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CU RSO O TO RRIN O LARIN GO LO GÍA PARA PED IATRAS

Influencia del reflujo gastroesofágico

M O N O GRAFÍAS
en el desarrollo de enfermedades
de la vía aérea superior
I. Cano Novillo, A. García Vázquez y J. Antón-Pacheco Sánchez
Servicio de Cirugía Pediátrica. Hospital 12 de Octubre. Madrid. España.

I N TRO D U CCIÓ N especialmente durante la inspiración, el reflujo no sea


El reflujo gastroesofágico (RGE) es un fenómeno un fenómeno habitual. Estos mecanismos de control y
muy frecuente en la edad pediátrica, con una inci- de defensa se agrupan bajo el nombre de barrera an-
dencia que se aproxima al 18 %1 . Habitualmente se tirreflujo, y evitan que el reflujo pueda ser tan impor-
manifiesta como vómitos de mayor o menor intensi- tante y continuado que provoque complicaciones.
dad, que van cediendo de manera paulatina hasta de- La barrera antirreflujo se compone de diferentes
saparecer, en un 85 % de los niños, hacia la edad de factores anatómicos, neurológicos y hormonales, que
4 años. Cuando la frecuencia o la duración del reflu- actúan conjuntamente y de forma sincrónica, opo-
jo es lo suficientemente intensa como para provocar niéndose al efecto de las presiones gástricas y al con-
otros síntomas o cambios histológicos de inflamación tenido del estómago, los cuales actúan como factores
crónica, el RGE se convierte en patológico, y entonces agresivos. La aparición de reflujo, patológico o no,
se habla de enfermedad por reflujo. en un individuo determinado parece obedecer a ca-
El RGE patológico provoca una gran variedad de racterísticas individuales, tanto de su barrera antirre-
procesos, ya sea con afección esofágica (esofagitis, es- flujo como de sus factores agresivos. Posiblemente,
tenosis, síndrome de Sandifer), estados de alteración cuantos más factores defensivos estén alterados y más
nutricional (desnutrición, alteración del desarrollo), lesivo sea el contenido gástrico, mayor será la sinto-
trastornos del sueño o llanto excesivo. También se matología y peor la respuesta al tratamiento.
ha asociado clásicamente a la presencia de numerosas La aparición de síntomas respiratorios o lesiones
enfermedades y síntomas del aparato respiratorio, de la vía aérea en un paciente con RGE, se produce
como asma, neumonías o bronquitis. En la actualidad, mediante diferentes mecanismos fisiopatológicos.
también se ha demostrado que el RGE puede ser el El mecanismo más frecuente es la obstrucción de
desencadenante o el factor cronificador de múltiples la vía aérea o la irritación directa de la orofaringe por
enfermedades de la vía aérea superior, como sinusitis, el material ácido refluido. Así, la lesión de la vía aé-
otitis media, laringitis recurrente, estenosis subglóti- rea inferior por el material aspirado provoca un ede-
ca, laringospasmo, laringomalacia, tos crónica o este- ma de la mucosa respiratoria, así como la producción
nosis de las coanas. En la mayoría de los casos, estos de secreciones locales, que se manifiestan como neu-
procesos son intermitentes y no responden bien a los monías o sibilancias. Si la irritación se produce en la
tratamientos habituales mediante antibióticos. La sos- vía aérea superior, el resultado es la aparición de la-
pecha de la posible asociación de esta patología con ringitis o lesiones de las cuerdas vocales, que provo-
el RGE, y el conocimiento del concepto de RGE ocul- can estridor o ronquera. En casi todos los casos se
to (RGE sin la presencia necesaria de síntomas evi- produce tos, como síntoma. Éste se transforma en es-
dentes) son necesarios para establecer un diagnósti- tornudo cuando se afecta la nasofaringe 4-6.
co y tratamiento adecuados a estos pacientes2,3. En la mayoría de los niños con RGE sin afección
neurológica, la aspiración de grandes cantidades de
FISIO PATO LO GÍA material gástrico (macroaspiracion) es rara. Este me-
En condiciones normales, existen unos mecanismos canismo provoca una obstrucción mecánica de la vía
de defensa que controlan el reflujo de contenido gás- aérea y neumonía química por aspiración.
trico al esófago y que hacen que, a pesar de que la Más frecuentemente, la aspiración no es suficiente
presión intraabdominal sea mayor que la intratorácica, para producir cambios radiológicos (microaspiración),

