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PRIMERA

UNIDAD
CONCEPTOS GENERALES
1. Noción del Derecho Procesal del Trabajo.

2. Terminología.

3. Clasificación del Derecho Procesal del Trabajo (los conflictos de


trabajo).

4. Principios informativos.

5. Autonomía.

6. Concepto y definición del Derecho Procesal del Trabajo.

7. Naturaleza.

8. Relaciones con otras ciencias y disciplinas jurídicas.


GENERALIDADES
DEL DERECHO
PROCESAL DE
TRABAJO
ANTECEDENTES
• El nacimiento del derecho procesal se remonta desde cuando aparece
el principio de que es ilícito hacerse justicia por propia mano, y los
particulares deben de someter sus conflictos al jefe del grupo social,
esta noción comienza a desarrollarse cuando se acepta que la
autoridad debe de someterse a normas previas para administrar
justicia. En un principio se atendió a la necesidad de resolver los
conflictos de carácter penal y los que se originaban entre particulares
a causa de oposición de intereses; pero poco a poco se fue
extendiendo su aplicación a la solución de muchos problemas, que no
conllevaban conflicto entre partes opuestas y que respondían por lo
general a la idea de proteger a los débiles e incapaces o a la
regulación de ciertos efectos jurídicos. De esta manera se regula la
declaración, constitución, ejecución, tutela de los derechos y de la
libertad y la dignidad del hombre, así como la realización de
formalidades necesarias para ciertos actos jurídicos, no solamente en
las relaciones de los ciudadanos entre si, sino también en la relación
de estos con el Estado; y las de aquellos con las entidades que lo
componen a este último.
• Con base en lo anterior, la historia del derecho procesal del trabajo,
evoluciona primeramente con el periodo exegético o de los
procedimentalistas, que es la etapa que va del siglo XIX hasta
principios del siglo XX, en donde todo el derecho procesal giraba
simplemente en torno a enseñar solamente procedimientos, mediante
la mecánica de los tramites que era lo que constituía una explicación
exegética del contenido de los códigos; posteriormente viene la etapa
del verdadero derecho procesal y de la escuela científica de los que se
elaboran los principios, fundamentos e instituciones del derecho
procesal, en ese momento desde el punto del derecho procesal civil
que es la rama de mayor florecimiento, y que aún hoy en día se
conserva a la cabeza del movimiento científico. Es en esta etapa en
donde el Derecho Procesal adquiere categoría de ciencia
especializada y se convierte en una de las ramas más importantes de
la enciclopedia jurídica.
• Durante esta etapa aparecen las 3 escuelas europeas mas importantes en el tema
del Derecho Procesal, que son en su orden:

• La escuela Alemana
• La escuela Italiana
• La escuela Española

• La Escuela Alemana: Con el procesalista James Goldschmidt, considerado uno


de los más grandes de todos los tiempos, pues en su obra florecen temas como las
excepciones y los presupuestos procesales y la teoría general del Proceso.

• La escuela Italiana: Con el procesalista Giuseppe Chiovenda, autor de la


doctrina sobre la acción en el sistema de los derechos y padre de la Escuela
Italiana de Derecho Procesal; seguido por el hoy considerado el procesalista
contemporáneo más importante Francesco Carnelutti y por uno no menos
importante que es Piero Calamandrei.

• La escuela Española: En donde sobresalen los procesalistas Jaime Guasp, Pietro


Castro, Víctor Manuel de la Plaza, Niceto Alcalá-Zamora y Castillo, para sólo
mencionar a algunos de los más importantes durante este período de la escuela
científica que se desarrollo a partir de 1857 y se prolonga hasta nuestros días.
ANTECEDENTES DEL DERECHO
PROCESAL DEL TRABAJO
• En cuanto al Derecho Procesal del Trabajo, sus primero antecedentes se
remontan a los años posteriores a la Revolución Francesa, cuando el
surgimiento de las relaciones de trabajo industrial, genera la necesidad,
no sólo de regular su marco sustantivo, sino también el de crear el marco
procedimental que permitiere a trabajadores y empleadores dirimir sus
conflictos ante la justicia. Es así como los primeros procedimientos ante
los que originalmente se dirimen los conflictos laborales son los del
derecho común, que sirve de asidero mientras se codifica la legislación
laboral.

• Fue en el continente europeo en donde no sólo surgen las primeras


regulaciones del trabajo, sino también donde surge la disposición de
crear posteriormente los cuerpos legales de normas que en forma
autónoma vendrían a regula el trabajo. Esto dio como consecuencia la
promulgación de los primeros estatutos legales que regularían las
relaciones de trabajo y por consiguiente esto trajo consigo el
rompimiento del cordón umbilical que hasta aquel momento habían
conservado éstas con el derecho común.
• Aunque las relaciones laborales en el caso del continente americano
sigue siendo la Constitución mexicana promulgada en 1917, en el caso
guatemalteco la creación del Código de Trabajo no se da, hasta en 1947,
cuando el 1 de mayo de ese año cobra vigencia. A pesar de ser
considerado desde aquel momento y hasta nuestros días, uno de los
mejores cuerpos normativos de América, que regula relaciones de
trabajo, esta genialidad creada por la primera Asamblea Legislativa del
periodo revolucionario (1944-1954), precisamente durante el gobierno
del Doctor Juan José Arévalo Bermejo, alberga en su contenido una serie
de resabios que hacen forzosa, en muchos casos, la aplicación de las
disposiciones del derecho procesal civil, lo cual aunque no vulnera su
carácter de disciplina autónoma de la enciclopedia procesal, si hace que
se genere una seria contravención a los principios procesales que con
carácter exclusivo regula nuestro Derecho Procesal del Trabajo.

• No obstante lo anterior, el Código de Trabajo en materia procesal, sigue


considerándose una legislación de verdadera vanguardia, aunque hoy en
día y con el transcurso de sus 60 años de vigencia se haga innegable la
necesidad de una reforma que adecue el trámite y el espíritu del proceso
a la demanda de servicio que la administración de justicia en ese ramo
recibe día con día.
IMPORTANCIA, NATURALEZA Y OBJETO
DEL DERECHO PROCESAL
• Importancia. En la noción del Derecho Procesal no puede dejar de
mencionarse que su origen o causa primaria deviene que no puede
concebirse la existencia de una sociedad humana en la que no exista
conflictos de intereses y de derechos, o que las normas jurídicas que la
reglamentan son susceptibles de ser vulneradas. Ante aquel esquema
podrían caber únicamente dos soluciones, por un lado, permitir la
justicia por propia mano; y por el otro lado, atribuir al Estado la faculta
de dirimir aquellos conflictos. Derivado de esto, la importancia del
Derecho Procesal se origina de una necesidad que es la relacionada a
encausar la acción de los miembros de una sociedad en el deseo de
proteger sus intereses contra otros miembros de la comunidad en donde
vive o bien en contra del mismo Estado, ya sea ante una amenaza o bien,
ante un hecho que ha perturbado sus derechos.

