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Introducción

Los ámbitos
de 14 xubj¡-tho_
lugares, los Espacios
Y los tepr:
ficos; de hecho, so
n los fund:
ciones. En el
Entendido de
contenedoras,
poseen En sí
yp;
gaduras que los Suje
tos ÍÍHÚ¡'-'icI…s—
justo cuando ; ,
los habitan. lo
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no reconocer la
asignación de
decir, que son
objeto de la Co
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nsatruce; .
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On ¢
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T 1 AT ó 25,
En el marco de -
lo anterior, el
mentos de la noción
+ oOb-jetivo de estSte
de tn]"…'f'l)r'vsc -¡.¡ arti.
rtí culo es
rios del espacio),
con el fin de visibi
mismas (reco l;, 1
rridos), como 4, tanto Agina-
ciones, jurarquiz: de los procesos Sobre las
—miunus. de práct
Etc.) y las Subjetiv (A =
gr up MA
ac iCiones
sobre id ades
los lugaires. La iv¡¡l:u';u:'lr:nc elamp..
— primera Parte
del &artículo
geografía soci e Xpone los a
al, de los Conc SPacio fund: .
así como la e p t o s d e es Ja ci v i
o viviv i d o , E s p a cio de vida
documentaci = Y es
mes
nes social| es ón de las no p:
.
. La seguInda . ciones 1t 111:n'|'n-
de ]u'us:-m acio
a está d_ e d i c a d a a la EX i nes y3 Tepr—
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d po sicion de aspe
l_ de ]- (])[(‘.‘ c tos Illt"l’ld[bllt.l
= i('l‘l [il('l(l[l'. "'-lSICO
c S (la
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1 y 1|]1||]] mentalAE es
esta o caCe rto graftr
lentada Í'fas socia-
ap ('SL.‘II['Z.
toporrepresentacio U"('{LSUH '
de es5 tudi11o05
nes {\'aIf_n'ncimms, s En
EN tto
ornrong d E E las
’p:irticim ms multiescal
delictivos, pobreza y marg y ares =y EsE pacios L in sEruro
. ó
inalidad urba na). sepy s y

Espacios y representaciones
Las representaciones sociales o col
ectivas no han sido un tema ajeno en los
análisis
y los estudios geográficos. De hecho, en el ¢
amino de la geografía de
las represen-
;ut:ff)I]L'S (Bailly citado por Musset 2009, xx1), tomand
0 como marco sus lll'.¡IIL'XI!ÚI.H'.S
geohistóricas, enfatiza en los aportes que pudiese dej ar
este ámbito ya que “el estudio
de las representaciones espaciales nos interroga sobre | as mo
dalidades de aprehensión
del mundo y el estatuto de la realidad, es decir, el problema de | a adecuación entre la
realidad,
i lo que percibimos
reibi y 7 nuestros
nuestros discur
discursos sobre la realidad”.

TOPORREPRESENTACIONES: IMA Gl NARIO


F 5,5 sIG NIFICADOS
C 5 Y REPRESENTAC
P S NTACION
J ES 50CI0
G ESPAC IALES
¥ est einl común: el e nsamble e dee la
ciocultural % int erp
tre € sp acio
. y re-~ pre tt
enti
pgen
[acion cioespaciales.
includible en uridad
La conexión

de inse que el primero
expresiones Es decir, que, mientras
ciones, nente en las ; Irl-- Ellos
y Alas e.
inalidar i, sino
en cualquie taria intimamente ligado a los sentidos diyer, .
0, pobre 2 y it
€ »7 UN conmtexto n¢ 1
y mic:
que se configura
eme jan rel aci on es culturales ECO- formas de i entidad
. '
SPacios
-On los e
bito donde cam po en la son referidos a las per aneenc
nc ing y y i, mar Y
no ve los * undos
dado, con rá un Y la
lu ares, 105 experiencia, para que
aún si se reco
noc que los
materialización de la
social; má. con una N;],,N_I. EA comp;
ori os, lej os de ser entidades nación de unos y otros
sc construyan
Y
;y los ter rit decirlo, ialpg
' asf Es -:| Ir‘:\l
ieren, Fh!l común de esta tri: , :r-r¡'r-…-fr.
ntenedora, adqu Así, un factor i
mera funcic n eo menen to que =
integra -'"-'""'lil'…¡lxl¡-¡… ke
a ida d” ju st o en aquel me , ¿.___-¡Je'u'ml". la misma que € tany,,
una forma de “vit t'll' como la informació
Egrupo socia ]}u\pmlm cor rid os) , |
h » EN UNAa M y, (clagig
co le ct iv o, las prá cti cas (re
ividuo ,
el sujeto (1 nd ificado, t n jet ivi dad (vale
un va lo r, un sentido, un sign ici one s y la sub Alotalj dad
taenély le asigna enta ciones
uyen repres aún su difícil claridad, ju
r, co ns tr que, dada
peso, un siml »olo; es.de
»ci € esto ua
Por
repr ntar, sim bolizar reflexiones Lindón (2006b, 388).
Esas formas plurales de
a de
¿de él es es la de | as ¢
en st 15 referent la qu e he dec idi do apo yar me,
nar las ins g euridades urban arista s en “ Se TAas per 5=
in mpren 3
as y simbólicas, para co
|
refle: xión. at iv !
de la siguiente pectivas cu al it de r |
0s
espaciales, es el objeto
*N
o se gu ri da d y |;
vinculos del individu con la in a pobr, EZa
Espacios de vida, vi
vidos y sociales en y, con ello, cimentar
otros casos las bases d
e 6 SUS ¢
e enmar : - 3 ió, 0 ! \
acia-s ociedad qu entac ioones, a partir de
par » l
la a carac
cara cter izac
La constante relación esp que van ¡…rwpru .sen taci 1 de
, en Ia medida encias espaciales.
ca a los ind ivi duo s, imp lic a que algunas de sus experi
ncia SU
tomando como FE fere 1
forjando su identidad,
asumiendo mecanismos
para presentaciones soci
contexto territorial, van Ima 1arios, 5 Social es
s icados, apegos y perte- ntaciones
la asignación de valore y signif y toporrepres
nte a
ias, narr ativ as y cate g ori zac ion es, € ispecialme Fo 1caultla necesidad de romy Jer con 1
nenc ; Ya reivindicaba
. ST idos y de vid: 1, lo qulese fe ilita izaciór
los lug are s, esp aci os viv
la ambición totalizante o de “intelectual = 1 Uniye
o territo- ER
una rep res ent ación y un imaginari - _ , 5I bien en ciertos casos
- 1
con str uir a sal” (Huici 2007) que 505 Ppodrí; a
(M us se t 20 09 ). Estos elementos, además, junto comprensi vos e int Erpretati y,
ria l ser útil en 1 05 procesos S e -alvos , A
las experiencias y las os
las representaciones, influenci an en muchos otros casos son - instru
mentalizad % 5 con fi-
des, acciones, desplaza-
prácticas en el espacio: activid ltar las particularidade
2010, 367)-
nes ideológicos para ocu - = ades, sin-
mientos, rutinas (Lindón e Hiernaux idades, ten die nte s a faci lita 8
Di Méo, plantea que gularidades y subj ar g )|
Lindén (2010, 383) citando a tensiones5 socialess, desi;gual
corresponde con la visión subjetiva encubrimiento de
» desigualdades5 0
el espacio vivido y las rep espaciales
las injusticias. Las dinamicas 5 Fepresent;
impregnada de valores asignadas al espacio según : ¥ epc ió endaiaño 201 “ !]
del indiv iduo: “incluye las ciones territoriales no son laE exc sepción (Av 2016:
6:
condiciones de existencia |
Musset 2009). Es allí , jllsl'lI'I!CIIÍÚ
e , en
en d donde el f oco
JJI'!':(':’i{.‘.‘i 125 espac I;¿If['.'-. l'] :—l'llil;l'.'-l_' or. nario o no de un de

las rep
losE imaa ginarios s yy las resresentacii ones5 delel
rep crio,
espaaci
Esp las
lugar, el construir la identidad para sí a partir del lugar
su toporrepresentaciones, se constituyen en un eje analit;
en el cual reside, el interés por la memoria”. Por
co de la geografía, al ser vinculadas con la cxp¡ír']íl “T-
parte,
arrte Guy
- Di Méo
n Á
(1996,
1 62), plantea que los espacios
espacial, sus espacios de vida, vividos y sociulog- ——
de vida hacen referencia a la cotidianidad del individuo,
- , La noción deimaginario es entendida cmu(;u; se
105 CAaminos y »corridos recurrentes, los espacios donde
habitan sus redes sociales (familia, parej: amigos), ba- ceso del pensamiento humano a través del cuz 1“ Drjº_

ses de la materialidad y de las prácticas. Y, finalmente,


terpretan, perciben, codifican y ofrecen juí(',i(.):.:i “ =
en cierre de la triada, el espacio social
es asumido como y acción, de una realidad o situación im‘xi.sl k E.WMGT
aquel producto de la concurrenciade los espacios de vida posibilitar los relacionamientos entre el in ]'L:“L‘ i
de contexto (Durand citado por Niño 1998) lioi‘ 1":1'-“’ —
pero también, incluso,
Jri-x¡'_…"flf.'e;e,-'. principalmente,
osvividos (representados), gar los I'in-
tiene r-] lugar
en los Jue que tiene
diferentes 20 Daniel Hiernaux (2012, 89) propone lz : “íbu e
tercambios entre los
- : ( ‘» agentes sociales (Lindón iles, complemen
ginarios sociales, c tando
as a Manuel ia
A i
382) 0 autores del territorio; dichoen otras ¡1.'1!.-||¡['¿|:x Baeza, para plantear “que estos Se son múlti e
1últiples y variadas
la . suma É de le 15 p Iralí
ales i nteracc ic es
raccion S ¢ EN U n coantexto so- ['UII.'!'HH((']IHIIL'QIÍ
£ entale
3 EH[]dL ar
a clone 5 } 50C1o E ] a n € 2 COMm
1iment

