentencia carecería de sustento. En cuanto al
segundo elemento, este se conforma por aquel contenido que, no siendo imprescindible, es pertinente por razones
académicas u orientativas. El último elemento, finalmente, lo constituye el pronunciamiento expreso del Tribunal
Constitucional mediante el cual estima o desestima la demanda.
En relación con este tema, señaló en la STC N° 3741-2004-AA/ TC (Caso Salazar Yarleque - control difuso en la A.
Pública) que “el Tribunal Constitucional tiene dos funciones básicas; por un lado resuelve conflictos, es decir, es un
Tribunal de casos concretos; y, por otro, es un tribunal de precedentes, es decir, establece, a través de su
jurisprudencia la política jurisdiccional para la aplicación del derecho por parte de los jueces del Poder Judicial y del
propio Tribunal Constitucional en casos futuros”. Añadió en esta sentencia que la Suprema Corte Norteamericana
tiene en cuenta 3 supuestos para dictar un precedente: A)En primer lugar, la Corte dicta un precedente con efectos
vinculantes cuando evidencia que en los niveles inferiores de la judicatura se dan distintas concepciones o
interpretaciones sobre una determinada figura jurídica o frente a un caso determinado, B) La segunda razón que
amerita el dictado de un precedente está referida a la necesidad de llenar un vacío legislativo o una laguna de las
leyes. Se trata de hacer frente al caso construyendo una respuesta a partir de la interpretación constitucional, C)
Finalmente, la tercera razón es la necesidad de desarrollar la jurisprudencia sentando un nuevo precedente que anula
uno anterior (la conocida práctica del overruling).
En la STC N° 3741-2004-AA/ TC (Caso Salazar Yarleque - control difuso en la A. Pública), definió que un precedente
constitucional es una “regla general que el Tribunal externaliza como precedente a partir de un caso concreto, es una
regla para todos y frente a todos los poderes públicos y también frente a los particulares. Si no fuese así, la propia
Constitución estaría desprotegida, puesto que cualquier entidad, funcionario o persona podría resistirse a cumplir
una decisión de la máxima instancia jurisprudencial”.
Para el desarrollo de este tema abordaré para en lo que respecta el caso peruano las principales sentencias que
sobre el particular ha emitido el Tribunal Constitucional. La primera de ellas es la STC N° 0024-2003-A1/TC (Caso
Municipalidad Distrital de Lurín). En esa sentencia se señaló que el precedente Constitucional “es aquella regla
jurídica expuesta en un caso particular y concreto que el Tribunal Constitucional decide establecer como regla
general; y, que, por ende, deviene en parámetro normativo para la resolución de futuros procesos de naturaleza
homóloga”. En esta misma línea, el artículo VII del Título Preliminar del Código Procesal Constitucional prescribe que:
“(…) las sentencias del Tribunal Constitucional que adquieren la autoridad de cosa juzgada constituyen precedente
vinculante cuando así lo exprese la sentencia, precisando el extremo de su efecto normativo. Cuando el Tribunal
Constitucional resuelva apartándose del precedente, debe expresar los fundamentos de hecho y de derecho que
sustenten la sentencia y las razones por las cuales se aparta del precedente”. Por su parte, en la STC N° 3741-2004-
AA/TC (Caso Salazar Yarleque - control difuso en la A. Pública), el Alto Tribunal distinguió entre jurisprudencia y
precedente. Por un lado, reseñó que la jurisprudencia constituye la doctrina que desarrolla el Tribunal en los distintos
ámbitos del derecho, a consecuencia de su labor frente a cada caso que va resolviendo. Esta interpretación resulta
vinculante a todos los poderes del Estado en atención al artículo VI del Código Procesal Constitucional y la Primera
Disposición General de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, aprobada por Ley N° 283001. Por el otro lado, en
cuanto al precedente el Tribunal preceptuó que el Legislador introdujo la técnica del precedente para conferir mayor
predictibilidad a la justicia constitucional. En suma, concluyó que, si bien tanto la jurisprudencia como el precedente
Constitucional tienen en común la característica de su efecto vinculante, en el sentido de que ninguna autoridad,
funcionario o particular puede resistirse a su cumplimiento obligatorio, el Tribunal, a través del presente
constitucional, ejerce un poder normativo general, extrayendo una norma a partir de un caso concreto.
