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boCONTRATOS

BOLILLA 1:
a) Contrato:

Definición: Según el artículo 957 del CCyC, el contrato es un acto jurídico mediante el cual dos o
más partes manifiestan su consentimiento para crear, regular, modificar, transferir o extinguir
relaciones jurídicas patrimoniales.

Según borda, esta definición dada por el código civil y comercial hace hincapié en dos aspectos
importantes:

1. El acuerdo de voluntades manifestado en el consentimiento tiende a reglar relaciones


jurídicas con contenido patrimonial
2. Recepta un contenido amplio del contrato, ya que abarca la creación de la relación jurídica
y también diferentes circunstancias que ella puede tener, tales como las modificaciones que
las partes pueden introducir con posterioridad a la celebración del contrato, la transferencia
a terceros de las obligaciones y derechos que nacen del contrato y hasta la extinción misma
del acuerdo de voluntades.

El Código de Vélez establecía en su art 1137 que hay contrato cuando varias personas se ponen de
acuerdo sobre una declaración de voluntad común, destinada a reglar sus derechos.

Naturaleza Jurídica: Por un lado, se puede afirmar que el contrato tiene la naturaleza de acto o
negocio jurídico (El art. 259 del CCyC define al acto jurídico como a aquel acto voluntario lícito que
tiene por fin inmediato la adquisición, modificación o extinción de relaciones o situaciones jurídicas).
El contrato, como acto o negocio jurídico, presenta las siguientes notas distintivas:

 Es bilateral: requiere el acuerdo de dos o más voluntades para su perfeccionamiento;


 Entre vivos: se celebra para producir efectos en vida de los contratantes;
 Patrimonial: ya que genera obligaciones cuyas prestaciones deben ser susceptibles de
valoración económica;
 y además es causado: la causa fin es un elemento estructural.

La doctrina, al interpretar el alcance de los contratos, se ha dividido en tres grandes direcciones:

 Tesis amplia: Esta posición entiende que, mediante el contrato, es posible crear, modificar,
transferir o extinguir cualquier clase de derechos patrimoniales, sean personales, reales o
intelectuales. En otras palabras, entiende por contrato al acto jurídico bilateral y patrimonial
 Tesis restrictiva: Esta posición considera que el contrato solo tiene aptitud para crear
obligaciones.
 Tesis intermedia: Según esta posición, el contrato no sólo puede crear, sino también
modificar, transferir o extinguir obligaciones, pero no otros derechos patrimoniales, como
los reales o intelectuales.

Función económica e importancia del contrato: En el ámbito de un sistema económico


capitalista, que existe en la mayor parte del mundo, dentro de la economía de mercado, el contrato
es el instrumento adecuado para el intercambio de bienes y servicios, por su carácter de primordial
fuente de obligaciones. De este modo, el contrato sirve como instrumento para satisfacer
necesidades humanos, cualesquiera que sean ellas.

Si bien la enorme proyección económica del contrato está condicionada, en buena medida, al
mantenimiento de la propiedad privada y de la organización económica que se asienta sobre ella, el
contrato tiene lugar aun dentro de un régimen socialista: Existen los contratos concluidos entre
empresas del Estado para la ejecución de planes económicos, y también los contratos celebrados
entre los particulares o entre un particular y un negocio del Estado, teniendo por objeto bienes de
consumo.

Convención, convención jurídica y contrato:

Cód. Civil en 1869 se discutió si cabria hacer una distinción entre la mera convención jurídica y el
contrato. Algunos autores sostenían que solo eran contratos aquellos actos jurídicos que tenían
por finalidad inmediata crear (o modificar) relaciones jurídicas. No lo serian y según esta forma de
encarar el tema merecían la calificación de convenciones, los actos jurídicos cuya finalidad
inmediata es extinguir la relación jurídica, tales como la transacción, la compensación voluntaria,
el pago por subrogación convencional o la dación en pago (llamado por el código derogado como
entrega de bienes).

El CCyC en el art 957 establece que contratos no son solo los actos jurídicos que tienen por
finalidad inmediata crear relaciones jurídicas patrimoniales de cualquier índole sino también
aquellos que persiguen su regulación, modificación, transferencia o extinción.

Convención: se entiende que es el acuerdo de voluntades sobre relaciones ajenas al campo del
derecho, por ej acordar para jugar al futbol.

Convención jurídica: se refiere a todo acuerdo de voluntades de carácter no patrimonial, pero que
goza de coacción jurídica, por ej ponerse de acuerdo en cómo se ejercerá la responsabilidad
parental.

El contrato dentro de la teoría de los hechos y actos jurídicos: El contrato es un acto


jurídico (acto jurídico: acto voluntario licito, que tiene por fin inmediato la adquisición,
modificación o extinción de relaciones o situaciones jurídicas). El contrato es un acto jurídico con
estas características específicas: Bilateral, acto entre vivos y de naturaleza patrimonial
Tutela constitucional: en el tema contractual, los tratados de derechos humanos más relevantes
son:

 La Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica):
proclama la necesidad de que los estados partes procuren lograr progresivamente la
efectividad de los derechos que se derivan de las normas económicas, contenidas en la
carta de la organización de los estados americanos;
 La Declaración Universal de Derechos Humanos: proclama que toda persona tiene derecho
a obtener la satisfacción de los derechos económicos indispensables a su dignidad y el
libre desarrollo de su personalidad.

Estos tratados, entre otros, tienen particular relevancia para el derecho de los contratos. Es que si
entre los objetivos se encuentra el desarrollo económico de las personas, una de las vías para
lograrlo sea el contrato, que resulta central para facilitar la circulación de bienes y servicios.

En la XIII Jornada Nacional de Derecho Civil (1991) concluyeron que el contrato como instrumento
para satisfacción de las necesidades del hombre debe conciliar la utilidad con la justicia, el
provecho con el intercambio equilibrado. Con otras palabras, el contrato no puede contradecir las
pautas fijadas por la CN y los tratados de DDHH en los que la República sea parte, y su
interpretación debe respetar el orden normativo que ella impone.

Orden público en los contratos

Se erige como un límite a la autonomía de la voluntad, que no puede avanzar pos sobre este
valladar impuesto por la ley.

Se distingue en la doctrina 3 tipos de orden público económico:

1. Orden público de dirección: dentro del cual los poderes públicos se proponen realizar
ciertos objetivos economómicos
2. Orden público de protección: tiende a resguardar a una de las partes, y particularmente el
equilibrio de las partes
3. Orden público de coordinación: mediante el cual el Estado cumple una función de arbitraje
imprescindible en la economía de mercado.

Distinción de la ley, el acto administrativo, la sentencia y la convención colectiva.

1. Con la ley: punto de contacto,ambos constituyen una regla jurídica a la cual deben
someterse las personas.
Diferencias: la ley es una regla general a la cual todas las personas están sometidas, se
establece en vista de un interés general o colectivo; el contrato es una regla solo
obligatoria para las partes que lo han firmado y sus sucesores; se contrae teniendo en
mira un interés individual. La ley no necesita prueba y difiere del contrato en sus efectos y
vigencia
2. Con el acto administrativo: los actos administrativos son emanados de un órgano adm en
el cumplimiento de sus funciones, tienen distintos tipos de naturaleza jurídica y, en
principio, no exigen el acuerdo de voluntades propio del contrato, aunque hayan actos
adm de naturaleza contractual. Los actos adm (normalmente) tienen efectos análogos a la
ley, siempre que se dicten ajustándose a ella y a la constitución.
Si se trata de actos adm de naturaleza contractual, hay que distinguir entre aquellos en los
cuales el estado actúa como poder público y aquellos otros en los que actúa como persona
de derecho privado. En primer caso, estado y concesionario no se encuentran en un plano
de igualdad: el estado mantiene la totalidad de sus prerrogativas inalienables; y en
cualquier momento puede ejercitar su derecho de intervención, exigir la mejora del
servicio, su ampliación o modificación. En el segundo caso, cuando el estado actúa en su
calidad de persona de derecho privado, los contratos que celebra están regidos
supletoriamente por el derecho civil, que lo que no esté regulado específicamente, se
aplicaran las normas de derecho común.
3. Con la sentencia: tanto la sentencia como el contrato definen y precisan los derechos de
las partes. Pero hay entre ellos profundas diferencias:
a) El contrato es un acuerdo de dos o más personas; la sentencia es la decisión del
órgano judicial y, por lo tanto, es un acto unilateral.
b) El contrato señala generalmente el comienzo de una relación jurídica entre dos o
más personas, la sentencia da la solución a las divergencias nacidas de ese
contrato
c) La sentencia tiene ejecutoriedad, puede pedirse su cumplimiento por medio de la
fuerza pública; el contrato carece de ella, para que tenga ejecutoriedad es preciso
que previamente los derechos que surgen de el hayan sido reconocidos por una
sentencia
d) La sentencia resuelve cuestiones patrimoniales y no patrimoniales, el contrato
solamente tiene como objeto el que sea susceptible de valoración económica.
4. Convención colectiva: es una forma de contrato normativo que vincula a las asociaciones
profesionales de empleadores con las asociaciones profesionales de trabajadores con
personería gremial, y rige respecto de todos los trabajadores de la actividad o de la
categoría de que se trate.

b) Los contratos en el código civil: Contratos paritarios, contratos celebrados por


adhesión a las clausulas generales predispuestas, contrato de consumo.

Contratos paritarios: es la forma clásica del contrato, aquella que supone una deliberación y
discusión de sus clausulas, hechas por personas que gozan de plena libertad para consentir o
disentir.

Todavía existen y normalmente son contratos entre empresas, absorbiendo la casi totalidad de la
realidad contractual los contratos entre desiguales.
Contratos celebrados por adhesión a las clausulas generales predispuestas: es aquel en el
cual una de las partes fija todas las condiciones (denominada parte predisponente) mientras que
la otra solo tiene la alternativa de rechazar o consentir (denominada parte adherente). Es el caso
de transporte celebrado con una empresa de servicio público, que fija el precio del pasaje, el
horario, las comodidades que se brindan al pasajero, etc.; este solo puede adquirir o no el boleto.
La mayor parte de la doctrina concuerda en que si bien una parte es quien decide todo, la
aceptación por parte de la otra, configura el acuerdo de voluntades.

Naturaleza jurídica:

- Tesis normativa: sostiene que se trata de figuras absorbidas por la normativa imperativa
que las rige, siendo de obligatoriedad indisctubile su incorporación al contenido del
contrato, supliendo la ley lagunas enteras del tráfico marcantil, lo que las asemeja a una
ley. Ej: contrato de seguro, la ley vigente suministra el contenido uniforme de cada riesgo
posible, no pudiendo las partes apartarse de ella.
- Tesis contractualista: sostiene que el hecho de las condiciones generales hayan sido
creadas por una sola de las partes no excluye su carácter contractual, siendo la adhesión
una aceptación que perfecciona el consentimiento, generado voluntaria y libremente.

Contrato de consumo: El CCyC lo define en su art 1093 “contrato de consumo es el celebrado


entre un consumidor o usuario final con una persona humana o jurídica que actúe profesional u
ocasionalmente o con una empresa productora de bienes o prestadora de servicios, pública o
privada, que tenga por objeto la adquisición, uso o goce de los bienes o servicios por parte de los
consumidores o usuarios, para su uso privado, familiar o social”.

Agrega el código en su siguiente artículo que las normas que regulan las relaciones de consumo
deben ser aplicadas e interpretadas conforme al principio de protección del consumidor y el de
acceso al consumo sustentable.

Lorenzetti destaca como nota característica subjetiva del contrato de consumo la existencia de una
finalidad, el consumo final.

Contratos conexos: Art. 1073: “hay conexidad cuando dos o más contratos autónomos se hallan
vinculados entre sí por una finalidad económica previamente establecida, de modo que uno de ellos
ha sido determinante del otro para el logro del resultado perseguido. Esta finalidad puede ser
establecida por ley, expresamente pactada, o derivada de la interpretación”.

La conexidad entre contratos puede ser unilateral o bilateral; también puede ser necesaria, cuando
surge de la naturaleza de los contratos unidos; voluntaria, cuando es producto del ejercicio de la
autonomía de las partes; genética, cuando el vínculo entre los negocios existe desde el momento
de la celebración; y funcional, cuando la ligaz
Interpretación: art. 1074 “los contratos conexos deben ser interpretados los unos por medios de los
otros. Atribuyéndole el sentido apropiado que surge del grupo de contratos, su función económica
y el resultado perseguido.”

Efectos: art 1075 “según las circunstancias, probada la conexidad, un contratante puede poner las
excepciones de incumplimiento, total, parcial o defectuoso, aun frente a la inejecución de
obligaciones ajenas a su contrato. Atendiendo al principio de la conversación, la misma regla se
aplica cuando la extinción de uno de los contratos produce la frustración de la finalidad económica
social.”

Ej: en el negocio de tarjeta de crédito se advierte que existe un negocio único y una finalidad
económico-social compartidad, pero hay pluralidad de relaciones contractuales. Hay un contrato
principal entre la empresa emisora y el titular de la tarjeta, que habilita a este a usarla; el que une a
la empresa emisora con los comercios adheridos; el que se celebra entre el comercio adherido y el
titular de la tarjeta cuando este realiza la compra; y el que se celebra entre la empresa emisora y
alguna entidad financiera o bancaria que la respalde.

Hípercentros de consumo

Caso de un shopping center: Es una especie de ciudad ideal, se puede caminar con seguridad, todo
esta limpio, ordenado, el aire es climatizado. El shopping es una fabrica de personas término
medio. La concepción del shopping como ciudad y la igualdad de los transeúntes en base a un
consumo basado en grandes simbolos es la clave del éxito que ha tenido esta forma de
comercialización.

Hay una planificación de costos, ya que de la misma manera en que la ciudad necesita servicios
públicos para los ciudadanos, el shopping requiere de servicios para su funcionamiento, y la
empresa trata de conseguirlos al menor costo posible, invocando el volumen que necesita y
solicitando rebajas a sus proveedores. También pone normas de conducta en el uso por parte de
los locatarios y los transeúntes.

Toda esta planificación esta traducida en el reglamento interno que resulta de aplicación
obligatoria a todos los locatarios, y en unas normas generales de urbanización, aplicables a los
transeúntes.

El shopping como centro de distribución: Se ha indicado que en un shopping se produce un tráfico


de entre 200.000 y 1.000.000 de personas mensuales. Este es el aspecto comercial buscado: una
circulación masiva de personas. Donde hay mucha gente, hay consumo. Se trata de romper la
relación de necesidad y demanda, para instaurar un nexo entre la oferta y el consumo.

En este sentido, las ventajas del sistema son notables, todos los servicios interactúan entre si,
produciendo un proceso de retroalimentación para el consumo: si una va al cine, a almorzar o a
jugar, consume una bebida o compre una prenda de vestir.
El shopping como empresa común: red de contratos conexos: En el shopping hay una empresa
común. El propietario es, además, un empresario sofisticado. Hace un estudio completo sobre los
alrededores, estudia la zona, diseña los estacionamientos y lugares internos, etc. No se trata de un
propietario de un edificio con mucho espacio, ni de una locación en la que cada locatario elige que
local le gusta mas. Todos los lugares están planificados de antemano según una óptica
empresarial, existiendo estudios de mercado, de costos, etc.

Los locatarios no son personas que persiguen simplemente el uso y goce de una cosa. Para cada
uno de estos locatarios su vida comercial será bien diferente si pone su negocio fuera o dentro del
shopping, o si este se encuentra en la entrada, en el medio, en el primer piso o en el subsuelo.

Si bien se tratan de contratos de locación de inmuebles, en los que se cede el uso y goce a cambio
de un precio, hay además una publicidad común, horarios, riesgos y una serie de elementos
compartidos.

Calificación del contrato: nada impide que un emprendimiento como el shopping center se haga
bajo una forma societaria, en la que todos los participantes aporten dinero para su instalación y
funcionamiento, compartiendo las ganancias y las pérdidas. Tampoco hay obstáculo para que se
utilicen desechos reales, como la transferencia del dominio a cada uno de los negocios que ocupan
el edificio, o el usufructo.

Sin embargo, la relación más frecuente y controvertida, es aquella en que hay una empresa
organizadora y multiplicidad de negocios que se vinculan contractualmente con ella para instalarse
dentro del establecimiento.

Elementos:

1. Cesión temporaria del uso y goce: entre la empresa dueña del emprendimiento y las
empresas que instalan en el, se celebra un contrato de locación. De tal modo puede
examinarse la relación jurídica individual entre cada uno de los negocios y la empresa
organizadora, caracterizándola como una multiplicidad de contratos de locación. Para
realización esta calificación del contrato se tiene en cuenta que el objeto de la relación
jurídica es la cesión onerosa del uso y goce de una cosa con finalidad comercial.
2. Precio: existe una distorsión en el precio, que se establece sobre la base de un porcentaje
respecto de la facturación mensual que realiza el locatario. De modo que la sola presencia
de un precio basado en un porcentaje de las ganancias no modifica al vínculo,
manteniéndose como contrato de locación.
3. Servicios: la empresa organizadora presta servicios (limpieza, iluminación, seguridad, etc.).
Estos elementos pueden ser calificados como un contrato de servicios que celebra la
empresa organizadora con los negocios que integran el shopping. Si contemplamos ambas
relaciones jurídicas, una locación de cosas y una de servicios, podríamos afirmar que hay
contrato mixto.
4. Aventura común: la participación en gastos de publicidad no se subsume en la locación de
cosas o de servicios, y responde a la necesidad de un emprendimiento común que necesita
hacerse conocer al publico. La realización de campañas de rebajas de precios, los horarios
extendidos, la apertura en días feriados, son todas obligaciones que tampoco se ajustan a
los tipos mencionados. La aceptación por parte del locatario de una planificación del
ordenamiento interno del shopping no es un un elemento menor. Existen algunos
negocios de marcas muy atrayentes, y si el locatario acepta la ubicación estratégica de
ellas es porque obtiene un beneficio económico indirecto. Ese beneficio no es un servicio
ni consiste en una obligación positiva de obrar a cargo del organizador. Lo mismo ocurre
con las zonas de esparcimiento, los bares, los cines, el estacionamiento, que son
elementos de gran importancia para la valorización del local alquilado, pero que no
constituyen propiamente servicios que el organizador presta al locatario. Estos elementos
podrían llevar a la conclusión de que se trata de una aventura común y que ese dato
autoriza a pensar en la existencia de una sociedad o de un vínculo asociativo.

Contratos de locación mixtos y conexos: puede calificarse a este vinculo como un contrato mixto y
conexo. Es mixto porque sobre la base de un contrato de locación, concurren elementos de un
contrato de servicios. De tal modo, la perspectiva contractual nos muestra contratos de locación
atípicos mixtos. Es conexo, porque los contratos están unidos entre si por un elemento asociativo
que es el interés común, que no alcanza a fundar la existencia de una sociedad pero que tiene
virtualidad para que surja para las partes una serie de obligaciones sistemáticas.

De esta calificación como contratos de locación atípicos mixtos en un sistema conexo surgen
importantes consecuencias en el plano obligacional:

1. Hay obigaciones que surgen de la locación: el pago del precio, la cesion del uso y goce.
2. Hay obligaciones que nacen del contrato de servicios: prestarlos contra el pago de un
precio
3. Hay obligaciones que surgen de la conexidad: son obligaciones sistematicas que
encuentran su base en el mantenimiento y desarrollo del sistema, como el pago de gastos
de publicidad o los horarios extendidos.

Círculos de ahorro para fines determinados:

Mediante el ahorro previo, un sujeto (suscriptor) paga una cantidad de dinero en cuotas
anticipadas contra la entrega de un bien mueble o inmueble, la que tendrá lugar en el futura una
vez que cumpla con las condiciones de adjudicación pactadas, de sorteo o licitación. Este contrato
de ahorro produce ventajas si se encuentra enlazado a un grupo amplio, que permita reunir una
masa de dinero relevante, conforme a las relaciones técnico-financieras que determina la
organizadora.

Es una técnica instrumental que se utiliza para fines diversos: comercializar bienes o captar el
ahorro, desde el punto de vista del empresario; comprar o ahorrar desde el interés del adherente.
c) Clasificación de los contratos en el CCyC:

 Contratos unilaterales y bilaterales (art. 966 CCyC y art. 1138 CV): Los contratos son
unilaterales cuando una de las partes se obliga hacia la otra sin que ésta quede obligada
(solo hacen nacer obligaciones para una sola de las partes intervinientes al momento de su
celebración). En cambio, los contratos son bilaterales cuando las partes se obligan
recíprocamente la una hacia la otra. Las normas de los contratos bilaterales se aplican
supletoriamente a los contratos plurilaterales (efecto de las plurilaterales). Efectos:
- Resolución: en los contratos con prestaciones recíprocas se puede aplicar el pacto comisorio
o cláusula resolutoria.
- Suspensión de cumplimiento: se da solo en los contratos bilaterales y las partes deben estar
obligadas a cumplir simultáneamente, pudiendo una de ellas suspender el cumplimiento
hasta que la otra cumpla o se ofrezca a cumplir
- Revisión: se aplica solo en contratos bilaterales como regla general
- Caducidad del plazo: aplicable solo a contratos bilaterales
- Lesión: rige únicamente en actos jurídicos bilaterales y onerosos
- Imposibilidad del pago: en los bilaterales se debe restituir recíprocamente lo entregado,
cuando la prestación se vuelve física o legalmente imposible para el deudor
- Prevención del daño por incumplimiento: en los bilaterales si una parte ha sufrido un
menoscabo significativo en su capacidad de cumplir o en su solvencia, la otra parte puede
suspender su propio cumplimiento debido a la grave amenaza de daño producto del
detrimento que ha recaído en la primera. En los unilaterales no es posible ejercer esta
acción, simplemente se aplicaría el derecho de retención.
 Contratos plurilaterales: aquellos en que intervienen más de dos partes, ej: contratos
asociativos, cesión de deudas, fideicomiso. Clases:
- Pluralidad ocasional: el contrato funciona con dos partes. Puede ocurrir que en algún
momento se sume una 3ra o 4ta, pero ello no influye en los efectos, ya que, todos los
problemas pueden ser solucionados si se aplican las reglas del acto jurídico bilateral con
obligaciones recíprocas para ambas partes.
- Pluralidad estructural: el contrato necesita por lo menos 3 partes y no puede funcionar con
2, esto es así porque hace a su estructura, las partes tienen posiciones jurídicas diferentes
y por lo tanto acciones diferentes y no hay una función común.
- Pluralidad funcional: necesita por lo menos 3 partes y no puede funcionar con 2 pero a
diferencia del anterior las partes tienen la misma posición jurídica y hay una función común.
 Contratos a título oneroso y a título gratuito (art. 967 CCyC y art. 1139 CV): Los
contratos son a título oneroso cuando las ventajas que procuran a una de las partes le son
concedidas por una prestación que ella ha hecho o se obliga a hacer a la otra. En cambio,
los contratos son a título gratuito cuando aseguran a uno o a otro de los contratantes alguna
ventaja, independiente de toda prestación a su cargo.
El elemento característico que diferencia a un contrato oneroso del gratuito es la causa de
la atribución patrimonal. En los onerosos, una de las partes ejecuta una acción (de dar, de
hacer) esperando recibir una retribución de otra; en cambio, en los gratuitos uno hace o da
por simple liberalidad. Efectos:
- Garantías de saneamiento: están obligados el transmitente de bienes a título oneroso,
quien ha dividido bienes con otros, sus respectivos antecesores que han efectuado la
correspondiente transferencia a título oneroso.
- Acción revocatoria: cuando es título gratuito, aunque sea de buena fe, es suficiente con que
el acto haya causado o agravado la insolvencia del deudor. Cuando el acto es oneroso solo
procede si el deudor actúa con intención fraudulenta, y el adquiriente es cómplice del
fraude, dicha complicidad se presume si al momento de contratar conocía el estado de
insolvencia del deudor.
- Lesión e imprevisión: ambos institutos están destinados a combatir los desequilibrios
contractuales, son operativos en los contratos onerosos.
- Interpretación: si el contrato es a título gratuito se debe interpretar el sentido menos
gravoso para el obligado, y si es a título oneroso, en el sentido que produzca un ajuste
equitativo de los intereses de las partes.
- Heredero aparante: son válidos los actos de disposición a título oneroso en favor de terceros
que ignoran la existencia de herederos de mejor o igual derecho que el heredero aparante,
o que los derechos están judicialmente controvertidos.
- Adquisición de derechos por parte del subadquiriente de buena fue en un acto a título
oneroso: todos los derechos reales o personales transmitidos a terceros sobre un inmueble
o mueble registrable, por una persona que ha resultado adquiriente en virtud de un acto
nulo, quedan sin ningún valor, y pueden ser reclamados directamente del tercero, excepto
contra el subadquiriente de derechos reales o personales de buena fe y a título oneroso.
Los subadquirientes no pueden ampararse en su buena fue y título oneroso si el acto se ha
realizado sin intervención del titular del derecho.
 Contratos conmutativos y aleatorios (art. 967 CCyC): Los contratos a título oneroso
son conmutativos cuando las ventajas para todos los contratantes son ciertas; mientras
que son aleatorios cuando las ventajas o las pérdidas, para uno de ellos o para todos,
dependen de un acontecimiento incierto.
 Contratos formales y de formas libres (art. 969 CCyC): Los contratos formales son
aquellos que requieren de cierta formalidad, conforme a la ley o a la voluntad de las partes.
A su vez, los contratos formales pueden dividirse en contratos de solemnidad absoluta
(aquellos para los cuales la ley exige una forma para su validez, siendo nulos si dicha
solemnidad no ha sido satisfecha) y de solemnidad relativa (aquellos en que el
cumplimiento de la formalidad no es exigido bajo sanción de nulidad; pero tampoco quedan
concluidos como tales hasta que no sea cumplida la formalidad prevista, pero valen como
contratos en los que las partes se obligan a cumplirla). Los contratos de formas libres son
aquellos cuya celebración no está sujeta a formalidad alguna.
 Contratos nominados e innominados (art. 970 C.C y C): Los contratos nominados son
aquellos regulados especialmente por las leyes. Los contratos innominados son aquellos
que no tienen regulación por parte de la ley, y que están regidos, en el siguiente orden,
por:
1. La voluntad de las partes;
2. Las normas generales sobre contratos y obligaciones;
3. Los usos y prácticas del lugar de su celebración;
4. Las disposiciones correspondientes a los contratos nominados afines que son
compatibles y se adecuan a su finalidad.
 Contratos de ejecución inmediata y de ejecución diferida: Los contratos son de
ejecución inmediata cuando desencadenan sus efectos al momento de su celebración, sin
solución de continuidad. En cambio, son de ejecución diferida cuando sus efectos no se
producen al momento de su celebración, sino en una fecha posterior.
 Contratos de ejecución instantánea y de tracto sucesivo: Los contratos son de
ejecución inmediata cuando se cumplen de una sola vez, de un modo único, ya sea de
manera inmediata o diferida. En cambio, son de tracto sucesivo cuando sus efectos se
prolongan en el tiempo y las prestaciones a cargo de una o ambas partes son de carácter
continuado o repetido.
 Contratos principales y accesorios: Son contratos principales aquellos cuya existencia
no depende jurídicamente de ningún otro contrato. Son accesorios cuando dependen
jurídicamente de otro, que es la razón de su existencia.
 Contratos de disposición y de administración: Los contratos de disposición son
aquellos que disminuyen o modifican sustancialmente el patrimonio de la parte, o
compromete su provenir por largo tiempo. Son de administración aquellos que tienen por
finalidad hacer producir los efectos que normalmente pueden obtenerse de ellos,
respetando su naturaleza y destino.
 Contratos constitutivos y declarativos: Los contratos constitutivos son aquellos que
crean situaciones jurídicas nuevas y, por ende, producen sus efectos desde que se realizan
y para el futuro. Los contratos declarativos presuponen, en cambio, la existencia de una
situación o relación jurídica anterior que de algún modo reconocen o definen, no solo en
adelante, sino también hacia atrás.

b. otras clasificaciones: según la función social y económica, según la protección al orden


público, según la cooperación de las partes, según la duración.

Según su función social y económica:

 Contratos de cambio: Son aquellos contratos, a título oneroso, cuya finalidad es el


intercambio, o sea, la circulación de bienes (Ej.: Compraventa).
 Contratos de préstamo: Son aquellos contratos que sirven de instrumento preparatorio
para que aparezca el crédito (Ej.: Mutuo oneroso, comodato, renta vitalicia).
 Contratos de garantía: Son aquellos que brindan seguridad respecto del cumplimiento de
otro principal (Fianza, hipoteca, prenda).
 Contratos de custodia: Son aquellos que cumplen una función de guarda y conservación de
una cosa ajena (Depósito, garaje).
 Contratos de colaboración o cooperación: Son aquellos cuyo fin es obtener un resultado o
realizar una gestión, conseguir una utilidad y partirla entre las partes (mandato, comisión,
sociedad).
 Contratos de previsión: Son aquellos destinados a la prevención de riesgos (Seguro y renta
vitalicia).
 Contratos de recreación: Son aquellos que tienen una función de esparcimiento o
entretenimiento (juego o azar).

Según la protección al orden publico:

Según la cooperación de las partes:

Según la duración: contrato instantáneo y de larga duración:

El modelo contractual clásico está basado en las reglas que nacen de una etapa (consentimiento)
en la cual las partes negocian y fijan reglas de modo definitivo. Pero cuando la relación se vuelve
más duradera, el juego cambia cuando es sometido a una repetición temporalmente dilatada. Las
características de este contrato a largo plazo son:

 Consentimiento instantáneo y progresivo


 Reciprocidad estática y dinámica
 Objeto material y desmaterialización del objeto

UNIDAD 2: ELEMENTOS, PRESUPUESTOS Y CIRCUNSTANCIAS DEL


CONTRATO.
1. a. los elementos de los contratos. Distinción tradicional: elementos esenciales, naturales y
accidentales.

La doctrina clásica distingue 3 clases de elementos de contratos: esenciales, naturales y


accidentales:

 Esenciales: son aquellos sin los cuales el contrato no puede existir. Ellos son:
a) el consentimiento (acuerdo que resulta de las manifestaciones intercambiadas por
las partes),
b) la causa (finalidad perseguida por las partes y que es determinante de su
voluntad)
c) y el objeto (prestación prometida por las partes).
 Naturales: consecuencias que se siguen del negocio, aun ante el silencio de las partes; así,
la gratuidad es un elemento natural de la donación; las garantías por evicción y por vicios
redhibitorios, un elemento natural de los contratos a titulo oneroso.
 Accidentales: es un elemento excepcional del contrato, no previsto por el legislador, el
cual no debe ser contrario a la ley, la moral y las buenas costumbres, por ej.: condición,
plazo y cargo.

b. distinción moderna: elementos y presupuestos de validez.

c. teorías modernas: dinámica y sistemáticas.

2. a. consentimiento: concepto y modos de manifestación.

El consentimiento es un elemento del contrato que puede ser definido como la declaración de
voluntad común, que surge de una oferta y de una aceptación, con aptitud para producir
obligaciones. Es fuente de obligación cuando hay dos declaraciones de voluntad que atraves de
oferta y aceptación, coinciden en una declaración en común.

Medios de manifestación del conocimiento: el consentimiento es una declaración de voluntad, por


lo que resultan aplicables las normas, que regulan las manifestaciones de voluntad. La voluntad
puede manifestarse de manera expresa (cuando se exterioriza de manera oral, escrito, signos
inequívocos, o ejecución de un hecho material) o tacita (cuando resulta de datos que permitan
conocer la voluntad con certidumbre, siempre que la ley no exija una manifestación expresa).
Incluso en algunos casos puede llegar a entenderse al silencio como una manifestación de
voluntad (cuando se opone el silencio a un acto o una interrogación existiendo el deber de
expedirse).

b. los términos del consentimiento: oferta y aceptación. Concepto y requisitos.

Oferta, concepto: es una proposición unilateral que realiza una parte a otra en razón de celebrar
un contrato. Según el código civil y comercial, es la manifestación dirigida a persona determinada
o determinable, con la intención de obligarse y con las precisiones necesarias para establecer los
efectos que debe producir de ser aceptada. Es una declaración contractual, no un acto
preparatorio. Solo hay oferta cuando el contrato puede quedar cerrado con la sola aceptación de
la otra parte.

Requisitos de la oferta: según el art. 972, para que la oferta sea válida es necesario:
 Que se dirija a persona o personas determinadas o determinables
 Que tenga por objeto un contrato determinado, con todos los antecedentes constitutivos
de los contratos. O como dice el código, que tenga las precisiones necesarias para
establecer los efectos que debe producir de ser aceptada. Es decir, la propuesta debe
contener todos los elementos necesarios como para que una aceptación permita tener
por concluido el contrato.
 Que exista intención de obligarse: todo acto jurídico (como la oferta) requiere que sea
ejecutado con intención para ser válido.

Aceptación concepto: hay aceptación cuando existe una declaración o acto del destinatario que
revela conformidad con la oferta. La aceptación consuma el acuerdo de voluntades. Debe referirse
a todos los puntos de la propuesta; basta el desacuerdo con uno solo de ellos, aunque sea
secundario, para que el contrato quede frustrado.

Requisitos:

 Que sea lisa y llana: que no esté condicionada ni contenga modificaciones de la oferta.
 Oportuna: no lo será si ha vencido el plazo de la oferta

c. tratativas contractuales: comienza con las conversaciones que van preparando el terreno para
hacer la propuesta. Durante todo este periodo las partes deben:

 Obrar de buena fe
 Mantener en secreto de todo lo que sea confidencial
 Dar la información necesaria
 Mantener y conservar los elementos materiales que resulten el substrato del futuro
acuerdo
 No pueden abandonar los tratos de manera abrupta y sin causa

También puede hablarse tratativas preliminares avanzadas, en las que se hace hincapié en la
necesidad de no romper sin justificación alguna y de manera injustificada la negociación que ha
permitido generar en las pares una confianza cierta de que el negocio se formalizara.

d. consentimiento entre presentes y ausentes:

art. 974: la oferta hecha a una persona presente o la formulada por un medio de comunicación
instantáneo, sin fijación de plazo, solo puede ser aceptada inmediatamente. De esta norma
sacamos 2 conclusiones:

 Que la situación prevista incluye los contratos entre personas presentes (en sentido
estricto), y también cuando se recurre a algún medio de comunicación que permite el
contacto instantáneo entre los tratantes (ausentes), es decir comunicaciones telefónicas o
aquellas en las que se utilice cualquier sistema que permita respuesta inmediata
 La única excepción a la obligatoriedad de expedirse de inmediato en una oferta entre
presentes es que la propia oferta fije plazos para la aceptación. Si así ocurriere deberá
regirse por las reglas de la contratación entre ausentes.

e. acuerdo parcial:

Art. 982: los acuerdos parciales de las partes concluyen el contrato si todas ellas, con la formalidad
que en su acto corresponda, expresan su consentimiento sobre los elementos esenciales
particulares. En tal situación el contrato queda integrado conforma a las reglas del capítulo 1. En la
duda, el contrato se tiene por no concluido. No se considera acuerdo parcial la extensión de un
borrador respecto de alguno de los elementos o de todos ellos.

La disposición debe ser leída junto con el art. 964 (cap. 1) que regula la integración del contrato y
establece que el contenido del contrato se integra con:

 Las normas indisponibles, que se aplican en sustitución de las clausulas incompatibles con
ellas.
 Las normas supletorias.
 Los usos y prácticas del lugar de celebración, en cuento sea aplicables porque hayan sido
declarados obligatorio por las partes o porque sean ampliamente conocidos y
regularmente observados en el ámbito en que se celebra el contrato.

f. contratos preliminares: es el que contiene un acuerdo sobre los elementos esenciales


particulares que identifiquen el contrato futuro definitivo. Surge del concepto dado de que las
partes han alcanzado un acuerdo sobre las bases esenciales de la negociación, pero falta
conformidad sobre las clausulas secundarias u ocurre que ellas necesitan un estudio más profundo
de todas las implicancias del contrato para dar el consentimiento definitivo.

Si las partes firmaron un contrato preliminar, es porque han dejado atrás las tratativas
preliminares y han avanzado sobre la etapa contractual.

g. contratos celebrados por adhesión a clausulas generales predispuestas. Requisitos.

Art 985 requisitos:

 Deben ser comprensibles y auto suficientes


 La redacción debe ser clara, completa y fácilmente legible.

se tienen por no convenidas aquellas que efectúan un reenvió a textos o documentos que no se
facilitan a la contraparte del predisponente, previa o simultánea a la celebración del contrato. La
presente disposición es aplicable a la contratación telefónica, electrónica o similares.
h. clausulas particulares: son aquellas que negocias individualmente y que amplían, limitan,
suprimen o interpretan una clausula general. La cláusula manuscrita o mecanografiada se estipula
al tiempo de la conclusión del contrato al tiempo de la celebración del contrato, mientras que la
cláusula predispuesta general viene previamente formulada sin consideración al negocio concreto.

Art. 986: las clausulas particulares son aquellas que, negociadas individualmente, amplían, limitan,
suprimen o interpretan una clausula general. En caso de incompatibilidad de cláusulas generales o
particulares prevalecen estas últimas.

3. a. incapacidad e inhabilidad para contratar: no pueden contratar, en interés propio o ajeno,


según sea el caso, los que están impedido para hacerlo conforme a las disposiciones especiales, los
contratos cuya celebración está prohibida a determinados sujetos, tampoco pueden ser otorgados
por interpósita persona.

b. efectos de la validez del contrato:

c. inhabilidades especiales. Si bien la regla es que la persona es plenamente capaz, no siempre


puede contratar con cualquier otra persona o sobre determinados objetos. Como por ejemplo:

 La ley establece dos regímenes posibles para gobernar el sistema patrimonial del
matrimonio: el de comunidad y el de separación de bienes. En este último, cada uno de los
cónyuges conserva la libre administración y disposición de sus bienes personales. En el
primero (de carácter supletorio), se diferencian los bienes según su origen, en propios y
gananciales y se imponen normas sobre la administración y disposición de ellos,
debiéndose dividir, por partes iguales, la masa de bienes gananciales cuando se extinga la
comunidad. Dada esta explicación, debemos decir que los cónyuges que estén bajo el
régimen de comunidad, no pueden contratar en interés propio, entre sí.

 Los padres no pueden contratar con sus hijos menores, a menos que se trate de una
donación pura y simple hecha por el padre a favor del hijo menor. No pueden comprar
por si ni por persona intermedia bienes de sus hijos, ni constituirse en cesionarios de
créditos, derechos o acciones contra su hijo, ni hacer participación privada con su hijo de
la herencia del progenitor prefallecido, ni de la herencia en que sean con el coherederos o
colegatarios, ni obligar a su hijo como fiadores de ellos o de terceros.

 Los tutores y curadores no pueden contratar con sus pupilos. Se aplican las reglas
referidas a los actos prohibidos a los padres respecto de sus hijos menores de edad.
 El albacea, también llamado ejecutador testamentario, que no es heredero, no puede
celebrar contratos de compraventa sobre los bienes de las testamentarias que estén a su
cargo.

 No pueden contratar como en interés propio, los jueces, funcionarios y auxiliares de


justicia, árbitros y mediadores, y sus auxiliares, respecto de bienes relacionados con los
procesos que intervienen o han intervenido. La prohibición obliga a declarar la nulidad
absoluta del acto celebrado violando la norma, siendo imposible de sanearse.

 No pueden contratar (en interés propio) los abogados y procuradores, respecto de bienes
litigiosos en procesos en los que intervienen o han intervenido.

 No pueden contratar, en interés propio, los funcionarios públicos respecto de bienes de


cuya adm o enajenación estén o han estado encargados.

 Tampoco pueden quienes estén impedidos para hacerlo conforme a disposiciones


especiales, como:

I. Director de sociedad anónima: puede celebrar contrato con esa sociedad cuando
se tratase de contratos que sean propios de la actividad societaria y en las
condiciones de mercado. Pero si estos contratos no son celebrados de manera
indicada o no se contare con la aprobación de la asamblea, serán nulos.
II. Funcionarios del servicio exterior: no pueden ejercer el comercio ni la profesión, ni
pueden gestionar intereses propios o ajenos en el exterior, ni entregar directorios,
ni actuar por firmas comerciales, empresas o intereses extranjeros
III. Representantes voluntarios: no pueden, en representación de otro, efectuar
contratos consigo mismo, sea por cuenta propia o de un tercero, sin la
autorización del representado (salvo excepciones).
IV. Tutores o curadores no pueden recibir donaciones de sus pupilos, antes de rendir
cuentas y pagar lo adeudado

4. a. objeto. Concepto: prestación prometida por las partes, el bien o hecho sobre los que recae la
obligación contraída, es un elemento esencial del contrato, y es estudiado tanto en el libro III,
título II y cap. 5, como por el libro I, título IV capítulo 5.

Requisitos:

 Determinado o determinable: un objeto es determinable (según el art 1005) cuando se


establecen los criterios suficientes para su individualización, para su determinación. Un
objeto es determinado, cuando solo se precisa su especie o género, según sea el caso,
aunque no lo esté en su cantidad, si este puede ser determinado
 Posibilidad: nadie puede ser obligado a pagar o hacer algo imposible. Pero para que anule
el contrato debe ser una imposibilidad absoluta, tanto física o jurídica. El art 280, el acto
jurídico sujeto a plazo o a condición suspensiva es válido, aunque el objeto haya sido
inicialmente imposible, si deviene posible antes del vencimiento del plazo o del
cumplimiento de la condición.
 Licitud: todo objeto contrario a la ley anula la obligación. La ilicitud puede nacer de que el
hecho previsto esté prohibido o que se trate de un bien que, por un motivo especial, la ley
también lo prohíbe.
 Patrimonialidad: según el art. 1003 el objeto debe ser susceptible de valoración
económica y corresponder a un interés de las partes, aun cuando este no sea patrimonial.

b. posibilidad

Este requisito comprende dos aspectos:

 Física: se refiere a que la prestación debe ser materialmente posible de acuerdo al


standard de lo razonable. Las partes pueden pactar sobre el objeto de una gran dificultad
 Jurídica: en este caso hay una limitación jurídica, como ocurre con una cosa que no esta en
el comercio y es objeto de un contrato.

La imposibilidad física o jurídica se juzga al momento de la celebración, porque es un elemento del


objeto juzgado como elemento de la estructura.

También se distingue entre la imposibilidad absoluta y relativa.

La primera toma en cuenta al sujeto del negocio, se considera que es imposible cuando nadie
puede llevarlo a cabo; en cambio, un hecho relativamente imposible cuando la imposibilidad la
sufre el sujeto del negocio. La distinción importa a la hora de establecer la responsabilidad por el
incumplimiento frente a quien ignoraba la existencia de esta imposibilidad relativa al obligado.

También existe imposibilidad total o parcial respecto de la existencia de la cosa o la realización del
hecho. De ocurrir la primera, el contrato será pasible de nulidad.

c. licitud

d. determinación

e. patrimonialidad

f. casos especiales: bienes ajenos, inexistentes, futuros, litigiosos y sujetos a gravamen.

Bienes ajenos: como principio general, pueden ser objeto de contratos. La aplicación de esta regla
es particularmente clara en el supuesto de que el contrato no signifique un compromiso de
transferir el dominio; ningún inconveniente hay en que la cosa ajena pueda ser objeto de contrato
de locación, de depósito, de comodato, etc. Cuando el contrato sobre bien ajeno incluye una
promesa de entregarlo, hay distintos supuestos:

 El que ha prometido la entrega del bien no ha garantizado el éxito de su promesa, solo


está obligado a emplear los medios necesarios para que la prestación se realice, deberá
satisfacer todos los daños que cause si es que el bien no se entrega por su culpa.
Obligación de medio.
 El que ha prometido la entrega del bien ajeno, ha garantizado también su entrega
efectiva; en tal caso debe reparar los daños causados si la cosa no se entrega, aunque no
mediara culpa de su parte. Obligación de resultado.
 La norma ha omitido una tercera hipótesis: que se haya prometido que el dueño del bien
acepte entregarlo. Como se ve, no se ha garantizado la efectividad entrega del bien, sino
que el dueño asumiría el compromiso de entregarlo. Obligación de resultado
 Puede ocurrir que el que prometió la entrega hubiera ocultado que el bien no le
pertenecía. En tal caso, si no logra hacerse de el lícitamente para poder entregarlo es
responsable de los daños causados.