• Es gracias al Derecho Procesal, que se elimina la justicia privada que se


podría constituir en barbarie y el Estado puede garantizar la paz y
tranquilidad social, sin el Derecho Procesal serían imposibles estas
garantías.
• Naturaleza. Puede decirse que éste por el hecho de referirse a una
de las funciones esenciales del Estado, como lo es la de impartir
justicia, es un derecho público, es decir, sus normas son de orden
público porque no pueden derogarse por acuerdo entre las partes
interesadas y porque son generalmente de imperativo cumplimiento y
deben prevalecer en cada nación sobre las leyes extranjeras.

• Objeto. El objeto del Derecho Procesal de manera general es regular


la función jurisdiccional del Estado en las siguientes situaciones:
• A. En la solución de conflictos entre particulares y en los de éstos
con el Estado;
• B. En la declaración de certeza de ciertos derechos subjetivos cuando
la ley lo exige como formalidad par su ejercicio o reconocimiento;
• C. En el juzgamiento y sanción de ilícitos penales.
• D. En la tutela de las garantías constitucionales frente a las leyes
comunes y frente al orden legal de los actos de la administración;
• E. En el mantenimiento de las garantías individuales y los derechos
que la Constitución y las leyes les garantice.
PRINCIPIOS DEL DERECHO
PROCESAL EN GENERAL
• Devis Echandía con relación a los principios del Derecho Procesal señala: “son
principios del Derecho Procesal:

• A. Principio de Interés Público en el Proceso: El cual consiste en que el


proceso es de interés público porque persigue y garantiza la armonía, la paz y la
justicia social.

• B. Principio de carácter exclusivo y obligatorio de la función jurisdiccional


del Estado. Éste consiste en que el proceso es de carácter exclusivo y obligatorio
para el Estado porque con él se evita la justicia privada y se coloca al Estado en la
función de garantizar la vida en comunidad de manera civilizada.

• C. Principio de Independencia de la autoridad judicial. Este se refiere que


para que se pueda obtener una recta aplicación de justicia, es indispensable que
los funcionarios encargados de aquella misión, puedan obrar libremente en cuanto
la apreciación del derecho sin más obstáculo que los impuestos por la misma ley.
Este principio rechaza toda coacción sobre el juez, pues éste debe sentirse
soberano en la aplicación de justicia.
D. Principio de imparcialidad del funcionario judicial. Éste se refiere a
que los funcionarios encargados de impartir justicia deben de tener vedado
conocer y resolver asuntos en que sus intereses personales se hallen en
conflicto con su obligación de aplicar rigurosamente el derecho, pues no se
puede ser juez y parte en un mismo asunto.

E. Principio de Igualdad de las partes ante la ley procesal. Éste se


refiere a que las partes en el curso del proceso deben de gozar de iguales
oportunidades par su defensa, además de que no son aceptables dentro del
procedimiento privilegios relativos a la raza, fortuna o nacimiento de las
partes. Éste principio tiene mucho que ver con que se posibilite a los pobres
y débiles la oportunidad de verdadera defensa y un fácil acceso al proceso.

F. Principio de necesidad de oír a la persona sobre la cuál va surtirse la


decisión. Éste principio radica en que la sentencia proferida dentro del
proceso, solo puede afectar a las personas que fueron parte en el mismo.

G. Principio de publicidad en el proceso. Éste principio significa que no


debe haber justicia secreta, no procedimientos ocultos, ni fallos sin
antecedentes ni motivaciones. En pocas palabras, se reduce a la discusión
de la pruebas, a la motivación del fallo y a la intervención de las partes a lo
largo de todo el trámite del proceso.
H. Principio de obligatoriedad de los procedimientos establecidos en la ley. Éste
principio consiste en el imperativo para el juez de tener que observar los procedimientos
que se han de seguir para cada clase de proceso, sin que le sea permitido a los
particulares, ni a las autoridades, ni a los jueces modificarlos.

I. Principio de que las sentencias no crean, sino declaran derechos. Éste principio se
refiere a señalar que el juez al decidir, se limita a declarar los derechos que conforme a
las normas positivas tienen las partes, y no les otorgan ninguno que ellos consagren.
Deriva éste principio de que todos los derechos subjetivos se originan en el derecho
positivo y principalmente en la ley que es su fuente formal más común, y de ello se
advierte que los procedimientos sirven para obtener su tutela, su ejecución, su garantía y
para permitir en ocasiones su ejercicio, pero no para crearlos.

J. Principio de verdad procesal. Éste Principio se refiere que para que el juez lo
importante y único es la verdad procesal, que su decisión tendrá que ceñirse a ella y
entonces, será recta y legal, aunque en ocasiones la realidad sea diferente. De ahí que
pueda afirmarse que en el proceso lo que importa es la prueba del derecho que se tiene, y
que tanto vale no tener un derecho como no poder demostrarlo, pues el juez tiene que
fallar conforme lo probado en el proceso.

K. Principio de cosa juzgada. Éste principio se explica señalando que una vez decidido,
con las formalidades legales un litigio o un asunto legal entre determinadas partes, éstas
deben acatar la resolución que le pone término, sin que le sea permitido plantearlo de
nuevo, y los jueces deben respetarla. De lo contrario la incertidumbre reinaría en la vida
jurídica y la función del juez se limitaría a la de buen componedor con la consecuencia
de que el proceso estaría siempre sujeto a revisión o modificación, lo que haría imposible
la certeza jurídica. ”.
PRINCIPIOS INFORMATIVOS

* Protector o tutelar de los trabajadores;


* De economía procesal;
* De concentración;
* Impulso procesal de oficio;
* Publicidad;
* Oralidad;
* De sencillez o de poco formalismo;
* De investigación o averiguación de la verdad material o histórica;
* De flexibilización en cuanto a la carga y valoración de las pruebas;
* Adquisición Procesal.
AUTONOMÍA

• Trueba Urbina citando a Rocco expresa: Para que una ciencia jurídica pueda
decirse autónoma es necesario y suficiente que sea bastante extensa que amerite
un estudio conveniente y particular; que también contenga doctrina homogénea
dominando el concepto general informativo de otra disciplina; que posea un
método propio, es decir, que adopte procedimientos especiales para el
conocimiento de la verdad constitutiva del objeto de la indagación.

• El campo en que actúa el Derecho Procesal de Trabajo es extenso y, a medida que


se desarrollan y complican las relaciones obrero-patronales, inter-obreras e inter-
patronales tiende a extenderse mucho más, ameritando una disciplina jurídica
especial que las regule; el Derecho Procesal de Trabajo día a día enriquece su
doctrina, vigoriza y consolida instituciones propias (sentencia colectiva,
llamamiento conciliatorio forzoso, inversión de la carga de la prueba, apreciación
de la prueba en conciencia, etc.) está informado por una serie de principios
propios; posee un método propio para el conocimiento de la verdad objeto de su
indagación, como lo es el sistema de la apreciación de la prueba en conciencia; y
por último, cuenta con una jurisprudencia privativa y especializada.
CONCEPTO Y DEFINICIÓN DEL DERECHO
PROCESAL DEL TRABAJO

Derecho procesal del Trabajo, es el conjunto de principios,


instituciones y normas instrumentales que tienen por objeto
resolver los conflictos surgidos con ocasión del trabajo
(individuales y colectivos) así como las cuestiones voluntarias,
organizando para el efecto a la jurisdicción privativa del Trabajo
y Previsión Social y regulando los diversos tipos de procesos.
NATURALEZA
En Guatemala la naturaleza jurídica del Derecho del Trabajo, está
determinada en la propia legislación, tanto en el considerando cuarto
literal e) del Código de Trabajo, como en su artículo 14. Por ejemplo,
en el referido considerando dice que El Derecho del Trabajo es una
rama del Derecho Público, por lo que al ocurrir su aplicación, el interés
privado debe ceder ante el interés social o colectivo. Y en el artículo 14
indica: El presente Código y sus reglamentos son normas legales de
orden público y a sus disposiciones deben sujetarse todas.