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pero sí lo es para estimular los receptores neurales problema estresante, tanto para el paciente como para
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de la vía aérea o provocar la liberación de mediadores su familia, siendo frecuente que éstos pasen noches
de la inflamación, provocando laringospasmo. Por sin dormir. La irritación persistente provocada por la
último, se puede provocar broncospasmo o laringos- tos en la laringe y el árbol bronquial conllevan en el
pasmo mediante la estimulación de aferentes vagales niño la presencia de vómitos y retraso del crecimien-
de la pared esofágica, por efecto de la esofagitis7,8. to. Desafortunadamente, múltiples enfermedades se
acompañan de tos crónica, por lo que es fundamental
determinar el origen de la tos y su tratamiento espe-
M AN IFESTACIO N ES CLÍN ICAS
cífico. La primera causa de tos crónica en el niño es el
Apnea asma. El RGE es la tercera causa de tos en niños de
Es una alteración que ocurre esencialmente en los cualquier edad y la primera en el grupo de edad entre
primeros 6 meses de vida y que se caracteriza por ata- 0 y 18 meses. En los casos de tos secundaria a reflujo
ques paroxísticos de cianosis asociados a bradicardia, se establece un círculo vicioso, por el cual el RGE
hipotonía y, ocasionalmente, convulsiones. Su origen produce tos que, a su vez, aumenta la presión intra-
puede ser central u obstructivo, y se asocia con clari- abdominal provocando más reflujo. El tratamiento es-
dad a la presencia de RGE en la infancia. pecífico del RGE mejora el síntoma en más del 70 %
El mecanismo por el cual el RGE provoca una pau- de los casos6.
sa de apnea no está claro. Se sospecha que el origen
está en un laringospasmo originado por la estimula- O titis media
ción, tanto de receptores situados en la laringe o la La otitis media supurada (OTM) es la causa mas fre-
nasofaringe por el material ácido aspirado, como de cuente de sordera en los países desarrollados. Se ca-
receptores ácido-sensibles localizados en el esófago. racteriza por la persistencia de supuración del oído
Debido a que es una causa de muerte súbita del medio durante 3 meses o más, sin signos o síntomas
lactante o de hipoxia crónica, el estudio del RGE es de infección activa. Existe metaplasia del epitelio del
obligatorio en niños con crisis de apnea. Encontrare- oído medio y proliferación de las glándulas mucosas,
mos clínica de vómitos o regurgitación previa en el lo que provoca la hipersecreción de un fluido viscoso.
50 % de los pacientes, en los que con posterioridad La otitis media es una afección de tipo inflamatorio
se demuestra la relación apnea-RGE. Por tanto, la ap- de origen multifactorial, en la cual interactúan la pre-
nea se describe como una manifestación de RGE sencia de infecciones bacterianas con una disfunción
oculto. del sistema mucociliar. También la presencia de RGE
El estudio de estos pacientes debe incluir hemo- influye en la cronificación de la OTM. El reflujo de áci-
grama, gasometría, radiología de tórax, electrocardio- dos gástricos y pepsina desde la nasofaringe hasta el
grama y electroencefalograma. La única prueba diag- oído medio es posible gracias al ángulo de la trompa de
nóstica que puede relacionar RGE y pausas de apnea Eustaquio del niño pequeño. El contacto del contenido
es la pH-metría de 24 h, pero es difícil demostrar un gástrico con la mucosa produce irritación y edema de la
descenso del pH intraesofágico que coincida simultá- nasofaringe y de las trompas de Eustaquio, provocando
neamente con una bradicardia. la disfunción de estas estructuras ya que, en condicio-
En la práctica, a todo niño con historia de apnea y nes normales, el pH del oído medio es alcalino.
regurgitaciones se le debe aplicar un tratamiento an- La presencia de elevadas concentraciones de pep-
tirreflujo que incluya medidas posturales, dietéticas y sina y pepsinógeno, provenientes del estómago, en
procinéticos, independientemente de los hallazgos de las secreciones del oído medio de pacientes con oti-
las exploraciones complementarias9. tis han demostrado la relación de ésta con el RGE. Se
considera que el RGE es un factor primario en la ini-
Tos crónica ciación de la OTM que desencadena una serie de pro-
La tos es un mecanismo de defensa por el cual la cesos inflamatorios que llevan al desarrollo de la en-
vía aérea expulsa secreciones anormales, posibles fermedad10.
cuerpos extraños alojados en su interior y también
sustancias irritantes del árbol respiratorio. La consulta Sinusitis
de un paciente por tos crónica supone el 2,5 % de las Cada vez es más conocida la naturaleza de la sinu-
visitas anuales a los pediatras en atención primaria. sitis en el niño. El origen de la sinusitis crónica (SC) es
Es un factor determinante en la diseminación de en- multifactorial e incluye infecciones virales, alteracio-
fermedades, y puede ser un síntoma de otra enfer- nes inmunológicas, configuración anatómica de los
medad subyacente. En la infancia, la tos supone un senos y factores ambientales. En los niños, la clínica