Bienes futuros: la promesa de transmitir los bienes futuros está subordinada a la condición de que
lleguen a existir, excepto que se trate de contratos aleatorios. Los supuestos contemplados en la
ley son 2:

 Contrata sobre una cosa que no existe, pero se espera que existirá. Por ej.: la compra de
una cosecha antes de que este en estado de recogerse. Si la cosa termina por no existir, el
contrato es nulo.
 Se contrata sobre una cosa que todavía no existe, asumiendo el comprador el riesgo de
que no llegue a existir nunca, el contrato tiene carácter aleatorio y es por tanto valida,
aunque la cosa no llegue a existir.

Bienes litigiosos o sujetos a gravámenes o medidas cautelares: pueden ser objeto de los
contratos los bienes que sean discutidos en un litigio o juicio. También pueden serlo los bienes
sujetos a un gravamen, como ocurre con la cosa que ha sido dada en prenda, o en una anticresis, o
hipoteca. Incluso, pueden ser objeto de un contrato las cosas que estén afectadas por una medida
cautelar, como sucede cuando han sido embargadas. Esta posibilidad de que sean objeto de un
contrato no implica desconocer los derechos del tercero que puede quedar afectado por tal
contrato; por el contrario, la norma citada prevé el resguardo de sus derechos, lo que implica que
debe ser satisfecho por los contratantes el perjuicio que le pueda resultar. Ahora, si se hace el
contrato ocultando la medida cautelar o del gravamen, la parte prometió su entrega, que
claramente ha actuado mala fe, debe reparar los daños causados a la otra, si esta ha obrado de
buena fe.
g. contratos de larga duración: art. 1011 “en los contratos de larga duración el tiempo es esencial
para el cumplimiento del objeto, de modo que se produzcan los efectos queridos por las partes o se
satisfaga la necesidad que las indujo a contratar. Las partes deben ejercitar sus derechos conforme
con un deber de colaboración, respetando la reciprocidad de las obligaciones del contrato,
considerada en relación a la duración total. La parte que decide la rescisión debe dar a la otra la
oportunidad razonable de renegociar de buena fe, sin incurrir en ejercicio abusivo de los derechos.”
Este fenómeno es muy importante en la economía actual: los servicios públicos privatizados, los
colegios privados, los servicios de salud, los seguros, el contrato de trabajo y las locaciones de
inmuebles son vínculos temporalmente dilatados. En los contratos de larga duración, el tiempo es
esencial para el cumplimiento, y no accesorio, como ocurre en la ejecución diferida.
Características:

 Existe una reciprocidad dinámica: los contratos se reformulan en su contenido en la


medida del cambio de tecnologías, precios, servicios y sería insensato obligar a las partes a
cumplir puntualmente con lo pactado en el contrato original
 Hay un objeto temporalmente extenso que requiere una comprensión dinámica
 Hay una adaptación constante y, para obtener esa característica, el objeto debe
desmaterializarse: no se trata de una cosa o un bien, sino de reglas procedimentales para
determinarlo
 El juzgamiento se centra en la licitud de las reglas de determinación del contenido del
contrato: se analiza la validez de la cláusula determinación del precio, de la fijación del
contenido por un tercero, etc.

h. derechos sobre el cuerpo humano: art. 17: los derechos sobre el cuerpo humano o sus partes,
no tienen un valor comercial, sino afectivo, terapéutico, científico, humanitario o social, y solo
pueden ser disponibles por su titular, siempre que se respeten alguno de esos valores según lo
dispongan las leyes especiales.

Art 56: están prohibidos los actos de disposición del cuerpo propio que causen una disminución
permanente de su integridad o resulten contrario a la ley, la moral o las buenas costumbres,
excepto que sean requeridos para el mejoramiento de la salud de la persona, y excepcionalmente a
otra persona, de conformidad a lo dispuesto en el ordenamiento jurídico.

Art. 1004: no pueden ser objeto de los contratos los hechos que son imposibles o están prohibidos
por las leyes, o contrarios a la moral o el orden público, dignidad de la persona humana y lesivo a
los derechos ajenos; ni los bienes que por un motivo especial se prohíbe que lo sean. Cuando
tengan por objeto derechos sobre el cuerpo humano, se aplican los artículos 17 y 56.
UNIDAD 3: CAUSAS, FORMA Y PRUEBA
1. a. causas: clases y conceptos: la palabra causa en el derecho tiene 2 acepciones diferentes:

 Designa la fuente de las obligaciones, o sea, los presupuestos de hecho de los cuales
derivan las obligaciones legales: contratos, hechos ilícitos, etc.
 Es empleada en el sentido de causa final, significa el fin que las partes se propusieron al
contratar. Según un debate doctrinario, se ha discutido si la causa debe o no ser
considerada como un elemento esencial del acto jurídico, se ha discutido la propiedad de
la palabra causa, etc.

b. antecedentes históricos: doctrina clásica de la causa, anticausalismo y neocausalismo.

Doctrina clásica: causalismo. Mayor exponente Domat, quien funda la noción de causa en un
criterio típico, es decir en una razón que se da en tres clases de contratos. Tiene un criterio
racionalista, en el sentido de constituir una elaboración teórica para encontrar un concepto
abstracto y por lo tanto, a priori, para que sea universal. Por ello distingue entre las causas como
fuente de obligación y la causa como fin de ella (motivo que hace que las partes se obliguen).

Domat distinguió la causa en 3 tipos de contratos:

 En los onerosos, el compromiso de una de las partes es el fundamento del compromiso de


la otra. La causa se halla en la interdependencia o reciprocidad de las obligaciones a cargo
de una y otra
 En los reales, la causa equivale a una prestación que se anticipa y acepta y obliga a
restituir
 En los contratos gratuitos, el fundamento es algún motivo razonable y justo, como un
servicio prestado u otro merito del donatario o el solo placer de hacer el bien.

Para Aubry y Rau la causa del contrato es la consideración que lleva a una parte a contratar; el
motivo es el móvil que determina la contratación.

Anticausalismo: sostuvo que la noción de causa era superflua e innecesaria, ya que los problemas
podían ser resueltos a través de la regulación del objeto. En realidad se trata de la misma cuestión
separada en dos elementos: objeto y causa, lo cual no tiene sentido.

Neocausalismo:

 La causa comienza a ser considerada un elemento estructural del negocio


 Se la concibe, primero, como la voluntad de obtener la ejecución de la obligación asumida
por el otro contratante
 Luego se la considera como la voluntad que expresa el motivo determinante de la
contratación, que puede ser variable en cada caso. La causa es el fin concreto de interés
general o privado que mas alla de un acto jurídico determinado y por medio de este acto
tratan de alcanzar sus actores; este fin no se halla ligado a la estructura técnica de un acto
jurídico y es, por el contrario, susceptible de varios en los actos jurídicos pertenecientes a
la misma categoría
 Finalmente, surge un enfoque objetivo, basado en la finalidad económico-social que este
cumple y que es reconocida por el ordenamiento jurídico. Es el elemento que caracteriza
al negocio y le da su configuración típica.

De este modo queda configurada la nueva concepción de la causa en los planes subjetivo y
objetivo.

c. importancia y efectos:

Efectos de la falta de causa: la causa fin es un elemento estructural del contrato cuya ausencia lo
priva de validez. En este caso, se trata de la falta de voluntad de producir efectos jurídicos, o de la
existencia de una voluntad viciada.

La falta de causa fin solo puede ser aducida por la parte para quien el acto obrado carece de razón
determinante.

El acto es inválido si carece de causa fin, se ella es ilícita o si es falsa. En el último caso, el acto vale
si se subyace por una causa fin verdadero y licita.

Se presume que el acto tiene causa fin, que ella es lícita y que la expresada es verdadera. Pero el
interesado, puede probar eficazmente lo contrario.

d. necesidad y presunción de causa: art 282: “aunque la causa no esté expresada en el acto se
presume que existe mientras no se pruebe lo contrario. El acto es valido aunque la causa expresada
sea falsa si se funda en otra verdadera”. Debe ser interpretada en el sentido de que los
contratantes, normalmente, se obligan de forma razonable, y no es habitual que alguien se obligue
sin motivo.

e. causa ilícita: art 1014: el contrato es nulo cuando:

 La causa es contrataría a la moral, al orden publico o las buenas costumbres


 Ambas partes lo han incluido por motivo ilícito o inmoral común

La licitud se presume. Este art hace referencia a un control de la ilicitud de la causa fin objetiva
como de los motivos.

Aclaración: si sola una de las partes ha obrado por un motivo ilicitico o inmoral, no tiene derecho a
invocar el contrato frente a la otra, pero esta puede reclamar lo que ha dado sin obligación de
cumplir lo ha ofrecido.

2. a. forma: concepto

El código Civil de Vélez definía a las formas de los actos jurídicos como “l conjunto de
prescripciones de la ley, respecto de las solemnidades que deben observarse al tiempo de la
formación del acto jurídico; por ejemplo, la escritura pública para ciertos contratos.

En el código actual, si bien no existe una norma similar, el concepto no ha variado.

La voluntad se puede expresar de forma escrita, oral, por signos inequívocos, por la ejecución de
un hecho material e incluso guardando silencio (en ciertos casos establecidos).

La expresión escrita se puede dar a través de instrumentos públicos, o de instrumentos


particulares firmados o no firmados.

b. principio general

Actualmente impera como principio el de la libertad de las formas, basta con el consentimiento
para que el contrato tenga plena fuerza obligatoria; las partes pueden utilizar las formas que
estimen convenientes. Solo por excepción la ley exige en algunos casos expresamente el
cumplimiento de requisitos formales.

Art. 1015: libertad de formas. Solo son formales los contratos a los cuales la ley les impone una
forma determinada.

- Neo formalismo: en una etapa posterior del derecho romano, el tradicional formalismo
estricto se modero con la aparición de los contratos bona fide, llegándose finalmente a
reconocer que el simple pacto, aun desprovisto de la forma legal adecuada, era bastante
para obligar a las partes. La fuerza que vinculaba a las partes era su propio
consentimiento, del cual las formas eran vestigios que servían para su ulterior
comprobación.
Ejemplo: contratos de consumo, en los cuales se exige que el documento que se extiende
contenga determinadas descripciones y especificaciones.

c. excepciones

d. clasificación

Los contratos formales son aquellos cuya validez depende de la observancia en la forma
establecida por la ley. Dentro de la categoría de formales a su vez podemos diferenciar entre:

- Solemnes: aquellos en los cuales la formalidad tiene carácter constitutivo; se dividen en:
 De solemnidad absoluta: la formalidad es requerida para la validez del acto. El
incumplimiento de la forma trae aparejado la nulidad del acto celebrado. Ejemplo:
la donación, que debe realizarse a través de escritura pública inexorablemente.
 De solemnidad relativa: dicho incumplimiento no acarreara la nulidad del acto
sino que permitirá exigir el cumplimiento de la forma establecida por la ley. La
omisión de la forma solemne relativa impide considerar concluido el contrato
celebrado pero valdra como un contrato por el cual las partes se obligan a cumplir
con la formalidad establecida. Provoca el nacimiento de la obligación de cumplir
con la forma legal y el derecho a exigirá judicialmente.

- A efectos de la prueba: se trata de una forma probatoria, ella solo tiene importancia a los
efectos de la prueba del acto jurídico; por ej., el contrato de locación, sus prorrogas y
modificaciones debe ser hecho por escrito, pero si se hubiera incumplido con esta forma,
el contrato valdrá de todos modos si existe principio de ejecución o principio de prueba
instrumental.

e. modificaciones al contrato

Si el contrato debe ser celebrado respetando una forma determinada, sea porque la ley lo
exija o por acuerdo de partes, las posteriores modificaciones que las partes convengan debes
ser hechas con la misma formalidad.

La regla prevista en el art. 1016 admite ciertas excepciones:

 Si las modificaciones versan sobre estipulaciones accesorias o secundarias


 Si existe alguna disposición legal que expresamente admita que no se cumpla en la
modificación con la formalidad fijada para el contrato original.
- Art. 1016: modificaciones al contrato.
“la formalidad exigida para la celebración del contrato rige también para las
modificaciones ulteriores que le sean introducidas, excepto que ellas versen sobre
estipulaciones accesorias o secundarias, o que exista disposición legal en contrario”.

f. escritura publica.

Es un medio requerido para ciertos contratos o transacciones legales, que por interés publico y por
su importancia, se pide de esta manera para dar una mayor seguridad jurídica, ya que la escritura
pública se tiene por cierta.

Según el art. 1017 debe celebrarse por escritura pública:

a. Los contratos que tiene por objeto la adquisición, modificación o extinción de dchos
reales sobre inmuebles. Quedan exceptuados los casos en que el acto es realizado
mediante subasta proveniente de ejecución judicial o administrativa.
b. Los contratos que tienen por objeto derechos dudosos o litigiosos sobre inmuebles.
c. Todos los actos que sean accesorios de otros contratos otorgados en escritura pública.
d. Los demás contratos que, por acuerdo de partes o disposición de la ley, deben ser
otorgados en escritura pública.

g. Otorgamiento pendiente del instrumento

Art. 1018: otorgamiento pendiente del instrumento.

El otorgamiento pendiente del instrumento previsto constituye una obligación de hacer si el futuro
contrato no requiere una forma bajo sanción de nulidad. Si la parte condenada a otorgarlo es
remisa, el juez lo hace en su representación, siempre que las contraprestaciones estén cumplidas,
o sea asegurado su cumplimiento.

3. a. prueba: concepto: no es un elemento de los contratos, pero se encuentra estrechamente


vinculada a la forma.

Art. 1019: “los contratos pueden ser probados por todos los medios aptos para llegar a una
razonable convicción según las reglas de la sana critica, y con arreglo a lo que disponen las leyes
procesales, excepto disposición legal que establezca un medio especial.”

b. diferencia entre forma y prueba: la forma hace referencia a la manifestación de voluntad, es un


requisito de la formación del contrato. Mientras que la prueba, en cambio, se vincula con los
medios de demostrar la existencia del contrato, cualquiera haya sido su forma.
c. sistema de valoración de la prueba: los medios probatorios son una cuestión básicamente
procesal. El código derogado enunciaba los medios de prueba admisibles en materia contractual,
enumeración no taxativa por cierto. Nuestro nuevo código dispone “todos los medios aptos para
llegar a una razonable convicción según las reglas de la sana critica”.

d. la prueba de los contratos

e. medios y modos de prueba

I. prueba documental: abarca todos os instrumentos a los que nos hemos referidos con
anterioridad
II. prueba confesional: es la prueba decisiva y plena. Esta prueba abarca diferentes tipos de
confesión:
a) confesión judicial: es la forma típica, por lo general es provocada, llamando a la
parte contraria a absolver posiciones bajo juramento de decir la verdad; también
puede ser espontanea.
b) confesión extrajudicial: tiene el mismo valor que la judicial siempre que se la
acredite fehacientemente; no se admitirá la prueba testimonial de ella salvo que
hubiese principio de prueba por escrito.
c) prueba testimonial: dicha prueba genera desconfianza, debido a que los testigos
suelen recordar mal los hechos, o pueden ser complacientes o falsos; las personas
que quieren vincularse por un contrato, tienen a su disposición un medio de
prueba excelente, el instrumento privado, donde quedan asentados con claridad y
sin posibilidad de confusión; de todas formas se admitirá todo genero de pruebas.
d) presunciones legales o judiciales: las legales consisten en que la ley, dado ciertos
hechos, infiere consecuencias también determinada; por ejemplo se presume que
si se otorga un recibo por saldo de precio quedan canceladas todas las deudas
correspondientes a la obligación por la cual fue otorgado. Las judiciales
constituyen indicios que apreciados libremente por el juez, forman su
convencimiento de la verdad de un hecho o acto jurídico.
e) otros medios de prueba: el reconocimiento judicial o inspección ocular, es decir, el
examen directo hecho por el juez de cierto hecho o de lugares que se
desarrollaran; la prueba pericial, consiste en el dictamen de los peritos o expertos
en diferentes áreas; o la prueba de informes, que pueden dar instituciones
púbicas o privadas sobre cuestiones a tenientes a su actividad o funciones.

f. prueba de los contratos formales

Art. 1020: los contratos en los cuales la formalidad es requerida a los fines probatorios, pueden ser
probados por otros medios, inclusive por testigos, si hay imposibilidad de obtener la prueba de
haber sido cumplida la formalidad o si existe principio de prueba instrumental, o comienzo de
ejecución. Se considera principio de prueba instrumental cualquier instrumento que emane de la
otra parte, de su causante o de parte interesada en el asunto, que haga verosímil la existencia del
contrato.

Es decir, si la formalidad requerida es meramente probatoria, el contrato puede ser probado por
otros medios. No será necesaria la prueba por la forma legal cuando hubiese imposibilidad de
imponerla; tampoco cuando mediare principio de prueba instrumental; ni cuando ha existido
comienzo de ejecución; tampoco cuando la cuestión versare sobre los vicios de error, dolo,
violencia, fraude, simulación o falsedad de los instrumentos en que constaren (debido a tratarse
de hechos que por su misma naturaleza casi nunca están documentados).

En el caso de los contratos formales solemnes, solo pueden probarse con el instrumento que
acredite el cumplimiento de la formalidad legal. A mayor solemnidad, mayor exigencia probatoria.

g. firma digital

Ley de firma digital – art. 2: Se entiende por firma digital al resultado de aplicar a un documento
digital un procedimiento matemático que requiere información de exclusivo conocimiento del
firmante, encontrándose ésta bajo su absoluto control. La firma digital debe ser susceptible de
verificación por terceras partes, tal que dicha verificación simultáneamente permita identificar al
firmante y detectar cualquier alteración del documento digital posterior a su firma.

Los procedimientos de firma y verificación a ser utilizados para tales fines serán los determinados
por la Autoridad de Aplicación en consonancia con estándares tecnológicos internacionales
vigentes.

ARTÍCULO 9º — Validez. Una firma digital es válida si cumple con los siguientes requisitos:

a) Haber sido creada durante el período de vigencia del certificado digital válido del firmante;

b) Ser debidamente verificada por la referencia a los datos de verificación de firma digital
indicados en dicho certificado según el procedimiento de verificación correspondiente;

c) Que dicho certificado haya sido emitido o reconocido, según el artículo 16 de la presente, por
un certificador licenciado.

UNIDAD 4: el dogma de la autonomía de la voluntad. Efectos subjetivos y


objetivos.
1. a. efectos: la autonomía de la voluntad. Es la cualidad de la voluntad en cuya virtud el hombre
tiene la facultad de auto determinarse y auto responsabilizarse, conforme a los dictados de su
consciencia, sin más límites que las idénticas y concurrentes facultades de otros hombres.
Está vinculada estrechamente con la fuerza obligatoria del contrato, ya que lo que se busca es que
el contrato libremente pacto obligue a las partes. En otras palabras, el mero consentimiento
contractual, prescindiendo de toda formalidad, obliga a los contrayentes, porque aunque las
personas sean libres de obligarse o no, una vez obligados deben cumplir con la obligación
asumida o responder por el incumplimiento.

b. teorías y fundamentos

c. fuerza obligatoria del contrato, teorías.

Derecho canónico: debe cumplirse el contrato por la idea del orden moral, basada en que el que
no cumplía con la palabra empeñada, incurría en una mentira que violaba directamente uno de los
diez mandamientos.

Derecho natural: hace hincapié en la idea del pacto social, por el cual los contratos obligan a sus
celebrantes en razón de un convenio anterior y tacito, otorgado a la constitución de la vida social y
por el cual los hombres se habrían obligado a ser fieles a su promesa

Escuela filosófica del derecho: el fundamento se encuentra en el hecho de que el hombre dicta su
propia ley. Es el mismo hombre quien luego voluntariamente se somete a lo convenido.

d. institutos limitativos de la autonomía de la voluntad: teoría de la imprevisión, lesión, abuso


del derecho, enriquecimiento sin causa

Teoría de la imprevisión: art 1091. “Si en un contrato conmutativo de ejecución diferida o


permanente, la prestación a cargo de una de las partes se torna excesivamente onerosa, por una
alteración extraordinaria de las circunstancias existentes al tiempo de su celebración, sobrevenida
por causas ajenas a las partes y al riesgo asumido por la que es afectada, esta tiene derecho a
plantear extrajudicialmente, o pedir ante un juez, por acción o como excepción, la resolución total
o parcial del contrato, o su adecuación. Igual regla se aplica al tercero a quien le han sido
conferidos derechos, o asignadas obligaciones resultantes del contrato; y al contrato aleatorio si la
prestación se tora excesivamente onerosa por causas extrañas a su alea propia.”

Tiene su origen en la ley de obra pública del año 1946, y dada una necesidad de legislar
expresamente sobre esta institución para establecer sus condiciones de aplicación y
consecuencias surge la ley 17.711 al dar una nueva redacción al art 1198 del código de Velez, que
luego sería rectificado por la orientación seguida por el nuevo código civil y comercial en su art.
1091.

Condiciones para su aplicación:

 Contratos conmutativos, contratos en los cuales las obligaciones mutuas están


determinadas de una manera precisa. O sea, los bilaterales y los onerosos. En principio los
contratos aleatorios no son atacables por via de imprevisión, mientras la onerosidad
sobreviniente sea la consecuencia de alea asumida; pero si ella es ajena a dicha alea, la
teoría de la imprevisión es aplicable.
 Que se trate de contratos de ejecución diferida o de ejecución permanate o continuada. Ej
contrato de locación. No es aplicable a contratos de cumplimiento instantáneo e
inmediato, ej compraventa al contado.
 La prestación a cargo de una de las partes se torne excesivamente onerosa. Que se
produzca una alteración grave del equilibrio normal de las prestaciones.
 Que la excesiva onerosidad se haya producido como consecuencia de una alteración
extraordinaria de las circunstancias existentes al tiempo de su celebración, y al riesgo
asumido por la parte que es afectada. La alteración debe ser de eventos grandes e
impredecibles.
 El perjudicado no puede obrar con culpa.
 Debe tratarse de acontecimientos de carácter general o social (aunque la ley no lo diga).
 Puede aplicarse la teoría de la imprevisión a quien estuviera en mora? El código de velez
aclaraba que no, pero en nuestro nuevo código civil y comercial aclara que para que la
mora impida la aplicación de la teoría de la imprevisión, debe ser anterior al momento en
que sobreviene el acontecimiento extraordinario e imprevisible; pero ocurrido este, la
mora posterior no impide la resolución del contrato, puesto que, en verdad, la mora ha
sido causada por el propio hecho imprevisible.

Lesión: art 332: “puede demandarse la nulidad o la modificación de los actos jurídicos cuando una
de las partes explotando la necesidad, debilidad psíquica o inexperiencia de la otra, obtuviera por
medio de ellos una ventaja patrimonial evidentemente desproporcionada y sin justificación. Se
presume, salvo prueba en contrario, que existe tal explotación en caso de notable desproporción de
las prestaciones. Los cálculos deben hacerse según valores al tiempo del acto y la desproporción
debe subsistir en el momento de la demanda. El afectado tiene opción de demandar la nulidad o un
reajuste equitativo del convenio, pero la primera de estas acciones se debe transformar en acción
de reajuste si este es ofrecido por el demandado al contestar la demanda. Solo el lesionado o sus
herederos pueden ejercer la acción.”

A diferencia del error, el dolo y la violencia física o moral que son vicios de la voluntad, la lesión es
un vicio propio del acto jurídico.

Elementos: la conformación de la lesión exige la concurrencia de tres elementos, uno objetivo y 2


de naturaleza subjetiva.

Elementos subjetivos:

 “un sujeto que atraviesa un estado anormal, que se caracteriza por el estado de
necesidad, debilidad psíquica o inexperiencia”. Este estado de inferioridad atravesado por
la victima se traduce en:
1) “una situación de necesidad”: que se refiere a un estado de peligro que pueda
poner en riesgo la vida, la salud, el honor o la libertad de la persona afectada, o
incluso sus bienes o cosas, siempre y cuando la amenaza tenga aptitud o
idoneidad para determinarla a celebrar el negocio.
2) “debilidad psíquica”: se vincula con el estado patológico en que se halle el
damnificado, que le impide tener una dimensión plena o cabal de las
consecuencias del acto que realiza.
3) “inexperiencia”: se la ha definido como la falta de conocimientos que se adquieren
con el uso y la práctica. Se asocia este elemento con personas de escasa cultura o
por falta de experiencia de vida en razón de un menor de edad.
 “un sujeto que explote o se aproveche de la inferioridad de la otra parte”: el agente no
genera la situación de inferioridad, sino que se aprovecha de ella. Es un obrar contrario a
la buena fe, porque aun cuando no oculta el estado de las cosas para que el otro incurra
en un error, maneja las condiciones del negocio sabiendo que la otra parte o tiene las
herramientas o cualidad personales para protegerse en desventaja.

Elemento objetivo: el elemento objetivo es la obtención de una ventaja patrimonial


evidentemente desproporcionada y sin justificación. El código no indica en que desproporción es
jurídicamente relevante para ser considerado ventaja, sino que deja librado a la apreciación
judicial. Una vez verificada incumbe al demandado probar que se encuentra justificada, o sea, que
tiene un motivo verdadero.

Prescripción: la acción para solicitar la nulidad o el reajuste prescribe a los 2 años desde que la
obligación a cargo del lesionado debía ser cumplida.

Abuso del derecho: art 10: “el ejercicio regular de un derecho propio o el cumplimiento de una
obligación legal no puede constituir como ilícito ningún acto. La ley no ampara el ejercicio abusivo
de los derechos. Se considera tal el que contraria los fines del ordenamiento jurídico o el que
excede los límites impuestos por la buena fe, la moral y las buenas costumbres. El juez debe
ordenar lo necesario para evitar los efectos del ejercicio abusivo o de la situación jurídica abusiva y,
si correspondiere, procurar la reposición al estado de hecho anterior y fijar una indemnización”

Es un principio general que tiene influencia en todo el sistema del derecho privado. Es un limite
interno al ejercicio de los derechos pero no se aplica a las libertades genéricas.

Existen:

 Abuso de derecho subjetivo (Art. 10)


 Abuso de derecho subjetivo en relación a un bien de incidencia colectiva (art. 14)
 Abuso derivado de situaciones jurídicas (art. 10)

Para descalificar el ejercicio de un derecho por abusivo se dispone de varios criterios: la


regularidad, los fines que la ley tuvo en miras al reconocerlo, la buena fe, la moral y las buenas
costumbres.
Los efectos del acto abusivo son: despojar de toda virtualidad al acto desviado, privándolo de
efectos; impedirle el ejercicio de una acción judicial que se funde en el abuso; dar origen a la
tutela preventiva o resarcitoria.

Enriquecimiento sin causa: art. 1794: “toda persona que sin una causa lícita se enriquezca a
expensas de otro, está obligada, en la medida de su beneficio, a resarcir el detrimento patrimonial
del empobrecido. Si el enriquecimiento consiste en la incorporación a su patrimonio de un bien
determinado, debe restituirlo si subsiste en su poder al tiempo de la demanda. Luego se establece
que la acción no es procedente si el ordenamiento jurídico concede al damnificado otra acción para
obtener la reparación del empobrecimiento sufrido.”

Requisitos: haciendo un análisis de los art 1794 y 1795 podemos decir que los requisitos son:

 Enriquecimiento del demandado: se requiere el incremente del activo o la disminución del


pasivo patrimonial del accionado, mediante el ingreso de bienes, el aumento de su valor,
la eliminación de gastos que el hubiera debido realizar, la falta de remuneración de
servicios, etc.
 Empobrecimiento del actor: consiste en el menoscabo económico que afecta al titular de
la acción
 Relación causal entre el enriquecimiento y el empobrecimiento: debe existir una relación
de causa-efecto adecuada entre estos dos extremos
 Ausencia de justa causa: o debe haber una causa fuente que legitime el enriquecimiento.
Es decir, el aumento en el patrimonio del demandado no debe fundarse en un contrato,
donación, etc.
 Inexistencia de otra acción mas útil: no debe tener el empobrecido otra acción o vía de
derecho a su disposición para obtener la debida indemnización de su perjuicio.

2. a. efectos subjetivos: entre partes y con relación a terceros:

Relación de los terceros con el contrato: el tercero no es parte y, por ello, la regla es que el
contrato no causa relaciones jurídicas con ellos. El código afirma en su art 1022 que “el contrato
no hace surgir obligaciones a cargo de terceros, ni los terceros tienen derecho a invocarlo para
hacer recaer sobre las partes obligaciones que estas no han convenido, excepto disposición legal.”

I. Oponibilidad del contrato a los terceros: el contrato causa derechos personales y no reales
y, por eso, no presenta el grado de oponibilidad erga omnes que califica a los derechos
reales. Ello no quiere decir que no tenga ningún grado de de oponibildad, sino uno menor,
de distinta finalidad e intensidad.
II. El tercero acreedor de las partes: el tercero que es acreedor de una de las partes esta en
una situación jurídica calificada porque tiene un interés sobre el patrimonio de su deudor
(que es garantía común de los acreedores). Por lo que el tercero puede tomar medidas
precautorias para conservar el patrimonio, acciones tendientes a mantener la integridad
del patrimonio, acciones de ejecución.
III. El tercero como obligado o beneficiario de un contrato: la regla contractual puede tener
por sujeto a un tercero en distintas situaciones previstas en la ley y que son:
1) Contratación a nombre de un tercero
2) Promesa del hecho de tercero
3) Contrato a favor de tercero
IV. Tercero que daña el crédito o el contrato: si el tercero causa un perjuicio a un contratante,
hay una responsabilidad extracontractual, por lesión al crédito, a las expectativas
contractuales y otros supuestos.
V. Tercero perjudicado por un contrato: se puede hacer un contrato con intención de
perjudicar a un tercero. Este supuesto se refiere a situaciones comunes reguladas en la
responsabilidad extracontractual, en las que el contrato no presenta ninguna
particularidad, porque no es el bien tutelado.

b. partes, sucesores universales y particulares:

Las partes contratantes: son aquellos sujetos que, por si o por representante, se han puesto de
acuerdo sobre una declaración de voluntad común, concurriendo a la formación y consentimiento
del contrato; son quienes se han obligado a cumplir determinadas prestaciones y han adquirido
ciertos derechos.

Sucesores a titulo universal: cuando se celebra un contrato, y una de las partes fallece, pasan a los
sucesores universales todos los derechos y obligaciones que correspondían al causante, porque es
la regla que los efectos se extienden activa y pasivamente a los sucesores (art. 1024). Con respecto
a las deudas, el heredero aceptante queda obligado frente a los acreedores. Debemos distinguir
diferentes situaciones:

 El heredero que acepta la herencia queda obligado por las deudas y legados de la sucesión
solo hasta la concurrencia del valor de los bienes hereditarios recibidos. En caso de
pluralidad de herederos responden con la misma masa hereditaria indivisa.
 Puede suceder que responda con sus propios bienes por el pago de las deudas y cargas de
la sucesión cuando incurra en los actos previstos en el art. 2321. Cabe aclarar que este
régimen se aplica tanto al heredero universal como al heredero de cuota
 El legatario puede ver comprometida su responsabilidad conforme surge y en los términos
del art 2319.

Excepciones:

 Obligaciones inherentes a la persona


 Prohibición legal, por ej pacto de preferencia en la compraventa
 Prohibición convencional, las partes pactan la intransmisibilidad
 Transmisión de patrimonios y universalidades, hay casos que la ley regula
específicamente, por ej en la transferencia de fondo de comercio el adquiriente no asume
las deudas del enajenante salvo las emergentes de los contratos de trabajo

Sucesores singulares: recibe bienes determinados por causa de un contrato o por una disposición
de última voluntad. La única relación que existe es la transmisión de un bien y no hay transferencia
de la totalidad del patrimonio, y por ello no es admisible que se transmitan los efectos de los
contratos celebrados por el causante.

El sucesor singular está relacionado solamente por un bien y es en relación a ese aspecto que
pueden transmitirse los efectos, pero no en relación a todos los demás vínculos del causante.

c. terceros. Concepto: el tercero es toda persona que no es parte en el acto. El art 1022 establece
“el contrato no hace surgir obligaciones a cargo de terceros, ni los terceros tienen derecho a
invocarlo para hacer recaer sobre las partes obligaciones que estas no hacen convenido, excepto
disposición legal”. La referencia a la excepción de disposición legal, es por casos particulares como
el del tercero interesado, que incluye a herederos de cuota, sucesores a titulo singular y los
acreedores quirografarios.

d. contratos a nombres de terceros, promesa del hecho de terceros y estipulación a favor de


terceros.

Contratación a nombre de tercero: quien contrata a nombre de un tercero solo lo obliga si ejerce
representación. A falta de representación suficiente el contrato es ineficaz. La ratificación expresa
o tacita del tercero suple la falta de representación; la ejecución implica ratificación tacita.

Si el acto es concretado por un falsus procurator, el mismo es ineficaz si hay ratificación, si no la


hay el acto no tiene efectos.

Para que se de este contrato se requiere:

 Que uno de los celebrantes del contrato realice una declaración de voluntad, sea la oferta
o la aceptación, a nombre ajeno.
 Que no tenga una legitimación para obrar previa a la declaración; no hay representación
necesaria, voluntaria ni orgánica

Promesa del hecho de tercero: art. 1026. “quien promete el hecho de un tercero queda obligado a
hacer lo razonablemente necesario para que el tercero acepte la promesa. Si ha garantizado que la
promesa sea aceptada, queda obligado a obtenerla y responde personalmente en caso de
negativa”.

Hay que distinguir las sgtes situaciones:

 El celebrante del contrato se obliga a la aceptación del tercero, o bien puede celebrar el
contrato y obligarse a que otro lo ejecute
 En ambos casos, debe precisarse si hay una obligación determinada o de mera diligencia. E
el caso de mera diligencia se obliga a disponer sus buenos oficios para conseguir que otro
acepte o bien que ejecute un contrato, pero no asume el riesgo de la o obtención de un
resultado
 Puede haber plazo o condición, para la obtención del resultado o para la finalización de las
diligencias tendientes a obtener el hecho del tercero, aplicándose en tal caso las normas
que regulan esas modalidades
 El celebrante se obliga a que l tercero ejecute el contrato: el promitente es considerado un
fiador, y en caso de incumplimiento debe indemnizar

Cuando el legislador dice que la persona “ha garantizado que la promesa sea aceptada, queda
obligado a obtenerla y responde personalmente en caso de negativa” debe entenderse en el
sentido de asumir las consecuencias de la frustración.

Contrato a favor de terceros: en el contrato a favor de terceros hay un contrato base, en el que se
estipula un beneficio para un tercero, quien tiene la facultad de aceptarlo y accionar por el
cumplimiento en forma directa contra ambas partes.

Art 1027: “si el contrato contiene una estipulación a favor de un tercero beneficiario, determinado
o determinable, el promitente le confiere los derechos o facultades resultantes de lo que convenido
con el estipulante. El estipulante puede revocar la estipulación mientras no reciba la aceptación del
tercero beneficiario; pero no puede hacerlo sin la conformidad del promitente si este tiene interés
en que sea mantenida. El tercero aceptante obtiene directamente los derechos y las facultades
resultantes de la estipulación a su favor. Las facultades del tercero beneficiario de aceptar la
estipulación a su favor. Las facultades del tercero beneficiario de aceptar la estipulación y de
prevalerse de ella luego de haberla aceptado, no se transmiten a sus herederos, excepto que haya
clausula expresa que lo autorice. La estipulación es de interpretación restrictiva.”

Art 1028: “el promitente puede oponer al tercero las defensas derivadas del contrato básico y las
fundadas en otras relaciones con el. El estipulante puede:

a) Exigir al promitente el cumplimiento de la prestación, sea a favor del tercer beneficiario


aceptante, sea a su favor si el tercero no la acepto o el estipulante la revoco
b) Resolver el contrato en caso de incumplimiento, sin perjuicio de los derechos del tercero
beneficiario”

Por ej: seguro de vida. La persona pacta con la compañía para que el beneficio vaya a un tercero
(Su familia)

3. a. efectos objetivos o propios: suspensión del cumplimiento y tutela preventiva.

Suspensión del contrato: art. 1031: “en los contratos bilaterales, cuando las partes deben cumplir
simultáneamente, una de ellas puede suspender el cumplimiento de la prestación, hasta que la
otra cumpla u ofrezca cumplir. La suspensión puede ser deducida judicialmente como acción o
como excepción. Si la prestación es a favor de varios interesados, puede suspenderse la parte
debida a cada uno hasta la ejecución completa de la contraprestación”

Art. 1032: “una parte puede suspender su propio cumplimiento si sus derechos sufriesen una grave
amenaza de daño porque la otra parte ha sufrido un menoscabo significativo en su aptitud para
cumplir, o en su solvencia. La suspensión queda sin efecto cuando la otra parte cumple o da
seguridades suficientes de que el cumplimiento será realizado”

Tutela preventiva: existen supuestos en los que el deudor genera temores fundados al acreedor:
entra en insolvencia, pone en riesgo los bienes en garantía. En estos casos, es probable que el
negocio termine mal y se autoriza a anticipar los hechos, pidiendo la caducidad del plazo.

El fundamento debe situarse en el acreedor: es una acción preventiva que se concede a la parte
cumplidora, puesto que no tendría sentido obligarla a seguir cumpliendo cuando es seguro que la
parte contraria no lo hará.

La solución tradicional es esperar a que se configure el incumplimiento de una obligación nuclear


del contrato para autorizar al acreedor a constituir en mora y declarar la resolución; luego de ello
realizar un juicio reclamando el daño y la restitución de lo dado. La otra solución, es claramente
preventiva: permite al vendedor disminuir riesgos y no fabricar y entregar una mercadería que
sabe que no se entregara.

El nuevo código admite que el deudor que está constituido en insolvencia no puede invocar el
plazo para el cumplimiento de la obligación, y en ese caso, el acreedor puede exigir el pago antes
del plazo. El acreedor tiene derecho a peticionar la caducidad del plazo, es decir, la exigibilidad
inmediata de la obligación contra el deudor.

La tutela preventiva actúa también de cara a un “menoscabo significativo en su aptitud para


cumplir”, lo cual abarca cuestiones de hecho, tales como perdidas patrimoniales sufridas por la
contraria, que le impidan cumplir con la obligación asumida, en caso de fuerza mayor o caso
fortuito que imposibilite temporalmente la ejecución de la obligación, permitiendo conservar al
contrato con vida hasta que dicha situación desaparezca.

La imposibilidad temporaria no produce normalmente la extinción.

Art 956: “la imposibilidad sobrevenida, objetiva, absoluta y temporaria de la prestación tiene
efecto extintivo cuando el plazo es esencial, o cuando su duración frustra el interés del acreedor de
modo irreversible. En el supuesto que la prestación se vuelve imposible por culpa del deudor, el
acreedor tiene derecho a reclamar indemnización por los daños causados.”

b. la señal o arras: concepto y función: art. 1059: “la entrega de señal o arras se interpreta como
confirmatoria del acto, excepto que las partes convengan la facultad de arrepentirse; en tal caso,
quien entrego la señal la pierde en beneficio de la otra y, quien la recibió, debe restituirla doblada.”
Cumple una función distintita si persigue la finalidad de facultar a una de las partes el
arrepentimiento o bien se da para demostrar que se quiere celebrar el negocio.

c. obligación de saneamiento: el saneamiento viene a constituir una suerte de parte general de la


evicción y de los vicios ocultos, en el que se establecen una serie de normas que son aplicables a
ambos institutos

Sujetos responsables: art. 1033:

 El transmitente de bienes a titulo oneroso, en caso de muerte del enajenante responderán


sus sucesores a titulo universal, pero no asi los legatarios particulares, a menos que la
sucesión sea insolvente, en cuyo caso el acreedor tiene acción hasta el limite del valor de
lo recibido.
 Quien ha dividido bienes con otro, si alguno de los bienes carga con un vicio en el titulo
(evicción) o en la cosa (vicio redhibitorio), quien lo haya recibido esta facultado para
reclamar de sus ex condóminos o coherederos la parte proporcional.
 Sus respectivos antecesores, si han efectuado la correspondiente transferencia a titulo
oneroso, siempre que el vicio no sea posterior a la respectiva transferencia

Art. 1035: “adquiriente a titulo gratuito: puede ejercer en su provecho las acciones de
responsabilidad por saneamiento correspondiente a sus antecesores.”

d. disponibilidad: art 1036: la responsabilidad por saneamiento existe aunque no haya sido
estipulada por las partes. Estas pueden aumentarla, disminuirla o suprimirla, sin perjuicio de o
dispuesto en el art. Sgte.

La obligación o garantía de saneamiento, es un elemento natural de los contratos, por lo que


existe aunque no haya sido estipulada por las partes. Pero por ser un elemento natural, las partes
pueden convenir aumentarla, disminuirla o suprimirla.

No hay inconvenientes cuando se trata de aumentar la garantía; en definitiva, se le están dando


mas derechos al adquiriente. Mas compleja es la posibilidad de suprimir o disminuir la
responsabilidad por saneamiento. Las clausulas de supresión y disminución de la responsabilidad
por saneamiento son de interpretación restrictiva (Art. 1037), esto es que debe estarse a la
literalidad de los términos usados al manifestar la voluntad (Art. 1062).

Casos en los que se tiene por no convenidas: Art. 1038

 Si el enajenante conoció, o debió conocer el peligro de eviccion, o la existencia de


vicios, lo cual exhibiría un obrar de mala fe o negligente
 Si el enajenante actua profesionalmente en la actividad a la que corresponde la
enajenación, a menos que el adquiriente también se desempeño profesionalmente en
esa actividad, porque tal profesionalidad, acarrea un deber agravado de comportarse
con diligencia y previsibilidad por las consecuencias que puedan acaecer (art 1725).

e. responsabilidad por saneamiento y por daños: art 1039 el acreedor de la obligación de


saneamiento está facultado a reclamar el saneamiento del título o la subsanación de los vicios; o a
reclamar un bien equivalente, si es fungible; o a declarar la resolución del contrato, aunque se
prevén algunas excepciones en este último caso. Por lo que nos da 3 opciones

I. Obliga a distinguir entre evicción y vicios ocultos. Ya que sanear el titulo es propio de la
evicción y subsanar el vicio que debe ser oculto. Se procura que el bien transmitido se
ajuste exactamente a lo prometido, lo que permitirá tener por debidamente cumplidas las
obligaciones contractuales pactadas
II. Esta opción apunta a los bienes fungibles, que son aquellos bienes que reconocen la
existencia de otro igual, con su mínima calidad y especie, lo que los hace intercambiables.
Si el enajenante no tenía derecho para transmitir su propiedad a otro o si la cosa tuviera
defectos que la hacen impropias de su destino, deberá (a pedido del acreedor) entregarle
otra idéntica, sin defectos materiales y con un titulo existente y legitimo. Cabe aclarar que
la norma establece que existe un derecho a reclamar un bien “equivalente”
III. La última opción, es más drástica, el acreedor puede llegar a resolver el contrato. Existen
dos excepciones:
 Para el supuesto de evicción, que impide invocar esta garantía si ha transcurrido el
tiempo suficiente para que el derecho quede saneado por el transcurso del plazo
de prescripción adquisitiva (Art. 1050)
 Si el defecto oculto es subsanable (Art. 1057), pues la resolución importaría un
verdadero abuso de derecho y conspiraría contra el principio de conservación del
contrato.

El régimen vigente además, otorga al acreedor el derecho de reclamar el saneamiento en los


términos del art. 1039, la facultad de exigir que se le reparen los daños sufridos por el vicio.

Existen unas excepciones enumeradas en el art. 1040:

I. Si la transmisión fue hecha a riesgo del adquiriente


II. Si la adquisición resulta de una subasta judicial o administrativa

También puede reclamar

I. Si el adquiriente conoció, o pudo conocer el peligro de la evicción o la existencia de vicios,


pues queda claro que ha sido determinante a la hora de contratar
II. Si el enajenante no conoció, ni pudo conocer el peligro de evicción o de la existencia de
vicios, pues se advierte que no obrado de mala fe.

