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:-¡

'.J ��1c��1te: Jdviaii Sanjínez Salazar. . ·. · ·. . . .. . Deontología Jurídica ¡

·------·---------------

a la s o ci e d a d total por el irrespeto al Abogado m l s rn o . no obstante que el medio social

3
lo empuja a e ll o .

El medio social injusto lo haría partícipe de causas y b e n e fi c i o s injustos.

Sin embargo, a pesar de estos eventos humanos generales en esta época, cabe la

excepción a esta a m p li a p ro b l e m á t i c a expuesta. N u m e ro s o s p ro f e s i o n a l e s están a buen

recaudo • de estas conceptuaciones. Como puede · darse el caso, que sectores

poblacionales que han o b s e rv a d o la rectitud con que han actuado o han i n t e rv e n i d o

ciertos p ro f e s i o n a l e s del Derecho, responden respetando ciegamente al Magistrado

que ha mostrado p ro b i d a d , p ro f u n d o crit erio de co nciencia y a f ec t iv a correc ció n e n su

la bor f unc i onal, y al A b og ado co m o estr i cto c o laborador del

7. DEONTOLOGÍA D!E LA PROFESIÓN DEl Af.M)(�AOO,

Hem os e x pr e sado q ue la D eon t ología es una un id ad de la T eoría É ti c a : i g u a m


l e n t e , se

ha desa rolla r d o u n a po s i ble al t e rna ti v a É i


t ca ; cua l e ,s l a ne c esida d d e ·construir una

Ética de may o r alcance, una Ét c i a i nte g ral mot iv ada por dos mo m ento s dirigentes. El

pr im e ro , con fi gurad o por una Ética inicial o individual, y po r un secundo elemento de

co rte É tic o . La É ict a d e a


l "aspiración", L o s mismos q u e in ser ad t os , si n du d a darán

mejo r norteal profesional d e l Derecho,

Líl Deontología r e spond e a un "Deber" cívico y h u m ano , e n tan to q u e considerada a

ésta corno l a "Ciencia de los deberes", promueve un imperativo en s.us acciones, e x g i e

el cu rnpl m!en i to de sus de b eres , t eni endo c orno p r ec u s r o r al A bo gad o qu ien debe

a p lic ar los en la reali z ac ión de sus f un cion es .

"D eontolo gía forense" e s l a temát ic a q ue n o s i n ert es a . D e é st a nos ocuparemo s e n la

d i sp e rs ió n tem á tica adjunta, ele lo s deber e s mora l e s y co mportamiento moral d el

Abogaclo: R esp e ct o d e sus cl i e n t es, r esp ec t o de la s autor i d ades j u d i ci a l e s y ot ro s .

El Abogado mediante la Deontol og ía Jurídica, de berá de asirnilar conocimientos no

e st r i ct a m e n t e legislat ivos, no cocJificaciones d e conducta, q ue v an a repercu ti r en su

ac c i on ar, c omo puede s er en los p ar á m e t ro s jud i ci ale s

t
/,

l

Í;
El A b ogado ha d e es ta r mo vido p or normas Deontológicas; ha d e co nte mplar u na

v. mor al de " a ce ro " , un a amplia t ransparencia , qu e no doble g u e su ess endi r atio , ni

r:
si quiera an t e e sta m ísera socieda d. No de b e to l erarse n i la am enaza ni a
l co rr u p ci ó n,

!,:

¡; pa r a que así, al fi n a l de la br ega, e l Abogado pueda dec ir sin c a v il a c i o n e s , l


o q u e

e xpresa el M a e s t ro Castillo Dávila : "Tengo la concienci» trenquite, por que he


f
¡:
cumptido mi deber de Abogado l'JI servicio de la ju:#:idt,' -� (1.2)

1
1:

� {.i2)CASTJLLO D,4VILA, MeJquf¡¡des !_'_f}b,_ Cí !, ; págs. 11:r y J'll

f /Qníversjdad Privitda Sái1T)0dm · 3-?. __ . _ . Facultad de Derecho y C.C.P.P:I

L �
· e Deontología Jurídica 1

7 . 1 . EL ABOGADO Y SU FUNCIÓN SOCIAL.

El Abogado, ante todo, debe cumplir con una función imperecedera, la misma que

cubra todos los aspectos de su vida y de entrega rnisional 1 pues se torna necesaria

su presencia.

El Abogado existe conforme a un marco funcional, el Derecho y la Ley. Y en la

medida que aparecen diferenciaciones serias y dificultosas provocando, como .

consecuencia, vasta complejidad respecto de las relaciones entre las personas, la .

profesión se hace evidentemente necesaria. En eso no hay lugar para dudarlo, ha .

contribuido a cimentar las bases de la organización social, según sea la realidad l'

sectorial. •

El presidente del Colegio de Abogados del Distrito Federal de Venezuela, Dr. Luís

M a u r í C. 1 expresa citando al tratadista Piero C a l a m a n d r e i de su libro "Demasiados '


!
Abogados"
í:

"la función del Abogado es rde cerécter público y.'1..1} ✓

Seguido manifiesta :