Ahora bien cabe anotar que en la doctrina domina la idea de que el


Derecho de Trabajo es una nueva disciplina jurídica autónoma que no
debe asimilarse al Derecho Privado ni al Público, ni tiene carácter
mixto, aunque se componga de elementos de uno y de otro, toda vez
que esta división está en crisis y sólo por tradición se acepta, pues no
responde a una realidad científica y menos sirve para fijar la naturaleza
de la nueva disciplina cultural de tendencia socializadora.
RELACIÓN CON OTRAS CIENCIAS Y
DISCIPLINAS JURÍDICAS
El Derecho Procesal del Trabajo tiene relación con diversas disciplinas que
conforman el universo del Derecho; pero conviene anotar que se da una relación
más acentuada con los siguientes:

a. Relación con el Derecho Constitucional: tal relación la encontramos


particularmente en los artículos 12, 28, 29, 103, 104, 106, 203, 204 y 211. Porque la
justicia sea del ramo que sea se imparte de conformidad con la Constitución. Son los
jueces quienes con independencia tienen la facultad de juzgar y ejecutar lo juzgado.
Porque según la Constitución: Las leyes que regulan las relaciones entre
empleadores y el trabajo son CONCILIATORIAS y TUTELARES para los
trabajadores y atenderán los factores económicos y sociales pertinentes. Todos los
conflictos relativos al trabajo están sometidos a la JURISDICCION PRIVATIVA. Se
reconoce el derecho de huelga y para ejercidos de conformidad con la ley. Y porque
los derechos consignados en la Constitución son IRRENUNCIABLES para los
trabajadores, susceptibles de ser superados a través de la contratación individual o
colectiva y en la forma que fija la ley, para este fin el Estado fomentará y protegerá
la negociación colectiva. En caso de duda sobre la interpretación o alcance de las
disposiciones legales, reglamentarias o contractuales en materia laboral, se
interpretarán en el sentido más favorable para los trabajadores.
• b. Relación con el Derecho de Trabajo Sustantivo: Porque el derecho procesal
es el encargado de hacer realidad las normas plasmadas en el derecho sustantivo
cuando las mismas son incumplidas o se quieren llevar a la práctica.

• c. Relación con el Derecho Procesal Civil: Esta no siempre bien concebida


relación, se da a partir de lo que establece el artículo 326 del Código de Trabajo:
"En cuanto no contraríen el texto y los principios procesales que contiene este
Código, se aplicarán supletoriamente las disposiciones del Código de
Enjuiciamiento Civil y Mercantil y de la Ley Constitutiva del Organismo
Judicial. Si hubiere omisión de procedimientos, los tribunales de trabajo y
previsión social están autorizados para aplicar las normas de las referidas leyes
por analogía, a fin de que pueda dictarse con prontitud la resolución que decida
imparcialmente las pretensiones de las partes".

• d. Relación con el Derecho Procesal Penal: Por la similitud de procedimientos


para el juzgamiento de faltas y porque en ambos campos los jueces no deben
contraerse a establecer la verdad histórica, esto es, la que las partes tratan de
demostrar, sino que a través de la investigación deben procurar establecer la
verdad real.

• e. Relación con el Derecho Administrativo: Es en este ámbito en que se


legalizan las organizaciones de trabajadores, se soluciona conciliatoriamente
muchos de los conflictos individuales y colectivos que surgen entre patronos y
trabajadores y tiene participación activa, preventiva y definitiva en una serie de
situaciones de carácter laboral, previamente a ser puestas en conocimiento ante
los jueces de trabajo.
JURISDICCIÓN
PRIVATIVA DEL
TRABAJO
1. Naturaleza y caracteres.

2. Organización de los órganos


jurisdiccionales que recoge el Código
de Trabajo Guatemalteco.

3. Las reglas de la Competencia.

4. Los conflictos de jurisdicción.


CONSIDERACIONES
Antes de abordar el significado del término jurisdicción privativa, resulta importante
proponer una definición de lo que debe de entenderse por jurisdicción en el ámbito
del derecho procesal del trabajo. En ésta dirección, puede afirmarse que la
jurisdicción corresponde a la facultad recaída en los jueces de trabajo por delegación
del Estado a través de la ley para poder juzgar en el ámbito del derecho procesal del
trabajo.

Con base en la anterior definición, puede ahora afirmarse que el término privativo se
refiere a que el ejercicio de la jurisdicción en este ámbito, debe corresponder
exclusivamente a los jueces de trabajo y previsión social a quienes debe facultarse
para impartir la justicia exclusivamente en ese ámbito, así se desprende de lo
normado en el segundo párrafo del artículo 103 de la CPRG y el artículo 283 del
Código de Trabajo.

Por consiguiente, la jurisdicción del trabajo es privativa porque el juez que juzga
es éste ámbito debe hacerlo con absoluta exclusividad, de lo que se advierte que
todos los conflictos relativos al trabajo deben estar sometidos a su conocimiento,
pues es a ellos a los que les compete juzgar y ejecutar lo juzgado en aquellos
conflictos.
NATURALEZA
Siendo la función jurisdiccional una actividad eminentemente procesal,
su naturaleza es precisamente ésta, por cuanto como se analizó, se
traduce en la facultad de que es investido el juzgador par impartir
justicia, facultad que deriva de la ley, pero que se transmite por
delegación del Estado a quienes ejercen la jurisdicción.

La naturaleza formal y material jurisdiccional de la judicatura privativa


de trabajo, tiene su base en normas constitucionales y, se desarrolla y
determina con mayor precisión en el Código de Trabajo. En la
Constitución lo establece en el segundo párrafo del artículo 103; en el
artículo 283 del Código de Trabajo que dice: "Los conflictos relativos a
trabajo y previsión social, están sometidos a la jurisdicción privativa de
los tribunales de trabajo y previsión social, a quienes compete juzgar y
ejecutar lo juzgado".
Elementos (Poderes) de la jurisdicción.
De manera que la judicatura de trabajo y previsión social de manera formal
tiene plena categoría jurisdiccional, con todas las potestades inherentes a esa
calidad:

a. Notio = jurisdicción, facultad de conocer un litigio;


b. Vocatio = llamamiento, facultad de hacer comparecer a las partes;
c. Coertio = Contención, restricción, facultad de castigar o penar;
e. Iundicium = facultad de dictar sentencia;
f. Executio = ejecución judicial, mediante auxilio de fuerza pública.

Pero existe una excepción para los tribunales de conciliación y arbitraje, cuyas
facultades son más limitadas.

