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2. a. Lengua y lenguaje.
2. a. LENGUA Y LENGUAJE.
Imaginemos que salimos de un hotel, empezamos a caminar por una calle cualquiera de
una ciudad cualquiera que nos es desconocida. En la acera, a tres metros del suelo, nos
encontramos un recuadro con una cruz: Pensamos que es una farmacia. En su fachada un
termómetro marca 38º: Confirmamos el calor que sentíamos. Decidimos cruzar la calle, el
semáforo está en rojo: No cruzamos. Al ponerse verde, nuestras piernas se disparan casi al
margen de nuestra voluntad. Una persona se detiene ante nosotros, está sucia, mal vestida y nos
ofrece la palma de su mano hacia arriba: quiere dinero.
Al final, la ciudad no nos resulta tan desconocida. Hemos reconocido sus señales,
sabemos algo de ella. ¿Qué hubiese ocurrido si la ciudad no tuviera señales? ¿Dónde encontrar
una farmacia? Siempre podemos decir que existen los habitantes, pero ¿Y son todos sordos y
mudos de palabras y de gestos?
Por fortuna, la ciudad era como todas, una ciudad de señales. Ante cualquiera de estas
señales, nuestra reacción no ha sido simplemente la de tomar nota de su existencia, sino que
hemos reaccionado ante una transmisión de información.
Tomando los ejemplos anteriores, el semáforo verde nos informaba que podíamos pasar,
es decir: no era un dato autónomo. (Una montaña es autónoma porque no transmite
informaciones ajenas a ella misma)
Ante una señal, nuestra mente se traslada a otro lugar porque una señal es un objeto que nos
informa acerca de otro objeto. Si vemos latas vacías, papeles grasientos y mondas de naranjas en
un bosque, no pensamos en los papeles en sí, ni en las naranjas sino que unos excursionistas
despreocupados por la naturaleza han estado allí.
Una señal es pues, un objeto material cuya percepción nos informa acerca de otro
objeto, sea material o conceptual.
Para que un objeto informe acerca de otro objeto, ha de existir entre ambos algún tipo de
vínculo. Los distintos tipos de vínculo entre los dos nos permiten establecer una clasificación de
las señales. En general, el criterio que domina a la hora de elaborar una clasificación de las
señales, se suele centrar en la vinculación natural, o no, de un objeto respecto a otro.
INDICES o INDICIOS:
Son señales que mantienen una relación natural con el objeto señalado ( por ejemplo: el
humo es una señal natural del fuego. El humo emana del fuego, es un producto del fuego. Esta
señal depende “por naturaleza” del objeto señalado. Diremos entonces que el humo es índice del
fuego. Los índices transportan información a todos los seres humanos y basta con la experiencia
humana común para interpretar el valor de los índices como señales.
ICONOS:
Son señales que no mantienen una relación natural con el objeto señalado, es decir que
dependen de la voluntad humana. Un ejemplo: Una calavera con dos tibias cruzadas, nos remite
al concepto de “peligro”. Entre la imagen de la calavera y el concepto “peligro” no existe una
relación natural, la clavera no depende por naturaleza del peligro, sin embargo la calavera guarda
una cierta semejanza con el peligro (sugiere el estado en el que podemos quedar si tocamos algo
peligroso).
Son señales que no mantienen una relación natural son lo que representan pero si un
parecido. Al depender de la voluntad humana, pueden prestar al equívoco, es decir que su
interpretación no es uniforme para toda la especie humana; la dotación del significado dependerá
de una convención entre los miembros de una comunidad.
(Esta misma calavera, en Méjico, significa “Tienda de caramelos”- Al parecer una marca
conocida de esos productos lleva esa dibujo)
SÍMBOLOS:
Como en el caso de los iconos, no existe una relación natural entre la señal y el objeto
señalado; pero además, tampoco existe cierta semejanza entre ellos.
Ejemplo: O (en un mapa) = ciudad de más de 100000 habitantes.
Este círculo no emana de la ciudad y no mantiene semejanza con ella.
Los símbolos son entonces fruto de una convención, los llamaremos “signos convencionales”
Estos signos convencionales, no son naturales, ni motivados y la relación que existe entre el signo
y lo que señala o significa es pues arbitraria.
También como en el caso de los iconos, al depender de una convención entre los
miembros de una comunidad, los signos convencionales no tienen alcance universal, su
interpretación depende de la comunidad que los utilice.