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de la SC es muy variada, provocando desde tos, obs- La laringotraqueomalacia (LTM) constituye un retra-

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trucción nasal, mucosidad posterior y voz nasal hasta so en la maduración de los tejidos y estructuras que
fatiga, dolor de cabeza, halitosis o ronquido. El estu- componen la laringe y la tráquea. Los síntomas pro-
dio de rutina de estos pacientes incluye el examen ducidos por el efecto de la LTM tienden a disminuir
ORL completo, el estudio inmunológico y la tomo- con la edad en la mayoría de los casos.
grafía computarizada (TC) de los senos. En ocasiones Diferentes trabajos han demostrado la asociación e
se toman biopsias de la mucosa para descartar una fi- interacción del RGE y la LTM4 . Existe RGE, compro-
brosis quística. El tratamiento médico incluye antibió- bado por pH-metría, en el 65-80 % de los pacientes
ticos, lavados nasales y aerosoles de esteroides. Cuan- con LTM, sobre todo en los más graves. Otros hallaz-
do esta terapéutica fracasa se recurre a la cirugía de gos laringobroncoscópicos, como la presencia de
los senos, aunque en un elevado porcentaje de los edema de la pared posterior de la laringe o en los re-
pacientes algunos síntomas persisten. pliegues aritenoideos, son sugestivos de RGE en pa-
El RGE es un cofactor de persistencia de estos sín- cientes con laringomalacia.
tomas. El efecto irritativo del material refluido actúa Los pacientes diagnosticados de laringomalacia que
directamente sobre la mucosa de los senos, provo- presenten síntomas digestivos de RGE precisan trata-
cando edema y disminución de la capacidad de lim- miento antirreflujo de forma imprescindible, ya que se
pieza de los cilios, lo que lleva a la obstrucción de ha comunicado mejorías de hasta un 83 % en los ca-
los forámenes y a la infección. sos tratados adecuadamente 9,13.
En diferentes estudios realizados en niños con sinu-
sitis refractarias al tratamiento habitual se ha demos- D iscinesia laríngea
trado una incidencia de RGE del 63 % y de reflujo na- La discinesia laríngea es responsable de numerosos
sofaríngeo del 32 %, medido con pH-metría doble. El casos de estridor y disnea de origen laríngeo. Estos
tratamiento del RGE en estos pacientes mejora los sín- espasmos se caracterizan por la descoordinación mo-
tomas de sinusitis hasta en el 80 % de los casos. En los tora de la laringe, la cual no se abre de forma sincro-
pacientes que precisan cirugía de los senos se debe nizada con los movimientos del tórax. La asociación
