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Capítulo III

EL RECLUTAMIENTO DE AGENTES

Métodos y Procedimientos para el Reclutamiento

Principales contenidos

Bases, Formas y Métodos

Etapas: Selección y Preparación del Candidato

Estudio y Comprobación del Candidato

Preparación de las condiciones para el Reclutamiento

Realización del Reclutamiento

Trabajo con Agentes: Dirección, Educación e Instrucción

Formas y Métodos de Enlace con Agentes

Lugares para atención de Agentes


Etapas principales del proceso de reclutamiento

La etapa preparatoria prevé la selección, estudio y comprobación del


candidato así como la preparación de las condiciones para el reclutamiento.

La etapa de realización del reclutamiento se inicia con el proceso de


influencia que ejerce el oficial operativo sobre el candidato, con el fin de
formar en el los motivos que lo inciten a aceptar la colaboración clandestina
con la Contrainteligencia para resolver las tareas operativas planteadas. Esta
etapa incluye también la fijación del reclutamiento.

Para la realización del reclutamiento los oficiales operativos se rigen por dos
exigencias principales; la orientación hacia una finalidad y la necesidad de
reclutamiento.

Cada reclutamiento siempre persigue el fin de resolver alguna tarea concreta,


determinada por la situación operativa. Antes de seleccionar al candidato a
Agente, el oficial determina la tarea específica, que le permitirá formular con
mayor exactitud las exigencias y posibilidades operativas que debe poseer
el candidato a reclutar para este fin.

La necesidad de reclutamiento de un Agente se justifica cuando la tarea


operativa a realizar solamente se puede resolver precisamente con un
Agente y no con otro medio y que además en el Aparato de Agentes en la
Contrainteligencia no haya otro Agente que pueda utilizarse para su
solución.

Al hacer la argumentación de la necesidad del uso de un Agente debe elaborar


el modelo ideal del agente, incluyendo en este modelo sus elementos
principales tales como su personalidad, su posición política, sus relaciones
sociales entre otras.

Después debe determinar si existe alguno con esas posibilidades, es decir,


prevé la posibilidad de maniobrar con Agentes que puedan resolver la situación
y si se llega a la conclusión de que no se tiene tal posibilidad, es que se decide
el nuevo reclutamiento de Agentes.

Bases para el Reclutamiento:

La Base Político-Ideológica se caracteriza porque en el Candidato existen


intereses y aspiraciones políticas que coinciden plena o parcialmente con los
fines políticos de la Revolución.

La Base por Dependencia se establece cuando la Contrainteligencia posee


datos sobre el Candidato que permiten tomar en relación con él medidas
coercitivas, las que pueden consistir en su atracción a la responsabilidad penal
o el desenmascaramiento público de conductas de carácter inmoral y otras.
Además, es necesario que estos datos tengan un gran significado en la vida del
Candidato a fin de que sus efectos sean contundentes a partir del daño que
puedan causarle.

La posibilidad de evitar estas medidas condiciona su aceptación a la


colaboración con la Contrainteligencia.

Esta base de reclutamiento adquiere especial significado, ya que de hecho


beneficia a una persona que ha incurrido en delitos o actos reprobables, que lo
pueden perjudicar.

Por esta razón este reclutamiento debe fundamentarse en los importantes


resultados que se obtendrían en la Actividad de Contrainteligencia con su
incorporación como Agente, así como que la tarea no pueda ser resuelta con
otro Agente.

En la gran mayoría de los reclutamientos realizados por dependencia se


obtienen buenos resultados, ya que estos generalmente se encuentran dentro
de las estructuras del enemigo o en su medio.

En los casos de utilización de materiales comprometedores, consistentes en


transgresiones de las normas jurídicas penales vigentes, el reclutamiento se
realiza en estrecha coordinación con el Órgano de Instrucción
(Investigaciones).

La Base por Interés Personal se caracteriza porque al recibir estos


beneficios, la persona que se recluta se ve en la obligación de aceptar la
colaboración secreta con la Contrainteligencia, con el objetivo de no perder lo
que tiene para él un alto grado de significación en su vida.

No obstante, los Oficiales frecuentemente deben resolver la cuestión del


reclutamiento cuando faltan las circunstancias objetivas que pueden servir de
base para el reclutamiento o estas no son tan convincentes para utilizarlas en
el reclutamiento. En estos casos, la formación de la base del reclutamiento o su
fortalecimiento es una de las tareas principales del Oficial en la preparación del
reclutamiento.

Formas para el Reclutamiento de Agentes: (Aquí quede)

Organización del proceso de atraer al Candidato a la colaboración con la


Contrainteligencia, el orden y la consecutividad para efectuar medidas de
reclutamiento.
En algunos casos al Candidato se le puede plantear en forma directa la
proposición de colaborar y recibir su aceptación en el proceso de una
conversación.

En otros, para obtener su aceptación se necesita una influencia más o menos


prolongada sobre ellos, pues aún teniendo la base real del reclutamiento, no
siempre es posible lograr que el Candidato comprenda que la proposición
sobre la colaboración con la Contrainteligencia corresponde a sus intereses.

En el reclutamiento Directo o Simultáneo, el Oficial operativo en el proceso


de la conversación para el reclutamiento le propone directamente al Candidato
su colaboración con la Contrainteligencia. La colaboración se resuelve
inmediatamente y el reclutamiento adquiere la forma de acto simultáneo. En
esta forma generalmente, se realiza la atracción a la colaboración de las
personas.

En el reclutamiento Gradual el Oficial operativo establece contacto con el


Candidato y sin plantearle la colaboración secreta se le asignan pequeños
encargos, atrayéndolo paulatinamente al trabajo de Agente. Al cumplir una
serie de encargos el candidato se encuentra al fin y al cabo, colaborando con la
Contrainteligencia. En caso necesario esta posición se fija, obteniendo del
mismo el acuerdo oral o escrito de continuar las relaciones de Agentes ya
establecidas.

Esta forma de reclutamiento se utiliza habitualmente cuando se conoce que el


Candidato tiene preconcebida una imagen incorrecta sobre la colaboración
secreta y no aceptaría una proposición directa sobre esto o cuando en el
proceso de reclutamiento surge la necesidad de formar o fortalecer la base de
reclutamiento.

Otra circunstancia que determina la forma de reclutamiento está dada en la


necesidad de atraer a la colaboración, tanto a personas dispuestas
conscientemente a prestar su ayuda, como también a aquellas que no están de
acuerdo en trabajar a favor de la Contrainteligencia de su país, pero que al
mismo tiempo están dispuestas a colaborar con la Inteligencia o
Contrainteligencia de otro Estado.

Así que atendiendo a la forma de hacer el planteamiento se divide en dos


formas:

La abierta, es decir la atracción a la colaboración secreta abiertamente, a


nombre del Estado.

Bajo bandera ajena, es decir la que se efectúa a nombre de los Órganos de


Inteligencia de otro Estado, de algún partido político u otra institución
extranjeros. Al Agente reclutado bajo bandera ajena, después que proporcione
materiales de valor que fortalezcan la base de su reclutamiento, en los casos
procedentes, se le da conocimiento de que trabaja a favor de la
Contrainteligencia de su país.

MÉTODOS PARA EL RECLUTAMIENTO DE AGENTES:

Se entiende por método del reclutamiento el conjunto de procedimientos de


influencia en la psiquis del Candidato para garantizar su comprensión de la
necesidad y posibilidad de su colaboración secreta e incitarlo a la actividad real
en calidad de Agentes.

A través de la persuasión como método de reclutamiento, el Oficial Operativo


ejerce sobre la psiquis del Candidato, un trabajo organizado y consciente de
influencia de carácter esencialmente ideológico, psicológico y social, las que
están dirigidas a formar motivos que le inciten a colaborar secretamente.

El método persuasivo se basa en la influencia sobre el Candidato con la ayuda


de estímulos que lo inciten a aceptar el reclutamiento sin que medien
amenazas u otros medios coercitivos.

Este método requiere que el Oficial Operativo brinde una correcta


argumentación al Candidato de la necesidad, posibilidad y racionalidad de su
colaboración secreta.

A través de la coacción como método de reclutamiento, el Oficial Operativo


ejerce sobre la psiquis del Candidato un trabajo organizado y consciente de
influencia de carácter esencialmente social y psicológica, utilizando la amenaza
de aplicarle medidas que puedan ocasionarle significativos daños, en caso de
que se niegue a colaborar secretamente.

La coacción se pone de manifiesto al ejercer presión sobre el que se recluta,


utilizando circunstancia que lo comprometan a fin de incitarlo a colaborar.

En este caso, el Candidato se encuentra ante la alternativa de aceptar la


colaboración y de este modo evitar consecuencias indeseables para él o
negarse a colaborar poniéndose en situación desfavorable.

La selección a favor de la colaboración no la hace de acuerdo con sus


convicciones, sino forzadamente en contra de estas, bajo la presión de las
circunstancias creadas.

No en todos los casos la amenaza de la aparición de consecuencias no


deseables para el Candidato se le plantea a él directamente; por sí mismo
puede conocer las posibilidades y realidad de esta amenaza.
Aplicando el método de la coacción, el Oficial Operativo al mismo tiempo lo
persuade de la necesidad de colaborar. Intenta convencerlo de que su
aceptación a colaborar es la salida más aceptable en la situación creada.

Junto con esto, paralelamente el Oficial Operativo ejerce influencia ideológica


en él a fin de debilitar sus puntos de vista, conceptos y convicciones políticas
equivocadas u hostiles.

Etapas del Proceso de Reclutamiento de Agentes:

Selección del Candidato para el Reclutamiento.

Preparación del Candidato a Agente para el Reclutamiento.

Exigencias a que debe responder el Candidato:

El Oficial Operativo inicia la selección del Candidato teniendo en cuenta los


requerimientos que estableció en el modelo ideal del Agente, por cuanto el
carácter de las tareas y las condiciones de su cumplimiento, son diferentes. Los
requerimientos que se presentan en cada Candidato a reclutamiento también
varían.

Sin embargo, se pueden determinar requisitos generales que se refieren por


igual a todos los Candidatos. Tales requisitos son: La seguridad del Candidato
(en el sentido que sea fiel y confiable) y la exigencia en él de posibilidades
operativas para cumplir las tareas.

La seguridad del Candidato es el requisito más importante de los explicados.


Teniendo varios candidatos con iguales características, se da preferencia al
más seguro. El cumplimiento de este requisito obstaculiza la pretensión de los
Agentes enemigos.

Las posibilidades operativas del Candidato a reclutamiento se aprecian tanto


desde el punto de vista del fin concreto del reclutamiento, como también las
perspectivas de su utilización posterior en calidad de agentes.

Siempre es más racional reclutar a la persona que será útil no solo en la


solución de la tarea operativa seguida, sino que también pueda emplearse más
ampliamente en otros intereses.

Los requisitos que deben presentarse en las cualidades personales de un


Agente no pueden igualarse con los planteados a las cualidades personales del
Candidato a Agente, porque algunas de estas cualidades se educan en el
proceso de colaboración. Los requisitos planteados para el Candidato son, por
esencia, los criterios por los cuales se rige el Oficial para resolver la cuestión
sobre la utilidad o no del Candidato para el trabajo en calidad de Agente.

Vías para la Selección de los Candidatos a Agentes:

La selección del Candidato a reclutamiento se inicia desde el descubrimiento


del círculo de personas que por la posición que ocupan o por sus vínculos
tienen posibilidades de prestar ayuda en la solución de la tarea operativa
surgida y tienen para esto las cualidades personales necesarias. El
descubrimiento de esas personas se realiza por diferentes vías:

El estudio de los vínculos o de los que rodean al comprobado, involucrado u


otra persona objeto de nuestro interés.

El estudio de las personas hacia las cuales la Inteligencia Enemiga o los


elementos hostiles manifiestan interés a fin de utilizarlos en la realización de
sus intenciones delictivas.

El estudio de las plantillas de trabajadores y empleados de uno u otro objetivo


entre los cuales puede ser seleccionado el Candidato a reclutamiento y
también el estudio de sus autobiografías, cuestionario y otros.

La amplia relación del Oficial Operativo con las personas que trabajan en los
objetivos de su atención, principalmente con los dirigentes de instituciones y
empresas.