JHAN
JOHA ANDRES
, 5 AYVENDANO ARIAS
n meia practica del mundo, en
e
al otorgamien Entido
de Sentido
pdas
u -
to e. Xisten
el ] imaginario es
1 imagen” Mentay
S dh — un ex
hepe
chri
o,enci
un a esde
paci"l
o,"“’t
una Vivencia
'l mu‘nm di
iq ; |'j1u¡¡V…'…' pero que es
tá Mediad, o
rede inales como narraciones,
95 E recuierdos
- ard Debarbieux ha busc 5,
.5. Berni ado preci
- espacio eim aginario, liT(lIl͡Il-l(..,lI']

: “.m_gr
m¡áfico como aquel Conun:
ario & Mo de
¡ma “…¡,-¡1¡'.—4 relacionadas entre sí, que Confieren
.'I x enes 1 a individuo 0 UN grupo— un s nii'u;;,,h,
l ser 5 lx cia relativa a una localizació Una dis.
Í E g e '.utl-nh't“¡l'ºn de fenómenos en
| ción 01 el Espacir
| Concepcio.
0 que s e5 y prac cas espaciales. (
ycione 2003, 489)

¡nario claramente es un
a manera de re-
| slE ]iIImS
yS 1-……. ——¡|]o
Jusgare
individuales, colectivos, rea
s y los les
territorios
mediados
ales, con
k.)':.;..; ;_.“ donde, para est
a, reflexión las
las "-"Pcl,—wit:;, ;-1:¿1:¡(1 urbana y de pobreza han
em-
— es de …b”."__,_c en una fuente de
estudio sobre la
P w"wr“l:«;ms_ Ahora bien, las fepresentaci
| Y'Ínt_…_.¡¿—ió" *I'"'":;. L._;" una escala q.
más amplia a| a de
lo s

" compartido, a través de la actividad


rado »
cial, elabo
tal des!\;p legada
ea = por individuos y grupos, a fin de Mmero dat
men relación con situaciones, o cont ene
<y posición en aconte- casyl 45 perce
gjar $
y = i ybjetosi y comunicaciones [...] es decir, ese
! cimient o
-1ema de > r re ferencia para interpretar y !'Clilcmnursu_
siste
4 (1986, 472 ámic: 25 histór 05 de COR-
ico- Cu
decir, hacia| aS lturaje. 5 y los de 5208,
bases de | Ae es
Stuart Hall [19!] ?] hace hi]'l.{f: N '[)i[" rritor ial ización,
jermeento ,
ple
En comp
ntaciones son posibles gracias a las
eprese De los aspec
4 en q ue E sihi : tos me tod
ológicos
as dedel lenguaje, las mismas que posibi- Hall ['l¡.)g';)
afirma que la im
diversas form Jel describir, comunicar y simboli- tipología de Tepr
agen en tanto que
una
arcione esentacion, de sv
jitan las accio r
S
, nder un hecho o un objeto, real o
e :
ela las
Narrativas detras
de ciertos discursos qu
- o
ir y coMpre e al
« imentan los proces
sumir -y Co
asum! ¿sta T
razón os de sim-
zar;
ontexto Jado.
de Esta razó cimenta el bolización. Ahora bien,
n un cor silos Mapas son entendidos
imaginado, € bién como imágenes en su dimensión tam-
| aciaia re flexiones geográficas, en tanto
las que visual, análoga y
, ino
camin
las 5 >vida. sociales., las
los 0s espacios
digital, no tendríamos dud: a que
espacios vividos, de vida, sociales, le
los' corpusa 16 de si na rios espaciales se constru-
más allá dela definicion
clasica, las cartografías claramente son
jass
encia
l o s imas
T yy
) los 1m producen just ¥ -
: representaciones,
exper i amente ea partir del no solo del espacio, sino de ciertos tipos de narrativas y
re
,:
yen, deconstruyen ; y - d
Jacionamiento de» y prácticas, el discursos que en sus componentes de simbolos, signos e
FA - .
jal, el relac
nto social,
conocimie iconos (Suavita y Flórez 1993), simbolizan y sustituyen

aje, lad .Scr]n la categorización y la simboli-
de
pfl ºlf
o los elementos o las estructuras a representar.
m
raci
ón, es de ciirr,, ddee s* us representaciones
a —
REPRESENTACIONES SOCIOESPACIALES
5 SIGNIFICADOS Y
MAGINARIO
ACIONES.
TOPI‘JRREPRESENT
n la zona de trabajo. Se ' haha d
los mapas: y ca
car os r
rttog ! fías no Du
pue de
Ello implica que Nom hr ra
do de leer las Pregunt
asumidas tampoco com o la realidad
mismé AFy
den1 serser asumic
- F puesto que son
i sí (Mu ssesett 200 9),
2009 . o e
o el territorio en
s
ine rass as de representar un esp: acio, o
divers=a
man era
repl los demás
wtido que "[‘uwh-n ser conside a rados s £ como — mMien
(né subgrupo
J es
¿¡pa cial grafican en papel Pergaming
C la uhbij
sociales € n tanto imágeni e
s |'$I5 -|(|-
sentaciones de los fi 1ómenos consultados, La clave
Cación
1
- :—lrun as a partir del ba-
del -
copias literales de lo real) ¡_m: es la conversación, pues el reconocimiento del y a "lm-…
j , de 25su posic¡ci|(”ón :socialE y
yje socio-cultural del sujeto torio se basa en la confrontació
n de la EXPeri
erri.
2),
12). IF estos:
Bajo
326 - xperie:ncia del lugar” (De Alba 2009, ViV a por cada uno de los actores que Particip ENeci:
utilizar los ma-
de s utiliz ar :
receptos se: ha to5mado el camino
i
i : r an del
nar.racio , taller, de de talta manera
anera que se obtenpa c
5A Como teL: x1|11:u¡|.I
J mentales, las carto erafías sociales y las
s una imagen multidimensional
Bogotá, ; para- de las variables
T
a de tipo
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terri torial, como imagen € je 5 ¢
m aciones,
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rreprst
toporrepre
paciales. Para es > momento se hace entrega a cad
(E lizar
[ onceptua I la iún
noció de
uno de los grupos de un mapa soporte del territ, . a

con el estudioi de la inse urid:


insegguri dad y ¿lala p pobreza. .
junto
£
a carto srafiar,
grafi ar, asiasi com como de ne mare -adores para Iy
Te zar
reali
sus grafías.
Cartografías sociales
La terce a y última, la socialización
Seentiendela =
del Conoci
rtografiasocialcomoaquella Ci- -
cimiento miento, se realiza nuevamente para
mienta i
metodolágica colectiva rec
de s reconocimi toda la [flonv,,.-l.l
busca que cada uno de los sub =.y
y de las relaciones socioterritoriales, en grupos ExXponga los T
del entorno
sultados obtenidos. La socialización estará a Cargo de
donde, a través de la construeción de mapas, 5e po-
uno o dos delegados que pasará frente a todo el grupo
tencia la generación de espacios de reflexión y cons-
y explicará el mapa constr
trucción de lenguajes comunes, siendo posible lograr uido de manera Colectiva
la interpretación de las diferentes Se hará una retroalimentación sobre los resultados
percepciones de
la realidad de las comunidades y, con ello,
obtenidos y se evaluará la actividad.
la com-=
prensión de condiciones y problemáticas socialmente

relevantes (Molina 2005). A manera de síntesis, la Mapas mentales


metodología consiste en recolectar, de manera co- Los mapas mentales hacen referencia a ese dispo-
lectiva, los conocimientos que poseen los habitantes sitivo cognitivo que da cuenta de la espac Ilidaid d(.|
sobre las dinámicas específicas de sus territorios a individuo, de la manera como este resuelve Su vin-
traves de la construccion grupal, a muchas manos, de culo con el espacio, el cual se puede materializar en
una cartografía. Es necesario definir un objetivo de grafías, en narraciones o en formas de Movilizarse.
la cartografía, qué se pers e con ello, qué se espera Por ello, son unas formas interpretativas para visi
lograr para así definir las categorías a indagar, la po- bilizar las prácticas y los discursos.
Al igual que la
blación objetivo, los espacios de aplicación de taller, cartografía social, es necesario definir Previamente
las preguntas guías a ser respondidas en las grafías un objetivo, las categorías de análisis indag
ar, la po-
de los mapas y las estrategias de retroalimentación. blación objetivo, la escala Espaciotemporal y, con
ello,
Para esto, se propone abordar las fases metodol las preguntas orientadoras. Según sea
(Avendaño 2016) expuestas a continuación. el objetivo, es
posible dejar que los participantes
La primera, realicen de mane-
la motivación o encuentro, consiste ra libre su graficación a partir de las preguntas o si
en la presentación en plenaria de los
participantes, | ay el riesgo de una gran amplit
la explicación de la metodología y el rec ud de respuestas qu
onocimiento dificulte luego la sistematizacién e
de los actores presentes como pri
ncipales protago-
y el análisis. Tam-
bién es posible proponer
nistas de la realidad social: esto un tipo de “leyenda” pree
es, como poseedores tablecida (figura 84),1 s-
de conocimientos privilegiados
que se convierten en
línea base para la generacion
de intervenciones y po-
líticas públicas localizadas,'
La segunda, la creación
9 construcción colectiva 1 Las imágenes de ma
del conocimiento sobre pas mentales repr
territorio, se realiza el oducidas en el
en Brupos de tres a texto hacen parte
cinco per- de los insumos de
la tesis doctoral de
Avendaño (2016).