Esta tipo de judicaturas depende del Organismo Judicial, pero requiere de


personal especializado en la materia y están integrados por jueces de derecho y
de conciencia, con preponderancia de los jueces de derecho sobre los legos
(jueces de primera instancia y los representantes obrero-patronales en los
tribunales de conciliación y arbitraje).
CARACTERES
En cuanto a los caracteres de la jurisdicción y fundamentado en lo que para el efecto establece
el Código de Trabajo en sus artículos 307 y 308, estos son:

Improrrogabilidad: Se refiere a que la jurisdicción no puede prorrogarse ni por razón de la


materia ni de territorio a otro órgano jurisdiccional. Aunque se trate de uno que conozca en el
mismo ramo de la jurisdicción. Es decir, que derivado de esto, ningún juez de trabajo y
previsión social puede trasladar el conocimiento de un asunto que por ley le corresponde
conocer a otro juez que aunque conozca del mismo ramo ejerza jurisdicción en un territorio
distinto al primero.
No obstante lo anterior, la ley establece como único caso de excepción a ésta característica el
pacto de prórroga de la jurisdicción en el que concurran los siguientes presupuestos:

a) Haberse convenido por ambas partes de la relación de trabajo en el contrato individual de


trabajo o en pacto colectivo de condiciones de trabajo, en cuyos casos debe existir una
cláusula en la que se haya contenido el pacto de prórroga; (art. 307 del C.T.)

b) Que la prórroga convenida por ambas partes de la relación de trabajo, se notoriamente


favorable para el trabajador, es decir, que el presentar la reclamación ante otro juez que
ejerza jurisdicción en territorio distinto al prorrogado, debe ser de beneficio para el
trabajador.
Indelegabilidad: Ésta característica se refiere a que la jurisdicción no puede
delegarse en la persona de otro juez, que aunque posee jurisdicción, la misma se
ejerza en distinto ramo.

Este sería el caso del juez de trabajo y previsión social delegando a un juez del ramo
civil, para que ejerza jurisdicción privativa del trabajo, en el conocimiento de un
negocio de un negocio cuyo sometimiento sea obligado al conocimiento del juez de
trabajo.

El origen de esta característica proviene de que, de acuerdo a la Constitución


Política de la República, la faculta de atribuir jurisdicción y competencia
corresponde al Estado por medio de la ley y través de la Corte Suprema de Justicia
(art. 203 CPRG y 57 LOJ), por consiguiente, permitir la delegación de la
jurisdicción sería lo mismo que conferir al juzgador la facultad de investir a otro
juzgador de ejercer jurisdicción en un ámbito que no le corresponde.

Ahora bien, nada tiene que ver con la Improrrogabilidad y la Indelegabilidad, los
casos de impedimentos, excusas o recusaciones, normados en la LOJ, que obligan a
que un juzgador deba dejar de conocer de un asunto sometido a sus jurisdicción por
razón de la existencia de una de éstas causas. (art. 122 al 134 LOJ).

En cada uno de estos casos, como en el de la facultad que tienen los juzgadores de
comisionar a otros jueces de igual o inferior categoría y fuera de la jurisdicción
privativa para la practica determinada de diligencias fuera del lugar donde tiene su
sede el primero, puede afirmarse que no existe ni prórroga ni delegación de la
jurisdicción.
Exclusividad: Ésta característica se refiere a que la facultad de la
impartición de la justicia en el ámbito del derecho procesal del trabajo,
es en exclusiva una atribución que corresponde a los jueces de trabajo y
previsión social, derivado del mismo carácter privativo, que como se
analizó, se atribuye a la jurisdicción en este ámbito.

¿Diferencia entre Jurisdicción y Competencia?


COMPETENCIA
La competencia es el conjunto de pretensiones sobre las que un órgano jurisdiccional ejerce su jurisdicción,
con referencia al órgano jurisdiccional que es la facultad de ejercer su función con relación a pretensiones
determinadas, y con referencia a las partes es tanto el derecho de que sus pretensiones y resistencias sean
conocidas por un órgano determinado, como el deber de someterse al mismo”. 4 Si un órgano jurisdiccional ha
de conocer de determinadas pretensiones, es en virtud de que una norma distribuye el conocimiento de las
diversas pretensiones posibles entre los distintos órganos existentes.

JURISDICCIÓN Y COMPETENCIA. Frecuentemente se confunden estos dos conceptos, pero debe


entenderse que la jurisdicción es la potestad de que se hallan revestidos los jueces para administrar justicia, y
la competencia, la facultad que tienen para conocer de ciertos negocios, ya por la naturaleza misma de las
cosas, o bien por razón de las personas. La jurisdicción es el género, y la competencia la especie. Un juez
puede tener jurisdicción y no competencia, pero no al contrario. Para que tenga competencia, se requiere que
el conocimiento del pleito le esté atribuido por la ley. La jurisdicción y la competencia emanan de la ley, más
la competencia algunas veces también se deriva de la voluntad de las partes, lo que no sucede con la
jurisdicción

Considerada la jurisdicción como el poder del juez, la competencia ha sido definida por Boncenne como la
medida de este poder. Ha sido también definida como "la aptitud del juez para ejercer su jurisdicción en un
caso determinado". Y como "la facultad y el deber de un juzgado o tribunal para conocer de determinado
asunto".

La competencia es, en realidad, la medida del poder o facultad otorgada a un órgano jurisdiccional para
entender de un determinado asunto.

En otros términos se puede decir que la competencia es aquella parte de la potestad jurisdiccional que está
legalmente atribuida a un órgano judicial determinado frente a una cuestión determinada.
Jurisdicción es la investidura que la ley da al juez para que pueda
administrar justicia, Competencia, es la aptitud que tiene el juez para
administrar justicia, pero solo respecto de las cuestiones que conforme a la
ley le están encomendadas.

La Jurisdicción es la potestad de todo Órgano Jurisdiccional de administrar


justicia; la Competencia es la distribución de esa potestad de administrar
justicia entre los diferentes jueces.

La Jurisdicción en es el Género, Genérica, el Universo, es lo Todo. La


Competencia es la Especie, Específica, la muestra, lo singular, lo particular,
lo individual.

La Jurisdicción tiene todo juez sin determinación del caso concreto. La


competencia se determina con relación a cada caso concreto.

La Jurisdicción abarca todo el territorio nacional. La Competencia es el


límite de la jurisdicción.

La Jurisdicción jamás falta en un Juez en cambio; la competencia le puede


faltar al juez.
ORGANIZACIÓN DE LOS ÓRGANOS JURISDICCIONALES
QUE EL CÓDIGO DE TRABAJO GUATEMALTECO

Esta organización se conforma a partir de los jueces que conocen de los


distintos procesos laborales, a saber:

Unipersonales: Juzgado de Trabajo y Previsión Social, con jueces de


derecho unipersonales que conocen de los conflictos individuales y
colectivos de carácter jurídico, generalmente a través del procedimiento
ordinario;

Colegiados: Salas de las Corte de Apelaciones de Trabajo y Previsión


Social, las que conocen en segunda instancia de los mismos conflictos
indicados con anterioridad, integrada por tres jueces de derecho;

Tribunales Mixtos: A) De conciliación; y B) De arbitraje, presididos


por un juez de derecho, quien conoce cuestiones de derecho; dos
delegados: uno obrero y un patronal, que conocen conflictos colectivos
de carácter económico - social, según su leal saber y entender.
SEGUNDA
UNIDAD
EL JUICIO ORDINARIO Y LOS
MEDIOS DE IMPUGNACIÓN
1. El procedimiento Ordinario Laboral.