Sin embargo, renace el derecho de reclamar los daños, en estos últimos casos, si el enajenante actúa
profesionalmente en actividad a la que corresponde la enajenación, a menos que el adquiriente
también se desempeñe profesionalmente en esa actividad, en cuyo caso vuelve a tener la
prohibición.

f. evicción y vicios ocultos: presupuestos, extensión y efectos

Evicción: esta garantía comprende 3 aspectos (Art. 1044):

I. Turbación de derecho: es indispensable que se trate de una perturbación de derecho, es


decir, fundada en una causa jurídica; el enajenante no garantiza jamás contra las
turbaciones de hecho de los terceros (Art. 1045, inc. A), contra ellas el adquiriente tiene a
su disposición remedios policiales y judiciales; pero el enajenante no puede asumir el
papel de defensor del nuevo propietario contra las agresiones de hecho de que sea
victima. La turbación puede fundarse en un derecho real o personal o intelectual que
pretenda un tercero sobre un bien. Se necesitan los siguientes recaudos:
 Que se trate de una turbación de derecho, de la cual resulte una pérdida total o
parcial de la propiedad o posesión
 Que el tercero invoque un titulo anterior o contemporáneo a la adquisición
II. Reclamos fundados en derechos resultantes de la propiedad intelectual o industrial: la
responsabilidad por evicción se extiende a los reclamos de terceros fundados en derechos
resultantes de la propiedad intelectual o industrial, excepto si el enajenamiento se ajusto
a especificaciones suministradas por el adquiriente. El enajenamiento responde por la
turbación del derecho transmitido, pero que se exime en el caso de que haya debido
ajustarse a ciertas precisiones o especificaciones dadas por el adquiriente.
III. Turbaciones de hecho causadas por el enajenante: la primera obligación que la lealtad en
los negocios impone al enajenante, es abstenerse de todo acto que perturbe al
adquiriente en el goce del derecho que le ha transmitido. Se trata de abstenciones que le
corresponden a el en su carácter de contratante. Esta turbación puede ser de hecho
(cuando el enajenante perturbe al adquiriente con sus hechos o sus actos jurídicos) o de
derecho (ocurrirá cuando el enajenante pretenda derechos sobre la cosa vendida en virtud
de un titulo posterior a la venta). La turbación de derecho hecha por el enajenante queda
gobernada por la evicción en general, cuando se refiere a toda turbación de derecho. La
turbación de hecho excluye la responsabilidad por evicción cuando fuera causada por un
tercero deja de ser aplicable cuando esa turbación es causada por el propio enajenante,
quien responde por evicción y por el saneamiento y los daños previstos en los art. 1039 y
1040.

Distintas causas por la que se extingue la responsabilidad por evicción:

 Omisión de la citación a juicio del enajenante: la omisión de la citación a juicio en tiempo


oportuno del enajenante extingue la garantía por evicción, a menos que el adquiriente
probare que era inutil citarlo por no haber oposición justa que hacer al derecho del
accionante.
 Allanamiento a la demanda: el mismo efecto producirá el allanamiento judicial o
extrajudicial del adquiriente a la demanda del tercero, salvo que aquel demuestre que no
tenia defesas legitimas que oponer
 Omisión de defensas: también se extingue si el enajenante no comparece al proceso
judicial, y el adquiriente, obrando de mala fe, deja de oponer defensas pertinentes, o no
las sostiene, o no interpone o prosigue los recursos que tuviere contra la sentencia
desfavorable, a menos que probare que era inútil interponer o sustanciar los recursos que
tenia contra el fallo
 Sometimiento del pleito a árbitros: cesa igualmente la obligación por la evicción cuando
el adquiriente, sin consentimiento del enajenante, comprometiese el negocio en árbitros y
estos laudasen en contra del adquirientes.

UNIDAD 5: interpretación. Contrato de consumo. Extinción.


Responsabilidad
1. a. la interpretación de los contratos. Concepto

La interpretación es una reflexión sobre un texto previo, para determinar su sentido, y por ello es
una mirada hacia el pasado, intentando reconstruir lo originariamente pactado.

En la interpretación del contrato se trata de reglas particulares y no evolutivas, por lo que


normalmente no se aplican los criterios usado para la ley. El juez debe hacer una hermenéutica
individual, y no está autorizado a adaptar las reglas a nuevas circunstancias, salvo que exista una
pretensión deducida con ese objetivo.

b. reglas: intención común, interpretación restrictiva, significado de las palabras, interpretación


contextual, fuente de la interpretación, principio de conservación, protección de la confianza,
expresiones oscuras

Reglas:

i. Intención común:
Art. 1061: el contrato debe interpretarse conforme a la intención común de las
partes y al principio de la buena fe.
La intención común de las partes presume la libertad contractual, es decir, la
facultad que ellas tienen de determinar el contenido del contrato. La norma
además pone relieve en la importancia de desentrañas esa intención común, que
es más que la intención individual de cada contratante; interpretar el contrato
según la intención común de las partes, es decir, la común intención de obligarse y
de adquirir derechos, y no la intención individual de cada contratante o su
particular finalidad personal.
ii. Interpretación restrictiva:
Art. 1062: cuando por disposición legal o convencional se establecen
expresamente una interpretación restrictiva, debe estarse a la literalidad de los
términos utilizados al manifestar la voluntad. Este art no es aplicable a las
obligación del predisponente y del proveedor en los contratos por adhesión y en
los de consumo, respectivamente.
Es lo que se llama “interpretación autentica”, normalmente se la fija en el
contrato.
Esta disposición no es aplicable a las obligación del predisponente y del proveedor
en los contratos por adhesión y en los de consumos, respectivamente, en
consideración a la protección a adherentes y consumidores.

iii. Significado de las palabras:(interpretación gramatical)


Art. 1063: las palabras empleadas en el contrato deben entenderse en el sentido
que les da el uso general, excepto que tengan un significado especifico que surja
de la ley, del acuerdo de partes o de los usos y prácticas del lugar de celebración
conforme con los criterios dispuestos para la integración del contrato.
Se refiere a la expresa lealtad, concepto integrante del principio general de la
buena fe. El hombre medio, usa las palabras en sentido común y no técnico,
incluso de manera impropia, y no es posible que las diferencias culturales, o de
poder negociador, sean reafirmadas mediante la prevalencia del sentido técnico
en desmedro del débil jurídico. es esencial hablar claro, quien no lo hace debe
cargar con las consecuencias. Cuando el convenio es claro y preciso, no puede ser
modificado por interpretaciones sobre la base del espíritu de las causas, intención
presunta de las partes o las finalidades perseguidas.
Si el contrato se refiriera a un tema técnico y ambas partes fueran idóneas en el,
deberá entenderse que las palabras usadas, han sido tomadas en el sentido propio
con que se las utiliza en dicha especialidad.
Cuando se da el uso de palabras o expresiones especificas, seguidas por palabras o
expresiones genéricas, esta expresión o palabra genérica debe ser interpretada en
sentido acotado a la expresión o palabra especifica que la precede.

iv. Interpretación contextual o sistemática


art 1064: “las clausulas del contrato se interpretan las unas por medio de las otras,
y atribuyéndoles el sentido apropiado al conjunto del acto.”
El contrato es un todo indivisible. Además, cada clausula arrancada del conjunto y
tomada en si misma, puede tener un significado inexacto, solamente la
correlación armónica de cada una con las otras, permite desentrañar el significado
efectivo de cada una y de todas tomadas en conjunto.

v. Fuentes de la interpretación:
Art. 1065: cuando el significado de las palabras interpretado textualmente no es
suficiente, se debe tomar en consideración:
 La circunstancia en que se celebro, incluyendo las negociaciones
preliminares: es necesario considerar los hechos producidos al tiempo de
la celebración, la situación existente en ese momento, que en definitiva
denota la intención de las partes a la época de contratar.
 La conducta de las partes, incluso la posterior a su celebración: la
conducta anterior solo debe ser tenida en cuenta con mucha precaución,
lo importante es la posterior.
 La naturaleza y finalidad del contrato: es fundamental determinar que
contrato se ha querido celebrar y calificarlo, pues la interpretación deberá
ser acorde con eso querido.

vi. Principio de conservación:


Art. 1066: si hay dudas sobre la eficacia del contrato o de alguna de sus clausulas,
debe interpretarse en el sentido de darle efectos. Si esto resulta de varias
interpretaciones posibles, corresponde entenderlo con el alcance adecuado al
objeto del contrato.
Resulta absurdo pensar que las partes han celebrado un negocio jurídico
tendiente a que no produzca efectos, como resultaría de la nulidad posible. Lo
razonable es que han querido producir efectos jurídicos, y de allí la validez que
debe presumirse. Además, si hay varias interpretaciones posibles, deberá
preferirse aquella que se adecue mejor al objeto contractual.

vii. Protección de la confianza:


Art. 1067: la interpretación debe proteger la confianza y la lealtad que las partes
se deben recíprocamente, siendo inadmisible la contradicción con una conducta
jurídicamente relevante, previa y propia del mismo sujeto.
Se trata de una interpretación contractual que tenga en cuenta la confianza que
ha despertado una de las partes en la otra, con su comportamiento, rechazando
su contradicción.

viii. Expresiones oscuras:


Art. 1068: cuando a pesar de las reglas contenidas en los artículos anteriores
persisten las dudas, si el contrato es a título gratuito se debe interpretar en el
sentido menos gravoso para el obligado, y si es a titulo oneroso, en el sentido que
produzca un ajuste equitativo de los intereses de las partes.

c. prelación normativa
d. interpretación y calificación del contrato.

Regla general:

El contrato es un acto de autonomía privada, pero esta puede ser insuficiente , en tal caso, el juez
recurre a otras fuentes para establecer la extensión de las obligaciones.

Relación entre interpretación e integración:

- La interpretación mira al pasado, mientras que la integración se enfoca en las


consecuencias futuras del plexo obligatorio.
- La interpretación es siempre necesaria la integración solo es aplicable cuando hay
insuficiencia de la autonomía privada.

La integración se aplica en caso de lagunas en el reglamento contractual previsto por las partes. Se
requieren aspectos obligacionales no previstos:

- Las partes fueron negligentes


- Existen elementos indeterminados
- Existen elementos determinables

-Integración en el supuesto de nulidad parcial:

Planteada y resuelta la nulidad de alguna clausula, puede mantenerse la eficacia del resto, y para
ello el juez integra el vacio.

Corresponde emplear:

- Las normas imperativas, en sustitución de las clausulas que sean incompatibles con ellas
- Las normas supletorias
- Los usos y prácticas del lugar de celebración, en cuanto sean aplicable
- Y en general, lo que resulta de la regla de la buena fe.

-Integración del contenido del contrato por aplicación de normas imperativas:

A diferencia de la regla general, en este caso no se aplica el derecho supletorio, sino imperativo, y
no se sigue la voluntad de las partes, sino las valoraciones colectivas dispuestas por el legislador.
Por ello no es auto integración sino “hetero integración”.

Según el art. 961 lo contratos obligan no solo a lo que esta formalmente expreso, sino a todas las
consecuencias que puedan considerarse comprendidas en ellos, con los alcances en que
razonablemente se habría obligado un contratante cuidadoso y previsor.

-Publicidad integrada al contrato:


Las reglas aplicables a los contratos de consumo, disponen que la oferta hecha por medios
publicitarios integra el contrato. Se ha dicho que hay integración por aplicación de una norma
imperativa.

Calificación:

Si el desacuerdo de las partes se requiere al tipo de contrato celebrado y al régimen aplicable, hay
que calificar el vínculo. Lo hace un juez o arbitro. Consiste en determinar qué tipo de vínculo se ha
celebrado para establecer que normas supletorias son aplicables.

e. principio de buena fe

Debemos comenzar por distinguir entre la buena fe subjetiva, y la buena fe objetiva.

La buena fe subjetiva, o en sentido psicológico, consiste en la creencia nacida de un error


excusable, de que su conducta no va contra derecho. Este concepto consiste en creer que no se
esta dañando un interés ajeno tutelado por el derecho o en ignorar que se estaba provocando tal
daño, y además consiste en la creencia o error de una persona con la que otro sujeto, que se
beneficia, se relaciona.

La buena fe objetiva o en sentido ético consiste en la creencia y confianza que tiene un sujeto en
que una declaración surtirá en un caso concreto los mismos efectos que ordinaria y normalmente
ha producido en casos iguales. Son las reglas objetivas de la honradez en el comercio o en el
tráfico, que llevan a creer en la palabra empeñada y en que el acto sea concertado lealmente,
obrando con rectitud.

- podemos sostener que el principio general de la buena fe es una norma jurídica que impone a las
personas el deber de comportarse lealmente en el trafico jurídico, justando el comportamiento al
arquetipo de conducta social reclamada por la ética vigente. Además exige a los sujetos una
actitud positiva de cooperación y de despertar confianza en la declaraciones, manteniendo la
palabra empeñada.

Art. 961: buena fe. Los contratos deben celebrarse, interpretarse y ejecutarse de buena fe. Obligan
no solo a lo que esa formalmente expresado, sino a todas las consecuencias que puedan
considerarse comprendidas en ellos, con los alcances en que razonablemente se habría obligado
un contratante cuidadoso y previsor.

Art. 991: deber de buena fe. Durante las tratativas preliminares, y aunque no se haya formulado
una oferta, las partes deben obrar de buena fe para no frustrarlas injustificadamente. El
incumplimiento de este deber genera la responsabilidad de resarcir el daño que sufra el afectado
por haber confiado, sin culpa, en la celebración del contrato.
f. interpretación y prelación normativa en los contratos celebrados por adhesión a clausulas
generales y predispuestas y en los contratos de consumo

2. a. contratos de consumo

El contrato de consumo es aquel contrato que vincula a dos o más partes e un negocio jurídico que
se efectúa en el marco de una relación de consumo. Tiene la misma definición y alcances que el
contrato general, con la diferencia de que las partes pueden ser catalogadas una como proveedor
y la otra como usuario, con normas aplicables que regulas las relacione de consumo.

Art. 1093 define al contrato de consumo como el celebrado entre un consumidor o usuario final
con una persona humana o jurídica que actué profesional u ocasionalmente o con una empresa
productora de bienes o prestadora de servicios, pública o privada, que tenga por objeto la
adquisición, uso o goce de los bienes o servicios por parte de los consumidores o usuarios, para su
uso privado, familiar o social.

b. relación de consumo

Ley de Defensa al Consumidor N° 24.240

Ley 24.240 – art. 3: relación de consumo entre el proveedor y el consumidor o usuario […].

Art. 1092 C. C. y C.: relación de consumo es el vínculo jurídico entre proveedor y un consumidor.
Se considera consumidor a la persona humana o jurídica que adquiere o utiliza, en norma gratuita
u onerosa, bienes o servicios como destinatario final, en beneficio propio o de su grupo familiar o
social.

Queda equiparado al consumidor quien, sin ser parte de una relación de consumo como
consecuencia o en ocasión de ella, adquiere o utiliza bienes o servicios, en forma gratuita u
onerosa, como destinatario final, en beneficio propio o de su grupo familiar o social.

Este vínculo puede generarse a partir de la ley (ej. El deber de reparar al consumidor por bien o
servicio defectuoso) o del contrato, es decir que no todos los contratos de consumo tienen origen
en un contrato.

La necesidad de definir a las relaciones de consumo se debe a la finalidad protectoria y reguladora


que tiene el derecho del consumo. Dicha protección de los consumidores se persigue mediante la
imposición de obligaciones irrenunciables a los proveedores, la restricción de algunos actos a la
capacidad de los consumidores y la creación de presunciones e imperativos legales.

c. formación del consentimiento: deberes de información, seguridad y trato digno

Deberes de información: la legislación garantiza el deber de información en cabeza del proveedor.


Art. 1100: información. El proveedor está obligado a suministrar información al, consumidor en
forma cierta y detallada, respecto de todo lo relacionado con las características esenciales de los
bienes y servicios que provee, las condicione de su comercialización y toda otra circunstancia
relevante para el contrato. La información debe ser siempre gratuita para el consumidor y
proporcionada con a claridad necesaria que permita su comprensión.

La doctrina señala que la información debe ser:

- Debe ser cierta: no puede aseverar cosas que no lo son, ni esconder datos determinantes para
formar la decisión del consumidor.

- debe ser eficaz: aun siendo verdadera, no se verá cumplido el deber de informar si esta
información careciera de eficacia tanto objetiva (la información en si) como la subjetiva (la
posibilidad de comprensión del consumidor).

- Debe ser gratuita: el acceso a tal nunca puede traer un costo adicional al consumidor.

- Debe ser dada en soporte físico: solo se podrá suplantar si el consumidor optase expresamente
usar otro medio alternativo de comunicación que el proveedor disponga.

.Seguridad: en forma conjunta con el deber de información, el art. 42 de la CN establece el


derecho de los consumidores a que se proteja su salud y sus intereses económicos en el ámbito de
las relaciones de consumo.

A su vez este derecho se encuentra regulado en la ley 24.240 en sus arts 5, 6 y 40.

Art. 5: protección al consumidor. Las cosas y servicios deben ser suministrados o prestados en
forma tal que, utilizados en condiciones previsibles o normales de uso, no presenten peligro
alguno para la salud o integridad física de los consumidores o usuarios.

Art. 6: cosas y servicios riesgosos. Las cosas y servicios, incluidos los servicios públicos
domiciliarios, cuya utilización pueda suponer un riesgo para la salud o la integridad física de los
consumidores o usuarios, deben comercializarse observando los mecanismos instrucciones y
normas establecidas o razonables para garantizar la seguridad de las mismas.

En tales casos debe entregarse un manual en idioma nacional sobre el uso, la instalación y
mantenimiento de a cosa o servicio de que se trate y brindarle adecuado asesoramiento. Igual
obligación regirá en todos los casos e que se trate de artículos importados, siendo los sujetos
anunciados en el art. 4to responsables de la traducción.

Art. 40: responsabilidad. Si el daño al consumidor resulta del vicio o riesgo de la cosa o de la
prestación del servicio responderán el productor, el fabricante, el importador, el distribuidor, el
proveedor, el vendedor y quien haya puesto su marca en la cosa o servicio. El transportista
responderá por los daños ocasionados a la cosa con motivo o en ocasión del servicio. [..]
.Trato digno: el consumidor tiene derecho a recibir un trato digno. Este no puede ver afectada u
dignidad como persona, es decir, derecho a no ser expuesto a situaciones vergonzantes,
humillantes o vejatorias. El proveedor no puede efectuar trato discriminatorio alguno, incluyendo
la prohibición de tarifas diferenciadas para extranjeros.

El incumplimiento por parte del proveedor conlleva al deber de reparar todos los perjuicios
patrimoniales y extra patrimoniales causados al consumidor.

d. publicidad

art. 1101: publicidad. Está prohibida toda publicidad que:

a) contenga indicaciones falsas o de tal naturaleza que induzcan o puedan inducir a error al
consumidor, cuando recaigan sobre elementos esenciales de producto o servicio.
b) Efectué comparaciones de bienes o servicios cuando sean de naturaleza tal que conduzcan
a error al consumidor
c) Sea abusiva discriminatoria o induzca al consumidor a comportarse de forma perjudicial o
peligrosa para su salud o seguridad.

e. modalidades especiales: celebrados fuera de los establecimientos comerciales, a distancia,


electrónicos

- contratos celebrados fuera del local comercial: según lo dispuesto en el art 1104 es aquel
contrato que resulta de una oferta o propuesta sobre un bien o servicio concluido en el servicio o
lugar de trabajo del consumidor, en la vía publica, o por medio de correspondencia, los que
resultan de una convocatoria al consumidor o usuario al establecimiento de proveedor o a otro
sitio, cuando el objetivo de dicha convocatoria sea total o parcialmente distinto al de la
contratación, o se trate de un premio u obsequio.

Lo característico aquí es que no es el consumidor quien concurre hacia e bien o servicio, sino a la
inversa; se da una especie de invasión al consumidor.

- contratos celebrados a distancia: art. 1105. Son aquellos concluidos entre un consumidor y un
proveedor con el uso exclusivo de medios de comunicación a distancia, entendiéndose por tales
los que pueden ser utilizados sin la presencia física simultánea de las partes contratantes. En
especial, se consideran los medios postales, electrónicos, telecomunicaciones, así como servicios
de radio, televisión o prensa.

Constituye una evolución de los “contratos entre ausentes” de los contratos paritarios, que son
aquellos que se concluyen a través de medios de comunicación que no requiere la presencia física
de las partes entre si.
- Contratos por medios electrónicos: pueden celebrarse de distintas maneras

. Contratación directa entre el consumidor y el proveedor: sin mayores dificultades, en tanto el


medio electrónico ha sido una estrategia de comercialización escogida por el proveedor y tendrá
responsabilidad directa por el empleo de dichos métodos. Existe un vínculo directo entre el
consumidor y el proveedor.

. Contratación mediante servicios de intermediación: refiere a la celebración de contratos de


consumo mediante plataformas de intermediación. Se desarrolla una plataforma de intercambios
donde quienes ofrecen los bienes o servicios los publican en dicha plataforma, mientras a dicha
plataforma acceden millones de usuarios interesados en contratar.

f. oferta. Lugar. Revocación. Gastos. Excepciones

Oferta: art. 1108: ofertas por medios electrónicos. Las ofertas de contratación por medios
electrónicos o similares deben tener vigencia durante el periodo que fije el oferente o, en su
defecto, durante todo el tiempo que permanezcan accesibles al destinatario. El oferente debe
confirmar por vía electrónica y sin demora la llegada de la aceptación.

Lugar: el art. 1109 establece como lugar de cumplimiento aquel en el que el consumidor recibió o
debió recibir la prestación, lo cual sirve para fijar la jurisdicción. Aunque igualmente el consumidor
puede elegir la jurisdicción entre la del lugar del cumplimiento de la prestación o la del domicilio
del deudor.

Revocación: art. 1110. En los contratos celebrados fuera de los establecimientos comerciales y a
distancia, el consumidor tiene derecho irrenunciable de revocar la aceptación dentro de los diez
días computados a partir de la celebración del contrato.

Si la aceptación es posterior a la entrega del bien, el plazo debe comenzar a correr desde que esta
última se produce,

Si el plazo vence en día inhábil, se prorroga hasta el primer día hábil siguiente.

Las clausulas, pactos o cualquier modalidad aceptada por el consumidor en este periodo que tenga
por resultado la imposibilidad de ejercer el derecho de revocación se tienen por no escritos.

Art. 1111: deber de informar el derecho a la revocación. El proveedor debe informar al


consumidor sobre la facultad de revocación mediante su inclusión en caracteres detectados en
todo documento que presta al consumidor en la etapa de negociaciones o en el documento que
instrumenta el contrato concluido, ubicada como disposición inmediatamente anterior a la firma
del consumidor o usuario. El derecho de revocación o se extingue si el consumidor no ha sido
informado debidamente sobre su derecho.
Art. 1112: forma y plazo para informar la revocación. La revocación debe ser notificada al
proveedor por escrito o medios electrónicos o similares, o mediante la devolución de la cosa
dentro del plazo de diez días computados conforme a lo previsto en el art 1110.

Art. 1113: efecto del ejercicio de revocación. Si el derecho de revocar es ejercido en tiempo y
forma por el consumidor, las partes quedan liberadas de sus obligaciones respectivas y deben
restituirse reciproca y simultáneamente las prestaciones que han cumplido.

Art. 1114: imposibilidad de devolución. La imposibilidad de devolver la prestación del objeto del
contrato no priva al consumidor de su derecho a revocar. Si la imposibilidad le es imputable, debe
pagar al proveedor el valor de mercado que la prestación tiene al momento del ejercicio del
derecho a revocar, excepto que dicho valor sea superior al precio de la adquisición, en cuyo caso la
obligacion queda limitada a este ultimo.

- Una vez efectivizada la revocación la partes quedan liberadas, debiéndose devolver mutuamente
las prestaciones recibidas. La situación se retrotrae pues l momento anterior a la celebración del
contrato.

Gastos: art. 1115. El ejercicio del derecho de revocación no debe implicar gasto alguno para el
consumidor. En particular, el consumidor no tiene que reembolsar cantidad alguna por la
disminución del valor de la cosa que sea consecuencia de su uso conforme a lo pactado o a su
propia naturaleza, y tiene derecho al reembolso de los gatos necesarios y útiles que realizo en ella.

Excepciones:

art. 1116: excepciones al derecho de revocar. Excepto pacto en contrario, el derecho de revocar
no es aplicable a los siguientes contratos:

a) lo referidos a productos confeccionados conforme a las especificaciones suministradas por


el consumidor o claramente personalizadas o que, por su naturaleza, no pueden ser
devueltos o puedan deteriorarse con rapidez
b) los de suministro de grabaciones sonoras o de video, de discos y de programas
informáticos que han sido decodificados por el consumidor, así como de ficheros
informáticos, suministrados por vía electrónica, susceptibles de ser descargados o
reproducidos con carácter inmediato para su uso permanente
c) los de suministro de prensa diaria publicaciones periódicas y revistas.

g. clausulas abusivas

art. 1117: normas aplicables. Se aplican las normas dispuestas por las leyes especiales y los arts
985, 986, 987 y 988, existan o no clausulas generales predispuestas por una de las partes.
Art. 1118: control de incorporación. Las clausulas incorporadas a un contrato de consumo pueden
ser declaradas abusivas aun cuando sean negociadas individualmente o aprobadas expresamente
por el consumidor.

Art. 1119: regla general. Sin perjuicio de lo dispuesto en las leyes especiales, es abusiva la clausula
que, habiendo sido o no negociada individualmente, tiene por objeto o por efecto provocar un
desequilibrio significativo entre los derechos y las obligaciones de las partes, en perjuicio del
consumidor.

Art. 1120: situación jurídica abusiva. Se considera que existe una situación abusiva cuando el
mismo resultado se alcanza a través de la predisposición de una pluralidad de actos jurídicos
conexos.

Art. 1121: limites. No pueden ser declaradas abusivas:

a) las clausulas relativas a la relación entre el precio y el bien o el servicio procurado.


b) Las que reflejan disposiciones vigentes en tratados internacionales o en normas legales
imperativas.

h. control judicial

Art. 1122: el control judicial de las clausulas abusivas se rige, sin perjuicio de lo dispuesto en la ley
especial, por las siguientes reglas:

a) La aprobación administrativa de los contratos o de sus clausula no obsta al control;


b) Las clausulas especiales se tienen por no convenidas;
c) Si el juez declara la nulidad parcial del contrato, simultáneamente lo debe integrar, si no
puede subsistir sin comprometer su finalidad;
d) Cuando se aprueba una situación jurídica abusiva derivada de contratos conexos, el juez
debe aplicar lo dispuesto en el art 1075 (efectos de los contratos conexos)

3. a. extinción, modificación y adecuación del contrato.

Extinción: causas:

 Revocación
 Rescisión unilateral o bilateral
 La resolución
 Imposibilidad de cumplimiento
 Agotamiento del plazo extintivo
 Muerte del deudor
Modos de extinción del contrato:

 Dación de pago: art: 942: “la obligación se extingue cuando el acreedor voluntariamente
acepta en pago una prestación diversa de la adeudada.”
 Novación: Art. 933: “la novación es la extinción de una obligación por la creación de otra
nueva, destinada a reemplazarla”.
 Obtención de la finalidad del acreedor: en estos supuestos el acreedor resulta
desinteresado por un medio diferente de pago:
I. Entrega de lo debido, sin animus solvendi
II. El pago que realiza un tercero por su cuenta
III. Obtención de lo debido mediante la ejecución forzada del deudor, o de un tercero
a costa del deudor, o mediante el pago de una indemnización sustitutiva
IV. El pago recibido por un tercero desinteresado al acreedor
 Compensación: art. 921: “la compensación de las obligaciones tiene lugar cuando dos
personas, por derecho propio, reúnen la calidad del acreedor y deudor recíprocamente,
cualesquiera que sean las causas de una y otra deuda. Extingue con fuerza de pago las dos
deudas, hasta el monto de la menor, desde el tiempo en que ambas obligaciones
comenzaron a coexistir en condiciones de ser compensables.”
 Transacción: art. 1641: “contrato por el cual las partes, para evitar un litigio, o ponerle fin,
haciéndose concesiones reciprocas, extinguen obligaciones dudosas o litigiosas.”
 Confusión: Art. 931 y 932: la obligación se extingue por confusión cuando las calidades del
acreedor y de deudor se reúnen en una misma persona y en un mismo patrimonio. En sus
efectos, la obligación queda extinguida, total o parcialmente, en proporción a la parte de
la deuda en que se produce la confusión.
 La muerte del deudor: es un modo extintivo cuando hay una obligación inherente a la
persona y asi esta regulado en materia del contrato de obra y servicios (Art. 1260), de
mandato (Art. 1329, inc. E); de agencia, concesión y franquicia (Arts. 1494, inc. A, 1509 y
1522, inc. A); de comodato (Art. 1541, inc. D, con sus excepciones).
 Vencimiento de plazo: Art. 950: si las personas pactan un plazo resolutorio, su
vencimiento produce la extinción del vinculo.

Modificación: si el contrato debe ser celebrado respetando una forma determinada, sea porque la
ley exige, sea porque las partes la acordaron, las posteriores modificaciones que las partes
convengan deben ser hechas con la misma formalidad.

Esta regla prevista en el art. 1016, admite algunas excepciones:

 Si las modificaciones versan sobre estipulaciones accesorias o secundarias


 Si existe una disposición legal que expresamente admita que no se cumpla con la
modificación con la formalidad fijada para el contrato original
b. imposibilidad del cumplimiento: la ineficacia surge porque la prestación a cargo de uno de los
contratantes se torna de cumplimiento imposible a causa de un hecho posterior a la celebración y
no imputable.

La causa no obsta al cumplimiento de la relación jurídica es sobreviniente, ya que si fue originaria


se trataría de un supuesto de nulidad.

Art. 955: “la imposibilidad sobrevenida, objetiva, absoluta y definitiva de la prestación, producida
por caso fortuito o fuerza mayor, extingue la obligación, sin responsabilidad. Si la imposibilidad
sobreviniente debido a causas imputables al deudor, la obligación modifica su objeto y se
convierte en la de pagar una indemnización de los daños causados.”

La resolución también tiene en cuenta la imposibilidad de cumplimiento a los fines de eximir a la


parte cumplidora del requerimiento previo previsto para la clausula resolutoria implícita. (Art.
1088, inc C)

c. nulidad, prescripción y caducidad:

Nulidad: es una sanción prescripta en la ley, que priva a los contratos de sus efectos normales en
razón de un vicio originario, es decir, anterior o concomitante con la celebración del acto.

Principio general: la nulidad de una clausula no causa la nulidad de todo el acto, si las clausulas
fueran separables (nulidad parcial). En estos casos, el juez debe integrar el contrato de acuerdo a
su naturaleza y los intereses que razonablemente puedan considerarse perseguidos por las partes.

Si las disposiciones no son separables, se declara la nulidad total del contrato (Art. 389)

Prescripción y caducidad: es una figura jurídica que considera dos cuestiones: la inacción del
titular de un derecho y el transcurso del tiempo fijado por la ley. La prescripción no extingue el
contrato, pero si extingue la acción derivada de el, extinción que se produce si ha transcurrido el
plazo legal y el titular del derecho no lo ha reclamado. La caducidad no solo hacer perder la acción,
sino que extingue también el derecho no ejercido.

d. rescisión, revocación y resolución

Rescisión unilateral: aquí no es necesario un acuerdo de voluntades; una sola de las partes (por
propia voluntad) está facultada a poner fin a las relaciones contractuales, total o parcialmente
(Art. 1077). Esta facultad es reconocida por la ley en ciertos contratos, como el de trabajo, que
puede ser rescindido por voluntad unilateral del obrero o del patrón.

También es posible que las partes hayan pactado la posibilidad de rescindir el contrato de manera
unilateral. Si es así, no puede ser ejercida abusiva, desconsiderada o desmedida.

Revocación: el contrato puede ser extinguido, total o parcialmente por la declaración de una de
las partes, mediante revocación, en los casos en que el mismo contrato o la ley le atribuya tal
facultad. Sus efectos son solo para el futuro.
La revocación exige una causa jurídica que la justifique, será necesario que nadie ingratitud del
donatario o incumplimiento por este de los cargos que le fueron impuestos. La revocación debe
ser pedida.

La revocación deja sin efecto el contrato retroactivamente; esta regla es absoluta entre las partes,
no así con los terceros que hubieran adquirido derechos sobre las cosas transmitidas, que quedan
protegidos.

Resolución: no es el resultado de un nuevo contrato, sino que supone la extinción del contrato por
virtud de un hecho posterior a la celebración, hecho que a veces es imputable a la otra parte o que
puede ser extraño a la voluntad de ambos. La resolución del contrato puede operar ipso iure o
bien puede requerir la manifestación de voluntad de la parte interesada en ella.

La resolución deja sin efecto el contrato entre las partes, de manera retroactiva, su consecuencia
es volver las cosas al estado en que se encontraban antes de la celebración del contrato. Sus
efectos son similares a los de nulidad, pero se diferencian claramente en que el hecho que
provoca la resolución es siempre posterior al contrato, en tanto que el que da lugar a la nulidad,
debe ser anterior o concomitante con la celebración.

Respecto de terceros, deberá diferenciarse según si se trata de adquirientes a titulo oneroso o


gratuito, y si son de buena o mala fe. La norma antes citada protege solo el derecho adquirido a
titulo oneroso por terceros de buena fe.

e. extinción por declaración de una de sus partes: disposiciones generales

El código establece una serie de disposiciones (Art. 1078) que resultan comunes a todos los tipos
de extinción del contrato de manera unilateral, comprendiéndose tanto la rescisión unilateral,
como la revocación, como la resolución. Estas normas son aplicables siempre y cuando no exista
una disposición en contrario, prevista por la ley o por el propio contrato.

I. Para extinguir de manera unilateral el contrato es necesario comunicar la decisión a la otra


parte.
II. La extinción del contrato puede declararse extra judicialmente o demandarse ante un juez
III. La otra parte puede oponerse a la extinción del contrato si, al tiempo de la declaración, el
declarante no ha cumplido, o no está en situación de cumplir la prestación que debía
realizar para poder ejercer la facultad de extinguir el contrato.
IV. La extinción del contrato no queda afectada por la imposibilidad de restituir que tenga la
parte que no la declaro. Si ocurre, esta última deberá reparar el daño que eventualmente
pueda causar.
V. La parte que tiene derecho a extinguir el contrato puede optar por requerir su
cumplimiento y la reparación de daños. Esta demanda no impide deducir ulteriormente
una pretensión extintiva.
VI. La demanda ante un tribunal de extinción del contrato impide deducir ulteriormente una
pretensión de cumplimiento.
VII. La extinción del contrato deja subsistentes las estipulaciones referidas a las restituciones,
a la reparación de daños, a la solución de las controversias y a cualquiera otra que regule
los derechos y obligaciones de las partes tras la extinción. Los reclamos pertinentes
deberán ser deducidos judicialmente.

Efectos:

I. La rescisión unilateral y la revocación producen efectos solo para el futuro


II. La resolución produce efectos retroactivos entre las partes y no afecta el derecho
adquirido a titulo oneroso por terceros de buena fe.

Restitución de los casos de extinción: la idea primaria es la restitución de lo recibido; si ello no


fuere posible, por ej su destrucción, deberá entregarse su valor. Asimismo, deberán reintegrarse
frutos y accesorios.

f. resolución total o parcial:

Resolución parcial: se da ante supuestos de incumplimientos menores, que afectan solo a partes
accesorios del contrato. En estos casos, incluso el juez está autorizado a rechazar la demanda por
solución y decidir la cuestión sobre la base de la indemnización de los daños derivados de
incumplimiento parcial, manteniendo en pie el resto del contrato, con fundamento en el principio
de conservación del contrato. Lo contrario significaría un ejercicio abusivo e injustificable del
derecho de resolución.

Resolución total: es un modo extintivo. El hecho que tiene tal efecto desequilibrante puede ser
imputable a una de las partes, como ocurre con el incumplimiento de la obligación pactada, o bien
puede ser ajeno a su conducta, como ser el acaecimiento del hecho futuro e incierto en el acto
sujeto a condición resolutoria.. es un incumplimiento grave que afecta al objeto del contrato, lo
que causa que se extinga.

g. frustración de la finalidad del contrato:

Cuando el móvil determinante, finalidad perseguida por las partes, manifestada en el contrato se
frustra, la parte perjudicada puede reclamar la resolución, siempre que se cumplan los recaudos
que la propia ley exija.

El código plantea, que la causa debe existir en la formación del contrato y durante su celebración y
subsistir durante su ejecución, lo que permitiría afirmar que la frustración del fin contractual es un
capítulo de la causa. Sin embargo, no puede obviarse que la frustración del fin del contrato ha sido
regulada más adelante, como un modo de extinción, modificación o adecuación de los contratos, y
sin recurrir a la noción de causa.

Efectos: la resolución es operativa cuando la parte afectada comunica su declaración extintiva a la


otra. Se deberán cumplir lo dispuesto en los art. 1078 y sgtes.

La resolución que prevé la ley importara que:


 Se puede repetir la prestación cumplida antes del acontecimiento frustrante, si carece de
reciprocidad
 Nada se deberá si no se ha hecho el pago antes del acontecimiento frustrante
 Las prestaciones reciprocas, equivalentes y cumplidas antes del acontecimiento frustrante
quedaran firmes, siempre que se traten de contratos de ejecución continuada o periódica
 Los gastos realizados antes del acontecimiento frustrante o después de él pero en la
ignorancia de que hubiera sucedido son resarcibles

h. clausula resolutoria expresa o tacita: concepto y presupuestos

La clausula resolutoria, también llamada pacto comisorio, es aquella que permite a los
contratantes reclamar la resolución del contrato cuando una de ellas no ha cumplido con las
obligaciones a su cargo.

Aunque la clausula resolutoria no hubiera sido pactada de manera expresa, existe la posibilidad de
que se resuelva el contrato bilateral.

Clausula resolutoria expresa: Art. 1086: “las partes pueden pactar expresamente que la resolución
se produzca en caso de incumplimientos genéricos o específicos debidamente identificados. En este
supuesto, la resolución surte efectos a partir de que la parte interesada comunica a la incumplidora
en forma fehaciente su voluntad de resolver.”

Puede ocurrir que las parten hayan previsto expresamente en el contrato la clausula resolutoria.

La diferencia radical con el pacto comisorio tácito, es que si no se hubiera previsto la clausula
expresa en el contrato, se podría resolver igualmente, pero la parte interesada deberá darle al
deudor una última oportunidad de cumplir; si el pacto fue expreso, el cumplidor se limita a
comunicar al incumplidor su voluntad de resolver.

Clausula implícita: Art. 1087: “en los contratos bilaterales, la clausula resolutoria es implícita y
queda sujeto a lo dispuesto en los art. 1088 y 1089.”

Cuando la clausula resolutoria no ha sido pactada expresamente, es necesario el requerimiento, es


decir, se brinda al deudor una ocasión de cumplir. Vencido el plazo fijado, la obligación se resuelve
por el mero cumplimiento del plazo y sin necesidad de otra actividad ulterior del acreedor. Por lo
tanto, si el acreedor requiere el cumplimiento pero sin ánimo de resolver el contrato, deberá
aclarar que no persigue tal resolución, sino ella se producirá automáticamente.

Presupuestos de la resolución por la clausula resolutoria implícita: Art. 1088: “la resolución por
clausula resolutoria implícita exige:

a) Un incumplimiento en los términos del art. 1084. Si es parcial, debe privar sustancialmente
de lo que razonablemente la parte tenía derecho a esperar en razón del contrato.
b) Que el deudor este en mora
c) Que el acreedor emplace al deudor bajo apercibimiento expreso de la resolución total o
parcial del contrato, a que cumpla en un plazo no menor de 15 días, excepto que de los
usos, o de la índole de la prestación, resulte la procedencia de uno menor. La resolución se
produce de pleno derecho al vencimiento de dicho plazo. Dicho requerimiento no es
necesario si ha vencido un plazo esencial para el cumplimiento, si la parte cumplidora a
manifestado su decisión de no cumplir, o si el cumplimiento resulta imposible; en tales
casos, la resolución total o parcial del contrato se produce cuando el acreedor la declara, y
la comunicación es recibida por la otra parte.”

Resolución por ministerio de la ley: Art. 1089: “el requerimiento dispuesto en el art 1088 no es
necesario en los casos en que la ley facultad a la parte para declarar unilateralmente la extinción
del contrato, sin perjuicio de disposiciones especiales.”

4. a. responsabilidad en los contratos: principios generales

Concepto: hay responsabilidad contractual siempre que el ilícito se configure por el


incumplimiento de una obligación preexistente, lo cual abarca los supuestos en que esa obligación
nace de un contrato o de un acto unilateral.

Etapas:

1) Cumplimiento, caracterizado por ser una actuación voluntaria del sujeto. Hay
voluntariedad.
2) Ejecución forzada directa, ante el incumplimiento se pide el cumplimiento especifico de la
obligación. Aquí no hay voluntariedad sino ejecución judicial.
3) Ejecución forzada indirecta o por equivalente, al no ser posible la ejecución forzada
directa, o al no desearla el acreedor, puede pedir una indemnización que consiste en el
equivalente dinerario. No hay voluntariedad, sino ejecución, y un cambio de objeto en el
caso de indemizacion por equivalente.

El paso de la primera a la segunda, es producida por el incumplimiento, el que pueda adoptar las
sgtes formas:

 Incumplimiento absoluto:
1) No hay prestación, y no se puede cumplir por imposibilidad atruible al deudor o
porque el acreedor ha perdido el interés en forma definitiva
2) El acreedor no reclamara el cumplimiento forzado, sino la indemnización
sustituvia (cumplimiento por equivalente) mas la indemnización de los otros
daños que haya sufrido
 Incumplimiento tardio:
1) No se realizo la prestación en el tiempo previsto, pero todavía es posible e idónea
para satisfacer el interés del acreedor
2) El acreedor puede reclamar la prestación adeudada mas el resarcimiento del daño
moratorio
 Incumplimiento defectuoso
1) Se cumple de modo inexacto (violación positiva del contrato)
2) El acreedor puede solicitar el cumplimiento no defectuoso o el equivalente
dinerario

b. responsabilidad pre contractual: teorías de ihering y faggella

es necesario referirse a la tesis de Ihering y de Faggella cuando se trata de la reparación por los
daños causados durante las tratativas preliminares.

En su libro “culpa in contrabendo”, Ihering sostuvo que era posible que una persona sufriera algún
daño como consecuencia de una acción culposa realizada por otra, en el periodo previo a la
formación del contrato, cuando se estaba contrayendo la relación contractual.

El jurista valora la culpa al obrar, no asi la buena o mala fe. Es la violación de la obligación de
diligencia que las partes deben observar en el transcurso de las relaciones anteriores a la
celebración del contrato, evitándose asi que cada futuro contratante sea victima de negligencia
del otro. Este periodo nada con la emisión de la oferta.

La visión de Ihearing fue ampliada por Faggella. Para el jurista italiano, el campo de la
responsabilidad se extiende mas alla del momento en el que se formula la oferta, pues nace
cuando los eventuales contratantes comienzan las tratativas del negocio, y finaliza cuando el
contrato se perfecciona o se rompen las negociaciones entabladas.

La responsabilidad no será igual durante todo ese periodo, y ello influirá en el resarcimiento del
daño causado. Faggella divide el tiempo en 2 etapas:

 Una que va desde el inicio de la tratativa hasta la oferta, y en la que las partes disctuen e
intercambian ideas, proyectan el contrato, y analizan sus clausulas. Se puede subdividir en
2:
1) Un primer tiempo que abarca el inicio de las conversaciones o tanteos
2) Compre el ordenamiento y proyecto de contrato
 La otra, a partir de la oferta, en adelante.

La legislacion argentina sigue la visión de Faggella.

El art 991 dispone que lo que debe resarcirse el daño que sufra el afectado por haber confiado, sin
su culpa, en la celebración del contrato. Según borda, lo que debe indemnizarse es el llamado
daño al interés negativo. Este daño abarca, el daño emergente y la ganancia frustrada por la no
realización de otro contrato con un tercero, siempre que acredite que este ultimo fue desechado
para poder cerrar el contrato que finalmente se frustro por culpa de la persona con quien se
pretendía contratar.

La interrupción de la negociación dispuesta por una de las partes puede no ser abusiva y, por
tanto, no generar responsabilidad alguna, si han habido conductas de la contraria que justificasan
la interrupción, tales como la insuficiente información dada o la violación de un pacto de
confidencialidad, o si existe una verdadera imposibilidad de llegar a un acuerdo definitivo, que
podrá motivarse en diferentes motivos, tales como las diferencias entre las partes en el precio o
en la calidad de la cosa que se promete.

c. responsabilidad pos contractual

se caracteriza por ser una conducta violatoria de un deber colateral basado en lo acordado por las
partes o en la buena fe, que lesiona una posición jurídica de pleno goce de los bienes luego del
cumplimiento del contrato. Tiene los sgtes elementos:

 Cumplimiento de las obligaciones nucleares: se requiere que el contrato haya sido


cumplido para que se pueda hablar de un periodo “post”. El cumplimiento en este caso
quiere decir que se han satisfecho las obligaciones nucleares, y que, como consecuencia,
el contrato se agota en su función principal. Pero subsisten deberes cuya violación acarrea
responsabilidades.
 Existencia de deberes colaterales: los deberes colaterales existen en todo contrato porque
se derivan de la buena fe, y son: seguridad, custodia, consejo, información,
confidencialidad, lealtad. La responsabilidad pos contractual surge cuando se violan
alguno de esos deberes.
 Existencia de un hecho violatorio de esos deberes: el hecho es ilícito porqrue viola esos
deberes, y no por la fecha de ocurrencia. Porque puede haberse producido con
anterioridad o con posterioridad del agotamiento de las obligaciones nucleares.