''La intervencíón de los Abogados sirve cabalmente para liberar el Juez de una

lucha contra la ignorancia y la mala re. que le qwtaría toda la serenidad y toda la

equidad del Jukio, puesto que la presenae del defensor que representa y eslste,

es garantía de e/encía y probidad Después eareos. el Abogado es un precioso

colaborador del Jues; por que labora en su lugar para recoger los materiales de

litigio traduciendo un lenguaje técnico la fragmentan as y desligadas afirmaciones


de la parte. sacando de ella la osamenta del caso jutiatco para presentar/o al Juez

en forma clara y precisa y el modo procesa/mente correcto, (14)

De aceptarse la gestión del Juez en función de su carácter público, no podrá

desconocerse que el Abogado cumple también una gestión semejante por su labor

de investigación y de cumplimiento de la verdad procesal. ·

{13} Actos Procesa/es del Derecho Vivo (Acta de tondo , 5íntesis del pensamiento

Jurídico de la Casación Venezolana} . oirector : Wiilüun Rísquez y rrriberrem) Nº. 23-

24¡ VoL VIII; Tomo Y; Enero -Julio I' 1973; Pág, 473,

{.14) Idem: Págs,, 473 -474

IQtiivf:!:rsidad¡1riyáda SanPe�dro _ . ·
r
l. 1

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_ocente: Jovían Sanjinez Salazar - Deontología Jurídica 1
Lit-�----------'---���---'---'---'-'------'---�----'---------=------ __ cJ

El Abogado representa la conciencia jurídica '/ el respeto al Derecho de un país.

Ello no se puede medir por la cantidad de juicios que se ventilan en los trlbunales,

sino por el mejor respeto a las normas y a las leyes que rigen las relaciones y
:e

negocios entre personas; un mejor conoclmlento del Derecho. Es decir, une mayor
!a

cantidad de profesionales de la Abogacía haría, naturalmente, que la conciencia

jurídica de determinado país se acrisole, se eleve o se incremente. En esas

condiciones la fuerza del progreso y del desarrollo sería más constante hasta

conquistar el engrandecimiento en todos los órdenes de la v i d a .


a

'a

Pues en realidad el Abogado cumple con su propia función social:


a

"Los Abogados están llamados a ser directores de hombres, a

ejercer una función de gravísima re.!iponsabílidad como es la de dar

consejo al prójimo en asuntos que tiene repercusión social y cuyas

consecuencias perjudiciales y trágíca:.s,· en oceskmes. dependen en buena


s
parte del consejo dado, Por tento. soto desconociendo esta función

soda! y moral de IB Abogacía,, puede sostenerse que el Jurista fe basta

conocer el Derecho positivo y dar en cada caso la solución le[;p.í:,I' a l.0:5

problemas que se cometen a su Jutclo "(1.5).

La función específica del Abogado se desenvuelve interpretando y aplicando la ley


a
según el espíritu ele la Justicia. Formulando las non-nas jurídicas que deben

ª sancionarse para corregir, modificar o sustituir los preceptos legales injustos o

inconducentes al fin que persiguen y llenando los vacíos legales con normas

extraídas de la justicia. Para esto el Abogado debe comprender las modalidades de

las relaciones humanas que reglará con la Justicia, medir además la intensidad de
5

las fuerzas productivas de bienes sociales y apreciar, por último, que dirección
Z'

lleva las corrientes.

Actuales del pensamiento. moral y cómo actúan los qrupos de la población

interesados en instaurar la Justicia y los que se oponen a ellas para conservar sus

¡-
privilegios.

7 . 2 , SU ÉTICA P'ROFESXOt�AL

Por su condicionalidad social, su Ética trae para si la demostración de una

profunda capacidad sociológica y sicolóuica, además de una sólida aptitud

normativa en grado s u m o , L.e es un imperativo el conocimlento del devenir social,

de esa estructura social, que se sostiene por elementos s u s t a n ci a l e s como el

tecnológico, comercial y, principalmente, el económico, a fin de optar por el

convencimiento de una realidad inhibida de tantos actos humanos. La

argumentación de los diversos aspectos sociales será i::!emento interpretativo del

{1.S}Revista de Derecho y Ciencias Sociales (JUSJ. Director : _ Ltc Juan

Lenderreche Obregón; N°. 11.4; Tomo XI; Méxfcr,'.: Em-Jro; J94li. Autor z

Rafael Preciado Heméndex.


r
r

/Docente: Jovian Sanjinez S á' l az ai : ' :Deontqiogla Juridic:;1 j

Abogado. Su situación, es muchas veces movida por tempestades sociales,

permitirá retomar los resultados para calificar y luego rectificar los errores que

pudiera cometer, producto de su inexperiencia. La enseñanza que obtenga de sus

experiencias, le hará entender el buen trato cuando esté al frente de sus Colegas,

Jueces, Fiscales, Clientes, etc., en el que tiene que actuar con cientificidad y

erudición. Además, como hombre, en su estricta · actividad privada ha de

preocuparse de conservar su buena reputación y la pureza de. · su honor y

demostrar su transparencia.

