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INTELIGENCIA EMOCIONAL

¿Qué significa la inteligencia emocional?

La inteligencia emocional se define como un conjunto de habilidades que una persona adquiere
por nacimiento o aprende durante su vida, donde destaca la empatía, la motivación de uno
mismo, el autocontrol, el entusiasmo y el manejo de emociones.

Luego de la teoría desarrollada por Gardner en la Universidad de Harvard sobre las inteligencias
múltiples, el concepto de inteligencia emocional fue utilizado por primera vez en 1990 con los
psicólogos norteamericanos Peter Salovey y John Mayer, para luego ser trasladado a un libro
homónimo escrito por Daniel Goleman.

Este tipo de inteligencia no consiste en alterar la capacidad de generación de emociones con


respecto a diferentes estímulos del entorno, sino se relaciona más con la reacción que una
persona tiene frente a ellas, que muchas veces son más impactantes que las emociones en sí
que desencadenan esta acción.

¿Qué características tienen las personas con alto grado de inteligencia emocional?

Prestan atención a sus emociones: las personas que desarrollan este tipo de inteligencia analizan
sus emociones y las escuchan, no solo se limitan a sentirlas.

Conocen sus sentimientos y no los reprimen: estas personas son auténticas y sinceras, ya que
expresan sus sentimientos de forma clara.

Analizan sus proyectos y sueños: no viven en un sueño constante, sino que saben razonar sobre
lo que sienten y si alguna meta puede ser alcanzada o no.

Tienen un balance constante en sus acciones: saben que todo tiene su lado bueno o malo, por
lo que dirigen su atención a las cosas que pueden solucionar o que pueden ser de utilidad para
ellos mismos.

Los cinco pilares de la inteligencia emocional

Estos elementos fueron mencionados por primera vez por el autor Daniel Goleman en 1995.

1.-Autoconciencia

La autoconciencia es la habilidad de reconocer y entender tus emociones para actuar de acuerdo


a cada una. Distinguir qué estás sintiendo y por qué es la base de la Inteligencia Emocional. La
autoconciencia es el escalón de donde parte toda la estructura de la inteligencia emocional, se
trata de la habilidad de reconocer y comprender nuestras propias emociones y cómo estas
impactan a otros. Es el primer paso para generar una introspección de auto evaluación para
identificar aspectos de conducta o emoción en nuestro perfil psicológico que sería positivo
cambiar, ya sea para estar más en paz con nosotros mismos o para adaptarnos a determinada
situación. La autoconciencia también cubre la necesidad de reconocer lo que nos motiva y nos
provee de realización.
2.- Autorregulación

Una vez que estás consciente de lo que sientes y por qué, puedes empezar a manejar tus
emociones correctamente. No se trata de ser frío y calculador, se trata de regular tus reacciones
para generar confianza en los demás, incluso cuando se necesita exaltar los ánimos.

La manera en la que se emite un punto de vista, en qué momento se hace y con qué intención
es fundamental para triunfar en la vida profesional y de los negocios. La auto regulación funciona
como un termostato de tus emociones, te controla cuando estás a punto de perder el centro y
te provoca cuando se requiere inyectar más energía.

3.- Automotivación

Las personas con inteligencia emocional elevada se motivan por factores internos que dependen
exclusivamente de ellos.

Establecer metas de acuerdo a tus intereses y a sus objetivos a mediano y largo plazo es un
síntoma de IE elevada. Quien tiene una IE baja sigue patrones de conducta dictados por alguien
más, persigue objetivos extravagantes y busca motivación en metas externas asociadas con la
aprobación de los demás.

4.- Empatía

La empatía no es otra cosa que la habilidad de entender cómo se sienten las personas, y deducir
como te sentirías tú si estuvieras en su situación.

No quiere decir que apruebas o aceptas el comportamiento de alguien más, pero sí sabes qué
lo motiva, por que razón actúa de alguna manera especifica y qué puedes hacer para cambiar o
estimular su comportamiento. La empatía te confiere herramientas muy útiles que pocas
personas saben manejar.

5.- Sociabilidad

La última pieza en la estructura de la inteligencia emocional es la sociabilidad. Esta habilidad es


la que te permite interactuar en sociedad de manera exitosa.

Aprovechar las oportunidades que se generen a través de tus relaciones y enriquecer la vida de
los demás con tus aportaciones es una señal de IE alta. Tener una IE desarrollada te permite
estar en contacto con más profesionales destacados, y motivar la colaboración para el beneficio
de más personas.
INICIATIVAS SOBRE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL

Programas sobre “aprendizaje social y emocional” [Social and Emotional Learning o SEL].

En el año 1995, sólo había unos pocos programas que se ocupaban de enseñar a los niños las
habilidades de la inteligencia emocional, pero, diez años más tarde, son decenas de miles las
escuelas diseminadas por todo el mundo que brindan a sus alumnos la posibilidad de seguir este
tipo de programas. En los Estados Unidos, sin ir más lejos, son muchos los distritos escolares, e
incluso los estados, que han incluido los programas SEL como parte indispensable del currículum
en la convicción de que, del mismo modo que los alumnos deben alcanzar un cierto nivel de
competencia en matemáticas y lenguaje, también deben lograr un cierto dominio de estas
habilidades tan esenciales para la vida.

El estado de Illinois, por ejemplo, ha establecido normas concretas para la enseñanza de las
habilidades SEL desde el jardín de infancia hasta el último curso de enseñanza secundaria.

Singapur ha emprendido una iniciativa puntera en la aplicación de programas SEL, como también
ha ocurrido en algunas escuelas de Malasia, Hong Kong, Japón y Corea y que, en el caso de
Europa, ha sido encabezada por el Reino Unido. Ya son más de una docena de países cuyo
sistema educativo tiene en cuenta la IE, como sucede con Australia, Nueva Zelanda y algunos
países latinoamericanos y africanos.

En 2002, la UNESCO puso en marcha una iniciativa de alcance mundial remitiendo a los ministros
de educación de ciento cuarenta países una declaración de los diez principios básicos
imprescindibles para poner en marcha programas SEL.

Goleman, D. (2010). Inteligencia emocional. Editorial Kairos.

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