Ej: el que vende una empresa a otro, y luego de cumplido el contrato abre otra empresa igual en la
misma zona.

Hasta cuando duran estos deberes? El limite máximo es la prescripción liberatoria, pero pueden
extinguirse antes, sea porque se venció el plazo fijado por las partes, o la condición, o bien dejaron
de ser relevantes por carecer de nexo causal con la situación contractual.

Bolilla VI: contrato de transferencia de propiedad


1. a. compraventa: concepto y caracteres. Disposiciones generales.

Concepto:

Según el art. 1123 hay compraventa si una de las partes se obliga a transferir la propiedad de una
cosa y la otra a pagar un precio cierto en dinero. Hay que resaltar que este contrato se centra en la
obligación de hacer lo pactado, y no en la transferencia de la propiedad ni la entrega efectiva del
dinero.

Será contrato de compraventa cuando una parte se obligue a transferir la propiedad de una cosa y
la otra a pagar un precio en dinero. Pero, si alguno de estos requisitos false, sea porque no se
procure transmitir el dominio de la cosa sino solo su uso, sea porque lo que se pretende transferir
no es el dominio de una cosa sino solo un derecho, sea porque nada se paga o porque se da otra
cosa a cambio, el contrato no será de compraventa, aun cuando las partes lo hayan calificado de
esa manera.

La compraventa tiene importancia en las relaciones económicas y jurídicas de los hombres. La


circulación de bienes obedece en su casi totalidad a este dispositivo legal. Con frecuencia traspasa
las fronteras y adquiere interés internacional, haciendo a la par mas complejo su régimen legal.

Caracteres:

 Bilateral: implica obligaciones para ambas partes


 Consensual: porque produce todos sus efectos por el solo hecho del consentimiento y sin
necesidad de la entrega de la cosa o del precio
 No es formal: aun en el caso de que tenga por objeto la transmisión de inmuebles, la
escritura publica es un requisito de la transferencia del dominio, pero no del contrato en
si, que puede ser válidamente celebrado por instrumento privado, o verbalmente.
 Oneroso
 Conmutativo: es de su naturaleza que los valores intercambiados sean aproximadamente
equivalentes
 Puede llegar a ser aleatorio: ocurre cuando se compra una cosa que puede o no existir

Disposiciones generales:

b. elementos: la cosa y el precio.

La cosa: art. 1129: “pueden venderse todas las cosas que pueden ser objeto de los contratos.” Hay
que determinar cuales son las condiciones que debe reunir la cosa para ser objeto del contrato de
compraventa:

 Debe ser una cosa en sentido propio; debe tratarse de un objeto material susceptible de
apreciación económica. También las disposiciones referentes a las cosas son aplicables a la
energía y a las fuerzas naturales susceptibles de ser puestas al servicio del hombre. (Art.
16)
 Debe tratarse de una cosa cuya venta no este prohibida por la ley o que sea contraria a la
moral y a las buenas costumbres; se considera fuera del comercio, los bienes cuya
transmisión este expresamente prohibida por la ley o por actos jurídicos, en cuanto el
código permita tales prohibiciones, art. 234. Asi por ej, los bienes públicos del estado. La
prohibición puede ser expresa del contrato mismo.
 La cosa debe ser determinada o determinable; según el art. 1005 la cosa es determinada
cuando se fija su especie o su genero, según su caso, aunque no lo estén en su cantidad, si
esta puede ser determinada. Es determinable cuando se establecen los criterios
suficientes para su individualización.
 Debe tener existencia real o posible; pueden vender las cosas existentes y au las futuras,
pero no las que, vendidas como existentes, no han existido nunca o han dejado de existir
en el momento de formarse el contrato; en este caso, el contrato es nulo. Si la cosa ha
dejado de existir parcialmente, el comprador puede demandar la entrega de la parte que
existe y la reducción proporcional del precio (Art. 1130); pero también puede dejar sin
efecto el contrato, pues tal derecho nace como consecuencia de la obligación del
vendedor de entregar la cosa prometida (claro que no debe ser abusivo).

c. venta de cosa ajena y cosa futura:

Cosa ajena: cuando una persona se obliga a vender algo que no le pertenece, es obvio que toma el
compromiso de adquirirlo primero y luego enajenarlo al comprador. No hay razón para prohibir el
contrato. El art 1132 juega principalmente cuando se trata de cosas ciertas y determinadas.
Cuando comprador y vendedor contratan sobre la cosa que pertenece a un tercero, teniendo
pleno conocimiento de tal circunstancia, debe interpretarse como un compromiso contraído por el
vendedor de transmitir regularmente la propiedad de la cosa al comprador. Cuando el contrato ha
sido seguido de la entrega efectiva de la cosa mueble no registrable al comprador, se ha
transmitido el dominio regularmente. También es valido el contrato de compraventa hecho por el
heredero aparente a favor de un comprador de buena fe, que ignora la existencia de herederos de
mejor o de igual derecho que el heredero aparente.

Efectos: hay distintas situaciones:

1) Ambas partes sabían que la cosa era ajena: depende de si se ha garantizado o no el éxito
de la promesa. Después que hubiese entregado la cosa no puede demandar la nulidad de
la venta ni la restitución de la cosa.
2) Ambas partes ignoraban que la cosa era ajena: el acto es nulo y la nulidad puede ser
pedida por el vendedor hasta el momento de la entrega de la cosa (no después) y por el
comprador en cualquier momento. No solo se puede reclamar la nulidad, sino también la
restitución del precio y los daños y perjuicios, todo lo cual debe ser abonado por el
vendedor auqneu sea de buena fe. Es una consecuencia de la garantía de evicción que
pesa sobre el vendedor.
3) Solo el vendedor sabia que la cosa era ajena: el vendedor no podrá reclamar la nulidad de
la venta ni aun antes de la entrega; sin embargo hasta ese momento podrá excepcionarse
oponiéndose a la entrega, pues nadie puede ser obligado a consumar un hecho ilícito.
Luego de la entrega no podrá demandar la nulidad ni pedir la restitución, esto estaba
establecido en el código de velez, y parece razonable mantenerla ante la ausencia de
disposición expresa en el nuevo código. En cualquier caso, deberá restituir el precio y
pagar los daños y perjuicios. El comprador esta en condiciones de pedir la ulidad en los
mismos casos y con la misma extensión que en los casos anteriores
4) Solo el comprador sabia que la cosa era ajena: en tal caso no tendrá derecho a reclamar
daños y perjuicios ni a que se le restituya el precio. Asi lo establecia el código de velez, y
parece prudente mantener la misma solución dado que el nuevo código no tiene una
disposición expresa. Sin embargo, si la cosa aun no le hubiera sido entregada, podrá
excepcionarse, negándose a recibirla y a pagar el precio, pues adie puede ser obligaod a
consumar un hecho ilícito.
Cuando se niega al comprador el derecho a reclamar la devolución del precio, se entiende
que solo se alude al caso de que haya obrado de mala fe. Si no existió propósito doloso, el
comprador podrá reclamar la restitución del precio por via de una condictio sine causa
pero no los daños e intereses.

Efectos respecto del dueño: los actos por terceros interesados en comprar o vender sus cosas le
son en principio inoponibles. Tiene sus excepciones respecto del adquiriente de buena fe:

 El comprador de buena fe de una cosa mueble no registrable no hurtada ni perdida, y que


ha entrado en posecion de ella, puede rachazar la acción reivindicatoria del dueño; ugyak
derecho tiene el comprador de buena fe que adquirió una cosa mueble o inmueble del
heredero aparante o el que la subadquirio de buena fe y a titulo oneroso, a menos que el
primer contrato se haya realizado sin intervención del titular del derecho
 El poseedor de buena fe tiene derecho a los frutos percibidos antes de descubrir el vicio
de su titulo
 El adquiriente de buena fe de un inmueble tiene derecho a invocar la usucapión breve de
10 años.

La venta puede quedar convalidada o consolidada por los sgtes modos:

1) Ratificación del propietario: si el propio dueño ratifica el acto, la nulidad no tendría


justificativo razonable. Puede ser expresa o tacita.
2) Adquisición del dominio por el vendedor con posteriorirdad a la venta: se puede hacer por
sucesión universal o por sucesión particular.

Venta de cosa futura:

En principio, la compraventa debe tener un objeto actual; no se pueden vender cosas que nunca
han existido, que no existirán o que habiendo existido han perecido. El acto carecería de objeto. Si
embargo, la venta de cosa futura es posible (Art. 1131). Para que ello sea posible, es necesario que
las partes que celebran el contrato sepan que la cosa aun no existe aunque esperan que exista en
el futuro (si contratan pensando que existe actualmente, el contrato será nulo).

Existen 2 hipótesis:
1) La venta de una cosa para el caso de que llegue a existir. Es una venta sujeta a la condición
suspensiva de que la cosa efectivamente llegue a existir, y la obligación de pagar el precio
está sujeta a esa misma eventualidad. Este contrato se rige por las reglas de los actos
jurídicos sujetos a condición. El vendedor no se obliga a que la cosa llegue a existir, sino en
esforzarse para que exista (por lo que es una obligación de medios y no de resultado).
2) La venta de una cosa futura cuando el comprador asume el riesgo de que la cosa no llegue
a existir, sin culpa del vendedor. En este caso, el comprador debe el precio convenido
conforme lo acordado en el contrato. Pero si hay culpa del vendedor, el comprador no
está obligado a pagar el precio. También es llamada venta de esperanza.

Naturaleza jurídica de la venta de esperanza: es un contrato innominado, de carácter aleatorio, ya


que la esperanza no puede ser objeto. Queda concluida como contrato perfecto desde que se
produce el acuerdo de voluntades. El precio se debe de inmediato, sin estar supeditado a la
existencia o entrega de una cosa.

Riesgos tomados por el comprador:

 El de que exista o no: el vendedor tendrá derecho a todo el precio aunque la cosa no
llegue a existir, salvo que haya culpa o dolo del vendedor (en este caso el comprador
puede pedir el precio de la cosa, y los daños y perjuicios).
 El de que la cosa exista en mayor o menor extensión: el vendedor tendrá derecho a todo
el precio, pero solo en el caso de que la cosa llegue a existir por lo menos parcialmente. Si
la perdida ha sido total, el comprador no debe el precio, y si ya lo pago, tiene derecho a
repetición.
Estas eran las soluciones dadas por el código de Vélez, que deben ser mantenidas por el
nuevo código, ya que no especifica nada.

d. requisitos del precio

Para que el contrato de compraventa quede legalmente configurado, es preciso que el precio
reúna las sgtes condiciones:

 Debe ser en dinero: debe ser en dinero porque de lo contrario no habría compraventa. Si
lo que se da a cambio de una cosa es un servicio o trabajo, habrá dación en pago, se
cambia una cosa por otra, habrá permuta. Si una parte del pago es en dinero y la otra un
objeto, la naturaleza del contrato se decide así:
1) Si el precio en dinero es mayor o igual al valor del objeto, entonces es una
compraventa
2) Si el precio en dinero es menor al valor del objeto, entonces es una permuta
Siendo en dinero, no importa que sea moneda nacional o extranjera, si es al contado o que
quede un saldo pendiente
 Debe ser determinado o determinable: el precio es determinado cuando:
1) Los contratantes lo fijan expresamente
2) Cuando acuerdan que sea un tercero el que lo establezca
3) Cuando lo vinculan con el precio de otra cosa cierta
El primer supuesto puede considerarse de precio determinado, los otros dos restantes son
supuestos de precio determinable, pues el precio será fijado en el futuro conforme a lo
acordado.
Art 1133: el precio es determinado cuando las partes lo fijan en una suma que el
comprador debe pagar, cuando se deja su indicación al arbitrio de un tercero desginado o
cuando lo sea con referencia a otra cosa cierta. En cualquier otro caso, se entiende que
hay precio valido si las partes previeron el procedimiento para determinarlo. (precio
determinable)
 Debe ser serio: no debe ser irrisorio (una estancia a 100 pesos) o simulado (fingido)
porque estaríamos en caso de una donación. Si el previo es vil, esto no altera la naturaleza
del acto ni impide la formación del contrato de compraventa, lo que no significa que el
contrato no pueda impugnarse y eventualmente obtenerse una declaración de nulidad por
el vicio de lesión, aun cuando no se hubiera probado la existencia de vicios del
consentimiento, cabria anular la venta.

e. obligaciones del comprador y del vendedor

Obligación del vendedor:

a) Obligación de entrega: el vendedor debe entregar la cosa, también esta obligado a


conservarla sin cambiar su estado, hasta el momento en que haga efectiva la tradición. Es
que hasta ese momento es el dueño de la cosa y soporta sus riesgos (Art. 755). Los gastos
de conservación de la cosa corren por cuenta del vendedor. No hay problema en que las
partes estipulen lo contrario. Pero si el comprador ha incurrido en mora, los gastos corren
por su cuenta, puesto que el vendedor no habría incurrido en ellos de haber recibido
aquel la cosa a tiempo. El vendedor corre con los riesgos y se beneficia con las mejoras
naturales y frutos:
I. Riesgos: si la cosa perece sin culpa del vendedor, le venta queda resuelta, el
vendedor no podrá reclamar el pago del precio, y si lo hubiera recibido, deberá
devolverlo. Si la cosa se pierde por culpa del vendedor, el contrato se extingue y
deberá indemnizar el daño causado (también aplica al vendedor moroso, a menos
que se demuestre que la cosa se habría perdido en manos del comprador).
Haciendo referencia al deterioro de la cosa, ante el silencio de nuestro código, es
aplicable lo dispuesto en el código de velez que especifica:
A. Si la cosa se deterioria sin culpa del vendedor, el comprador tendrá
derecho a tener por resuelta la venta o a pedir una disminución
proporcional del precio
B. Si la cosa se deteriora sin culpa del vendedor después de encontrarse en
mora, esta obligado a pagar los daños, a menos que se demuestre que la
cosa se hubiera deteriorado también en poder del comprador
C. Si la cosa se deteriora por culpa del vendedor, el comprador tendrá
derecho a exigir una cosa equivalente y el pago de los daños sufridos, si es
que no prefiere recibir la cosa en el estado en que se encuentra y la
reparación de tales daños
El art 1151 establece que el vendedor deja de cargar con los riesgos de daño o
perdida de la cosa mueble, y los gastos incurridos, desde que la pone a disposición
de transportista u otro tercero, aunque no aclara quien asume los riesgos. Según
la convención de viena, en cuanto se haya puesto la mercadería en poder del
portador, el comprador asume el riesgo desde ese momento.
II. Mejoras: las mejoras naturales (que no provienen del hecho del hombre)
ocurridas entre la celebración del contrato y la entrega de la costa, también
favorecen al dueño (vendedor). Este esta autorizado a exigir el mayor valor al
comprador, y si este ultimo no lo acepta, el contrato se extingue sin
responsabilidad para las partes. Si el vendedor se encuentra en mora, las mejores
naturales pertenecen al comprador y el vendedor no podrá exigir un mayor precio
por ellas.
Si fueran mejoras artificiales (hecho por el hombre), debe diferenciarse entre
mejoras necesarias (el vendedor esta obligado a hacerlas, sin derecho a percibir su
valor) o mejoras utiles, de mero lujo, recreación o suntuarias (se las puede hacer,
siempre que no dañen la cosa, y no tiene derecho a reclamar indemnización
alguna).
III. Frutos: los percibidos antes de la tradición de la cosa pertenecen al vendedor,
pero los pendientes corresponden al comprador
IV. Productos: forman parte de la cosa y su extracción la disminuye. El vendedor no
tiene derecho a seguir extrayendo productos, desde el instante mismo en que se
realizo la venta.
La transmisión de dominio se hace a través de la tradición, cuando una parte entrega
voluntariamente a la otra cosa. Es la realización de actos materiales de una de las partes,
que otorguen un poder sobre ella, que le permite comportarse como titular del derecho
real de dominio.
El art 1137 obliga al vendedor a poner a disposición del comprador los instrumentos
requeridos por los usos o las particularidades de la venta, y a prestar toda cooperación
que le sea exigible para que la transferencia dominial se concrete.
Tiempo de entrega: Art. 1139: el vendedor debe entregar el inmueble inmediatamente de
la escrituración, excepto convención en contrario.
Lugar de entrega: 1148: dos supuestos:
I. La primera, si es de cosa cierta, la cosa debe entregarse en el lugar acordado o en
el que determinen los usos o las particularidades de la venta; y en su defecto, en
donde estaba la cosa al tiempo de celebración del cotrato
II. La segunda, si se trata de cosas genéricas o de cantidades de cosas. No hay
problemas si el contrato fija el lugar de entrega o los usos o particularidades de la
venta lo determinan. Pero si no ocurre, lo razonable es que la entrega se haga en
el domicilio del vendedor al tiempo de la celebración del contrato.
Cuando el vendedor no entrega la cosa en el tiempo convenido, el comprador puede:
I. Cumplimiento del contrato y entrega de la cosa
II. Resolución de la venta
En ambos supuestos tendrá derecho además de reclamar daños y perjuicios
b) Garantizar para el caso de evicción y de vicios ocultos: en el caso de evicción, hay que
recordar que cuando el comprador ha sido privado de la propiedad por quien tiene mejor
derecho a ella, el vendedor debe reparar los daños causados, de aquí nace la primera
obligación de restituir el precio. El vendedor deberá reintegrar al comprador los gastos del
contrato de compraventa, tales como el sellado, los honorarios del escribano o los
impuestos. La evicción puede ser parcial, que ocurre cuando el comprador ha sido privado
de una parte de la cosa comprada o se ha afectado el contenido de su derecho; cuando
tiene lugar la evicción parcial, los derechos del comprador deben considerarse en relación
a dos supuestos:
I. Que la parte se le ha quitado de la cosa o del derecho sea de tal importancia
respecto del todo, que sin ella no hubiera comprado la cosa
II. Que no tenga tanta importancia, y debe presumirse que aun si ella igualmente la
hubiera comprado.
En ambos casos el comprador podrá demandar la reparación del daño, pero en el primera
puede pedir la rescisión del contrato con la indemnización de daños.
Defectos o vicios: son solidariamente responsables por el otorgamiento y cumplimiento de
la garantía por defectos o vicios, los productores, importadores, distribuidores y
vendedores de cosas muebles no consumibles. El consumidor debe recibir el llamado de
certificado de garantía, escrito en idioma nacional, con redacción de fácil comprensión y
en letra legible. Debe contener: la identificación del vendedor, fabricante, importador o
distribuidor; identificación de la cosa; las condiciones de uso, instalación y mantenimiento;
las condiciones de validez de la garantía y su plazo de extensión; las condicoines de
reparación de la cosa.

Obligación del comprador:

1. Pagar el precio: el art. 1141 dice que el precio debe pagarse en el tiempo establecido en el
contrato, y si no se aclara, se entiende que es al contado. El art. 1152 refiriendose a cosas
muebles dispone que el pago se hace contra la entrega de la costa, excepto pago en
contrario.
Lugar de pago: el precio debe pagarse en el lugar convenido, dado el silencio de la norma,
borda cree que si no hay lugar convenido, y si es al contado, debe hacerse en el lugar de la
entrega de la cosa, y si es a plazo, debe hacerse en el domicilio del comprador, por ser el
deudor de la prestación
Intereses: en principio, el comprador no debe intereses del precio por el tiempo
transcurrido entre el momento del contrato y del pago, a menos que sea una de las sgtes
hipótesis:
I. Que el contrato fije intereses (común en las ventas a plazos)
II. Que el comprador haya incurrido en mora.
2. Recibir la cosa y los documentos vinculados con el contrato: dentro de la obligación del
vendedor de entregar la cosa en el tiempo y lugar indicados, existe implícita una
obligación correlativa del comprador de recibir la cosa en el tiempo y lugar. Esta obligación
incluye el comportamiento del comprador que sea tal de realizar todos los actos que deba,
para que el vendedor pueda efectuar la entrega.
Consecuencias de que el comprador no reciba la cosa: si el comprador se niega a recibir la
cosa (mueble o inmueble), el vendedor puede:
I. Cobrar los gastos de conservación de la cosa y los demás daños que resulten de la
actitud renuente del comprador
II. Consignar judicialmente la cosa
III. Demandar el pago del precio cuando no hubiese cobrado, y siempre que haya
hecho entrega de la cosa o la ponga a disposición del comprador, consignándola
judicialmente.
IV. Pedir la resolución de la venta si no se le pagara el precio (consecuencia del
incumplimiento de la obligación de pagar el precio).
Obligación a recibir documentos: 1141 inc. B, establece que el comprador esta obligado a
recibir los documentos vinculador con el contrato (facturas, garantías, remitos, etc.).
Plazo para reclamar por los defectos de la cosa: el código nos da la interpretación de que
el comprador debe tener la posibilidad real de examinarla (cuando haya recibido la cosa).
3. Pagar los gastos de recuperación de la cosa:
Obligación de pagar los gastos de recibo: 1141 inc. C, el comprador debe pagar los gastos
de recibo de la cosa, incluyendo los de testimonio de la escritura publica y los demás
posteriores a la venta. Debe pagar los gastos de conduccio y transporte de la cosa salvo
disposición de las partes en contrario.
Estas normas deben ser interpretadas de conformidad con las reglamentaciones locales,
las cuales normalmente disponen que el comprador pague el sello matriz, el testimonio de
la escritura y el 50% de las obligaciones fiscales, y el vendedor pague todo lo necesario
para otorgar el acto (estudio de los títulos, la confección y diligenciamiento de los
certificados para otorgar la escritura y el 50% de las obligaciones fiscales).
En cuanto a gastos de recibo, deben comprenderse los de transporte de la cosa al
domicilio del comprador, los de embalaje para facilitar el transporte posterior a la entrega,
etc. Así también como la anotación en el registro de la propiedad.

f. forma

g. compraventa y transferencia de dominio: bienes muebles, inmuebles.


La compraventa no es otra cosa que el compromiso de transferir la propiedad, pero esta no se
transmite sino por la tradición de la cosa. Respecto de los inmuebles se exige, además la escritura
pública. Y como estos dos requisitos resultan insuficientes para proteger los derechos de terceros,
las leyes locales han organizado los registros de la propiedad, en los cuales deben inscribirse
obligatoriamente las transferencias del dominio y sus modificaciones para que sean oponibles a
terceros. Este sistema ha sido consagrado expresamente en el art. 1893. Un régimen distinto fue
creado para los automotores y los equinos de pura sangre de carrera, en las cuales la inscripción
registral es constitutiva del dominio.

h. muebles registrables:

i. boleto de compraventa:

En la práctica de las operaciones inmobiliarias, la compraventa se concierta siempre, salvo casos


excepcionales, por medio de contratos privados.

En nuestro derecho, es usual hablar de que el boleto de compraventa es solo un ante contrato,
una promesa bilateral de compraventa. Esta tesis se basa en 1017 y 1018, el primero establece
que deben ser hechos por escritura pública, los contratos que tienen por objeto la adquisición de
derechos reales sobre el inmueble, lo que claramente comprende la transmisión de la propiedad;
el segundo dispone que el otorgamiento pendiente de un instrumento previsto constituye una
obligación de hacer si el futuro contrato no requiere una forma bajo sanción de nulidad, lo que
implica que si el contrato requiere ser hecho en escritura pública, y es realizado por escritura
privada, no queda concluido como tal mientras no se otorgue la escritura pública.

En nuestro derecho positivo, la escritura pública no es un requerimiento de la compraventa, sino


uno de los requisitos de la transmisión de la propiedad.

Cuando dos personas suscriben un boleto privado, entienden que una quiere vender y la otra
comprar. No tienen en mira la escritura, sino la cosa, el precio y las modalidades del contrato. La
escritura no es para ellas el paso previo que les permitirá exigir el cumplimiento de las
obligaciones contraídas, sino el cumplimiento mismo, como a partir de su otorgamiento, se habrá
logrado la transferencia de dominio.

Efectos: colocar al titular del boleto en situación de comprador y permitirle exigir del vendedor la
trasferencia del dominio, además tiene los sgtes efectos:

1. Convierte la posesión adquirida por el comprador en legitima (Art. 1916)


2. Permite al comprador oponer al concurso del vendedor la compra del inmueble cuando ha
pagado el 25% del precio y pedir la escrituración, quedando obligado a constituir hipoteca
de primer grado sobre el bien, en garantía del saldo de precio (Art. 1171)
3. Reunidos ciertos recaudos, el comprador de buena fe por boleto tiene prioridad sobre los
terceros que hayan trabado cautelares sobre el inmueble vendido
Cesión de boleto: cuando se habla de ceder el boleto, se hace referencia a la cesión de las
posiciones contractuales que se tienen en ese contrato.

Concurso o quiebra del vendedor antes de la escritura: art. 1171: “los boletos de compraventa de
inmuebles de fecha cierta otorgados a favor de adquirentes de buena fe son oponibles al concurso
o quiebra del vendedor si se hubiera abonado como mínimo el 25% del precio. El juez debe
disponer que se otorgue la respetiva escritura pública. El comprador puede cumplir sus
obligaciones en el plazo convenido. En caso de que la prestación a cargo del comprador sea a
plazo, debe costituirse hipoteca en primer grado sobre el bien, en garantía del saldo de precio”.

Esto quiere decir, que el boleto de compraventa de un inmueble con fecha cierta, es oponible al
concurso o quiebra del vendedor.

j. clausulas que se pueden agregar: pacto de retroventa, de reventa, de preferencia

Pacto de retroventa: art. 1163: “pacto de retroventa es aquel por el cual el vendedor se reserva el
derecho de recuperar la cosa vendida y entrega al comprador contra restitución del precio, con el
exceso o disminución convenidos.

El contrato sujeto a este pacto se rige por las reglas de la compraventa sometida a condición
resolutoria.”

Esto es posible por la fuerza de la autonomía privada, es manifestación de la libertad y pilar


fundamental de los acuerdos bilaterales y patrimoniales.

Este tipo de clausula permite al vendedor que ha transferido la propiedad de la cosa con carácter
revocable recuperarla, devolviendo el precio y otros rubros. También se la llama clausula de
rescate.

En el derecho argentino, la doctrina opina que este pacto constituye una condición resolutoria
potestativa, se considera potestativa porque el cumplimiento de la condición depende de la sola
voluntad del deudor

Para que el pacto sea valido se requiere:

1. Que el objeto vendido sea inmueble o mueble registrable. El pacto es válido solo en la
venta de inmuebles o cosas muebles registrables, pues en tales negocios la clausula debe
aclarar por escritura pública (cuya inscripción lo vuelve oponible a terceros)
2. Debe estipularse en el mismo acto de la venta: el pacto solo será válido si su estipulación
se consigna al mismo tiempo de la celebración de la vente y se la incluye en la escritura
respectiva o titulo respectivo. Esto significa que será oponible a terceros si lo acuerdan
con posterioridad a la venta que se pretende condicionar, o si se formaliza por
instrumento separado
3. El plazo de rescate no debe ser mayor a 5 años cuando la cosa sea inmueble y más de 2
años si la cosa es mueble registrable.
Precio de retroventa: al incluir el pacto de retroventa, las partes deben fijar el precio que el
vendedor deberá pagar para recuperar la cosa, ese precio puede ser mayor o menor que el pagado
por el comprador y también puede llevar intereses. Si omiten el precio, se entiende es la misma
suma pagada por el comprador.

Pueden pedir el rescate el vendedor, sus cesionarios, sus herederos y sus acreedores.

Pacto de reventa: art. 1164: “pacto de reventa es aquel por el cual el comprador se reserva el
derecho a devolver la cosa comprado. Ejercido el derecho, el vendedor debe restituir el precio, con
el exceso o disminución convenidos.

Se aplican las reglas de la compraventa bajo condición resolutoria.”

Debe tenerse en cuenta especialmente que el pacto de reventa, es el adquiriente de la cosa quien
toma la iniciativa; por lo que, mas allá de que sea oponible a terceros interesados, parece claro
que el deberá devolver la cosa libre de gravámenes, en el estado en que la compro. Si el
comprador quiere exigir al vendedor la devolución del precio, tendrá que acordar con esos
terceros la extinción de los derechos por ellos adquiridos.

Ejercido el derecho de reventa y depositada la cosa, el comprador podrá hacer ejecución de los
bienes del vendedor que no se allanase a devolverlo

Si la cosa hubiera sido expropiada, el comprador expropiado podrá rescatar el precio entregando
la indemnización recibida

En cuando al término para ejercer el rescate, son los mismos plazos que para el pacto de
retroventa: cinco años para inmuebles y dos años para muebles.

Pacto de preferencia: art. 1165: “pacto de preferencia es aquel por el cual el vendedor tiene
derecho a recuperar la cosa con prelación a cualquier otro adquiriente si el comprador decide
enajenarla. El derecho que otorga es personal y no puede cederse ni pasa a los herederos.”

Es la clausula e virtud de la cual el vendedor se reserva el derecho de recomprar la cosa, si el


comprador decide enajenarlas, ofreciendo las mismas condiciones que hubiera recibido del
tercero. Se lo llama también derecho de tanteo. El vendedor no tiene la obligación sino solo el
derecho a recomprar la cosa, y el comprador no esta obligado a revenderla, pero si lo hace, debe
dar preferencia a la persona de quien el la adquirió.

Es condición que el vendedor ofrezca las mismas condiciones que el tercero (precio, plazo y
cualquier condición).

Es oponible a tercero interesado, a diferencia del código de Vélez.

El vendedor está obligado a ejercer su derecho de preferencia dentro de los 10 dias notificada la
oferta del tercero. El pacto de preferencia no puede superar los 5 años para los inmuebles y 2 para
los muebles.
El comprador tiene la obligación de avisar al vendedor las condiciones que le son ofrecidas por el
tercero.

Debe ser estipulado en el contrato originario.

k. la compraventa y la protección del consumidor

Los contratos de consumo pueden ser celebrados por distintos medios. La ley ha previsto
expresamente:

 La venta cuya oferta y aceptación se realice por medio postal, telecomunicaciones,


electrónico o similar
 La llamada venta domiciliaria, donde o bien la oferta se hace fuera del establecimiento del
proveedor, o bien el contrato resulte de una convocatoria al consumidor al
establecimiento del proveedor o a otro sitio, siempre que el objetivo de dicha
convocatoria sea total o parcialmente distinto al de la contratación, o se trate de un
premio u obsequio. (debe ser por escrito y establecer las precisiones exigidas).
Estas precisiones están establecidas en el art. 10 de la misma ley, el documento que se
extienda por la venta de cosas muebles o inmuebles deberá contener:
1. La descripción y especificación del bien
2. Nombre y domicilio del vendedor
3. Nombre y domicilio del fabricante, distribuidor o importador cuando corresponda
4. Mención de las características de la garantia conforme a lo establecido en la
propia ley
5. Plazos y condiciones de entrega
6. Precio y condiciones de pago
7. Los costos adicionales, especificando precio final a pagar por el adquiriente
Además, este documento debe estar redactado en castellano, forma completa, clara y
fácilmente legible, sin reenvíos a otros textos que no se entreguen previamente o
simultáneamente.
El proveedor debe informar al connsumir, además del contenido minimo del contrato y la
facultad de reovcar todos los datos necesarios para utlirzar correcamente el medio
elegido, para comprender los riesgos derivados de su empleo, y para tener absolutamente
claro quien asume esos riesgos.

l. compraventa y permuta: comparación

Mientras que la compraventa es el intercambio de una cosa por un precio en dinero, la permuta
supone el trueque de una cosa por otra. La distinción es clara, salvo en los casos de permuta con
saldo en dinero.

Permuta: es el trueque de una cosa por otra; desde el punto de vista jurídico, el contrato queda
configurado desde que las partes se han obligado a transferirse recíprocamente la propiedad de
las cosas que no son dinero. Forma primitiva de intercambio entre los hombres, es antecedente a
la compraventa. Se rige por las disposiciones concernientes a la compraventa, en todo lo que no
tenga resolución especial.

Disposiciones especiales:

1. Gastos de contrato: Art. 1173. Los gastos del contrato (incluye gastos por entrega y los
que se origen en la obtención de los instrumentos requeridos por los usos o por las
particularidades de la permuta, y si son inmuebles, los gastos de estudio, el titulo y sus
antecedentes y los tributos que graven el cotrato) son soportados por los contratantes en
partes iguales, salvo pacto en contrario
2. Evicción: art. 1174: la norma dispone que si uno de los permutantes es vencido en la
propiedad de la cosa que le fue transferida, tiene derecho a pedir que se le restituya la
cosa que el dio a cambio o su valor. También tiene derecho a pedir una cosa equivalente.
Además puede pedir la indemnización de los daños sufridos.
3. En el código de velez, el art. 1486 establecia que si uno de los permutantes tiene justos
motivos para creer que la cosa recibida en permuta no era de propiedad del que la dio, no
puede ser obligado a entregar la que el ofreció. Es una solución de equidad. También
permitia pedir la nulidad del contrato. Sigue vivo este derecho, en el art. 1044 del nuevo
código, relativo a la garantía de evicción y recurriendo, a la llamada tutela preventiva
regulada en el art. 1032.

Si una o ambas prestaciones consisten en un derecho, estaremos en presencia de un contrato


innominado, al cual se aplicaran las reglas de la compraventa o de la cesion de créditos, según los
casos.

Si una de las contraprestaciones fuera parte en dinero y parte en especie, el contrato será
calificado como compraventa o permuta, dependiendo del valor de la cosa o del precio en dinero.

Tiene los mismos caracteres que la compraventa:

1. La permuta es consensual, porque produce efectos por el solo acuerdo de voluntades


2. Es no formal; en el caso de inmuebles se exige escritura publica para transferencia de
dominio, pero no como requisito del contrato en si, ya que puede ser válidamente
celebrado por instrumento privado
3. Es bilateral, hay obligaciones para ambas partes
4. Oneroso, las contraprestaciones son reciprocas
5. Es conmutativo, porque las contraprestaciones reciprocas son por naturaleza equivalentes

m. contrato de suministro. Concepto, diferencia con la compraventa

Contrato de suministro:
Concepto: El contrato por el cual una persona (proveedor) se obliga mediante un precio a entregar
a otra (suministrado) cosas muebles, mercaderías, en épocas y cantidades fijadas en el contrato o
determinadas por el suministro de acuerdo a sus necesidades.

Importancia del contrato y ventajas que conlleva: la razón del contrato de suministro, es la rápida
satisfacción de la provisión de bienes o servicios que asi se hace segura y económica.

Naturaleza jurídica: existen contratos de suministro de derecho privado (solo intervienen los
particulares) y de derecho público o administrativo (en este aparece la adm publica). Los segundos
tienen 2 elementos caracterizados por un fallo de la corte suprema de la nación:

1. Porque una de las partes es la adm publica nacional


2. Porque el objeto del contrato es una prestación con sentido o con destino puesto en el
interés general, en una necesidad social, etc.

Estos quedaran regulados por las normas de derecho administrativo y publico, solo a falta de
regulación se aplican las normas de derecho privado aplicables.

El contrato de suministro presenta diferencias con relación a la compraventa, en especial con


aquella venta mobiliaria de entrega en cuotas, partes o piezas. Este caso, es de una prestación
única que se fracciona, fraccionamiento que se da en el tramo de ejecución y no en el de
formación o estructuración del contrato, mientras que el contrato de suministro se acuerdan una
serie de prestaciones conexas entre si. En el contrato de suministro hay un plazo de duración que
puede ser indeterminado, mientras que la venta a entrega en cuotas o partes, impone la
determinación del plazo de cumplimiento. En la compraventa tenemos un interés de parte
centrado en ua cosa particular, en general de entrega única y en un solo acto; mientras que en el
suministro tenemos un interés con la mira puesta en entregas prolongadas y repetidas en el
tiempo, con una reiteración plasmada en la pluralidad de obligaciones a cargo de cada parte.

Caracteres: es un contrato nominado, típico, consensual, de cambio, oneroso y bilateral. También


es no formal. Conmutativo por las prestaciones ciertas y determinadas. Es de duración o de
ejecución continuada, ya que su finalidad es producir efectos por un lapso mas o menos
prolongado. Periodicidad (varias prestaciones y repetidas en el tiempo, seguidas una de otras,
teniendo lugar en fechas y periodos determinados de entrega) y continuidad (prestación
ininterrumpida).

2. a. cesión de derechos. Concepto.

Art. 1614: “hay contrato de cesión cuando una de las partes trasfiere a la otra un derecho. Se
aplican a la cesión de derechos las reglas de la compraventa, de la permuta o de la donación,
según que se haya realizado con la contraprestación de un precio en dinero, de la transmisión de la
propiedad de un bien, o sin contraprestación, respectivamente, en tanto no estén modificadas por
las de este capítulo.”
El art hace hincapié como elemento tipificante en la transmisión de la titularidad de un derecho,
sin limitarse a la cesión de crédito. Se deja en claro que la existencia o inexistencia de
contraprestación a cargo del cesionario no constituye un elemento tipificante de la figura, pero si
resulta de relevancia a fin de determinar que normas se consideran supletorias.

Son aplicables las normas de la cesión de créditos y en base al principio de autonomía de la


voluntad ya se reconocida la posibilidad de que se realizaran cesiones de contratos y cesiones de
derechos hereditarios, aplicando aquellas normas en cuanto fueren compatibles con las
características de estos negocios.

b. derechos que pueden ser cedidos. Prohibiciones.

Derechos que pueden ser cedidos: art. 1616: “todo derecho puede ser cedido, excepto que lo
contrario resulte de la ley, de la convención que lo origina, o de la naturaleza del derecho.”

Prohibiciones: art. 1617: “no pueden cederse los derechos inherentes a la persona humana.”

Estos artículos regulan el objeto mediato de la cesión, es decir cuáles son los derechos que pueden
ser válidamente cedidos por medio de este tipo contractual. La regla es que todo derecho puede
ser cedido salvo prohibición legal, convencional o derivada de la naturaleza del derecho cedido.

Puede entenderse, entonces, que son cedibles todos los derechos que integran el patrimonio,
sean derechos personales, reales e intelectuales, así como también las acciones que de ellos
derivan, también los derechos litigiosos, los derechos futuros, los derechos ajenos, los derechos
sobre cosas futuras, los derechos hereditarios, entre otros, siempre dentro de los limites trazados
por las normas relativas al objeto de los actos jurídicos y al objeto de los contratos.

Puede haber prohibición de ceder derivada del acuerdo de partes: es de origen convencional, por
aplicación del principio de autonomía de la voluntad, en cuyo ejercicio las partes pueden delimitar
los contornos de los derechos que crean, siempre y cuando no dejen sin efecto las leyes de orden
público. La prohibición de ceder puede acordarse con posterioridad a la creación del derecho,
siendo este acuerdo exigible entre las partes pero inoponible a terceros

Prohibición de ceder derivada de la ley: algunos supuestos de cesiones expresamente prohibidas


por la ley son:

1. derechos sobre bienes que se encuentren fuera de comercio, derechos inherentes a la


persona humana
2. derecho de habitación
3. el uso de los bienes comunes en los conjuntos inmobiliarios

Prohibición derivada de la naturaleza del derecho: se refiere a aquellas cesiones que resultan
incompatibles con la índole de la obligación.
Derechos inherentes a la persona humana: son derechos cuya acción está concebida en virtud de
condiciones personales del titular, los derechos que se conceden en virtud de que el titular tiene
un estatus jurídico determinado, los que son intuitu personae y los derechos personalísimos.

c. forma:

art. 1618: “la cesión debe hacerse por escrito, sin perjuicio de los casos en que se admite que la
transmisión del título por endoso o por entrega manual.

Deben otorgarse por escritura pública:

a) la cesión de derechos hereditarios


b) la cesión de derechos litigiosos. Si no involucran derechos reales sobre inmuebles, también
puede hacerse por acta judicial, siempre que el sistema informático asegure la
inalterabilidad del instrumento
c) la cesión de derechos derivados de un acto instrumentado por escritura pública.”

Tiene como regla general la forma escrita para todo contrato de cesión de derechos.

Algunas cesiones se excepcionan de la regla general, debiendo ser realizadas bajo la forma de
escritura pública, ellos son:

a) la cesión de derechos hereditarios, la ley no admite para ningún supuesto el recurso de


acta judicial, a diferencia de los derechos litigiosos. La oponibilidad se logra mediante el
acceso al expediente sucesorio.
b) La cesión de derechos litigiosos, cuando se trata de cesiones que involucran derechos
reales sobre el inmueble, la forma de escritura pública es insalvable. En caso de tratarse
sobre cosas muebles, o derechos creditorios, la cesión puede ser realizada por acta judicial
c) Cesión de derechos derivados de un acto instrumentado por escritura pública, coincide
con el art. 1017 inc c que exige que sean realizados por escritura pública todos los actos
que sean accesorios de los contratos otorgados en escritura publica

d. efectos entre las partes y terceros. Actos anteriores a la notificación. Concurrencia de


cesionarios. Concurso del cedente.

Efectos respecto de terceros: Art. 1620: “la cesión tiene efectos respecto de terceros desde su
notificación al cedido por instrumento público o privado de fecha cierta, sin perjuicio de las reglas
especiales relativas a los bienes registrables.”

Las partes del contrato son el cedente y el cesionario, y eventualmente sus sucesores, el resto son
terceros respecto del negocio, incluso el mismo cedido.

Algunos terceros tienen un interés legitimo en la cesión que puede verse afectado por el negocio
celebrado. Como el deudor cedido, que si bien es ajeno al contrato de cesión, tiene un interés
directo en el mismo por ser quien debe cumplir con la obligación cedida, motivo que justifica la
notificación del traspaso del derecho.
Los acreedores del cedente y del cesionario también son terceros que poseen un interés legitimo
en el contrato de cesión, los primeros porque puede afectarse la salida de un bien del patrimonio
de su deudor, y los segundos porque pueden beneficiarse con la consolidación de la cesión a favor
del cesionario incorporando un nuevo bien a su patrimonio.

Notificación: la cesión surte efectos respecto de terceros desde que se realiza la notificación al
cedido. Si bien la transmisión se produce con el acuerdo de voluntades, la notificación adquiere
relevancia dado que marca el inicio de la oponibilidad erga omnes del negocio. En nuestra
legislación, teniendo en cuenta la salvedad establecida en el art. 1620, puede interpretarse que la
notificación opera como forma de publicidad en la cesión de créditos, dado que para los otros caso
de cesión de derechos registrables rige el sistema de publicidad particular establecido en cada
caso.

La notificación es un acto unilateral recepticio por medio del cual se comunica al deudor la
existencia de la cesión. Esta debe ser realizada por instrumento público o privado con fecha cierta.
Puede ser realizada por cualquiera de las partes (cedente o cesionario), y se notifica al domicilio
real del deudor, el plazo para la notificación no esta especificado pero debe hacerse con mayor
celeridad posible y en cuanto al contenido de la notificación, siguiendo los lineamientos del viejo
código, disponía que no resulta necesario que en la notificación se le transcribiese al deudor
cedido todo el contenido de la cesión, entonces bastaba hacerle conocer la información necesaria
que permita al deudor individualizar el crédito cedido y la persona que será su nuevo acreedor.

Actos anteriores a la notificación de la cesión: Art. 1621: “los pagos hechos por el cedido al
cedente antes de serle notificada la cesión, así como las demás causas de extinción de la
obligación, tienen efecto liberatorio para el.”

Mientras no se efectivice la notificación de la cesión al deudor cedido, los pagos que este hubiese
efectuado al cedente tendrán efectos liberatorio. En consecuencia, el cesionario no podrá
reclamar el pago al deudor cedido, sino que deberá accionar contra el cedente por incumplimiento
contractual o bien por evicción si el crédito fue pagado con anterioridad a la cesión por
considerarse un supuesto de cesión de derechos inexistentes.

No es exigible la fecha cierta, teniendo en cuenta que en la generalidad de las operaciones los
recibos se otorgan sin fecha cierta; además el deudor tiene posibilidad de oponer al cesionario
todas las defensas o excepciones que tenia contra el cedente y cualquier otra causa de extinción
de la obligación.

La liberación del deudor cedido también tiene lugar en caso de verificarse con anterioridad a la
notificación cualquier otra causal de extinción de las obligaciones entre el cedente y el deudor
cedido antes de la notificación, entre ellas la confusión, la novación, la prescripción liberatoria, la
compensación, la transacción, etc. En consecuencia, ocurrida alguna de estas causales antes de la
notificación, el deudor cedido podrá oponerle al cesionario todas las defensas o excepciones que
de ello se deriven.
Concurrencia de cesionarios: Art. 1622: “en la concurrencia entre cesionarios sucesivos, la
preferencia corresponde al primero que ha notificado la transferencia al deudor, aunque este sea
posterior a la fecha.”