Por tanto el Oficial tiene la posibilidad de estudiar las cualidades de las


personas con quien se encuentra y obtener los conocimientos que le permitan
seleccionar aquellas que representan interés desde el punto de vista de posible
reclutamiento como Agentes y comienza su estudio y comprobación.

Para la selección del Candidato se utilizan también Agentes, Activos,


Funcionarios Honorarios y Personas de Confianza, con ayuda de los cuales se
estudian los vínculos de los comprobados, encartados y personas de interés.

Al seleccionarse los Candidatos a Agentes se les asigna un seudónimo, para


que desde ese momento. en su actividad interna, comience a preservar su
verdadera entidad.

Estudio y Comprobación del Candidato a Agente:

Como objetivos y contenido del estudio y comprobación del Candidato a


Agente, se persigue determinar su utilidad para el trabajo en general, para la
solución de la tarea operativa en particular y también para determinar la base
del reclutamiento y las condiciones necesarias para su realización exitosa.
Para la determinación de la utilidad del Candidato a Agente se toman en
consideración su posición y relaciones, las relaciones recíprocas con las
personas de interés o las premisas para establecer con éstas los contactos
necesarios.

Teniendo en cuenta los datos sobre el centro de trabajo del candidato y el tipo
de trabajo que realiza, su actividad diaria, ciudadanía, conducta, situación
familiar, y otros, se determinan las condiciones que puedan asegurar la
clandestinidad del reclutamiento.

Teniendo en cuenta los factores indicados que se revelan en el proceso de


estudio y comprobación del Candidato, el Oficial elabora el modelo anticipado
de su conducta en el proceso de reclutamiento. La construcción de tal modelo
posibilita al Oficial seleccionar la táctica correcta del reclutamiento.

ALGUNOS ASPECTOS PSICOLÓGICOS A TENER EN CUENTA DURANTE


EL ESTUDIO DE LAS CUALIDADES DE LA PERSONALIDAD DEL
CANDIDATO:

Para determinar correctamente qué cualidades personales posee el Candidato


y a partir de ésta hacer la conclusión argumentada sobre su utilidad o no en
calidad de Agente, el Oficial Operativo, primeramente necesita saber qué
manifestaciones concretas del Candidato pueden caracterizar sus cualidades
personales, en qué situaciones de la vida y cómo se revelan estas cualidades.

En segundo lugar necesita saber interpretar y explicar correctamente las


manifestaciones de la personalidad del Candidato, así como qué cualidades
pueden testimoniar éstas.

En la práctica, la conclusión errónea acerca de las cualidades personales del


Candidato se explica, porque los datos en que se basan las mismas han sido
incorrectamente interpretados por el Oficial Operativo, el Agente, el Activo, el
Funcionario Honorario o Persona de Confianza que la realiza.

El sentimiento patriótico, el temor a sufrir consecuencias desagradables o el


deseo de satisfacer determinadas necesidades, pueden todos ellos promover
conductas similares en diferentes individuos y en su interpretación no podrán
dejar de tenerse en cuenta las diferencias que existen entre unos y otros
móviles.

¿En qué condiciones el Oficial Operativo puede aseverar la objetividad del


Candidato a reclutamiento?

Cuando el Candidato, por alguna causa no está interesado en brindar una


información objetiva sobre un acontecimiento (porque éste lo compromete
personalmente o a las personas cercanas a él, o afecta sus intereses
personales, u otras), a pesar de todo brinda la información objetiva. En este
caso la objetividad puede evaluarse como un rasgo estable del carácter del
Candidato.

Esto se relaciona también con el descubrimiento de otra cualidad personal del


Candidato, la ingeniosidad. Esta puede revelarse solo en una situación que
exige del Candidato encontrar rápidamente la salida de una situación difícil y
manifestar su agilidad mental. Al faltar esta situación no puede manifestarse la
cualidad indicada.

Al estudiar las cualidades personales del Candidato, los Oficiales Operativos


en casi todos los casos, aspiran a aclarar si él tiene la capacidad de
observación desarrollada. Pero para esto al Oficial le es importante conocer
cuáles datos permiten juzgar sobre la capacidad de observación del
Candidato e interpretar correctamente los hechos.

Hasta qué punto está desarrollada la capacidad de observación se puede


juzgar, por ejemplo, si el detecta rápidamente cambios significativos en los
objetos o en la conducta de las personas a las que está observando, si presta
atención a las particularidades poco detectables y a primera vista poco
esenciales, a las propiedades de uno u otros objetos o fenómenos.

La información sobre el Candidato es obtenida por el Oficial Operativo


principalmente a través de Agentes, Personas de Confianza y otras personas,
determinando el carácter seguro de estas fuentes de información y las
circunstancias que pudieran influir en su exactitud.

A través de la definición de los rasgos típicos del carácter, aspiraciones y


capacidades para el trabajo de Agente, se puede conocer la personalidad.

MÉTODOS PARA EL ESTUDIO Y COMPROBACIÓN DEL CANDIDATO:

La observación de su conducta.

La asignación de encargos operativos.

La conversación con el candidato.

El conocimiento de los resultados de su actividad diaria.

El conocimiento de diferentes documentos que contienen datos sobre el


candidato.
Estos pueden estar contenidos en los Registros, en los archivos de
instituciones, en expedientes personales, en el lugar de trabajo actual o
pasado, los lugares donde ha residido y reside actualmente y otros. Da la
posibilidad de conocer si ha sido o es colaborador secreto, si aparece
involucrado en algún Proceso Investigativo de la Contrainteligencia.

Si es necesario también se comprueba por los Archivos Operativos a sus


familiares y parientes cercanos, cuando se tienen datos de que el candidato o
alguno de sus familiares cercanos o parientes, realizó actividades delictivas o
de otra naturaleza de interés de la Contrainteligencia.

Cuando el Candidato se ha seleccionado en un medio hostil y mantenía


relaciones con personas de este ambiente, cuando surgen dudas de la
autenticidad de los datos biográficos que él comunica, entre otros, los
materiales que caracterizan al Candidato se buscan en el lugar de nacimiento y
en los lugares de residencia y trabajos anteriores.

Observación de la conducta del Candidato a Agente:

La observación del Candidato se realiza con la ayuda de Agentes, Activos, el


Chequeo visual, Funcionarios Honorarios, Personas de Confianza y otros
medios.

Los Agentes contribuyen a obtener conocimientos profundos y multilaterales


sobre el candidato; sus verdaderos puntos de vista y sentimientos; las partes
fuertes y débiles de su carácter, circunstancias que lo comprometen, su
situación económica, su interés de recibir algunos beneficios, intimidades de su
vida, el carácter de las relaciones que mantiene con personas de interés para
la Contrainteligencia, grado de participación en la actividad delictiva, si es
partidario del involucrado o grupo de personas sobre las cuales se trabaja.

La observación sobre el Candidato, puede realizarse también, con la ayuda de


medios operativos y técnicos. Estos medios se aplican en aquellos casos en
que el Candidato es objetivo de un Proceso Investigativo, mantienen relaciones
íntimas con un involucrado o cuando no existen posibilidades de obtener
conocimientos necesarios por otras vías.

La Asignación de Encargos Operativos:

Si el encargo en determinado grado esta relacionado con los hechos que el


Candidato conoce y no exige del mismo, esfuerzos complementarios para
cumplirlo, entonces las deducciones sobre sus cualidades personales basadas
en el cumplimiento de tal encargo pueden ser erróneas.
No descubrir ante el Candidato conocimientos operativos importantes ni
personas con relación a las cuales se tienen datos sobre la realización de
actividad hostil.

Ser dirigido a resolver cuestiones que son de competencia de la


Contrainteligencia. En caso contrario el Candidato puede crearse una
impresión falsa sobre la actividad de estos órganos.

Corresponder a las posibilidades reales del Candidato, excluyendo la


posibilidad de su desenmascaramiento como persona que cumple tareas de la
Contrainteligencia.

Cada encargo debe ser calculado para crear en el Candidato las capacidades
de analizar, de apreciar correctamente los hechos y fenómenos de la vida
social.

Los encargos con relación a personas concretas se asignan solo en casos en


que la conducta de estas personas provoque en el Candidato sospechas o
cuando comunican sobre ellas datos de interés.

Antes de establecer el contacto personal con el Candidato, a fin de atraerlo al


cumplimiento de encargos, el Oficial Operativo solicita autorización. Se indica la
necesidad de reclutamiento, datos que caracterizan al Candidato, organización
del encuentro, motivos y pretextos para su llamada al lugar del encuentro y
procedimiento que se seguirán para encomendarle el encargo; carácter del
encargo y fin que persigue, sobre todo las cualidades personales que se
proponen descubrir.

La clandestinidad del contacto personal se asegura seleccionando un pretexto


argumentado que permita enmascarar el fin, lugar y hora del mismo, para lo
cual se tendrá en cuenta el carácter del candidato, posición en la familia, modo
de vida, trabajo o estudio etc.

El contenido de la primera conversación tiene una significación muy


importante. Frecuentemente se comienza explicándole la necesidad de su
ayuda para esclarecer algunas cuestiones concretas relacionadas con la
Contrainteligencia y las posibilidades que el tiene para prestar la ayuda
necesaria. En ocasiones esta conversación se inicia con la petición al
Candidato de que relate hechos, acontecimiento o situaciones que el conoce
que son de interés.

En todos los casos, la conversación no debe darle al Candidato la posibilidad


de apreciarla como acto terminado de reclutamiento, sino solo como la
aclaración de cuestiones de interés.
Durante la conversación se toman medidas para que el Candidato no adivine
que con sus acciones esta siendo objeto de un estudio especial. Sólo en este
caso se comportará con naturalidad y desenvoltura en el cumplimiento del
encargo.

Al darle el encargo, el Oficial Operativo elabora un breve informe, en el cual


indica en qué circunstancias se estableció el contacto, cómo reaccionó ante la
proposición de cumplir el encargo dado. El Oficial Operativo efectúa los
encuentros posteriores con el Candidato, principalmente para examinar las
acciones en el cumplimiento del encargo dado a él y sus resultados.

En las entrevistas con el Candidato, el Oficial Operativo le orienta formular por


escrito las informaciones que son de interés operativo para la
Contrainteligencia. Esto posibilita medir su disposición para brindar informes
sobre hechos y personas, así como para valorar el nivel de análisis que posee.

Lo anterior no implica que en ocasiones, atendiendo a las características y


posibilidades del Candidato, se recepcionan de forma oral las informaciones
de interés para la Contrainteligencia, procediendo el Oficial operativo a
comunicar los aspectos necesarios.

El plazo del estudio del Candidato según los encargos es diferente y se


determina por la racionalidad operativa. El Oficial Operativo en cada caso
concreto, decide si se han revelado sus cualidades y posibilidades personales
en el desarrollo del cumplimiento de los encargos.

Conversación con el Candidato:

La conversación del Oficial Operativo con el Candidato como método de


estudio, se utiliza ampliamente en la práctica operativa. Esta posibilita formarse
una representación sobre su nivel de desarrollo, capacidad de observación,
convicciones y puntos de vistas.

Para el tema de la conversación, sobre todo para cuando el Oficial Operativo


se encuentra por primera vez con el Candidato, hay que crear una situación
que lo conduzca a la charla sincera y desenvuelta. El pretexto para el
encuentro y la charla, se seleccionan de forma tal, que se vea natural y no
provoque en él dudas o sospechas

EL CONOCIMIENTO DE LA ACTIVIDAD DIARIA DEL CANDIDATO A


AGENTE:

El estudio de los documentos personales, cartas, obras literarias, dibujos u


otros manuscritos, constituyen un material objetivo de significativo valor, que
permite descubrir las cualidades del Candidato y formarse una opinión sobre
sus puntos de vista políticos, intereses, hábitos, habilidades y carácter.

PREPARACIÓN DE LAS CONDICIONES PARA EL RECLUTAMIENTO:

El lugar donde se realizará el reclutamiento debe garantizar la clandestinidad


del encuentro del Oficial Operativo con el Candidato a Agente y las condiciones
favorables para la charla. Este lugar se selecciona tomando en consideración
una serie de circunstancias: la base y el objetivo concreto del reclutamiento, la
ciudadanía, edad, sexo, tipo de trabajo y posición social del que se recluta.

El reclutamiento del Agente se realiza habitualmente en los locales de


instituciones estatales, oficinas, empresas, centros científicos, habitaciones de
hoteles y otros.