"oebe rechazar los negocios sucios; J,ast� que punto haya de rechazar

'también a las personas de mala 1721putr1ci6n, es cuestión de tacto, que


no ha de contentarse mirando el aumento de la clientela o el
incremento de los beneficios, sino a Jo que exige el cumplimiento del

deber, es decir, en términos objetivemeare ctentiñcos: Guiándose por


las prescripciones de la ley fundamental de fi1 cultura" {.t6)

En tal sentido, el abogado por estar en los intereses privados, es q u e a c t ú a para

salvaguardar un derecho o derechos que se quieren declarar o reclamar. Quienes

recurren a él buscando orientación lo hacen porque confían en su colaboración

profesional. Para absolver esta conclicionalidad el Abogado Uene que poseer

elevada cultura, fomentarle constantemente, esto lo distinguirá de las demás

profesiones liberales. El de poseer vasta cultura Ética lo inducirá para actuar con

transparencia, y será un convenodo de lo que hace. Se convertirá, entonces, en

un ser profesional con elocuente conocimiento lógico jurídico, con puro animus

socializante, además podrá obtener un merecido poder económico que le permita

estabilidad en su familia, y así pueda cumplir su función específica, dejando de

lado la argucia en lo económico de honorarios profesionales, necesariamente.

El meestro Piero cetomendrot. en su Obra: "D'enwsiados: Abogado.�'�

citado por Pedro .fJarbo:;:a de la Torre. En te R.1:whtfA de la Universidad de

Zulia, expresa que: "El Abog�do no soto debe estnr provisto de Ciencia,
sino que debe sos; sobre todo, una conciencis.s., -"(17)

{16) SAUER, Wílhenlm: Filo.�ofía Juridk» y soctst": i:dit. Labor S. A . , 199.1;

pág. 303 (traducido directamente ¿;<J,J Atemé» por Luts Legaz La cembre :

Profesor de la Universidad de Z;;n'lgo::ta)

{:1.7) Revi5ta de l
a facultad de lJerc"¿qf;o {Unjversidad de Zulia). Director :

jorge E. Nuffez (Decano); N°. 42,: Año XIV: Setiembre - diciembre, 1974

• Autor : Pedro A. Barbo:m de la Torre. Dr.• .Jorge .Er1rfque Guiierree,

[unlv.ersidaci Privada' Sa nP e d r ó ,- .
r

!Qoceqte: 1ovian Sanj in�:Z $ala}ár •· . . • • ' - : ,-peOntologiá]


1 .:1rídica 1

A partir de su formación subjetiva y veraz, debe responder a una rectitud y

probidad dentro del contexto normativo; es decir, legal, corroborado por los

elementos extra-legales. Dé o p i n i ó n p ro p i a .

Un Abogado carente de sensibilidad social, i n d i g n o con su fiel juramento, que no

comprenda que si una persona va por su ayuda es por una necesidad e

ignorancia, además de comprender que es un problema humano, y que de alguna

manera compromete a la sociedad, ese Abogado jamás habrá comprendido el

significado de angustia, de necesidad, de apremio. Sólo provocará suma

desconfianza. Aunque hay que rescatar el hecho que no todos los Abogados

manifiestan estas conductas. Esto desde n i n g ú n punto de vista puede ir con todos.

los profesionales del Derecho. Tal corno nos dice el Jurista Español Angel Ossorio,
/!
en su obra "El Abogado"
í

"Participemos de honores que no nos corresponde y de vergüenzas que

no nos afectan". {18)

Por lo mismo, retomando esta misma expresión, el Dr. Jorge Enrique

Anzola manifiesta:

"Uq;¡e reivindicar el concepto de Aboqedo. Tal cual se entiende, lo que

en verdad lo somos, participamos. en honores que ne 110.�·

corresponden y en 11er;qüen:.�as que no nos etecten '� (J.9)


Y además agrega:

"Lo que expresa don Ángel Ossorio, ilustre ex-Decano del Colegio de Abogados

de Madricl en frase que sintetiza múltiples aspectos de la vida del Abogado y

que encierra sabiamente compendiada la idea de que existe un relajamiento en

el concepto mismo de lo que es y debe ser la personalidad de quien con sus

luces; su saber y su honradez patrocina los Derechos ajenos. tmciendo.mstencte


ante la Justicia para procurar que ell.:;1 tenga su efecto cumplido nos hacemos

injustamente acreedores a honores que no nos corresponden y a verqúenzes


que no nos afectan / por que en uno u otro caso, la creencia pública sobre las
I'
,,

[(

j,
actividades funcionales del Abogado extienden con cierto sentido de solidaridad

f: hacia el gremio/ las ventajas que se deducen de la honestidad y la sabiduría y


Í;

f; el deshonor que encierra en veces la tnconducts inmoral de quienes han hecho

I'
de la Profesión un simple medio de vida/ NI veces ajeno a la Etica y ausente de

escrúpulos cuando se busca una finalidad de simple lucro, de vanidad o de

i acción contraria al Derecho y ala Justicia '� (20)

ll

'.
( i 8) OSORf01 Angel : "El Abogao ,:,- : Buenos Atres-Araentin« ; Ediciones Jotidicss:
.

¡- Europra-América; 1956; Pág, 17,

i'
{19) Revista Mensual: {La Justicia), Director : Román Csnedo ; Tomo XXXI; 507; Setiembre

; 1972, Artículo: "El estudio del Derecho y el EstaLuto de la profesión del Abogado": Pág. 45,

' Autor : Jorge Enrique Guüerrez.

'
.
(20) Revista Mensual : (La Justicia) . Idern . Pág. 45 - 46.
'

1
é
.