Es cuando existen distintos cesionarios sucesivos del mismo derecho, circunstancia que puede
tener origen en el error o la mala fe del cedente. Se resuelve dando prioridad al cesionario que
notifico al deudor en primer término.

En caso de que las notificaciones hubiesen sido realizadas en el mismo dia sin haberse indicado la
hora de las mismas, todos los cesionarios quedan en igual rango, por lo que los cesionarios
deberán repartirse el crédito de manera proporcional, y por la parte no recibida tendrán acción
contra el cedente en virtud de la garantía de evicción, al igual que los cesionarios totales que
hubiesen sido desplazados.

Concurso o quiebra del cedente: art 1623: “en caso de concurso o quiebra del cedente, la cesion
no tiene efectos respecto de los acreedores si es notificada después de la prestación en concurso o
de la sentencia declarativa de la quiebra.”

Hay 2 supuestos que determinan el fin del tiempo útil para que la notificación produzca sus
efectos. Si la notificación se realiza luego de la presentación en concurso o de la sentencia
declarativa de quiebra del cedente, la cesión ya no resulta oponible a la masa de acreedores.

Ocurrido el desapoderamiento sin que la cesión hubiese sido notificada, el derecho cedido ingresa
a formar parte de la masa de bienes afectados a la quiebra y destinados a satisfacer las deudas del
cedente.

Este conjunto de artículos se ocupa de reglamentar los efectos que acarrea el contrato de cesión
frente a terceros que no son parte de el, enfocándose en la cesión de créditos. Para nuestro
código desde la notificación al cedido es el momento a partir del cual se producen dichos efectos,
tornando la cesión oponible a terceros ajenos al acto.

e. cesión de crédito prendario.

Art. 1625: “la cesión de un crédito garantizado con una prenda no autoriza al cedente o a quien
tenga la cosa prendada en su poder a entregarla al cesionario.”

Este texto expresa los limites que tienen el cedente y el cesionario con relación a la cesión de un
crédito garantizada con una prenda sobre cosas.

Dispone que la cesión no autoriza al cedente o al tercero que tenga la cosa prendada en su poder
a entregarla al cesionario. Bastaría entonces, según el art. 1619 que el cedente entregue al
cesionario los documentos probatorios del derecho cedido.

f. cesión parcial
Art. 1627: “el cesionario parcial de un crédito no goza de ninguna preferencia sobre el cedente, a
no ser que este se la haya otorgado expresamente.”

El articulo regula el supuesto en que cedente y cesionario resulten cotitulares del crédito en virtud
de una cesión parcial, estableciendo que cualquier tipo de preferencia debe ser producto del
acuerdo de las partes.

Es el caso en que el cedente transmita una parte del crédito al cesionario, conservando la
titularidad sobre la restante. De esta manera, cedente y cesionario devienen en cotitulares del
mismo crédito.

Si nada se estableció al respecto, se prescribe que el cesionario no tiene ninguna preferencia sobre
el cedente. Ello implica que si los bienes del deudor resultan insuficientes para afrontar el pago,
cada uno de ellos asumirá la perdida proporcionalmente.

g. garantía de evicción. Garantía de solvencia del deudor. Reglas subsidiarias

garantía por evicción: Art. 1628: “si la cesión es onerosa, el cedente garantiza la existencia y
legitimidad del derecho al tiempo de la cesión, excepto que se trate de un derecho litigioso o que se
le ceda como dudoso; pero no garantiza la solvencia del deudor cedido ni de sus fiadores, excepto
pacto en contrato o mala fe.”

Al transmitir el derecho, el cedente garantiza al cesionario los sgtes extremos:

 La existencia del derecho: implica que el derecho cedido exista en su patrimonio, es decir,
que es titular del mismo.
 La legitimidad del derecho: se vincula a la correcta constitución del mismo, es decir, a la
ausencia de vicios que puedan dar lugar a la nulidad, entre ellos vicios del consentimiento
o incapacidad del deudor al constituirse la obligación, o existencia de vicios en el acto
jurídico.

La garantía por evicción es debida respecto de la existencia y legitimidad del derecho al tiempo de
la celebración del contrato de cesión. Cualquier causal de origen posterior no tendrá la virtualidad
de hacer nacer la obligación de saneamiento a favor del cesionario.

El cedente responde también por la existencia y legitimidad de los accesorios del derecho cedido.

Existen algunos supuestos respecto de los cuales la garantía legal no tiene lugar las cuestiones a
título gratuito, las cesiones de derechos litigiosos y dudosos. La cesión realizada a título gratuito,
también llamada cesión-donación, ex excluida del ámbito de aplicación de la evicción. Pero si la
cesión gratuita tuviera la imposición de un cargo o bien fue realizada con carácter remuneratorio,
se aplicaran supletoriamente las normas de los art. 1556 y 1557 que establecen la responsabilidad
del donante por evicción. También se encuentran excluidos de la garantía los casos de cesión de
derecho litigiosos y de derechos dudosos.
Cesión de derecho inexistente: Art. 1629: “si el derecho no existe al tiempo de la cesión, el cedente
debe restituir al cesionario el precio recibido, con sus intereses. Si es de mala fe, debe además la
diferencia entre el valor real del derecho cedido y el precio de la cesión.”

Aborda los efectos de la garantía legal por evicción en el contrato de cesión. Si bien el art. Refiere
solamente al supuesto de inexistencia del derecho cedido, cabe considerar que resulta aplicable a
los casos de evicción por ilegitimidad del mismo.

Si el cedente es de mala fe, el art 1629 dispone que deberá además afrontar el pago de la
diferencia entre el valor real del derecho cedido y el precio de la cesión.

Garantía de la solvencia del deudor: Art. 1630: “si el cedente garantiza la solvencia del deudor
cedido, se aplican las reglas de la fianza, son sujeción a lo que las partes hayan convenido.

El cesionario solo puede recurrir contra el cedente después de haber excutido los bienes del deudor,
excepto que este se halle concursado o quebrado.”

Excusión de bien: es un beneficio que el código reserva para aquel fiador que no puede ser
obligado al pago al acreedor sin que este antes se haya dirigido frente a los bienes del deudor
principal.

En el contrato de cesión la evicción no comprende la garantía de la solvencia del deudor cedido ni


la de sus fiadores. El fundamento de esta disposición está en que con la cesión el cesionario asume
el riesgo de insolvencia total o parcial del deudor cedido, riesgo que antes de la transferencia
pesaba sobre el cedente. Es un riesgo propio de este tipo de negocios.

Según el artículo 1628, el cedente está obligado a garantizar la solvencia en dos supuestos:

 Cuando hubiese obrado de mala fe el cedente (conocimiento de la insolvencia del deudor)


 Cuando hubiese asumido tal garantía en el contrato. Es la garantía de hecho, o
estipulación convencional de la garantía de la solvencia del deudor.

El art. 1630 establece que si el cedente garantiza la solvencia del deudor cedido, se aplican las
reglas de la fianza simple, respetando lo que las partes hubiesen convenido.

Reglas subsidiarias: Art. 1631: “en lo no previsto expresamente en este capítulo, la garantía por
evicción se rige por las normas establecidas en el art. 1033 y siguientes.”

Estos artículos regulan el enlace de la garantía legal por evicción en el contrato de cesión, los
supuestos de cesión que quedan excluidos de la misma, así como los efectos de evicción
producida. Para las cesiones de crédito, se regula expresamente la llamada garantía de hecho o de
solvencia del deudor cedido, que puede tener origen en la mala fe del cedente o en un pacto
expreso entre las partes, haciendo aplicables las reglas de la fianza.

3. a. cesión de deudas. Concepto. Asunción de deuda. Promesa de liberación del deudor.


Conformidad para la liberación del deudor.
Cesión de deudas: Art. 1632: “hay cesión de deuda si el acreedor, el deudor y un tercero, acuerdan
que este debe pagar la deuda, sin que haya novación.

Si el acreedor no presta conformidad para la liberación del deudor, el tercero queda como
codeudor subsidiario.”

Es un contrato que exige la intervención de 3 sujetos, el deudor o cedente, el cesionario y el


acreedor (Cedido), por el cual se acuerda que el tercero pagara la deuda del deudor originario al
acreedor. Hay dos variantes:

a) Que el acreedor además de consentir la cesión preste su conformidad para liberar al


deudor
b) Que el acreedor consienta pero no preste dicha conformidad y, por ende, el deudor
continuara obligado

En el supuesto de que el acreedor no prese su conformidad para la liberación del deudor, tendrá
ante si dos deudores contra quienes podrá dirigir la acción de cumplimiento. El tercero quedara
obligado como codeudor subsidiario. Y el deudor originario como deudor principal, y una vez que
el acreedor le haya reclamado podrá recién dirigirse contra el tercero obligado subsidiariamente
en virtud de la cesión.

Asunción de deuda: Art. 1633: “hay asunción de deuda si un tercero acuerda con el acreedor
pagar la deuda de su deuda de su deudor, sin que haya novación.

Si el acreedor no presta conformidad para la liberación del deudor, la asunción se tiene por
rechazada.”

Conformidad para la liberación del deudor: Art. 1634: “en los casos de los dos artículos anteriores,
el deudor solo queda liberado si el acreedor lo admite expresamente. Esta conformidad puede ser
anterior, simultánea o posterior a la cesión; pero es ineficaz si ha sido prestada en un contrato
celebrado por adhesión.”

Solo produce la liberación del deudor si media conformidad expresa del acreedor, señalando que
puede ser anterior, al mismo tiempo o posterior a la transmisión de la deuda. La conformidad del
acreedor, siendo anticipada, resulta ineficaz si fue prestada en un contrato celebrado por
adhesión. El art 1634 considera como no escritas las clausulas que implican restricción o renuncia
de los derechos del adherente. La conformidad prestada de manera anticipada por el acreedor
será eficaz si se inserta en un contrato paritario, negociado o discrecional.

Efectos de la cesión de deuda con liberación del deudor: el tercero sustituye por completo a la
persona del deudor, quien queda exonerado, por lo que el acreedor ya no podrá dirigir contra el la
acción del cumplimiento de la obligación. Se produce solo con la voluntad expresa del acreedor. El
nuevo deudor o cesionario queda obligado en la misma medida y modalidades que su antecesor.
Promesa de liberación del deudor: Art. 1635: “hay promesa de liberación si el tercero se obliga
frente al deudor a cumplir la deuda en su lugar. Esta promesa solo vincula al tercero con el
deudor, excepto que haya sido pactada como estipulación a favor de tercero.”

Es un convenio celebrado entre el deudor y un tercero, en virtud del cual este asume el deber de
liberarlo de las responsabilidades que emergen de un vínculo obligacional. La figura importa una
relación interna entre dichas partes, a la cual es ajeno al acreedor. El tercero solo queda obligado
frente al deudor.

La promesa de liberación no constituye, en principio, un contrato que produzca el traspaso de la


deuda a un tercero.

El nuevo código se ocupa de regular las convenciones relativas a la transmisión de la deuda. Hay 3
categorías de convenio:

1. La cesión de deuda, que exige la intervención del deudor (cedente), de un tercero


(cesionario) y del acreedor (cedido)
2. La asunción de deuda como acto bilateral, en la que participan un tercero y un acreedor
3. La promesa de liberación, como acto que vincula al deudor con un tercero, y que solo
proyectara los efectos propios de la transmisión de deuda al acreedor, si las partes le
dieran intervención a través de la figura de la estipulación a favor de terceros

En cualquier caso, el deudor solo quedara liberado si el acreedor lo admite expresamente.

Los elementos comunes:

a) La modificación del sujeto pasivo de la relación obligatoria: podrá configurarse a través de


la sucesión a título particular en la deuda como también por medio de la adicción de un
nuevo deudor según el caso
b) La ausencia de novación: no debe existir la voluntad de extinguir el vinculo originario
c) Concurso de la voluntad del acreedor: hay que exigir siempre el consentimiento del
acreedor para que la cesión de deudas se configure.

4. a. cesión de la posición contractual. Concepto

La cesión de la posición contractual es un negocio jurídico por el cual una de las partes se obliga a
transmitir a un tercero, el conjunto de derechos y obligaciones que están adheridos a la calidad de
parte que tiene justamente en ese contrato.

Afirmar que se transmiten un conjunto de derechos y obligaciones implica poner en evidencia que
existen deberes o prestaciones reciprocas pendientes.

La forma en que debe instrumentarse el contrato de cesión de una posición contractual, depende
de la forma que se exija para el propio contrato que se cede. El código de Vélez establecía “en
punto a la forma del contrato de cesión resultan de aplicación los principios del código civil para la
cesión de créditos. En los supuestos en que fuese necesaria la escritura pública, el instrumento
privado valdrá en los términos del art. 1185.” Esta recomendación es aplicable a nuestro código
vigente, ya que este artículo es similar al 1018.

Lo expuesto es de rigor cuando se cede el contrato voluntariamente. Sin embargo, hay casos en
que nos enfrentamos a una cesión impuesta por la ley. Es el caso de la enajenación de un
inmueble alquilado, que trae como consecuencia, salvo pacto en contrario, la subsistencia del
contrato de locación por el plazo pactado (Art. 1189, inc B)

b. efectos:

La regla es la liberación del cedente, quien solo continua obligado si el cedido declara que no lo
quiere liberar. Es necesario que el cedido consienta la transmisión de la posición contractual. Sin
ese consentimiento, no hay cesión de la posición contractual posible. En nuestro ordenamiento
legal, es necesario que el cedido consienta la transmisión de la posición contractual. Sin ese
consentimiento no hay cesión de la posición contractual posible. El consentimiento puede ser
dado antes (solo tiene efectos una vez que el propio cedido haya sido notificado por instrumento
público o privado de fecha cierta), simultáneamente o después de la cesión.

La regla primaria es que desde la cesión el cedente se aparta de sus derechos y obligaciones, lo
que son asumidos por el cesionario. Sin embargo, el cedido esta facultado a conservar sus
acciones contra el cedente, siempre que hubiera pactado con este el mantenimiento de sus
derechos para el caso de incumplimiento del cesionario.

En caso de que el cedido conserve su acción contra el cedente por haber convenido el
mantenimiento de sus derechos para el caso del incumplimiento del cesionario, y haya cumplido
con la notificación establecida en la parte final del art 1637, el cedente mantendrá contra el todas
las defensas pertinentes.

c. defensas:

El cedido tiene derecho a oponer al cesionario todas las defensas que pudiera haberle opuesto al
cedente provenientes del contrato cedido, pero no las fundadas en otras relaciones con el
cedente, a menos que hubiera hecho expresa reserva de oponer tales excepciones al momento de
consentir la cesión.

El cesionario puede ejercer todos los derechos del cedente, como los de demandar el
cumplimiento del contrato cedido, su resolución, plantear su nulidad y oponer la excepción de
incumplimiento contractual

d. garantías:

Como regla general, el cedente garantiza la existencia y validez del contrato (art. 1639) pero no el
efectivo cumplimiento por parte del cedido, salvo que haya asumido tal obligación
convencionalmente, en cuyo caso responderá como fiador.
La misma norma admite la posibilidad de que se pacte de manera expresa que el cedente no
garantice la existencia y legitimidad del contrato. En este caso, sería un contrato aleatorio. Esta
clausula será inadmisible si el cedente actuó de mala fe. Por ello dispone que tal clausula se tendrá
por no escrita si la nulidad o la inexistencia del contrato se debe a un hecho imputable al propio
cedente.

Se aplican a este contrato de cesión de la posición contractual las normas sobre evicción e la
cesión de derechos en general. El art. 1628, prevé otras dos situaciones de garantía, además de la
ya vista sobre la existencia y legitimidad del contrato:

1. El cedente no garantiza la existencia y legitimidad de un derecho que se transmite como


litigioso o dudoso.
2. El cedente no garantiza la solvencia del deudor cedido ni de sus fiadores, a menos que se
pacte lo contrario o haya obrado de mala fe.

Garantías dadas por terceros: el código civil y comercial en su art 1640 dispone que las garantías
constituidas por terceras personas no pasan al cesionario sin la autorización expresa de aquellas
que las constituyeron.

e. transacción: concepto. Caracteres y efectos. Forma. Nulidad.

Concepto:

Art. 1641: “la transacción es un contrato por el cual las partes, para evitar un litigio, o ponerle fin,
haciéndose concesiones reciprocas, extinguen obligaciones dudosas o litigiosas.”

Ahora bien, aun cuando la transacción es un contrato, lo que las partes procuran, no es generar
derechos ni transmitirlos, sino declararlos o reconocerlos. Mediante la transacción, las partes
abandonan un estado de cierta incertidumbre jurídica e ingresan en otro de plena certeza, con
clara determinación de sus derechos. De esta manera se extinguen obligaciones dudosas.

Caracteres y efectos:

Art. 1642: “la transacción produce los efectos de la cosa juzgada sin necesidad de homologación
judicial. Es de interpretación restrictiva.”

Significa que la transacción solo comprende y extingue los derechos litigiosos o dudoso
exclusivamente considerados en ella según la común intención de las partes; debiendo entenderse
en caso de duda que no alcanza a los derechos no incluidos en la misma de manera inequívoca.

Cuando la norma es de interpretación restrictiva, esto significa que el interprete debe ajustarse al
tenor literal de los términos utilizados por las partes para declarar su voluntad (art. 1062).

Forma:
Art. 1643: “la transacción debe hacerse por escrito. Si recae sobre derechos litigiosos solo es eficaz
a partir de la prestación del instrumento firmado por los interesados ante el juez en que tramita la
causa. Mientras el instrumento no sea presentado, las partes pueden desistir de ella.”

La transacción es un contrato formal no solemne. En cualquier caso debe celebrarse por escrito,
sin embargo, cuando la transacción recae sobre derechos litigiosos, s suma como solemnidad la
prestación en el expediente judicial donde tramita la causa, para que produzca sus efectos propios
y sea inviable el desistimiento de las partes.

Forma de transacción: la transacción es regulada como contrato formal. En el supuesto de


transacción extrajudicial, aquella recae sobre derechos dudosos, la forma escrita aparece como la
única solemnidad requerida, tratándose de una forma no solemne. En cambio, la transacción
judicial (relativa a derechos litigiosos) se sujeta de formalidades mas exigentes, se requiere la
prestación del instrumento ante el juez donde tramita la causa. Si la transacción tiene por objeto
derechos dudosos o litigiosos sobre inmuebles, debe ser hecho por escritura publica.

Prohibiciones:

Art. 1644: “no puede transigirse sobre derechos en los que esta comprometido el orden publico, ni
sobre derechos irrenunciables.

Tampoco pueden ser objeto de transacción los derechos sobre las relaciones de familia o el estado
de las personas, excepto que se trate de derechos patrimoniales derivados de aquellos o de otros
derechos sobre los que, expresamente, este código admite pactar.”

Las normas generales que regulan el objeto de los actos jurídicos y de los contratos en particular le
son plenamente aplicables. Por ende, la transacción no puede tener por objeto, un hecho
imposible o prohibido por la ley, contrario a la moral o las buenas costumbres, el orden público o
ser lesiva de los derechos ajenos o de la dignidad de la persona. Así como el objeto debe tener los
recaudos que exige todo contrato: ser lícito, posible, determinado o determinable, susceptible de
valoración económica y corresponder a un interés de las partes.

Primera limitación: la transacción no puede comprometer el orden público

Segunda limitación: derechos irrenunciables

Tercera limitación: se impone en cuestiones relativas a las relaciones de familia y estado de las
personas, que tampoco puede ser materia de transacción. Hace referencia a derechos que no son
disponibles y cuya regulación es de orden público.

UNIDAD VII: CONTRATOS DE TRANSFERENCIA DE USO Y DE


COLABORACION
1. a. locación. Definición. Disposiciones generales.
Definición: Art. 1187: “Hay un contrato de locación si una parte se obliga a otorgar a otra el uso y
goce temporario de una cosa, a cambio del pago de un precio en dinero.

Al contrato de locación se aplica en subsidio lo dispuesto con respecto al consentimiento, precio y


objeto del contrato de compraventa.”

Forma – oponibilidad. Art. 1188: El contrato de locación de cosa inmueble o mueble registrable, de
una universalidad que incluya a alguna de ellas, o de parte material de un inmueble, debe ser
hecho por escrito. Esta regla se aplica también a sus prorrogas o modificaciones.

Interpretación: tratándose de cosas muebles no registrables o de universalidades que incluyan


solo cosas muebles no registrables, el negocio es no formal, a no sé que se trate de un contrato
que sea de uso, en cuyo caso deberá celebrarse por escrito. Si así no fuera no podrá ser probado
exclusivamente por testigos.

En la locación de inmuebles, de bienes mueble registrables y de universalidad que incluya a alguna


de ellas o parte de un inmueble se establece la forma escrita para su celebración, prorroga y
modificaciones.

Transmisión por causa de muerte –enajenación de la cosa locada. Art. 1189: Excepto pacto en
contrario, la locación:

a) se transmite activa y pasivamente por causa de muerte


b) subsiste durante el tiempo convenido, aunque la cosa locada sea enajenada

Interpretación: en el inciso A se observa una aplicación de lo dispuesto en el art. 1024 “los efectos
del contrato se extienden activa y pasivamente, a lo sucesores universales, a no ser que las
obligaciones que de él nacen sean inherentes a la persona, o este prohibida por una clausula del
contrato o la ley”.

En cuanto al inc. B, Lorenzetti señala que en el sistema legal argentino, el derecho del locatario es
de fuente contractual y, por lo tanto, personal, pero tiene unas características propias de los
derechos reales: a- en caso de venta de la cosa, el contrato de locación subsiste durante el tiempo
convenido; b- cuando el dominio es revocable, y este se produce, debe respetarse el contrato de
locación; c- el tenedor tiene acciones posesorias. En caso de venta de la cosa, al nuevo propietario
se le va a transmitir la propiedad con el contrato de locación que debe ser respetado. El derecho
del locatario es protegido en virtud del principio protectorio, lo cual no significa que sea real, sino
que se trata de un derecho creditorio, con una protección especial destinada a asegurar el uso y
goce de la cosa.

En caso de enajenación de cosa locada el nuevo propietario debe respetar el contrato de locación
vigente.

Continuador de la locación. Art. 1190: “Si la cosa locada es inmueble, o parte material de un
inmueble, destinado a la habitación, en caso de abandono o fallecimiento del locatario, la locación
puede ser continuada con las mismas condiciones pactadas, y hasta el vencimiento del plazo
contractual, por quien la habite y acredite haber recibido del locatario ostensible trato familiar
durante el año previo a abandono o fallecimiento.

El derecho del continuador en la locación prevalece sobre el del heredero del locatario”

Facultades de representante. Art. 1191: “para celebrar contrato de locación por mas de tres años,
o cobrar alquileres anticipados por el mismo periodo, se requiere facultad expresa.”

Caracteres:

a) es bilateral: desde que origina obligaciones reciproca para el locador y locatario

b) es oneroso y conmutativo: las contraprestaciones guardan equivalencia, el alquiler pactado es


el justo precio del uso y goce.

c) es un contrato de tracto sucesivo: su cumplimiento se prolonga a través de un tiempo mas o


menos dilatado.

b. objeto y destino:

Cosas. Art. 1192: “Toda cosa presente o futura, cuya tenencia este en el comercio, puede ser objeto
del contrato de locación, si es determinable, aunque sea solo en su especie. Se comprenden en el
contrato, a falta de previsión en contrario, los productos y los frutos ordinarios.”

Interpretación: uno de los objetos mediatos indirectos del contrato de locación consiste en la
entrega temporaria del uso y/o goce de la cosa. El otro será el precio en dinero que se promete a
cambio de dicho uso y/o goce. Además toda cosa presente o futura, cuya tenencia este en el
comercio, puede ser objeto del contrato de locación si es determinable, aunque solo sea en su
especie.

Para cosas futuras, el contrato queda concluido bajo la condición de que la cosa llegue a existir. Si
la cosa no llega a existir el contrato queda sin efecto, sin perjuicio de las responsabilidades que le
pudieran caber al locador.

Contrato reglado por normas administrativas. Art. 1193: “Si el locador es una persona jurídica de
derecho público, el contrato se rige en lo pertinente por las normas administrativas y, en subsidio,
por este capítulo.”

Destino de la cosa locada. Art. 1194: “El locatario debe dar a la cosa locada el destino acordado en
el contrato. A falta de convención, puede darle el destino que tenia al momento de locarse, el que
ceda a cosas análogas en el lugar donde la cosa se encuentre o el que corresponde a su naturaleza.
A los efectos de este capítulo, si el destino es mixto se aplican las normas correspondientes al
habitacional.”
Interpretación: las partes pueden establecer el destino que se le dará a la cosa locada. Dicho
destino de la cosa alquilada no debe estar prohibido por las leyes, o ser contrario a la moral o al
orden público o lesivo de los derechos ajenos o de la dignidad humana, de lo contrario el contrato
es nulo.

Habitación de personas incapaces o con capacidad restringida. Art. 1195: “En nula la clausula que
impide el ingreso, o excluye del inmueble alquilado, cualquiera sea su destino, a una persona
incapaz o con capacidad restringida qe se encuentre bajo la guarda, asistencia o representación
del locatario o sublocatario, aunque este no habite el inmueble.”

Locación habitacional. Art. 1197: “Si el destino es habitacional, no puede requerirse del locatario:

a) el pago de alquileres anticipados por periodos mayores a un mes:


b) depósitos de garantía o exigencias asimilables, por cantidad mayor del importe
equivalente a un mes de alquiler por año de locación contratado;
c) el pago de valor llave o equivalentes.”

En la práctica inmobiliaria es normal que se pacte el pago anticipado de un mes de alquiler, lo que
importa una garantía adicional para el locador porque la mora apta para el desalojo se constituye
con la falta de pago de dos períodos consecutivos. La violación a esta disposición otorga al
locatario el derecho a solicitar el reintegro de las sumas anticipadas en exceso. De requerirse
actuaciones judiciales por tal motivo, las costas serán soportadas por el locador.

A los efectos de garantizar el cumplimiento del contrato de locación es frecuente que el locador
exija al locatario la entrega de una suma de dinero que es retenida por aquél. Se trata de una
institución de garantía, que se perfecciona a través de la entrega de sumas de dinero. Éstas pasan
en propiedad al locador, debiéndola restituir al momento de concluir el contrato de locación, si es
que no existe ninguna deuda pendiente de pago en cabeza del locatario. La ley limita este derecho
al locador para evitar abusos consistentes en exigencias de monos desmedidos, al tratarse de
inmuebles con destino habitacional.

El inciso C de este art prohíbe para los destinos habitacionales o mixtos el pago de valor llave o
equivalentes. En caso de contravención a la prohibición establecida, el locatario puede solicitar la
restitución de lo pagado. En caso de ser necesario accionar judicialmente para obtener la
restitución, las costas serán soportadas por el locador.

c. plazos

El locador se obliga a conferir al locatario el uso y goce de un inmueble durante cierto tiempo. La
existencia de un plazo resolutorio, a cuyo vencimiento concluye el contrato, es tipificante del
contrato de locación, aunque también se lo puede combinar con un lazo suspensivo, de modo que
la locación una vez celebrada comience a producir efectos a partir de un determinado plazo.

Este plazo es siempre cierto, ya que si las partes no pactado ningún plazo expreso, la ley fija límites
para mínimos y máximos.
Plazo máximo. Art. 1197: “El tiempo de la locación, cualquiera sea su objeto, no puede exceder de
20 años para el destino habitacional y 50 años para los otros destinos. El contrato es renovable
expresamente por un lapso que no exceda de los máximos previstos contados desde su inicio.”

Plazo mínimo de la locación de inmueble. Art. 1198: “El contrato de locación de inmueble,
cualquiera sea su destino, si carece de plazo expreso y determinado mayor, se considera celebrado
por el lazo mínimo legal de 2 años, excepto en casos del art 1199. El locatario puede renunciar a
este plazo si esta en tenencia de la cosa.”

- la jurisprudencia ha afirmado que dicho lapso mínimo es de orden público y tiene por finalidad
amparar al contratante (al inquilino); y en función de que esta previsto a favor del locatario, este
puede renunciar a esta protección, pero siempre y cuando este en tenencia del inmueble, de lo
contrario vulneraria la finalidad tuitiva de la ley.

Excepciones al plazo mínimo legal. Art. 1199: “No se aplica el plazo mínimo legal a los contratos de
locación de inmuebles o parte de ellos destinados a:

a) sede de embajada, consulado u organismo internacional, y el destinado a habitación de su


personal extranjero diplomático o consular;
b) habitación con muebles que se arrienden con fines de turismo, descanso o similares. Si el
plazo del contrato supera los 3 meses, se presume que no fue hecho con esos fines;
c) guarda de cosas
d) exposición u oferta de cosas o servicios en un predio ferial.

Tampoco se aplica el plazo mínimo legal a los contratos que tengan por objeto el cumplimiento de
una finalidad determinado expresada en el contrato y que debe normalmente cumplirse en el plazo
menor pactado.”

d. obligaciones del locador y del locatario

Obligaciones del LOCADOR:

Entregar la cosa. Art. 1200: “El locador debe entregar la cosa conforme a lo acordado. A falta de
previsión contractual debe entregarla en estado apropiado para su destino, excepto los defectos
que el locatario conoció o pudo haber conocido.”

La entrega de la cosa se cumple dando aquello que se ha previsto en contrato y con todo lo
necesario para que ella cumpla con el destino pactado.

Entre las cosas que debe entregar el locador se incluyen:

a) las llaves de la cosa, ya sea mueble o inmueble


b) las servidumbres del inmueble
c) los frutos y productos ordinarios de la cosa, siempre que estuviesen pendientes de
recolección
d) también ciertos servicios accesorios como el de portería, calefacción, agua caliente, etc.
Conservar la cosa con aptitud para el uso convenido. Art. 1201: “El locador debe conservar la cosa
locada en estado de servir al uso y goce convenido y efectuar a su cargo la reparación que exija el
deterioro originado en su calidad o defecto, en su propia culpa, o en la de sus dependientes o en
hechos de terceros o caso fortuito. Si al efectuar la reparación o innovación se interrumpe o turba
el uso y goce convenido, el locatario tiene derecho a que se reduzca el canon temporariamente en
proporción a la gravedad de la turbación o, según las circunstancias, a resolver el contrato.”

El locador está obligado a mantener la coa en buen estado de conservación, y a hacer todas las
reparaciones que fueren necesarias para permitir al locatario el uso y goce de la cosa conforme a
lo convenido. Esta obligación se extiende a la reparación de los deterioros derivados de
circunstancias como:

a) caso fortuito o fuerza mayor (incendios, un ciclón, etc.)


b) de la calidad propia de la cosa y de sus vicios o defectos
c) del efecto natural del uso o goce
d) de la culpa del locador, sus agentes o dependiente
e) del hecho de terceros aunque sea por motivos de enemistad u odio a locatario.

En caso de que el locador no cumpla con su obligación de conservar la cosa en buen estado, el
locatario puede ejercer sus derechos a través de:

a) cuando los trabajos no tuvieran carácter de urgencia, el inquilino puede realizar las
mejoras y luego reclamar el costo al locador
b) si fueran urgentes, el locatario puede ejecutarlas por cuenta del locador y si autorización
judicial.
c) además el locatario puede demandar ante la negativa del locador de efectuar las
reparaciones, la extinción del contrato, con culpa del locador y los daños pertinentes.
d) también pedir la reducción proporcional del canon locativo por el tiempo en que se vio
impedido de usar y gozar del bien, a raíz de realizar las reparaciones.

Pagar mejoras. Art. 1202: “El locador debe pagar las mejoras necesarias hechas por el locatario a
la cosa locada, aunque no lo haya convenido, si el contrato se resuelve sin culpa del locatario,
excepto que sea por destrucción de la cosa.”

Frustración del uso o goce de la cosa. Art. 1203: “Si por caso fortuito o fuerza mayor, el locatario se
ve impedido de usar o gozar de la cosa, o ésta no puede servir para el objeto de la convención,
puede pedir la rescisión del contrato, o la cesación del pago del precio por el tiempo que no pueda
usar o gozar de la cosa. Si el caso fortuito no afecta a la cosa misma, sus obligaciones continúan
como antes.”

Para que se produzcan las consecuencias aquí señaladas es necesario que el caso fortuito afecte a
la cosa misma, el contrato mantendrá pleno efecto si el inquilino abandona la cosa por simple
precaución personal y no por imposición de autoridades, si el mismo ha debido abandonar la cosa
por haber sido designado para ejercer funciones fuera del país, etc.
En caso de que la fuerza mayor impida el goce de la cosa, sea en forma definitiva o temporal, el
inquilino puede: pedir la resolución del contrato, o la suspensión del pago el alquiler durante el
tiempo que dure la imposibilidad de gozar la cosa. Si la imposibilidad fuera parcial, deberá optar
entra la rescisión o la disminución proporcional del alquiler durante el tiempo que dura la
imposibilidad. No tendrá derecho a reclamar la reparación de daños ya que la imposibilidad por
derivar de caso fortuito es inimputable al locador.

Perdida de luminosidad del inmueble. Art.1204: “La pérdida de luminosidad del inmueble urbano
por construcciones en las fincas vecinas, no autoriza al locatario a solicitar la reducción del precio
ni a resolver el contrato, excepto que medie dolo del locador.”

Obligaciones del LOCATARIO.

Las obligaciones esenciales del locatario son:

a) usar y gozar la cosa conforme a lo pactado, o, en defecto de pacto, de acuerdo con la


naturaleza y destino de la cosa;
b) conservarla en buen estado;
c) pagar el alquiler o arrendamiento;
d) restituir la cosa al término de la locación.

Prohibición de variar el destino. Art. 1205: “El locatario puede usar y gozar de la cosa conforme a
derecho y exclusivamente para el destino correspondiente. No puede variarlo aunque ello no cause
perjuicio al locador.”

Las partes pueden determinar explícitamente el uso o goce al que se destinara la cosa, si no fuera
así, entran en función las leyes supletorias, las cuales no permites un uso deshonesto. En caso de
clausulas explicitas hay que atenerse a los términos de la clausula respectiva, y los límites que de
allí resulten serán fijados con precisión y en situación de rigidez.

Conservar la cosa en buen estado. Destrucción. Art. 1206: “El locatario debe mantener la cosa y
conservarla en el estado en que la recibió. No cumple con esta obligación si la abandona sin dejar
quien haga sus veces. Responde por cualquier deterioro causado a la cosa, incluso por visitantes
ocasionales, pero no por acción del locador o sus dependientes; asimismo responde por la
destrucción de la cosa por incendio no originado en caso fortuito.”

El locatario es responsable de todo el daño o deterioro que causare, excepto que se deba a la
acción del locador o de dependientes de este. Responde por los daños o deterioros causados por
su culpa.

También incumple su obligación de conservar la cosa en buen estado el locatario que dejare de
hacer las mejoras a que se obligó o que no reparara cualquier deterioro causado a la cosa, salvo
que los mismos provinieran por acción del locador o de sus dependientes.
Mantener la cosa en buen estado. Reparaciones. Art. 1207: “Si la cosa es mueble, el locatario tiene
a su cargo el gasto de su conservación y las mejoras de mero mantenimiento; y sólo éstas si es
inmueble. Si es urgente realizar reparaciones necesarias puede efectuarlas a costa del locador
dándole aviso previo.”

Si la cosa fuera mueble, la obligación recae en cabeza del locatario abonar los gastos que demande
la conservación de la cosa y el mantenimiento de la misma en el estado en que la recibió o apto
para el destino establecido expresa o implícitamente.

Si la cosa fuera inmueble, el locador tiene la obligación de afrontar los gastos que demande la
conservación de la cosa. En cuanto a las mejoras de mantenimiento es el locatario quien debe
hacerse cargo (las mejoras necesarias).

Pagar el canon convenido. Art. 1208: “La prestación dineraria a cargo del locatario se integra con
el precio de la locación y toda otra prestación de pago periódico asumida convencionalmente por
el locatario. Para su cobro se concede vía ejecutiva.

A falta de convención, el pago debe ser hecho por anticipado: si la cosa es mueble, de contado; y si
es inmueble, por período mensual.”

El pago del canon locativo es la obligación principal asumida por el locatario, sin la cual no hay
locación. Además del pago del canon locativo, el pago de otra prestación periódica, como el pago
de expensas, asumida convencionalmente por el locatario, integran el precio de la locación. La
falta de pago de tales servicios produce los mismos efectos que la falta de pago del alquiler.

Se presume que las impensas, es decir los pagos de servicios eléctricos, sanitarios, telefónicos, son
a cargo del locatario, salvo que se hubiera pactado que sean a cargo del locador.

Pagar cargas y contribuciones por la actividad. Art. 1209: “El locatario tiene a su cargo el pago de
las cargas y contribuciones que se originen en el destino que dé a la cosa locada. No tiene a su
cargo el pago de las que graven la cosa, excepto pacto en contrario.”

En cuanto a los tributos que graven a la cosa se considera que deben ser soportados por el
locador, asumiendo que su costo ya integra el precio de la locación. Es por ello que no deben ser
soportados por el locatario, salvo pacto en contrario.

En cuanto a las cargas y contribuciones que se originen en el destino que se le dé a la cosa locada,
se consideran que son cargas o contribuciones propias de la actividad que se realiza en o con la
cosa locada y por lo tanto deben ser soportadas exclusivamente por el locatario; aunque dicha
disposición puede ser dejada de lado por las partes.

Ej. Se suele acordar que del pago del impuesto inmobiliario se hace cargo el locador, mientras que
del impuesto o tasa municipal inmobiliaria, el locatario.
Restituir la cosa. Art. 1210: “El locatario, al concluir el contrato, debe restituir al locador la cosa en
el estado en que la recibió, excepto los deterioros provenientes del mero transcurso del tiempo y el
uso regular. También debe entregarle las constancias de los pagos que efectuó en razón de la
relación locativa y que resulten atinentes a la cosa o a los servicios que tenga.”

El estado de la cosa habrá que analizar según que se haya descripto o no en el contrato el estado
de la misma, al momento de recibirse por el locatario. El locatario cumple con su obligación en
tanto en cuanto la restituya, en las mismas condiciones que la recibió, salvo los deterioros propios
del uso. Si el locatario recibió la cosa sin descripción de su estado, se presume que la recibió en
estado apropiado para su destino.

Si la cosa se hubiera destruido parcialmente, cumple con su obligación entregando la cosa sin la
parte que hubiese sido destruida, siempre que tal circunstancia se hubiera producido sin culpa del
locatario.

e. régimen de mejoras:

El Código ha reglamentado el régimen de mejoras en el contrato de locación, prescribiendo las


mejoras que el locatario puede o no realizar, y quién debe soportar las mismas. Estas disposiciones
son supletorias, de manera tal que las partes pueden configurarlas de manera diferente

Regla. Art. 1211 “El locatario puede realizar mejoras en la cosa locada, excepto que esté prohibido
en el contrato, alteren la substancia o forma de la cosa, o haya sido interpelado a restituirla. No
tiene derecho a reclamar el pago de mejoras útiles y de mero lujo o suntuarias, pero, si son
mejoras necesarias, puede reclamar su valor al locador.”

El locatario puede realizar mejoras, salvo que esté prohibido contractualmente, o alteren la
sustancia o forma de la cosa, o haya sido ya requerido a la restitución de la cosa.

En el artículo 1934 se distinguen cuatro tipos de mejoras:

a) mejora de mero mantenimiento: la reparación de deterioros menores originados por el


uso ordinario de la cosa.
b) mejora necesaria: la reparación cuya realización es indispensable para la conservación de
la cosa. Las mejoras necesarias están en principio a cargo del locador, salvo pacto en
contrario;
c) mejora útil: la beneficiosa para cualquier sujeto de la relación posesoria, y
d) mejora suntuaria: la de mero lujo o recreo o provecho exclusivo para quien la hizo.
Violación al régimen de mejoras. Art. 1212: “La realización de mejoras prohibidas en el artículo
1211 viola la obligación de conservar la cosa en el estado en que se recibió.”

El Código considera que la violación de la prohibición de efectuar mejoras implica un


incumplimiento a la obligación de conservar la cosa en el mismo estado que la recibió. Tal
incumplimiento habilita la rescisión contractual.

f. cesión y sublocación

El inquilino puede hacer el traspaso de sus derechos en favor de un tercero, por dos vías: la cesión
del contrato o la sublocación. En ambos casos el arrendatario traspasa sus derechos a un tercero,
aquel deja de tener el uso y goce de la cosa locada. Sin embargo, en la sublocación, existe un
nuevo contrato de locación que viene a superponerse al primero; en la cesión, es el mismo
contrato originario que se transfiere al cesionario, y las relaciones entre este y el cedente, se rigen
por las reglas de la cesión de la posición contractual.

Cesión. Art. 1213: “El locatario sólo puede ceder su posición contractual en los términos previstos
en los artículos 1636 y siguientes. La cesión que no reúna tales requisitos viola la prohibición de
variar el destino de la cosa locada.”

La prohibición contractual de ceder importa la de sublocar y viceversa. Se considera cesión a la


sublocación de toda la cosa.

La cesión del contrato por parte del locatario sólo es posible si existe conformidad expresa del
locador, ya sea prevista en el contrato, sea simultánea al momento de la cesión o con
posterioridad a la misma.

Se interpreta que la prohibición contractual de ceder importa la de sublocar y viceversa, y que a


pesar de que se hable de sublocación, si el locatario se obliga a conceder a un tercero el uso y goce
de la totalidad de la cosa se trata de una cesión de la Posición contractual.

Sublocación. Art. 1214: “El locatario puede dar en sublocación parte de la cosa locada, si no hay
pacto en contrario. Para ello debe comunicar al locador, por medio fehaciente, su intención de
sublocar e indicarle el nombre y domicilio de la persona con quien se propone contratar, y el
destino que el sublocatario asignará a la cosa. El locador sólo puede oponerse por medio
fehaciente, dentro del plazo de diez días de notificado. El silencio del locador importa su
conformidad con la sublocación propuesta.”

La sublocación contratada pese la oposición del locador, o con apartamiento de los términos que
se le comunicaron, viola la prohibición de variar el destino de la cosa locada.

Relaciones entre sublocador y sublocatario. Art. 1215: “Entre sublocador y sublocatario rigen las
normas previstas en el contrato respectivo y las de este Capítulo. Está implícita la cláusula de usar
y gozar de la cosa sin transgredir el contrato principal.”
El subcontrato implica un nuevo contrato entre los subcontratantes. Es por ello que este nuevo
contrato se regirá por las disposiciones que las partes hayan acordado. Sin embargo, como dicho
contrato genera en cabeza del subcontratado una posición contractual derivada de la que goza el
subcontratante, es que no se transgrede el contrato principal en lo que se refiere al uso y goce de
la cosa. Si así se lo hiciera incurriría en causal de rescisión contractual.

Acciones directas. Art. 1216: “Sin perjuicio de sus derechos respecto al locatario, el locador tiene
acción directa contra el sublocatario para cobrar el alquiler adeudado por el locatario, en la
medida de la deuda del sublocatario. También puede exigir de éste el cumplimiento de las
obligaciones que la sublocación le impone, inclusive el resarcimiento de los daños causados por uso
indebido de la cosa. Recíprocamente, el sublocatario tiene acción directa contra el locador para
obtener a su favor el cumplimiento de las obligaciones asumidas en el contrato de locación. La
conclusión de la locación determina la cesación del subarriendo, excepto que se haya producido
por confusión.”

g. extinción

Extinción de la locación. Art. 1217: “Son modos especiales de extinción de la locación:

a) el cumplimiento del plazo convenido, o requerimiento previsto en el artículo 1218, según el


caso;
b) la resolución anticipada.”

El inc. A refiere a la conclusión del contrato por vencimiento del plazo es un efecto normal del
plazo extintivo, debiendo estar de acuerdo con los plazos mínimos y máximos establecidos en este
código, los cuales constituyen normas de orden público. Puede ocurrir que a pesar del
cumplimiento del plazo, el locatario continúe en el uso y goce del inmueble, con el consentimiento
del locador; en este caso no existe una “reconducción tacita” sino más bien una continuación de la
locación concluida, bajo los mismos términos hasta que cualquiera de las partes de por concluido
el contrato mediante notificación fehaciente. Se extingue la locación al recibirse dicha notificación.

En el inc. B aclara que también se extingue la locación por resolución anticipada prevista en el art
1221 del código. El locatario puede rescindir el contrato anticipadamente bajo las condiciones
anteriormente previstas.