2. Naturaleza y caracteres.

3. Materia del procedimiento ordinario en el campo laboral.

4. Las partes.

5. Capacidad procesal en materia del trabajo.

6. Representación de las partes y sus limitaciones en el Código de


Trabajo Guatemalteco.

7. Reglas de la competencia de Acuerdo con el Código de Trabajo


1. El procedimiento Ordinario Laboral
El juicio ordinario laboral, constituye la vía procesal dentro de la que se
discuten todos los conflictos individuales derivados de la relación de
trabajo. Por consiguiente, puede considerarse que su naturaleza
ordinaria deriva de la observancia de todos los trámites y
solemnidades normados para que se puedan controvertir detenidamente
los derechos de las partes después de la discusión y el examen de ellos.
Estas solemnidades, aunque existen deben recordarse que son mínima y
poco formalista por virtud de la existencia de los principios de poco
formalista y de sencillez que ilustran el procedimiento laboral.

El juicio puede considerarse un típico proceso de conocimiento,


puesto que su finalidad es la de obtener una declaración de voluntad y
de consecuencias jurídicas por parte del juez, que posteriormente
puedan ser eficaces mediante la ejecución de la sentencia.
2. Naturaleza y caracteres.
a) Naturaleza:
El juicio ordinario de trabajo es un típico proceso de cognición
(conocimiento), ya que tiende a declarar el derecho previa fase de
conocimiento; en él se dan preferentemente los procesos de condena y
los meramente declarativos. Se diferencia del civil, en las modalidades
que le imprimen los principios informativos y su propia normatividad.

La naturaleza jurídica del juicio ordinario laboral es pública por cuanto


la jurisdicción es una actividad encomendada por el Estado por medio
de la ley a los juzgadores y de allí entonces su naturaleza (Dr.
Landelino Franco).
2. Naturaleza y caracteres.
b) Caracteres:

Es un proceso en el que el principio dispositivo se encuentra atenuado,


pues el Juez tiene amplias facultades en la dirección y marcha del
mismo, impulsándolo de oficio, produciendo pruebas por sí o bien
completando las aportadas por los litigantes, teniendo contacto directo
con las partes y las pruebas, y apreciando a las mismas con flexibilidad
y realismo; es un juicio predominantemente oral, concentrado en sus
actos que lo componen, rápido, sencillo, barato y antiformalista (poco
formalista), aunque no por ello carente de técnica; limitado en el
número y clases de medios de impugnación y parco en la concesión de
incidentes que dispersan y complican los trámites, más celoso que
cualquier otro juicio en mantener la buena fe y lealtad de los
litigantes y todo ello, saturado de una tutela preferente a la parte
económica y culturalmente débil. En el mismo no se contempla término
de prueba porque esta se produce de una vez durante las audiencias, así
como también que en la primera instancia no existe vista del proceso y
por añadidura no se declara cerrado el procedimiento.
2. Naturaleza y caracteres
Por su parte, el Dr. Landelino Franco en su libro Manual de Derecho
Procesal del Trabajo, tomo I, establece que los caracteres del juicio
ordinario son los siguientes:

a. Es un procedimiento que se actúa por las partes en audiencias


sucesivas. Ésta característica, es de suma importancia, porque de ella
deriva que las actuaciones de las partes sean atraídas a producirse
dentro de las audiencias en las que va a celebrarse el juicio. Esto a su
vez, implica que la mayoría o totalidad de los actos procesales que
componen el juicio van a tener lugar dentro de la audiencia y esto va a
generar que las partes concurran a las audiencias con sus respectivos
medios de prueba y además preparados para formular dentro de las
mismas sus respectiva alegaciones.
2. Naturaleza y caracteres
b. Las actuaciones de las partes se asientan en acta. Esta
característica es la que obliga que la historia del proceso deba
documentarse en acta, en donde se asientan las actuaciones de las
partes, pero también las resoluciones que el juez de trabajo y previsión
social debe dictar de todos y cada uno de los actos procesales que va
resolviendo dentro de las audiencias, así como la respectiva notificación
de lo resuelto. Finalmente, en las actas también debe hacerse constar las
impugnaciones que promueven las partes dentro de las audiencias, así
como las resoluciones que en relación a ellos se dicten.

c. No existe periodo de prueba dentro del trámite del proceso. En


virtud de que las partes deben comparecer a las audiencias con todos
sus medios de prueba y en las mismas debe tener lugar la recepción de
aquellos y el diligenciamiento de los que deban recabarse por no
encontrarse en poder de las partes.
2. Naturaleza y caracteres
d. La actuación de las partes debe ser por regla general oral.
Reservándose el carácter de excepción a la actuación por escrito y
especialmente destinada ésta, a las actuaciones procesales que tengan
lugar fuera de las audiencias (art. 321 Código de Trabajo).

e. Derivado del principio del impulso procesal de oficio, el juez de


trabajo se encuentra facultado para señalar a su discrecionalidad
los plazos que deben celebrarse ciertas actuaciones, tales como la
audiencia para recibir la prueba y resolver las excepciones dilatorias, la
audiencia en la que deba reanudarse la primera comparecencia de las
partes, posteriormente a haberse ampliado la demanda dentro de las
primera audiencia señalada para este objeto; la audiencia en la que deba
tener lugar la comparecencia de las partes para que el actor en su
calidad de contrademandado comparezca a contestar la reconvención,
esto por mencionar algunos casos.
2. Naturaleza y caracteres
f. Se limita legalmente la clase y número de recursos que pueden
utilizarse para impugnarse las decisiones del juzgador.

g. Se protege jurídicamente de manera preferente a la parte


económicamente más débil de la relación procesal, que es el
trabajador.

h. No existe la posibilidad para el demandado de alegar la caducidad


de la instancia, en vista de que el impulso del proceso es de absoluta
responsabilidad del juzgador, y de allí que los actos a iniciativa de las
partes sean también limitados.
3. Materia del procedimiento ordinario en
el campo laboral.
4. Las partes.
Doctrinalmente no existe unidad de criterio en cuanto a la consideración de
quien o quienes se deben considerar como partes del proceso; unos
prefieren llamarlos accionantes y consideran también como partes no sólo
al que promueve el juicio y a quien contra el cual se promueve, sino
también al juez, a los terceros intervinientes. Sin embargo, para los efectos
de nuestro estudio diremos que las partes que intervienen en un proceso son
dos, y tradicionalmente se las ha denominado: PARTE ACTORA Y PARTE
DEMANDADA.