continuar con el tratamiento antirreflujo, ya que in- entre discinesia laríngea y RGE es una evidencia de
fluye favorablemente en la curación al reducir la for- inmadurez muscular respiratoria y digestiva14.
mación de tejido de granulación3,11.
Laringitis posterior
H ipertrofia adenoidea En 1880, Rudolph Virchow describió la “laringitis pa-
La hipertrofia amigdalar puede provocar un aumen- quidérmica verrucosa” como un crecimiento epitelial
to de las presiones inspiratorias y expiratorias intrato- de la glotis posterior, que creyó que se debía a abu-
rácicas, lo cual favorece, teóricamente, el reflujo del sos en el empleo de las cuerdas vocales. Un siglo des-
contenido gástrico hacia el esófago y la faringe. No pués, Delahunty postuló que la larigitis crónica de ori-
se ha demostrado que el reflujo nasofaríngeo provo- gen desconocido podían ser una manifestación
que la hipertrofia de las adenoides, pero sabemos que extraesofágica de RGE. Así, los pacientes tratados por
la exposición al ácido aumenta el edema y las secre- él presentaban una resolución de los síntomas larín-
ciones de la mucosa respiratoria. geos después de un tratamiento con antiácidos.
Algunos estudios retrospectivos correlacionan la Desde entonces, diferentes estudios han relaciona-
existencia de RGE en lactantes con la necesidad de ci- do el RGE y la laringitis posterior, la mayoría de ellos
rugía temprana de las adenoides. También se reco- mediante la realización de una pH-metría doble eso-
mienda el estudio y tratamiento del RGE en aquellos fágica. Se ha demostrado una alteración de los regis-
pacientes adenoidectomizados que presenten sínto- tros pH-métricos en el 50-79 % de los pacientes. En
mas con posterioridad10. estos enfermos, la laringe presenta alteraciones con-
sistentes en edema y eritema del tercio posterior de
Laringotraqueomalacia las cuerdas vocales, asociadas a edema e hipertrofia
La laringomalacia es la causa más frecuente de es- de la glotis posterior (fig. 1), que pueden ser obser-
tridor no infeccioso en niños. El diagnóstico se realiza vadas durante la endoscopia15.
mediante laringoscopia, en la que se observa el pro- El tratamiento antirreflujo es estos pacientes es muy
lapso anormal de las estructuras supraglóticas durante importante, ya que la mucosa laríngea no tiene me-
la inspiración. En múltiples ocasiones se asocia a tra- canismos de defensa frente a la exposición ácida. Se
queomalacia, la cual consiste en el colapso antero- recomienda un tratamiento de 12 semanas mediante
posterior de la tráquea. procinéticos e inhibidores de la secreción ácida.