Docente: • Jevían Sanjíh�z:S�Íazifr · • . :,D�◊htología Juric!ícá


r
f
Sostener a la ciencia del Derecho, asumir el mandato que las normas nos impo­ ;
'

nen cumplir, y otras, a ejecutar en la medida de las oportunidades presentadas,

todo ello dota al Abcqado, naturalmente, de una É t i c a , cual sustento de la.

conformación de su evidente moral profesional ·

Existe en la actualidad lo que suele llamarse la Eticidad o moral de grupos de

profesionales. Es decir, se busca con ello dos cosas importantes: La primera, la

· pretensión de distinguirse de tal o cual otro grupo de profesionales, cuando

sabemos que d e s d e · su formación universitaria ya se han distinguido por su

especialidad y condición; y por la segunda situación, favorecer a sus propios

intereses y privilegios de sus grupos en específico. Con ello se concluye que los

grupos profesionales no se sujetan a una formación integral de Ética. Situación

que debería ser así; dando, por lo contrario, paso a una norma y a una Ética de

tipo funcional mediante el cual las personas que integran la ej'etución de un

m i s m o oficio, están obligadas a c u m p l i r lo que el conjunto de ellos decidan y ria

lo que individualmente pretendiesen hacer. Así igualmente, se ha concebido una

Ética respecto del conjunto de los Abogados.

Por e j e m p l o :

'Muchas vece�: esa moral no es la que se establece en los Códigos que

reglan la conducta desde un plano absoluto de mística prOl:<?sionaf; sino es

la que determina el interés y el beneficio económico. Es posible que la for­

mación profesional sea sustituida entonces por lo que se !.'ama la de forma­

ción profesiortll/,'. funcional con la cual la persona que. ejerce un oficio· y a

no le importe éste por la setistecdár, espiritual; normativa y de plenitud ,


1

humana, que pueda producirse, sino por el dinero, y lo que 5e llama J .


,

actualmente es status, que es el que da la posición y el prestigio que se !'


V,
alcanza fundamentada en la ostentación/ y el disfrute de bienes mstenstes.

los cuales son atlibutos de lo que se cree son el éxito y el tnun/o". {2.t).
r
i
1

I'


No obstante, aún cuando con la cita precedente hemos generalizado, estamos

convencidos que muchos de ellos no es s u · condición lo económico fundamen­

talmente.

Se ha pretendido hacer muchas cosas con la profesión del Abogado. Ha servldo

en francas ocasiones para ejemplificar sátiras y sarcasmos de escritores y co­

mediantes. Se ha pretendido eliminarla sin ninguna misericordia, como cualquier

argumento sin utilidad o una reminiscencia de un pasado ominoso o inclusive

porque lo consideran inconveniente a la paz social. Muchos inefables manifiestan

que el Abogado fomenta los pocos medios o graves pleitos. Su gestión, dicen,

sirve para enardecer y hacer creer la animosidad de las personas. De suerte que:

{21) Actos procesales del Derecho Vivo {Síntesis del peosemiento Jurkikx: de la

Casación Venezolana "R.av, Cit.", Págs. 471 -472

!QhE2�rsí'dad Pr1váµa Sa.nPedro.' ·.43t.,.•


F

Docente· Joviari SárJinez Sala.za( I)eOntología JuridicaJ

)0-
"La verdea es que Cristo pretendtá w1 papel semejante .e que se
3S,
dice de la protesion del Abogado: Yo vengo a traer guerra -dijo- a
la

crear cizaña y discordia entre la g.ente. Pero en uno y en otro caso

lo que se pretende es imponer fa Justiciar la paz cimentada sobre

la equidad v el dominio de la verded", (22}

de

la

Hasta los países que han trastocado sus estructuras p ro m o v i e ro n la insólita


.do

pretensión de sustituir a la profesión del Abogado.

su

.
ios

Tanto Francia, previamente a su Revolu ción y en uuoos de la Revolución

los

Socialista Rusa se sostenía la idea de abolir a la profesión jurídica inicios de lc1

ón

Revolución Socialista Rusa se sostenía la idea de abolir a la p ro f e s i ó n jurídica .

de
Poco más tarde se demostró lo d e s c a b e ll a d o de su pretensión; pues se hizo.

un

necesaria su presencia para moderar los conflictos que a ca e cí a n . Tuvo otra vez

no

que imponerse para resolver los p ro b l e m a s de Justicia y de Derecho en función

na

de la c o m p e t e n ci a , el c o n o ci m i e n t o técnico y la garantía m o r a l.