Por lo que se pueden definir de la manera siguiente: "Las partes en el


proceso laboral son: los trabajadores, y los patronos en lo que a relaciones
individuales se refiere, y las coaliciones o sindicatos de trabajadores, o
patronos o sindicatos de patronos, en lo que a relaciones de carácter
colectivo respecta y que, para que se les considere como tales, deben actuar
en nombre propio o representados, ya sea como parte actora o como parte
demandada, pidiendo la protección o la declaración de una pretensión de
carácter jurídico o de carácter económico y social, ante los órganos
jurisdiccionales de trabajo"
4. Las partes.
Devis Echandía señala que: “ Hay que distinguir los sujetos de la relación
jurídica sustancial que debe ser discutida o simplemente declarada en
el proceso y los sujetos de la relación jurídica procesal y del proceso.
Los primeros, son los sujetos titulares, activos y pasivos, del derecho
sustancial o de la situación jurídica sustancial que debe sustanciarse en el
proceso, por ejemplo: el acreedor y su deudor, el propietario y el tercero
poseedor del bien reivindicado, el hijo extramatrimonial y el supuesto
padre. Los segundos, son las personas que intervienen en el proceso como
funcionarios encargados de dirigirlo y dirimirlo (Jueces y magistrados
como órganos del Estado) o como partes (demandantes, demandados,
terceros intervinientes). Por consiguiente, son sujetos procesales en los
juicios civiles y laborales: el juez, el demandante y el demandado, y
excepcionalmente, los terceros que así sean aceptados. ”
4. Las partes.
Con base en lo anterior, son partes procesales dentro del juicio ordinario
laboral, las siguientes:

a. El actor: a quien típicamente le corresponderá la instauración de la


demanda, como único acto de iniciación procesal del trabajo.

b. El demandado: que es aquel al que se emplazará para que comparezca a


juicio a adoptar la actitud de oposición o bien la de la contestación afirmativa
de las pretensiones del actor.

c. La Inspección General de Trabajo: que de conformidad con lo regulado en


el artículo 280 del Código de Trabajo, deberá ser tenida como parte en todos
aquellos juicios ordinarios en los que se discutan intereses de trabajadores
menores de edad, intereses de trabajadores despedidos injustificadamente,
intereses de trabajadores cuya relación laboral haya finalizado sin que se les
haya hecho efectivo el pago de sus prestaciones laborales irrenunciables, e
intereses de trabajadoras en estado de gravidez, salvo que en cuanto a estas
últimas (en estado de gravidez), se apersone el Instituto Guatemalteco de
Seguridad Social.
5. Capacidad procesal en materia del
trabajo.
Como primera providencia debe anotarse que de la distinción entre partes del
litigio y partes del proceso, surge la clasificación de las partes en sentido
material y partes en sentido formal o procesal.

Se entiende por parte en sentido material, los sujetos del litigio o de la


relación jurídica sustancial sobre que versa, y por partes en sentido formal,
los sujetos del proceso.

Es el derecho material el que determina la capacidad de las personas o sea la


determinación de las personas que tienen el pleno ejercicio de sus derechos
civiles. En nuestro medio esa capacidad se adquiere con la mayoría de edad;
"Los menores que han cumplido catorce años son capases para algunos actos
determinados por la ley". (Art. 8º del Código Civil).

La capacidad procesal es un requisito de orden estrictamente jurídico


procesal, puesto que con ella se trata de garantizar la eficacia de todos los actos
que reunidos constituyen el proceso.
5. Capacidad procesal en materia del
trabajo.
Capacidad procesal en trabajo: De lo anterior se puede apreciar que la ley tiene
previstos los casos de excepción, entre los cuales encontramos lo relativo a la
capacidad en el campo laboral:

El Artículo 31 del Código de Trabajo, indica que tienen también capacidad para contratar su
trabajo, para percibir y disponer de la retribución convenida y, en general, para ejercer los
derechos y acciones que se deriven del presente Código, de sus reglamentos y de las leyes de
previsión social, los menores de edad, de uno u otro sexo, que tengan catorce años o más y los
insolventes y fallidos. (convenio 138 OIT edad mínima especificada: 14 años para entrar a
trabajar. Ratificado por Guatemala el 27 de abril de 1990, En vigor)

Las capacidades específicas a que alude el artículo relacionado, lo son sólo para los efectos del
trabajo y más específicamente para las persona que actúa como trabajador. El referido artículo
31 se complemente con lo que prescribe el 280 del mismo instrumento legal:

"La Inspección General de Trabajo debe ser tenida como parte en todo conflicto individual o
colectivo de carácter jurídico en que figuren trabajadores menores de edad o cuando se trate de
acciones entabladas para proteger la maternidad de las trabajadoras, salvo que, en cuanto a estas
últimas se apersone el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social."
6. Representación de las partes y sus limitaciones
en el Código de Trabajo Guatemalteco.
De manera general, toda persona natural con capacidad procesal, puede elegir entre comparecer o
estar en juicio personalmente o por medio de representante.

Toda persona jurídica, no obstante su capacidad procesal, sólo puede hacerlo por medio de la persona
o personas individuales que para ello están autorizadas por su régimen constitutivo. No pueden
presentar excusa médica a la que hace referencia el articulo 336 del Código de Trabajo, ya que
únicamente la pueden presentar las personas individuales. (sentencia del 2 de abril de 2013, dentro
del expediente 4358-2012 de la Corte de Constitucionalidad, el cual se fundamente en el criterio
sostenido por la Corte de Constitucionalidad en los expedientes 734-2010; 710-2011 y 4426-
2010).

Toda persona sin capacidad procesal sólo puede ejercer sus derechos en juicio por medio del
representante que la ley dispone.

A este fenómeno de actuar una persona a nombre de otra sin perder ésta su calidad de parte, se le
llama REPRESENTACION.

A la representación de las partes en el proceso se le ha clasificado en: representación Voluntaria o


Convencional; necesaria; legal; y judicial. La voluntaria se confiere mediante el mandato. La
necesaria, es la que se ejerce a nombre de una persona jurídica, porque estas sólo pueden actuar a
través de una persona física. La legal, es la que se ejerce a nombre de las personas procesalmente
incapaces, porque son menores de edad, o porque adolecen de alguna enfermedad que las sitúa en
estado de interdicción. La judicial, es la que designa un juez.
6. Representación de las partes y sus limitaciones
en el Código de Trabajo Guatemalteco.
LA REPRESENTACION DE LAS PARTES EN EL PROCESO LABORAL GUATEMALTECO Y
SUS LIMITACIONES, las establece el artículo 323 del Código de Trabajo, el cual regula:

a) "Las partes pueden comparecer y gestionar personalmente o por mandatario judicial";

b) "Sólo los abogados, los dirigentes sindicales en la forma prevista en el inciso h) del artículo 223 de
este Código y los parientes dentro de los grados de ley, circunstancia que acreditarán al tribunal,
podrán actuar como mandatarios judiciales."

c) "Las personas jurídicas actuarán por medio de sus representantes previstos en la escritura
constitutiva o en los estatutos, pero si otorgaren su representación a otros, éstos deben tener la calidad
de Abogado";

d) "Se exceptúan los casos de representación que se derive de una disposición legal o de una
resolución judicial, en que lo serán quienes corresponda conforme a las leyes respectivas o la
resolución judicial";

Una limitación más específica es la concernientes a los sindicatos, puesto que el artículo 223 literal e)
indica que la representación del Sindicato la tiene el Comité Ejecutivo en pleno, el cual está facultado
para acordar con las dos terceras partes del total de sus miembros en DELEGAR LA
REPRESENTACION, en uno o varios de sus miembros, PARA ASUNTOS DETERMINADOS, CON
DURACION LIMITADA, SIENDO DICHA DELEGACION REVOCABLE EN CUALQUIER
MOMENTO. Asimismo: "ni los comités ejecutivos, ni sus miembros integrantes como tales pueden
delegar la representación del sindicato, en todo o en parte, ni sus atribuciones a terceras personas por
medio de mandatos o en cualquier forma".
7. Reglas de la competencia de Acuerdo con el Código
de Trabajo
La palabra COMPETENCIA etimológicamente, viene de COMPETER,
que significa PERTENECER, INCUMBIR A UNO ALGUNA COSA.
En consecuencia, la competencia es la porción de jurisdicción que se
atribuye a los tribunales que pertenecen al mismo orden jurisdiccional.