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M alformaciones laringotraqueoesofágicas
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Diferentes malformaciones anatómicas predisponen


a la presencia de RGE. La mejor descrita es la fístula
traqueoesofágica con atresia de esófago. La motilidad
esofágica distal está alterada y el tono del esfínter eso-
fágico inferior disminuido, lo que hace que el RGE
sea muy frecuente. Habitualmente se producen este-
nosis del esófago y lesiones de la vía aérea. También
determinados tipos de hendidura laríngea conllevan
una incidencia aumentada de RGE, y en estos casos
debe realizarse un diagnóstico endoscópico.

D IAGN Ó STICO
El diagnóstico se puede establecer si por la historia
clínica y la exploración sospechamos que un paciente
con una enfermedad ORL puede tener, además, RGE.
Figur a 1. Edema de a ritenoides y glotis posterior.
Las exploraciones complementarias pueden indicar si
existe RGE, establecer una asociación entre el reflujo
y los síntomas de la vía aérea e incluso una relación
Granulomas y úlceras de las cuerdas vocales causa-efecto.
La importancia de la voz ronca o los cambios de
voz en el niño no ha recibido el mismo estudio que H istoria
en el adulto. Diferentes trabajos sugieren que el RGE En los pacientes con enfermedad ORL, además de
desempeña un papel directo en la patogenia de la investigar la frecuencia de los vómitos o las regurgi-
ronquera en el niño. En ellos se relaciona la presencia taciones, debemos establecer la relación de los sínto-
de lesiones histológicas en la glotis con la alteración mas con la ingesta, anotar los síntomas respiratorios
del tránsito baritado o la pH-metría. En un modelo asociados, la incidencia de enfermedades neurológi-
de experimentación animal, la instilación de material cas o malformativas y vigilar la ganancia ponderal. Se
gástrico provocó inflamación, ulceración y tejido de debe realizar también una exploración orofaríngea
granulación en las cuerdas. adecuada2,4,17.
Los granulomas asociados a RGE se producen en
el tercio posterior de las cuerdas y presentan un as- Exploraciones complementarias
pecto eritematoso característico. En el momento actual se dispone de diferentes
La presencia de nódulos en las cuerdas vocales pruebas para el estudio y la valoración de todos los
obliga a realizar un tratamiento antirreflujo, sobre aspectos patológicos del RGE. El empleo de uno o va-
todo si no hay historia de abusos de voz5,14. rios dependerá del tipo de RGE del paciente a estu-
diar. Evidentemente, la asociación de varias de estas
Estenosis subglótica exploraciones conlleva una mayor fiabilidad en el
La incidencia de estenosis subglótica en neonatos diagnóstico. Sólo comentaremos las que han demos-
que precisan intubación endotraqueal varía entre el trado mayor utilidad clínica, haciendo especial refe-
1 y el 8 %. La estenosis subglótica se produce por di- rencia a su indicación.
ferentes factores, que actúan de forma sinérgica en
muchos casos. Entre ellos destacan el tamaño del tubo Tránsito baritado
endotraqueal, los movimientos del tubo sobre la vía Ha sido la prueba de empleo rutinario en el diag-
aérea del paciente, la duración de la intubación, la in- nóstico de los pacientes con sospecha de reflujo gas-
tubación traumática, la infección durante el período de troesofágico, utilizándose indiscriminadamente en la
intubación y la presencia de RGE, con o sin intuba- mayoría de los casos. Tiene una sensibilidad cercana
ción. Jindal y Contencin demostraron la relación entre al 65 %. El tránsito digestivo se debe realizar cuando
estenosis subglótica y RGE, aunque la incidencia de se sospecha alguna alteración anatómica en la región
reflujo en estos pacientes aún no está determinada. antropilórica, obstrucción duodenal o malrotación,
Muchos autores indican la necesidad de diagnosticar que pudieran ser la causa de los síntomas. Puede
y tratar el RGE antes de iniciar el tratamiento de la es- servir, ocasionalmente, para detectar casos de aspi-
tenosis, sobre todo si el RGE está en el origen16. ración.

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Gammagrafía pH-metría puede documentar la asociación temporal