No se desecha la posibilidad del reclutamiento utilizando automóviles


conducidos por el oficial operativo o en zonas apartadas que reúnan las
características de clandestinidad necesarias, lo cual se realiza
excepcionalmente, cuando no existan otras condiciones.

Para el reclutamiento, a veces se utilizan los apartamentos de los que se


reclutan, sus oficinas en el centro de trabajo u otros locales, pero la preferencia
se le da siempre a los lugares donde el Oficial Operativo puede sentirse como
dueño de la situación.

En los casos en que se atrae a la colaboración a una persona que ha cometido


algún acto sancionado penalmente, cuando éste se interroga preliminarmente,
su reclutamiento se realiza a veces en los locales de los Órganos Policiacos,
que son públicos. En este caso el Oficial Operativo toma medidas para guardar
en secreto el hecho de la estancia allí del reclutado.

Una condición importante para el éxito del reclutamiento es la correcta


determinación del tiempo que se empleará, la selección del procedimiento y del
pretexto para el contacto en el lugar de realización del reclutamiento. Debe
tener en cuenta:

Cuándo, por qué circunstancias y por cuánto tiempo éste habitualmente se


ausenta del trabajo, su casa, los lugares que visita.

Teniendo en cuenta todos estos datos, así como también el procedimiento y el


pretexto para el contacto, se determina el día y hora para efectuar el
reclutamiento.
El pretexto para el contacto en cada situación será diferente, pero el Oficial
Operativo debe tratar de que éste se vea natural, no le provoque perplejidad, ni
sospechas en las personas que lo rodean.

El procedimiento para el contacto debe corresponder en la práctica al que se


utiliza comúnmente en la institución a nombre de la cual se cita al Candidato,
que podrá ser mediante aviso verbal, por correo, llamada telefónica u otros. En
los casos que sea necesario citar al que se va a reclutar en una u otra
institución, el Oficial operativo lo comunicará al dirigente de la misma,
enmascarando el verdadero objetivo del contacto. Estas medidas son
necesarias, ya que el Candidato puede telefonear a la institución referida para
acordar el tiempo de su visita u otra cuestión.

En aquellos casos en que la situación no permite realizar el contacto de forma


clandestina, se utilizan los viajes del mismo por asuntos de trabajo o
personales a otra ciudad, región, hospital o centro turístico, donde se realizará
su reclutamiento.

Para el reclutamiento de personas que han cometido actos delictivos, en


ocasiones, se les detiene secretamente, si por otra vía no se puede garantizar
la clandestinidad para conducirlos al lugar del reclutamiento. La detención
secreta se realiza con la autorización del Jefe que corresponda, según lo
normado para la categoría de persona que se trate, cuando se tienen bases
reales para esto.

Esta detención se realiza generalmente por el Órgano de Instrucción o por los


Oficiales Operativos, siempre en estrecha coordinación entre ambos.

Elaboración del Informe de Solicitud de Reclutamiento:

Después de analizar minuciosamente los materiales obtenidos en el proceso de


preparación del reclutamiento, de llegar a la conclusión sobre la racionalidad y
posibilidad de su reclutamiento en calidad de Agente y de preparar las
condiciones necesarias para esto, el Oficial Operativo elabora el informe de
solicitud de reclutamiento. En él se argumenta la necesidad, racionalidad y
posibilidad del reclutamiento y se exponen las vías para su realización.

Cuando existen materiales que comprometen al que se recluta, se explicará su


esencia, grado de autenticidad y relación de estos con el Candidato.

En la parte final del informe se expone el plan de realización del reclutamiento;


donde, cuándo y cómo.

También el Oficial Operativo debe planificar objetivamente las orientaciones


primarias que se impartirán al Colaborador, incluyendo las indicaciones para la
realización de la próxima entrevista que se debe realizar antes de las 72 horas
después del reclutamiento. Debe además planificar medidas para el
fortalecimiento del reclutamiento.

Realización del Reclutamiento:

Los Aspectos Psicológicos del Proceso de Reclutamiento:

Las exigencias de la clandestinidad no siempre permiten descubrir ante el que


se recluta los fines verdaderos de su atracción a la colaboración.
Habitualmente en estos casos, la colaboración se relaciona con algunos otros
fines, pero éstos también se seleccionan de tal modo que lo inciten a prestar su
ayuda a la Contrainteligencia.

El rasgo característico del acto volitivo, consiste en que la persona toma


conciencia del fin de su acción, no solo como algo deseable para él, sino
también como algo principalmente alcanzable. Por esto el que se recluta,
antes de dar su acuerdo a la colaboración con la Contrainteligencia, piensa
cómo puede lograr el fin planteado ante sí y cuáles posibilidades tiene para
esto.

Pero la toma de conciencia por el candidato de los fines de la colaboración


secreta, de los procedimientos y métodos de lograr, no siempre significa que él
acepte prestar ayuda a la Contrainteligencia. Hasta en los casos en que le está
claro el fin y éste lo atrae, él todavía piensa si debe aceptar la proposición de
colaborar, mide y aprecian los aspectos a favor y los que están en contra, para
después tomar la decisión.

La proposición de colaboración frecuentemente provoca en él motivos


contradictorios que frenan la toma de su decisión. Esta etapa del proceso
volitivo se le llama la Lucha de Motivos.

Lo principal que debemos lograr en su colaboración es la confianza en los


Órganos de la Contrainteligencia y para ello debemos aclararle que existen las
posibilidades reales de protección para su persona, que son seguras; que
manteniendo la línea de conducta adecuada que se le trazará durante su
colaboración, se podrán contrarrestar las acciones que realiza el enemigo para
el descubrimiento de los Agentes de la Contrainteligencia. De esta manera se
supera el motivo que obstaculiza la colaboración.

La lucha de motivos (su razonamiento y valoración) independientemente de


cómo se desarrolle, siempre termina con la toma de una decisión. El que se
recluta acepta la proposición de colaborar con la Contrainteligencia o se niega.
Esto dependerá de cuáles motivos jueguen el papel decisivo.
La aceptación a colaborar puede estar determinada por diferentes razones, en
un caso él acepta la colaboración con la comprensión completa de su esencia,
importancia y necesidad.

En otro caso, el acuerdo es solo el intento de salir de un estado de indecisión o


de una situación difícil. A veces, el Candidato acepta colaborar, no porque está
convencido de lo correcto de esta decisión, sino porque quiere ganar tiempo y
después, a solas, pensar más minuciosamente sobre la cuestión.

Si el Oficial operativo no interviene a tiempo en esta Lucha de Motivos,


entonces el reclutado puede negarse a colaborar. El cambio de la decisión
frecuentemente sucede, porque el reclutado no lo había analizado y pensado lo
suficiente, por el cambio de su estado emocional o de las condiciones en las
que él actúa después del reclutamiento.

Otra etapa muy importante del acto volitivo es la ejecución de la decisión


tomada. Se sabe que la persona no siempre cumple lo que se ha propuesto. La
toma de decisión sólo supone una acción posterior, sirve de impulso para la
acción. Puede suceder que el que se recluta, al aceptar colaborar con la
Contrainteligencia, prácticamente no empiece a cumplir las tareas asignadas o
se desvíe, bajo distintos pretextos, de éstas.

Por eso no sería correcto obtener sólo el acuerdo formal de colaboración y


considerar la obtención de dicha aceptación como el final del reclutamiento,
sino obtener del reclutado acciones prácticas para el cumplimiento de las
obligaciones contraídas e informes de interés operativo.

En el proceso de reclutamiento frecuentemente se ha de usar la influencia


sobre la imaginación del que se recluta, la cual es capaz de crear en su
conciencia imágenes por asociación.

La influencia en la imaginación tiene como fin, tanto de incitar al Candidato a


imaginar algo que fortalecerá su posición y status, si acepta la proposición de
colaborar con la Contrainteligencia, como de ayudarlo a ver claramente algo
que limitará sus perspectivas, que dificultará su posición, causará daño a sus
intereses y necesidades fundamentales, si se niega a colaborar.

Por consideraciones tácticas, no siempre es razonable concentrar la atención


del Candidato en las posibles consecuencias desfavorables, es mejor si esto lo
hace el mismo Candidato y el Oficial Operativo interviene como la persona que
descubre lo que éste no conoce, pero que tiene para él una significación
importante. En este caso, el Candidato valorará su decisión como propia y no
impuesta desde fuera por vía de amenaza o presión.
Con la influencia en los sentimientos, imaginación, memoria y pensamiento del
candidato se persigue el fin de incitarlo a la acción volitiva. Al influir en su
voluntad, el Oficial operativo supone que éste comprendió la necesidad y
posibilidad de colaboración con la Contrainteligencia que su conciencia ya está
preparada para esto y que le es necesario un impulso..

La preparación psicológica del Oficial Operativo para la conversación del


reclutamiento, tiene una importante significación para el éxito del mismo y se
expresa en la exigencia de un estado psíquico capaz de favorecer su
realización.

El estado psíquico del Oficial Operativo de este modo predetermina su


preparación psicológica para el reclutamiento, su capacidad de reaccionar
correctamente ante la conducta del Candidato y movilizarse al máximo en la
situación de reclutamiento creada.

Es importante que el Oficial esté seguro de sí mismo, sereno, concentrado,


para que pueda influir positivamente en el reclutado, provocándole un estado
psíquico que favorezca la concentración de su atención en el contenido de la
conversación de reclutamiento.

En el proceso de realización del reclutamiento e inmediatamente después de


terminarlo, sobre todo cuando se efectúa en forma de acto instantáneo, el
Oficial Operativo resuelve también la tarea de la preparación psicológica inicial
del reclutado para su actividad en calidad de Agente, para prevenir su posible
fracaso en el período inicial de su colaboración secreta.

Fortalecimiento del Reclutamiento. Orientaciones Primarias al Agente y


Formalización de su Reclutamiento:

Por fortalecimiento del reclutamiento se entiende la creación de garantías del


cumplimiento consciente por parte del Agente de las obligaciones contraídas.

Los elementos principales a tener en cuenta para el fortalecimiento del


reclutamiento son:

 La obtención de información de interés operativo por parte del Agente


recién reclutado.
 El juramento sobre la colaboración secreta con la Contrainteligencia.
 El comprobante de recibo de remuneración monetaria u otro, entregado
por haber brindado información.
 La declaración sobre cómplices en la actividad enemiga.
 La utilización de grabaciones, fotos, filmaciones etc., que lo
comprometan.

La obtención de información de interés operativo de parte del Agente recién


reclutado tiene gran importancia, particularmente en aquellos casos en que el
reclutado es un extranjero o una persona que se encuentra en cierta
dependencia con la Contrainteligencia. Al aportar información que contiene
datos secretos o materiales importantes el reclutado crea ciertas garantías de
no terminar, según sus deseos, las relaciones de Agente.

Si el reclutado informo sobre sus delitos, nombró a los cómplices y comunicó


sus actividades hostiles, le es muy difícil, negarse a cumplir las obligaciones
contraídas, lo que sirve de garantía de su trabajo consciente en el futuro.

Considerable importancia tiene la obtención de datos de interés operativos de


las personas reclutadas por base ideológica. El Oficial Operativo al recibir del
reclutado material que comprometen a las personas con las cuales se relaciona
o datos acerca de hechos que merecen la atención operativa de la
Contrainteligencia, tiene la posibilidad de asignarles tareas concretas dirigidas
a precisar o esclarecer algunas cuestiones referentes a los hechos aportados.

El juramento sobre la colaboración secreta con la Contrainteligencia no es una


obligación jurídica.

No obstante, el hecho de que la obligación de colaborar se haya dado en forma


manuscrita, impone a la persona que la ha asumido, gran responsabilidad y le
incita a cumplir este deber.

El Juramento se le solicita al reclutado en todos los casos y en dependencia de


la necesidad, tomando en consideración las particularidades del Candidato.
Debe tenerse en cuenta que algunos Candidatos reaccionan de forma
negativa ante la solicitud de hacer un juramento manuscrito, interpretándolo
como una manifestación de desconfianza hacia ellos.

La forma del juramento puede ser libre, pero por su contenido debe estar
referido a la Contrainteligencia y que el reclutado asume la obligación de
prestarle su ayuda y guardar en secreto el hecho de su colaboración. El
juramento no debe contener amenazas con referencia al reclutado.

La selección de los métodos del fortalecimiento del reclutamiento en cada caso


concreto se determina en dependencia de la base en que se ha efectuado el
mismo, las particularidades de la personalidad del reclutado y su actitud hacia
la colaboración secreta.
El Oficial Operativo al recibir la aceptación del Candidato a colaborar y luego de
fortalecer su reclutamiento, debe:

Comunicar el seudónimo que le ha sido asignado como nuevo Agente,


explicándole la necesidad de utilizar el mismo en la firma de documentos e
informaciones que brinde al órgano, así como para el enlace con el Oficial
Operativo.

Posteriormente se le esclarecen las próximas tareas y los métodos de


clandestinidad de su enlace.

El Oficial Operativo le informa que personas y hechos pueden ser de interés,


como puede buscar información sobre ellos.

Acuerda con él la forma de comunicarse, incluso para entregar información de


forma urgente, o sea, esclarece todo lo relacionado con el enlace.

De conjunto el Oficial Operativo y Agente confeccionan una leyenda para


visitar la casa de contacto.

Posteriormente a las instrucciones generales, el Oficial Operativo le da al


Agente tareas concretas y lo orienta acerca de las formas para cumplirlas. El
carácter de la primera tarea que se le encomienda puede ser variado. Todo
dependerá del objetivo del reclutamiento, de la actitud que mantuvo durante el
mismo y si con anterioridad había cumplido otras tareas.

En todos los casos hay que tratar que las tareas que se le asignen al Agente
sean concretas, no estén fuera de sus posibilidades y correspondan a los fines
de su reclutamiento.

Teniendo en cuenta que el Agente recién reclutado puede reconsiderar su


decisión, se hace necesario acordar la próxima entrevista antes de las 72 horas
después del reclutamiento.

Una vez concluido el acto del reclutamiento, el Oficial Operativo debe


formalizarlo, haciendo un informe en el que se describa la forma en que se
realizó, reacción del mismo, informaciones valiosas que aporto, seudónimo y
tareas asignadas, fecha y lugar de la próxima entrevista y la opinión del oficial.

La persona que se niegue a colaborar con la Contrainteligencia, de acuerdo a


las circunstancias, se le toma un juramento de su puño y letra, donde se
comprometa a no divulgar la proposición de colaborar que le fue hecha. Si no
fuera posible hacerlo por escrito, se le advierte verbalmente.

TRABAJO CON LOS AGENTES


El trabajo con los Agentes es la actividad de Contrainteligencia que
comprende su Dirección, Educación e Instrucción, dirigidas a impartirle los
conocimientos y formarle las cualidades, hábitos y habilidades que posibiliten el
cumplimiento exitoso de las tareas operativas asignadas.

Para que el Agente reclutado se convierta en realidad en Colaborador Secreto


experimentado, es preciso dirigirlo con habilidad, estudiarlo y comprobarlo
sistemáticamente y multilateralmente; así como educarlo e instruirlo de forma
paciente y persistente. La capacidad de trabajo del Agente y los resultados de
su actividad práctica no solo están en dependencia de la selección acertada,
sino del profundo estudio y oportuno reclutamiento del Candidato y de cómo
está organizado el trabajo posterior con él.

El Agente puede llegar a ser un colaborador confiable de la


Contrainteligencia, cuando posea altas cualidades política-ideológicas y
psicológicas. Esto se alcanza por medio de su educación, es decir, con una
actividad sistemática sobre él, con el fin de desarrollar y fijar las cualidades que
le serán necesarias para cumplir las tareas que se le asignen, formar nuevas
cualidades que contribuyan a su trabajo exitoso y eliminar aquellas que
obstaculizan o dificultan su actividad como Agente.

No obstante haber alcanzado el Agente el máximo grado de confiabilidad de la


Contrainteligencia, avalado por su objetividad y la comprobación de todas las
informaciones brindadas, siempre será un requisito indispensable e inviolable
de los Órganos de la Contrainteligencia, no dejarse influir por la confiabilidad
que ya le tenemos y proceder a la verificación y comprobación de las nuevas
informaciones que nos suministre.

La preparación especial de los Agentes se logra mediante su instrucción, que


es un proceso de formación de un sistema de conocimientos, hábitos y
habilidades especiales, así como la adecuación de su experiencia vital
(conocimientos, hábitos y habilidades) a las condiciones de la actividad del
Agente.

La instrucción de los Agentes se lleva en dos direcciones:

La transmisión al Agente de los conocimientos especiales.

La formación en base a los hábitos y habilidades necesarios, para el


cumplimiento de las tareas de la Contrainteligencia.

La Educación e Instrucción es un proceso único, en el curso del cual los


Agentes adquieren la madurez política necesaria, conocimientos especiales y
hábitos prácticos, así como perfeccionan las cualidades personales necesarias
para el trabajo que realizan. Sin embargo, entre estas partes integrantes del
trabajo con los Agentes existe cierta diferencia.

Si en el proceso de Instrucción la tarea del Oficial Operativo consiste en


impartir a éstos un determinado número de conocimientos e inculcarles hábitos
y habilidades del trabajo de Contrainteligencia, en el transcurso de su
educación se resuelve la tarea de formar en ellos los puntos de vista políticos y
las cualidades política-ideológicas.

La forma principal de trabajo con los Agentes es mediante las entrevistas


personales con los Oficiales Operativos. El trato directo crea las condiciones
más favorables para llevar a cabo la dirección práctica de la actividad de los
Agentes, su educación y el desarrollo de las cualidades político-ideológicas,
intelectuales y volitivas, la organización de su Instrucción especial, su estudio y
comprobación.

Dirección de Agentes:

La Dirección de Agentes es la actividad organizada y sistemática de la


Contrainteligencia que comprende la planificación de su trabajo, la
determinación de la táctica de sus acciones, la orientación de cómo debe
cumplirlas, su estudio, control y comprobación de cómo las acomete.

Determinación del fin de Utilización del Agente:

Para determinar el fin de utilización del Agente, el Oficial Operativo debe tener
presente el comportamiento de la Situación Operativa en que éste va a
desarrollar su trabajo, las tareas generales de la lucha contra el enemigo, las
informaciones que se poseen acerca de las intenciones, formas y métodos de
la actividad subversiva, las posibilidades operativas del Agente y su experiencia
en la colaboración con la Contrainteligencia.

Planificación de las Tareas del Agente:

Los Oficiales Operativos en las entrevistas con los Agentes deben explicarles el
contenido de las tareas que emprenderán, evitando las orientaciones
generales, a fin de lograr que éstos comprendan plenamente su importancia.

La planificación del trabajo de los Agentes debe caracterizarse por su


dinamismo, individualidad y oportunidad.

Táctica de las Acciones del Agente:

La Táctica de las acciones del Agente consiste en un sistema de métodos y


procedimientos que establecen su manera de actuar para solucionar las tareas
a él planteadas en el descubrimiento prevención y corte de la Actividad
Enemiga.

El carácter ofensivo es la exigencia más importante de la táctica del Agente y


está dada en la influencia activa en la persona que se comprueba, para que
solucione rápida y eficazmente la tarea surgida. El carácter ofensivo presupone
la utilización oportuna de todas las posibilidades que se presentan, a fin de
incitar al enemigo a que realice acciones que descubran sus planes,
intenciones, relaciones, etc. La utilización de los momentos favorables para
realizar acciones; el riesgo razonable garantizando la clandestinidad; influenciar
en la voluntad del enemigo y provocar que las acciones enemigas tomen una
dirección favorable a la Contrainteligencia.

La flexibilidad, por su parte, está destinada a garantizar la realización segura


de esta exigencia. La flexibilidad de la táctica del Agente, significa el ajuste
oportuno de sus acciones en relación a la Situación Operativa que enfrenta.

El enemigo puede fingir que está confiado en el Agente y puede provocar con
esto que realice acciones que después puedan descubrirlo.

Con mayor atención el enemigo trata a las personas que manifiestan iniciativa
por establecer y desarrollar contacto con él y en particular, está muy alerta si
esa iniciativa se justifica o es insuficientemente para fortalecer sus posiciones.
Ante estos casos, el Agente puede fingir que ese contacto no le interesa. El
procedimiento resulta muy eficaz cuando el enemigo está interesado en el
contacto con el Agente, sobre la base de relaciones personales o de trabajo,
así como cuando tenga intenciones de utilizar al Agente en sus fines
subversivos.

EL enemigo y sus emisarios, para obstaculizar a sus Agentes de la


Contrainteligencia en sus tareas, toman permanentemente medidas de
precaución en las relaciones con las personas que lo rodean y tratan de evitar
contactos con aquellas que puedan ser, según su opinión, Agentes.

El enemigo también aplica medidas para comprobar a las personas que en uno
u otro grado están al tanto de su actividad subversiva, para detectar entre ellas
a nuestros Agentes. De este modo, al cumplir tareas operativas, el Agente
enfrenta inevitablemente la Acción contraria del enemigo en complejas
condiciones.

De ahí la necesidad de enmascarar convenientemente a los Agentes, como


medida de seguridad, que permitan cubrir el verdadero carácter de sus
acciones.
El enmascaramiento del Agente consiste en ocultar del enemigo y de las
personas que le rodean, sus cualidades, intereses, intenciones reales y
simultáneamente mostrar las ficticias. De esta forma el Agente tiene la
posibilidad de justificar las acciones relacionadas con el cumplimiento de
las tareas operativas.

El enmascaramiento del Agente siempre está relacionado con la


desinformación del enemigo con respecto a los motivos de las acciones que se
realizan por él, por lo que se hacen llegar diferentes aspectos manipulados
sobre el pasado del Agente, su posición, relaciones y posibilidades.

En el trabajo de dirección resulta importante valorar la capacidad de


enmascaramiento del Agente, a fin de conocer la facilidad que éste tiene de
manifestarse exteriormente, es decir, de representar actitudes y conductas
falsas que no se corresponden con su verdadera manera de ser.

Para el enmascaramiento se utilizan mayormente las circunstancias que se han


creado real y naturalmente acerca de las cuales el enemigo tiene conocimiento
o se les dan a conocer. En estos casos estamos hablando del
enmascaramiento natural del Agente.

El enmascaramiento, como parte importante de la táctica del Agente, se logra


mediante el establecimiento de su fachada, leyenda y línea de conducta,
elementos estos que se interrelacionan dialécticamente en función del papel
que interpreta ante el enemigo.

La fachada: la componen el conjunto de características externas del Agente,


que existan, se creen o se modifiquen y que dan la imagen necesaria ante el
enemigo para facilitar el cumplimiento de las tareas operativas.

La leyenda: está integrada por los elementos de la vida del Agente, con los
cuales se elabora una historia que puede ser real, ficticia o combinada, cuyo
objetivo está dirigida a encubrir su identidad y el contenido de sus acciones.

La línea de conducta: es la forma en que se manifiesta y actúa el Agente en


todos los momentos de su vida.

Algunos de los elementos generales que deben tomarse en cuenta al


establecer el enmascaramiento del Agente, están dados en la naturalidad y
coherencia de la fachada, leyenda y línea de conducta, utilizando
informaciones aportada por el Agente.

La fachada, leyenda y línea de conducta deben corresponderse en la mayor


medida posible con la realidad, tomando como base los aspectos históricos,
sociales y psicológicos del Agente, modificando, agregando o eliminando solo
aquellos que afectan a los objetivos propuestos, teniendo en cuenta que todo lo
irreal o artificial que se incorpore, sea posible de verificar por el enemigo.

La coherencia constituye otro aspecto determinante, ya que debe evitarse que


la forma de comportarse el Agente se encuentre en contradicción con su
leyenda o con su fachada o viceversa.

En la elaboración de la fachada leyenda y línea de conducta, el Oficial


Operativo debe tener presente que el pasado explica el presente y éste a su
vez le permite modificar el futuro, es decir, entre la historia del Agente, su
presente y la manera de comportarse en el momento y en el futuro, deben
mantener una relación lógica que no llame la atención del enemigo y que
guarde una coherencia y concatenación dentro de su vida y personalidad.

El Agente debe tener una participación activa en su enmascaramiento,


teniendo en cuenta que es el más indicado para hacer un análisis crítico de
los aspectos de su línea de conducta que le sean más fáciles de asimilar y
desplegar o sobre los aspectos de su leyenda que podrá sostener con mayor
solidez. De igual modo debe establecerse la fachada, leyenda y línea de
conducta, sobre la base de las informaciones brindadas y sobre la vida
personal del Agente, aportados por el mismo.

El Oficial Operativo deberá utilizar para su leyenda, una autobiografía del


Agente, donde se contemplen las condiciones económicas, sociales,
educacionales, ideológicas y familiares; la caracterización de su propia
personalidad que incluya intereses, necesidades, aspiraciones, temperamento,
rasgos del carácter, sentimientos, vínculos, actividades, costumbres,
concepciones políticas e ideológicas y formas de conducta, entre otros
aspectos. Con toda esta información elabora el enmascaramiento lo más
natural, coherente y lógico posible, estableciendo los aspectos que serán del
interés del enemigo, teniendo en cuenta las condiciones y características del
medio donde actuará.

Es importante afectar lo menos posible, las motivaciones del Agente al crear la


fachada, leyenda y línea de conducta, tratando de que coincidan con sus
necesidades, aspiraciones e intereses.

Cuando en el Agente se produce una profunda transformación de su forma y


condiciones de vida, comienza a bloquearse en mayor o menor medida la
satisfacción de necesidades, deseos, intereses y aspiraciones.

Esto puede traer que como consecuencias que al verse afectado en sus
intereses personales seguirá colaborando, ya sea por comprometimiento o por
razones ideológicas, pero esta situación le puede llevar a perder motivaciones
a lo largo de la colaboración, sintiéndose cada vez menos estimulado. Esto
estará en función de las condiciones ideológicas y revolucionarias del Agente.

Por ello no basta con establecer la fachada, leyenda y línea de conducta, que
el Agente la asimile o la ponga en práctica, ya que es necesario continuar
consolidándola ante el enemigo, es decir fortaleciéndola constantemente.

Si en el desarrollo del trabajo surgen aspectos sospechosos para el enemigo,


es imprescindible aplicar medidas encaminadas a desinformarlo y fortalecer el
enmascaramiento del Agente.

La información que el enemigo pretende obtener sobre el Agente, no se le debe


facilitar ni permitir que la obtenga de manera acabada y verificable, por lo que
debemos obligarlo a buscarla y dificultarle su obtención, así como debe
evitarse que el Agente le brinde espontáneamente aspectos de su vida,
historia, pensamientos, necesidades, creencias, ideología.

En este papel directo que interpreta ante el enemigo, la forma en que actúan y
se manifiesta, constituyen su línea de conducta, elemento medular en la táctica
del Agente, la que se fortalece con la fachada y la leyenda trazadas.

El Agente no puede presentarse ante el enemigo con todo su papel acabado.


Esta manera de actuar provocará inmediatamente sospechas. Siguiendo el
plan elaborado anticipadamente y sin entrar en contradicciones, el Agente debe
desarrollarlo gradualmente, tanto a través de sus acciones, como por
testimonios accesorios, dando al enemigo la posibilidad de que pueda sacar el
mismo sus propias conclusiones.

En ningún caso se puede permitir la participación activa del Agente en la


actividad subversiva del enemigo. La táctica del Agente debe prever la
posibilidad de eludir la participación directa en la actividad subversiva,
utilizando un pretexto que no lo prive de la confianza del enemigo.

Solo en caso de necesidad extrema, la Contrainteligencia puede autorizar al


Agente al cumplimiento de algunas tareas encomendadas por el investigado,
que lo obligan a participar directamente en la actividad. En estos casos deben
tomarse las medidas necesarias para prevenir posibles consecuencias
judiciales o de otra índole, que acarrearían las acciones del Agente.

Bajo ninguna condición el Agente puede participar en actos de terrorismo u


otros de tal gravedad.

Las Orientaciones, el Estudio, Control y Comprobación del Agente:


El éxito de la dirección de la actividad práctica del Agente está en dependencia
no solo de su planificación correcta, la determinación del fin de su utilización y
la táctica del Agente, sino además de cómo se le dan las orientaciones al
Agente, como se estudia, se controla y comprueba.

Las orientaciones presuponen la elaboración conjunta con el Agente del plan


actual y del perspectivo. La participación activa del Agente en la elaboración
del plan desarrolla su iniciativa, contribuye a una actitud más consciente hacia
su actividad y aumenta el interés hacia ella, aunque claro está, el papel
decisivo le corresponde al Oficial Operativo, porque él, mejor que el Agente,
conoce la Situación Operativa.

Cuando el Oficial Operativo procede a orientar al Agente, debe tener definidos


los límites de la información que le dará sobre el fin de su utilización, sobre la
situación en que va a actuar y los materiales que tiene la Contrainteligencia
sobre el investigado.

El Oficial Operativo, al determinar el contenido y volumen de la información que


va a comunicarle al Agente, debe tomar en consideración que en caso de
traición o su descubrimiento no premeditado, esta información puede llegar a
conocimiento del enemigo, lo que traerá como consecuencia el fracaso de las
medidas de Contrainteligencia o una considerable merma de su eficacia.

Cuando las informaciones que posee la C.I. no son secretas para el enemigo,
se le comunica al Agente toda la información sobre el mismo; se aclaran las
condiciones en que cumplirá la tarea, los métodos para la obtención de la
información, el establecer y estrechar los contactos con las personas que son
de interés operativo y los métodos y/o procedimientos que utiliza el enemigo
para llevar a cabo la actividad subversiva.

Al dar al Agente nuevas orientaciones, se debe tener en cuenta los resultados


de las tareas asignadas anteriormente y se discute detalladamente su
información acerca de la tarea anterior.

Las orientaciones al agente las da directamente el Oficial Operativo. Estas


orientaciones son obligatorias para el Agente, pero, al mismo tiempo, deben
permitirle la realización de operaciones por iniciativas, conforme a los cambios
de la Situación Operativa.

La necesidad del estudio, control y comprobación del Agente sobre su trabajo,


están determinadas porque al Agente se le confían secretos estatales y con su
ayuda se solucionan tareas complejas e importantes, que exigen confiabilidad y
alta preparación operativa.
La tarea principal del estudio y comprobación consiste en descubrir y
desenmascarar oportunamente a los Agentes del enemigo que puedan haber
penetrado en nuestro aparato de Agentes, a los Agentes dobles,
desinformadores, provocadores, así como las personas que utilicen sus
relaciones con la Contrainteligencia con otros fines.

Las normas del trabajo con los Agentes, prestan atención particular a la
necesidad de la comprobación multilateral y minuciosa a los que han sido
reclutados en el campo enemigo, así como de los que se utilizan en direcciones
importantes de la actividad de Contrainteligencia. Estas normas exigen también
que el control sobre la actividad de los Agentes sea pleno, objetivo, activo,
planificado, orientado hacia fines concretos y clandestinos.

El control es una actividad de gran importancia dentro del proceso de dirección


en un trabajo con los Agentes y se realiza en cada entrevista del Oficial
Operativo con éstos, donde se analiza el cumplimiento de las tareas orientadas
y la forma en que fueron cumplidas.

Para comprobar la fidelidad de los Agentes y como realizan su trabajo, se


emplean diferentes métodos, tales como la recolección y generalización de los
datos que caracterizan a la misma, el análisis de los resultados de trabajo, la
Observación sobre el Agente en distintas condiciones de su actividad, el
Experimento Operativo y la Modelación Operativa.

Amplias posibilidades para el estudio, control y comprobación del Agente


brinda la Observación. Esta se puede efectuar por el propio Oficial Operativo
en sus relaciones con el Agente o con ayuda de otros medios. El factor humano
desempeña un papel de primer orden en el proceso de estudio y
comprobación de los Agentes.

Este trabajo comienza con el estudio directo que realiza el Oficial Operativo
sobre el hombre atraído a la colaboración y se completa con la utilización de
otros Agentes, Activos, Funcionarios Honorarios y Personas de Confianza que
interactúan con él.

Si bien es cierto que en determinado momento de la comprobación, el uso de


las técnicas operativas puede ser decisivo, su aplicación como regla, debe
estar dirigida a aspectos concretos del trabajo del Agente.

Sin embargo, el estudio organizado y sistemático a través de otros Agentes,


permite profundizar en la parte subjetiva del colaborador, en su mundo anterior
y en los motivos que le conducen a una u otra acción. Este estudio a través de
otros Agentes es insustituible y constituye el elemento básico y común de los
métodos de comprobación señalados.

Si a través de los materiales de la comprobación se determina que el Agente,


en virtud de sus cualidades personales no es capaz de cumplir exitosamente
las tareas y no se tiene certeza de que en el futuro adquirirá estas cualidades,
se saca del aparato de Agentes.

Al evidenciar los materiales de la comprobación la traición del Agente, con el fin


de esclarecer las causas y circunstancias de esta conducta y descubrir de
forma plena la actividad delictiva del Agente y de las personas investigadas, en
ocasiones se continúan las relaciones con este Agente. Después cuando
culmine la necesidad de estudiarlo, el Oficial Operativo crea gradualmente en él
la impresión de que las personas, en cuyo estudio él participaba, no
representan ya interés para la Contrainteligencia y por esta razón causa baja
como colaborador. Posteriormente, y si fuera necesario, se le atrae junto al
resto de los investigados, a la responsabilidad penal.

Otras veces al Agente se le desenmascara por haber participado en la


actividad delictiva, se le obliga a seguir colaborando con la Contrainteligencia,
si se tiene la certeza de que el Agente pueda ser útil y no traicionará de nuevo.

El carácter específico del trabajo secreto requiere la comprobación


permanente, no solo de la actividad operativa del Agente, sino de su conducta
en el lugar de su trabajo, estudio y vida cotidiana. Las relaciones con el Agente
mediante entrevistas, no siempre permiten descubrir oportunamente sus rasgos
negativos. De ahí la importancia de utilización de Agentes y Personas de
Confianza del medio que lo rodea, para completar plenamente su estudio y
comprobación.

Educación de los Agentes:

La educación de Agentes consiste en la influencia organizada y sistemática,


dirigidas a formar las cualidades político-ideológicas, morales y psicológicas
que son imprescindibles para la colaboración exitosa de la Contrainteligencia.

Principios de la Educación:

Orientación política y operativa hacia fines concretos.

Individualidad.

Apoyo en las cualidades positivas del Agente.

Respeto a su personalidad.
Preocupación por él.

Los Agentes que no tienen gran experiencia de la vida, ni en el cumplimiento


de tareas operativas, realizan a menudo acciones erróneas que son necesarias
prevenir oportunamente.

El Oficial Operativo al educar a un Agente, debe apoyarse en sus cualidades


positivas, desarrollándolas y adaptándolas a las exigencias que debe reunir el
Agente. Al mismo tiempo, al actuar de esta manera, trata de eliminar las
deficiencias y las partes débiles de su personalidad. Esto es imprescindible
hacerlo, cuando el Agente ha sido reclutado en las filas enemigas.

En el trabajo con los Agentes se deben emplear medidas de influencia


educativas que no rebajen su dignidad. Al criticar sus acciones también debe
explicársele de forma paciente, los errores cometidos, para que los aprecie
correctamente.

Una actitud pasiva del Agente en el cumplimiento de las tareas operativas,


puede ser motivado por complicaciones que se tenga con su centro laboral o
en su familia. Por eso la manifestación de preocupación por el Agente y la
oportuna ayuda moral y si se hace necesario material, contribuye al
fortalecimiento de sus relaciones con la Contrainteligencia y eleva la efectividad
de la influencia educativa.

El Oficial Operativo debe mostrar interés hacia los aspectos personales del
Agente con espontaneidad, alejado de todo formalismo. La manifestación
formal de la atención se percibe por el Agente de forma nociva.

Tareas de la Educación:

Los Agentes cumplen tareas en el medio enemigo relacionándose con


personas que se manifiestan de forma hostil que están bajo la influencia de la
propaganda contrarrevolucionaria que estos generan.

Al mismo tiempo en el curso del cumplimiento de las tareas operativas los


Agentes tienen que ejercer influencia ideológica en estas personas. Por eso la
tarea más importante en la educación de los Agentes consiste en que estos
lleguen a ser colaboradores fieles, confiables y estables políticamente.