Continuación de la locación concluida. Art. 1218: “Si vence el plazo convenido o el plazo mínimo
legal en ausencia de convención, y el locatario continúa en la tenencia de la cosa, no hay tácita
reconducción, sino la continuación de la locación en los mismos términos contratados, hasta que
cualquiera de las partes dé por concluido el contrato mediante comunicación fehaciente.

La recepción de pagos durante la continuación de la locación no altera lo dispuesto en el primer


párrafo.”
Si vencido el plazo el locatario continúa en la tenencia de la cosa, no hay tácita reconducción, sino
la continuación de la locación en los mismos términos contratados, hasta que cualquiera de las
partes dé por concluido el contrato comunicando a la otra parte en forma fehaciente tal voluntad.
El hecho de recibir pagos durante la continuación de la locación no implica tacita reconducción,
sino siempre la continuación de la locación concluida.

Resolución imputable al locatario. Art. 1219: “El locador puede resolver el contrato:

a) por cambio de destino o uso irregular en los términos del artículo 1205;
b) por falta de conservación de la cosa locada, o su abandono sin dejar quien haga sus veces;
c) por falta de pago de la prestación dinerada convenida, durante dos períodos
consecutivos.”

Resolución imputable al locador. Art. 1220: “El locatario puede resolver el contrato si el locador
incumple:

a) la obligación de conservar la cosa con aptitud para el uso y goce convenido;


b) la garantía de evicción o la de vicios redhibitorios.”

Resolución anticipada. Art. 1221: “El contrato de locación puede ser resuelto anticipadamente por
el locatario:

a) si la cosa locada es un inmueble y han transcurrido seis meses de contrato, debiendo


notificar en forma fehaciente su decisión al locador. Si hace uso de la opción resolutoria en
el primer año de vigencia de la relación locativa, debe abonar al locador, en concepto de
indemnización, la suma equivalente a un mes y medio de alquiler al momento de
desocupar el inmueble y la de un mes si la opción se ejercita transcurrido dicho lapso;
b) en los casos del artículo 1199, debiendo abonar al locador el equivalente a dos meses de
alquiler.”

(art. 1999: excepciones al plazo mínimo legal)

Efectos de la extinción

Intimación de pago. Art. 1222: “Si el destino es habitacional, previamente a la demanda de


desalojo por falta de pago de alquileres, el locador debe intimar fehacientemente al locatario el
pago de la cantidad debida, otorgando para ello un plazo que nunca debe ser inferior a diez días
corridos contados a partir de la recepción de la intimación, consignando el lugar de pago.”

Desalojo. Art. 1223: “Al extinguirse la locación debe restituirse la tenencia de la cosa locada. El
procedimiento previsto en este Código para la cláusula resolutoria implícita no se aplica a la
demanda de desalojo por las causas de los artículos 1217 y 1219, inciso c). El plazo de ejecución de
la sentencia de desalojo no puede ser menor a diez días.”

Facultades sobre las mejoras útiles o suntuarias. Art. 1224: “El locatario puede retirar la mejora
útil o suntuaria al concluir la locación; pero no puede hacerlo si acordó que quede en beneficio de
la cosa, si de la separación se sigue daño para ella, o separarla no le ocasiona provecho alguno. El
locador puede adquirir la mejora hecha en violación a una prohibición contractual, pagando el
mayor valor que adquirió la cosa.”

Caducidad de la fianza. Renovación. Art. 1225: “Las obligaciones del fiador cesan automáticamente
al vencimiento del plazo de la locación, excepto la que derive de la no restitución en tiempo del
inmueble locado. Se exige el consentimiento expreso del fiador para obligarse en la renovación o
prórroga expresa o tácita, una vez vencido el plazo del contrato de locación. Es nula toda
disposición anticipada que extienda la fianza, sea simple, solidaria como codeudor o principal
pagador, del contrato de locación original. “

Facultad de retención. Art. 1226: “El ejercicio del derecho de retención por el locatario lo faculta a
percibir los frutos naturales que la cosa produzca. Si lo hace, al momento de la percepción debe
compensar ese valor con la suma que le es debida.”

2. a. contrato de obras y servicios. Concepto y diferencias

Definición. Art. 1251: “Hay contrato de obra o de servicios cuando una persona, según el caso el
contratista o el prestador de servicios, actuando independientemente, se obliga a favor de otra,
llamada comitente, a realizar una obra material o intelectual o a proveer un servicio mediante una
retribución. El contrato es gratuito si las partes así lo pactan o cuando por las circunstancias del
caso puede presumirse la intención de beneficiar.”

Calificación del contrato. Art. 1252: “Si hay duda sobre la calificación del contrato, se entiende que
hay contrato de servicios cuando la obligación de hacer consiste en realizar cierta actividad
independiente de su eficacia. Se considera que el contrato es de obra cuando se promete un
resultado eficaz, reproducible o susceptible de entrega. Los servicios prestados en relación de
dependencia se rigen por las normas del derecho laboral. Las disposiciones de este Capítulo se
integran con las reglas específicas que resulten aplicables a servicios u obras especialmente
regulados.”

b. obligaciones del contratista y del prestador

Obligaciones del contratista y del prestador. Art. 1256:

“El contratista o prestador de servicios está obligado a:

a) ejecutar el contrato conforme a las previsiones contractuales y a los conocimientos


razonablemente requeridos al tiempo de su realización por el arte, la ciencia y la técnica
correspondientes a la actividad desarrollada;
b) informar al comitente sobre los aspectos esenciales del cumplimiento de la obligación
comprometida;
c) proveer los materiales adecuados que son necesarios para la ejecución de la obra o del
servicio, excepto que algo distinto se haya pactado o resulte de los usos;
d) usar diligentemente los materiales provistos por el comitente e informarle inmediatamente
en caso de que esos materiales sean impropios o tengan vicios que el contratista o
prestador debiese conocer;
e) ejecutar la obra o el servicio en el tiempo convenido o, en su defecto, en el que
razonablemente corresponda según su índole.”

c. obligaciones del comitente

Obligaciones del comitente. Art. 1257: “El comitente está obligado a:

a) pagar la retribución;
b) proporcionar al contratista o al prestador la colaboración necesaria, conforme a las
características de la obra o del servicio;
c) recibir la obra si fue ejecutada conforme a lo dispuesto en el artículo 1256.”

Riesgos de la contratación. Art. 1258: “Si los bienes necesarios para la ejecución de la obra o del
servicio perecen por fuerza mayor, la pérdida la soporta la parte que debía proveerlos.”

Muerte del comitente. Art. 1259: “La muerte del comitente no extingue el contrato, excepto que
haga imposible o inútil la ejecución.”

Muerte del contratista o prestador. Art. 1260: “La muerte del contratista o prestador extingue el
contrato, excepto que el comitente acuerde continuarlo con los herederos de aquél. En caso de
extinción, el comitente debe pagar el costo de los materiales aprovechables y el valor de la parte
realizada en proporción al precio total convenido.”

Desistimiento unilateral. Art. 1261: “El comitente puede desistir del contrato por su son voluntad,
aunque la ejecución haya comenzado; pero debe indemnizar al prestador todos los gastos y
trabajos realizados y la utilidad que hubiera podido obtener. El juez puede reducir equitativamente
la utilidad si la aplicación estricta de la norma conduce a una notoria injusticia.”

d. disposiciones comunes y especiales para obras y servicios.

COMUNES:

Medios utilizados. Art. 1253: “A falta de ajuste sobre el modo de hacer la obra, el contratista o
prestador de los servicios elige libremente los medios de ejecución del contrato.”

Cooperación de terceros. Art. 1254: “El contratista o prestador de servicios puede valerse de
terceros para ejecutar el servicio, excepto que de lo estipulado o de la índole de la obligación
resulte que fue elegido por sus cualidades para realizarlo personalmente en todo o en parte. En
cualquier caso, conserva la dirección y la responsabilidad de la ejecución.”
Precio. Art. 1255: “El precio se determina por el contrato, la ley, los usos o, en su defecto, por
decisión judicial. Las leyes arancelarias no pueden cercenar la facultad de las partes de determinar
el precio de las obras o de los servicios. Cuando dicho precio debe ser establecido judicialmente
sobre la base de la aplicación de dichas leyes, su determinación debe adecuarse a la labor cumplida
por el prestador. Si la aplicación estricta de los aranceles locales conduce a una evidente e
injustificada desproporción entre la retribución resultante y la importancia de la labor cumplida, el
juez puede fijar equitativamente la retribución. Si la obra o el servicio se ha contratado por un
precio global o por una unidad de medida, ninguna de las partes puede pretender la modificación
del precio total o de la unidad de medida, respectivamente, con fundamento en que la obra, el
servicio o la unidad exige menos o más trabajo o que su costo es menor o mayor al previsto,
excepto lo dispuesto en el artículo 1091.”

ESPECIALES:

Para las obras:

Sistemas de contratación. Art. 1262: “La obra puede ser contratada por ajuste alzado, también
denominado "retribución global", por unidad de medida, por coste y costas o por cualquier otro
sistema convenido por las partes. La contratación puede hacerse con o sin provisión de materiales
por el comitente. Si se trata de inmuebles, la obra puede realizarse en terreno del comitente o de
un tercero. Si nada se convino ni surge de los usos, se presume, excepto prueba en contrario, que la
obra fue contratada por ajuste alzado y que es el contratista quien provee los materiales.”

Retribución. Art. 1263: “Si la obra se contrata por el sistema de ejecución a coste y costas, la
retribución se determina sobre el valor de los materiales, de la mano de obra y de otros gastos
directos o indirectos.”

Variaciones del proyecto convenido. Art. 1264: “Cualquiera sea el sistema de contratación, el
contratista no puede variar el proyecto ya aceptado sin autorización escrita del comitente, excepto
que las modificaciones sean necesarias para ejecutar la obra conforme a las reglas del arte y no
hubiesen podido ser previstas al momento de la contratación; la necesidad de tales modificaciones
debe ser comunicada inmediatamente al comitente con indicación de su costo estimado. Si las
variaciones implican un aumento superior a la quinta parte del precio pactado, el comitente puede
extinguido comunicando su decisión dentro del plazo de diez días de haber conocido la necesidad
de la modificación y su costo estimado. El comitente puede introducir variantes al proyecto siempre
que no impliquen cambiar sustancialmente la naturaleza de la obra.”

Diferencias de retribución surgidas de modificaciones autorizadas. Art. 1265: “A falta de acuerdo,


las diferencias de precio surgidas de las modificaciones autorizadas en este Capítulo se fijan
judicialmente.”

Obra por pieza o medida. Art. 1266: “Si la obra fue pactada por pieza o medida sin designación del
número de piezas o de la medida total, el contrato puede ser extinguido por cualquiera de los
contratantes concluidas que sean las partes designadas como límite mínimo, debiéndose las
prestaciones correspondientes a la parte concluida.

Si se ha designado el número de piezas o la medida total, el contratista está obligado a entregar la


obra concluida y el comitente a pagar la retribución que resulte del total de las unidades
pactadas.”

Imposibilidad de ejecución de la prestación sin culpa. Art. 1267: “Si la ejecución de una obra o su
continuación se hace imposible por causa no imputable a ninguna de las partes, el contrato se
extingue. El contratista tiene derecho a obtener una compensación equitativa por la tarea
efectuada.”

Destrucción o deterioro de la obra por caso fortuito antes de la entrega. Art. 1268: “La destrucción
o el deterioro de una parte importante de la obra por caso fortuito antes de haber sido recibida
autoriza a cualquiera de las partes a dar por extinguido el contrato, con los siguientes efectos:

a) si el contratista provee los materiales y la obra se realiza en inmueble del comitente, el


contratista tiene derecho a su valor y a una compensación equitativa por la tarea
efectuada;
b) si la causa de la destrucción o del deterioro importante es la mala calidad o inadecuación
de los materiales, no se debe la remuneración pactada aunque el contratista haya
advertido oportunamente esa circunstancia al comitente;
c) si el comitente está en mora en la recepción al momento de la destrucción o del deterioro
de parte importante de la obra, debe' la remuneración pactada.”

Derecho a verificar. Art. 1269: “En todo momento, y siempre que no perjudique el desarrollo de los
trabajos, el comitente de una obra tiene derecho a verificar a su costa el estado de avance, la
calidad de los materiales utilizados y los trabajos efectuados.”

Aceptación de la obra. Art. 1270: “La obra se considera aceptada cuando concurren las
circunstancias del artículo 747.”

Vicios o defectos y diferencias en la calidad. Art. 1271: “Las normas sobre vicios o defectos se
aplican a las diferencias en la calidad de la obra.”

Plazos de garantía. Art. 1272: “Si se conviene o es de uso un plazo de garantía para que el
comitente verifique la obra o compruebe su funcionamiento, la recepción se considera provisional y
no hace presumir la aceptación. Si se trata de vicios que no afectan la solidez ni hacen la obra
impropia para su destino, no se pactó un plazo de garantía ni es de uso otorgarlo, aceptada la
obra, el contratista:

a) queda libre de responsabilidad por los vicios aparentes;


b) responde de los vicios o defectos no ostensibles al momento de la recepción, con la
extensión y en los plazos previstos para la garantía por vicios ocultos prevista en los
artículos 1054 y concordantes.”
Obra en ruina o impropia para su destino. Art. 1273: “El constructor de una obra realizada en
inmueble destinada por su naturaleza a tener larga duración responde al comitente y al adquirente
de la obra por los daños que comprometen su solidez y por los que la hacen impropia para su
destino. El constructor sólo se libera si prueba la incidencia de una causa ajena. No es causa ajena
el vicio del suelo, aunque el terreno pertenezca al comitente o a un tercero, ni el vicio de los
materiales, aunque no sean provistos por el contratista.”

Extensión de la responsabilidad por obra en ruina o impropia para su destino. Art. 1274: “La
responsabilidad prevista en el artículo 1273 se extiende concurrentemente:

a) a toda persona que vende una obra que ella ha construido o ha hecho construir si hace de
esa actividad su profesión habitual;
b) a toda persona que, aunque actuando en calidad de mandatario del dueño de la obra,
cumple una misión semejante a la de un contratista;
c) según la causa del daño, al subcontratista, al proyectista, al director de la obra y a
cualquier otro profesional ligado al comitente por un contrato de obra de construcción
referido a la obra dañada o a cualquiera de sus partes.”

Plazo de caducidad. Art. 1275: “Para que sea aplicable la responsabilidad prevista en los artículos
1273 y 1274, el daño debe producirse dentro de los diez años de aceptada la obra.”

Nulidad de la cláusula de exclusión o limitación de la responsabilidad. Art. 1276: “Toda cláusula


que dispensa o limita la responsabilidad prevista para los daños que comprometen la solidez de
una obra realizada en inmueble destinada a larga duración o que la hacen impropia para su
destino, se tiene por no escrita.”

Responsabilidades complementarias. Art. 1277: “El constructor, los subcontratistas y los


profesionales que intervienen en una construcción están obligados a observar las normas
administrativas y son responsables, incluso frente a terceros, de cualquier daño producido por el
incumplimiento de tales disposiciones.”

Para los servicios:

Normas aplicables. Art. 1278: “Resultan aplicables a los servicios las normas de la Sección 1° de
este Capítulo y las correspondientes a las obligaciones de hacer.”

Servicios continuados. Art. 1279: “El contrato de servicios continuados puede pactarse por tiempo
determinado. Si nada se ha estipulado, se entiende que lo ha sido por tiempo indeterminado.
Cualquiera de las partes puede poner fin al contrato de duración indeterminada; para ello debe dar
preaviso con razonable anticipación.”

f. diferencia entre contratos de obras, de servicios y de trabajo.

3. a.contrato de fideicomiso. Definición y contenido


Definición. Art. 1666: “Hay contrato de fideicomiso cuando una parte, llamada fiduciante,
transmite o se compromete a transmitir la propiedad de bienes a otra persona denominada
fiduciario, quien se obliga a ejercerla en beneficio de otra llamada beneficiario, que se designa en
el contrato, y a transmitirla al cumplimiento de un plazo o condición al fideicomisario.”

Contenido. Art. 1667: “El contrato debe contener:

a) la individualización de los bienes objeto del contrato. En caso de no resultar posible tal
individualización a la fecha de la celebración del fideicomiso, debe constar la descripción
de los requisitos y características que deben reunir los bienes;
b) la determinación del modo en que otros bienes pueden ser incorporados al fideicomiso,
en su caso;
c) el plazo o condición a que se sujeta la propiedad fiduciaria;
d) la identificación del beneficiario, o la manera de determinarlo conforme con el artículo
1671;
e) el destino de los bienes a la finalización del fideicomiso, con indicación del fideicomisario
a quien deben trasmitirse ola manera de determinarlo conforme con el artículo 1672;
f) los derechos y obligaciones del fiduciario y el modo de sustituirlo, si cesa.”

b. plazos

Plazo. Condición. Art. 1668: “El fideicomiso no puede durar más de treinta años desde la
celebración del contrato, excepto que el beneficiario sea una persona incapaz o con capacidad
restringida, caso en el que puede durar hasta el cese de la incapacidad o de la restricción a su
capacidad, o su muerte.

Si se pacta un plazo superior, se reduce al tiempo máximo previsto.

Cumplida la condición o pasados treinta años desde el contrato sin haberse cumplido, cesa el
fideicomiso y los bienes deben trasmitirse por el fiduciario a quien se designada en el contrato. A
falta de estipulación deben trasmitirse al fiduciante o a sus herederos.”

c. forma

Forma. Art. 1669: “El contrato, que debe inscribirse en el Registro Público que corresponda, puede
celebrarse por instrumento público o privado, excepto cuando se refiere a bienes cuya trasmisión
debe ser celebrada por instrumento público. En este caso, cuando no se cumple dicha formalidad,
el contrato vale como promesa de otorgarlo. Si la incorporación de esta clase de bienes es posterior
a la celebración del contrato, es suficiente con el cumplimiento, en esa oportunidad, de las
formalidades necesarias para su transferencia, debiéndose transcribir en el acto respectivo el
contrato de fideicomiso.”

d. objeto
Objeto. Art. 1670: “Pueden ser objeto del fideicomiso todos los bienes que se encuentran en el
comercio, incluso universalidades, pero no pueden serio las herencias futuras.”

e. partes

Beneficiario. Art. 1671: “El beneficiario puede ser una persona humana o jurídica, que puede existir
o no al tiempo del otorgamiento del contrato; en este último caso deben constar los datos que
permitan su individualización futura.

Pueden ser beneficiarios el fiduciante, el fiduciario o el fideicomisario. Pueden designarse varios


beneficiarios quienes, excepto disposición en contrario, se benefician por igual; para el caso de no
aceptación o renuncia de uno o más designados, o cuando uno u otros no llegan a existir, se puede
establecer el derecho de acrecer de los demás o, en su caso. designar beneficiarios sustitutos.

Si ningún beneficiario acepta, todos renuncian o no llegan a existir, se entiende que el beneficiario
es el fideicomisario. Si también el fideicomisario renuncia o no acepta, o si no llega a existir, el
beneficiario debe ser el fiduciante.

El derecho del beneficiario, aunque no haya aceptado, puede transmitirse por actos entre vivos o
por causa de muerte, excepto disposición en contrario del fiduciante. Si la muerte extingue el
derecho del beneficiario designado, se aplican las reglas de los párrafos precedentes.”

Fideicomisario. Art. 1672: “El fideicomisario es la persona a quien se transmite la propiedad al


concluir el fideicomiso. Puede ser el fiduciante, el beneficiario, o una persona distinta de ellos. No
puede ser fideicomisario el fiduciario.

Se aplican al fideicomisario los párrafos primero, segundo y tercero del artículo 1671.

Si ningún fideicomisario acepta, todos renuncian o no llegan a existir, el fideicomisario es el


fiduciante.”

Fiduciario. Art. 1673: “El fiduciario puede ser cualquier persona humana o jurídica. Sólo pueden
ofrecerse al público para actuar como fiduciarios las entidades financieras autorizadas a funcionar
como tales, sujetas a las disposiciones de la ley respectiva y las personas jurídicas que autoriza el
organismo de contralor de los mercados de valores, que debe establecer los requisitos que deben
cumplir.

El fiduciario puede ser beneficiario. En tal caso, debe evitar cualquier conflicto de intereses y obrar
privilegiando los de los restantes sujetos intervinientes en el contrato.”

Pauta de actuación. Solidaridad. Art. 1674: “El fiduciario debe cumplir las obligaciones impuestas
por la ley y por el contrato con la prudencia y diligencia del buen hombre de negocios que actúa
sobre la base de la confianza depositada en él.
En caso de designarse a más de un fiduciario para que actúen simultáneamente, sea en forma
conjunta o indistinta, su responsabilidad es solidaria por el cumplimiento de las obligaciones
resultantes del fideicomiso.”

f. rendición de cuentas

Rendición de cuentas. Art. 1675: “La rendición de cuentas puede ser solicitada por el beneficiario,
por el fiduciante o por el fideicomisario, en su caso, conforme a la ley y a las previsiones
contractuales; deben ser rendidas con una periodicidad no mayor a un año.”

Dispensas prohibidas. Art. 1676: “El contrato no puede dispensar al fiduciario de la obligación de
rendir cuentas, ni de la culpa o dolo en que puedan incurrir él o sus dependientes, ni de la
prohibición de adquirir para sí los bienes fideicomisitos.”

Reembolso de gastos. Retribución. Art. 1677: “Excepto estipulación en contrario, el fiduciario tiene
derecho al reembolso de los gastos y a una retribución, ambos a cargo de quien o quienes se
estipula en el contrato. Si la retribución no se fija en el contrato, la debe fijar el juez teniendo en
consideración la índole de la encomienda, la importancia de los deberes a cumplir, la eficacia de la
gestión cumplida y las demás circunstancias en que actúa el fiduciario. “

Cese del fiduciario. Art. 1678: “El fiduciario cesa por:

a) remoción judicial por incumplimiento de sus obligaciones o por hallarse imposibilitado


material o jurídicamente para el desempeño de su función, a instancia del fiduciante; o a
pedido del beneficiario o del fideicomisario, con citación del fiduciante;
b) incapacidad, inhabilitación y capacidad restringida judicialmente declaradas, y muerte, si
es una persona humana;
c) disolución, si es una persona jurídica; esta causal no se aplica en casos de fusión o
absorción, sin perjuicio de la aplicación del inciso a), en su caso;
d) quiebra o liquidación;
e) renuncia, si en el contrato se la autoriza expresamente, o en caso de causa grave o
imposibilidad material o jurídica de desempeño de la función; la renuncia tiene efecto
después de la transferencia del patrimonio objeto del fideicomiso al fiduciario sustituto.”

Sustitución del fiduciario. Art. 1679: Producida una causa de cese del fiduciario, lo reemplaza el
sustituto indicado en el contrato o el designado de acuerdo al procedimiento previsto por él. Si no
lo hay o no acepta, el juez debe designar como fiduciario a una de las entidades autorizadas de
acuerdo a lo previsto en el artículo 1690.

En caso de muerte del fiduciario, los interesados pueden prescindir de la intervención judicial,
otorgando los actos necesarios para la transferencia de bienes.

En los restantes casos de los incisos b), c) y d) del artículo 1678, cualquier interesado puede
solicitar al juez la comprobación del acaecimiento de la causal y la indicación del sustituto o el
procedimiento para su designación, conforme con el contrato o la ley, por el procedimiento más
breve previsto por la ley procesal local. En todos los supuestos del artículo 1678 el juez puede, a
pedido del fiduciante, del beneficiario, del fideicomisario o de un acreedor del patrimonio
separado, designar un fiduciario judicial provisorio o dictar medidas de protección del patrimonio,
si hay peligro en la demora.

Si la designación del nuevo fiduciario se realiza con intervención judicial, debe ser oído el
fiduciante.

Los bienes fideicomitidos deben ser transmitidos al nuevo fiduciario. Si son registrables es forma
suficiente del título el instrumento judicial, notarial o privado autenticado, en los que conste la
designación del nuevo fiduciario. La toma de razón también puede ser rogada por el nuevo
fiduciario.

g. extinción

Causales. Art. 1697: “El fideicomiso se extingue por:

a) el cumplimiento del plazo o la condición a que se ha sometido, o el vencimiento del plazo


máximo legal;
b) la revocación del fiduciante, si se ha reservado expresamente esa facultad; la revocación
no tiene efecto retroactivo; la revocación es ineficaz en los fideicomisos financieros
después de haberse iniciado la oferta pública de los certificados de participación o de los
títulos de deuda;
c) cualquier otra causal prevista en el contrato.”

Efectos. Art. 1698: “Producida la extinción del fideicomiso, el fiduciario está obligado a entregar los
bienes fideicomitidos al fideicomisario o a sus sucesores, a otorgar los instrumentos y a contribuir a
las inscripciones registrales que correspondan.”

BOLILLA VIII: CONTRATOS DE COLABORACION


1. a. mandato. Concepto

Art. 1319: “hay contrato de mandato cuando una parte se obliga a realizar uno o mas actos
jurídicos en interés de otra.

El mandato puede ser conferido y aceptado expresa o tácitamente. Si una persona sabe que
alguien esta haciendo algo en si interés, y lo impide, pudiendo hacerlo, se entiende que ha
conferido tácitamente mandato. La ejecución de mandato implica su aceptación aun sin mediar
declaración expresa sobre ella.”
La definición legal de mandato se sustenta en su esencia, que es la actuación de una persona en
interés de otra. Esta actuación puede hacerse de dos formas:

 Mandato con representación: La más frecuente, es un nombre del mandante,


representándolo, de modo que al gestionar un acto por el mandante el tercero sabe que
se vincula con este último y no con el mandatario.
 Mandato sin representación: es aquella en la cual el mandatario si bien actúa en interés
del demandante, frente al tercero lo hace en nombre propio, como si el negocio le
perteneciera a el; el tercero desconoce la existencia del referido mandato, al menos en lo
que al acto celebrado se refiere.

Todos los actos jurídicos pueden celebrarse por medio de un mandatario, con excepción de
aquellos para los cuales la ley exige que sean otorgados en forma personal por el interesado.

El mandato es un contrato cuya finalidad es la colaboración, dado que se lo celebra para que por
su intermedio se realicen otros actos jurídicos, colaborando así con las actividades del mandante.
Se caracteriza por ser bilateral, normalmente no es formal y, por regla, es oneroso. También se ha
dicho que es preparatorio ya que hace posible la conclusión de los actos jurídicos que se encargan
por su intermedio.

El mandato puede ser:

 Con representación: aquellos casos en que el mandatario lo hace en nombre del


mandante. La actuación del mandatario es en nombre y por cuenta del mandante. El nexo
causal es entre el mandante y el tercero
 Mandato sin representación: obra en nombre propio aunque en interés del demandante.
El nexo obligacional en el segundo es entre el tercero y el mandatario.

b. teoría de la representación

c. representación legal y voluntaria

La representación, conforme lo dispuesto en el art. 358, puede ser voluntaria, legal u orgánica.

Del análisis del artículo, vemos que existen diversas formas de representación:

1. La voluntaria, que tiene lugar por voluntad de una persona que instituye a otra como
representante, para uno o más actos y a tal efecto le confiere un poder para actuar en su
nombre
2. La legal, que comprende la de los padres respecto de sus hijos menores, cuando ejercen la
responsabilidad parental; la de tutores y curadores y la de algunos funcionarios públicos,
como ocurre con los asesores o defensores de menores y de ausentes
3. La orgánica, de aplicación a los supuestos de las personas jurídicas las cuales actúan por
medio de sus órganos

Caracteres: Art. 362: “la representación voluntaria comprende solo los actos que el representado
puede otorgar por si mismo. Los límites de la representación, su extinción, y las instrucciones que el
representado dio a su representante, son oponibles a terceros si estos han tomado conocimiento
de tales circunstancias, o debieron conocerlas obrando con cuidado y previsión.”

Para la validez de lo actuado por el representante, en nombre del representado, en los supuestos
de representación voluntaria (supuesto imposible de sostenerse e la representación legal que
viene a subsanar justamente la imposibilidad del representado de actuar por si), es exigible que
este ultimo tenga la capacidad de realizarlos por si mismo. No puede por representante hacer mas
de lo que puede por si mismo,

d. representación y mandato

La representación voluntaria puede conferirse mediante un contrato de mandato, pero no todo


mandato confiere representación. Esta hace al modo en que se ejercer el mandato y a los efectos
que produce.

Los actos jurídicos entre vivos se pueden realizar a través de representantes, art 358, lo que trae
consecuencia de que los actos celebrados por el representante en nombre del representado y en
los límites de las facultades conferidas por la ley o por el acto de apoderamiento, producen efecto
directamente para el representado.

El código no brinda una definición de representación, pero podemos afirmar que es la actuación
de una persona en interés de otra, a la cual sustituye en uno o mas actos jurídicos y se la admite o
es impuesta, por razones de interés general.

En principio todos los actos jurídicos pueden realizarse por medio de un representante; por
excepción la ley exige que algunos de ellos sean otorgados en forma personal por el titular del
derecho.

Art. 358: “los actos jurídicos entre vivos pueden ser celebrados por medio de representante,
excepto en los casos en que la ley exige que sean otorgados por el titular del derecho.

La representación es voluntaria cuando resulta de un acto jurídico, es legal cuando resulta de una
regla de derecho, y es orgánica cuando resulta del estatuto de una persona jurídica.

En las relaciones de familia la representación se rige, en subsidio, por las disposiciones de este
capítulo.”
Los actos celebrados por el representante en nombre del representado y en los límites de las
facultades conferidas por la ley o por el acto de apoderamiento, producen efecto directamente
con el representado (Art. 359).

e. onerosidad

Art. 1322: “el mandato se presume oneroso. A falta de acuerdo sobre la retribución, la
remuneración es la que establecen las disposiciones legales o reglamentarias aplicables, o el uso. A
falta de ambos, debe ser determinada por el juez.”

El citado artículo establece el orden que debe obedecerse en la determinación de la retribución,


primero lo pactado, segundo las normas positivas aplicables y por último, a falta de todo, pactada
por vía judicial.

En el caso de que sea desempeño de la abogacía, corresponde atender a lo dispuesto por las leyes
que regulan el ejercicio de la profesión en la respectiva jurisdicción, las que contienen ciertas
normas de orden público y por lo tanto, no disponibles para las partes.

Salvo se haya pactado en contrario, el mandatario puede exigir el pago una vez que haya cumplido
el mandato, con independencia de que el tercero, con el cual contrato, cumpla la prestación
debida.

La retribución al mandatario es debida, sin importar el resultado de su gestión, salvo pacto en


contrario.

f. capacidad:

Art. 1323: “el mandato puede ser conferido a una persona incapaz, pero esta puede oponer la
nulidad del contrato si es demandado por inejecución de las obligaciones o por rendición de
cuentas, excepto la acción de restitución de lo que se ha convertido en provecho suyo.”

Con relación al mandante, si el mandato tiene por objeto actos de administración, basta con que
tenga capacidad para administrar sus bienes; en cambio, si tiene por objeto actos de disposición,
se requiere que el mandante tenga capacidad para disponer.

En caso de que el mandato haya sido otorgado a un incapaz, ello no afecta la validez de los actos
que el mandatario celebre con el tercero. El fundamento radica en que en el mandato la
vinculación tiene lugar entre el mandante y el tercero, por lo cual la capacidad del mandatario no
tiene, en principio, relevancia. Esta situación solo parece factible en casos de poca entidad.

g. obligaciones del mandante y mandatario

Obligaciones de mandatario: Art. 1324:”el mandatario esta obligado a:


a) Cumplir los actos comprendidos en el mandato, conforme a las instrucciones dadas por el
mandante y a la naturaleza del negocio que constituye su objeto, con el cuidado que
pondría en los asuntos propios o, en su caso, el exigido por las reglas de su profesión o por
los usos del lugar de ejecución
b) Dar aviso inmediato al mandante de cualquier circunstancia sobreviniente que
razonablemente aconseje apartarse de las instrucciones recibidas, requiriendo nuevas
instrucciones o ratificación de las anteriores, y adoptar las medidas indispensables y
urgentes
c) Informar sin demora al mandante de todo conflicto de intereses y de toda circunstancia
que pueda motivar la modificación o la revocación del mandato
d) Mantener en reserva toda información que adquiera con motivo del mandato que, por su
naturaleza o circunstancias, no esta destinada a ser divulgada
e) Dar aviso al mandante de todo valor que haya recibido en razón del mandato, y ponerlo a
disposición de aquel
f) Rendir cuenta de su gestión en las oportunidades convenidas o a la extinción del mandato
g) Entregar al mandante las ganancias derivadas del negocio, con los intereses moratorios de
las sumas de dinero que haya utilizado en provecho propio
h) Informar en cualquier momento, a requerimiento del mandante, sobre la ejecución del
mandato
i) Exhibir al mandante toda la documentación relacionada con la gestión encomendada, y
entregarle la que corresponde según las circunstancias

Si el negocio encargado al mandatario fuese de los que, por su oficio o su modo de vivir, acepta el
regularmente, aun cuando se excuse del encargo, debe tomar las providencias conservatorias
urgentes que requiera el negocio que se le encomienda.”

Como pauta general de actuación, el mandatario debe observar una conducta que preserve los
derechos del mandante, con especial cuidado para no generarle ningún daño. Tiene el deber de
actuar de la mejor forma posible, para que los actos que realice en ejercicio del mandato sean del
mayor provecho para su mandante.

El desempeño del mandatario presenta dos aspectos, que constituyen una regla de oro: hacer
todo lo conducente al buen resultado del mandato y abstenerse de todo aquello que pudiera
perjudicarlo. Por lo que el mandatario deberá cumplir las obligaciones a su cargo en los términos
en que se haya obligado con el mandante, respetara los principios generales del código y los que
impongan su contratación (siempre debe obrar de buena fe).

Para el buen desempeño, debe cumplir las instrucciones que hubiera recibido del mandante. Este
desempeño implica tener en cuenta dos parámetros: uno subjetivo (el actuar como lo haría con
los negocios propios) y otro objetivo (deber de observar las reglas de su profesión o bien los usos
del lugar de ejecución).

Si los representantes lo hacen de forma profesional, lo normal es que sean ellos quienes a su vez
aconsejen a su mandante sobre cómo proceder.
Hay casos donde se dan instrucciones propias del mandato con motivo de otra contratación, que
es un contrato marco, en el que constan las instrucciones del mandatario.

La aplicación de las normas de defensa del consumir implican que cuando el mandato es otorgado
por adhesión a clausulas generales predispuestas por el mandatario y mas allá de lo indicado en el
respectivo formulario, no tendrán validez las que sean liberatorias de su responsabilidad, y la
interpretación siempre lo será en la forma más favorable al consumidor.

Obligación del mandante:

Art. 1328: “el mandante está obligado a:

a) Suministrar al mandatario los medios necesarios para la ejecución del mandato y


compensarle, en cualquier momento que le sea requerido, todo gasto razonable en que
haya incurrido para ese fin
b) Indemnizar al mandatario los daños que sufra como consecuencia de la ejecución del
mandato, no imputables al propio mandatario
c) Liberar al mandatario de las obligaciones asumidas por terceros, proveyéndole de los
medios necesarios para ello
d) Abonar al mandatario la retribución convenida. Si el mandato se extingue sin culpa del
mandatario, debe la parte de la retribución proporcionada al servicio cumplido; pero si el
mandatario ha recibido un adelanto mayor de lo que le corresponde, el mandante no
puede exigir su restitución.”

El mandante tiene la obligación de actuar de modo tal que el mandatario no vea obstaculizado su
desempeño, pues así lo impone el deber de buena fe. Se genera un deber de colaboración hacia su
contraparte, poniendo a su disposición lo que se demande a tal fin. Debe proveer lo adecuado al
mandatario para que pueda afrontar los gastos necesarios, a los fines de cumplir con su cometido.
Si se tratasen de gastos módicos, y el mandatario estuviera en condiciones de hacerlo, su omisión
constituiría una culpa grave, al igual que si omitiera solicitarlos en tiempo oportuno para que el
mandante pueda proveérselos.

Debe retribuir al mandatario

Deberá indemnizar al mandatario en aquellos casos en que el ejercicio del mandato le haya
causado un daño, en tanto la causa del perjuicio no le sea imputable.

h. conflicto de intereses.

Art. 1325: “si media conflicto de intereses entre el mandante y el mandatario, este debe posponer
los suyos en la ejecución de mandato, o renunciar.

La obtención, en el desempeño del cargo, de un beneficio no autorizado por el mandante, hace


perder al mandatario su derecho de retribución.”
La conducta que debe observar el mandatario, regida por la buena fe, impide, en principio, que el
mandatario subsista cuando los intereses de las partes sean incompatibles. Por ello debe informar
sin demora al mandante de todo conflicto de intereses y de toda otra circunstancia que pueda
motivar la modificación o la revocación del mandato.

i. conjunto. Sustitución. Extinción.

Mandato a varias personas:

Art. 1326: “si el mandato se confiere a varias personas sin estipular expresamente la forma o el
orden de su actuación, se entiende que pueden desempeñarse conjunta o separadamente.”

El mandatario puede ser simple o plural. En la última hipótesis, usualmente se establece en el


contrato la forma y el orden de actuación. La norma brinda una solución en subsidio de lo pactado
por las partes. Para esta situación de silencio contractual, el artículo opta por brindar ambas
posibilidad: actuación conjunta o separada de los mandatarios.

Pluralidad de mandatos:

Cuando se da el caso de dos o más personas que confieren mandato a un mismo mandatario, para
un objeto de interés común, se plantea la cuestión relativa a si las obligaciones de los mandantes
respecto de este ultimo son o no solidarias, pues la actuación de este no es en beneficio individual
de cada uno de ellas sino de todos en conjunto.

El código no contempla el supuesto en que sobrevenga incompatibilidad de intereses entre


diversos mandatos respecto de un mismo mandatario, mas allá de que el contrato de mandato
haya tenido lugar en un solo acto o diversos. Se trata del caso de un conflicto de intereses entre
los diversos mandantes, no del mandatario con esos. El mandatario tiene la obligación de hacer
saber a sus mandantes de la circunstancia que se ha presentado y del conflicto de intereses
suscitado para que ellos adopten el criterio que crean mejor para sus derechos.

Sustitución del mandato

Art: 1327: “el mandatario puede sustituir en otra persona la ejecución del mandato y es
responsable de la elección de sustituto, excepto cuando lo haga por indicación del mandante. E
caso de sustitución, el mandante tiene la acción directa contra el sustituto prevista en los artículos
736 y concordantes, pero no esta obligado a pagarle retribución si la sustitución no era necesaria.
El mandatario responde directamente por la actuación del sustituto cuando no fue autorizado a
sustituir, o cuando la sustitución era innecesaria para la ejecución del mandato.”

El mandato recibido puede ser objeto de sustitución, mediante la cesión que el mandatario haga
de sus facultades a un tercero, lo cual puede hacerse de modo total o parcial. El mandante puede
omitir toda mención sobre este aspecto o bien autorizarla de forma expresa a favor de persona
determinada o a determinar por el mandatario. También puede prohibirla.

El principio general es la posibilidad de sustituir salvo disposición contractual en contrario.


En cualquier caso de sustitución, el mandante tiene acción directa contra el sustituto, pero no está
obligado a pagarle retribución si la sustitución no era necesaria.

Cuando el mandatario sustituye el mandato a favor de la persona indicada por el mandante, no


incurre en ninguna responsabilidad por mal desempeño del sustituto, a este caso se lo denomina
cesión o sustitución del mandato.

Si el mandante prohíbe la sustitución, la actuación del sustituto no determina responsabilidad sino


la invalidez del acto celebrado por este último, en términos idénticos a los previstos para el caso
de actuación sin representación o en exceso de ella y hace responsable al falso mandatario por los
daños que hubiera producido a un tercero.

Extinción del mandato:

Art. 1329: “el mandato se extingue:

a) Por el transcurso del plazo por el que fue otorgado, o por el cumplimiento de la condición
resolutoria pactada: cuando se ha establecido la vigencia temporal del contrato, operado
su vencimiento se produce de pleno derecho la extinción del vinculo contractual. A partir
de este momento, los actos que realice el mandatario no tendrán efecto sobre el
mandante, salvo ratificación.
También puede ocurrir que el mandato se haya condicionado a la producción de un hecho
futuro e incierto que, de producirse, opere su resolución.
b) Por la ejecución del negocio para el cual fue dado: si se ha conferido mandato para un acto
o para ciertos actos, una vez que estos han sido llevados a cabo, se agota su objeto, y
como consecuencia, la extinción de la relación contractual.
c) Por la revocación del mandante: es la decisión unilateral del mandante de dar por
concluido el mandato. Es un derecho potestativo, que se configura por medio de una
expresión unilateral de voluntad, modal y recipticia.
d) Por la renuncia del mandatario: el mandatario puede dar por concluido su mandato en
todo tiempo, sin que para ello se le exija fundamentarla en una justa causa. Es una
declaración unilateral de carácter recipticio, que no debe ser fuera de tiempo o en el
momento inadecuado. En caso contrario el mandatario responderá por los daños y
perjuicios ocasionados al mandante.
La comunicación de la renuncia debe darse con la antelación razonable para permitirle al
mandante que retome los asuntos. Se funda en la buena fe. Puede eximirse de este deber
si mediare justa causa.
e) Por la muerte o incapacidad del mandante o del mandatario.”: mandante: a los efectos de
conclusión del mandato, el código equipara los efectos de la muerte y la incapacidad. Para
que tal equiparación sea posible, debe mediar declaración judicial de incapacidad. Pese a
la conclusión del contrato por muerte o declaración de incapacidad del mandante, el
mandatario debe continuar con la gestión de los negocios a su cargo, aunque limitado a os
actos que admitan demora, y ello solo hasta que los herederos tomen su cargo.
Mandatario: las obligaciones que este ha asumido no pueden ser cumplidas por sus
herederos por cuando el mandato se confiere en virtud de sus condiciones personales y/o
por razones de confianza. Los herederos están obligados a notificar de inmediato al
mandante, para que este pueda actuar en consecuencia.
f) Declaración de muerte presunta del mandante o mandatario; declaración de ausencia del
mandatario: el art. 380 inc. E) y F) dispone que el poder se extingue por declaración de
muerte presunta de las partes o por la ausencia del representante.
g) Quiebra del mandante o del mandatario: en el mandato con representación, la extinción
viene impuesta también por la vía del art. 380 inc G), por cuanto al cesar esta última, por
lógica consecuencia se extingue el respectivo mandato representativo.
Respecto del mandato sin representación, se aplica el art. 380 inc H).

Cualquiera sea la causa por la cual se extinga el mandato, no se verán afectados los actos
realizados por el mandatario, dentro de los límites de su apoderamiento. A su vez, producida la
extinción, no será posible celebrar ningún acto que obligue al mandate, en la medida que se
pruebe que el tercero conocía o debía conocer aquella cesación.

j. mandato irrevocable

Art. 1330: “el mandato puede convenirse expresamente como irrevocable en los casos de los inc. B)
y C) del art. 380.

El mandato destinado a ejecutarse después de la muerte del mandante es nulo si no puede valer
como disposición de última voluntad.”

k. rendición de cuentas

Art. 1334: “la redición de cuentas por el mandatario debe ser en las condiciones previstas en el art.
858 y siguientes acompañada de toda la documentación relativa a su gestión. Excepto estipulación
en contrario, las cuentas deben rendirse en el domicilio del mandatario y los gastos que generan
son a cargo del mandante.”

El mandatario debe rendir cuentas al mandante por el desempeño y el resultado de su mandato; la


rendición tendrá lugar en las oportunidades convenidas o al final del mandato. Mas allá de la
previsión legal, no se puede pasar por alto que el mandante es el titular del negocio, por lo cual
nada obsta a que pueda exigir en cualquier momento una rendición parcial de las cuentas hasta tal
requerimiento, sin que por ello se vea afectada la vigencia del mandato. Puede suceder cuando el
mandato se refiera a un negocio de ejecución continuada.

La rendición debe realizarse conforme a lo dispuesto en el art. 859, por lo cual ha de cumplir con
los sgtes requisitos:

1. Ser hecha de modo descriptivo y documentado


2. Incluir las referencias y explicaciones razonablemente necesarias para su comprensión
3. Acompañar los comprobantes de los ingresos y de los egresos, excepto que sea de uso no
extenderlos
4. Concordar con los libros que lleve quien las rinda

La rendición de cuentas puede hacerse en forma privada

2. a. gestión de negocios. Concepto

Art. 1781: “hay gestión de negocios cuando una persona asume oficiosamente la gestión de un
negocio ajeno por un motivo razonable, sin intención de hacer una liberalidad y sin estar
autorizada ni obligada, convencional o legamente.”