JOHAN ANDRÉS A VENDANO


ARjas
P E R S O N A L Y FAMILIAR
EHTfiHNI l ||
|
$ Vivienda |
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[ con A
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Vive su pareja
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Figura 84, Convenciones
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da participante individ
Notas: 1)@ ca . co ns tr uido de manera
el ma pa
ubique sobre
para que las de Álvarez-Cor
tecedente
referencia el an
16
Fuente: Avendaño (20

Luego de ello, al culmi-


que no estén estandarizados.
c a m i n o s , sie mpre es im- una
a de los do s ur 1a ma triz donde se ubica cada
En cualquier nar, se con str uye
n co n los y las como
con ve rs ac ió da s e n las preguntas, asi
ma nt en er una de las ca te go ri as in da ga
prescin di bl e
s s o b r e al gu nas impre- tuviese lugar, con el fin
consultarl e rrativo que
é , p a r a el complemento na
fifi&'fiifi ? &
d o , la au se r \cia de ma-
os lo gr ad os . Dado que no es €
an lt ad
puedan ir qued r de analizar los resu ificamentels
prmlur'wr, o po
cación umento el in da ga r es p ec
limite la ubi objeto de este doc
os signos
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TD PDRREPR
otenci
poren ali
i
ciali dades de E estas s técnic
técnica
ass cualit
¢ ati ivas, se pue VIivi
VIdOdoss,
,
esESppaa cios sociales
de recomendar la revisión de De Alba (2 a (2006) in /seguridad y pobryezexperienci
le as Espaciales Co
n
006) o Barra las de 3
a continuaci
as urbaÁE
nas, g,
E _ on lo que seriar
£an (2012) para profundizar aspectos;
ectos; también, ve
Ramadier y Moser (1995)Dr respecto
cto a a ciertas
cie objecior
jeciones :
de 1 las £ eografías de las
s representaciones yI
isma de |r|
J'r.:rn'pi'&‘fit‘flI d E
metodolágicas mismmé EIL‘Jhnt'.\, con 1
la in
aporta
tar elem ento:
[ apor
ticas.
s» queque abra
abra n cam aT pos aplic
Topofl“-’_Presen taciones ur Así, es te ap ar
| inseguridad y pobrez
banas: temáticas. Asl,
s numerales: uno do
ta do estaría
: iscuten
r_-cmr¡.x¡i¡¡¡¡¡¡¡,
Dr
[| nde se discuten
oo
- a S las “""“"'Ic=uu-s T
328 T
Si bien or los corpDu é enn torno o aa lalí in/s idad* y la — o particiones s multmul iescalares propuestas en to
u _‘ ncontrase en
eg1 uridad* y de lé
¢ rreprese e rno de
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una confor-
E
< ntaciones; el se 22gu
t ndo, en ¢ Que se c;
as
mini
t dad conceptual e . spectos de lo
en tanto una y otraa hahs n sido amplia rizan
D5 s imaginarios
llel'spilcun
mente estudiadas : incluso al Ea a - interior
— Insegyy de
y doeumentadas, as r:: :¡lu-.-—'i:111:u
E inc TA »im; es.
afia misma (Cardeño ormiea 2 e
2005; Formiga e
aa para lic…
nbony 2003, 'B“l.
otá,
2009; Hernando Sanz =.
Jiménez Í'T'-¡';- Valoracione
y Velasquez 2007; s/particion
Kokoreff 2003; es
20
200202
} );ta Ziccarc
tall o como iafirmaa Musset (200 multiescal
ares
Mus: 9),el camino
de las
145a5 emer gegent
emer ntes
es de las a St
£ uart Hall (199 7) afirma que una
D representaciones, ; de Jas C…'—'l(“ln-ri_-
toporrepresentac led a oo lde las z ¿.
-
E - iones = (Avendaño 2016), aún tiene an ticas de los sistemas
de los de representaci
- - áe si X ones, como ftJl'm
1 tar. Claramente la dede conexi
X10ón
0 social, es justam ;¡g
sta apue ente el hecho de -
de.
le LeLefifea
bvree s E = que Ée
( 2000), i
sobrellae cond(I - re laciones
icTJió
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T B polítiS c: R es- tá
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T T rcnla compuestos
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opI-opieie—dadade
des simbálicas : ad” * ffuea
“propied y
y de Tepresenta
) sT simE esta “r ue a papar
rttirir dedell sanálisis y la
; S Y in te
la : interpre rn r.
ca:
ción son creada tación de las 5
; o lap s” para n.il. afías
rtografías cucual
alit
itat
3
ativas,5, des
sol s func 'ones y as for as es
las formas espa paciasi
= aspectos metodológicos. de _Crll as15 EN re
lno
e los
simacinari ciale '"- s ,
ek también a £
Luego de orga
nizar Y anali.
-los códic zar los mapas
o e unariosylo * re lacionamiento soci
mentales, las l M s
“D- s códigos de al. %
ado o reaalaci
este conte ; d ca
las son:pers
> rt
En este cont y . vinculad la ti iv le
peyrspect narrativas, se pr 1 S og
l,
ra fi as Sociales Y las
ex to , - as de odujo Ja Jerarqui
imaginarios y sign
ificados, espacios * E e zacion de las repr
ER : 3 e-
; 1 de vida, espa ci os É sentaciones espaciales de la e
ci-udad con las Si
escalas: 1) escala general-ma = guientes:
2 Separt
arte de
edela la dual
dualida
idad consIs al “gran” conglomera cro, que hace referencia
t truida en torno
do
condición ; a una
- urbano, que COrres
finseguridad),
social deseada tseguridad) y su ausencia neralmente a r
figuras E pondió ge-
respecatola tranquilid - amorías, te
-
- ndientI e a =
-
Y la ausencia
ad, la convivencia un esquema
de hechos alargado irregular para
violentos y de I_ngíegpptar- os
lictivos que
lrespeto de la inician
fron teras límites Y las
Condición huma de
la ¡_-¡“¡¡¿j¡¡d:
EC na, de la vida ¿) escala me
ye y de los so, asocia
“- * mentos de la prop 3 i ]J:lt"it) I:i:mrio,_ da
y sociales iedad privada yy los los bi bienes públicos )
pall'lit.‘it)l]fldt
) entre el nort
al B85

A e
£ que es categoriizzaadda
a la cmdadA.
e y el sur
con el
3 Hernando Sanz (1999, : |, ciudad; 3) esca
— 4
la Se
10) considera que los
aportes cho má s endetallada qu ] - T ctoria. l, my.
9e0gréficos al tema del :
crimen, la deli; ncuenc as
e las ,dos anteri
or es
todo, de la violencia. ia y sobre Da rt ir
las particiones 5 qu QUe se pre ,
a se vincula a
Eitando a Da
vid Herbert (1982) se e se Producena .
Encuentran en dos urbanos —el centro a partir de los y
vertientes “Aquellas hitos
, las avenidas
analizar de una proclives a Tnºll'()pu]itanas, lo
forma mi nuciosa las regu
laridades que
cuerpos de agua
y algunas iufrac s
han conducido struclu
a las descri 'P barrios, edificio ras
ciones de las varia ciones (sectores.
[..] de los indices que hace n par
s) —
de d Evencia; y aque
colectivo, muy te del Conoc
orientacione
s que han pr
llas otras
asociado a lo imienta
oc Urado aplicar sofistic qu e Di Méo d
adas espacio social:
y 4) es e fine Como
escala urbana
dias Estadisticas ofic
lales de L cr
te, con los b ar
cala micro, asociada,
" (e enfasis es
añadido)
imen en
rios de resi fin almen-
dencia » los _h
desarrolla ] a _¡gz_¡res donde se
activid ad P
r incipa] (est
udio, trabaj
o) y