Predisponer favorablemente al Agente, ganarse su confianza, llegar a ser su


consejero, no solo de sus problemas de trabajo, sino de los problemas
personales es muy difícil y tales relaciones no se forman de repente. Estas
aparecen como resultado de un trabajo escrupuloso y meditado con el Agente;
de la actitud sensible con relación a sus intereses y necesidades; de la
participación activa en la solución por él de las tareas operativas.
Preparación política del Agente: La preparación política del Agente es la base
de su educación. Está destinada a formar el convencimiento ideológico, puntos
de vistas políticos estables que le permitan oponerse a la influencia hostil del
enemigo y si se hace necesario, ejercer en él la influencia ideológica y
desarrollarle las cualidades morales necesarias.

Preparación Psicológica del Agente.

La educación del Agente no será completa si no comprende la formación de las


cualidades, la habilidad de dominar sus emociones que le son necesarias para
el trabajo de Inteligencia y Contrainteligencia.

Generalmente el Agente tiene que actuar en condiciones complejas, tropezar


con dificultades inesperadas que pueden ocasionarle miedo, perplejidad,
sufrimientos emocionales injustificados. Por interés de los Órganos de la
Contrainteligencia, el Agente se ve obligado a establecer relaciones necesarias
con personas que no respeta y por las que siente animadversión.

Todo esto requiere del Agente la habilidad de subordinar sus intereses


personales a los sociales, reprimir el miedo, la inseguridad, la confusión, es
decir, dominar sus sentimientos de la forma necesaria para poder solucionar la
tarea asignada en las condiciones que se han creado.

También debemos perfeccionarle los hábitos motores que garantizarán la


tranquilidad y seguridad de sus acciones; formarle las habilidades de
enmascarar ante el enemigo las cualidades profesionales, el carácter selectivo
de la memoria, atención y capacidad de observación, etc.

Los métodos principales de educación son:

La Persuasión.

El Ejemplo Personal del Oficial.

El Estímulo.

La Crítica.

Las formas de estimular a los Agentes pueden ser las más variadas, expresarle
el agradecimiento; hacerle un tipo de obsequio de valor; proponerlo para una
condecoración; prestarle distintas clases de servicios personales, tanto de su
necesidad personal como de su familia; comunicarle al Agente información de
su interés.
En esto debe tenerse en cuenta como el Agente se manifiesta ante el
estímulo. Cualquier estímulo al Agente debe servir como forma de expresión de
la alta apreciación por su trabajo, corresponder no solo a los resultado
concedidos, sino a los esfuerzos empleados para su logro, así como a los
motivos por los cuales se guió el Agente al cumplir las tareas.

La Crítica como método de educación se aplica a los Agentes que cumplen


negligentemente las tareas encomendadas por la Contrainteligencia.

Instrucción de los Agentes:

La instrucción de los Agentes consiste en la actividad organizada y sistemática,


dirigida a impartir los conocimientos especiales y formar los hábitos y
habilidades que le son imprescindibles.

Habilidades y hábitos de obtención secreta de información sobre el


enemigo.

Habilidades y hábitos para ejercer ocultamente influencia en el enemigo.

Habilidades y hábitos para establecer y estrechar contactos con el


enemigo.

Habilidades y hábitos para mantener el enlace clandestino con el Oficial


Operativo.

Formación de la Capacidad de Observación:

El conocimiento del Agente sobre el objeto de la observación, será más


profundo y multilateral si se le da, no sólo la descripción verbal de este, si no
también se le da la posibilidad de percibir visualmente (por fotos, algunas
acciones subversivas, que se supone va a realizar, los medios de su
realización, los objetos de equipamiento, etc.

Cuando el Agente tenga la posibilidad de detectar medios de actividad


subversiva a través del tacto, es aconsejable darle la posibilidad de percibirlos
tocándolos.

Al desarrollo de la capacidad de observación en el Agente, contribuye el


análisis minucioso de los informes que él ha brindado, acerca de los resultados
de la observación sobre el investigado.
El Oficial Operativo debe tratar de lograr que el Agente sepa comparar
diferentes fenómenos y notar sus particularidades; determinar las relaciones de
estos fenómenos entre sí; descubrir los cambios más pequeños en ellos y
detectar lo más esencial que se percibe por él.

Es muy importante enseñar al Agente a memorizar las señas de las personas


que han atraído su atención y describirlas.

Viajando en el ómnibus, que estudie a los pasajeros que le rodean; escoja uno
o dos de estos y los describa mentalmente en su aspecto exterior. Al día
siguiente, al dirigirse a la parada, trate de reconstruir en su memoria las señas
de estas personas. Si tiene la posibilidad de encontrarlos de nuevo, que
compruebe si ha guardado en su memoria correctamente el aspecto exterior de
cada uno de ellos, cuáles cambios se han producido en su exterior.

Al encontrarse con un conocido, que lo describa mentalmente y dentro de un


tiempo trate de recordar como el se portó, qué dijo, cómo iba vestido, etc.

Paseando por la ciudad, que preste atención a las particularidades exteriores


de los edificios, la planificación y denominación de las calles. Después del
paseo, que trate de reconstruir detalladamente en su memoria la ruta de su
movimiento y las particularidades más características de los edificios y calles.

Después de terminar la jornada, que recuerde detalladamente lo que ha


pasado: qué ha hecho, con quién se ha entrevistado, de que ha hablado.

Que estudie atentamente algún objeto, después lo aparta y que trate de


describirlo detalladamente de memoria. Después lo toma y compruebe si ha
hecho su descripción correctamente.

El Oficial Operativo al instituir al Agente sobre la capacidad de observación,


tiene que inculcarle la responsabilidad por los resultados de la observación. No
se puede dejar de prestar atención a un hecho por falta de disciplina o atención
durante la observación. El Agente debe darse cuenta, que la Contrainteligencia
tiene la posibilidad de comprobar los resultados del cumplimiento de las tareas
encomendadas.

Formación de las Habilidades para Sonsacar

Estos entrenamientos se efectúan por lo general, del siguiente modo: el Oficial


Operativo, al descubrir la situación concreta, le pregunta al Agente como en
esta situación él considera posible obtener de la persona objeto de un Proceso
Investigativo, los datos que son de interes para la Contrainteligencia y la
creación de qué situación psicológica pudiera contribuir a la solución de esta
tarea.
La instrucción del Agente en el dominio del sonsacamiento se puede llevar a
cabo mediante el análisis de los resultados del cumplimiento por él de las
tareas operativas.

Formación de las habilidades para apreciar la información operativa..

Debe dominar, aunque en forma general, métodos del conocimiento, tales


como análisis, síntesis, comparación, abstracción, generalización, entre otros.

El Oficial Operativo, utilizando ejemplos concretos, le demuestra al Agente


cómo ha de analizar y evaluar desde el punto de vista de su importancia
hechos percibidos por él, qué conclusiones se pueden hacer después de
analizarlo y apreciarlos, qué elementos de la situación operativa concreta son
principales, qué significado tienen los indicios conocidos, entre otras
cuestiones.

A fin de formar en el Agente las habilidades y hábitos del trabajo de análisis, a


veces el Oficial Operativo le da la posibilidad de que analice él mismo el
proceso de cumplimiento de las tareas, detecte errores, destaque acciones
acertadas y después de lograr el objeto final, vuelvan a repetir juntos, el
análisis del trabajo realizado. Con este fin, es útil encomendarle que analice
independientemente los posibles canales de escape de la información secreta,
cuya investigación es competencia de la Contrainteligencia.

EL ENLACE CON LOS AGENTES

Clandestinidad

Estabilidad

Oportunidad

El principio de la clandestinidad es el fundamental y significa conservar en


secreto ante otras personas, tanto el hecho del contacto Oficial Operativo-
Agente, como su carácter. Esto se alcanza por medio de la utilización de
métodos de enlace.

La Estabilidad significa la preparación permanente para la realización del


enlace con el Agente. Crea la posibilidad de establecer el contacto en el
momento necesario y por otra, garantiza la regularidad y el carácter sistemático
del contacto entre los Oficial Operativo y sus Agentes.
La oportunidad posibilita que el contacto entre el Oficial Operativo y el Agente,
se realice con la rapidez necesaria, lo que permite a la Contrainteligencia tomar
las medidas que la situación operativa requiere.

FORMAS Y MÉTODOS DE ENLACE CON LOS AGENTES:

Enlace directo:

Es la forma de enlace que utilizan los Oficiales Operativos cuando


contactan a sus Agentes personalmente o mediante el apoyo de medios
técnicos y otros.

Entrevista personal con el Agente.

Enlace con la utilización de escondrijos.

Enlace con la utilización de medios especiales de radio, teléfono, correo


electrónico y correo postal.

Enlace con intermediarios:

Cuando contactan a sus Agentes mediante otras categorías de fuentes,


denominadas Colaboradores de Enlace, que sirven de intermediarios, por lo
que siempre serán Colaboradores Secretos especialmente preparados.

La entrevista personal con el Agente: A diferencia de otros métodos de


enlace, en la entrevista personal, es más reducido el círculo de personas que
conocen de la colaboración del Agente con los Órganos de la
Contrainteligencia.

La entrevista personal tiene otra ventaja importante: permite recibir las


informaciones de mano del Agente, lo que excluye la posibilidad de que estos
materiales sean interceptados por el enemigo o suplantados por éste.

En las entrevistas personales, se corre el riesgo de que estas, en determinadas


condiciones, puedan ser descubiertas por el enemigo o personas relacionadas
con él, debido a que su punto débil consiste en el encuentro, en un mismo lugar
y hora, del Oficial Operativo y el Agente. De ahí la importancia de tomar
medidas de seguridad, encaminadas a impedir la detección del enlace.
El Agente, al dirigirse a la entrevista con el Oficial Operativo, debe elaborar un
pretexto que justifique de forma verosímil, su salida del lugar de trabajo, su
casa o el tiempo que va a estar ausente.

Si como excusa sirve la visita a una persona, institución civil o empresa, el


Agente visitará a esa persona o lugar, antes o después de la entrevista, cuando
se tengan razones para suponer que la misma pueda ser comprobada por
alguna persona.

El Oficial Operativo y el Agente, al tener en cuenta que en los alrededores del


lugar donde va a efectuarse la entrevista, pueden encontrarse con personas
que los conozcan a ambos, elaboran con anterioridad la leyenda y fachada
sobre su presencia en la zona.

Tanto el Oficial Operativo como el Agente, deben estar conscientes de que


pueden ser observados por el enemigo, con el fin de descubrir el momento en
que establecen el Enlace. Para evitar esto, siempre deben tomarse medidas de
seguridad, que contrarresten estas posibles acciones enemigas.

Enlace con la utilización de escondrijos se entiende un lugar especialmente


seleccionado para la conservación segura de materiales secretos y del
intercambio de ellos entre el Oficial Operativo y el Agente, sin comunicarse
personalmente. Cada escondrijo está destinado solo para un Agente. Además
del escondrijo principal, se preparan los de reserva, que utilizará el Agente en
caso de necesidad.

El lugar para el escondrijo, se selecciona teniendo en cuenta que el mismo no


exija del Agente justificar su presencia en el lugar, ni que en sus acciones para
el cargue y descargue de materiales dejen huellas visibles o puedan ser
observadas por las personas que están a su alrededor.

Por eso los escondrijos se preparan, como regla, en las rutas habituales del
Agente, en zonas muertas o lugares que impidan la observación sobre sus
acciones. Al seleccionar el lugar para el escondrijo y prepararlo, debe
garantizar la conservación de los materiales que se ocultarán (para evitar que
sean descubiertos por personas ajenas, dañados por animales o por las
precipitaciones atmosféricas).

Los escondrijos se instalan en lugares naturales (huecos de los árboles,


ranuras de las rocas, de los edificios, etc.), así como en containers que se
sitúan en lugares seleccionados especialmente. El Oficial Operativo y el Agente
acuerdan previamente las señales para indicar el cargue o descargue del
escondrijo.
Para avisar la colocación exitosa de los materiales en el escondrijo, en la ruta
hacia él, en un lugar designado anticipadamente, se pone determinada señal
(incisión en un árbol, rompimiento de una rama, marca hecha con tiza o carbón,
etc.). Después de extraer los materiales del escondrijo, de igual forma, se pone
una señal de respuesta, que evidencia la terminación exitosa de la operación
de intercambio.

Este método tiene la desventaja de que limita las posibilidades efectivas para
dirigir, educar e instruir a los Agentes, así como, que al permanecer algún
tiempo fuera del control de la Contrainteligencia, puede ser descubierto por el
enemigo o por personas ajenas.