Ejemplo: El color negro en occidente significa luto, muerte, tristeza; en oriente significa
nacimiento, alegría.
¿QUÉ ES UN SISTEMA?
Es un conjunto de elementos relacionados entre sí. Un elemento tiene sentido por estar
diferenciado de otro por alguna oposición, por alguna diferencia. (Si existe el bien, es que existe
el mal y viceversa).
Dentro del sistema de la lengua existen varios tipos de oposiciones entre los elementos
que la configuran, nos vamos a centrar en cuatro oposiciones básicas:
DEFINICIÓN DE LENGUA:
EL LENGUAJE
En su dimensión humana, se basaría en la capacidad de los seres humanos para
comunicarnos mediante signos (verbales y no verbales). Se considera que principalmente el ser
humano se comunica mediante signos, sobre todo, signos lingüísticos: palabras. Estas palabras,
sonidos articulados, solo adquieren sentido si alguien las emite y alguien las recibe e interpreta.
Estos signos, en un acto de comunicación constituyen el lenguaje, es decir: La facultad de
expresarse que surge de la vida en sociedad. (Una persona sin ningún contacto social desde bebé,
no habla)
También surge por necesidad de comunicación. Es un medio de expresión, es el soporte
del pensamiento y permite la creatividad.
2. b. LA COMUNICACIÓN:
DEFINICIÓN DE COMUNICACIÓN
Es una relación que se establece entre dos o más interlocutores con el fin de transmitir una
determinada información.
Entenderemos como información: un contenido significativo, la aportación de algún
conocimiento nuevo.
Imagine que una señorita francesa desconocida le llama por teléfono con tono alegre y
usted, sin saber francés, oye: “Ce matin, je suis en pleine forme”.
No sabrá lo que quería decir, pero intuyó que era una mujer, joven, extranjera, y parecía
contenta. Sin conocer el idioma ha obtenida esa información. Evidentemente si usted supiera
francés hubiera sabido que esa señorita, esa mañana se sentía como una rosa.
La comunicación ha tenido lugar independientemente de que la lengua no sea conocida
por los dos interlocutores; sin embargo, la comunicación hubiera sido más completa si dichos
interlocutores hubieran compartido el conocimiento de la misma lengua, del mismo código.
El compartir, por ejemplo, el mismo código hace que una comunicación pueda ser más
completa. Es uno de los factores que intervienen en los actos comunicativos.
Ejemplo: Si digo con voz temblorosa: “tengo mucho frío” a un receptor. (La ventana está
abierta y entra un frío terrible). Es muy probable que el receptor cierre la ventana.
Si digo con autoridad: “¡Tengo mucho frío!” existen las mismas probabilidades que el receptor
cierre la ventana.
En los dos casos el resultado ha sido el mismo: la ventana se ha cerrado, sin embargo en
la primera frase, se manifestó un estado de ánimo y en el segundo una orden. El objetivo era el
mismo, pero la función ha sido distinta.
FUNCIÓN EXPRESIVA:
Se genera cuando el emisor expresa su estado de ánimo, cuando pone de relieve datos que
le conciernen directamente. Esta función la genera el EMISOR a través del mensaje hablando de
él mismo.
Ejemplo: Tengo frío
FUNCIÓN CONATIVA:
En este caso, el emisor pretende cambiar la actitud del receptor o una respuesta por su
parte. Esta función recae sobre el RECEPTOR
Ejemplo: ¡Cierra la ventana!
FUNCIÓN REFERENCIAL:
Se genera cuando el mensaje trata asuntos ajenos tanto al emisor como al receptor.
El contenido se refiere al CONTEXTO.
Ejemplo: “Esta mañana, la bolsa de Londres ha subido tres enteros”
FUNCIÓN FÁTICA:
Solo se da cuando no existe un contacto entre emisor y receptor (ningún contacto
sensorial) el mensaje trata de mantener ese contacto entre los interlocutores.
Ejemplo: Imagine una conversación telefónica los interlocutores no se ven, ni se tocan, ni se huelen…
nada) el único sentido que los conecta es el oído. Si uno de ellos se queda callado bastante tiempo, el
otro le dirá… ¿vale?... ¿estás?... ¿me oyes?
La función recae directamente en el CANAL
FUNCIÓN METALINGÜÍSTICA:
Se genera cuando el mensaje trata del propio lenguaje. Se habla sobre él, sobre el
CÓDIGO.
Ejemplo: María es un nombre propio.
FUNCIÓN POÉTICA: