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Como concepto de derecho real podemos decir que este derecho es aquel poder
jurídico de una persona sobre una cosa reglado por la ley, en virtud del cual se puede
obtener directamente de ella, todas, algunas o alguna de sus utilidades, con exclusión
de injerencias extrañas, y que con suficiente publicidad se adhiere y sigue la cosa
pudiendo oponerse a cualquier interesado.
● Sobre una cosa: Es el objeto del derecho real, y como la cosa es un objeto
material susceptible de apreciación pecuniaria, ese derecho es de contenido
patrimonial, a diferencia de otros poderes, como los familiares, que al recaer
sobre persona ostentan un contenido extrapatrimonial.
● Con exclusión de injerencias extrañas: La facultad del titular del derecho real
para excluir a los demás integrantes de la comunidad de la utilidad beneficio
que el mismo comporta, revela su carácter absoluto y el deber de respeto que
cabe a aquéllos, que sí violado da lugar a acciones reales para efectivizar la
exclusión y proteger al derecho real.
● Y que con suficiente publicidad: Para que el derecho real alcance sus plenos
efectos y nadie pueda alegar su desconocimiento, es menester su
cognoscibilidad a través del medio previsto por la ley.
● Al sujeto,
● Al interés protegido
● Y al fin.
Los derechos son absolutos o relativos; Los primeros, son aquellos que tienen eficacia
frente a todos ("erga omnes"), es decir, el poder o facultad del titular corresponde al
deber de abstención de todos los demás (ejemplo: derechos de la personalidad, de
familia puros, intelectuales y derechos reales) y los segundos, son los que pueden
hacerse valer contra persona o personas determinadas, mientras que por su
contenido, según que este se traduzca o no en un valor económico, (le confieren a su
titular la 11111111111111facultad de exigir un determinado comportamiento de
persona o personas determinadas, no sólo puede consistir en un abstención sino que,
puede ser bien una acción -EJEMPLO: derecho creditorio y de familia).
Los derechos subjetivos se dividen en patrimoniales y extrapatrimoniales: Los
primeros son susceptibles de apreciación pecuniaria, (ejemplo: derechos reales,
creditorios, intelectuales -en cuanto a la explotación de obra- de familia aplicados), son
de contenido principalmente económico, son negociables, transmisibles, enajenables,
prescriptibles y sujetos a términos de caducidad. Los segundos no son susceptibles de
apreciación pecuniaria (ejemplo: derechos de la personalidad, de familia puros y los
intelectuales en cuanto al derecho moral del autor -derecho a la vida, a la salud, a la
identidad-), son imprescriptibles.
Los derechos de familia los encuadramos como mixtos (porque hay derechos relativos
y absolutos por ej las cuestiones de filiación son un derecho absoluto pero el reclamo
alimentos no puede oponerse a todos, sino frente a quienes están obligados, los que
deben responder por esa deuda alimentaria).
"Tuvo lugar una cierta aproximación de las acciones reales a las personales,
simplemente en el sentido de que la fórmula petitoria, que vino a sustituir a la legis
actio sacramento (in rem)... era, como su propio nombre indica, una acción que recaía
sobre el interés tasado en dinero (quanti ea res erit) y sólo de un modo mediato exigía
del demandado la restitución de la cosa (si ea res arbitratu iudici non restituator). Con
esto, quedaba descartado el carácter genuinamente real del antiguo procedimiento in
rem. La litis-contestatio a base de una fórmula petitoria engendraba ahora una simple
obligación personal, de igual contenido que la actio in personam.
En cambio, el derecho personal se compone por tres elementos, por un lado el sujeto
activo (titular del derecho), el sujeto pasivo (obligado) y por último el objeto (la
prestación: dar, hacer o no hacer).
Teoría unitaria personalista: Planiol, fue uno de sus mayores exponentes, quien
considera que todo derecho importa una relación entre personas. En los derechos
personales se da entre acreedor y deudor, en el derecho real se da entre el titular del
derecho y todo el mundo. Los derechos reales no serían más que derechos personales.
OBJECIÓN: En rigor, no se trata de una obligación a cargo de toda la sociedad, sino de
un mero deber de abstención.
Teoría unitaria realista: Opuesta a la teoría anterior, reduce todo a una relación entre
patrimonios, donde la relación está dada entre el patrimonio del deudor y el
patrimonio del acreedor y no en la conducta del deudor o el sujeto pasivo. Esta idea se
apoya en el principio de que el patrimonio del deudor es la garantía común de sus
acreedores. Esta postura no ha tenido gran suceso, ya que es objetable principalmente
porque solo tiene en cuenta el momento anormal del incumplimiento, con el secuente
derecho del acreedor de agredir el patrimonio del deudor y no que lo normal es el
cumplimiento y que a ello aspira el acreedor, como también la despersonalización del
derecho- creditorio.
Otras concepciones:
● El vínculo: Los derechos reales pueden tener su origen en un contrato como los
derechos reales de garantía.
Los derechos reales, al igual que los personales, son por su contenido económico,
derechos patrimoniales, pero tienen muchas diferencias:
● Las transmisiones de derechos reales por actos entre vivos tienen su causa
fuente en un derecho personal (compraventa, permuta, donación)
● Hay DR que son accesorios de DP como ocurre con los derechos reales de
garantía. A su vez, hay DR que abarcan derechos personales accesorios
● Cuando se ataca un DR, además de la protección posesoria o real, el titular
puede pedir una indemnización, accesoria o sustitutiva
● Hay ciertas obligaciones que son ambulatorias, se transmiten con una cosa.
Epoca Feudal: El vasallo era protegido por el feudal, se quiso establecer como un
derecho real, pero se desestimó, ya que no se puede extinguir un servicio personal.
Eran cargas que pesaban sobre el vasallo, que las soportaba como contenido del
derecho que gozaban los señores a quienes beneficiaban. El derecho real no puede ser
IN FACIENDO, ya que el hacer es contenido típico y exclusivo de los derechos
personales.
SIGLO XIII: Derecho canónico. Al obispo al momento de su designación se le entregaba
un conjunto de bienes para que los tengan en su ministerio. Había tiempo entre la
designación y colación, y durante ese lapso tenía derecho de protección. Hay un
derecho en expectativa, es un tránsito del derecho personal al derecho real.
8. Incidencia del orden público en los derechos reales. Estructura de los derechos
reales. Normas estatutarias y reglamentarias. Creación y modificación de los
derechos reales. Numerus clausus. Tipicidad. Consecuencias de la pretendida
creación de otros derechos reales o modificación de los permitidos.
En base al art 1884, la regulación de los D.R en cuanto a sus elementos, contenido,
adquisición, constitución, modificación, transmisión, duración y extinción es
establecida sólo por la ley, es decir el orden público gravita en la determinación de
cuáles son los derechos reales, por lo tanto las normas que hacen a la esencia del
derecho real serán:
Las estatutarias, que son obligatorias, las que son de orden público y no pueden ser
dejadas de lado por las partes, por ejemplo voy a tener un administrador y una
asamblea la ley no me permite modificarla
Las reglamentarias que son aquellas disposiciones de carácter excepcional y supletorio
que permiten al titular regular algún aspecto de su derecho real, las partes pueden
dejar de lado, la ley me da la facultad de crear algo donde no es obligatorio (la ley los
autoriza a poder dejar de lado por ejemplo el consejo de propietario). Se señala como
invalida la configuración de un derecho real no previsto en la ley (el individuo NO
puede crear derechos reales por su propia voluntad), o la modificación de su
estructura.
El art 1886 establece que “el derecho real atribuye a su titular la facultad de perseguir
la cosa en poder de quien se encuentra, y de hacer valer su preferencia con respecto a
otro derecho real o personal que haya obtenido oponibilidad posteriormente”. En
primer lugar, como el derecho real se ejerce directamente sobre el objeto y es
oponible a todos, su titular puede perseguir a aquel en manos de quien esté para
ejercer su derecho. Sin embargo, esto tiene ciertos límites por razones de seguridad
jurídica ya que en ciertas ocasiones el código protege al subadquirente de buena fe y a
título oneroso; y en segundo lugar, aparece el derecho de preferencia, donde el
derecho real constituido con anterioridad prevalece sobre el constituido
posteriormente.
Por último, el art 1887 hace una enumeración de todos los derechos reales que se
regulan en el CCYC:
● dominio,
● el condominio,
● la propiedad horizontal,
● los conjuntos inmobiliarios,
● el tiempo compartido,
● el cementerio privado,
● la superficie,
● el usufructo,
● el uso,
● la habitación,
● la servidumbre,
● la hipoteca,
● la anticresis y la prenda.
A su vez, esta información no quita que la norma pueda crear otros derechos reales
como por ejemplo servidumbre administrativa, dominio del estado, hipoteca naval,
hipoteca aeronáutica.
El régimen jurídico de los derechos reales puede ser de número abierto o cerrado,
pero en el derecho Argentino los D.R solo pueden ser creados por la ley, por lo tanto
se adopta sistema cerrado, el llamado numerus clausus, en oposición al del “numerus
apertus, que es cuando es abierto. Es decir, los particulares no pueden crear por su
voluntad D.R distintos a los establecidos en la ley, ni modificar por pactos privados las
normas estatutarias que los rigen. En los numerus apertus, (por ej el español) se
permite convertir en D.R cualquier relación jurídica concerniente a una cosa o inclusiva
una prestación a costa de una cosa o con su sujeto pasivo designado por ella, los
particulares pueden establecer derechos reales atípicos en el uso de la autonomía de
la voluntad.
Hay que diferenciar lo que es el numerus clausus de la tipicidad (proviene de la ley):
El "numerus clausus" apunta a la determinación de cuáles han de ser los derechos
reales y al contenido "abstracto" de ellos, pero no avanza sobre cuál ha de ser la
"calidad específica" de ese contenido, o sea sobre su contenido específico, que eso
sería la tipicidad.
Esta tipicidad a su vez se puede clasificar en formal y sustantiva: la formal hace
referencia a la creación de los derechos reales (donde interviene la ley) y la sustantiva
se refiere a todo el marco regulatorio de los DR, donde se distinguen las distintas
normas que comprenden este marco regulatorio, que van a ser las normas
estatutarias, que las partes no pueden dejarlas de lado (sobre qué objeto puede recaer
un derecho real de hipoteca, que siempre van a ser inmuebles) y las normas
reglamentarias donde dejan un margen a la autonomía de la voluntad (los
condominios con indivisión forzosa, que por regla).
9. Derechos reales permitidos. Reseña histórica, desde los derechos reales existentes
con anterioridad al código civil, los permitidos en este último y los permitidos en el
CCYC.
Art- 1888. Derechos reales sobre cosa propia o ajena. Carga o gravamen real.Son
derecho reales sobre cosa total o parcialmente propia el dominio, condominio, la
propiedad horizontal, los conjuntos inmobiliarios, el tiempo compartido, el cementerio
privado y la superficie si existe propiedad superficiaria. Los restantes derechos reales
recaen sobre la cosa ajena. Con relación al dueño de la cosa, los derechos reales sobre
cosa ajena constituyen una carga real. Las cosas se presumen sin gravamen, excepto
prueba en contrario. Toda duda que haya se interpreta a favor del titular del bien
gravado. Los derechos reales sobre cosa ajena a su vez se dividen en derechos de
disfrute (superficie si no existe propiedad superficiaria, usufructo, uso, habitación,
servidumbre) y de garantía (hipoteca, prenda, anticresis).
Art- 1889. Derechos reales principales y accesorios: Los D.R son principales, excepto
los accesorios de un crédito en función de garantía. Son accesorios: la hipoteca, la
anticresis y la prenda.
Los derechos principales no dependen de la existencia de ningún crédito para su
existencia, mientras que los accesorios existen para garantizar un crédito. Todos los
derechos de garantía son accesorios, mientras que el resto son principales.
Art- 1890. Derechos reales sobre cosas registrables y no registrables: Los D.R recaen
sobre cosas registrables cuando la ley requiere la inscripción de los títulos en el
respectivo registro a los efectos que correspondan, ya sea para su oponibilidad
(buques, aeronaves, ganado) o también para su constitución (automotores, caballos de
pura sangre). Recaen sobre cosas no registrables, cuando los documentos portantes de
derechos sobre su objeto no acceden a un registro a los fines de su inscripción (atado
de cigarrillos, chocolate, televisor).
Vamos a adquirir el derecho real sobre un automotor a partir de la conformación de
instrumento y su inscripción en el registro del automotor.
Art- 1891. Ejercicio por la posesión o por los actos posesorios: Todos los D.R en este
código se ejercen por la posesión, excepto la servidumbre y la hipoteca. Las
servidumbres positivas se ejercen por actos posesorios concretos y determinados sin
que su titular ostente la posesión.
11. Sujeto de los derechos reales. Personas humanas y jurídicas. Capacidad y
legitimación. Comunidades de derechos reales
El único sujeto de los derechos reales es la persona. En principio, toda persona, física o
jurídica, nacional o extranjera, puede ser titular de derechos reales. Se toma la
capacidad, que debe ser plena para celebrar actos jurídicos, a partir de los 18 años. La
legitimación, nadie puede transmitir un derecho extenso mayor del que posee.
Las personas jurídicas, la que le da la capacidad es el propio estatuto, la legitimación se
la da la ley (también el propio estado puede adquirir bienes) . Sin embargo, los
derechos de uso y habitación solo pueden ser sujetos las personas humanas, por que
se atiende a la finalidad que en un caso va a hacer atender a las necesidades del
usuario y su familia y en otro caso es la habitación (normas estatutarias).
Las personas fisicas podran serlo por si (capacidad plena, mayor de edad y no tener
ningun impedimento fisico/mental para comprender el acto) o por medio de un
representante, como el tutor o el curador (menor de edad, demente o capacidad
restringuida).
Puede haber pluralidad de sujetos, y esa pluralidad se debe ver en dos planos:
concurrencia o cotitularidad:
● En el primer caso, pueden existir sobre una misma cosa varios sujetos pero
cada sujeto va a ser titular de un DR distinto. Esto es sobre una misma cosa
puede coexistir un DR de dominio, y si a ese DR de dominio lo grabamos con un
usufructo tenemos a otro titular de DR que va a hacer el titular del DR de
usufructo, y si ese usufructuario constituye un DR de garantía va a coexistir otro
nuevo titular del DR de garantía del que se trate.
● En el segundo supuesto, hay pluralidad de sujetos con respecto a una misma
cosa pero no va a haber distintos DR sino un único derecho real que podrá ser
el condominio por ej, representado en una cuota parte ideal con respecto a la
cosa que tienen en su poder.
12. Objeto de los derechos reales. Conceptos de cosa, derecho y patrimonio. Cosas y
bienes. Metodología del CCYC. Requisitos de las cosas para ser objeto de los
derechos reales. Derechos reales sobre partes materiales de la cosa. Clasificación
legal de las cosas.
Teniendo en cuenta el art 1883 “El derecho real se ejerce sobre la totalidad o una
parte material de la cosa que constituye su objeto, por el todo o por una parte indivisa.
El objeto también puede consistir en un bien taxativamente señalado por la ley”.
Los derechos reales no solo son las cosas sino que también son los bienes cuando la ley
lo determina. La cosa debe ser cierta, determinada, de existencia actual y encontrarse
dentro del comercio, aunque hay supuestos de excepción. Por regla el derecho real
recae sobre toda la cosa, aunque pueda ser dividido el uso. No obstante, hay
excepciones, como dice el art 2163, la servidumbre puede tener por objeto la totalidad
o una parte material del inmueble ajeno; También la superficie, el usufructo, el uso y la
habitación pueden tener por objeto partes materiales.
Quedan excluidos del régimen de los derechos reales las cosas del dominio público.
- Mientras que el patrimonio es el conjunto de bienes de una persona, los bienes son
los objetos materiales o inmateriales susceptibles de valor; las cosas van a ser aquellos
bienes materiales susceptibles de valor económico, teniendo como base el art 15 y 16
del CCYC.
Art 15: “Las personas son titulares de los derechos individuales sobre los bienes que
integran su patrimonio conforme con lo que se establece en este Código”.
Art 16: “Los derechos referidos en el primer párrafo del artículo 15 pueden recaer sobre
bienes susceptibles de valor económico. Los bienes materiales se llaman cosas. Las
disposiciones referentes a las cosas son aplicables a la energía y a las fuerzas naturales
susceptibles de ser puestas al servicio del hombre”.
Hay que distinguir entre los bienes públicos del estado: los bienes de dominio
público, y los que pertenecen al dominio público-privado. Si estamos enfrente de estos
últimos, el estado opera como un particular más, como por ej que la policía tenga un
vehículo no quiere decir que este afectado al uso público de todos, sino que es un bien
público privado del estado que está en uso de la policía de determinada sección.
Podemos decir sucintamente que los derechos reales pueden nacer y adquirirse a
partir de hechos o actos jurídicos (art 257 y 259)
los DR tienen un sistema de doble causa: causa fuente que es la que le da nacimiento
al DR (contrato por ej) y que junto con una causa eficiente (tradición) va a constituir el
DR.
Modos de Adquisición de los derechos reales: derivada por actos entre vivos,
adquisición legal y prescripción adquisitiva. Estos, son generales, aplicables a la
mayoría de los derechos reales, pero cabe aclarar que existen modos especiales de
adquisición de algunos derechos reales.
2 elementos para que sea un derechos real: MODO SUFICIENTE (por excelencia es la
tradición, acto por el cual alguien transmite una cosa y a través del título suficiente
adquiere la posesión) (en los casos en los que la ley me lo establece, el otro modo
suficiente es la inscripción registral) y TÍTULO SUFICIENTE -acto jurídico idóneo, que
tiene que cumplir con los requisitos de fondo (capaces y legitimados -quien es titular
de ese derecho es quien puede transmitir el mismo-) y forma (escritura pública) SI NO
CUMPLO CON ESTOS REQUISITOS entonces no hay título suficiente sino que hay justo
título. EJEMPLO si el que otorgó la venta es un menor de edad de igual manera se
puede subsanar.
2. Tradición traslativa o constitutiva de derechos reales. Concepto. Requisitos. La
“traditio brevi manu” y el “constituto posesorio”. El primer uso en las servidumbres
positivas. Título y modos suficientes: Concepto y requisitos, modos a los que se
aplica la doble exigencia. Relación temporal entre título y modo. Efectos de la
declaración de las partes en el título respecto del cumplimiento del
modo.Importancia de la tradición. Funciones.
TÍTULO PUTATIVO: El error recae sobre la designación del objeto (la que me transmite
es la persona titular del dominio, recurren todos los requisitos pero se equivocaron en
el objeto). ejemplo de la comisión 3 en la del señor que compró la parcela del terreno
2, y el arquitecto construye en el terreno. en el ejemplo de los profes (2 amigas, dos
parcelas, si no encuentran a los que le vendieron realizan una permuta).
TÍTULO PERFECTO además del título suficiente, se le hizo un estudio por 20 años y
resulta que no hay persona alguna que pueda reclamar, no hay nadie que imponga
acción, toda la línea de antecedentes está bien. pj, maria le vendió siendo una persona
incapaz a laura (2014) y cuando laura le vende a abril, fue un título suficiente y abril le
vende a lucas y hacen el escaneo hoy, no es un título perfecto ( hay un problema el ius
persequendi, porque en el caso de maría era incapaz y todavía tiene acción sobre ese
inmueble).
Teniendo en cuenta el art 1892 (+ importante) del CCYC “La adquisición derivada por
actos entre vivos de un derecho real requiere la concurrencia de título y modo
suficientes. Se entiende por título suficiente el acto jurídico revestido de las formas
establecidas por la ley, que tiene por finalidad transmitir o constituir el derecho real”.
Para que el título y el modo sean suficientes para adquirir un derecho real, sus
otorgantes deben ser capaces y estar legitimados al efecto.
A la adquisición por causa de muerte se le aplican las disposiciones del Libro Quinto”.
En síntesis: La adquisición por actos derivados entre vivos se da a través del título
suficiente, modo suficiente y en los casos que haya registración para las cosas, se
deberá hacer su inscripción registral. Tienen que concurrir siempre los dos primeros,
no puede haber DR si tengo solo el título y me falta el modo, o viceversa.
EL TÍTULO SUFICIENTE: Es el l acto jurídico revestido de las formas establecidas por la
ley, que tiene por finalidad transmitir o constituir el derecho real: por ej el contrato de
compraventa, de donación, el contrato de hipoteca son aptos para constituir DR o
cuando se trata de cosas inmuebles la forma requerida es la escritura pública, mientras
que la compra de un chocolate no requiere formalidad alguna.
A su vez, para que el título sea suficiente tiene que satisfacer las condiciones de fondo:
tiene que ser realizados por una persona capaz (+18 años y no haber sido declarado
incapaz), o hacerlo a través de un representante, y legitimada al efecto (ser titular del
derecho que se transmite, en base al principio neo plu iuris).
Cabe aclarar que NO es lo mismo justo título qué título suficiente: El título suficiente
es el acto jurídico revestido por las formalidades de fondo y forma emanado de
persona capaz legitimada al efecto, mientras que el justo título es el AC que reviste de
las condiciones de forma pero adolece de efectos en cuanto al fondo, porque no
emana de una persona capaz o legitimada al efecto (art 1902)
Por otro lado, el modo suficiente puede manifestarse de 3 formas: la tradición
posesoria, la inscripción registral en ciertos casos como manera excepcional o por el
primer uso en las servidumbres positivas.
La tradición, como regla, es la entrega voluntaria de la cosa y la recepción voluntaria
de la misma. El acreedor no adquiere ningún derecho real sobre la cosa antes de la
tradición. Teniendo en cuenta el art 1924, hay tradición cuando una de las partes hace
la entrega material o a través de actos materiales de una cosa a otra parte que la
recibe, otorgando un poder de hecho sobre la cosa. Para que la tradición sea
considerada válida debe ser hecha por el propietario de la cosa y las partes deben
tener la capacidad legal correspondiente. Cabe aclarar que la tradición no va a ser
necesaria cuando:
● la cosa es tenida a nombre del propietario, y éste por un acto jurídico pasa el
dominio de ella al que la poseía a su nombre
● el que la poseía a nombre del propietario, principia a poseerla a nombre de
otro
● el poseedor la transfiere a otro reservándose la tenencia y constituyéndose en
poseedor a nombre del adquirente.
● hipotecas y servidumbres positivas (en esta última el primer uso es modo
suficiente de adquisición, conforme a lo que dice el art 1892).
Estas excepciones surgen del artículo 1892 anteriormente citado. Son los supuestos de
constituto posesorio y traditio brevi manu.
A modo enunciativo, poseedor es el que tiene la cosa para sí el corpus y animus sin
reconocer en otro ninguna otra titularidad y el tenedor tiene la cosa para sí pero
reconoce en otro la propiedad.
En síntesis: Los DR al ser oponible erga omnes requieren de cierta publicidad para ser
conocidos y oponibles a ciertos terceros, por lo tanto la publicidad consiste en llevar a
conocimiento de los interesados actos o hechos jurídicos reconocidos y apoyados en la
ley. Dicho artículo prevé dos formas de publicidad: por un lado la posesión cuando se
trata de cosas muebles no registrables (un reloj por ej) y por otro lado la inscripción
registral. Cuando se trata de cosas registrables, la publicidad se concreta a través de la
inscripción en el registro que corresponda.
Por otro lado, hay dos tipos de inscripciones:
● La inscripción es declarativa cuando se exige solamente a los efectos de
oponer el derecho a terceros interesados de buena fe, para hacerles conocer
que el derecho real existe, ya que cumplio previamente con el título y modo
suficiente. Por ej: inmuebles en el registro de la propiedad inmueble, buques,
aeronaves
● La registración es constitutiva cuando la inscripción es condicional del
nacimiento del derecho real, el cual no existe ni para las partes intervinientes ni
para terceros si no media la inscripción. Por ej: no hice la transferencia y solo
hago el 08 y choca a alguien yo tengo todavía el dominio todavía hasta que no
se haga la transferencia esto quiere decir que el garron lo voy a tener igual.
registro de automotor, caballos de pura sangre. Actúa de modo suficiente.
- Para bienes inmuebles, la tradición posesoria sigue siendo el modo suficiente para
adquirir tal derecho real, pero para lograr plena oponibilidad del mismo, en especial
para oponerlo a terceros interesados y de buena fe, hace falta la inscripción registral
- Para bienes muebles no registrables, se considera publicidad suficiente la posesión,
sirviendo también la tradición posesoria como modo, cumpliendo ambas funciones:
constitutivas del derecho real y de publicidad del mismo
- En el caso especial de la hipoteca se prescinde de esta teoría del título y modo, pues
no existe tradición alguna. Ella nace con el simple consentimiento expresado en la
escritura pública, excepto disposición legal en contrario
4. Adquisición por causa de muerte.
En dicha adquisición, no es necesaria la tradición:
Art 2277: “La muerte real o presunta de una persona causa la apertura de su sucesión
y la transmisión de su herencia a las personas llamadas a sucederle por el testamento
o por la ley. Si el testamento dispone sólo parcialmente de los bienes, el resto de la
herencia se define por la ley. La herencia comprende todos los derechos y obligaciones
del causante que no se extinguen por su fallecimiento”.
Art 2280: “Desde la muerte del causante, los herederos tienen todos los derechos y
acciones de aquél de manera indivisa, con excepción de los que no son transmisibles
por sucesión, y continúan en la posesión de lo que el causante era poseedor…”
VALE TÍTULO: Como no hay algo que demuestre que soy el dueño solo con la posesión
de la cosa cuando alguien lo ve, dice que es de la persona, uno presume que es de la
persona lo que tiene, pj, una lapicera, unos auriculares, etc. Es por una razón práctica,
ya que son cosas que van de mano en mano y no se necesita llenarla de formalidades
como con el inmueble.
El art 1899 regula la prescripción larga, diciendo que “Si no existe justo título o buena
fe, el plazo es de veinte años. No puede invocarse contra el adquirente la falta o
nulidad del título o de su inscripción, ni la mala fe de su posesión. También adquiere el
derecho real el que posee durante diez años una cosa mueble registrable, no hurtada
ni perdida, que no inscribe a su nombre pero la recibe del titular registral o de su
cesionario sucesivo, siempre que los elementos identificatorios que se prevén en el
respectivo régimen especial sean coincidentes”.
Con respecto al último párrafo, se refiere a que si uno demuestra que a través de una
cadena ininterrumpida de transmisiones hubo sesiones que llegan hasta el primer
titular, con todos los datos coincidentes, puede iniciar una acción de usucapión de esta
cosa mueble registrable.
El tercero va a ser aquella persona ajena a las dos o más que intervienen en el negocio
jurídico, es decir es aquella que no es parte y no puede, en principio, verse perjudicada
por los efectos de las relaciones jurídicas vinculantes entre otros, en base al art 1021.
Estos serían los llamados terceros desinteresados.
Por el contrario, los terceros interesados son los que tienen un interés legítimo y se
hallan facultados para invocar la inoponibilidad del derecho real no inscripto, para
quienes no es indiferente la registración del derecho real. Y la publicidad del derecho
real o de la situación jurídica registrada puede no ser indiferente
Por último, el mismo artículo exige la registración para los terceros interesados que
además sean de buena fe. Serán de buena fe aquellos terceros que, obrando con
cuidado y previsión, siendo diligentes y agotando los medios que la ley pone a su
disposición para obrar seguros, actúen en consecuencia.
Impedir la amplitud del derecho, restringir las facultades, cuando en el ejercicio del
derecho realiza abuso entonces hay limitaciones, en donde nada es un derecho
absoluto sino que el límite es la razonabilidad, ni ejercer el derecho contra terceros
pj: cuando le otorgamos el usufructo para poder estudiar (ES EL EJEMPLO DE QUIEN
VIENE DE OTRO LADO A ALQUILAR Y NO LO USA CON LA FINALIDAD DE ESTUDIAR SINO
QUE REALIZA TODOS LOS FINDES FIESTAS) y esa persona le da una finalidad distinta de
la que estaba destinado y hace un abuso del derecho de tenencia de la cosa.
Bolilla 3
1. Distintas relaciones que pueden existir entre una persona y una cosa: relaciones
de hecho (relaciones reales) y relaciones de derecho. Terminología. Importancia del
tema.
Relaciones reales: el vínculo, o contacto que tiene una persona con la cosa
TRES SUPUESTOS: La justa posición local, la tenencia y la posesión como la de mayor
consecuencia jurídica
1. LA JUSTA POSICIÓN LOCAL: Simple relación del lugar, ese contacto que tiene la
persona con la cosa sin generar consecuencia jurídica como por ejemplo la
propia vestimenta de la persona (vínculo) que implica un mero contacto físico
con la cosa, si bien hay una relación entre el sujeto y la cosa no va a tener
ninguna consecuencia jurídica por que no es una relación que tenga la
intención de su existencia. Ej: en la relación entre un niño menor de diez años y
un objeto que simplemente toma.
2. LA TENENCIA: Tiene que ver con quien tiene la cosa bajo su poder tiene el
poder derecho de la cosa pero está supeditado a un derecho superior, 1910,
acá hablamos del inquilino puede tener el uso y goce, pero es ajeno, ejerce un
derecho ajeno (tenencia). Siempre hay un derecho superior,(QUE ES EL DEL
PROPIETARIO DE LA COSA).
3. LA POSESIÓN: Poder de hecho que puede ser ejercido por sí o por
representante (tener la cosa bajo su poder CORPUS y el segundo es
comportarse como si fuera el dueño de la cosa del derecho real lo sea o no lo
sea ANIMUS 1909.)
4. Funciones de la posesión.
En base al artículo 1912, la posesión “…Se ejerce por una o varias personas sobre la
totalidad o una parte material de la cosa”. Pueden ser personas físicas o jurídicas por sí
o por otro (representante) y teniendo en cuenta el art 1922 se considera sujeto capaz,
para la adquisición de poder, aquella persona que ya haya cumplido los diez años.
Cabe aclarar que acá estamos hablando de la posesión COMO HECHO
independientemente de que esa posesión se tenga en virtud de un derecho real o no,
pero si se habla de la posesión como hecho y nos olvidamos del DR, se requiere la
capacidad mínima del 1922.
El art 1913 establece que el principio de la relación de poder es exclusiva, en el sentido
de que no pueden dos personas al mismo tiempo, ser poseedores o tenedores de toda
la cosa; si así ocurriera, ya no es posible hablar de posesión sino de co-posesión o co-
tenencia. Por lo tanto, cuando la cosa es poseída por más de una persona y dicho
objeto esta indiviso (requisitos fundamentales), la relación de cada uno tendra por
objeto toda la cosa, todos tienen las mismas facultades para utilizar la cosa, pero la
medida de su ejercicio estará limitada por la medida de ejercicio de los demás (salvo
pacto en contrario), no se excluyen sino que concurren. En la coposesión los
coposeedores se encuentran en un estado de igualdad en lo que respecta a la
titularidad y el ejercicio.
6. Objeto de la posesión. Requisitos. Extensión de la posesión a otros derechos reales
distintos del dominio.
El art. 1912 cuando al regular el objeto de la posesión dice: "El objeto de la posesión y
de la tenencia es la cosa determinada..” La cosa tiene que ser determinada, de
existencia actual y, tal como sucede en cuanto al objeto de los derechos reales, las
debe estar en el comercio.
A su vez, el art. 1927 del CCyCN establece: "La relación de poder sobre una cosa
compuesta de muchos cuerpos distintos y separados, pero unidos bajo un mismo
nombre, como un rebaño o una piara, abarca sólo las partes individuales que
comprende la cosa".
La norma se refiere a la relación de poder sobre universalidad de hecho, es decir: una
pluralidad de cosas tratadas como una unidad, como una única cosa compuesta de
muchos cuerpos distintos y separados pero unidos bajo un mismo nombre (un rebaño,
una biblioteca). En consecuencia, para establecer una relación real con una
universalidad de hecho es necesario hacerlo individualmente con respecto a cada una
de las partes comprendidas en la cosa. Es decir, si en la biblioteca se encuentran libros
de forma accidental o ajenos, la relación de poder no los abarcaría.
A los fines de la acción reivindicatoria, el art. 2252, siguiendo los lineamientos del art.
2764 del Código de Vélez, autoriza la persecución de la universalidad de hecho como
un todo sin necesidad de reivindicar cada una de las cosas que la componen.
El CCyCN clasifica la relación real en legítima e ilegítima; esta última a su vez puede
ser de buena o de mala fe y la de mala fe se divide a su vez en viciosa y no viciosa
(simple):
● La relación de poder es legítima cuando constituye el ejercicio de un derecho
real o personal constituido de conformidad con las previsiones de la ley. Dice al
respecto el art. 1916 del CCyCN: "Las relaciones de poder se presumen
legítimas, a menos que exista prueba en contrario.
● Son ilegítimas cuando no importan el ejercicio de un derecho real o personal
constituido de conformidad con las previsiones de la ley". Teniendo en cuenta
la última parte del artículo, la relación de poder será ilegítima cuando no
comporte el ejercicio de un derecho real o personal legalmente constituido.
● La relación de poder ilegítima de buena fe se presentará cuando no exista
derecho real respaldando pero quien la ejerce está convencido de que si lo
tiene porque no ha conocido ni podido conocer que no existe el derecho, es
decir cuando incurra en un error de hecho esencial y excusable (art 1918) que
lo lleve a creer que quien le transmitió la cosa era titular del derecho
transmitido y tenía capacidad para hacerlo.
● En base al art 1919, la buena fe se presume, se trata de una presunción iuris
tantum, ya que como dice el artículo, ello es así “a menos que exista prueba en
contrario”. El momento en que se debe determinar la buena fue al comienzo de
la relación de poder, y permanece invariable mientras no se produce una nueva
adquisición.
● El código no define a la mala fe pero se llega por el camino de la exclusión: es
decir que se llega a la mala fe cuando el sujeto no está persuadido, sin duda
alguna, de la legitimidad de su adquisición. La mala fe se puede dividir en
viciosa o no viciosa. En base al art 1921 “La posesión de mala fe es viciosa
cuando es de cosas muebles adquiridas por hurto, estafa, o abuso de confianza;
y cuando es de inmuebles, adquiridos por violencia, clandestinidad, o abuso de
confianza..”. Se puede decir que la posesión es viciosa cuando es adquirida
ilegalmente, sin o contra la voluntad del poseedor.
● Por otro lado, según lo que se desprende del mismo art 1921 “..los vicios de la
posesión son relativos respecto de aquel contra quien se ejercen. En todos los
casos, sea por el mismo que causa el vicio o por sus agentes, sea contra el
poseedor o sus representantes”. Esto significa que, solo quien ha sufrido el
vicio puede acusar al poseedor o tenedor de vicioso y no cualquier otra
persona.
En el plano del tiempo que debe satisfacerse para usucapir, es posible que el
interesado no reúna el total exigido por la ley. Esto puede ocurrir por muerte del
poseedor o por su interés de desentenderse y transmitir la posesión. Ante estas
hipótesis, el CCyC regula la “unión de posesiones” que consiste en sumar la posesión
útil cumplida para prescribir a la del anterior poseedor (que tuvo la misma finalidad)
para alcanzar el plazo necesario, mencionada en el art 1901 “El heredero continúa la
posesión de su causante. El sucesor particular puede unir su posesión a la de sus
antecesores, siempre que derive inmediatamente de las otras. En la prescripción breve
las posesiones unidas deben ser de buena fe y estar ligadas por un vínculo jurídico.”
Por un lado, se establece que el heredero continúa la posesión, y esto es consecuencia
del traspaso sin interrupción del acervo de una persona muerta a sus herederos. Estos
ocupan el lugar del fallecido. Por otro lado, en los casos de sucesión particular, para
que la prescripción adquisitiva se considere cumplida:
● Sucesión a título universal: acaecida la muerte del poseedor, todos los
herederos continua la persona del causante y la relación se trasmite. Por ello, la
buena o mala fe de la posesión se determina por la condición del causante,
cualquiera sea la posesión del sucesor. Lo que ocurre es que la posesión es la
misma por medias en este caso identidad jurídica en las personas y la
calificación corresponde que sea hecha en el origen. No hay posesión nueva en
cabeza del heredero.
● Sucesión particular: aca las posesiones son independientes y distintas entre sí
pero pueden unirse, sumarse o accederse si se dan los requisitos exigidos. Y
esta unión puede ser conveniente para el cómputo del tiempo que se requiere
para que se consume la prescripción adquisitiva.
Para ello la norma impone que la posesión del sucesor derive inmediatamente de la de
su antecesor o antecesores, es decir que tendría que existir la transmisión de la
posesión del antecesor al sucesor singular, por ej en el caso de que el antecesor haya
hecho tradición de la cosa y cedido los derechos y acciones emanados de su posesión
al poseedor actual. El art 1901 continúa diciendo que “en la prescripción breve las
posesiones unidas deben ser de buena fe y estar unidas por un vínculo jurídico”.
Entonces en caso de ser prescripción breve, se deben satisfacer 3 supuestos:
● Derivar una de la otra
El art. 1915 recepta el principio de que "nadie puede cambiar la especie de su relación
de poder, por su mera voluntad, o por el solo transcurso del tiempo". De tal modo,
quien comenzó a poseer por sí y como propietario de la cosa (poseedor), continúa
poseyendo como tal, mientras no se pruebe que ha comenzado a poseer por otro y, en
sentido contrario, el que ha comenzado a poseer por otro (tenedor) se presume que
continúa poseyendo por el mismo título, mientras no se pruebe lo contrario.
Este principio cede cuando ocurre la intervención del título, que puede ser unilateral
o bilateral. Será bilateral cuando media el acuerdo de las voluntades, como los
supuestos de la traditio brevi manu y constituto posesorio, ya que tanto el tenedor
como el poseedor se ponen de acuerdo para alterar la relación del otro; es unilateral
cuando quien está ejerciendo una relación de tenencia realiza actos materiales
positivos por sí mismo que excluyan al poseedor, sin que quede la más mínima duda
de su propósito de privarlo de sus facultades. No basta con la simple intención o los
pensamientos íntimos, sino que requiere que se de los actos materiales derive la
exclusión efectiva, que sean los suficientemente precisos para significar la voluntad del
tenedor de excluir al poseedor y también ser públicos para poner en conocimiento de
la situación al poseedor y que este pueda hacer valer esos derechos.
Bolilla 4
Como principio, dispone el artículo 1922 que “para adquirir una relación de poder
sobre una cosa, ésta debe establecerse voluntariamente:
a) Por sujeto capaz, excepto las personas menores de edad, para quienes es
suficiente que tengan diez años;
b) Por medio de un contacto con la cosa, de la posibilidad fáctica de establecerlo o
cuando ella ingresa en el ámbito de custodia del adquirente”
Capacidad: En materia posesoria se requiere siempre de un animus mínimo, que es la
voluntad de poseer, de querer ejercitar sobre la cosa el poder de hecho propio de la
posesión. Por lo tanto, están capacitados para adquirirla los que tengan una capacidad
natural de entender y de querer. La relación debe ser adquirida por intermedio de un
representante legal en caso de ser el adquirente incapaz (art.26) o si el adquirente es
una persona jurídica. El artículo 1922 se aplica en los casos de adquisiciones
unilaterales de la posesión y, en cambio, cuando se trata de adquirir la posesión por
medio de la tradición, al ser ésta un acto jurídico, se exige la plena capacidad, es decir,
la necesaria para celebrar actos jurídicos (los menores de 18 años no pueden), al igual
que en los casos de traditio brevi manu y del constituto posesorio. Se considera
“capaz” a la persona que no ha sido declarada incapaz por sentencia judicial.
Corpus: el inciso b del artículo 1922 se refiere al mismo. Para que haya corpus no es
necesario estar en contacto con la cosa, por ser suficiente la posibilidad física de
tomarla, no requiere estar en su presencia. En algunos supuestos se adquiere la
relación con el contacto con la cosa; en otros, se la adquiere antes de que se produzca
el contacto, y aun antes de estar en “presencia de la cosa”. La última parte aplica la
llamada “teoría de la custodia (Savigny), según la cual, la persona adquiere la posesión
de las cosas que le son allí remitidas aunque no esté presente, y aun cuando ninguna
otra persona la hubiese recibido (por ejemplo, cuando el repartidor de diarios te lo tira
por debajo de la puerta, o directamente lo deja afuera de tu casa).
2. Adquisición unilateral
Hay distintos medios de adquirir una relación de poder. En lo respectivo a la posesión,
es posible distinguir si la cosa ya es poseída por otro o no. En caso de que no lo sea,
bastaría con apropiarse u ocupar si es un inmueble, que es lo que se llama
“apoderamiento”. Si otro sujeto ya la posee, el adquirente puede adquirirla contra su
voluntad, lo que se denomina “desapoderamiento”. Estas reglas son trasladables a la
tenencia, ya que el CCC trata a ambas relaciones de igual forma. Cuando la cosa
abandonada es mueble no registrable, el que la apropie adquiere también el derecho
real de dominio.
Desapoderamiento 🡪 hecho por el cual una persona priva a otra, sin derecho, de su
relación de poder. En el caso de cosas muebles: hurto, estafa o abuso de confianza. En
el caso de cosas inmuebles: cuando se emplea violencia, clandestinidad o abuso de
confianza. El artículo 2238 explica que se configura cuando se pierde el objeto “ante
actos materiales, producidos o de inminente producción, ejecutados con intención de
tomar la posesión, contra la voluntad del poseedor o tenedor”. Es necesario que, de
tales actos, resulte esa privación (art. 2241). Éste es un medio que sirve tanto para
obtener la posesión como la tenencia.
● Frutos: El art. 233 establece que “frutos son los objetos que un bien produce,
de modo renovable, sin que se altere o disminuya su sustancia” y “productos
son los objetos no renovables que separados o sacados de la cosa alteran o
disminuyen su sustancia”. El fruto es una parte de la cosa –no un accesorio,
salvo los civiles-- que puede ser separada o extraída de ella sin ocasionarse un
perjuicio o menoscabo importante. Es fundamental que no se produzca una
disminución o alteración de la sustancia.
Clasificación de los frutos:
● Naturales: Son las producciones espontáneas de la naturaleza, es decir,
aquellas que se generan sin el hecho del hombre, aunque el hombre intervenga
en su separación, organice su producción o explotación.
● Industriales: Son aquellos que se producen por la industria del hombre o la
cultura de la tierra. Es indispensable para su generación el actuar del hombre.
● Civiles: Son las rentas que la cosa produce, las que provienen del uso o del goce
de la cosa que se ha concedido a otro y también las que provienen de la
privación del uso de la cosa, y los salarios del trabajo. A diferencia de los frutos
naturales e industriales, que son parte de la cosa conformando con ella un
todo, los civiles tienen carácter de accesorios.
Naturales e industriales: Se consideran percibidos desde que se separan de la cosa y
pueden ser susceptibles de una nueva relación.
Civiles: Para que el poseedor de buena fe pueda hacer suyos los frutos civiles no basta
con que le sean adeudados, sino que es imprescindible que sean percibidos, lo cual
acontece desde su cobro real y efectivo. Pendientes: son los aún no percibidos. El
1934, inc. b, establece que los frutos civiles no serán percibidos si están solamente
devengados, de modo que descarta la percepción por día, lo cual significa que los
frutos devengados durante el período de posesión de buena fe, que no fueron
percibidos al tiempo de la restitución, son frutos pendientes y, por lo tanto,
pertenecen al dueño de la cosa y no al poseedor.
Sucesión universal: Acaecida la muerte del poseedor, el heredero continúa la persona
del causante, y la posesión se le transmite. Por ello, si se trata de sucesión a titulo
universal, la buena o mala fe de la posesión se determina por la condición del
causante, cualquiera sea la posesión del sucesor. Esta regla no rige en materia de
percepción de fruto, donde la buena o mala fe se determina en cada acto de
percepción, aunque se trate de una sucesión universal.
Sucesión particular: En lo que respecta a la sucesión de frutos, la buena o mala fe se
determina en cabeza del sucesor, cualquiera sea la calificación del antecesor.
Restitución y adquisición de frutos 🡪 El art. 1935 estipula que el poseedor de mala fe
debe restituir los percibidos y los que por su culpa deja de percibir. Sea de buena o
mala fe, debe restituir los productos que haya obtenido de la cosa. Los frutos
pendientes, industriales o civiles, pertenecen al que reivindica o tiene derecho a la
restitución. Con respecto a los frutos naturales pendientes, hace una distinción: si se
devengaron, pertenecen al poseedor de buena fe, lo que no ocurre con los otros
frutos, en los que resulta indiferente si se devengaron o no.
Cesación de la buena fe 🡪 La citación al juicio determina la mala fe. Por ende, si el
sujeto comenzó siendo de buena fe y con derecho a los frutos percibidos, una vez que
sea notificado de la demanda, estará obligado a devolver los frutos que perciba a partir
de ese momento.
Productos: Los productos son los objetos que se separan o se sacan de ella y que una
vez separados, la cosa no los produce.
Tenedor: En el caso de que un tenedor deba restituir la cosa, las soluciones previstas
para el poseedor podrían ser aplicadas por analogía.
Responsabilidad por destrucción según la buena o mala fe (1936)
● Responsabilidad del poseedor de buena fe por la destrucción total o parcial
de la cosa 🡪 el 1936 sienta el principio de que el poseedor de buena fe no
responde por la destrucción o deterioro de la cosa. Pero sí deberá hacerlo
cuando se advierta una conducta dolosa, o al menos abusiva. Si no obtuvo
provecho alguno, no responde. Si obtuvo algún provecho, responde hasta el
límite determinado por tal beneficio, aun cuando el daño sufrido por el
dueño sea mayor.
● Responsabilidad del poseedor de mala fe: El poseedor de mala fe es
responsable del daño que le cause al propietario. Obviamente, responde de
la destrucción total o parcial causada por un hecho suyo, por culpa o dolo,
aun cuando no hubiese obtenido ningún provecho de la cosa. Como
excepción, el 1936 establece que se libera de responsabilidad si el deterioro
“se hubiera producido igualmente de estar la cosa en poder de quien tiene
derecho a su restitución”.
Mejoras (751, 752, 753 y 1934) 🡪 incremento del valor de la cosa por modificaciones
intrínsecas. Naturales (completamente extrañas a la voluntad de las partes y que
surgen de la naturaleza, como el aluvión y la avulsión). Tengo derecho a incrementar el
valor, pero el acreedor no está obligado a pagarlo, y tiene derecho a extinguir la
obligación sin ningún tipo de responsabilidad. Artificiales (hay intervención del
hombre). Pueden ser necesarias, las que hacen a la conservación de la cosa, no
permitir el deterioro de la misma (apuntalar una pared, cambiar un caño roto) estando
el deudor obligado a realizarlas, y no puede reclamar el precio; mejoras útiles, que
resultan de provecho para el poseedor de la cosa. Si el acreedor las acepta, las deberá
indemnizar. Si no las acepta, no las debe indemnizar, pero el que las hizo las puede
retirar; de mero lujo, que aprovechan solamente a quien las hace, por lo que no se
indemnizan, pero pueden retirarse (el que las realiza se las puede llevar). Además, se
agregan las de mero mantenimiento, que son la reparación de deterioros menores.
Indemnización (1938): todo sujeto de una relación de poder puede reclamar el costo
de las mejoras necesarias, excepto que se hayan originado por su culpa si es de mala
fe.
Bolilla 5
ART 1941: El dominio perfecto es el derecho real que otorga todas las facultades de
usar, gozar y disponer material y jurídicamente de una cosa, dentro de los límites
previstos por la ley. El dominio se presume perfecto hasta que se pruebe lo contrario”.
Como el dominio se caracteriza por ser absoluto, exclusivo y perpetuo, los tres casos
de dominio imperfecto que se acaban de mencionar (fiduciario, revocable y grabado)
afectan en alguna medida a dichos caracteres:
Los diversos dominios del Estado 🡪 el CCC trata la cuestión en los arts. 235 (bienes
públicos) y 236 (bienes privados del Estado). El dominio público ha sido definido como
un régimen jurídico que comprende el conjunto de bienes, trátese de cosas muebles o
inmuebles, de propiedad del Estado destinado a la utilidad común. Las cosas de
dominio público son inalienables, inembargables e imprescriptibles. Las personas
tienen su uso y goce, sujeto a las disposiciones generales y locales; Por el contrario, el
dominio privado del Estado está sometido al mismo régimen que el de los particulares,
por lo que las cosas de dominio privado del Estado SI son susceptibles de usucapión.
ARTÍCULO 237.- Determinación y caracteres de las cosas del Estado. Uso y goce. Los
bienes públicos del Estado son inenajenables, inembargables e imprescriptibles. Las
personas tienen su uso y goce, sujeto a las disposiciones generales y locales.
La Constitución Nacional, la legislación federal y el derecho público local determinan
el carácter nacional, provincial o municipal de los bienes enumerados en los dos
artículos 235 y 236.
BOLILLA 7.
El dominio se caracteriza por ser absoluto, exclusivo y perpetuo. Los tres casos de
dominio imperfecto que se mencionaron afectan en alguna medida a dichos
caracteres. En el dominio fiduciario y revocable, es el carácter perpetuo el que se ve
disminuido porque el derecho no está sujeto a durar indefinidamente sino a
extinguirse por el vencimiento del plazo o cumplimiento de la condición resolutoria a
la cual están subordinados. Luego, los diversos casos de cargas reales limitan al
dominio en su absoluta libertad, ya que en mayor o menor medida el propietario se
halla impedido de usar, gozar o disponer de la cosa en la forma en que podría hacerlo
si no se la hubiese gravado con algún derecho real.
Facultades. Según el art. 1966: “El titular de dominio revocable tiene las mismas
facultades que el dueño perfecto, pero los actos jurídicos que realiza están sujetos a
las consecuencias de la extinción de su derecho”. Es decir, por regla general nadie
puede transmitir a otro un derecho mejor o más extenso al que tiene, sin perjuicio de
las excepciones legalmente dispuestas (art 399 principio nemo plus iuris). Por su
carácter de dueño, puede efectuar mejoras en la cosa como gozar de sus frutos y
estará legitimado para ejercer todas las acciones que correspondan para la defensa de
la cosa transmitida, contra terceros e incluso contra el dueño anterior.
Efecto de la revocación. El dominio revocable se extingue por las mismas causas por
las que puede extinguirse el dominio perfecto, por ej por destrucción de la cosa pero
también se puede extinguir por el cumplimiento o fracaso de la condición o por el
vencimiento del plazo resolutorio. El art. 1967 dice que “La revocación del dominio de
cosa registrable tiene efecto retroactivo, excepto que lo contrario surja del título de
adquisición o de la ley. Cuando se trata de cosas no registrables, la revocación no tiene
efecto respecto de terceros sino en cuanto ellos, por razón de su mala fe, tengan una
obligación personal de restituir la cosa”.
Otras excepciones que surgen de la norma son que la ley no fije lo contrario en un
supuesto determinado y que las partes no hayan pactado expresamente en los actos
jurídicos una disposición en contrario. El ejemplo típico de la primera es la revocación
de una donación por inejecución de los cargos (art 1570) o la aparición del derecho
ausente con presunción de fallecimiento luego de concluida la prenotación, en cuyo
caso el ausente puede reclamar los bienes en el estado en que se encuentren. En
cuanto a la segunda excepción, deriva del principio de la autonomía de la voluntad, si
bien impera el orden público se permite que las partes puedan apartarse del principio
general de retroactividad y pactar lo contrario
Otras dos excepciones surgen del art 348: El revocante debe respetar los actos de
administración sobre inmuebles o muebles y el dueño revocable no tendrá obligación
de restituir el objeto del contrato al revocante. La última excepción son los frutos
percibidos, que no tendrán que ser restituidos ni se ven afectados por la
retroactividad.
Readquisición del dominio perfecto. Dice el art. 1968 “Al cumplirse el plazo o
condición, el dueño revocable de una cosa queda inmediatamente constituido en
poseedor a nombre del dueño perfecto. Si la cosa es registrable y el modo suficiente
consiste en la inscripción constitutiva, se requiere inscribir la readquisición; si la
inscripción no es constitutiva, se requiere a efecto de su oponibilidad” Dado que la
resolución opera con efecto retroactivo, una vez cumplida la condición o vencido el
plazo, el dominio revocable queda automáticamente extinguido y el dueño anterior se
convierte nuevamente en dueño perfecto, sin necesidad de que se haga la tradición. La
norma constituye un supuesto de constituto posesorio.
Modos de adquisición. Se puede adquirir por actos entre vivos y, en forma derivada,
por la concurrencia del título y el modo (tradición). El título está configurado por el
llamado negocio fiduciario el cual contiene la modalidad resolutoria que, al verificarse,
obliga al fiduciario a re-transmitir el dominio perfecto de la cosa al fideicomisario. Para
que la transmisión fiduciaria de inmuebles sea oponible a terceros interesados de
buena fe, deberá ser inscrita en el Registro de la Propiedad Inmueble (además de
cumplir los requisitos de título y modo). Ello se encuentra dispuesto en el art. 1669.
También se puede constituir el dominio fiduciario por actos de última voluntad
siempre y cuando no se configure una sustitución fideicomisaria prohibida.
El fiduciario: Podrá ser cualquier persona humana o jurídica que recibe los bienes para
ejercer las facultades conferidas para determinada finalidad convenida. Es parte en el
contrato de fideicomiso. Deberá cumplir las obligaciones impuestas por la ley o la
convención con la prudencia y diligencia del buen hombre de negocios que actúa sobre
la base de la confianza depositada en él. El fiduciario puede ser beneficiario para evitar
conflicto de interés. Debe rendir cuentas a los beneficiarios con una periodicidad no
mayor a un año. Tendrá derecho al reembolso de los gastos y a una retribución.
El beneficiario: Es aquel que puede recibir todo o una parte de los frutos, y que puede
aceptar o no ser beneficiario. Puede ser una persona humana o jurídica, que puede
existir o no al tiempo del otorgamiento del contrato (en este último caso deben
constar los datos que permitan su individualización futura). Pueden ser beneficiarios el
fiduciante, el fiduciario o el fideicomisario. A su vez, pueden designarse varios
beneficiarios quienes, excepto disposición en contrario, se benefician por igual;
también podrán designarse beneficiarios sustitutos para el caso de no aceptación,
renuncia o muerte. Si ningún beneficiario acepta, todos renuncian o no llegan a existir,
se entiende que el beneficiario es el fideicomisario.
Facultades. ART 1704. “El titular del dominio fiduciario tiene las facultades del dueño
perfecto, en tanto los actos jurídicos que realiza se ajusten al fin del fideicomiso y a las
disposiciones contractuales pactadas”.
Efectos. La extinción del dominio fiduciario no opera con efecto retroactivo (Art 1705).
Se trate de muebles o inmuebles, si el tercer adquirente es de buena fe y a título
oneroso, la resolución sólo producirá sus efectos hacia el futuro, por lo que quedarán
subsistentes los diversos actos efectuados por el dueño fiduciario. Entonces, como dice
el art 1707 “Cuando la extinción no es retroactiva son oponibles al dueño perfecto
todos los actos realizados por el titular del dominio fiduciario. Si la extinción es
retroactiva el dueño perfecto readquiere el dominio libre de todos los actos jurídicos
realizados”. Por lo tanto, la extinción tendrá efecto retroactivo cuando el tercero sea
de mala fe o haya adquirido a título gratuito.
Los límites al dominio: Son las normas legales (nunca convencionales) que regulan ese
derecho real, compatibilizando los derechos y obligaciones que por igual gozan los
hombres en sus relaciones de vecindad (en interés predominantemente privado), o en
miras de un interés público, para armonizar el derecho privado individual con el interés
general y colectivo. Son aquellos que la ley impone, que determinan negativamente el
contenido del dominio, normas que tienden a fijar los límites dentro de los cuales
deben ejercerse las facultades del titular del dominio. Se establecen en razón de la
relación con las cosas, de ahí que están obligados a su cumplimiento no sólo el titular
de un derecho real, sino también tenedores o poseedores.
Por ello está sometido a limitaciones fundadas en la potestad del estado para adaptar
la propiedad privada a la convivencia, teniendo en cuenta el int. Superior de la
sociedad, la Teoría del abuso del derecho y los límites establecidos por leyes que
reglamentan su ejercicio.
Sobre el daño no indemnizable, dispone el art. 1971 que “Los deberes impuestos por
los límites al dominio no generan indemnización de daños, a menos que por la
actividad del hombre se agrave el perjuicio”. La idea es que los vecinos, al soportar
límites al ejercicio de su derecho, sacrifican intereses que no son resarcibles. Es el
precio que se paga por vivir en comunidad, donde en algun caso se beneficia y en otros
se sale perjudicado.
Entonces, las limitaciones en interés público son objeto del derecho administrativo. Las
limitaciones administrativas son generales (rigen para todos los que se encuentran en
una misma situación), tienden a proteger al público, actuales, constantes, no se
extinguen por el no uso, y no generan derecho a la indemnización. Además de no
poder la administración ejercer su derecho en forma irrazonable, el único límite que en
la realidad reconocen estas limitaciones es la Constitución Nacional.
La inhibición voluntaria: además de las medidas cautelares ordenadas por los jueces,
algunas personas, voluntariamente, deciden inhibirse para así protegerse o
garantizarse derechos de acreedores. Es una autolimitación a la facultad de disponer,
especialmente cosas registrables. Ella carece de efectos frente a terceros (porque
contraría el art. 1972) por lo cual, no puede ser inscripta en el Registro de la Propiedad
Inmueble.
Numerus clausus. La limitación que el titular del dominio sufre en este aspecto se
refiere a su falta de libertad para modificar, por sí o por acuerdo de partes, la
regulación de sus derechos y obligaciones inherentes al uso y goce de aquél, o bien a
su imposibilidad de crear por contrato otros derechos reales distintos de los
reconocidos por la ley.
Se discute la naturaleza jurídica del camino de sirga. Hay quienes sostienen que es de
dominio público, otros lo ven como un límite al dominio privado, y otros lo ven como
una servidumbre administrativa.
Las inmisiones son un límite por razones de vecindad. Los titulares de derecho reales
(al igual que los poseedores y tenedores) deben usar el inmueble de manera regular,
respetando la utilización ajena y esperando que se respete la propia. Las reglas de la
buena vecindad impiden extender una inmisión desde su inmueble hacia otro. Los
vecinos deben soportar molestias, en tanto sean razonables. Son propagaciones de
factores que perturban los causados por la obra del hombre; no están comprendidas
en la norma aquellas que tienen causales naturales. Se regulan en el artículo citado (no
de forma taxativa ya que puede haber más) las inmisiones inmateriales, ya que los
materiales se encuadran en situaciones distintas con sus respectivas soluciones.
Establece el 1973 que “Las molestias que ocasionan el humo, calor, olores,
luminosidad, ruidos, vibraciones o inmisiones similares por el ejercicio de actividades
en inmuebles vecinos, no deben exceder la normal tolerancia teniendo en cuenta las
condiciones del lugar y aunque medie autorización administrativa para aquéllas. Según
las circunstancias del caso, los jueces pueden disponer la remoción de la causa de la
molestia o su cesación y la indemnización de los daños (ambas juntas o una sola). Para
disponer el cese de la inmisión, el juez debe ponderar especialmente el respeto debido
al uso regular de la propiedad, la prioridad en el uso, el interés general y las exigencias
de la producción.”