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La gammagrafía se utiliza habitualmente para de- entre el reflujo y los síntomas respiratorios si se logra
mostrar la captación pulmonar del isótopo, lo cual es correlacionar en las gráficas el momento exacto en
indicativo de aspiración de contenido gástrico. Otra que ocurren los episodios de reflujo y los síntomas de
posibilidad que ofrece la gammagrafía es el estudio tipo respiratorio, aunque es difícil de encontrar du-
del vaciamiento gástrico. Durante la prueba se evalúa rante una exploración. Los síntomas respiratorios se
el tiempo de vaciado de la fase acuosa de una comida pueden presentar antes, durante, inmediatamente
líquida o mixta, el cual suele estar enlentecido en los después o con independencia del episodio de reflu-
pacientes con reflujo. jo. Si se presenta antes el síntoma que el reflujo, por
ejemplo, tos, se considerará que el efecto mecánico
Endoscopia digestiva de la tos induce el episodio de reflujo. En los casos en
La esofagogastroduodenoscopia se emplea para la que el episodio de reflujo coincide en el tiempo o
visualización directa del esófago, estómago y duode- sucede inmediatamente después, podemos considerar
no, así como para la toma de biopsias de cualquier le- que el reflujo provoca el síntoma respiratorio median-
sión sospechosa. La esofagitis se clasifica en grados te aspiración. Por último, si existen síntomas respira-
según criterios endoscópicos e histológicos. La corre- torios independientes se considera que la enfermedad
lación entre los hallazgos endoscópicos e histológicos respiratoria es la primaria, o bien que existen aspira-
habitualmente no es exacta, siendo mayor según au- ciones esporádicas no registrables21.
menta el grado endoscópico 18,19. Algunos autores re- En los pacientes con enfermedad ORL se han realiza-
comiendan también el empleo de la endoscopia para do modificaciones de la técnica tradicional, colocando
la observación de la glotis y el diagnóstico directo de electrodos de forma simultánea a lo largo del esófago
lesiones en esta localización15. proximal y la faringe, para intentar documentar la rela-
ción entre RGE y enfermedad de la vía aérea superior.
M anometría Aunque no existen aún mediciones adecuadas para el
El estudio manométrico del comportamiento del reflujo faríngeo, se considera que la presencia de más
esófago es útil, tanto para saber el estado funcional de 10 episodios faríngeos de RGE es patológica22
del cuerpo del esófago y su capacidad peristáltica
como para conocer el funcionamiento y la disposición Laringobroncoscopia
del esfínter esofágico inferior (EEI). El RGE afecta a Hasta hace poco tiempo, estos estudios se utiliza-
los tramos distales del esófago, produciendo altera- ban dentro del estudio del RGE para descartar que los
ciones motoras que disminuyen la capacidad de acla- síntomas fueran producidos por lesiones que afectan
ración. Además, en los pacientes con RGE es habitual a la deglución y permiten la aspiración, como hipo-
encontrar presiones de reposo disminuidas en el EEI. tonía faríngea, deglución incoordinada, así como para
No obstante, la alteración motora más importante descartar lesiones, como hendiduras laringotraqueo-
del cuerpo esofágico en los pacientes con reflujo es la esofágica, cuerpos extraños, infección u otras altera-
denominada motilidad esofágica inefectiva (MEI), ciones irritativas de la mucosa traqueobronquial. Por
donde el esófago es incapaz de propagar el bolo al tanto, su empleo dentro de las pruebas de diagnósti-
tener ondas de baja amplitud. Este fenómeno es mu- co de RGE era muy limitado.
cho más frecuente en pacientes con enfermedades En la actualidad, mediante la realización de laringo-
respiratorias y RGE que la presión disminuida del EEI. broncoscopia se han descrito diferentes lesiones infla-
No es una prueba que demuestre claramente la rela- matorias de la faringe o del aparato traqueobronquial,
ción con síntomas extraesofágicos. que son específicas de RGE (tablas 1 y 2).
Con estos hallazgos se realizan diferentes scores, que
pH -metría relacionan en menor o mayor medida la presencia de
El estudio del esófago mediante pH-metría de 24 h RGE con las lesiones de la vía aérea8. La existencia de
se considera la prueba que mejor constata la exposi- un score laríngeo mayor de 4 tiene una sensibilidad
ción del esófago al material refluido durante todas las del 74 % y una especificidad de 81 % para la existencia
fases del día. Se considera que tiene una sensibilidad de RGE. En la tráquea un score > 2 presenta una sensi-
del 83 %, una especificidad del 93 % y un acierto del bilidad del 82 % y una especificidad del 67 %. Un score
92 % para el diagnóstico de RGE20. total (laringe + tráquea) > 7 presenta una elevada sensi-
Hasta el momento, la pH-metría esofágica de 24 h bilidad y especificidad para la existencia de RGE.
se considera el método de elección para diagnosticar Además, la posibilidad de realizar lavados bronco-
la relación entre reflujo y enfermedad respiratoria. La alveolares aumenta el rendimiento de la exploración.

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TABLA 1. H allazgos endoscópicos laríngeos sidera patológico y el tratamiento conlleva una serie
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sugestivos de reflujo gastroesofágico (RGE) de medidas conservadoras asociadas siempre al trata-


miento farmacológico. En los casos en que el trata-
Lar ingoscopia Leve Gr ave
miento médico “fracasa” se recurre a la cirugía.
Amígdala Valécula visible Valécula ocupada De forma general, estas medidas se dividen en:
Edema posglótico < 2 veces ancho > 2 veces ancho
normal normal
1. Tratamiento conservador.
Edema aritenoides Pérdida del contorno Redundancia
de la mucosa
– Tratamiento postural: en lactantes, la posición en
Ventrículo Estrecho Borrado
prono es la mejor para disminuir el número y la du-
Edema de cuerdas Pérdida de coloración Edema evidente
ración de reflujos, aunque no se emplea actualmen-
Lesiones de cuerdas Unilateral Bilateral
te por el peligro de muerte súbita del lactante
(SMSL). Se recurre, por tanto, al decúbito lateral iz-
quierdo, posición que disminuye los reflujos sin tan-
TABLA 2. H allazgos endoscópicos to riesgo de SMSL. Sin embargo, en el niño mayor la
traqueobronquiales sugestivos de reflujo mejor posición sin embargo es en prono con cabeza
gastroesofágico (RGE) elevada.
Br oncoscopia Leve Gr ave – Reducir el volumen de las tomas: es una medida
controvertida ya que, si por un lado se disminuye el
Edema y eritema Anillos visibles con Pérdida generalizada
alteración del contorno número de reflujos posprandiales, por otro se aumen-
del contorno tan los períodos posprandiales. Se recomienda en ni-
Estenosis subglótica < 50 % del diámetro > 50 % del diámetro ños con RGE que realizan tomas excesivas. En niños
Mucosa en empedrado Parcheada Generalizada mayores es importante reducir la toma nocturna y
Lesión carinal Pérdida del ángulo Carina redondeada adelantarla un tiempo antes de ir a la cama.
carinal – Espesamiento de las tomas: tampoco existe una
Secreciones Un bronquio Generalizadas evidencia científica a este respecto y, aunque las to-
mas espesadas retrasan el vaciado y no disminuyen
los reflujos, es cierto que las fórmulas espesadas re-
ducen el número de vómitos, los períodos de llanto al
Por estos motivos, el estudio del RGE se ha converti- día y aumentan tanto el período de sueño como el
do en una de las principales indicaciones de laringo- aporte calórico.
broncoscopia, ya sea rígida o flexible. – Evitar comidas que disminuyen el tono del EEI:
El lavado broncoalveolar se realiza en el contexto las más frecuentes son las bebidas con cafeína, bebi-
de una broncoscopia y es adecuado para el diagnósti- das carbonatadas, las grasas y los alimentos ácidos.
co de aspiración, aunque no discrimina el origen de – Alimentación por sonda: un tratamiento de
ésta, de aquí su limitación. El LLM (lipid laden ma- 7-10 días en niños pequeños con retraso del creci-
crophages) es positivo a las 6 h de la aspiración y la miento puede ser eficaz para disminuir los síntomas.
positividad persiste hasta 72 h después del episodio En los pacientes con vómitos persistentes incluso con
de aspiración. Se efectúa recogiendo 5 ml de suero sonda nasogástrica se debe intentar colocar una son-
salino del lavado bronquial y haciendo un recuento da nasoduodenal.
cuantitativo y cualitativo de los macrófagos que con- – Exposición al tabaco: está asociada a la enferme-
tiene lípidos en su interior. Se estudian 100 macrófa- dad pulmonar aguda y crónica. Provoca reflujo al dis-
gos, que se tiñen con aceite rojo O. Es positivo desde minuir la presión del EEI y retrasar el vaciado gástrico.
el punto de vista cuantitativo si al menos el 80 % de
los macrófagos contienen lípidos. El test cualitativo 2. Tratamiento farmacológico. El objetivo de la me-
se realiza mediante un score que mide de 1 a 4 la opa- dicación en la enfermedad por reflujo es mejorar la
cificación de los lípidos intracelulares (0: no opacifi- motilidad esofágica, aumentar presión del EEI y dis-
cación; 1: 1/4 opaco; 2: 1/2 opaco; 3: 3/4 opaco; 4: minuir la secreción gástrica. Para ello se emplean di-
opaco), y es positivo si el score es mayor a 72. ferentes fármacos en combinación.

TRATAM IEN TO – Procinéticos: a ) el cisapride a dosis 0,2 mg/kg/día


Cuando en un paciente se demuestra que el RGE administrado 30 min antes de las tomas es un fármaco
provoca una enfermedad de la vía aérea, éste se con- muy efectivo para disminuir el reflujo, pero del que se

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han descrito diferentes efectos secundarios. El más BIBLIO GRAFÍA

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frecuente es la aparición de diarreas, y el más grave
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las alteraciones cardíacas, y b ) la metroclopramida disease. Otol Clin North Am 1996;29:27.
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30 min antes de las tomas, provoca un aumento del gastroesophageal reflux disease in pediatric patients. Ann
tono del EEI y estimula la peristalsis esofágica y gás- Otol Rhinol Laryngol 1996;105:23.
trica, siendo un potente antiemético. 3. Burton DM, Pransky SM. Pediatric airway manifestations of
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tagonistas H2 se emplean actualmente la ranitidina a 101:742.