Este método de enlace se emplea principalmente en aquellos casos en que la


realización de la entrevista personal resulta difícil y no es fácil la utilización de
otros tipos de enlace.

El enlace con la utilización de medios especiales de radio, teléfonos, correo


electrónico y correo postal, está en correspondencia con las condiciones
existentes en la zona donde se encuentran, sobre todo en las ciudades. Tiene
una parte débil, que consiste en que los canales por los cuales se transmite la
información del Agente al Oficial Operativo y viceversa, pueden controlarse por
personas ajenas y en algunos casos, por el propio enemigo.

El enlace Oficial Operativo - Agente por medio del teléfono, telégrafo, correo
electrónico y correo postal, se emplea por lo general, para avisarse
mutuamente de la necesidad de entrevistarse urgentemente, cambio de hora y
fecha de las entrevistas y solo en casos muy excepcionales para la
transmisión de orientaciones y el recibo de información .

Utilización del Colaborador de Enlace:

Los Colaboradores de Enlace cumplen tareas importantes que se concretan en


facilitar el enlace con otros Agentes, con los cuales la Contrainteligencia no
puede adoptar otro sistema de comunicación, dadas en la inexistencia de
condiciones para el contacto personal del Oficial Operativo con los Agentes
bajo su atención.

El Colaborador de Enlace es el Colaborador Secreto que de forma voluntaria


y sobre la base ideológica sirve de intermediario personal, brinda su casa,
local, otro lugar, dirección domiciliaria o de correo electrónico, teléfono o sirve
de buzón para la comunicación bilateral Oficial Operativo - Agente y mantiene
las medidas de clandestinidad y protección que la garantizan.
Para la selección, estudio, comprobación y reclutamiento del Colaborador de
Enlace se observarán las formas y métodos empleados en los Agentes,
ajustándolos al carácter de las tareas que cumplen, la necesaria clandestinidad
de su empleo y que esta categoría solo se recluta de forma directa sobre la
base política ideológica.

El Oficial Operativo, para garantizar la clandestinidad de los Agentes y la


seguridad de la información, elaborará conjuntamente con el Colaborador de
Enlace el informe de medidas de seguridad, el que se conservará en la carpeta
del Colaborador de Enlace y contendrá:

Seudónimo.

Método de contacto que será empleado.

Leyenda del Oficial Operativo, el Agente y el Colaborador de Enlace.

Señales para emplear el lugar de contacto, suspender su empleo o avisar la


existencia de peligro.

Como lugar de contacto se utilizarán viviendas, locales u otros que reúnanlas


condiciones requeridas, siempre que garantice la clandestinidad y
compartimentación.

En los lugares de contacto donde se atienda a un Agente reclutado por


dependencia, sensibilidad relevante u otras circunstancias especiales, no se
atenderán otros, excepto que se conozcan entre si como colaboradores.

En los lugares de contacto empleados como buzón, dirección o teléfono no se


vinculará al Colaborador de Enlace con más de un Agente de forma
simultánea.

Para la baja o suspensión del contacto con el Colaborador de Enlace se


observarán las formas y métodos regulados para el Agente.

Serán dados de baja los lugares de contacto, cuando alguno de los Agentes
atendidos o relacionados con estos hayan traicionado o se haya descubierto su
colaboración con el Órgano Operativo o por otras causas que pongan en
peligro su clandestinidad.

Los lugares de contacto serán comprobados sistemáticamente evaluados cada


dos años, tomando en cuenta su situación operativa y la de sus alrededores,
con el fin de determinar si mantienen la clandestinidad y condiciones
apropiadas para su uso.
Los Colaboradores de Enlace estarán orientados permanentemente a informar
cualquier indicio o situación que ponga en peligro o afecte su utilización.

En cualquier momento que se obtengan indicios sobre falta de clandestinidad,


se tomarán medidas a fin de comprobarlos y se suspenderá su utilización hasta
que sea descartada la sospecha existente.

El Oficial Operativo, al enviar al Colaborador de Enlace a la entrevista con el


Agente, le da instrucciones detalladas acerca de las cuestiones del recibo,
conservación y transportación de los documentos operativos, así como la forma
de la entrevista con el Agente.

Con el fin de trasladar de una forma segura los materiales recibidos del Agente,
se recomienda a los Colaboradores de Enlaces, si se hace necesario, utilizar
containers ocultos en el vestuario, calzado y objetos de uso personal.

Utilización de los Colaboradores Dueños de Puntos de Comunicación


Clandestina:

El intercambio de informaciones entre el Oficial Operativo y el Agente mediante


los puntos de comunicación clandestina se efectúa con, o sin el
descubrimiento parcial del Agente ante el intermediario.

Se emplean tres tipos de puntos de comunicación:

“Buzones”.

“Direcciones Secretas”

“Teléfonos Secretos”.

Los “Buzones” son puntos de comunicación donde el Agente trae


personalmente sus informes u otros materiales y recibe las orientaciones
escritas del Oficial. Los “Buzones” se organizan en locales de trabajo o vivienda
en que están trabajando o viviendo Agentes comprobados o personas que han
sido reclutadas especialmente en calidad de dueños de “Buzones”.

Como locales convenientes para estos fines pueden servir los apartamentos,
filiales de instituciones civiles o unidades de comercio, talleres de reparación o
sastrerías, etc., que son visitados por diferentes personas; estas circunstancias
sirven de buena fachada para las visitas de los Agentes y el Oficial.
El enlace a través de “Buzones” se emplea principalmente en el trabajo con los
Agentes sobre los cuales se tienen sospechas de que los objetivos pueden
chequearlo, así como con los Agentes que se encuentran de viaje y no tienen
la posibilidad de emplear otro método de enlace.

En calidad de Colaboradores de Enlaces Dueños de “Buzones” se reclutan, por


lo general, a las personas que realizan actividades que les posibilitan contactar
con muchas personas, tales como médicos, sastres, vendedores, empleados
de buroes de información, correos, bibliotecas, empleados de teatros,
restaurantes, peluquerías, cines, etc.

Al organizar el enlace a través de “Buzones” se cumplirá estrictamente la


siguiente regla:

El dueño del “Buzón“ no debe conocer los datos ubicativos del Agente; lo
identificará con ayuda de una contraseña verbal o material.

Los materiales del Agente se le entregan al dueño del “Buzón" de forma


cifrada o confeccionados con escrituras secreta, enmascarados
convenientemente en cualquier objeto.

La “Dirección Secreta” es el punto de comunicación clandestino que utiliza el


Agente de los Órganos de la Contrainteligencia para trasmitirle al Oficial
Operativo la información por correo.

En calidad de Colaborador de Enlace, dueños de “Direcciones Secretas” se


reclutan personas leales, que tienen amplias relaciones y mantienen con ellos
correspondencia. La función del dueño de tal dirección, consiste en recibir los
materiales del Agente y entregarlos oportunamente al Oficial Operativo.

El trabajo con el Colaborador de Enlace dueño de la “Dirección Secreta” se


organiza de tal forma, que él no conozca nada sobre los Agentes que le
escriben y sobre el contenido de los materiales que reciba de ellos. Con este fin
todas las cartas y paquetes postales que se envían a su dirección, se
confeccionan con el empleo de palabras convencionales, cifras o con escritura
secreta. En el sobre se escriben remitentes falsos o no se escribe nada.

Si se hace necesario comunicarle algo al Agente, el Oficial Operativo, en


nombre del Colaborador de Enlace dueño de la “Dirección Secreta”, le envía a
su dirección una carta de contenido convencional. En dependencia del método
de enmascaramiento acordado, esta carta se envía directamente al lugar de
residencia del Agente o a un apartado postal.
El “Teléfono Secreto” es el medio con ayuda del cual, el Oficial Operativo y el
Agente se intercambian información verbal o a través del Colaborador de
Enlace, dueño de dicho medio de comunicación.

En calidad de Colaboradores de Enlace dueños de “Teléfonos Secretos”, se


utilizan las personas que tienen teléfonos para su uso personal o están la
mayoría de su tiempo en el lugar donde se encuentra el teléfono.

La información que se trasmite a través del “Teléfono Secreto”, se enmascara


con la ayuda de palabras convencionales, acordadas con anterioridad.

Organización del enlace con los Agentes:

Enlace Programado.

Enlace de Reserva.

Enlace de Emergencia.

El Enlace Programado es aquel que se organiza entre el Oficial Operativo y el


Agente, que contempla su carácter periódico en cuanto a lugares, días y horas
en que se efectuará el contacto.

De acuerdo con la situación operativa y las tareas que cumple el Agente, se


establece la frecuencia de los enlaces programados. No obstante, como regla,
los Agentes deben ser contactados como mínimos una vez al mes, aunque lo
ideal sería verlos cada 10 días.

Es inadmisible que el Oficial Operativo, sin causa justificada, incumpla el


enlace programado con el Agente.

“El Enlace de Reserva” consiste en tener preestablecido el lugar, fecha y


hora del contacto, que sustituirá al enlace programado incumplido. Por tal
motivo el Oficial Operativo y su Agente lo acuerdan previamente

“El Enlace de Emergencia” se utiliza cuando se dan circunstancias


especiales, donde tanto el Oficial Operativo como el Agente, se ven en la
necesidad de establecer un contacto en el menor tiempo posible, no pudiendo
esperar al enlace programado, así como, cuando el enlace de reserva tampoco
funcionó.

Para el enlace de emergencia tiene gran significación las señales de aviso


sobre la necesidad de contacto entre el Oficial Operativo y sus Agentes.
Con este fin se emplean a menudo señales convencionales de diferentes
índoles, las cuales pueden hacerse al encontrarse en la institución donde
trabaja el Agente o en otro lugar público. Generalmente como señales sirven
distintas frases convencionales que significan la necesidad de la entrevista, el
lugar, la fecha y la hora de su realización. A veces estas frases significan solo
la fecha y hora de la entrevista, ya que lo que se refiere al lugar, se determina
de antemano.

Para que el iniciador de esta señal pueda conocer la disposición del avisado de
llegar a la entrevista, se establece una señal de respuesta.

Las frases convencionales pueden ser muy distintas por su contenido, pero
siempre deben reunir un requisito: Estar de acuerdo con las relaciones de
trabajo y personales que sean formada entre el Agente, que se han formado
entre el Agente y el Oficial Operativo. Así como a la situación donde ellos
entran en contacto. En el caso contrario, el intercambio de frases
convencionales puede despertar sospechas por parte de las personas que les
rodean.

A veces para el aviso sobre la entrevista no planificada, los Oficiales


Operativos y los Agentes acuden a gestos o acciones convencionales. Para no
provocar sospechas de personas ajenas, éstos deben ser normales y
naturales, no obstante, esta señal de aviso es ineficaz o insegura.

Tales gestos, en primer lugar pueden no ser notados por aquel al que están
dirigidos; en segundo lugar, estos gestos se hacen a menudo involuntariamente
y pueden conducir a un error al Agente o al Oficial Operativo, que saben su
utilización convencional. Los gestos extraordinarios despertarán,
inevitablemente, sospechas por parte de personas ajenas y podrán traer como
consecuencia el descubrimiento del Agente.

Las señales convencionales se pueden hacer sin entrar directamente en


contacto el Oficial y el Agente. En tales casos se ponen signos convencionales
(marcas) en las paredes de los edificios, árboles, etc., que se encuentran en las
rutas acostumbradas de movimiento del Oficial Operativo o del Agente y se
establecen las señales de respuesta, con las cuales el avisado pone en
conocimiento del iniciador su disposición de concurrir a la entrevista con él.

Las variedades de señales convencionales mencionadas, se emplean

Para garantizar la clandestinidad del enlace, se hace necesario que tanto el


Oficial Operativo como el Agente, tomen en conjunto medidas de seguridad con
independencia del método de enlace que se utilice.
Las señales de peligro son una de las principales medidas de seguridad. La
utilización de esta señal es importante para garantizar la clandestinidad entre el
Oficial Operativo y el Agente.

Suspensión y Restablecimiento de Enlace con los Agentes:

En dependencia a determinadas circunstancias, el enlace con los Agentes


puede suspenderse con carácter temporal o definitivo, tanto por proposición del
Oficial Operativo, como del propio Agente.