Los Abogados como gremio deben ajustarse a la actuación p ro f e s i o n a l , pero no

solo basado en normas de concepción E ti c a , sino también para mantener la

ue
debida justeza y equilibrio al manifestar sus a c t u a ci o n e s ante la s o ci e d a d . Deben

es
impedir que una publicidad casi siempre ne g ativa re b a se lo s lí mi t e s del c o n t ro l
,
x -

que e l Aboga do, ya sea Juez o en su puro e jercicio, d ebe conse rvar siempre para
?a- .
evit ar conceptos d eprimentes de los Abogados.
i a

!fd

na
En de fi ni tiv a , el Abo g ado basado en s ólidos c imie n t o s mo rales, po r s obre tod as
se
las b arreras, trate y co ns ig a h acer cu mplir e l pr i n c i p i o tripa rti to de la justic a i
?S,
universal : Vivir hone stamente, no hac er da ñ o a nadie y d ar a cad a un o lo que e s

suyo. E n t o n c es, ha b r á c um p li d o con su deber y n adie pon d rá en duda su l a b or

profeslonal ni su e xis t e n c i a .

os

Creo que cumpliendo con tal com e t i d o se just ifi ca rá el haber esco g ido esta

p ro f e s i ó n , de la misma que luego de h aber profun d i za d o en su estud o, i me

atrevo a dar e l un c a li fi c a t i v o : De ser noble y grande , apta para espíritus selectos , .

con de c i s i ó n de sacri fici o y sentido de soli dari d a d h u m a n a .


clo

:o­

ier

D e n t ro de lo s distintos postulados éti cos q ue asume el Ab o g a d o , tenemos uno

ve

muy i mp o rta n t e q ue in cl u y e , i n c l u s i v e los D e r e c h o s del mismo:


an

:n,

{22} Idem : Pág. 473


la
[Doc�nte: jo,iiá11'S¡u)JinlZ Salázar> .· /
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. DeontologíaJurídica j
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!

"CANON 5.

El abogado tiene derecho a hacer la defensa de tina persona acusada de un

crímen sin considerar para ello su opinión personal respecto a la culpabilidad del

acosedo, ya que no otro modo apersonas inocentes, que solo son víctimas de
,
circunstancias sospechosos. se les negada el Derecho de defenderse. Después

se ha está el deber
'

que el Abogado hecho cargo de la defensa de un atusado en ,

de presenter; por todos los medios rectos y honoreines. cualquier defensa que '


las leyes vigentes permitan con el fin de que ninguna persona sea privada de su
1

vida o de su libertad sin el debido proceso de tey". (23)

El Abogado está llamado a defender a todo ser humano sospechoso de culpa o

• Guipa, fehacientemente, por que ello es su temperamento misional; es decir,

defender por el sólo hecho de conocer que intereses privados sean contradicto­

rios, estando a que el pedido de defensa sea propuesto por una de las partes

cuyos Derechos han sido trastocados. f\lo interesa la condición social o

económica del patrocinado. Cumple fu n c i ó n fundamental a partir de la defensa

asumida de un acusado o en todo caso de la parte agraviada, por que él

buscará, por todos los medios posibles, de defender a su cliente basado en los

contenidos de las leyes especiales, los Códigos vigentes, con el fin de que

contribuya al principio constitucional de nuestro país, "que nadie puede ser

condenado sin previo juicio ".

En otra etapa de nuestro razonamiento , sabernos que estamos viviendo una

profunda crisis moral, Un cruel desvío axiológico y en donde los valores ya no

son tan importantes. Inevitablemente, vivimos en un mundo desmoralizado,

pecador y materialista. Todo ello es caldo de cultivo propicio para que se pole­

mice y se rechacen los postulados éticos basados en principios de validez uni­ i

versal y objetiva.
¡
¡

No es ejemplo de legitimidad afirmar ser honrado en sus actos, cuando muy a

pesar nuestro el patrón del actuar es el fruto del capricho o la moda y los propios

principios que respondan a esos valores desconocidos por inoperantes.

Nos martirizan las carencias propias del subdesarrollo, y no sólo en términos

económicos o cuantitativos, puesto que corno bien se ha dicho "un país subde­

sarrollado es un país subadrnmtstrado", y esta condición necatlva tiene t a m b i é n

que reflejarse, lógicamente, en la justicia y en la Ética, e s p e c i a l m e n t e ;

{23} Revista de Derecho Puertorrtquetio {Escu,"f!Ja de Derecho , •

Universidad Cat6/lca de Puerto R ic o . Pone, Puerto Rico). Director.

Rafael Aivere: Portuño) Nº 21; Año VI; Julk: � Setiembre ; 1966.

Articulo : Normas referentes al ejercido de J.:¿,, profesión del .tUu1gado

Págs. 65 - fió. Autor: Ida/e Rivera R,-:;(q {estudiante de DerechoJ.


ibocente::Jovian Sanjinei Sáláz�i ·. . '·• ·
.
·
. •,
D�óntbló2ia Jurídica
· ' · . . . · . · o . . . · . · ·
1

" Y En las mismas palabras. del Dr. Femando Uribe Restrepo. expresadas en el primer

seminario Nacional sobre ética profesional del Abogado en Setiembre (1986) en la

Facultad de Derecho de la UP:B: . . ·/ expresó : Pero hay aún algo más Insidioso para la
117
administración de Justicia .. . y es /,3 crisis ética y valorativa a todos los niveles. Y bien
9/ sabemos que la moral y e! derecho están extrañamente vinculados, puesto que, el

Derecho sigue siendo "el arte de lo bueno y de lo equltetlvo '� de que habla la clásica

'5
definición de U/piano. Una sociedad sin ética es incapaz de apreciar � respetar a la
?r
Justicia/ y generaciones sucesivas carentes de estimativa axio!ógica1 que no captan IO!i

valores no se emocionan ante ellos/ son estériles para la producción de buenos Jueces y
'U
Abogados (y funcionarios públicos en general) en cantidad suficiente para hacer que el

derecho sea algo respetable ''. (24)