JOHAN ANDRÉS
AVENDAÑO
ARIAS
aquellos recorrid
os re“C
cuur
rr rentes y
los espacios de vida
Seguramente
serajustada a los casos esp,
:
paraesta reflexión, as NecesaSPe
r
cíficos a
"E
saric
de las reflexiones EN torno de
za y lar rginalidad ur Inse
. b; ana en Boye
del ejercicio se debió a que,1€, sinsin pr
los resultados y los análigis 1
400 mapas mentales, 5e
aciones
EN estas S
| Cuatcuyatr
vl:n'.¡n'.¡-(:t¡
mente .— mMarez
de la edad Umenores s de
50 años, o adultos 1£8 3 años, I
YOres cop más de -
o ral social testudiantes prui'r-.-iu“;,](.\‘
pensionados, ;
entre Otros),
Respecto a la es
cala neral-ma
la grafica cro
ción de ln
repres E
límites y los perímetros de entación E“sSpaci: al 1 ¿
2 1§
radica Bogotá, e
en que el im aginario actor
colec *tivo
participantes
) ded
adolece de
: Telerencias se
decir, que se desconocen los límites (políti
“Spaciales: ag
tuy

» -

nistrativos, ambientales, = 1e
etc.
:
en el sentido cart- es : , si no de la
iano no Imagen
de In i. de qué tan
amplia es Bogotá, cuál es su forma física re
su dimensión y Proporción, tal
car en el ejemplo de la COmo se pueded e veverifj-
figura 85. Este rifi del
Primer nivel
rrpl't “—ºº¡_…“'í(… induduh¡vm—.'ntv
de lles, permitiend
no se o
las representaci relaa ciona a coOn
ones sobre tangi!
o pobrez inseguridad > refterenci
forma detallada; en realidad se de hubiese
constituye en la y *rado que
sibilidad de comprender po
lesen mayor
los marcos y las re
re ncias
que poseen los ciudadanos sob
re la ciud ad fi a, para
asi luego analizar cuál es
el alcance de sus n arrativa
s
territoriales.
de la ciudad o le
En esta misma es cala, muchos otros escasamente
muck s de las i
delimitaron la ciudad a través de una tidad” y
forma alargada, diferencia de ieron \‘I‘-_' IANETA 5
como ameba (figura 86a), quizá siendo esta la m nificativa.
ercana a losf límites urbanos; otros dibujaron semi-
Cerc:
círculos, dejando el límite en los Cerros Orientales
ndo a Lynch 1197960)
(figura 86b); otros ni siquiera pusieron "i'l'ulnh',- ;
recuerda que existen ci
delimitaron su espacio a través de la trama vial (figura e5 Urbanos:
tos d e referencia
86¢). También hubo casos significativos r.'qm. .hg_uret.\: vias, limi

Si bien para la presente investigación se acudio


geométricas irregulares, como cuadrados, triángulos
al uso de mapas mentales, el énfasis no fue el de
Es
y rombos (figura 86e). identificar cada una de las categorías de Lynch, sino h
- Las representaciones espaciales de esta :_kt.; l comprender la forma en que los individuos repr es—""'-.-:-n
anulan lo:
macro son muy abstractas y generalizadas, la espacialidad, que realmente es menos cartesiana y

les es de laÉ irregularidad


letalali
det
de los límites físicos de mucho más relacional

ALES
ADOS Y REPRES SENTACIONES SOCIOESPACIALES
a L ONES: -
S
RIOS,
IMAGINARIO 516 GNIFI
TOPORREFF 5 EN4TACI
MÁPAS MENTALES rETATO AL OIS LD
SECTOR DDONDS
CUDA KASTA:
0€ MACRNE NTD: — —
AP
EN O
POGOTA — 2 A
CEAl
CUDADMACACCI
NA NTO MI
PAPA ER ey
MARA: TD
_TILA A0

Figura 85. Dibujo elaborado por mujer universitaria.

Nota: edad de 29 años; perteneciente a clase media; con manejo de las cuatro escalas de
tación: 1) octágono como límite de la ciudad; 2) espacio binario con el sur inseguro
y el norte seguro (carita feliz); 3) hitos urbanos como la Universidad Javeria-
na, la Aven irrera 7a y la Avenida Caracas con Transmilenio: 4) barrio de residencia.

Fuente: Avendaño l2016).

Esta profunda generalización de los trazos de la quienes pudiesen haber llegado hace poco. Lo mismo
ciudad que hacen los ciudadanos pareciese más una ocurre con quienes son más jóvenes y
tendencia que una excepción, lo que lleva a pensar que, por ende,
podrían tener menos relación urban
que los habitantes y residentes de la ciudad, indistin- 4, puesto que, con
contadas excepciones, un ad
tamente de su condición particular, poseen gran ulto poseeigual referencia
des- que ellos. Implica esto,
información entonces, que al mo
del contexto espacial de la misma. Así, mento de
relacionar insegurida
en una de las variables de identificación, d/miedo con el es Pacio,
se preguntó Jetos no
los su-
cuentan con abundante S Nive
sobre el tiempo de residencia en Bogotá, les de Contexto
sin emba rgo, como sí sucede al momento
: de analizar víncul
esta variable no marcó tendencia
significativa que lle- micro. La abstracción t am os más
vara a afirmar, por ejemplo, que los bi én permitirá eE
nacidos en Bogo- xplicar, pos-
[L‘I'HJI‘!TI('TIT.(‘, la
tá contaran con mayor nivel de referencia respecto
manera como
rm¡chos de lo
a nos asumen referenc s ciudada-
las espaciales gene
rales.

JOHAN ANDRES
AVENDANO ARIAS
II
Kvorm

Figura 86. Mapas mentales de itantes de Bogota

trato 3, d) hombre de 21 años


de 18 años, estrato 6, C) muje 18 años
Nota: a) hombre de 17 años, estrato 6: b) hombre

estrato 2; e) mujer de - 32 anos estr yf hombre de 29 años, estrato 4.

Fuente: Avi

SOCIOESPACIALES
SIGNIFICADOS Y REPRESENTACIONES
NTACIONE IMAGINARIOS,
TOPORREPRESE
Ahora bien, al descender ; 250 en Bo- robre y sus barrios están
a la escala meso « muy pe an in dad
nun os de1
Eolid, emerge una toporrepresentación dominante de . blroblemas. (Ave
CAvendañ
en RD ndaño 2016
2 = -'
torno a dos grandes categorías: una ciu
a
dad
f
seg
seg
ur a

hacia el rte” y una ciudad insegura hacia el “sur Los ejemplos de cómo los ciudadanos e
(de le 100 mapas mentales pedidos, el 94 % y Otro vez est a dualidad
Mfirmaron
realizó _ son €Normes:
este tipo de relacién). Lo interesante de » este ;
1 mirar ; ; ; sa Puedde y val
este
terr
stema la imagen del octágono de la
es que se fue consolidando en la medida que figura285,
g 01,
gura 86a,
figura 86a, lala “ameba”,
“ameba”, y y much
muchas deas
de -las que - vendrá n: Ju,
.
se terminaron de aplicar los instrumentos. Además, si i go, y enen ell
ellas lala ascoincid
coincid encia
encia eses másmás que AEA
suficiente Cómo =
337 Ti » neri b ar- no
bien este ejercicio se realizó durante periodos,
preguntarse entonces: ¿por qué, si las YAt sz
a lo] I d diRremes eS
,
: s, esta SR Participan,
e50
n lade rdos
epreaños seguido
sentació d temporalidad no iinfluyóÓ prorovienen de diferentes contextos ,_.nc-in
n e una Bogotá dual, en función historias de vida, gru ct-nnr'm¡i
rr¡
pos etarios, roles y
Experiens
de lo que los ciudadan consideran espacios seguro las
os s coinciden casi que domin
antement . en p articionar
1
1105. Los ejemplos que se podrían traer a men- ciudad en dos, en función de la se, Beuri a
dad/inge
l'l.l-‘-'l. real mente desbordarían el espacio J_.:urj.l::-.i,
mismo de la las zonas pobres y solventes? Es Inguietante
-aracterizac
caracter 16 ión ,
a ser representaciones propias de que, Pesa
cada individuo, .
y expresiones memorables como los interpretaciones espaciales sobre Bogotá Stas
» £ Nivel me
nesdela figura 87. La de la izquierda corres- poseen muchas r o,
coineidencias ¥ simili
al simple mapa que elaboró una joven estudian tud
esperadas. Siguiendo €5 que las
a Stuart H all (1997;
se alta de 16 años, que estaba culminando sus :¿unq]l ello
tiene sentido en el hecho de que Perten
estudios de bachiller ato. Alli claram
ente represent a ecemos ala mis
a ma cultura, hacemos parte de 1 mism
Be como o mundo 5
una partición entre norte y sur, mencio- ocial que
habitamos y construimos conjunta
nando en su texto justificativo: sinmlr:‘mu;um.
que, por ende, poseemos referente nte, y
Bog S compartidos “aj ]]¡
it se parte en dos a partir del Cent
ro. Hacia parte de una misma cultura, co ¡L.º.-¡.
el norte yo vivo una n sistemas de rc
dad bonita, tranqu f—:rutu:i;:
ila, segura similares » permite construi le
y moder hacia el sur, que la verdad es muy r ng u ajes Comunes, Sign
poco a través de las pal abras, los *—' os
lo que conozco, sé es que muy º…]“ºftilmicn[()y,-. EN si, es
peligrosa, la gente es €l sistema de sentidos de nues
tra cultura” (Hal] 1997, 15)

Figura 87, Map as


Nola:— 'eqQuierda,
iz
mentales,
mujeñ r estuUd
diia
annt
te de clase alta
; derecha,
Mujeer policía
de€clClase me
Fuente: dia
.º'.—'t—.'1ri<'¡ñ<.|
(z014)

JOHAN AN DRÉ
RES .QVF_ND y
ANO ARIAS
rritorial
en el “norte” ,
ma como se
habitantes,
que grafic
see raices e
sociale
VETS0Ss IlI¡IIl.'¡—¡

bonita, orde
des ed aciones
Espacios pú
residencia
les cey
grandes, con “ge,
cos altos, con dj;
importe . r.--url.,:u.-.'.
l, en
de polici a €, indu
dabler
ciudad sur es car

blación y
y mugre, personas Pobres o,
espacios públicos ,',I[-¡_._¡…¡“.x.-
y pequeñ
as y Viviend
a EN arrieEn
das, caos, ngdo,
aspectos
fisje, S dete
Teriore
r;
cia de peleas, tránsito de habitani
de » 3
a 'Sumo de
de call
calle
dy
Ogas,
e inseguridad. aracaos
ñ
€ tiene así una fiel evidencia de ¢
idealizaciones de un módelo con
rio. Los ving -ulos
mapas mentales y ]3¢ n:
confrontación ent re la “ciud
adp
racional y la ciudad informa]
Popular, aut
y vital. Es decir, son
rL']ar.-:unn.u-i;.-n-_-—
… de
habitar, pero ta
mbién de asigna
r ¢
los ideales y los refer,
vado con ello a la im
plantación”
les a los habitantes de
un lado y, del otro, “
bien” y “población pobre”
una representación de las formas de
-
norte como una ciudad materia] plan
y predecible, monótona,
está tan bien ubicado que no se espe

Haussmann,

as populares

ble Ciendo una

54 sobre una ba

NES SOCIOESPACIAL
curso es verdaderamente un lenguaje: a ciudad hablaa3 5
incide sobre la manera con qué los parisinos viven
sus habitantes, nosotros hablamos a nuestra ciudad =
su ciudad. Esta organización del espacio mediante
ciudad en la que nos encontramos, sólo con habitarla
su historia, organiza la percepción de los diferentes
recorrerla, mirarla”.
barrios en una representación socio espacial am- el proceso ¢,
pliamente compartida. Hacia el norte y el este que
En este sentido, es posible afirmar que
municativo del que se valen los cartógrafos —en este cago
serán rechazados los pobres y los inmigrantes, con
el ciudadano que elaboró su mapa mental—, los lectores
nombres despectivos [.. ]. Es una representación 50-
de las cartografías y los investigadores, se soporta enla
cial que condensa en u agen cosificante históri-
comprensión de los signos utilizados para representan
334 ca, relaciones sociales y prejuicios. (1976, 471)
estas din dmicasas y entidades espaciales; Humberto Ec -O
De lo anterior emergen dos hechos interesantes a (citado por Silva 1978, 91) define.
el no“como cualquier
significado preciso»
nalizar en esta mesoescala a la luz de los mapas men- entidad mínima que parezca tener
Esto, en el marco mismo de las representaciones espa-
tales: el sistema de convenciones gráficas (signos) que
utilizan los sujetos para representar estas categorias; ) cializadas, posibilita asumir que los signos se valen de
diversas formas para relacionar un significado Y una
dénde y cómose define la línea divisoria entre la ciudad
grafía, para lo cual es útil la tipificación propuesta D.
segura e insegura, pobre y solvente. Suavita y Flóre
I’L‘lrt_(‘ (Silva 1973) quien agrupa los signos en ¡¡_Úm_…
(1993), en su análisis de percepción y comprensión car-
índices y símbolos. Sus diferencias permiten asumir ni-
tográfica, proponen el estudio de las formas y mecanis-
veles de representación gráfica de ciertos datos, hechos -
mos utilizados por el lector para mediar en los procesos
de aprehensión de la información gráfica, apoyados en situaciones geográficas que, a través de una cartografía,
la semiologia gráfica de Jacques Bertin (2005), la € al cumplen la función de re-presentar (traer a), de manera
indirec imente se inspiróen el trabajo de Roland Bar- escalada, algo que proviene del espacio hacia la mente y
thes (1998, 260): “La ciudad es un discurso, y este dis- la conciencia del individuo (Jodelet 1986, 47¿)

Figura 88, Paisaje ma


cro de la ciudad al
norte y al sur,
Nota: a la izquie da,3 vista3 nortete
: de
d Boogo
gohatá
tá de€5
sdde la call
| e74: : 3 | a deder
reech
2 a,a ' vistataals urd
ch
esd e la Calle 2 26
Fuente: £ lle
foto'g
grra
affi
íaass dede Johan Aven
daño (2014).

JOHAR N ANDRÉSÉ AYENDAÑO


ARIAS
"as en formas de
quier (lill‘(':'lll:
irados o lí
l. al eg S en cual
*l ;mapa identife ad a figura 86,
la primera imagenal a izqu n ental os con la
ier da de la fig de
se dispuso ura 8g, la imagen d
del gráfico de oy ando
una hoja sentar las zonas
de m arihuan la imagen seguras
el consumo de esta planta 2 Para Futilizó el col
o F verde
. de
o d € pa un Erup Buridad.oy para denotar se-
relación con el consumo stillas en ros Tplos son aquellos
donde
de éxtasis y un €quis para den
= a ubic h ombre mue
to P ar la ocurrencia de un r “chulitos”
rzonas
peligrosas Y “viste
hmn:c:i.tl¡u. Para las se
utilizaron direc Alg unos - Evidenmtemente,
tamente las Palabras, es de fueron tomados de m
ridad”, “miedo”, “hurtos”,
cir ' ]llH\'j"ll- an arbitraria, sin que exi
una relación stie
términos UL, Por estar directa entre el
cionados con el FONCEPto, reja. significado Que
sin ser un er configurando se es!
áfico, Pueden Y la imagen misma.
catalogados en el lengua ser icono, el indice Fuera cual fuese
je de los iconos. o el simbolo,
todos pretendian repres
Por su parte, los índices son eraf tar hechos,
>asociativas, imaginarios, situaciones, lugare
/ ficializadas y generalizadas que, arti inseguros, unos s y sectores
sin ser | a ima de manera directa y otros a
gen misma un lenguaje que permitier
través de
:ív] objeto, le permite al sujeto evocarun a agudizar su postura, Est
Anoción oun con=- e es
septo. - Las
Ce e tres imágenes UN proceso cl aro
E de la figura
f 89, 9, queque r. re de representación, pues se ES an sus-
presentan
armas de fuego, dagas y calaveras, fue tituyendo, reemplazando y clasifica
ron utilizadas en
ndo ins guridades,
liv
div ersos
ers os mapas E
ili % a tr: avés
vés dede cor
con vencio
1 nes cartogra fica
mentales sobre ]?lUIQOÍ('!. Para graf s que,», aun
icas a siendo
representar
i egurid
ins idadad y y ocuocur
rrerenc
r ia de hechos delictivos.
A Personalizadas”, ello no o r
impide realizar a n ror
la inter y Lk
ción de este sistema, pues, en el contexto
I simbolos, por otra parte, i de > lala indag
indaga- :
fía
son signos ili
que utilizan 1Ón yy aa partir
CIÓN partir de
— arbitraria,
= quizá una figura l o s referente: culturales,
de los referentes : el lector, e
i abstracta o una e
.—— e iinvestigador
i u otroo habitante,
FE -z € habitante pue :den
convención q ue no=necesariamente
Sarid posee relación
10 con el
li- comprende
: e -
> el sujeto
i quería
“a comunicar
v icar po! por medio
4 de su mapa
fenómeno, p or la que puede-de ser
s vinculada para un con-
tal, pese a no contar con estándares,
stándares, ese as o catáloros
cepto o pe ara lquiera€
cualgu otraLi expresión. Allí, se tie
i nen, de objeto
j s, 5, ni Di tam
te poco20 enc
encont
ont E dose. con 1
rírán su p presencia
por ejemplo, alIg
guun
r as de las convenciones util
4 iz
adas para Ísiica
fis ca en en elel mome :
nto del análisis.

diI n d i ce s pa i seg uridad.


ra referenciar in
es y
y us o d e in
s s ! mental 15
L nvenciones, mapa
Figura 89. 89. Co
l201 ).
Fuente: Avendanoñ