El art 1973 dispone que el juez también deberá tener en cuenta: 1) el respeto debido al
uso regular de la propiedad; 2) la prioridad en el uso (quien se instaló primero); 3) el
interés general; 4) las exigencias de la producción (beneficios que procura para la
comunidad la actividad generadora de molestias).
Facultades del juez. La ley le permite al juez disponer la indemnización de los daños
producidos y, además, la cesación de las molestias o su disminución al límite que se
considere normalmente tolerable. Puede disponer ambas cosas. También el juez
puede actuar de manera preventiva Los legitimados activos son el poseedor y el
tenedor o ser aún más amplio cuando se afectan derechos de incidencia colectiva,
mientras que el legitimado pasivo es aquel que ejerce la actividad molesta, sea o no
titular del derecho real. El plazo de prescripción de la acción varía en función de cuál
sea la que se intenta: la acción posesoria prescribe al año, la acción personal a los 5
años, mientras que la acción confesoria es imprescriptible. En cualquier caso, el
reclamo indemnizatorio prescribe a los 3 años contados desde que el damnificado
conoció o pudo conocer el daño sufrido.
Obstaculos al curso de las aguas. La limitación del art. 1975 impide a los dueños de
inmuebles que limitan con cauces de agua realizar obras que alteren su curso, diciendo
que “Los dueños de inmuebles (ni terceros) linderos a un cauce no pueden realizar
ninguna obra que altere el curso natural de las aguas, o modifique su dirección o
velocidad, a menos que sea meramente defensiva. Si alguno de ellos resulta
perjudicado por trabajos del ribereño o de un tercero, puede remover el obstáculo,
construir obras defensivas o reparar las destruidas, con el fin de restablecer las aguas a
su estado anterior, y reclamar del autor el valor de los gastos necesarios y la
indemnización de los demás daños. Si el obstáculo se origina en un caso fortuito, el
Estado sólo debe restablecer las aguas a su estado anterior o pagar el valor de los
gastos necesarios para hacerlo”.
Cauces de agua: ríos navegables, no navegables y en gral todas las aguas de propiedad
del Estado y susceptibles de aprovechamiento común. Solo estan permitidas las obras
meramente defensivas, asi por ej un canal que tenga por objeto impedir que se inunde
el inmueble o proteger cultivos. Su fundamento es salvaguardar el interés general. En
tanto el titular del fundo ribereño no puede efectuar obras que impidan la libre
navegación, derecho de raigambre constitucional
Recibir aguas, arenas y piedras. En base al art 1976. “Debe recibirse el agua, la arena
o las piedras que se desplazan desde otro fundo si no han sido degradadas ni hubo
interferencia del hombre en su desplazamiento. Sin embargo, puede derivarse el agua
extraída artificialmente, la arena o las piedras que arrastra el agua, si se prueba que
no causen perjuicio a los inmuebles que las reciben”.
Vistas y luces: el art 1978 regula las distancias mínimas a las que se puede tener vistas
sobre el inmueble vecino, diciendo que “Excepto que una ley local disponga otras
dimensiones, en los muros linderos no pueden tenerse vistas que permitan la visión
frontal a menor distancia que la de tres metros; ni vistas laterales a menor distancia
que la de sesenta centímetros, medida perpendicularmente. En ambos casos la
distancia se mide desde el límite exterior de la zona de visión más cercana al inmueble
colindante”. Se ocupa de las vistas como límite al dominio e impone ciertas
condiciones para que uno de los vecinos pueda observar al inmueble del otro. El
Código ha sido estricto en esta materia, en resguardo de la intimidad y seguridad de
los vecinos.
La distancia mínima que se exige varía según se trate de vista frontal o lateral. En el
primer caso debe haber por lo menos 3 metros entre la línea divisoria y la pared
mientras que en el segundo caso son suficientes 60 cm de distancia medida
perpendicularmente. Las distancias se miden desde el límite exterior de la zona de
visión más cercana al inmueble colindante. Asi por ej, si sobresale un balcón se cuenta
desde donde termina y no desde la pared
Las luces son aquellas aberturas que permiten pasar la luz y el aire pero no permiten
asomarse. Las vistas, en cambio, son las ventanas que permiten asomarse y mirar.
Árboles, arbustos u otras plantas. Nadie tiene derecho a plantar, construir o sembrar
en el terreno del vecino pero sí en su propio inmueble aunque presenta limitaciones
para proteger los inmuebles vecinos y favorecer la convivencia. En base al art 1982 “El
dueño de un inmueble no puede tener árboles, arbustos u otras plantas que causan
molestias que excedan de la normal tolerancia. En tal caso, el dueño afectado puede
exigir que sean retirados, a menos que el corte de ramas sea suficiente para evitar las
molestias. Si las raíces penetran en su inmueble, el propietario puede cortarlas por sí
mismo”. Son aquellas inmisiones materiales. La razón de esta prohibición no es tanto
prevenir la intromisión de raíces sino evitar daños como la humedad que produce
dicha vegetación por la absorción de sustancias nutritivas del suelo del vecino.
Bolilla 18
1. Fundamentos de la protección. El estado de derecho.
El Estado asumió la tutela del Ordenamiento jurídico, se prohíbe la justicia por mano
propia, está prohibido el uso de la violencia en defensa privada del derecho.
En un estado de derecho se reconoce a los individuos la facultad de requerir la
intervención del Estado para la protección del derecho vulnerado.
La posesión es independiente y se protege en sí misma está fundada o no en título.
Están protegidos: Los poseedores y los tenedores. Las acciones posesorias tienen por
finalidad mantener la paz pública impidiendo la justicia por mano propia.
Las defensas de la posesión Y tenencia se dividen en:
- Defensas extrajudiciales, donde no es necesario acudir a una sede judicial (art
2240),
- Defensas judiciales, que se encuentran acciones desde:
● El derecho penal, como lo son la acción de robo, usurpación, defraudación,
hurto
● Las del CCYC, que son las acciones posesorias (acción de despojo y acción de
mantener) y la acción preventiva de daño.
● En el derecho procesal, donde se encuentran los interdictos (interdicto de
retener (art. 604 y 607 CPCC) interdictos interdicto de recobrar (art. 612 CPCC)
Interdicto de obra nueva (art. 613 y 614 CPCC) Interdicto de adquirir ( art. 601
CPCC))
Tanto los interdictos como las acciones posesorias son independientes, si bien todo
gira en torno a la posesión y a la tenencia no es lo mismo el ámbito de aplicación de
cada una: en las AP lo que se defiende es el hecho de la posesión, ya sea con título o
sin título.
Acción de obra nueva. (art. 2499) (Ver art. 2241 última parte)
EFECTO DE LA SENTENCIA: Inter partes.
PROCESO: Sumario.
OBJETO: suspender la obra durante el juicio y que se ordene deshacer lo hecho; Si son
de inminente realizacion y se ven como una amenaza seran encuadradas dentro de la
accion de mantener y si efectivamente son realizadas como actos materiales dentro
del inmueble del poseeedor, son juzgadas como acciones de despojo
ELEMENTOS: - Que se trate de una obra iniciada pero no terminada.
- Que se realice en inmuebles de terceros .
- Que provoque un perjuicio en la posesión.
- Que implique un beneficio para el titular de la obra.
LEG ACTIVA: en terreno del poseedor: (ídem acción de despojo) en terrenos de
terceros (ídem acción de manutención)
LEG PASIVA: contra quien se beneficia con la ejecución de la obra.
Acción de daño temido. (art. 2499 ultima parte). Ccyc no contempla pero igual se
puede llegar a dar una mencion en el art 1711 y sgss del CCYC
Art 1711: “La acción preventiva procede cuando una acción u omisión antijurídica hace
previsible la producción de un daño, su continuación o agravamiento. No es exigible la
concurrencia de ningún factor de atribución”.
EFECTO DE LA SENTENCIA: Erga Omnes.
PROCESO: discutido en doctrina (Mariani de Vidal sumarísimo, Adrogue sumario) .
OBJETO: Que se adopten medidas cautelares para evitar un daño.
ELEMENTOS: -Que se tema que de un edificio o de otra cosa derive un daño en sus
bienes. ‘
LEG ACTIVA: quien tema sufrir el daño
LEG PASIVA: contra quien estaría obligado a reparar el daño en el caso de producirse.