La cita en comento n e - h a c e otra cosa que reafirmar que somos una sociedad en crisis,

pero una crisis estructural que cubre todas las esferas , en donde se ha perdido la

s cognoscencia de un humanismo social, donde los conceptos humanos han sido

D
rebajados y sojuzgados, vivimos, entonces, en tiempos de angustias que no calman. Si

sólo se empezara cultivando la enseñanza de la entereza, de la rectitud profesional, de

la compenetración de los valores en la labor profesional; es decir, la participación del

fomento de la estimativa axiológica. se estaría resolviendo gran parte de la problemática

2
que acusa a los Abogados y a las demás autoridades judiciales. ·

Cornplernentariamente a la cita a1.1terior y al decir del tratadista Quintero M u ro :

1
:l
1::7 Abogado ha de tratar por todos los medios de adtive: su persooeltded, pero para ello
)
es menester poseer cimientos de ética/ pues al decir de Saber"
1

'::Jo/0 sobre un terreno sumamente moral puede florecer la cultura ' ' . El Ahogado está

sitoedo dentro de una gremiación social, en cuyos miembros, por la misma nobleza de

sus sctivtdede: pro/esioneles; se exigen determinadas cualidades de decoro y

honorabilidad'� (25). ·

De lo dicho, pues, se hace sumamente necesaria y hasta elemental la captación de la

formación Ética en el Abogado, que con su formación jurídica y de cultura diversa, le va

a permitir aparecer ante los ojos del conjunto de la población como la profesión

prototipo, a la misma que los sectores de profesionales de seguro, la imitarían. Al final

de todo, si s ó l o e s o se consequría se estaría haciendo un gran aporte a la sociedad.

(24) Revista OE la Facultad de Derecho y CC.PP. {universidad Pontifica

Bolivariana), tnrector : dr. Diego Velásquez Nureñfi/ Nª. 70¡ Julk» - Agosto M­

Setiembre (2do. Seme.':itre); Artículo : la ética profesional de los 'funcionarios

de la rama furisdicctone! y el Ministerio Público • Pág. 94

{25) Revista del Colegio de Abogados del Distrito Federal , Director : Dr. H. Parra

Márquez; N°. 97-90; Alío XlX, Enero - Junio; caracas - Venezuela. Artículo : El

Abogado. Sus sctividedes , Pág. 152. Autor: Dr. Gonzalo t¿�f;ntero Muro

[lniversidád P:rívaqa S.an\Pedro .. • · Faé:�tlt�ilde b�r�c;ho f G�c:P�P-:1


IDócente¡ Jovian Sá1ijfriez Salazar ' . . . ·•. <Deontologfa iüridica,I

IT

1 .3 , PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE lA ÉTICA ora A.BOGADO

De a l g u n a manera se ha a n a l i z a d o el desarrollo del ejercicio de la Abogacía en sus

distintas épocas, desde cuando surge y se consolida. Más tarde y consolidada la

profesión jurídica, se regló su actuación dictándose normas de cor.tenido ético para

que posibiliten su correcto ejercicio.

Toda profesión tiene que someterse a normas éticas, sino teme convertirse en algo

diferente a su finalidad preestablecida. Y esas normas éticas deben primar o

complementarse sobre toda la consideración y señalar el único y verdadero camino

del cual no debe salirse el profesional para conseguir los fines concordantes con su

profesión.

Los eventos producidos en el ejercicio de la Abogacía una de las tantas profesiones

liberales, deben conseguirse y hacer triunfar sus tesis, a partir de sólidos

sentimientos morales que eleven, frente a la tentación de triunfos fáciles y de

causas injustas.

El sobrio Abogado ha de reunir cualidades que lo harán distinto, que lo distinguirá

de lo�. demás profesionales. Pues, ante todo, una conciencia transparente del

Abogado es fundamental, porque de ello depende SIJS realizaciones honestas, reales

y efectivas, para así hacer de sus patrocinados, los portadores conceptuales de sus

actos.

Consideramos a los siguientes como los principios fundamentales de la ética del


i f,

Abogado: ¡

Prim�_rn__;_ La Probidad :

Ocupa, este aspecto · e l primer lugar dentro de las condiciones morales o ético­

profesionales del Abogado.

Es el pilar en donde se sostienen las demás cualidades, El Abogado dentro del

aspecto intelectual desarrolla, primordialmente, la cultura general; es la base en

donde se irán acentuando los espacios culturales y profesionales.

El edificio intelectual-profesional se desmoronaría a la primera prueba sería, sin una

sólida base de cultura general. El edificio moral, se derrumbaría frente a la primera

prueba seria, ante la falta de su base, la PROBIDAD. La probidad a nuestro

entender resulta del complemento de elementos básicos: De cultura general

cimentada, es decir, de un amplío conocimiento intelectivo: además de la eficacia e

i n ci d e n c i a de los niveles éticos que muy bien pueden hacer suyos las personas.

Segundo : La Responsabilidad :

Se refiere a la absoluta dedicación que debe existir por parte del Aboqado respecto

de su cliente; y en general, de su trabajo. No pecar de n e g li g e n c i a , Debe acoger

con verdadero apego la causa o función que le ha sido confiada, defenderla como

propia, v i g il arla como a las cosas de un ser q uerido que. a l h acerlo así, e st ar á
1

[Docente: Jovían Sanjinez Salazar Deontología Jurídica 1

salvando, adqulriendo, conservando y ganando prestíoío, tan necesario para su

ejercicio profesional.

T e rc e r o : El Desirirterés :

L.a profesión del Abogado, tiene una función de beneficio social, y en donde no se

.debe entrar a tallar en su plenitud una finalidad de lucro o no debería hacerlo.

La finalidad de servico es norma fundamental y si existe remuneración, debe

lograrse, pero bajo el concepto de remuneración y condiciones establecidas por las

leyes y reglamentos del Estado, teniendo en consideración las posibilidades y las

necesarias comodidades del patrocinado, si el asunto fuera dB· asesoramiento

jurídico. Llena, satisfecha y asegurada la vida profesional, debe primar en él, la

equidad; y ayudando en la búsqueda de la justlda, orientando a los que acuden a

él, especialmente a aquellos verdaderamente indigentes, a quienes debe

acompañárseles decididamente en la solución de sus p ro b l e m a s , sin esperar

retribución y sólo a l g ú n mínimo incentivo.

Si alguna persona de posibilidades económicas holgadas acude al Abogado en busca

de su servicio, naturalmente que va a obtener remuneración de acuerdo con la

naturaleza y calidad ae esos servlclos jurídicos; pero, sin descuidar que el Abogado

no debe actuar por el simple interés económico, sino fundamentalmente por un

interés estrictamente profesíonal.

Recordemos lo mencionado por un Abogado··Docente en las aulas universitarias:

Respecto de lo económico, el abogado tendrá que asumir desinterés. No debe

preguntar cuánto va a ganar, eso es secundario, sino que es lo que va a defender,

si es justo o injusto el asunto o los eventos realizados o si con su trabajo va a

realizar, va a verse favorecida la justicia o una parte de ella y no si le pagarán tanto

o cuanto.

7.4. EL A.BOGADO Y SU VOCACIÓN,

Después de esperar cerca de un año calendario para iniciar mls estudios en la

Universidad Nacional de Trujillo, en la facultad de Derecho y Ciencias Políticas, del

prim er Ciclo de Facultad, el profesor de la Cátedra de Redacción y Composición ",

Dr. Luis Cabos Yépez, nos preguntaba, uno por uno, por que habíamos elegido

estudiar Derecho. De todos ellos, sólo 5 compañeros de promoción dijeron,

convencidos, que había sido por vocación. Es decir, por asumir postulados de

justicia y la participación en los Foros. Llegando i n c: i L ; s o a afi rm a r q u e entr e sus

preferencias est a ba el sentido d e de fe n sa a personas in di g e 11 t


1
2s 1 a ú n sacri fi cando la

est a b lidad
i o el status al cual m u y bien pudier a n llegar.

S in e mb argo, como ha bíamos mencionado sólo 5 compañeros d e los 90 q ue

inic i a rn os la carrera de D e recho en un só o l turno, d efi nían la voc cióna como l


a

actitud , decisi ó n y volunt a d pa ra esco g er la carrera que e


s come n ta . P ero

[Jnivernidad Privada Sá,n .Pedro .48 · Facultad de Derecho_y�C.C.P,P]


r.
1 '

. •· ·,. ·
.
• ·. •., Deontolcgia Jurídica 1

i n t e r ro g a m o s :

¿ Y los 85 c o m p a ñ e ro s restantes? lPor qué e s c o g i e ro n estudiar Derecho?

Partiendo de esta i n c e rt i d u m b r e tenemos que a fi r m a r que los 85 estudiantes

habían escogido estudiar p a ra ser Abogados, movidos por cualquier otra causa,

pero menos por vocación.

Contrariamente é:l lo expresado se puede inferir que estos p o co s estudiantes hayan

tenido la fo rt a l e z a de desentrañar desde sus co n c e p t o s , toda s u e rt e de

responsabilidades, han superado fr u s t r a c i o n e s que siempre las hay; en otros

términos, han r e a fi r m a d o lo que realmente podemos ll a m a r "vocación".

El Dr. José A. Borjas Sánchez, m a n i fi e s t a lo siguiente :

''Es necesario ahondar los cauces de la orientación vocacional sí es que queremos

abrir nuevos horizontes a la abogacía v comentar una mejor pol12ica de ingreso a

su estudio". Y luego continúa: '� .. De ah/ de la vocación Juddica constituye el

factor fundamental en el éxito o fracaso de nuestra carrera " . (26)

En vista de todo un conjunto de preocupaciones de quienes están imbuidos en estos

quehaceres de nuestra p ro f e s i ó n , podemos percatar que, hoy en día, se ha

consolidado la crisis v o c a ci o n a l del abogado, siendo ésta sólo una de las diversas

causas que promueven su ínconducta.

Por co n v e n ir a la carr era se hace imper ioso inve stigar y p l a n i fi c a r , a fi n de poder

ubi car una adecuada p o lí t i c a que s i g n i fi q u e la efectiva ap li c a b i li d a d de e ll a , teniendo

en cuenta, como ele mento preestablecido, la vo c aci ó n para ser abogado. La crisis

vo c a ci o n a l es u na cr isis generacion al, sabe rn o s qu e el "animus" d e qúienes tiene n e l

co m p ro m i s o de e jercer la a b o g ací a pueden co n t r ibuir a la p l a n i fi c a c i ó n d e las pautas

ne c e sa r i a s p ara a
l consecuci ón reo rie n t a d o r a a los a s p i r a n te s a a
l carrer a; deb e

incidirse en e sta or ientación co mo s í constitu y e ra n es tudios pr evios, tales c omo so­

meter a e xigentes e xámenes de concien cia, s e de be abarcar una e xploración

vo ca ci o n a l que puede a barcar un ti e m p o c alendario mínimo; situación que debe ser

d i r i gida y su p e rv i g i l a d a por la d irección de l as Facultades de

Derec ho. Lo que se requ iere, a fi n de c uen t a s , es motivar al aspiran te. Hacerle

comprender, que se r á de él s i es coge, para no s o t ro s , tan digna p ro fesión. Es d ecir,

el p o s t u l an t e debe informarse de dos e sferas im p o rt a n t e s y complementarias. La

conciencia fí r m e y vo luntaria para estudiar d erecho y otras conduc tas exte rn a s q ue

lo lleven a la ub icación de sus objetivos. Complementariamente, q u ienes ha yan

e legido estud iar Derecho y en e l f u ro r de la en señanza Universitaria, lo s est udiantes

pueden f a m ili a r i z a r s e co n las d iversas un idades teóricas expuestas por los di versos

catedráti co s , se gún sus e s p e ci a li d a d e s , y al t e rn a t i v a m e n t e con ella será i m p o rt a n t e

la resulta de trabajos de a p li c a ción prá ct i c a , co rn o laboratorios, que sin duda son

indis pensables para · la fo r m a c i ó n de los estudiantes.

(26) Revista de la Facultad de Derecho (Unlversktad de Zulla). Director : Dr. José A. Borjas Sánchez N°. 48 Setiembre

- Diciembre 1976; Maracaibo - Venezuela . Artículo "El Papel del Jurista y su Interrelación con otros profesionales"

; Págs. 47. Autor : Dr. José A. Borja S á n c h e z


· ·. . Deontología Jurídica '.

' . . .

Por ejemplo, se hace necesario que las facultades de derecho tengan bajo su

dirección un Consultorio jurídico como tiene la Universidad Nacional de

Trujillo, que cuenta con el asesoramiento de docentes de la misma Facultad;

además cuenta con las prácticas de estudios jurídicos desconcentrados, tanto en !o

referente a particulares como en Instituciones Públicas o privadas; además cuenta

con la práctica de la Pasantía que los realizan los estudiantes que cursan el d é c i m o

segundo ciclo académico, práctica denominada de Aspirantía como en Argentina.

Con la vigencia del Secígra Derecho la opción de la práctica· pre-profesional de

pasantía, en muchas Facultades de derecho a sido tácitamente superada.

Debemos comprender, además que la vocación surge después de un balance .de

una serle de motivaciones sentimentales, anhelo familiar que uno de los integrantes

estudie Abogacía; sociales, captación del anhelo de justicia y contribuir con su

• 'esfuerzo para el cumplimiento de ella; económicas, deseo de subir a un status

mayor; situacionales, la búsqueda de prestigio demostrando ser distinto a los demás

abogados; humanitario, estar al servicio de los demás; científico-cultural, la

búsqueda de su particular desarrollo intelectual, etc.

Quien se ha formado para ser abogado, movido por vocación deberá cumplir, de la

mejor manera posible, con las normas y reqlamentos que .te son propias.

Efectivamente, por ello, encontrarnos a Abogados que por sobre todo interés social,

económico, etc., han dedicado y aún dedican sus vidas al estudio y real aplicación

del Derecho, en la defensa de lo justo y el consiguiente rechazo de la injusticia.

Creo que la conducta asumida por éstos tiene profundos rasgos de"Ética, unida con

el conocimiento del Derecho. Pero, aquí aparece la contraparte. Es verdad sabida

que para aquellos, al declinar sus vidas, cansadas de ejercer, generalmente, no

habrán alcanzado la consolidación de bienes materiales de fortuna, ni siquiera

medianamente acrecentados.

Serán, además objetos de críticas amargas y sistemáticas contra su persona, por su

proceder y haber comprendido el verdadero sentido de las funciones del Abogado; a

ellos jamás se les considerarán los amigos de la Abogacía, ni estarán sus nombres

con los de los más bríllantes Abogados. Sus estudios serán modestos, sin grandes y

especiales letreros anunciando la eficacia ·de sus procedimientos (esta pose es

atentatoria a las normas éticas expuestas en el Código de Etica de casi todos los

Abogados del País), lo que sin duda es verdad, es que luego de muchos años de

ejercicio profesional en · sus diversos cuadrantes, sus conciencias se encontrarán

limpias y su ontología albergará la sensación del deber cumplido en su firme

conducta Deóntica, de estos Abogados, en no muy crecido número, han existido y

existen.

7 . 5 . CAUSAS D E L COMPORTAMIENTO ANTX-ETICO DEL ABOGADO.

La sociedad, por principios dialécticos, tiene sus etapas definidas, en ellas están

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