Respecto a su naturaleza, el Tribunal Constitucional ha señalado que tiene una connotación binaria, porque “por un
lado aparece como una herramienta técnica que facilita la ordenación y coherencia de la jurisprudencia y por otro,
expone el poder normativo del Tribunal Constitucional dentro del marco de la Constitución, el Código Procesal
Constitucional y la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional”. La idea del uso de un precedente vinculante responde a
la necesidad de hacer que los efectos de un fallo se extiendan más allá del caso concreto, es decir, darle efectos
generales. En este sentido, aparece como un mecanismo procesal con que cuenta el Alto Tribunal para pronunciarse
con efectos generales sobre una Ley o acto impugnado que ha juzgado de inconstitucional.
Condiciones para el uso del precedente constitucional vinculante
El Tribunal Constitucional en la STC N° 0024-2003-A1/TC (Caso Municipalidad Distrital de Lurín), precisó que el uso del
precedente se sustenta en las condiciones siguientes:
Existencia de relación entre caso y precedente vinculante. -Hoy esta condición se refiere al hecho que la regla
general que se eleva a parámetro normativo debe haber servido para la solución del caso concreto, del cual se
extrae, no será posible crear un precedente si este no es la ratio decidendi en el caso.
Decisión del Tribunal Constitucional con autoridad de cosa juzgada. -Esta condición se refiere al hecho de que la
decisión del Tribunal Constitucional elevada a precedente debe haber puesto fin al proceso, es decir, debe haber
estimado o desestimado la demanda.
En la STC N° 3741-2004-AA/TC (Caso Salazar Yarleque - control difuso en la A. Pública), nuevamente el Tribunal
Constitucional le dedicaría algunas líneas al tema referido a las condiciones para el uso del precedente. En primer
lugar, señaló que existe relación entre caso y precedente. No obstante, que puedan crearse precedentes a partir de la
evaluación en abstracto de normas. En segundo lugar, el precedente debe constituir una regla de derecho y no puede
referirse a los hechos del caso. En tercer lugar, precisó que la regla del precedente constitucional no puede constituir
una interpretación en una regla o disposición de la Constitución que ofrece múltiples construcciones, es decir, no es
una técnica para imponer determinadas doctrinas u opciones ideológicas o valorativas.
El cambio del precedente vinculante
El Tribunal Constitucional en la STC N° 0024-2003-A1/TC, señaló que el apartamiento y sustitución de un precedente
vinculante está sujeto a los tres elementos siguientes:
a) Expresión de los fundamentos de hecho y derecho que sustentan dicha decisión.
b) Expresión de la razón declarativa - teológica, razón suficiente e invocación preceptiva en que se sustenta dicha
decisión.
c) Determinación de sus efectos en el tiempo.
Para el caso del cambio de precedente se deberá observar lo que prescribe el artículo VII del Título Preliminar del
Código Procesal Constitucional, esto es, que debe el Tribunal Constitucional obligatoriamente expresar los
fundamentos de hecho y de derecho que sustenten la asistencia y las razones por las cuales se aparta del
precedente. Un tema particular importancia en el cambio de precedente es el prospective overruling. Esto significa
que el Tribunal Constitucional excepcionalmente decide que el cambio de precedente opere hacia el futuro y no para
el caso concreto en el cual se dicta. Ello puede ser seguridad jurídica o para evitar injusticias que puedan originarse a
partir de este cambio. En esa línea el Tribunal Constitucional ha señalado que al momento de cambiar el precedente
optará por cualquiera de las dos situaciones siguientes: (i) Decisión de cambiar de precedente vinculante ordenando
la aplicación inmediata de sus efectos, de modo que las reglas serán aplicables tanto a los procesos en trámite como
a los procesos que se inician después de establecida dicha decisión, (ii) Decisión de cambiar de precedente vinculante,
aunque ordenando que su aplicación será diferida a una fecha posterior a la culminación a determinadas situaciones
materiales. Por ende, no será aplicable para aquellas situaciones jurídicas generadoras con anterioridad a la decisión
del cambio o a los procesos en trámite.