Este artículo corresponde a la solución de una doble preocupación: necesidad de evitar una
intromisión molesta o dañosa en los negocios ajenos y necesidad de no perjudicar a quien ha
realizado una gestión útil para otra persona

La gestión de negocios es una actuación unilateral del gestor, que la asume por iniciativa propia,
este se encuentra en cierta inferioridad de derechos respecto a un mandatario, pero le confiere
más derechos que los que surgirían del simple enriquecimiento sin causa.

La diferencia de gestión de negocio y mandato, es que en el primer caso el dueño de la cosa no ha


dado ninguna orden para ello, y en el segundo si. Ambos actúan en beneficio de un interés ajeno.

Requisitos:

a) Inexistencia del mandato, representación legal u obligación contractual


b) Actuación espontanea u oficiosa del gestor
c) Actuación en negocio ajeno por un motivo razonable
d) Inexistencia de voluntad de hacer una liberalidad
e) Que se trate de un acto o una serie de actos, jurídicos o simplemente materiales
f) Que no medie oposición del dueño del negocio. En caso de que haya oposición, y el gestor
igual realizara el negocio, este solo tendrá contra el dueño la acción de enriquecimiento
sin causa.
g) Que la gestión resulte útil. La utilidad debe ser juzgada al inicio de la gestión, aunque el
beneficio no subsista al momento de concluirla
h) Que se trate de un asunto licito
i) Que no se trate de un acto personalísimo, ya que nadie podría sustituir legítimamente al
interesado

b. obligaciones y derechos de las partes

Obligaciones del gestor:

Art. 1782: “el gestor está obligado a:


a) Avisar sin demora al dueño del negocio que asumió la gestión, y aguardar su respuesta
siempre que esperarla no resulte perjudicial: la finalidad de esta obligación es permitir que
el gestionado tome conocimiento de lo actuado por el gestor y resuelve que quiere hacer
al respecto. El gestor debe esperar las instrucciones que aquel le imparta, a menos que la
espera trajese un perjuicio a los intereses del dueño del negocio.
b) Actuar conforme a la conveniencia y a la intención, real o presunta, del dueño del negocio:
el gestor debe actuar como lo haría el gestionado y según el interés de este en el caso. No
se trata de una valoración en abstracto, sino real o presunto; esto último por cuanto el
gestor puede, o bien, no conocer inicialmente el gestionado, o bien, no conocer su
pensamiento respecto al negocio en cuestión.
c) Continuar la gestión hasta que el dueño del negocio tenga posibilidad de asumirla por si
mismo o, en su caso, hasta concluirla
d) Proporcionar al dueño del negocio información adecuada respecto de la gestión: es lógico
porque es a aquel a quien interesa principalmente la gesstion por ser el titular del interés
en juego. La información debe ser completa a efectos de que el dueño disponga de los
datos necesarios para adoptar las decisiones que mejor estime
e) Una vez concluida la gestión, rendir cuentas al dueño del negocio.”: el gestor debe rendir
cuentas al dueño a la finalización de la gestión, por su desempeño y resulta de la gestión.
La cuenta consiste en una descripción de los antecedentes, hecho y resultados pecuniarios
de un negocio aunque se trate de un acto singular. El rendimiento de cuentas consiste en
ponerlas en conocimiento de la persona interesada (gestionado).

Obligaciones del dueño del negocio:

En principio, el dueño del negocio, en tanto ratifique la gestión o asuma las obligaciones del
gestor, queda sometido a las propias de un mandante.

El gestionado se encuentra obligado a:

a) A reembolsar al gestor el valor de los gastos necesarios y útiles, con los intereses legales
desde el día en que fueron hechos
b) A liberar al gestor de las obligaciones personales que haya contraído a causa de la gestión
c) A reparar el gestor los daños que, por causas ajenas a su responsabilidad, haya sufrido en
el ejercicio de la gestión
d) A remunerarlo, si la gestión corresponde al ejercicio de su actividad profesional, o si es
equitativo en las circunstancias del caso.

El gestor, en principio, no tiene derecho a retribución salvo que sea profesional y haya actuado
como tal al realizar la gestión, o que resulte equitativo en las circunstancias del caso.

c. responsabilidad:

Responsabilidad del gestor:


La responsabilidad del gestor debe considerarse con relación a la culpa, al caso fortuito, a la
delegación de la gestión y al supuesto de pluralidad de gestores:

Responsabilidad por culpa:

El gestor responde por su culpa en el ejercicio de la gestión. Para su evaluación debe tenerse en
cuenta la diligencia que haya puesto en lo actuado, la que debe ser apreciada tomando como
referencia concreta su actuación en los asuntos propios. Para ello han de tenerse como pautas,
entre otras, si se trata de una gestión urgente, si procura librar al dueño del negocio de un
perjuicio, y si actúa por motivos de amistad o de afección. Pueden haber otras causas aparte de las
enumeradas.

El gestor será culpable cuando no haya obrado diligentemente, lo cual será juzgado considerando
su actuación en los asuntos propios.

Caso fortuito:

Art. 1787: “el gestor es responsable ante el dueño del negocio, aun por el daño que resulte de caso
fortuito, excepto en cuanto la gestión le haya sido útil a aquel:

a) Si actúa contra su voluntad expresa: es evidente que el dueño del negocio no desea que
aquella se llevase adelante. Tampoco tendrá en tal caso derecho a remuneración o
reintegro de gastos.
b) Si emprende actividades arriesgadas, ajenas a las habituales del dueño del negocio: es
lógico pues en función del modo de actuar del gestionado nunca hubiera encarado ese
negocio y por tanto jamás le hubiera resultado el daño derivado de la gestión.
c) Si pospone el interés del dueño del negocio frente al suyo: se trata de un supuesto que no
responde al instituto de la gestión de negocios ajenos, pues es propio de esta que se actue
a favor de los intereses del dueño y no de los propios del gestor
d) Si no tiene las aptitudes necesarias para el negocio, o su intervención impide la de otra
persona idónea.”: en el caso la culpa radica en la imprudencia de llevar a cargo actos para
los cuales el gestor no resultaba ser la persona indicada, sea por desconocimiento del
tema, sea porque había otra persona que resultaba mas competente.

d. empleo útil. Concepto. Obligaciones.

Art. 1791: “quien, sin ser gestor de negocios ni mandatario, realiza un gasto, en interés total o
parcialmente ajeno, tiene derecho a que le sea reembolsado su valor, en cuanto haya resultado de
utilidad, aunque después esta llegue a cesar.

El reembolso incluye los intereses, desde la fecha en que el gasto se efectúa.”

Existe cuando alguien sin ser mandatario ni gestor de negocios, hiciese gastos en utilidad de otra
persona. Se refiere solamente a gastos de dinero.
No interesa la intención con que se haya realizado el gasto, aunque se lo hiciera creyente que se
trata de un negocio u obligación propia.

La acción de empleo útil puede intentarse aun cuando la utilidad llegase a cesar. Salvo que la
cesación de la utilidad ocurriere por culpa del propio autor del gasto.

Los gastos funerarios: art. 1792: “están comprendidos en el art. 1791 los gastos funerarios que
tienen relación razonable con las circunstancias de la persona y los usos del lugar.”

Hay que tener en consideración la fortuna del causante, su posición social, su actuación publica. Si
se trata de un menor de edad, habrá que tener en cuenta la fortuna y posición social de su familia.

Quien ha realizado los gastos funerarios, debe dirigir se acción de reintegro contra los herederos
del difunto.

Obligados al reembolso. Art 1793: “el acreedor tiene derecho a demandar el reembolso:

a) A quien recibe la utilidad


b) A los herederos del difunto, en el caso de los gastos funerarios
c) Al tercero adquiriente a titulo gratuito del bien que recibe la utilidad, pero solo hasta el
valor de ella al tiempo de la adquisición.”

3. a. contratos de concesión. Concepto

Art. 1502: “hay contrato de concesión cuando el concesionario, que actúa en nombre y por cuenta
propia frente a terceros, se obliga mediante una retribución a disponer de su organización
empresarial para comercializar mercaderías provistas por el concedente, prestar los servicios y
proveer los repuestos y accesorios según haya sido convenido.”

Esta norma también abarca los contratos por los que se conceda la venta o comercialización de
software o de procedimientos similares, pues así lo dispone el art. 1511, inc. A).

De este artículo desprendemos las notas esenciales del contrato de concesión:

1. Actuación del concesionario, frente a terceros en nombre y propia cuenta


2. La puesta a disposición de su organización empresarial
3. La provisión de productos por el concedente
4. La prestación de los servicios adecuados a los productos
5. La venta al público de los repuestos y accesorios de las mercaderías incluidas en el objeto
principal

Hay 2 aspectos importantes que debieron de incluirse también:

1. La comercialización se hará bajo la marca del concedente, pues no solo la práctica así lo ha
determinado, sino que, además, todo operador que recurre a este contrato, pretende el
derecho a usar la marca a los fines de la promoción y venta del producto.
2. La duración que permite satisfacer en forma adecuada la ecuación inversión-amortización-
beneficio. El art. 1502 no comprende la llamada concesión privada, sino solo la que se
conoce como concesión comercial. En la concesión privada, su objeto se vincula con la
prestación de ciertos servicios.

Caracteres:

a) Bilateral, resultan obligaciones para ambas partes


b) Oneroso, el concedente confiere al concesionario el derecho a vender sus productos
utilizando para ello su marca, dentro de una zona y con un régimen (en principio) de
exclusividad y a cambio, obtiene el derecho de exigir al concesionario que afecte su
estructura empresarial para el desarrollo de la comercialización acordada. Ambos
adquieren ventajas.
c) Conmutativo, las obligaciones de cada una de las partes resultan ciertas y determinables
d) No formal, lo habitual es que sea celebrado por escrito
e) Nominado, la tipicidad legal del contrato de concesión en el derecho argentino aparece
con la sanción de la ley 26994, que aprueba el código civil.
f) Por adhesión, los contratos de concesión son redactados de forma mas o menos uniforme
por el concedente para toda su red de comercialización y en principio, no se admiten
contraofertas sobre sus clausulas sustanciales.
g) Duración: es una característica esencial para que el contrato de concesión cumpla la
finalidad para la cual es celebrado. El plazo debería estimarse observando un tiempo
adecuado para que puedan cumplirse los fines que las partes tuvieron en vista al
celebrarlo, teniendo en cuenta la inversión, su amortización y una renta proporcional. El
código establece como mínimo 4 años
h) Intuitu personae: para el concedente la celebración del contrato significa un acto de cierta
confianza en las aptitudes empresariales del concesionario. El éxito de este depende más
que nada de sus aptitudes para la comercialización de las mercaderías de las que se trate.
i) Colaboración, dado que no hay subordinación jurídica, se concreta una función de
colaboración en la actividad económica del concedente.
j) Agrupamiento, el concedente genera una estructura de agrupación vertical que no implica
una organización común ni subordinación jurídica
k) Asimétrico, porque las responsabilidades que asume el concesionario es mayor a las
asumidas por el concedente, quien se reserva el derecho a modificar algunas que le son
propias

b. obligaciones de las partes

Obligaciones del concedente.

Art. 1504: “son obligaciones del concedente:

a) Proveer al concesionario de una cantidad mínima de mercaderías que le permita atender


adecuadamente las expectativas de venta en su territorio o zona, de acuerdo con las
pautas de pago, de financiación y garantías previstas en el contrato. El contrato puede
prever la determinación de objetivos de ventas, los que deben ser fijados y comunicados al
concesionario de acuerdo con lo convenido
b) Respetar el territorio o zona de influencia asignado en exclusividad al concesionario. Son
validos los pactos que, no obstante la exclusividad, reserva para el concedente cierto tipo
de ventas directas o modalidades de ventas especiales
c) Proveer al concesionario la información técnica y, en su caso, los manuales y la
capacitación de personal necesarios para la explotación de la concesión
d) Proveer durante un periodo razonable, en su caso, repuestos para los productos
comercializados
e) Permitir el uso de marcas, enseñas comerciales y demás elementos distintivos, en la
medida necesaria para la explotación de la concesión y para la publicidad del
concesionario dentro de su territorio o zona de influencia”

Obligaciones del concesionario:

Art. 1505: “son obligaciones del concesionario:

a) Comprar exclusivamente al concedente las mercaderías y, en su caso, los repuestos objeto


de la concesión, y mantener la existencia convenida de ellos o, en defecto de convenio, la
cantidad suficiente para asegurar la continuidad de los negocios y la atención del público
consumidor
b) Respetar los bienes geográficos de actuación y abstenerse de comercializar mercaderías
fuera de ellos, directa o indirectamente por interposita persona
c) Disponer de los locales y demás instalaciones y equipos que resulten necesarios para el
adecuado cumplimiento de su actividad
d) Prestar los servicios de pre entrega y mantenimiento de las mercaderías, en caso de
haberlo así convenido
e) Adoptar el sistema de vetas, de publicidad y de contabilidad que fije el concedente
f) Capacitar a su personal de conformidad con las normas del concedente

Sin perjuicio de lo dispuesto en el inc. A) de este articulo, el concesionario puede vender


mercaderías del mismo ramo que le hayan sido entregadas en parte de pago de las que
comercialice por causa de la concesión, así como financiar unas y otras y vender, exponer o
promocionar otras mercaderías o servicios que se autoricen por el contrato, aunque no sean
accesorios de las mercaderías objeto de la concesión ni estén destinados a ella.”

Obligación implícita: la concesión presenta una obligación implícita entre ambas partes, que es la
de celebrarlo, interpretarlo, ejecutarlo y resolverlo de buena fe.

Clausula de exclusividad: lo habitual es que este prevista en algún aspecto. Puede ser referida a
territorio o zona, a la marca, a la provisión del producto
Provisión: obligación del concedente de proveer al concesionario una cantidad mínima de
mercaderías que le permita atender las expectativas de veta en su territorio, de acuerdo con las
pautas de pago, la financiación y garantías previstas en el contrato.

Información y formación: obligación del concedente de proveer al concesionario la información


técnica y los manuales de productos necesarios para la capacitación de su persona, y toda otra
que requiera para la explotación de la concesión, el mantenimiento y reparación del producto. El
concesionario deberá disponer de todo lo que se requiera para capacitar a su personal conforme
las normas del concedente

Repuestos y prestación de servicios: el concedente tiene la obligación de proveer al concesionario


durante un periodo razonable los repuestos que correspondan a los productos comercializados

Pautas de desenvolvimiento: el concesionario debe observar las normas que establezca el


concedente referidas al sistema de ventas, de publicidad y de contabilidad

c. plazos

Art. 1506: “el plazo del contrato de concesión no puede ser inferior a cuatro años. Pactado un plazo
menor o si el tiempo es indeterminado, se entiende convenido por cuatro años.

Excepcionalmente, si el concedente provee al concesionario el uso de las instalaciones principales


suficientes para su desempeño, puede preverse un plazo menor, no inferior a dos años.

La continuación de la relación después de vencido el plazo determinado por el contrato o por la ley,
sin especificarse antes el nuevo plazo, lo transforma en contrato por tiempo indeterminado.”

En estos contratos deben operarse las variables de inversión, amortización y rentabilidad


proporcional. El plazo es esencial para que se produzcan los efectos queridos por las partes o para
que satisfaga el interés que las hizo contratar.

d. extinción

En el art. 1509 del código, nos dice que la resolución del contrato de concesión se hará en
aplicación de la norma del contrato de agencias, art. 1494.

Art. 1494: el contrato de agencia se resuelve por:

a) Muerte o incapacidad del agente


b) Disolución de la persona jurídica que celebra el contrato, que no deriva de fusión o escisión
c) Quiebra firme de cualquiera de las partes
d) Vencimiento del plazo
e) Incumplimiento grave o reiterado de las obligaciones de una de las partes, de forma de
poner razonablemente en duda la posibilidad o la intención del incumplidor de atender con
exactitud las obligaciones sucesivas
f) Disminución significativa del volumen de negocios del agente.”

4. a. contrato de franquicia. Concepto. Clases

Art. 1512: “hay franquicia comercial cuando una parte, denominada franquiciante, otorga a otra,
llamada franquiciado, el derecho a utilizar un sistema probado, destinado a comercializar
determinados bienes o servicios bajo el nombre comercial, emblema o la marca del franquiciante,
quien provee un conjunto de conocimientos técnicos y la prestación continua de asistencia técnica
o comercial, contra una prestación directa o indirecta del franquiciado.

El franquiciante debe ser titular exclusivo del conjunto de los derechos intelectuales, marcas,
patentes, nombres comerciales, derechos de autor y demás comprendidos en el sistema bajo
franquicia; o, en su caso, tener derecho a la utilización y transmisión al franquiciado en los
términos del contrato.

El franquiciante no puede tener participación accionaria de control directo o indirecto del negocio
del franquiciado.”

La finalidad de la franquicia es multiplicar un negocio exitoso de modo que el franquiciado pueda


vender o prestar un servicio tal como lo ha hecho el franquiciante.

Caracteres:

a) Nominado
b) Bilateral
c) Oneroso
d) Conmutativo, ambos obtienen un beneficio
e) Duración, solo mediante un vinculo estable puede atenderse la relación que exite entre
inversión, amortización y renta proporcional
f) Adhesión, las clausulas son predispuestas por el franquiciante
g) Intuitu personae, importan las condiciones personales de las partes
h) Colaboración, cada una de las partes colabora para el mejor desenvolvimiento del negocio
del otro
i) No afecta la competencia, el contrato no debe ser considerado un pacto que limite,
restrinja o distorsione la competencia.

b. obligaciones de las partes

Obligaciones del franquiciante.

El art 1514 establece las obligaciones del franquiciante.


a) Proporcionar, con antelación a la firma del contrato, información económica y financiera
sobre la evolución de dos años de unidades similares a la ofrecida en franquicia, que
hayan operado un tiempo suficiente, en el país o en el extranjero. La finalidad de esta
previsión es que el franquiciado disponga de los elementos necesarios para decidir si
emprende el negocio que ofrece el franquiciante.
b) Comunicar al franquiciado el conjunto de conocimientos técnicos, aun cuando no estén
patentados, derivados de la experiencia del franquiciante y comprobados por este como
aptos para producir los efectos del sistema franquiciado. Son el conjunto de
conocimientos prácticos que resulten de la experiencia comprobable del franquiciante
c) Entregar al franquiciado un manual de operaciones con las especificaciones útiles para
desarrollar la actividad prevista en el contrato.
d) Proveer asistencia técnica para la mejor operatividad de la franquicia durante la vigencia
del contrato. Comprende también la enseñanza completa del sistema y su
funcionamiento
e) Si la franquicia comprende la provisión de bienes o servicios a cargo del franquiciante o de
terceros designados por el, asegurar esa provisión en cantidades adecuadas y a precios
razonables, según usos y costumbres comerciales, locales o internacionales. Deber de
colaboración permanente, comprende los insumos para la fabricación o los productos
terminados
f) Defender y proteger el uso por el franquiciado, en las condiciones del contrato de los
derechos referidos en el art. 1512.

Obligaciones del franquiciado

Art. 1515 impone:

a) Desarrollar efectivamente la actividad comprendida en la franquicia, cumplir las


especificaciones del manual de operaciones y los que el franquiciante le comunique en
cumplimiento de su deber de asistencia técnica.
b) Proporcionar las informaciones que razonablemente requiera el franquiciante para el
conocimiento del desarrollo de la actividad y facilitar las inspecciones que se hayan
pactado o que sean adecuadas al objeto de la franquicia. Comprende todos los datos
relevantes del negocio objeto de la franquicia, facilitando el derecho de control que tiene
el franquiciante
c) Abstenerse de actos que puedan poner en riesgo la identificación o el prestigio del sistema
de franquicia que integra o de los derechos mencionados en el art 1512, segundo párrafo
y cooperar en su caso en la protección de esos derechos
d) Mantener la confidencialidad de la información reservada que integra el conjunto de
conocimientos técnicos transmitidos y asegurar esa confidencialidad respecto de las
personas, dependientes o no, a los que deban comunicarse para el desarrollo de las
actividades. Esta obligación subsiste después de la expiración del contrato.
e) Cumplir con las contraprestaciones comprometidas, entre las que pueden pactarse
contribuciones para el desarrollo del mercado o de las tecnologías vinculada a la
franquicia. La forma en la cual se retribuirá al franquiciante es variable y debe establecerse
en el contrato.

c. plazos

Art. 1516: “es aplicable el art. 1506, primer párrafo. Sin embargo, un plazo inferior puede ser
pactado si corresponde con situaciones especiales como ferias o congresos, actividades
desarrolladas dentro de predios o emprendimientos que tienen prevista una duración inferior o
similar. Al vencimiento del plazo, el contrato se entiende por prorrogado tácitamente por plazos
sucesivos de un año, excepto expresa denuncia de una de las partes antes de cada vencimiento con
30 días de antelación. A la segunda renovación, se transforma en contrato por tiempo
indeterminado.”

La interpretación de las normas aplicables (1506 y 1516) nos lleva a concluir que:

a) El plazo mínimo del contrato de franquicia es de 4 años


b) Si el plazo convenido es menor, se entiende que es celebrado por 4 años igualmente
c) Si no media denuncia de cualquiera de las partes notificada con 30 días de anticipación al
vencimiento de 4 años, este se considera prorrogado por un año y luego por otro años
mas
d) Si antes del vencimiento del segundo año no es denunciado de la misma forma se
convierte en incierto indeterminado
e) Se admite un plazo menor a 4 años si se corresponde con situaciones especiales como
ferias o congresos, actividades desarrolladas dentro de predios o emprendimientos que
tienen prevista una duración inferior, o similares.

d. clausulas particulares

e. extinción

Art. 1522: “la extinción del contrato de franquicia se rige por las sgtes reglas:

a) El contrato se extingue por la muerte o incapacidad de cualquiera de las partes


b) El contrato no puede ser extinguido sin justa causa dentro del plazo de su vigencia original,
pactado entre las partes. Se aplican los art 1084 y sgtes
c) Los contratos con un plazo menor de 3 años justificado por razones especiales según el art.
1516, quedan extinguidos de pleno derecho al vencimiento del plazo
d) Cualquiera sea el plazo de vigencia del contrato, la parte que desea concluirlo a la
expiración del plazo original o de cualquiera de sus prorrogas, debe pre avisar a la otra con
una anticipación no menor de un mes por cada año de duración, hasta un máximo de 6
meses, contados desde su inicio hasta el vencimiento del plazo pertinente. En los contratos
que se pactan por tiempo indeterminado, el preaviso debe darse de manera que la
rescisión se produzca, cuando menos, al cumplirse el tercer año desde su concertación. En
ningún caso se requiere invocación de justa causa. La falta de preaviso hace aplicable el
art. 1493.

La clausula que impide la competencia del franquiciado con la comercialización de productos o


servicios propios o de terceros después de extinguido el contrato por cualquier causa, es válida
hasta el plazo máximo de un año y dentro de un territorio razonable habida cuenta de las
circunstancias.”

BOLILLA IX: CONTRATOS DE FINANCIAMIENTO. CONTRATOS


GRATUITOS Y DE CUSTODIA
1. a. mutuo. Concepto.

Art. 1525: “hay contrato de mutuo cuando el mutuante se compromete a entregar al mutuario en
propiedad, una determinada cantidad de cosas fungibles y este se obliga a devolver igual cantidad
de cosas de la misma cantidad y especie.”

El código de Velez decía en su art. 2241: La cosa que se entrega por el mutuante al mutuario debe
ser consumible, o fungible aunque no sea consumible.

El que presta solo pretende que se le restituya otra cosa en la misma cantidad y de la misma
especie y calidad. Por lo que se desprende entonces que la cosa entregada pasa a la propiedad del
mutuario y de allí la necesidad de devolver igual cantidad en igual calidad y especie. La
consecuencia de la transmisión del dominio es que el mutuario cargara con los riesgos de la cosa y
su obligación de devolver igual cantidad de cosas equivalentes se mantendrá aunque las recibidas
por el se hayan deteriorado o perdido por fuerza mayor.

Si en el contrato se estipula la devolución de cosas distintas, ya no podrá considerarse que


estemos ante un mutuo, aunque así lo llamen las partes, sino permuta o compraventa, pero el
compromiso de devolver una cantidad mayor o menor que la recibida no va a desnaturalizar el
contrato de mutuo.

Caracteres:

1. Consensual, se perfecciona como tal por el solo consentimiento de las partes


2. Bilateral, las partes se obligan recíprocamente la una hacia la otra, una comprometiéndose
a entregar determinada cantidad de cosas fungibles y la otra a reintegrar igual cantidad de
cosas de igual especie y calidad
3. Oneroso, las ventajas de una de las partes, le son concebidas en función de una prestación
que la otra ha hecho o se obliga a hacer. La norma admite que sean gratuito si así lo
convinieron las partes
4. Nominado, se encuentra regulado por la ley, art. 1525 y sgtes.
b. obligaciones del mutuante

Dado que el contrato de mutuo es consensual, la primera y esencial obligación del mutuante es
entregar la cosa fungida prometida y consecuentemente respetar el derecho del mutuario de
retener la cosa consigo durante todo el termino fijado en el contrato.

Si el mutuante incumple con dicha obligación, el mutuario podrá exigir el cumplimiento forzoso
del mutuo o la resolución del contrato, según el art. 1526

El art. 1526 también dispone que, acordado el mutuo, el mutuante puede negarse a la entrega de
la cosa prometida si (después del contrato) ocurre un cambio en la situación económica del
mutuario, que hiciera incierta la restitución del objeto del contrato, aspecto cuya prueba y
acreditación recaerá en cabeza del mutuante o prestamista.

Se entiende por normas generales (ante el silencio del código) que si nada se hubiera pactado,
corresponde el lugar de entrega el domicilio del deudor (mutuante o prestamista) al momento de
nacida la obligación o, también, el lugar donde la cosa se encuentra habitualmente.

La entrega puede ser real (vía de tradición) o ficta (cuando la cosa ya está en poder del mutuario
por otro título).

c. onerosidad

Art. 1527: “el mutuo es oneroso, excepto pacto en contrario.

Si el mutuo es en dinero, el mutuario debe los intereses compensatorios, que se deben pagar en la
misma moneda prestada.

Si el mutuo es de otro tipo de cosas fungibles, los intereses son liquidados en dinero, tomando en
consideración el precio de la cantidad de cosas prestadas en el lugar en que debe efectuarse el
pago de accesorios, el dia del comienzo del periodo, salvo pacto en contrario.

Los intereses se deben pagar por trimestre vencido, o con cada amortización total o parcial de lo
prestado que ocurra antes de un trimestre, excepto estipulación distinta.

Si se ha pactado la gratuidad del mutuo, los intereses que haya pagado el mutuario
voluntariamente son irrepetibles. El recibo de intereses por un periodo, sin condición ni reserva,
hace presumir el pago de los anteriores.”

Del artículo se desprenden varios caracteres interesantes:

1. Onerosidad: se presume es oneroso salvo pacto en contrario, todo contrato de mutuo


devengara intereses, salvo que las partes expresamente estipulen lo contrario.
2. Moneda de pago: si el mutuo es dinerario, en la misma moneda prestada. La norma
establece que la retribución para el mutuante serán los intereses compensatorios. Se debe
aclarar que en un sentido restringido, la noción de interés se debe al precio del uso de
capitales de dinero; mientras que en un sentido más amplio, debe entenderse como el
precio de cualquier capital, sea o no dinero (que es lo que nos sirve en el caso de mutuo).
La tasa de interés, cumple otras funciones:
a) El riesgo de restitución que hará aumentar la tasa cuanto menor sea la solvencia
del deudor
b) El riesgo inflacionario que hará que la tasa no refleje un interés puro sino que al
aplicarse los réditos sobre un capital desvalorizado solo vengan a compensar el
deterioro del valor real de lo prestado
c) El riesgo cambiario, cuando se trate de préstamos en una moneda que
representan un valor constante y existe el riesgo de que se admita la restitución
del capital en otra moneda de menor valor real
d) La compensación de costos administrativos del acreedor
3. Periodicidad del pago: por trimestre vencido o amortización de capital si este ocurriera
antes del vencimiento del trimestre, salvo estipulación en contrario.
4. Carácter irrepetible de los intereses pagados sin obligación al pago: quien sin legalmente
obligado ha pagado intereses no convenidos no puede repetirlos. Nuestro código en su
art. 728 establece que lo entregado en cumplimiento de deberes morales o de conciencia
es irrepetible.
5. Presunción del pago de intereses anteriores cuando se extiende recibo por un periodo
posterior sin hacer ninguna mención de la deuda anterior. Quien con periodicidad vienen
cobrando los servicios de intereses los va aplicando a los distintos periodos en orden
consecutivo. Por tanto si ha cobrado una suma por uno de los periodos posteriores sin
hacer mención a la existencia de una deuda por periodos anteriores, la ley supone que los
ha cobrado.

d. incumplimiento del mutuario

Art 1529: “la falta de pago de los intereses o de cualquier amortización de capital da derecho al
mutuante a resolver el contrato y a exigir la devolución de la totalidad de lo prestado, mas sus
intereses hasta la efectiva restitución.

Si el mutuo es gratuito, después del incumplimiento, se deben intereses moratorios. Si el mutuo es


oneroso a falta de convención sobre intereses moratorios, rige lo dispuesto para las obligaciones
de dar suma de dinero.”

La falta de cumplimiento del mutuario de su obligación de restituir lo recibido más los intereses
pactados, en su caso, originara la mora de este y facultara al mutuante para resolver el contrato y
reclamar la devolución de lo prestado más los intereses compensatorios a los que se adicionaran
los moratorios. Para que se dé la aplicación de la clausula resolutoria común debe tratarse de un
incumplimiento parcial y que sea sustancial.
e. mala calidad o vicio de la cosa:

Art. 1530: “si la cantidad prestada no es dinero, el mutuante o prestamista responde por los daños
causados por la mala calidad o vicio de la cosa prestada. Si el mutuo es gratuito responde solo si
conoce la mala calidad o el vicio y no advierte al mutuario.”

Se aplica la responsabilidad por vicios propia de toda transferencia. Se diferencia según se trate de
un mutuo oneroso (se agrava la responsabilidad del transmitente quien debe responder en todos
los casos, conozca o no el vicio) o gratuito, ya que tratándose de un contrato que beneficia
exclusivamente al mutuario, el mutuante responderá solo cuando exista mala fe de su parte.

El mutuante debe asumir la responsabilidad por vicios de la cosa.

Esta norma limita la garantía a los supuestos de transmisión de cosas que no sean dinero. En el
viejo código esta disposición no existía, se utilizaba el supuesto de entrega de dinero falso.

f. aplicación supletoria de las reglas de las obligaciones de dar sumas de dinero.

Art. 1532: “se aplican al mutuo las disposiciones relativas a las obligaciones de dar sumas de
dinero o de genero, según sea el caso.”

Expresamente indica la aplicación supletoria de otras normas, en concreto, las de dar suma de
dinero. Por lo cual, ante duda o ausencia regulatoria, se utilizaran las normas de los artículos 762 a
772 (obligaciones de dar sumas de dinero) o bien los artículos 762 y 763 (obligaciones de género).

g. intereses

2. a. comodato. Concepto

Art. 1533: “hay comodato si una parte se obliga a entregar a una a otra una cosa no fungible,
mueble o inmueble, para que se sirva gratuitamente de ella y restituya la misma cosa recibida.”

A diferencia del préstamo de consumo, aquí no hay transferencia de la propiedad; el prestario solo
adquiere un derecho personal de uso de la cosa. Además, el uso debe ser gratuito; desde el
momento en que se paga algo por el, deja de ser comodato para convertirse en locación.

Caracteres:

1. Consensual, por lo que la promesa de entrega de la cosa obligara al comodante a cumplir


con ella y otorgara al comodatario acción de cumplimiento
2. Gratuito, el comodante no puede recibir retribución sin desnaturalizar el contrato, no
significa que debe necesariamente carecer de todo interés en el, asi por ej, quien presta su
casa durante su vieja a Europa a unos amigos, pueda tener interés en que se la vigilen
3. Es un contrato intuitu personae
4. Bilateral, ambas partes resultan obligadas, el comodante a permitir el uso de la cosa por el
tiempo pactado y el comodatario a cuidarla y devolverla en su momento
5. Puede aplicarse en términos comerciales, como la distribución comercial o el suministro,
donde determinados envases para la comercialización son objeto de comodato, como
pueden serlo:
a) Garrafas, contenedores, etc.
b) Contratos de telefonía móvil, de televisión por cable, digital o satelital, provisión
de internet (en los casos donde se entregue el modem)
c) Seguro automotor con préstamo de un vehiculo en caso de siniestro
d) Entrega de lentes 3D en un teatro o cine
e) Entrega de carritos en supermercados o aeropuertos

b. prestamos de cosas fungibles.

Art 1534: “el préstamo de cosas fungibles solo se rige por las normas del comodato si el
comodatario se obliga a restituir las mismas cosas recibidas.”

El principio que consagra el código es que solo pueden ser objeto del comodato las cosas no
fungibles.

De manera tal que para que el comodato de cosas fungibles sea valido no pueden sustituirse las
cosas prestadas por otras de la misma calidad y en igual cantidad, sino que, en cambio, deben
devolverse las mismas cosas prestadas.

Se ha hecho referencia en doctrina a la situación del préstamo gratuito de envases, siempre y


cuando exista consenso en considerar al envase como una cosa fungible.

c. Prohibiciones:

Art. 1535: “no pueden celebrar contrato de comodato:

a) Los tutores, curadores y apoyos, respecto de los bienes de las personas incapaces o con
capacidad restringida bajo su representación;
b) Los administradores de bienes ajenos, públicos o privados, respecto de los confiados a su
gestión, excepto que tengan facultades expresas para ello.”

La prohibición del inc. A es absoluta, mientras que la del inc. B es relativa, porque con la
autorización expresa de los titulares de los bienes se podrá subsanar el impedimento.

En el inc. A la finalidad de la norma es la protección del incapaz, para que sus bienes no sean
aprovechados por terceros que se encuentran en una situación de predominio, sin beneficio
alguno para el.
En el inc. B se procura evitar la administración en contra de los intereses del administrado que es
plenamente capaz; por ello, el administrador puede ser facultado de manera expresa a dar los
bienes en comodato.

d. obligaciones de comodatario y comodante

Obligaciones del comodatario:

Art 1536: “son obligaciones del comodatario:

a) Usar la cosa conforme al destino convenido. A falta de convención puede darle el destino
que tenia al tiempo del contrato, el que se da a cosas análogas en el lugar donde la cosa se
encuentra, o el que corresponde a su naturaleza;
b) Pagar los gastos ordinarios de la cosa y los realizados para servirse de ella;
c) Conservar la cosa con prudencia y diligencia
d) Responder por la perdida o deterioro de la cosa, incluso causados por caso fortuito,
excepto que pruebe que habrían ocurrido igualmente si la cosa hubiera estado en poder
del comodante;
e) Restituir la misma cosa con sus frutos y accesorios en el tiempo y lugar convenidos. A falta
de convención, debe hacerlo cuando se satisface la finalidad para la cual se presta la cosa.
Si la duración del contrato no esta pactada ni surge de su finalidad, el comodante puede
reclamar la restitución en cualquier momento.

Si hay varios comodatarios, responden solidariamente.”

Entonces debemos decir que son obligaciones del comodatario:

a) Usar la cosa conforme al destino convenido: el comodante puede disponer que la entrega
de la cosa se haga para la utilización con un determinado fin, o de un determinado modo.
La norma aclara que si nada dice el contrato sobre el fin, debe entenderse que la cosa ha
de ser utilizada conforme al destino que tenia al tiempo del contrato, el que se le da a
cosas análogas o el que corresponda a su naturaleza. El incumplimiento de esta
imposición, habilita al comodante a pedir la restitución de la cosa, junto la reparación de
los daños y perjuicios que sufre la misma.
b) Pagar los gastos ordinarios de la cosa y los realizados para servirse de ella: el comodatario
deberá pagar los gastos ordinarios que la misma devengue. Por ej: si el objeto del
comodato es un departamento, el comodatario deberá pagar las expensas y servicios del
bien. Es una norma de carácter supletorio, nada impide que las partes pacten en contrario.
Sobre los gastos extraordinarios podrá pedir su reembolso al comodante, pero no podrá
retener la cosa objeto del comodato.
c) Conservar la cosa con prudencia y diligencia: el comodatario debe cuidar la cosa como si
fuera de su propiedad.
d) Responder por la pérdida o deterioro de la cosa, incluso causados por caso fortuito,
excepto que pruebe que habrían ocurrido igualmente si la cosa hubiera estado en poder
del comodante: en concordancia con el inc. C, el deber de conservación que pesa sobre el
comodatario es una obligación de resultado, no pudiendo eximirse salvo en las formas en
los que establece la norma. En interpretación de la frase “excepto que pruebe que habrían
ocurrido igualmente si la cosa hubiera estado en poder del comodante” podemos deducir
que el comodatario no responde por:
1. Deterioros propios del uso y goce normal de la cosa
2. Daños causados en vicios que la cosa ya presentaba antes de ser entregada al
comodatario
3. Daños derivados de vicios ocultos
e) Restituir la misma cosa con sus frutos y accesorios en el tiempo y lugar convenidos: el
comodatario debe restituir la cosa junto con sus frutos y accesorios. Si no se indica el
tiempo en que debe ser guiado, el articulo dispone las siguientes reglas:
1. Primeramente el comodatario deberá devolver la cosa, luego de agotada la
finalidad para la que le fue prestado. Por ej: el préstamo de un automóvil para
hacer un viaje, es claro que cuando el viaje termine el comodatario debe
devolverlo.
2. Si el contrato no ha establecido el plazo, ni su finalidad, el comodante tiene el
derecho de reclamar la cosa en cualquier momento.

Obligaciones del comodante:

Art. 1540: “son obligaciones del comodante:

a) Entregar la cosa en el tiempo y lugar convenidos


b) Permitir el uso de la cosa durante el tiempo convenido
c) Responder por los daños causados por los vicios de la cosa que oculta al comodatario
d) Reembolsar los gastos de conservación extraordinarios que el comodatario hace, si este los
notifica previamente o si son urgentes”

Analizaremos las obligaciones del comodante:

a) Entregar en el lugar y tiempo convenidos: al ser un contrato consensual, el comodante


queda obligado por la promesa de entrega a cumplir con lo estipulado. Ante el
incumplimiento del comodante de la obligación asumida, el comodatario tendrá a su
disposición la acción de cumplimiento forzoso. Dado que la norma no aclara que sucede
cuando no se estipula el momento en el contrato de comodato, se entiede que el silencio
en el tiempo implica la entrega inmediata de la cosa.
b) Permitir el uso de la cosa durante el tiempo convenido: si bien el comodante no responde
por evicción respecto de las turbaciones de derecho que sufiere el comodatario, si debe
abstenerse de ejercer vías de hecho que le impidan a este ultimo emplea la cosa durante
el tiempo convenido.
c) Responder por los daños causados por los vicios que oculta el comodatario: como es un
contrato gratuito, el comodante no responde por vicios redhibitorios de la cosa. La
finalidad perseguida, es la de garantizar la finalidad del contrato, y por ello el comodante
responde exclusivamente cuando el daño sufrido por el comodatario obedezca a vicios de
la cosa, que hubiera ocultado dolosa o culposamente.
d) Reembolsar los gastos de conservación extraordinaria que el comodatario hace, si este los
notifica previamente o si son urgentes: los gastos ordinarios de conservacion son a cargo
del comodatario, los extraordinarios a cargo del comodante. La norma establece como
requisito previo al reembolso, el deber del comodatario de notificar la existencia del gasto
extraordinario, antes de efectuar el pago del mismo (esto es para darle al comodante el
derecho de pagar el mismo el gasto extraordinario).

e. gastos.

Art. 1538: “el comodatario no puede solicitar el reembolso de los gastos ordinarios realizados para
servirse de la cosa; tampoco puede retenerla por lo que le deba el comodante, aunque sea en razón
de gastos extraordinarios de conservación.”

Los gastos ordinarios son aquellos necesarios, normales y habituales para usar y servirse de la
cosa. Los gastos extraordinarios son los que exceden ese límite.

Se acuerda en que los arreglos inherentes a la conservación, confort, mejor uso del inmueble,
pago de servicios, son considerados ordinarios y a cargo del comodatario.

Pueden ser considerados extraordinarios aquellos que implican reformas estructurales del bien
prestado, que mejoran su finalidad y uso notablemente, y que implican un inexcusable mayor
valor de la cosa al momento de la restitución.

Jamás podrá ejercerse el derecho a retención, invocando los gastos extraordinarios

f. restitución anticipada

Art. 1539: “el comodante puede exigir la restitución de la cosa antes del vencimiento del plazo:

a) Si la necesita en razón de una circunstancia imprevista y urgente; o


b) Si el comodatario la usa para un destino distinto al pactado, aunque no la deteriore.”

Hace referencia a cuando el comodante facultativamente puede solicitar la restitución de la cosa


antes del vencimiento del plazo respectivo. Claro que previamente hay que identificar si es u plazo
expreso o un plazo relacionado con la finalidad del uso de la cosa (para que proceda deben
concurrir los requisitos de la norma) o de una situación donde no es imposible determinar plazos o
términos (el requerimiento se puede hacer sin necesidad de que concurran los requisitos
establecidos en el art.).

La primera excepción del artículo es en caso de necesidad, donde debe haber 3 requisitos:

a) Necesidad
b) Que se trate de una circunstancia imprevista
c) Que se trate de una circunstancia urgente
La otra excepción, es cuando el comodante determina que el comodatario está usando la cosa
para un destino distinto al pactado, exista o no deterioro del mismo.

En el caso de que se use para un destino distinto al pactado, no corresponde un resarcimiento de


daños y perjuicios. Sin embargo, en el supuesto de necesidad del comodante, podría generar
responsabilidad por daños en virtud de lo dispuesto en el art. 1540 inc. B, donde el comodante se
obliga a permitir el uso de la cosa durante el tiempo convenido; a pesar de que el comodato sea
un contrato gratuito y haya una razón fundada, imprevista y urgente para pedir la restitución
anticipada de la cosa.

g. extensión (para mi es extinción)

Extinción del comodato: Art. 1541: “el comodato se extingue:

a) Por destrucción de la cosa. No hay subrogación real, ni el comodante tiene la obligación de


prestar una cosa semejante
b) Por vencido el plazo, se haya usado o no la cosa prestada
c) Por voluntad unilateral del comodatario
d) Por muerte del comodatario, excepto que se estipule lo contrario o que el comodato o haya
sido celebrado exclusivamente en consideración a su persona”

El primer supuesto trata de la destrucción de la cosa, si la cosa se destruye, se extingue el


comodato sin que ello genere subrogación legal respecto de ningún otro bien ni tampoco que el
comodante tenga la obligación de prestar una cosa parecida. Debe analizarse si la destrucción de
la cosa tuvo que ver con la conducta del comodatario o con la conducta del comodante.

El segundo supuesto extintivo es el vencimiento del plazo. Se aclara que no importa que se haya
usado o no la cosa prestada, quedando igualmente extinto el contrato.

El tercer supuesto extintivo es por decisión o voluntad unilateral del comodatario, no pudiendo el
comodante exigir responsabilidad alguna por incumplimiento del plazo del comodato.

El cuarto supuesto es por la muerte del comodatario, en principio. Puede pactarse en contrario. Se
mantendrá la vigencia cuando no haya sido celebrado exclusivamente en consideración de la
persona.

3. a. donación. Concepto. Disposiciones generales.

Art. 1542: “hay donación cuando una parte se obliga a transferir gratuitamente una cosa a otra, y
este lo acepta.”

De esta definición podemos desprender los siguientes elementos:


a) Obliga a transferir la propiedad de una cosa: el artículo refuerza el carácter consensual de
contrato de donación, en tanto, la mera promesa de la transferencia de la propiedad de
una cosa, a título gratuito, dará al donatario la potestad de exigir la efectiva tradición e
inscripción por vía judicial en caso de incumplimiento. Solo las cosas pueden ser objeto de
donación, si se tratara de un derecho se hablaría de más bien una cesión.
b) La transferencia debe ser a título gratuito: hay desprendimiento de bienes sin
compensación por la otra parte. No es una regla absoluta, es posible que el contrato de
donación obligue al donatario a hacer o pagar algo, sea en beneficio del donante o de un
tercero. Esto no altera la esencia gratuita del acto.
c) Acto entre vivos: no está específicamente mencionado en el artículo. Los actos de última
voluntad, llamados testamentos, tienen un régimen legal distinto.

b. aceptación

Art. 1545: “la aceptación puede ser expresa o tacita, pero es de interpretación restrictiva y esta
sujeta a las reglas establecidas respecto a la forma de las donaciones. Debe producirse en vida del
donante y donatario.”