Suele confundirse algunas veces la competencia con la jurisdicción,


pero los autores para establecer su diferencia dicen que la jurisdicción
es el género y que la competencia es la especie; puede concebirse la
existencia de jueces sin competencia y con jurisdicción, pero no puede
pensarse en la existencia de jueces sin jurisdicción y con competencia.

La competencia la podemos dividir de la manera siguiente:

a) Competencia por razón del territorio;


b) Competencia por razón de la materia;
c) Competencia por razón de grado;
d) Competencia por razón de la cuantía.
7. Reglas de la competencia de Acuerdo con el Código
de Trabajo
A. En el capítulo V del Código de Trabajo, denominado PROCEDIMIENTO DE
JURISDICCION Y COMPETENCIA, se establece todo lo relativo a competencia de
los tribunales de trabajo y previsión social, artículos del 307 al 314.

Artículo 307. En los conflictos de trabajo la jurisdicción (la competencia debieron decir
los legisladores) es improrrogable por razón de la materia y el territorio, salvo en lo que
respecta a la jurisdicción (competencia) territorial, cuando se hubiere convenido en los
contratos o pactos de trabajo una cláusula que notoriamente favorezca al trabajador.

Artículo 314 Salvo disposición en contrario convenida en un contrato o pacto de trabajo,


que notoriamente favorezca al trabajador, siempre es competente y preferido a cualquier
otro juez de trabajo y previsión social:

a)El de la zona jurisdiccional a que corresponda el lugar de ejecución del trabajo;

b) El de la zona jurisdiccional a que corresponda la residencia habitual del demandante,


si fueren varios los lugares de ejecución del trabajo;

c) El de la zona jurisdiccional a que corresponda la residencia habitual del demandado si


fueren conflictos entre patronos o entre trabajadores entre sí, con motivo del trabajo; y
7. Reglas de la competencia de Acuerdo con el Código
de Trabajo
d) El de la zona jurisdiccional a que corresponda el lugar del territorio nacional, en
que se celebraron los contratos, cuando se trate de acciones nacidas de contratos
celebrados con trabajadores guatemaltecos para la prestación de servicios o
construcción de obras en el exterior, salvo que se hubiere estipulado cláusula más
favorable para los trabajadores o para sus familiares directamente interesados.

B. Cuando se presenta un caso de incompetencia por razón de la materia o


territorial, el Código de Trabajo en su artículo 309 señala el procedimiento a seguir
al establecer:

Artículo 309. El que sea demandado o requerido para la práctica de una


diligencia judicial ante un juez que estime incompetente por razón del
territorio o de la materia, podrá ocurrir ante éste (declinatoria) pidiéndole
que se inhiba de conocer en el asunto y remita lo actuado al juez que
corresponda. También podrá ocurrir ante el juez que considere competente,
(inhibitoria) pidiéndole que dirija exhorto al otro para que se inhiba de
conocer en el asunto y le remita los autos. En ambos casos debe plantear la
cuestión dentro de tres días de notificado.
7. Reglas de la competencia de Acuerdo con el Código
de Trabajo
Los conflictos de jurisdicción (competencia) por razón de la materia que se susciten entre
los Tribunales de Trabajo y otros tribunales de jurisdicción ordinaria o privativa, serán
resueltos por la Corte Suprema de Justicia." (Lo aclaratorio escrito entre paréntesis y
subrayados son nuestros).

C. Doctrinariamente se sostiene que la naturaleza jurídica de la competencia es la de ser


un PRESUPUESTO PROCESAL y que en consecuencia es OBLIGACION DEL JUEZ,
analizar su competencia de oficio cuando se requiere su actividad jurisdiccional, criterio
normado dentro del derecho común, en nuestro medio, en el artículo 116 de la LOJ que
dice: "Toda acción judicial deberá entablarse ante el juez que tenga competencia para
conocer de ella; y siempre que de la exposición de los hechos, el juez aprecie que no la
tiene, debe abstenerse de conocer y sin más trámite mandará que el interesado ocurra ante
quien corresponda...". En tanto que dentro del proceso laboral el artículo 313 lo define de
la siguiente forma: "El juez de Trabajo y Previsión social que maliciosamente se declare
incompetente, será suspendido del ejercicio en su cargo durante quince días, sin goce de
sueldo."

D. La excepción de incompetencia por razón de la materia, dentro del procedimiento


ordinario laboral, debe tramitarse en la forma prevista en el Código de Trabajo, para el
caso de las excepciones.
8. La Demanda.
8.1 Concepto y modalidades.

8.2 Requisitos esenciales y secundarios de la


demanda.

8.3 Las medidas cautelares.

8.4 Modificación de la demanda.


8. La Demanda.
8.1 Concepto y modalidades
a) Concepto
La acción, procesalmente hablando, es una manifestación del derecho de petición y
constituye el antecedente y fundamento de la demanda. Así como la acción tiene como
objeto el que las personas puedan acudir a los tribunales de justicia para la satisfacción de
sus pretensiones, mediante un proceso legalmente instruido y justo; la demanda laboral es
el instrumento legal para el ejercicio de esa acción, que tiene por objeto la iniciación del
proceso jurisdiccional laboral, proceso que a su vez, tendrá como objeto las pretensiones
que dentro del mismo se formulen.

La DEMANDA es el primero de los actos y hechos procesales que constituyen en


conjunto, el proceso jurídicamente institucionalizado; es el acto inicial o introductorio del
proceso y que tiene su origen en la voluntad humana, encaminada a producir efectos
dentro del campo del Derecho.

El autor Hugo Alsina, define a la demanda de la manera siguiente: "Demanda, es el acto


procesal por el cual el actor ejercita una acción solicitando del tribunal la protección, la
declaración o la constitución de una situación jurídica."
8. La Demanda.
8.1 Concepto y modalidades
Modalidades de la Demanda:

En nuestro Código de Trabajo encontramos que existen las siguientes clases o


modalidades de la demanda:

1) Por la forma de entablarse pueden ser orales y escritas (Artículos 321, 322 y
333 del C. de T.);

2) Por la pretensión en ellas ejercitada, pueden ser demandas con pretensión


simples y demandas con pretensiones acumuladas (Art. 330 del C. de T.);

3) Por su origen puede ser demanda introductiva de la instancia y demanda


incidental (Art. 85-332 del C. de T.).
8. La Demanda.
8.2 Requisitos esenciales y secundarios de la demanda.
A pesar de que el Derecho Procesal del Trabajo y el juicio ordinario en
particular se rigen por el principio de poco formalismo, esto no
implica que exima a las partes de cumplir con toda clase de requisitos,
pues esto sería igual a convertir el trámite del proceso en anárquico,
además, de que existen ciertos requisitos que no pueden omitirse de
ninguna manera o por ningún motivo.