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6. Bouchard S, Lallier M. The otolaryngologis manifestations
de 1 mg/kg en dos dosis es el fármaco actual más po- of gastroesophageal reflux: When is a pH study indicated?
tente para el tratamiento de la esofagitis más refracta- J Pediatr Surg 1999;34:1053.
ria. Su inconveniente en pediatría es que no se en- 7. Buts JP, Barudi C. Prevalence and treatment of silent gas-
cuentra disponible en forma líquida. troesophageal reflux in children with recurrent respiratory
disorders. Eur J Pediatr 1986;145:396.

De forma general, se considera que la respuesta 8. Carr MM, Nagy ML, Pizzuto MP. Correlation of findings at
direct laryngoscopy and bronchoscopy with gastroesopha-
sintomática al tratamiento antirreflujo de los pacien-
geal reflux in children. Arch Otol Head & Neck Surg 2001;
tes con enfermedades respiratorias es muy buena en 127:369.
el 45 %, parcial en el 15 % y en el 40 % restante nula.
9. Cohen S. Use of rigid and flexible bronchoccopy among
Por eso, el tratamiento no sólo debe determinar el pediatric otolaryngologits. Arch Otol Head & Neck Surg
RGE, sino también otros componentes que contribu- 2001;127:505.
yen a la sintomatología (infecciones respiratorias, al- 1 0. Tasken A, Dettmar PW. Is gastric reflux a cause of otitis
teraciones estructurales de la vía aérea). media with effusion in children? Laryngoscope 2002;112:
1930.

3. Tratamiento quirúrgico. La fundoplicatura con o 1 1 . Phipps C, Wood WE. Gastroesophageal reflux contributing
to chronic sinus disease in children. Arch Otol Head Neck
sin piloroplastia y/o gastrostomía se indica en pacien- Surg 2000;126:831.
tes en los que falla el tratamiento médico o sufren
1 2. Carr MM, Poje CP, Ehrig D. Incidence of reflux in young
complicaciones agudas como retraso del crecimiento, children undergoing adenoidectomy. Laryngoscope 2001;
neumonías por aspiración, esofagitis grave o esteno- 111:2170.
sis. La técnica se puede utilizar por vía abdominal o 1 3. Contencin P, Phillipe C. Gastroesophageal reflux in infants
laparoscópica, con resultados similares en series am- and children. A phryngeal pH monitoring study. Arch Otol
Head Neck Surg 1992;118:1028.
plias. En los pacientes con enfermedad ORL, la indi-
cación de cirugía suele ser menor que en el resto de 1 4. Bobin S, Attal P. Laryngotracheal manifestations of gastroe-
sophageal reflux disease: endoscopic appearance and
los grupos de pacientes con RGE patológico (esofagi- management. Pediatr Pulmonol 1999;18:73.
tis, neumonía, asma, alteraciones neurológicas). No
1 5. Young JL, Shaw GY, Searl JP. Laryngeal manifestations of
obstante, cada vez se publican más series en las cua- gastroesophageal reflux disease: Endoscopic appearance
les la indicación es una enfermedad ORL refractaria a and management. Gastrointest Endoscopy 1996;43:340.
tratamiento (sinusitis, estridor) o bien muy invalidante 1 6. DeMeester TR. Technique, indications and clinical use of
para el paciente (apnea, estenosis subglótica) 11,23,24. 24-hour esophageal pH monitoring. J Thorac Cardiovasc
Surg 1980;79:656.

La cirugía es efectiva para la mejoría de los sínto- 1 7. Halstead LA. Role of gastroesophageal reflux in pediatric
mas en el 90 % de los niños, obteniendo un mayor be- airway disorders. Otol Head Neck Surg 1999;120:208.

neficio en los casos secundarios a aspiración o con 1 8. Halstead LA. Gastroesophageal reflux: A critical factor in
pediatric subglotic stenosis. Otol Head Neck Surg 1999;
una enfermedad neurológica asociada. Los resultados
120:683.
son equivalentes a un tratamiento médico realizado
1 9. Herbst JJ, Minton SD. Gastroesophageal reflux causing res-
de forma óptima, tanto en dosis como en duración. La piratory distress and apnea in newborn infants. J Pediatr
ventaja de la cirugía es que asegura la prevención de 1979;95:763.
exposición al ácido en un 98 % y lo hace de forma 20. Holinger LD, Sanders AD. Chronic cough in infants and
equivalente a lo largo del día25. children: An update. Laryngoscope 1991;101:596.

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Curso Otorrinolaringología para Pediatras

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