CIONES s SOCIDE SPACIA


LES
,
SINARIOS, SIGNIF ICA pOS Y REPRESENTA
IONES: IMAGIN
TOPORF REPRES
=SENTACIO
Í.—'L'I Finalmente, para
convenciones Ihlf¡] "ese
I'i‘]'}l' 1
l'\\”l.]l a
r\\ (‘.’lfl'l{("’l;.'!‘i
."I concluir este apartado,
laa exexisistencia de la pos se ana
poscen un sentido y un i
signif i
or más i
icado, pues f E ible línea divisori a entre a
: ST . lo ue
provisación o arbitrariedad que tuviese
jese elel individuo,
ir e ha 1a denominado la 5e
ciudad norte/segura
eolectivo que participó : P in configuró la teniendo ya claro que, en el fondo, est a “fronte y I S/insegur,
en la investigación r"'“l'-‘-trlr;.t_
idea de opuestos, bueno y malg config mente
i -Jll…y.—;inmr';ljr.-],cm i
ita triste/carita
ATfeliz, 5 3 ¡vn ri.-u-imu-—-cc- nla medida :
achurados densos/achurados livianos, espacios — que ese se moviliza- hacia el oriente, como en los ¢
espacios vaclos, nuevamente relacionados rul'r ]{J::;\r;uv de no fue posible amojonaria, "Erros, don.
o f.“ -|;| parte más occiden.
rentes y con el sistema de valores culturales « ¡-lj- r = tal de las cinco localidades que limitan con el río
"”'»’.UI.-',_
336 $e encuentran inmersos los sujetos. La ““vflm_.::l:}; .I a donde la heterogeneidad territorial deja el
aro que Esta
estar tácitamente definida, fue acotada con sig , línea divisoria es allí dispersa, pues las re.
laces Y, por
“cargas negativas” la toxicidad
Tal y laá muerte
5 a a tr tra de ende, las presentacion
es, se ajust an mucho más a
calaveras los vin
o armas de i
fuego; la angustiaia e
con caras
car: tris- eulos sectoriales. Dicho lo anterior, ] a existe -
ncia de
5 y lágrima
tes lás s, , achurados totaliz
] adore ess y y pertur
perturb
badadores, frontera es prof Esta
und amente imaginari
incluso, colores “groseros” como el rojo, que ha sido rela- a, que no Equivala
a inexistente, y está más relacionad a
con las diná
cionado con sangre y calor. Estas cargas, en .º.u-]¿r: Ncas
… ma- y los espacios de vida de lo
s habitantes, Asi, del an
yoria, correspondieron a las zonas del tJL‘HUI]]lI"I:]dH-.‘jlli' de los mapas mental álisis
e má s, s que una línea que divi
(-h- Bogotá, según los diversos mapas anrlmiv.—¿_:¡n.' de |,
¡I-rz:t-- ciudad en dos, se identifica un a gran fr
dos. Es como si el signo utilizado absorbiera anja difus.
y disolviera inicia en la calle 1%, perpendi que
la representación misma (Lefebvre 1983, cul aralos Cerros Orient
23). y progresiv ivaamente > seSe vava cor ales,
De sde el enfoque construct vic
corrrie
ienndo e n se ntido norte,
ivista de las > las
rep resent función de los grupos e 1
poblacionales abordados.
ronr: 1 a-

ciones sociales, es claro cómo el sujeto Por ejemplo,


le asigna sentido y para
los residentes en
signififiicado al hecho en fun
uncció
ió n de * su5u sist las localid a
sistenema de valores; del sur, como Ciudad Boliva LS an des
, 4 la denominada inseguridad, que más Cristóbal 9 Us
en este cas
allá división empieza a aparecer en me, esa
de ser el centro de Bo
una nocion genérica, toma acepciones gots, un
especifi I Yoo más ha
as En este periodo histérico concre cia la Ave
to con referencia a v ision se extiend ha nida Calle 6% sin embargo, |, di-
Ui espacio1 urbano, en torno a e sta la calle 26, qu
lala ocuocurrrenciala de de muemuer e, quizá Por má
r tes d e doscientos años, fue el s
violentas, hurtos y agresiones límite re al de Bogo
(Foucault 1976; Hall 1998). tá, cu ando,
Ello sin el prejuicio analítico luego de la migración c
ampo-ciudad
de que en años anteriores , e sta traspasg el
la ciudad no necesariamen sector de San Diego en
los años 1940
te presentara estas . Esta mism
pues en la primera década
categorías, ferencia la poseen los r a re-
del siglo xx1 la inseguridad esidentes que ha
po- bit an las lo
drí
a haber estado Tepresenta lidades más cere anas al ca-
da por la posibilidad de centro, pero del |
ser decir Chapinero y Teus, ado Norte, es
víctima de secuestros y e xt aquillo, quiene
orsiones; y por explosio s coincide
atentados de Jos años nes y la ciudad posee una nen que
noventa, “ ‘ruptura” mar
cada POr la Avenid
Las descripciones ante El Dorado/Calle 26, a
riores ofrecen ideas afirmac ión So
de lo que portada más
enesta investig ación dentes con más de por resi-
seha denominado la 45 años de ed ad,
e: scala sectorial hombres Y
de las representaci Para los jóvenes Mujeres.
ones de la inseguri universitario
dad, en este caso s de clase me
aplicado al eje occi
dental de Bogotá. Es misma referencia dia, esta
importante este de | a Aveni da Calle 26 se
tipo de caract eriz: iciones, pues, cuando ello depend
si solamente se hubie e de E
examinado ] as dos sen que estudian, pu
primeras escal: 15, ge es quienes se
neral y meso, no desplaz an ha
sería posible identificar a la Universidad E sta el Cent
|; 15 diferencias no Xternado o | 08 ro
rritoriales de | tor; amente te- Andes
as expresiones de Privadas— e I ——institucío
inseguridad en es sur empieza incl ncs
tores y bz irrios que, tos sec- uso en la ca
debido a la genera cambio dcuwrfolng lle 45, con
lización En torn í ay arquitec el
de una ciud ad o tura. Para E
su r y una norte, po unive rsidades studiante s de
drían quedar oc me nos céntric
aro, entonces, qu ultos, as, como ] a
e muchas de dich tólica olaPi lo Distrital, 1,
as Expresiones to, el norte Y Ca-
inseguridad se de el sur es una tr
e Structuraron da entre la Ave ansición que
a través de la id nida C alle 72 se
de hitos loca] ES CO entificación ( A v e n i d a Chile) y la Av
MO cuerpog de Calle 26. Esta enida
avenidas p rinc a ua (ríos y hunw sep aración
ipales, ins titu dalos), posee una ma
yor coíucidcn
ciones educ at con la Postura cia
nodos de a ivas, p arques de los res ide
elomeración de y ntes de estrat
actividade. S eE micos 5Y os s ocioecon
conómicas 6, para quie nes ó-
, la ciudad clar.
entre la Aven amente se d
ida C zalle 85 ivide
y la Ave nid
a Calle 7

JOHAN ANDRÉS
AVENDAÑO
ARÍAS
Sea cual sea la
radica “linea”
en la transi
ci ón de
de consery ac an
ión de |
que ver con

al que se Perteneco,
administrat
iva Asumida
para por
la ejecución
Política; de
franja imagin
aria que divige
la ciudad implic 1.
a [, Asignación de
des y habi =
tantes.
allí sa ratifica
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e e los victimaric € T
5 Provieno
siquiera se está
En la cap
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en tanto emergen guridad »
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Zas que E Bares y
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como discu m ¿ : u l ¿ mu. Ello se t‘
; -.lh:lnlll:ll\u Y.delas del Conflicto
rso, sino A: du EXpresaA MO so| Y conúi.-
l.nctm¡]u. armado inte
practi 5 y en las e posee imp a
.‘1 o I ue Vive: ;
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rno