Derivado de ello, existen requisitos como los relacionados a


identificación de las partes, a la designación del tribunal y al mismo
objeto del juicio que en ningún caso pueden ser sustituidos por el juez,
porque esto resultaría materialmente imposible.
8. La Demanda.
8.2 Requisitos esenciales y secundarios de la demanda.
Requisitos Esenciales

Los requisitos esenciales serán básicamente, los que se contendrán en el encabezamiento de la


demanda, sea ésta presentada en forma oral o en forma escrita.

Toda demanda debe contener:

1.- Designación del juez o tribunal a quien se dirija; (Juzgado de Trabajo y Previsión Social para la
Admisión de Demandas; jdoadmision1trabajo@oj.gob.gt; 2290-5922) (Acuerdo 31-2011 del OJ, crea
los juzgados de admisibilidad de demandas en el departamento Guatemala)

2.- Nombres y apellidos del solicitante, edad, estado civil, nacionalidad, profesión u oficio, vecindad
y lugar donde recibe notificaciones;

3.- Relación de los hechos en que se funda la petición;

4.- Nombres y apellidos de la persona o personas a quienes se reclama un derecho o contra quienes se
ejercita una o varias acciones e indicación del lugar en donde pueden ser notificadas;
8. La Demanda.
8.2 Requisitos esenciales y secundarios de la demanda.
Requisitos Secundarios
En el caso de los requisitos secundarios, estos son los que se van a contener a partir de la
relación de hechos de la demanda y son:

5.- Enumeración de los medios de prueba con que acreditarán los hechos
individualizándolos en forma clara y concreta según su naturaleza, expresando los
nombres y apellidos de los testigos y su residencia si se supiere; lugar en donde se
encuentran los documentos que detallará; elementos sobre los que se practicará
inspección ocular o expertaje. Esta disposición no es aplicable a los trabajadores en los
casos de despido, pero si ofrecieren prueba deben observarla;

6.- Petición que se hacen al tribunal, en términos precisos;

7.- Lugar y fecha; y

8.- Firma del demandante o impresión digital del pulgar derecho u otro dedo si aquél
faltare o tuviere impedimento o
firma de la persona que lo haga a su ruego si no sabe o no puede firmar.
8. La Demanda.
8.3 Las medidas cautelares.
Como todo acto de iniciación procesal, la demanda lleva implícita la
posibilidad de solicitar en ella el decretamiento de las medidas precautorias
cuyo objeto sea asegurar las resultas del juicio.

Guillermo Cabanellas define las medidas precautorias como « el conjunto de


disposiciones tendientes a mantener una situación jurídica para asegurar un
derecho futuro».

En el caso que nos ocupa, las medidas precautorias tiene como propósito
garantizar la ejecución de lo resuelto en la sentencia del juicio ordinario, pues
sería imposible ejecutar lo resuelto en ella, si no existen al momento de la
ejecución, bienes sobre los cuales hacer recaer el remate.

Al respecto de las medidas precautorias, en el mismo artículo 332 del Código


de Trabajo, se indica que en la demanda pueden solicitarse las medidas
precautorias, bastando para el efecto acreditar la necesidad de la medida.
8. La Demanda.
8.3 Las medidas cautelares.
El arraigo debe decretarse en todo caso con la sola solicitud y éste no debe levantarse si
no se acredita suficientemente a juicio del tribunal, que el mandatario que ha de
apersonarse se encuentre debidamente expensado para responder de las resultas del
juicio.

Sin embargo, y a pesar de que todas las medidas pueden solicitarse existen en el
contenido de la misma disposición relacionada, una gran limitación para el decretamiento
de las medidas precautorias, cual es, el que en el momento de que se soliciten de deba
acreditar la necesidad de las mismas.

Es precisamente en relación a acreditar la necesidad de la medida que existe una errónea


interpretación por parte de la mayoría de los tribunales de trabajo y previsión social del
País, para quienes, la acreditación de la necesidad de la medida solo puede darse
acreditando el estado de insolvencia del empleador, mediante poder probar, que se
encuentra siendo objeto de ejecución por cualquier acreedor común. Acreditar esta
circunstancia se transforma en una situación prácticamente imposible para el trabajador,
pues aunque el empleador efectivamente e encuentre en esa situación no puede el
trabajador disponer de los medios para demostrar ante el juez de trabajo.
8. La Demanda.
8.4 Modificación de la demanda.
Aunque el Código de Trabajo no lo prevea así, expresamente, la demanda puede
modificare mediante su sustitución o cambio, su ampliación o bien, mediante su
reducción.

En el caso de sustitución o cambio, este puede producirse cuando los términos en los
que originalmente se había redactado la demanda, relativos al objeto por el se promovía y
las pretensiones que con ésta se perseguían se cambien por otros. En este caso, existirá la
obligación del actor de adecuar todos los demás términos de la demanda a los cambios
que se introduzcan.

En el caso de la reducción de la demanda, debe entenderse que ésta sólo puede


producirse cuando no implique para el trabajador la renuncia a prestaciones o derechos
cuya naturaleza es irrenunciable, por ejemplo: una reducción de la demanda cuyo objeto
se funde en renunciar al reclamo de algunas de las prestaciones irrenunciables que
originalmente se habían reclamado. En éste caso, la reducción sería inadmisible a menos
que la renuncia se fundara en que las prestaciones fueron pagadas con anterioridad al
trabajador y a ello obedezca la reducción de la demanda.
8. La Demanda.
8.4 Modificación de la demanda.
Finalmente, la demanda se puede ampliar en relación a nuevos hechos y nuevas reclamaciones,
Ésta forma de modificación constituye la más común y de hecho la única que expresamente
regula el artículo 338 del código de Trabajo, siendo importante señalar, que para el efecto de
ampliar la demanda sólo sobre nueva prueba de sustanciarse los hechos en que se funda la
ampliación, pues de lo contrario podrá producirse el rechazo de la ampliación que se refiere
únicamente a ampliar la prueba propuesta en el memorial de demanda.

Conforme lo anterior, es sabido que las partes de conformidad con la ley tienen la facultad de
acumular sus pretensiones en una misma demanda; pero en ocasiones sucede que por olvido se deja de
formular alguna pretensión, de manera que se hace necesario ampliar o modificar la demanda original.
Sucede también que debido a las maniobras patronales de ocultar su nombre verdadero o el de sus
empresas, cuando los trabajadores les demandan se consigne en forma equivocada el nombre del ex-
patrono o empresa, lo que obliga a que el demandante modifique su demanda.

La base legal para modificar la demanda, se encuentra en el segundo párrafo del artículo 338 del
Código de Trabajo que reza: "...Si en el término comprendido entre la citación y la primera
audiencia, o al celebrarse ésta, el actor ampliare los hechos aducidos o las reclamaciones
formuladas, a menos que el demandado manifieste su deseo de contestarla, lo que se hará constar, el
juez suspenderá la audiencia y señalará una nueva para que las partes comparezcan a juicio oral, en
la forma que establece el artículo 335 de este Código."

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