Esta técnica encuentra su fundamento en el principio de previsión de consecuencias económicas, políticas y sociales
que debe utilizar todo Tribunal Constitucional al momento de resolver una litis y que ha sido definido como el
principio que impone al Tribunal disponer que se adopten determinadas medidas para el tratamiento de una
consecuencia ocasionada por la sentencia constitucional, así como los principios o parámetros constitucionales que
han de regirlas. Ello tiene lugar sólo en el caso de que la consecuencia pueda ser eventualmente lesiva de derechos o
principios constitucionales, de modo que las medidas ordenadas estarán orientadas a evitar tales consecuencias (STC
N° 0025-2005-PI/TC (acumulados) (Caso PROFA II). A su decisión el Tribunal Constitucional le da un efecto diferido a
través de una “vocativo sententiae” con el objeto que las consecuencias de su decisión no generen un mayor perjuicio
del que es justamente buscan evitar. No obstante, sobre la vocativo sententiae lo hizo notar el Tribunal en la STC N°
0005-2007-PI/TC (caso Justicia Militar) que “esta potestad de los Tribunales Constitucionales para diferir en el tiempo
los efectos de sus decisiones de inconstitucionalidad no siempre ha sido bien entendida por algunos sectores de la
doctrina, como tampoco por parte de algunos poderes públicos, cuando estos últimos han propugnado la
eliminación de esta potestad, desconociendo de este modo horror vacui que puede generar en determinados
supuestos, el hecho de que una sentencia de inconstitucional pueda tener efectos inmediatos”.(f. 51).
La técnica de la eficacia prospectiva fue utilizada en la STC N° 0090-2004-AA/TC (Caso Callegari Herazo). Este caso el
Tribunal Constitucional señaló que era necesario cambiar la jurisprudencia que sobre la materia referida a ratificación
de militares y pase al retiro había venido sosteniendo. El precedente tiene que ver con el efecto personal indirecto,
toda vez, que la ciudadanía en general y los poderes públicos como ha dicho el Tribunal Constitucional quedan
“atados”, en su comportamiento personal o funcional, a las reglas y decisiones que una sentencia constitucional
declare como precedente vinculante.
Los presupuestos básicos para el establecimiento de un precedente vinculante
El Tribunal Constitucional en la STC N° 0024-2003-A1/TC (Caso Municipalidad Distrital de Lurín), estimó que los
presupuestos serían los siguientes:
a) Cuando se evidencia que los operadores jurisdiccionales administrativos vienen resolviendo con distintas
concepciones o interpretaciones sobre una determinada figura jurídica o frente a una nueva modalidad o tipo de
casos; es decir, cuando se acredita a la existencia precedentes conflictivos o contradictorios.
b) Cuando se evidencia que los operadores jurisdiccionales administrativos vienen resolviendo en base a una
interpretación errónea de una norma del bloque de constitucionalidad; lo cual, a su vez, genera una indebida
aplicación de la misma.
c) Cuando se evidencia la existencia de un vacío normativo.
d) Cuando se evidencia la existencia de una norma carente de interpretación jurisdiccional en sentido lato aplicable a
un caso concreto, y en donde caben varias posibilidades interpretativas.
e) Cuando se evidencia la necesidad de cambiar de presidente vinculante.