r\'].'lL'lnn l i c c i o n e s en las ven ciertos


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m: Sociales 1 Otro tipo
5
de la Población,
algunos residentes , Pues,S, po
r c—ari: de r no ES
del : denomin ado e -mpi o,
EN Irmaciones car
ajena
seatrevan n orte de torno de
a transgredir ]a “fror MHera” Bogotá no 5 = |a Inseguridad, efecto
que su Contexto | Ic'lrnllhc‘;n' Cl aramente,
reafirmado, 1 * Perspectiv £ uE posible
por temor a -
aqu Caldeira
ser víct ima de la
10 acerca de -007) docume
especificam al gu na ag resión | as discusione "S n
ente de algún hecho so br e el crimen y su
delictivo. Est los con la si vincu-
a aprecia- tuaci ÓN social
ción se soporta en todas las Nárr del Pals; la cris
ac y el lll')il?l'li¡)'ll' is ec onmómica
donde los indivi lo nes ya desc u como detona
duos justif f ritas dores de violen
ic an su Tepresen
tación
última s, contribuyen cias que, en
personas de las a la estand arización de un
que habitan el sur Y que iden pecífico de Inse tipo es
tifican o 0n guridad y ala justificació
estrategia de “supervivencia” una ciones Coerciti n de interven-
basada en el hu vas por parte
rto (Her- de | as fuerzas de s gur
nando San z, 1999). Por las evidenci as encontradas
idad.
en estas justific
El último Y para comprender las aciones
nivel escalar, el que formas de esta microesc
se ha denominado ala, que
como microescala, realme nte es el Espacio de vid
es quizá el que se re a mismo de los sujetos,
laciona con los se analizarán
preceptos de Guy Di Méo (1996) cu a continuación las espa
delimita al espa , ando afirma que se 1 as cializaciones de
cio frecuentado experiencias cotidian
por cada uno de as EN torno a los lug;
no- frecuentados según rSa
el rol social, con el fin
sotros, a los lugares cotidianos, los de identificar
nodos bases de la las relaciones construidas
is
existete nc ia in di .
vidual: la casa, el trabajo, en el sistema de representa.
sus recorrid, os cilóón de la i
inseguriidad,
dad, entr entrelalas
s for for
mamas materi
Í r ecuentes
3 y3 cotidianos s mate rialesales de lala
idi: » ,elEl espa
espacio
c i de
vida.
1 É xio-
Las 5 refle a ciud
i ad
i [I!!MHIL.H ]OB.
iliari os, infra estruc 'Lllrns}. s lll'!‘."u i!\\i\‘t.";'ll'd'l'.\ob
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E toria lmeente
rialm E a,
a B{JQ,U
i pulzluc'muak‘.s.
; ayoría con referentes limitados De las encuestas aplicadas a los 403 1-(-91¡'…?…&? uu_
— oo ook ral de la ciudad Bogotá,se obtuvo una línea base interesante para com
—— I[lrt'um' = _L_' E $ 'FI;I(
misma. Esto inevitablemente mmd.{: en I: fu:IIn…Í ]uú“! pl'tl.-)ndm' la valoración y la significación socioespacial
de e O comolcalifcaba …J…
: ;
< se evidenció una tenden-
— “1(. …l | el mmm‘n;n | ación
de la aplic
otro tipo de expresión, pues bt- …] o , la seguI
ridad en Bogotá ;
> prejuicios y la en su barrio de residencia, a 'lulqm u R
cia a la generalización, la …ÍÍ…JI( l-(]ll]
ill:tlf'*iíºll apoyados respondió con tcndcm-u; ….g…“:_:.13;12;]
alimentación de estas narrativas y _
U Da e
princi: palmente deen - ; secundar EEs (meddios
aria
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| antea una pe 'cepci2ón ¡ preocupante, mucho
o imag inario
imagin: [Il 5 dL ? Otros
ros Ciu-
Ello plante a una y rcepción muy preocupa
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muni acio n, . -omentar£ ióos
co

Y C NES 5
RE PR ESE NTACIO 50C IDE SPAC IALES
5 , 516G NIFI CADOS
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TOPORREPRESENTAC
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tro Quintas pia g En tal sentido, ha de entenderse que aquellos lug
del entramado público, o del mobiliari.
urbar |I s de los y espacios
espacio
mente ins te enun altaa-
año y barrial alt ar un heeho delictive o un episodio vio vío.
SE EUro, le 9 que r
ind ica que sus repr donde tuvo lug:
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unaa1 see de gurados b o un imaginario de micdo, Mando la
qu e se les asigna, así como las forma.
EG
escalar. ;
Ahora e bj en represents
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Para
me, z apropisarlos,5, 1 nombra
apropi yrarlos
Puestog » *d comple: 1entar los análisis ya ex- de habitarlos, los
% En torn o de las Fepresentaciones
de las donde se cometen elitos e
de la ej territoriales los. Por ello, los lugares
- g
"a Ciudad, - 5€se profundizó cons titu yen en terr;
en otros aspeet Él transcurren hechos violentos, se
€lemplo, se preguntó 5 Aspectos, Así, por
do o espacios topofóbicos
5 “SUNtó a e
ral 18% que se siente se- torios del r
Buro cuengál era la razón ce . anos, gent ido conductas
ntr Ide su afirmación, a lo que, rio de los ciudad . .
de man, lo afirma Capron (2009)
Anera comi 5 . hacia ellos, t al como
Un, tanto a nivel Bogotá como barrial y tiva ha 1 los lugares, más allá de un a
EN una p orción
Prop
Esimilar. le asignaron la justific: -ión nificación ne
de ser lugares : perspectiva f jonal o contenedora del espacio, es |,
tares tranquilos y conocidos, y la presencia y topofabia
efectivida E que aquellos pocos que Yi Fu Tuan (2007, 129) ha definido comomiedo
Ividad de la policía. Es decir
2 . es decir, ese vínculo del , el re
hábitat hacia el
sient
Que se sien e: -
uE se tes seguros lo atribuyen, por su experien , lo cual se conden
vida R ;
conocer chazo, los conflictos y € ] desapego sa
Cla
de
de
vida, a la cotidianidad que les permite o lo que Matthews y ur
los espacios;
transitar sin mayores prejuicios, incluso por lugares en temor hac
do la sensación negativa -
de reconocer bert (2008) h ; denomina
haber * 5™ además
donde pudiese
de yego hacia los lugares, que llega a producir incluso
que la presencia policia | es un factor que disuade al de-
limitacionesde tránsito.
lincuente o lo “protege” de algún hipotético peligro.
Los ciudadanos abordados para esta investigación
o lugares de mayor
ubicaron por lo m enos seis ámbitos
Espacios inseguros y delictivos es decir espacios topo-
miedo e inseguridad (figura g90),
Felipe Javier Hernando Sanz (1999, 13) y Avendano
crimino fóbicos, pu es se convierten en formas de trampas urba
2016) documentan cómo, desde los estudios
ialización de hechos del ictivos
nas que facilitan la mate
lógicos y en lo que se han denominado la génesis de las
o violentos. Además,las veinte opciones fueron
todas
geografias del crimen, las asociaciones entre dinámicas
para algún
s valoradas, es decir que en cada una de ellas,
sociales, morfologías urbanas y ocurrencia de hecho » riesgo, aclarando que podían
grupo poblacional, exi
delictivos datan, incluso, del siglo xix. Ciertamente, la
seleccionar todas las que desearan, pues no son mutu a-
Escuela Cartográfica de Criminología sienta las bases
mente excluyentes. Los casos dominantes son duimj(-,
teóricas y metodológicas para el desarrollo de la geo-
de los puentes (43-4 %); los sectores marginales (34%):
grafía de la violencia urbana, cuyo “objetivo fue el es-
tablecimiento de las variaciones en el espacio y en el rondas de ríos, quebrad as, caños y humedales (30-'5%].-

sectores de gran afluenc 1(25.3%); el tránsi-


tiempo de los comportamientos violentos, identificando
comerc

one s y
sus principales diferenciaciones espaciales” (Hernando to por los puentes : ales
peaton EN estaci
(24.6 %); yy en Es
paraderos de Transmilenio (23.3 %).
Sanz 1999, 13). Ello da cuenta de la forma como se han
venido construyendo cierto tipo de toporrepresenta- En general, todos esto :asos hacen referencia a ES-
ciones que, si bien han sido ricamente documentadas pacios de tránsito peatonal, los cuales corresponden a
(Guerrien 2002; Lindón 2006a; Martel y Baires 2006; infraestructuras obligatorias de circulación, que hi.¿ln
Mucchielli 2013; Niño 1998), para el caso de Bogotá es “economizan” el tiempo de desplazamiento al querer
un campo que ha sido opacado por los análisis cuan- acotar un tránsito, o son las únicas opciones, como el
titativos o meramente cartográficos, lo cual también caso de los puentes peatonales. Ejemplos de ello S0
constituye una oportunidad para el desarrollo de las ilustrados con las figuras 90a y 9ob, con dos si'tin; 1nx
geografias locales. cruce, uno en el norte y otro en el sur; es claro quu‘u:ttl
."»f;r,--iw'_\ Baries (2006) consideran que la ir]lit].:[‘rl de tipo de infraestructuras condicionan la movilidad (,:t ;
lo inseguro deriva de tres fuentes principales: las ex- un diseño funcional, pero no están pensadas en L…
periencias personales, los relatos de otras personas y diseño apropiado, al punto de que facilitan
| la vicliul?
osrelato,
cidios f idos5
[.Ill'rll'flílllfll P pc r los 5 medios
i de comunica
Ccar Ón zación de h los tr ranse
inseuntes.- 5. Sol I“ caer en I'III'lglln l'lpfl deÉ

JOHAN ANDRES AVENDAÑO ARIAS


es la conc

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de imágene ‘_'jru1u->. s
s que asignan on
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í
lugares inseguro Ur tomarse
s ilust ados enJas
Cor
de la figura 91.
Así, tanto los entornos de los Cs
agua urbanos
(ver figuras g1c
Y 91d), en r Uy

Jacobs habla
o~

de dos tipos de Bspaci


25 cuando verdaderamente
ocur reu
negaliva, suscitando 10 un sentimiento
un sentim ent
el luga - r, dadao
z rtir
parti d de laex JErienci
P a prop
dun, o una imagen los p
del miedo transmit res son terrib:
icación (199* 167). El o
es aquel cuya Se acercan gr
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todo lo externo se torna so
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CUro siento y másE vl 1
y y me me siento
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2016, 300)

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¿tuamente excluyentes;
tes bas e de 403 ciudadanos
s
Nota: múltipleres
estas que s

p
sentación:
sla de represent cálculos propios
iónid propia
orac a apa
p a [2013-2014
EE n te: elaborac
Fue