La suspensión temporal del enlace con los Agentes, como regla, se efectúa
cuando este pierde posibilidades operativas; tiene una enfermedad transitoria;
tiene situaciones laborales o de estudio que le originan falta de tiempo para el
cumplimiento de las tareas.

El Oficial Operativo, en los casos que inicia la suspensión temporal, debe


explicarle al Agente, en los límites admisibles, las causas de la suspensión del
enlace. De lo contrario, este podría pensar que no existe confianza en él, lo que
influiría desfavorablemente en su posible colaboración posterior.

Cuando el Oficial Operativo suspende con carácter temporal el enlace, acuerda


con el Agente las condiciones de su restablecimiento, en caso de que surja la
necesidad operativa concreta y desaparezcan las causas que motivaron dicha
suspensión de enlace. Para restablecer el enlace con el Agente, será
indispensable realizar comprobaciones adicionales, correspondientes al
período de tiempo durante el que se mantuvo la suspensión temporal del
enlace.

La suspensión definitiva del enlace con el Agente está determinada por


las causa principales siguientes:

1- Traición 5- Descubrimiento de su
identidad
2- Desinformación 6- Pérdida definitiva de sus
posibilidades operativas
3- Indisciplina 7- Enfermedad que lo
imposibilita definitivamente
4- Negativa a la colaboración 8- Muerte
secreta

En estas situaciones, se determinarán las medidas a tomar y siempre que


resulte factible se obtendrá del Ex-Agente, un juramento firmado con su
verdadero puño y letra, así como con su identidad, donde se comprometa a no
divulgar aspecto alguno relativo a su colaboración secreta con la
Contrainteligencia. Este juramento deberá reflejar el tiempo de colaboración y
su evaluación, incluyendo los errores aceptados por el Ex–Agente.

Lugares de Atención a los Agentes:

Como “Casa Secreta” puede ser utilizada la vivienda que se encuentra a


disposición de los Órganos de la Contrainteligencia y se utiliza bajo fachada
para las entrevistas con determinados Agentes, para el trabajo de los Oficiales
del Chequeo Visual; para la instalación de la Técnica Operativa y otras
necesidades de los Órganos de la Contrainteligencia.

Por “Casa de Contacto” se entiende una vivienda o locales de trabajo, que


reúnan las condiciones requeridas, para establecer contactos entre Oficiales
Operativos y sus colaboradores secretos y que previamente se haya obtenido
la aceptación de su propietario o persona responsable del local, el cual se
reclutará en calidad de Colaborador de Enlace.

Las Casas Secretas y de Contacto deberán reunir algunos requisitos


fundamentales para el trabajo clandestino, entre los que se pueden señalar:

Cierto aislamiento en relación a las demás viviendas.

Comodidad en cuanto al acceso desde el punto de vista de la clandestinidad.

Las condiciones del local donde se realicen las entrevistas.

Deben ser ideales para evitar que las conversaciones sean escuchadas fuera
del mismo.

Deben contar con teléfono.

No deben ser seleccionadas en edificios cercanos a representaciones


extranjeras o de los edificios de viviendas de sus funcionarios, debido a que
sus oficiales de inteligencia, bajo fachada legal, manifiestan intereses
permanentes hacia sus alrededores y pueden descubrir estas casas, así como
a los Agentes de la Contrainteligencia que se atienden en ella.

No se deben seleccionar apartamentos, cuyos vecinos estén bajo la


observación de los Órganos de la Contrainteligencia o de la Policía Nacional
Revolucionaria.

Preferiblemente deben ser casas o apartamentos donde residan pocas


personas o que la mayor parte del día, sus habitantes permanezcan fuera de
la misma.
Selección y Adquisición de Casas Secretas:

En las ciudades populosas es conveniente adquirir las “Casas Secretas” en los


edificios grandes, en las calles de más tránsito, con cómodo acceso a ellas
desde el punto de vista de la clandestinidad. En las ciudades pequeñas y en los
pueblos, las “Casa Secretas” raras veces se establecen, debido a las
dificultades para su enmascaramiento y para la observación de las reglas de
clandestinidad, para el trabajo en ellas.

El Oficial Operativo, al resolver las cuestiones acerca de la posibilidad de


utilización del apartamento seleccionado, lo estudia personalmente y esclarece
sí reúne los requisitos necesarios.

Como Colaboradores de Enlace, dueños de “Casas Secretas” pueden utilizarse


aquellas personas que tienen familia poco numerosa o ciudadanos que se
reclutan especialmente y que bajo la fachada correspondiente, garantizan el
trabajo normal en estas casas.

Una persona a reclutar en calidad de Colaborador de Enlace, dueño de “Casa


Secreta” debe ser estudiada minuciosamente, con vistas a aclarar si es leal, si
está apta y capaz de guardar en secreto la tarea que se le asignará. Se deben
comprobar las relaciones familiares y otras allegadas al candidato.

La carpeta del Agente contendrá:

Registro de documentos en el expediente.

Registro de personas que han tenido acceso al expediente.

Informe solicitud de reclutamiento.

Pruebas o materiales comprometedores.

Resultado del reclutamiento.

Autobiografía y foto.

Plan de contacto.

Leyenda y Línea de conducta.

Notas o plan de comprobación cuando proceda.

Estímulos, correcciones, favorecimientos e informes evaluativos realizados.

Plan de trabajo vigente.


Informaciones del Agente con valor histórico u operativo.

Planilla de control para el registro de informaciones aportadas por el Agente.

El Jefe de Sección o Unidad, ante circunstancias especiales, podrá decidir


habilitar un expediente de trabajo donde se conserven y registren las
informaciones aportadas por el Agente.

La carpeta del Colaborador de Enlace contendrá:

Registro de documentos en el expediente.

Registro de personas que han tenido acceso al expediente.

Informe de de solicitud e reclutamiento.

Resultado del reclutamiento.

Autobiografía y foto.

Método de contacto.

Registro de Agentes atendidos por seudónimos, fechas de inicio, oficial que lo


atiende. En caso de concluir su atención: fecha y causas.

Informe de medidas de seguridad para su empleo, señales establecidas y


Leyendas del Oficial y los Agentes.

Notas o plan de comprobación cuando proceda.

Evaluaciones, estímulos, correcciones o favorecimientos.

Una vez decidida la baja de un Agente o de un Colaborador de Enlace, el


Oficial Operativo depurará y enviará la carpeta al Archivo Biográfico Secreto en
un término que no exceda los 30 días, especificará la información o documento
que le interesa conservar, así como la información que se puede brindar ante
solicitudes.

La depuración del expediente consistirá exclusivamente en la extracción de la


información que se considere debe seguir compartimentada. El informe de
propuesta y decisión de baja por traición, desinformación y pérdida de
posibilidades operativas debe ser suficientemente explícito.

Selección, Estudio y Adquisición de las “Casas de Contacto”:


En las grandes ciudades es aconsejable establecer “Casas de Contacto” en
edificios grandes que se encuentren en las calles de más tránsito.

En estos se tratará de seleccionar un apartamento donde radique una familia


poco numerosa y que tenga una habitación aislada, cómoda para recibir a los
Agentes, con la clandestinidad y compartimentación necesaria.

En algunos casos, las “Casas de Contacto” se pueden establecer en los


apartamentos de personas que han salido junto con su familia a una larga
misión de servicio a otras localidades del país o al extranjero, con el derecho
de conservar la vivienda.

Los Órganos de la Contrainteligencia encuentran algunas dificultades al


seleccionar “Casas de Contacto” en las ciudades pequeñas y pueblos del
interior, debido fundamentalmente a que hay pocos edificios adecuados para
este tipo de vivienda, las calles son poco populosas y los ciudadanos que
viven allí se conocen bien unos a otros.

Esta situación, requiere esfuerzos y creatividad del Oficial Operativo, sobre


todo, teniendo en cuenta el carácter casi público de la actividad profesional del
mismo en estos lugares.

Por ello, debe tomarse en cuenta las posibilidades que brindan las viviendas de
algunos ciudadanos, que por la índole de su trabajo, tienen mayor
comunicación con el resto de la población, como son: los médicos, sastres,
modistas, veterinarios, profesores, zapateros y otras profesiones a fines, que
puedan brindar una fachada natural a los encuentros entre el Oficial Operativo
y los Agentes.

La selección de las “Casas de Contacto” la efectúan los propios Oficiales


Operativos. Sólo en algunos casos, con este fin se utilizan Agentes. Sin
embargo, las conversaciones con los Agentes relacionadas con la selección de
la Casa, hay que realizarla de tal forma, que ellos no se den cuenta de la causa
verdadera del interés que manifiesta el Oficial Operativo hacia una casa
concreta.

Utilización de las “Casas de Contacto”:

Los Oficiales Operativos, al organizar el trabajo con los Agentes en las “Casas
de Contacto” se ven obligados a garantizar la clandestinidad de los mismos,
con las personas situadas a sus alrededores. Esto se alcanza por medio de la
elaboración y aplicación de las leyendas de las Casas; la educación e
instrucción de sus dueños; la observación de las reglas de clandestinidad por
los Oficiales Operativos, Agentes y Colaboradores de Enlace que atiendan en
este lugar.
El Oficial Operativo, al adquirir la “Casa de Contacto” conjuntamente con el
Colaborador de Enlace Dueño de la misma, trazará la leyenda y fachada,
que justificará las visitas de los Oficiales Operativos y los Agentes al lugar.

En las “Casas de Contacto” se atiende solamente a los Agentes comprobados


y seguros. Se recomienda no atender más de tres Agentes en la misma Casa
de Contactos.

No se deben entrevistar en Casas de Contactos o en Casas Secretas, a


Agentes recién reclutados por base de Dependencia, con el empleo de
materiales comprometedores o a los Agentes recién reclutados entre los
extranjeros, a los cuales, al principio, se deben atender en locales u otros
lugares que reúnan los requisitos de clandestinidad, preferiblemente en los
hoteles.

Solamente después que el Oficial Operativo obtenga la certeza de la seguridad


y confiabilidad del Agente, comienza a atenderlo en la “Casa de Contacto”.

No se deben atender en una “Casa de Contacto” a Agentes que se conozcan


personalmente. En caso de no tener otra posibilidad, el Oficial Operativo tiene
que planificar su trabajo con ellos de tal forma, que los Agentes visiten las
Casas en diferentes días y no puedan encontrarse en la zona en que está
situada.

El trabajo con los Agentes en las “Casas de Contacto” se debe planificar de tal
modo, que entre la llegada de un Agente y la salida de otro, haya un intervalo
de tiempo que excluya la posibilidad del encuentro entre ambos.

Se debe explicar a los Agentes que tienen que venir a la Casa de Contacto a
determinada hora exacta y no visitarla sin acuerdo previo con el Oficial
Operativo.

Tanto el Oficial Operativo como el Agente, al dirigirse a la “Casa Secreta" o de


"Contacto”, deben comprobarse, a fin de detectar la posible observación por
parte de personas ajenas y en caso de descubrir tal observación, no se efectúa
la entrada a dicha Casa

Es conveniente que el Oficial Operativo llegue a la “Casa Secreta" o de


"Contacto” antes que el Agente, para así tener tiempo de preparar las
condiciones para la entrevista con el Agente y comprobar si en la casa se
encuentran personas ajenas.

El Oficial Operativo después de entrevistarse con el Agente, debe eliminar


todas las huellas de su estancia, tales como residuos de comida o meriendas,
vasos y tazas utilizadas, colillas de cigarrillos o de tabacos en los ceniceros, lo
cual debe eliminar, para de esa forma preparar dicha casa para entrevistas
con otros Agentes, aunque lo recomendable es no entrevistar más de un
Agente el mismo día en ese lugar.

Si se tiene posibilidad, es aconsejable que el Oficial Operativo compruebe


como el Agente acude a la casa, si observa las reglas de clandestinidad, si
alguien mantiene la observación sobre él. Una vez terminada la entrevista el
Oficial debe comprobar si hay o no personas comprobando la casa u otras
personas con las que no sería conveniente que se tropiece el Agente. Solo
después de haber hecho eso, le permite al Agente que abandone el local.

Las “Casas Secretas” y de “Contacto” deben comprobarse periódicamente.


Las que se utilizan por los Órganos de la Contrainteligencia durante largo
tiempo, hay que someterlas a una comprobación más minuciosa..

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