En la STC N° 3741-2004-AA/TC (Caso Salazar Yarleque - control difuso en la A. Pública), desarrolló los supuestos
establecidos STC N° 0024-2003-A1/TC (Caso Municipalidad Distrital de Lurín), considerando que constituyen
supuestos para la emisión de un precedente vinculante los siguientes:
La constatación, a partir de un caso que ha sido sometido a la jurisdicción del Tribunal Constitucional, de la existencia
de divergencias o contradicciones latentes en la interpretación de los derechos, principios o normas constitucionales
o de relevancia constitucional.
La constatación, a partir de un caso que ha sido sometido a la jurisdicción del Tribunal Constitucional, de que los
operadores jurisdiccionales o administrativos, vienen resolviendo en base a una interpretación errónea de una
norma del bloque de constitucionalidad; lo cual, a su vez generó una indebida aplicación de la misma.
Cuando en el marco de un proceso constitucional de tutela de los derechos, el Tribunal constata la
inconstitucionalidad manifiesta de una institución normativa que no sólo afecta al reclamante, sino que tiene efectos
generales que suponen una amenaza latente para los derechos fundamentales. En este supuesto, al momento de
establecer el precedente vinculante, el Tribunal puede proscribir la aplicación, a futuros supuestos, de parte o de
total de la disposición o de determinados sentidos interpretativos derivados del mismo; o puede también establecer
aquellos sentidos interpretativos que son compatibles con la Constitución.
Cuando se evidencia la necesidad de cambiar de precedente vinculante.
El Recurso de Agravio Constitucional en favor del precedente
En un principio el Tribunal Constitucional emitirá la STC N° 4853-2004-PA, mediante la cual establecería como
precedente vinculante la procedencia del Recurso de Agravio Constitucional en favor del precedente. Al respecto, el
Alto Tribunal señaló que “una decisión judicial estimatoria de segundo grado en un proceso constitucional afecta a
los derechos fundamentales y el propio orden jurídico constitucional cuando es emitida contra la expresa
interpretación constitucional que haya realizado este Colegiado de los Derechos fundamentales a través de su
jurisprudencia, o también, como ya ocurrido cuando es emitida con abierto desacato a un precedente constitucional
vinculante”. (f. 51). Hasta ese momento el Tribunal Constitucional había establecido la precedencia de un segundo
amparo para reparar esta situación, sin embargo, en esta nueva sentencia el Tribunal consideraría innecesario un
nuevo amparo cuando de por medio está el desacato manifiesto y claro a un precedente vinculante. Por ello,
ofrecería una nueva interpretación del término “denegatorio” del artículo 202.2 de la Constitución, es decir, nos
indicaría cuál sería el alcance de dicho término. En efecto, sentenció en la STC N° 4853-2004-PA que“cuando el
artículo 202 de la Constitución señala que el Tribunal Constitucional conoce en última y definitiva instancia de las
“denegatorias” en los procesos constitucionales ello no debe ser interpretado como que está proscrita por la
Constitución la revisión por este Colegiado vía recurso de agravio constitucional de una decisión estimatoria de
segundo grado cuando ésta haya sido dictada en desacato de algún precedente constitucional vinculante emitido por
este Colegiado. El concepto “denegatorio” requiere pues de un nuevo contenido a la luz de los principios de
interpretación constitucional y de la doble dimensión que expresan los derechos fundamentales y su tutela por parte
de este Colegiado en el contexto del actual Estado Social y Democrático de Derecho (f.32). En conclusión, en el
fundamento 40 de dicha sentencia el Tribunal Constitucional estableció las reglas vinculantes esto es la regla procesal
y sustancial para el trámite de este nuevo supuesto.