Figura 91, Estructu


ras urbanas insegu
ras,
Nota: a) Autopista No
rte con Calle 100; b)
Autopista Sur/ Me
barrio 5 de noviem issen; c) Fontibón
bre; e) Estación , Modelia; d) C ar
21 Angeles, Avenid rera 3o,
a Suba: f) Est ac
ion Avenida Ji
ménez,
Fuente: fotografía
s de Johan Aven
daño 12014-2015
),

JOHAN ANDRES AVENDAR g ARIAS


transporte n
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Inciden
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e, s Soci ale
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esta vez no un Mayor Posee 1e5 las su
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fisica, Puest Si no contra su formas de relaci valor aciónde
o que allí p ilHl':’,l'M;nl 'ones cotidi estas
ueden ser po Plante; ado an, a5. Asi,
de accesos tene iales V hasta el me de ac er do con lo
z arnales vio íctimas
lento s sin @ EXperienei
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", C5 Propicio
Proximas, Estos result ntar con a
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co a vivida Po rec E
ados coincide rado los r los a C
TS que ha
de Pain n con los estud lugares de n conf
(1997, 234)
, respecto ios y É
105 1imag ;
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a la L'c]n!i; Inar: 105 nder
geografia diferenci ales
_'_ur;u'ic 'm de que pr
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iCiones INCOmor
una de las expl como Con espacios, ;
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ha llevado a Prod pueden se as
nuevas maneras
de movilidad po
ucir ociadas con situ
doras de Pa ac Aot
r los espacios ur nicg (Niño
Comportamiento banos, 1998
s e interrelaciones, !;;1'.;1Inu-|'|lu.
Es cierto que no
Los hombres jóve NES, misma de solo la ocurrene
ia en sí
Por su parte, mostraro algún hecho alim
ent ta este tipo de rep
Cupación por el tránsi n preo- taciones, puesto que resen
to en parque 5 Y Zonas de manera casi que repetitiva,
es, ello verd uno
enel sentido de que y otros ciudad
el rol cultural de “macho, m anos . l]L'_i;i&'UH entrever
asculino, que el uso dado
barón” les impide social a los |11;'1¿n'.'.c._]
a5 condiciones de soledad
mente :aceptar el mied
o, así sez 1 ilumir lación osc glomeracion,
uridad, horas del día de
mMáyor y menor
tránsito, cotidianid
ad de su uso, incluso la con
dición
7
É Bogo
En o tá, ; a 2015, se había agudizado individual misma de poder reaccionar
- la denuncia
: , el; potencialmen-
análisis y la estigmatización del servicio y la seguridad te a algú s n tipo de violencia o vulneraci
on , influyen
misma al interior de los sistemas de transporte sign¡i|L*;11'1-r:uucrmu
público y en la valoración de topofobias. Es
masivo; sin embargo, al momento de la implementación decir que la funcionalidad, el uso, la dinámica
y la es-
de los instrumentos y la caracterización no w.hahla tructura misma, aportan un valor signific
ativo en ¡-.:—'u
hecho tan evidente, por esta razón no se hizo enfasis en
representacion de inseguridad, de la relación vspíwllu
r--5-1.|_- analisis, por lo cual se podría sugerir desarrollar
;
lugar-individuo, quizá sin necesidad de penetrar
este
este e árr an
ambito en futuras ast aciones.
investig nes. Solo
Solo ppor en u
mundos interiores y particulares de cada "“"…]_HÍL mlx-….s
mencionar lgunos p precedentes, hacia mediados de
algunos
m arzoF del ? [ " 3 en cues L a de
2 percepci
la colectividad permite caracterizar L'.xl¡_u.—; cnnn:.hmm'u- \Iu\l
percepc ón de la Cámara
de Come
merc ooy al mismo tiempo, las formas fisicas mismas (olores,
.o rcio
io z afirmo qul e el 87 % de los5 bo
bo nos tenia
gotano C
(El
usar Transmilenio (El TiemTiepo
moo 2015
2015
ces) ) dedan cuenta
uenta de
d ello, - £ como ssil
i interiorizarar
riorizaran £ con vida

j ONES
TOPORREPRESENTACIONE AG| K
IMAGINARIOS,S,5 SIGNIFICA
IGNIFICADOS
3 Y ESE5
REPRESENTA
RE v
-10 M ES SOCIOESPA
C ACIALES
presentaciones; es lí cuando las legitima Y las ub
1997, 209). Esta arquitec= 5 Ubica
propia estas narrativas ( Pred
2000), rige al nivel de una realidad dada.
rurización y estetización analizada por 50J
“positiva ,
aoración
fuertemente como parámetro de Pobrezas y marginalidades ""'hiil'l;a_-‘;'!
E
en los c -riterios ¡ de sig-
estando casi que compenetrados Mexión acerca de las lupr,rr¡—[,.-¿.__¡¡_.…,“_…l
los En ls aciones
que reproducen sent
represe ac ione 5 : sobre
ntac
nificación ios sociales de la pobreza y la d…'¡-l'“'lld ;
o es que e imag >Ualda,
lugar 5 y los espacios. Sin emba rgo, lo llamativ sociales
los actores mostraron las diferentes dime
esta misma también es una const
rucción, es ; decir que n i
siones constitutivas, según la experie ncia vivida
los parámetros estéticos de “el incia y sutileza urba- en
sus barrios y localidades. Aun cuando no se hizo My
culturalmen
342 na”, también hacen pa rte de una ideología evidente, en cada una de las definiciones que e,
porlo
:
te situada en un periodo histórico concreto y que, construían o de los ejempl s
icar lo s
ifics os que ponían siempre había
tanto, puede cambiar y en consecuencia modif
un referente espacial. El enfoque de caracterización =
criterios de valoración estética de la ciudad.
soportó en la realización de cartografías sociales, ¡[…IIU
Finalmente, la estetización en sí mi: 1a NO se constitu-
que estas se entienden como un camino que despie rta
ye en un problema en la valoración espacial, la dificultad
aquellos recuerdos primarios, de la inf
:-'.—'i.e en el significado asignado: iluminado, vanguardista, ancia: el Poder
dibujar. Acá no interesa si se es un gran
el 1nte, suntuoso, costoso y exclusivo; en oposición está arquitecto
un ama de casa, o un adulto mayor que no sabe leer
lo vetusto, en mal estado y oscuro e indeseado. Estos va-
lores, de manera frecuente, son asignados no solo a espa- ni escribir, pues todos ellos, sin excepción, se dejan
consumir por esa magia que tiene el dibujar, del Poder
eios y lugares, sino también a los habitantes que practican
su cotidianidad en unos y otros: elegante, gente de “bien” hablarde su cotidianidad con otro lenguaje: |5 imagen
y seguro, frente a descuidado, “pobre” e inseguro; un Quizá el secreto se encuentra en que cada uno de los
determinismo altamente reduccionista, excluyente y pe- participantes empieza a darse cuenta de que posee Te
ligroso en sí mismo. Ciertamente, es una manera de evi acumulado de saberes y experiencias que solo se lo
ha
denciar cómo se imponen los espacios sobre el individuo, dado el habitar su territorio, un con
junto de informa-
cómo se condicionan las prácticas reales y las maneras ción que es importante y útil. No es, además, un ejer-
de relacionamiento, y no al contrario, puesto que hay un cicio difícil, en tanto que entre todos hablan
¥ plasman
“empoderamiento” de la función y la forma urbana,de sus en el mapa su día a día, lo que
ven en las calles, en
mobiliarios y equipamientos, para regular y condicionar el barrio; lo único que hacen es poner en un papel su
las formas de vida. Dado que estas estructuras son regu- espacio vivido.
lares y racionales, la cotidianidad tiende a ser ordenada,
En palabras de Guy Di Méo (2007) este
racionalizada, homogenizada y controlada (Jacobs 1993). tipo de car-
tografías pueden verse como
Así, en estas valoraciones se da por sentada un ejercicio de “espaciali-
una dad de las identidades colectivas”.
“realidad” y se estandarizan como mecanismos Un sujeto, bien sea
que en su sentido g rupal o indivi
nasifican un ideal de deber ser, como dual, relaciona los Marc
el caso de | a os
materiales de sus espacios
gente de bien"; y también el ideal del Eeográfico y de sus
no deber ser, rios con los acontecimi rit
como la vida del delincuente o del hab entos de sus propias
itante de la ca- viw.‘nc;::;_
les asigna simbolosy va
lle, al punto de que tales valoracio lores. Desde la perspe
nes se convierten en ctiva m:i:;
general, puede solicitá
referentes: “[en] esta sociedad rsele a los participan
las masas pareciesen tes de ]o\-
talleres que grafiquen
aceptarla inevitable dominaci su espacio de vida
ón y la supremacía de las (camin;:nq 5
de splazamientos regulare
distintas formas de ch'[í.—urw.- s del individuo), o
s"[I.:'r'c'hrrf' 1983, 11), Más su eq¡;(¡;;í&
allá de comprender la evi vivido (de prácticas
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d de Sus re 2013). .
n extracto de Avendaño (2011:

JOHAN ANDRES AVENDAÑO


ARIAS

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