Este precedente sería dejado sin efecto mediante la STC N° 3908-2007-PA/TC. En primer lugar, la crítica del Tribunal
apuntaría a que el precedente vinculante establecido en la STC N° 4853-2004-PA/TC no cumplía con ninguno de los
presupuestos básicos fijados por la STC N° 0024-2003-AI/TC para la aprobación de un precedente vinculante. En
segundo lugar, señalaría que el precedente no es una técnica para imponer determinadas doctrinas u opciones
ideológicas o valorativas, todas ellas válidas desde el punto de vista jurídico (f.7). En ese sentido, consideró. que el
Tribunal Constitucional en la STC N° 4853-2004-PA/TC impuso una determinada posición doctrinaria sobre el
significado de la expresión “resoluciones denegatorias” para incluir dentro de aquellas a las que desacataban un
precedente vinculante. Por tales razones dejaría sin efecto tal precedente y señaló que el mecanismo procesal
adecuado sería la interposición de un nuevo proceso constitucional. En resumen, precisó que la expresión
“resoluciones denegatorias” sólo comprende las resoluciones de segundo grado que declararon infundada o
improcedente la demanda (…), solo contra ellas procede el recurso de agravio constitucional, más no contra las
resoluciones estimatorias de segundo grado (f.8).
(…)
(…) se puede observar que existen diferencias frente al modelo previsto por la Comisión en 1979 las cuales sin
embargo no resultan trascendentales, por cuanto en términos generales se ha mantenido la misma tónica con la cual
Constitución, conforme a observar el cuadro comparativo que se muestra:

Cuadro comparativo
Constitución Política de 1993 Constitución Política de 1979
- El Tribunal Constitucional se compone de - El Tribunal de Garantías Constitucionales se
siete miembros. compone de nueve miembros.
- Son elegidos por el Congreso de la - Son elegidos tres por el Congreso, tres por
República con el voto favorable de los dos el poder ejecutivo y tres por la Corte
tercios del número legal de los miembros. Suprema de Justicia.
- Son elegidos por un período de 05 años. - Son elegidos por un periodo de 06 años.
- No hay reelección inmediata. - Se renueva por tercios cada dos años. Sus
- Están facultados para interponer acción de miembros son reelegibles.
inconstitucionalidad: - Están facultados para interponer acciones
1.- El Presidente de la República. de inconstitucionalidad:
2.- El fiscal de la nación. 1.- El Presidente de la República.
3.- Presidente del poder judicial. 2.- La Corte Suprema de Justicia.
4.- El Defensor del Pueblo. 3.- El fiscal de la nación.
5.- El veinticinco por ciento del número legal 4.- Sesenta diputados.
de congresistas. 5.- Veinte senadores y
6.- Cinco mil ciudadanos con firmas 6.- Cincuenta mil ciudadanos con firmas
comprobadas por el jurado nacional de comprobadas por el Jurado Nacional de
elecciones. Elecciones.
7.- Los presidentes de Región con acuerdo - Su sentencia no tiene efectos retroactivos.
del Consejo de Coordinación Regional, o los
alcaldes provinciales con acuerdo de su
Concejo, en materias de su competencia.
8.- Los colegios profesionales, en materias de
su especialidad.
- Su sentencia no tiene efectos retroactivos.

El proceso de inconstitucionalidad tiene una naturaleza dual. Por un lado, es “objetivo”, porque tiene una naturaleza
abstracta como proceso de puro derecho. El examen de validez constitucional que lleva a cabo el Supremo intérprete
no requiere de un caso en concreto, sino en una mera confrontación entre la Ley y los principios y valores que recoge
la Norma Suprema, pero, por otro lado, es también “subjetivo” o concreto, por las consecuencias sociales y
económicas que generan sus sentencias. Esto último es lo que genera que el Tribunal Constitucional haga una
previsión de consecuencias de sus decisiones. En tan sentido, el Tribunal en la STC N° 0002-2005-PI/TC, indicó: “El
proceso de inconstitucionalidad, si bien es de naturaleza abstracta tiene una doble dimensión: objetiva y subjetiva.
En reconocimiento de la dimensión objetiva se debe ejercer un control de constitucionalidad acorde con los valores y
principios consagrados por la Constitución Política; es decir, que no se reduce, únicamente, a un medio examen de la
ley, sino que se orienta hacer respetar la unidad o núcleo constitucional (…) En mérito a la dimensión subjetiva, el
Tribunal Constitucional puede valorar la constitucionalidad de los actos concretos realizados al amparo de la norma

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