Requisitos de la aceptación: la donación no tiene efectos legales mientras no sea aceptada por el
donatario. En algunos casos la aceptación es formal y exige la escritura pública, en otros, basta con
la aceptación tacita que puede resultar del recibo de la cosa de otro acto igualmente inequívoco.

En caso de que muera el donante o el donatario antes de la aceptación, se rectifica la línea de que
la donación es un acto entre vivos, debiendo entenderse que la aceptación debe producirse
estando ambas partes vivas. Esta regla se diferencia al código de Velez, ya que antes se podía
aceptar por parte del donatario aun después de la muerte del donante.

c. donación bajo condición.

Art. 1546: “están prohibidas las donaciones hechas bajo la condición suspensiva de producir
efectos a partir del fallecimiento del donante.”

En el viejo código, existía una disposición expresa relativa a la posibilidad de convenir donaciones
condicionales, pero el nuevo código cuando regula este contrato solo hace referencia a las que se
prohíben.

La inclusión de condiciones prohibitivas (efectos suspendidos hasta la muerte del donante,


objetivo contrario a la moral y las buenas costumbres) en principio torna nula la donación en su
totalidad.

Cuando se trata de una condición de no hacer una cosa imposible cuando es suspensiva, en cuyo
caso no se afecta el acto. La nulidad también es parcial cuando la condición afecta de modo grave
las libertades de la persona, como la de elegir domicilio o religión, decidir sobre su estado civil,
caso en el cual se entenderá por no escrita, sin afectar el acto en sí.
Como resumen, podemos aclarar que la donación será válida en tanto la condición impuesta no
esté legalmente prohibida, pero también si las mismas importar dejar al arbitrio del donante la
posibilidad de revocar la donación o neutralizar o restringir sus efectos, o cuando sean ilícitas o
inmorales o imposibles.

d. capacidad

El código distingue entre la capacidad para donar y la que se necesita para aceptar la donación.
Para donar se exige una capacidad agravada, que el donante pueda disponer de sus bienes. Y para
aceptar solo que sea capaz.

Capacidad para donar: Art. 1548: “pueden donar solamente las personas que tienen plena
capacidad de disponer de sus bienes. Las personas menores emancipadas pueden hacerlo con la
limitación del inciso b) del artículo 28.”

No es posible prescindir de la regla general contenida en los art. 1001 y 1002 del código civil y
comercial, según la cual no pueden contratar los que sufren una incapacidad absoluta o una
relativa referente a determinada persona, acto u objeto.

El código establece las siguientes reglas:

I. Menores: según el art. 30, los menores no pueden donar sus bienes, salvo los que
adquieran por ejercicio de su profesión, cuando hubieran obtenido título habilitante para
ejercerla. Los menores emancipados no pueden hacer donaciones de los bienes que
hubieren recibido a título gratuito, ni aun con autorización judicial, lo que implica que
pueden donar libremente los bienes que hubieren recibido a titulo oneroso. El menor
emancipado por matrimonio no puede, en ningún caso, efectuar donaciones a su cónyuge
(art. 450).
II. Cónyuges: la capacidad de donar de los cónyuges quedara sujeta al régimen patrimonial
del matrimonio que ellos escojan, ya sea el de comunidad o el de separación de bienes:
a) Régimen de comunidad: el régimen de comunidad otorga al cónyuge plena
capacidad de administración y disposición sobre los bienes calificados como
propios en el art. 464. Podrá donarlos sin asentimiento del otro cónyuge. El
asentamiento si será necesario en casos de donar la vivienda familiar y los
muebles indispensables que se encuentren en ella.
b) Régimen de separación de patrimonios: el art. 505 es claro, cada uno de los
cónyuges tendrá la libre administración y disposición de sus bienes, pero para
poder enajenar la vivienda familiar o los bienes muebles indispensables que se
encuentren en ella, se requiere el asentimiento del otro cónyuge.

Capacidad para aceptar donaciones: “para aceptar donaciones se requiere ser capaz. Si la
donación es a una persona incapaz, la aceptación debe ser hecha por su representante legal; si la
donación del tercero o del representante es con cargo, se requiere autorización judicial.”
Si el donatario es incapaz la donación debe ser aceptada por sus representantes. Si se trata de
menores lo será por quienes ejercer la patria potestad o por sus tutores, siempre que estos no
sean los donantes, y si en el caso de incapaces o de personas con capacidad restringida por
razones de salud mental, por el curador que se les designe.

Los tutores necesitan la autorización judicial para repudiar donaciones según el art. 121, inc. E,
regla aplicable a la curatela.

e. objeto

art. 1551: “la donación no puede tener por objeto la totalidad del patrimonio del donante, ni una
alícuota de el, ni cosas determinadas de las que no tenga el dominio al tiempo de contratar. Si
comprende cosas que forman todo el patrimonio del donante o una parte sustancial de este, solo
es válida si el donante se reserva su usufructo, o si cuenta con otros medios suficientes para su
subsistencia.”

El objeto de la donación debe ser una cosa corporal; los derechos no pueden donarse, sino
cederse gratuitamente, si bien la distinción no es de mayor importancia.

La donación debe referirse a cosas determinadas cuyo dominio este en poder del donante al
momento de contratar, en razón de lo cual la donación de bienes futuros es nula. Las cosas futuras
debe entenderse todas las que no están actualmente incorporadas al patrimonio de una persona,
aunque más tarde ingresen a él sin necesidad de un acto de voluntad; tal como, por ejemplo, la
próxima cosecha.

La donación de cosa ajena es nula. La solución parece desprenderse fácilmente de la prohibición


de donas cosas futuras, pues una cosa que no está actualmente en el patrimonio del donante es
para el futura. La adquisición posterior no convalida el negocio nulo.

Es nula la donación de todos los bienes presentes de una persona o de una parte sustancial de su
patrimonio, a menos que el donante se reserve su usufructo o cuente con otros medios suficientes
para su subsistencia.

f. forma

Art. 1552: “deben ser hechas en escritura pública, bajo pena de nulidad, las donaciones de cosas
inmuebles, las de cosas muebles registrables y las de prestaciones periódicas o vitalicias.”

En tales hipótesis, la escrita es un requisito exigido, solo se exceptúan las donaciones hechas al
estado que pueden acreditarse con las constancias de actuaciones administrativas (art. 1553).
La exigencia de escritura pública, tiene su antecedente en el art. 1810 del derogado código civil,
luego de la reforma de la ley 17771.

Es razonable que la ley cuide de modo especial estas transmisiones de dominio que no son el
resultado de una negociación, ni un cambio de valores, y que importan una amputación liquida del
patrimonio del donante. No es lo mismo la promesa de una donación que la de una compraventa o
permuta, porque en estos casos la ley debe su protección por igual a ambas partes, en tanto que la
donación debe proteger principalmente al autor de ella.

Las donaciones de cosas muebles no registrables y títulos al portador pueden hacerse bien por
instrumento privado, bien por mera entrega de la cosa.

La donación de buques de 10 toneladas o más de arqueo total debe hacerse por escritura pública
o por documento autenticado, bajo pena de nulidad. Los de menos de 10 toneladas deben hacerse
por instrumento privado con la firma de los contratantes certificada.

g. donaciones al estado

Art. 1553: “las donaciones al estado pueden ser acreditadas por las actuaciones administrativas.”

La disposición no expresa en forma precisa que estas donaciones constituyan una excepción a la
disposición precedente. También se trata de una forma solemne absoluta.

Para que la excepción se aplique debe tratarse de donaciones con destino de afectación pública y
deben ser aceptadas mediante decreto.

Cuando se refiere al estado, debe entenderse tanto el nacional como el provincial y municipal.

h. donaciones manuales

Art. 1554: “las donaciones de cosas muebles no registrables y de títulos al portador deben hacerse
por la tradición del objeto donado.”

La donación se perfecciona con la sola entrega de la cosa o del título al donatario, de modo tal que
si la tradición falta no existiría como tal.

Donaciones de cosas muebles no registrables: en el nuevo texto se dice que es un requisito


esencial de la donación manual la entrega de la cosa, a diferencia del código derogado en que la
entrega aparecía como una alternativa a la donación hecha por instrumento.
i. efectos: Garantía evicción

Obligaciones del donante:

1. Obligación de entregar la cosa; los frutos: la obligación esencial del donante es la de


entregar la cosa donada; obligación que nace desde que es puesto en mora por el
donatario, mora que se produce por el mero transcurso del tiempo fijado para el
cumplimiento de la obligación. Siguiendo el lineamiento del código de Velez, no es solo el
deber de entregar la cosa, sino también los frutos que la cosa devengue a partir del
momento en que fue puesto en mora. Solo debe los frutos percibidos desde el momento
de la mora.
2. Pérdida o deterioro de la cosa: en caso de incumplimiento o mora, el donante solo
responderá por dolo, que sería cuando haya tratado de dañar al donatario o una
manifiesta indiferencia por los intereses de este último. Por lo que nuestro código no
diferencia según la cosa se pierda o deteriore antes o después de la mora, ya que el
donante solo responderá si actuó dolosamente.

Acciones que puede usar el donatario en caso de incumplimiento por el donante: tendrá la acción
real de reivindicación en tanto el dueño de la cosa donada, como las acciones personales contra el
donante y sus herederos por incumplimiento. En principio, la acción reivindicatoria tiene por
objeto defender la existencia de un derecho real que se ejerce por la posesión, y como no pudo
haber posesión del donatario desde que no hubo tradición todavía, parece razonable deducir que
no tiene acción real hasta el momento de la tradición. Si hecha la donación el donante transmite la
cosa a un tercero, el donatario podrá reivindicarla de este tercero. La acción para reclamar la cosa
del donante y sus herederos será siempre una acción personal.

El donante solo responde por los vicios ocultos de la cosa donada si hubo dolo de su parte, caso en
el cual debe reparar los daños ocasionados.

Garantía de evicción:

Art. 1556: “El donante solo responde por evicción en los sgtes casos:

a) Si expresamente ha asumido esa obligación


b) Si la donación se ha hecho de mala fe, sabiendo el donante que la cosa donada no era
suya e ignorándolo el donatario
c) Si la evicción se produce por causa del donante
d) Si las donaciones son mutuas, remuneratorias o con cargo.”

La regla general es que el donante no garantiza por evicción al donatario, salvo que el donante
haya asumido esa obligación u obre de mala fe, o exista una prestación con cargo del donatario.

El art. 1557 define los alcances de la responsabilidad por evicción, en los sgtes supuestos:
a) Si la donación es puramente gratuita, el donatario solo debe indemnizar los gastos en los
que incurrió el donatario en razón del contrato de donación
b) Si la donación es parcialmente onerosa, además de los gastos antes referidos, debe:
I. Reembolsar el valor de la cosa por el recibida, si la donación es mutua
II. Abonar los gastos incurridos en el cumplimiento del cargo si se tratare de una
donación con cargo
III. Pagar los servicios recibidos en el caso de las donaciones remuneratorias.

En el caso de la donación mutua, el donatario no puede pretender que se le restituya la cosa, sino
solo su valor económico.

Si la evicción proviene de un hecho posterior a la donación imputable al donante, este debe


indemnizar al donatario los daños causados.

Obligaciones del donatario:

La donación es un contrato unilateral que en principio no impone obligaciones sino al donante. El


donatario tiene una obligación general de gratitud, que se refiere a una conducta permanente que
es razonable exigir de quien ha recibido un beneficio. Pero puede ocurrir que en el mismo
contrato el donante imponga al donatario ciertas obligaciones accesorias llamadas cargos.

j. obligación de alimentos:

Obligación de gratitud, alimentos debidos al donante.

El donatario tiene un deber moral de gratitud hacia el donante. En el plano puramente ético, esa
gratitud se revelara sobre todo con hechos positivos. El donatario está obligado a pasar alimentos
al donante cuando este no tuviese medios de subsistencia, y siempre que la donación haya sido
gratuita.

Para que nazca la obligación alimentaria a cargo del donatario se necesita:

a) Que la donación no haya sido onerosa, porque si se hubiera impuesto un cargo o se


tratase de una donación remuneratoria, el acto no seria ya puramente gratuito.
b) Que el donante no tuviere medios de subsistencia, ni posibilidad de adquirirlos por su
trabajo.

El art. 1572 establece que esta es una obligación subsidiaria, que solo pesa sobre el donatario
cuando el donante no puede obtenerlos de las personas obligadas por las relaciones de familia.

El incumplimiento de la obligación alimentaria brinda al donante dos acciones: una por prestación
de alimentos y otra por revocación de la donación.

k. tipos de donaciones:
I. Donaciones por causa de muerte: el código prohíbe las donaciones deferidas para el
fallecimiento del donante. Esta regla no se opone a que una persona transfiera
actualmente la propiedad de una cosa, reservándose el usufructo o el uso y goce de ella
hasta el momento de la muerte; habrá en tal caso la donación de la nuda propiedad, lo
que es legítimo. Tampoco se opone a la validez de las donaciones a la que se hace con la
condición de que el donatario restituirá los bienes donados si el donante no falleciere en
un tiempo previsto y la que se hace con la condición de que los bienes se restituirán al
donante si este sobreviviese al donatario.
II. Donaciones mutuas: son aquellas en las que se hacen dos o más personas donaciones
reciprocas. La donación es hecha en mira de un acto reciproco, por lo tal es un acto
oneroso. Por lo que no se utiliza el régimen de donaciones, dado que es más bien una
permuta. Lo que sí, las partes no se fijan en la equivalencia de las contraprestaciones, y no
podrán impugnar el acto por lesión. Nuestro código NO regula este tipo de donaciones,
pero la reconoce en el art. 1560 al establecer ciertos efectos (que la nulidad de una de las
donaciones mutuas afecta a ambas, en cambio el incumplimiento de los cargos solo
perjudica al donatario culpable), tampoco exige que las donaciones se hagan en el mismo
acto, algo si establecido por el código de Velez.
III. Donaciones remuneratorias: art. 1561: “son donaciones remuneratorias las realizadas en
compensa de servicios prestados al donante por el donatario, apreciables en dinero y por
las cuales el segundo podría exigir judicialmente el pago.” Si, en cambio, se trata de
recompensar servicios que no dan lugar a acción judicial, no hay donación remuneratoria
sino simple.
IV. Donaciones con cargo: art. 1564: “las donaciones remuneratorias o con cargo se
consideran como actos a titulo oneroso en la medida en que se limiten una equitativa
retribución de los servicios recibidos o en que exista equivalencia de valores entre la cosa
donada y los cargos impuestos. Por el excedente se aplican las normas de las donaciones.”
Serán onerosas en la medida en que exista equivalencia de los valores entre la cosa
donada y los cargos. La inejecución del cargo por el donatario hace nacer las siguientes
acciones:
a) Acción por incumplimiento: el donatario puede ser demandado por cumplimiento
del cargo. Si este ha sido establecido a favor del donante, la acción por
incumplimiento la tienen: el donante y sus sucesores a titulo universal, sus
acreedores (en ejercicio de la acción subrogatoria) y el albacea.
b) Acción por revocación: solo compete al donante y sus herederos. Es una acción
personalísima que no puede ser intentada por los acreedores por vía indirecta ni
por el tercero beneficiario del cargo, que solo puede pedir el cumplimiento.
c) Responsabilidad del donatario por los cargos: el donatario solo responde por el
cumplimiento de los cargos de la cosa donada, y hasta su valor si la ha enajenado
o ha perecido por hecho suyo. En cambio, queda liberado si la cosa ha perecido sin
su culpa.
d) Cargos imposibles, ilícitos o inmorales: los cargos imposibles, ilícitos o inmorales
no anulan la donación, sino que se los tiene por no escritos.
V. Inoficiosidad de las donaciones: la porción legítima de los herederos forzosos está
garantizada contra todo acto de disposición gratuita de bienes, sea entre vivos o de última
voluntad. Si el valor de las donaciones excede la porción disponible del donante, los
herederos pueden demandar su reducción en la medida necesaria para cubrir sus
legítimas. La acción de reducción por inoficiosidad únicamente puede afectas las
donaciones remuneratorias en la medida en que exceden el justo pago del servicio, y las
donaciones con cargo en cuanto la liberalidad supera el valor económico del cargo
impuesto al beneficiario. La acción de reducción no procede contra el donatario ni contra
el subadquiriente que han poseído la cosa donada durante 10 años computados desde la
adquisición de la cosa.

l. reversión y revocación

La donación puede estar sujeta a condición. Las condiciones suspensivas no tienen limitación,
solamente las potestativas anularían la donación. Si son condiciones resolutorias, deben ser
casuales o depender de la voluntad del donatario, pero nunca puede la condición depender de la
voluntad del donante, porque sino dependería de este la suerte de los bienes donados,
provocando incertidumbre.

Cumplida la condición suspensiva, la donación es exigible por el donatario, cumplida la resolutoria,


el dominio que fuera transferido al donante queda revocado

Reversión de las donaciones: Art. 1566: “en la donación se puede convenir la reversión de las cosas
donadas sujetando el contrato a la condición resolutoria de que el donatario, o el donatario, su
cónyuge y sus descendientes, o el donatario sin hijos, fallezcan antes que el donante.

Esta clausula debe ser expresa y solo puede estipularse a favor del donante. Si se la incluye a favor
de él y de sus herederos o de terceros, solo vale respecto de aquel.

Si la reversión se ha pactado para el caso de muerte del donatario sin hijos, la existencia de estos
en el momento del deceso de su padre extingue el derecho del donante, que no renace aunque este
les sobreviva.”

Dentro de las condiciones resolutorias que suelen imponerse en las donaciones, una de las más
frecuentes e importantes es la reversión por pre muerte del donante.

El pacto de reversión del bien donado, consiste en la facultad que se ha reservado el donante y
que solo él puede ejercer, con el fin de que se le restituya el bien donado, en los casos en que
mueran primero las personas enumeradas en el artículo.

El fundamento que tiene la norma es el eventual interés que puede tener el donante en que el
bien no salga de la familia del donatario.
Efectos: Art. 1567: “cumplida la condición prevista para la reversión, el donante puede exigir la
restitución de las cosas transferidas conforme a las reglas del dominio revocable.”

Una vez cumplidos los requisitos previstos en el artículo anterior, la reversión opera de pleno
derecho sin necesidad de declaración judicial.

Cuando se trate de una cosa registrable los efectos del cumplimiento de la condición son
retroactivos no solo entre partes, sino respecto de terceros, salvo que lo contrario surja del titulo
de la donación o de una disposición de la ley.

En cambio, si no se trata de cosas registrables la revocación del dominio no los afecta salvo que
sean adquirientes de mala fe, es decir que conocieran la condicionalidad de la donación, corriendo
en ese caso la prueba a cargo de quien alegue dicho conocimiento.

Renuncia: Art. 1568: “la conformidad del donante para la enajenación de las cosas donadas
importa la renuncia del derecho de reversión. Pero la conformidad para que se los grave con
derechos reales solo beneficia a los titulares de estos derechos.”

Esta norma regula dos supuestos de renuncia tacita de la reversión (consentimiento prestado para
la venta de la cosa donada y haber consentido que el donatario gravara la cosa), pero esto no
impide que la renuncia pueda darse de forma expresa.

Dado que el derecho a la reversión es un derecho patrimonial es perfectamente renunciable.

Revocación:

Art. 1569: “la donación aceptada solo puede ser revocada por inejecución de los cargos, por
ingratitud del donatario, y, en caso de habérselo estipulado expresamente, por súper nacencia de
hijos del donante.

Si la donación es onerosa, el donante debe reembolsar el valor de los cargos satisfechos o de los
servicios prestados por el donatario.”

En principio, la donación es irrevocable. La ley solo admite la revocación en los siguientes


supuestos:

a) Cuando el donatario no ha ejecutado los cargos impuestos:


Art. 1570: “la donación puede ser revocada por incumplimiento de los cargos.
La revocación no perjudica a los terceros cuyo beneficio se establecen los cargos.
Los terceros a quienes el donatario transmite bienes gravados con cargos solo deben
restituirlos al donante, al revocarse la donación, si son de mala fe; pero pueden impedir los
efectos de la revocación ofreciendo ejecutar las obligaciones impuestas al donatario si las
prestaciones que constituyen los cargos no deben ser ejecutadas precisa y personalmente
por aquel. El donatario que enajena los bienes donados, o imposibilita su devolución por su
culpa, debe resarcir al donante el valor de las cosas donadas al tiempo de promoverse la
acción de revocación, con sus intereses.”
Si el donatario incurre en incumplimiento de los cargos impuesto por el donante, este
tiene derecho a revocar la donación. Es indiferente a los efectos del ejercicio del derecho
de revocación, la naturaleza del cargo, que puede ser económico o extra patrimonial.
Quien puede demandar la revocación? El derecho a demandar la revocación de una
donación por inejecución de los cargos solo corresponde al donante y sus herederos.
Para que sea viable la acción de revocación deben reunirse las siguientes condiciones:
1. Incumplimiento del cargo: en principio es indiferente la razón por la cual no se
cumplió, pero entendemos que no habrá lugar a revocación si el donatario
demuestra que no ha cumplido con el por una fuerza mayor ulterior a la
constitución en mora.
2. Constitución en mora: solo puede intentarse después de que el donatario ha
quedado en mora.
Prescripción: según el art. 2560 es de 5 años. A correr desde el conocimiento efectivo del
hecho incumplimiento.
Efectos:
1. Entre las partes: el donatario deberá restituir al donante los bienes donados o el
valor de los mismos. También deberá otorgar la correspondiente escritura pública
para la re adquisición del dominio, hacer tradición de la cosa donada y proceder a
la registración del acto, en caso de cosas registrables
2. Respecto a terceros beneficiarios del cargo: aun cuando se revoque la donación, la
atribución hecha a favor del tercero beneficiario no se altera, y la obligación debe
ser cumplida por el donante.
3. Respecto de terceros: los terceros a quienes se les hubiera transmitido las cosas
objeto de donación, solo están obligados a restituirlas si son de mala fe.
b) Cuando incurrido en ingratitud hacia el donante:
Art. 1571: “las donaciones pueden ser revocadas por ingratitud del donatario en los
siguientes casos:
A. Si el donatario atenta contra la vida o la persona del donante, su cónyuge o
conviviente, sus ascendientes o descendientes. También se debe tener en cuenta al
conviviente, siempre y cuando cumpla con los requisitos del art. 510 que exige
que convivencia se mantenga durante 2 años y, según el art. 511, que este
registrada; mientras no se hubieran producido los ceses mencionados por el art.
523.
B. Si injuria gravemente a las mismas personas o afecta su honor. Las injurias graves
son aquellas hechas para deshonrar a sabiendas a la persona del donante o las
mismas personas enunciadas en el inc. A, y de deben ser de autoría del donatario,
autoría que puede ser mediata si han sido cometidas por un tercero instigado por
él. Debe hacerse un análisis de la injuria teniendo en cuenta la condición social, el
grado de educación y las circunstancias en que las injurias hayan sido dichas.
C. Si las priva injustamente de bienes que integran su patrimonio. La referencia a
privación de bienes parece descartar la posibilidad de que se produzcan daños que
no impliquen privación de los bienes por lo que quizás la formal anterior al referir
a delitos grave resulta más precisa.
D. Si rehúsa alimentos al donante. Art. 1572: negación de alimentos. “la revocación
de la donación por negación de la prestación de alimentos solo puede tener lugar
cuando el donante no puede obtenerlos de las personas obligadas por las
relaciones de familia.” Para que se aplique se requiere:
1. Que el donante no tenga medios de subsistencia, situación a la cual debe
llegar con posterioridad a la celebración del contrato.
2. No basta con la falta medios de subsistencia sin que el donante no debe
estar en condiciones de procurárselo.
3. El donante debe carecer de obligados a prestar alimentos por relaciones
de familia (están obligados a prestar alimentos los ascendientes y
descendientes, los mas próximos en grado, esta obligación también
alcanza a los hermanos unilaterales y bilaterales).
En todos los supuestos enunciados, basta la prueba de que el donatario le es imputable el
hecho lesivo, sin necesidad de condena penal.”

c) Cuando después de la donación han nacido hijos del donante y esta causa de revocación
se hubiera previsto en el contrato. Nuestro código solo admite la posibilidad de revocación
de las donaciones por el nacimiento de hijos si fue expresamente pactada. El texto
sostiene que dicho pacto puede ser posible tanto en el caso de quien no tiene hijos, como
el de quien tiene conviene que el nacimiento de otros haga efectiva la condición.

4. a. deposito. Concepto

Art. 1356: “hay contrato de depósito cuando una parte se obliga a recibir de otra una cosa con la
obligación de custodiarla y restituirla con sus frutos.”

Habrá depósito entonces cuando una de las partes entregue a la otra una cosa con la sola finalidad
de custodiarla hasta que aquella la reclame.

La cosa objeto del depósito puede ser mueble o inmueble. En el código de Velez solo se permitían
los depósitos de cosas muebles.

Caracteres:

a) Oneroso: en principio, puede ser gratuito si las partes lo acuerdan asi (art. 1357)
b) Bilateral: aun cuando fuese gratuito. Si bien las obligaciones recaen principalmente en el
depositario, el depositante está obligado a entregar la cosa para su cuidado (si fuere
oneroso, también deberá abonar la remuneración convenida).
c) Consensual: se basa en el acuerdo de voluntades
d) Acto de confianza del depositante al depositario.
b. onerosidad

Presunción de onerosidad: Art. 1357: “el depósito se presume oneroso. Si se pacta la gratuidad, no
se debe remuneración, pero el depositante debe reembolsar al depositario los gastos razonables en
que incurra para la custodia y restitución.”

La onerosidad es la regla general del contrato de depósito.

La obligación de pagar la retribución en el depósito de la cosa ajena: el único obligado es el


depositante, aun cuando no sea propietario de la cosa.

Deposito oneroso: Art. 1360: “si el depósito es oneroso, el depositante debe pagar la remuneración
establecida para todo el plazo del contrato, excepto pacto en contrario.

Si para la conservación de la cosa es necesario hacer gastos extraordinarios, el depositario debe


dar aviso inmediato al depositante, y realizar los gastos razonables causados por actos que no
pueden demorarse. Estos gastos y los de restitución son por cuenta del depositante.”

Si en el contrato de depósito ha sido fijada la retribución del depositario a ello debe estarse a los
fines de juzgar la señalada obligación a su cargo. Si nada se ha pactado, se presume la onerosidad
y la retribución omitida debe ser fijada judicialmente.

La norma reproduce con ciertas diferencias al art. 2204 del antiguo código. El art. 1360 distingue
entre gastos urgentes (que no pueden demorarse) de aquellos que, aunque necesarios, no
presenten esa condición (los gastos deben ser razonables, adecuados a los precios de plaza y al
valor de las cosas depositadas). En caso de gastos no urgentes, cumplida la carga de dar aviso al
depositante por parte del depositario, queda liberado de responsabilidad. Los gastos afrontados
por el depositario (los que no pueden demorarse) dan derecho a reclamar su reembolso al
depositante.

c. obligaciones del depositario

Art. 1358: “el depositario debe poner en la guarda de la cosa la diligencia que usa para sus cosas o
la que corresponda a su profesión. No puede usar las cosas y debe restituirlas, con sus frutos,
cuando le sea requerido.”

Esta norma sigue los lineamientos del viejo código.

Diligencia debida por el depositario. La culpa leve en concreto: El depositario debe poner en la
guarda de la cosa la diligencia que usa para sus cosas o la que corresponda a su profesión. Se le
exige que no modifique su tipo de conducta (la cual venía siguiendo hasta ese entonces) y que se
supone era conocida por el acreedor y aceptada por el; esta forma de valorar la culpa del
depositario resulta válida para un deposito gratuito.

El depositario profesional: Cuando el depósito es ejercido profesionalmente, el modelo de


conducta esta dado por el “buen hombre de negocios”, “buen empresario” u “organización
idónea”, lo cual implica la obligación de extremar las diligencias destinadas al cumplimiento del
objeto del contrato, configurándose el deber de garantía o seguridad que obliga al empresario,
mas allá del objeto especifico del contrato, a mantener indemne los bienes que el co-contratante
deja a su custodia.

La prohibición del uso de la cosa: La norma comentada ratifica la prohibición de usar la cosa
impuesta al depositario (tanto deposito gratuito como oneroso). Esta distinción ayuda a
diferenciarlo del comodato.

Restitución de la cosa depositada con sus frutos:

El depositario es un simple tenedor, carece de título para beneficiarse de los frutos. Inversamente,
el depositario solo debe los frutos percibidos pues es su calidad de simple custodio no está
obligado a cultivar la cosa.

d. deposito irregular:

Efectos: Art. 1367: “si se entrega una cantidad de cosas fungibles, que no se encuentra en saco
cerrado, se transmite el dominio de las cosas aunque el depositante no haya autorizados su uso o
lo haya prohibido. El depositario debe restituir la misma calidad y cantidad.

Si se entrega una cantidad de cosas fungibles, y el depositario tiene la facultad de servirse de ellas,
se aplican las reglas del mutuo.”

Este artículo caracteriza y fija los efectos del depósito irregular. Se configura cuando se entrega en
depósito una cosa fungible, sin las condiciones de individualización que la norma menciona.
Produce la transmisión del dominio de la cosa del depositante al depositario y, por ello, este
asume la obligación de devolver cosas de la misma calidad y cantidad.

Aun cuando se refieren a cosas fungibles, si ellas son entregadas a “saco cerrado” el depósito deja
de ser irregular y se somete al régimen general, con la consiguiente obligación de devolver la
misma e idéntica cosa. La real razón por la que el depósito es regular reside en que versa sobre el
saco o casa, el cual deberá ser restituido, sin abrir y sin interesar que dentro haya cosas
consumibles o no consumibles.

e. deposito necesario:

Art. 1368: “es deposito necesario aquel en que el depositante no puede elegir la persona del
depositario por un acontecimiento que lo somete a una necesidad imperiosa, y el de los efectos
introducidos en los hoteles por los viajeros. “
La ley nos da una característica general del depósito necesario: la existencia de un acontecimiento
de fuerza mayor que someta a la persona a una necesidad imperiosa de entregar sus bienes a otra,
sin la posibilidad de elegirla. El problema de si ha existido o no necesidad de hacer el deposito es
cuestión analizada por la apreciación judicial.

Curiosidades:

1. es válido el depósito hecho a personas adultas con capacidad restringida. Mientras el


depositante no sea una persona menor a 13 años o que hubiera sido declarada incapaz
judicialmente, el depósito será válido. También es válido aunque el representante legal o
el apoyo no lo haya autorizado e incluso aunque se haya opuesto. A su vez, el depositario
con tal afectación queda responsable por todas las consecuencias del depósito.
2. Para acreditar el depósito necesario se admite toda clase de pruebas, incluso la de
testigos, porque las circunstancias en las que se presume el hecho son de tal naturaleza
que no permiten al depositante juntar pruebas documentales.

f. eximentes de responsabilidad

Art. 1371: “el hotelero no responde si los daños o perdidas son causados por caso fortuito o fuerza
mayor ajena a la actividad hotelera.

Tampoco responde por las causas dejadas en los vehículos de los viajeros.”

La responsabilidad del hotelero es claramente objetiva, con el único eximente del caso fortuito o
fuerza mayor en tanto no sean ajenos a la actividad hotelera.

Según la norma bajo comentario el hotelero no responde por el caso fortuito o fuerza mayor.
Dicho eximente solo puede invocarse si refiere a un hecho que no ha podido ser previsto o que
previsto no ha podido ser evitado, pero siempre que sea ajeno a la actividad hotelera. Ello es por
el art. 1733 inc. E que dice que el caso fortuito no opera como eximente de responsabilidad
cuando constituye una contingencia propia del riesgo de la cosa o la actividad.

Se refiere a que el hotelero asume el riesgo que es propio del servicio que presta y se exime
cuando el evento es externo a su actividad. Respecto del incendio: el que se genere en el propio
hotel no obra como eximente, cualquiera fuese su causa.

En el caso de robo a mano armada, se entiende que el empresario en caso del hotelero, debe
adoptar las medidas de seguridad y prevención necesarias en función de su actividad, controlando
el correcto funcionamiento de los mecanismos de seguridad implementados y la capacitación del
personal en que delega la efectiva vigilancia, en cuyo caso la sustracción de los bienes depositados
no puede ser considerado imprevisible, teniendo en cuenta a la reiteración con la que suele
comete tal actividad delictiva.

El articulo en su segundo párrafo da la solución de excluir a tales efectos de la responsabilidad del


hotelero sobre los bienes dejados en el interior del auto, ya que la obligación de guarda solo
alcanza al vehículo (y sus partes constitutivas) pero no influye aquellos elementos que, por olvido
y negligencia, el pasajero deja en el interior del mismo. Esta limitación de responsabilidad no rige
en los garajes y playas de estacionamiento (art. 1375).

g. establecimientos asimilables

Art. 1375: “las normas de esta sección se aplican a los hospitales, sanatorios, casas de salud y
deporte, restaurantes, garajes, lugares y playas de estacionamiento y otros establecimientos
similares que prestan sus servicios a titulo oneroso.

La eximente prevista en la última frase del artículo 1371 no rige para los garajes, lugares y playas
de estacionamiento que prestan sus servicios a titulo oneroso.”

Así ocurre con establecimientos asistenciales o deportivos y con los restaurantes, donde
ciertamente la obligación de guarda y custodia resulta ser un deber accesorio o secundario de
conducta respecto a lo que constituye la prestación principal.

En el caso de los garajes, lugares y playas de estacionamiento, cuando lo acordado por las partes
refiere exclusivamente a esa finalidad de guarda, deberá la relación ser calificada derechamente
como depósito, si bien sometida al estatuto especial previsto respecto de responsabilidad de los
hoteleros por los efectos introducidos por los viajeros.

El art. 1375 determina la aplicación de las reglas del depósito necesario a todos los
establecimientos que anuncia en tanto presten sus servicios a titulo oneroso. Pero, la onerosidad
del servicio no se ve incluida al regular la responsabilidad del hotelero por los efectos introducidos
por los viajeros.

La gratitud del estacionamiento (en los shopping, cines, etc.) no exime de responsabilidad al
establecimiento en tanto dicho servicio adicional de guarda no es ofrecido en forma desinteresada
sino para su propio beneficio, pues trae aparejado un incremento de la afluencia de público y
además cabe presumir que su costo ha sido trasladado al precio de los bienes comercializados.
Incluso si el potencial comprador ingresara al establecimiento y no realizara ninguna compra, pesa
igualmente sobre quien lucra con esos consumidores potenciales el deber de guarda y custodia de
los vehículos estacionados. Distinta será la situación si se demuestra que el damnificado había
estacionado en una playa afectada a un establecimiento comercial para trasladarse a un sitio
distinto, en cuyo caso no cabria responsabilizar al dueño del establecimiento.

Sin perjuicio de lo establecido en las normas, se ha sostenido la aplicación del estatuto especial del
consumidor para integrar dicha normativa y eventualmente resolver los supuestos dudosos que
eventualmente se presenten. En tal sentido, la responsabilidad del hipermercado por la
sustracción del automotor de su playa de estacionamiento, surge por la relación genérica de
consumo que comprende el uso de dicho estacionamiento, ya que quien ubica su vehículo aquí lo
hace con la finalidad de adquirir bienes y servicios.
Los supuestos que menciona el artículo son:

a) Centros de salud: “hospitales, sanatorios y casas de salud”. La previsión es amplia, ya que


cuando alude a casas de salud debe entenderse por ello a geriátricos, laboratorios y
cualquier otro que proponga alguna prestación vinculada a la salud. Si fuesen hospitales
públicos amerita un tratamiento aparte, ya que no es un vínculo contractual y tampoco es
prestado a titulo oneroso.
Tiene similitudes con el hospedaje.
b) Centros o entidades deportivas: lo que dejen en vestuarios u otras dependencias del club
tienen idéntica protección que la que se confiere a los viajeros en los hoteles. La
responsabilidad es objetiva y también debe incluir los vehículos estacionados en los
lugares del establecimiento. Debe ser a titulo oneroso, como los gym o alquiler de
canchas.
Si se tratara de un club organizado como asociación civil sin fines de lucro, la relación del
asociado con la entidad no puede ser reputada a titulo oneroso, y deberá estarse a las
reglas generales de la responsabilidad civil.
c) Restaurantes: son aplicables todas las normas anteriormente mencionadas, cuando el
estacionamiento no pertenece al restaurante, habría que determinar el vinculo entre el
garaje y el restaurante, mas si se ofrece la asunción del costo de la guarda del vehículo o
alguna bonificación al respecto.
d) Garajes, lugares y playas de estacionamiento: esta aclaración es vaga, y permite incluir
distintos tipos de variantes del contrato de garaje, en tanto los servicios sean prestados a
titulo oneroso. Hay varios tipos:
1. Alquiler de espacios para estacionar en edificios de propiedad horizontal o
cocheras individuales. Cuando la relacion consiste en que se pague un precio por
el uso y goce de una cosa, como ocurre con el simple alquiler de un espacio,
estamos frente a una locación de cosas y no ante un contrato de garaje.
2. Estacionamiento medido en la via publica. Están exentos de la responsabilidad de
guarda propia de garajista. Ya que el servicio solo supone la posibilidad del uso
exclusivo, por tiempo limitado, de un espacio publico a cambio de un precio.
3. Garajista profesional. Es la prestación del servicio de garaje de forma onerosa y a
través de una organización empresarial.
e) Otros establecimientos similares: el art. 1375 incluye aquellos establecimientos que
guarden similitud con los expresamente enunciados.

Solo se exime ante el caso fortuito o la fuerza mayor ajena a la actividad (1371) y las clausulas de
exoneración de responsabilidad carecen de todo valor (1374).

En cuanto al robo o asalto a mano armada, la jurisprudencia se ha expedido en el sentido de que


no exime de responsabilidad al garajista, puesto que no puede ser reputado fuerza mayor o caso
fortuito, al constituir un riesgo propio de la actividad que realiza de manera onerosa y por ello
debe tomar las medidas de seguridad necesarias para impedir o al menos dificultar el acto
previsible del oficio.
h. casa de depósito

Sección 4°

responsabilidad: Art. 1376: “los propietarios de casas de depósito son responsables de la


conservación de las cosas allí depositadas, excepto que prueben que la perdida, la disminución o la
avería ha derivado de la naturaleza de dichas cosas, de vicio propio de ellas o de los de su
embalaje, o de caso fortuito externo a su actividad.

La tasación de los daños se hace por los peritos arbitradores.”

Deberes: Art. 1377: “los propietarios mencionados en el articulo 1376 deben:

a) Dar recibo por las cosas que le son entregadas para su custodia, en el que se describa su
naturaleza, calidad, peso, cantidad o medida;
b) Permitir la inspección de las cosas recibidas en depósito al depositar y a quien este
indique.”

Casas de depósitos, responsabilidad del depositario: el art. 1376 determina reglas específicas de
responsabilidad respecto al propietario de casas de depósito (establecimientos que se dedican a la
guarda y custodia de toda clase de mercadería u objetos. Debe tener un cuidado activo que
incluye, por ejemplo, la temperatura necesaria para la maduración o conservación de los
elementos depositados.

Tiene solo estas eximidades:

a) Daño derivado de la naturaleza de la cosa depositada: en tal caso la pérdida o disminución


son consecuencias de la propia índole de los efectos depositados, ello siempre que el
depositario no haya asumido también obligaciones específicas de conservación y
mantenimiento y su incumplimiento haya derivado en los daños verificados.
b) Daño derivado del vicio propio de la cosa depositada: en este caso no es un deterioro
propio de la cosa (natural), sino un vicio interno de la cosa que ya portaba antes de ser
depositada.
c) Daños derivado del embalaje: en caso de que la cosa haya sido entregada en bultos,
contenedores u otras formas de embalaje y estos sean impropios o defectuosos, los daños
que de ello se deriven son atribuibles al depositante, en tanto el acondicionamiento de las
cosas depositadas estuvo a su cargo
d) Caso fortuito externo a la actividad
BOLILLA 10: CONTRATOS DE GARANTIA, PREVISION Y
RECREACION.
1. a. fianza. Concepto. Disposiciones generales

Concepto: Art. 1574: “hay contrato de fianza cuando una persona se obliga accesoriamente por
otra a satisfacer una prestación para el caso de incumplimiento.

Si la deuda afianzada es de entregar cosa cierta, de hacer que solo puede ser cumplida
personalmente por el deudor, o de no hacer, el fiador solo queda obligado a satisfacer los daños
que resulten de la inejecución.”

La norma revela que la fianza es un contrato, pues se necesita el acuerdo de voluntades entre el
fiador y el acreedor, cuyo crédito es garantido. No se requiere el consentimiento del deudor
afianzado, aunque él es (por lo común) el principal interesado en la fianza, ya que sin ella la otra
parte no se arriesgara a contratar.

Caracteres:

a) Normalmente unilateral y gratuito, solo crea obligaciones para el fiador


b) Accesorio, ya que primero debe de existir una obligación principal, a la cual está
subordinada la del fiador
c) Genera una obligación subsidiaria, solo puede hacerse efectiva cuando se ha hecho
infructuosamente excusión de los bienes del deudor principal, salvo se trate de una fianza
solidaria o de una fianza principal pagador
d) Consensual, basta el mero acuerdo de las partes para que exista el contrato
e) Formal, debe ser hecho por escrito
f) Nominado, porque está expresamente regulada por el código
g) Aleatorio, ya que el fiador no sabe a ciencia cierta al contratar si tendrá que afrontar o no
la perdida

b. obligaciones que pueden ser afianzadas

Art. 1577: “puede ser afianzada toda obligación actual o futura, incluso la de otra fiador.”

Este artículo se refiere a las obligaciones presentes o futuras, que regula la fianza dada a una
obligación precisa y determinada.

Denominaremos a esta fianza, “fianza particular”.

Las obligaciones presentes nunca significo un inconveniente para poder ser afianzada, pero el
afianzamiento de una obligación futura sí, ya que aunque el objeto fuese determinado, la
incertidumbre del crédito futuro y la indeterminación de su cifra final dejaban al fiador en una
situación de clara vulnerabilidad.

La norma prevé que se puede afianzar la obligación de otro fiador. Dando marco a dos opciones
diferentes:

1. Aquella en la cual un tercero celebra un contrato con el acreedor, en el cual le garantiza el


cumplimiento de la obligación asumida por el fiador principal
2. Aquella en la cual es el fiador el que celebra el contrato con un tercero, para que este
afiance el cumplimiento del deudor principal

c. fianza general (fianza ómnibus)

Art. 1578: “es válida la fianza general que comprenda obligaciones actuales o futuras, incluso
indeterminadas; en todos los casos debe precisarse el monto máximo al cual se obliga el fiador.
Esta fianza no se extiende a las nuevas obligaciones contraídas por el afianzado después de los
cinco años de otorgadas.

La fianza indeterminada en el tiempo puede ser retractada, caso en el cual no se aplica a las
obligaciones contraídas por el afianzado después que la retractación sea notificada por el
acreedor.”

Con la fianza general, el nuevo código pretende garantizar las obligaciones presentes o futuras e,
incluso, indeterminadas, siempre y cuando se consigne el monto máximo por el que se obliga el
fiador.

La fianza general admite también el afianzamiento de obligaciones indeterminadas, pero en todos


los casos es imprescindible precisar el monto máximo de la garantía.

Se pretende apuntar a un grupo de negocios que tengan entre si alguna relación profesional o de
otro tipo, que los conviertan en algo homogéneo, y que parece estar acotado a aquellos negocios
vinculados con obligaciones generadas en la actividad bancaria o financiera.

La manera de neutralizar el riesgo del afianzamiento por obligaciones indeterminadas es


imponiendo el deber de precisar el monto máximo que se garantiza. Por lo que, por mas
indeterminado que este el objeto, el fiador tendrá certeza del alcance de su responsabilidad.

La norma aclara que la fianza no se extiende a las nuevas obligaciones contraídas por el afianzado
después de cinco años de otorgada. Claro es que si el deudor contrajo la deuda antes de que
transcurriera ese plazo, que la circunstancia de que su incumplimiento fuese posterior no obsta a
que el acreedor pueda ejecutar al fiador.
El fiador de una obligación indeterminada puede retractar la fianza, en cuyo caso no responderá
por las obligaciones contraídas por el afianzado después de que el fiador haya notificado al
acreedor de la retractación. El fiador solo podrá liberarse si acredita que el tercero conocía la
retractación, ya que la buena fe se presume y deberá entenderse por cierto que el tercero la
ignoraba (si así lo alegase).

d. formas

Art. 1579: “la fianza debe convenirse por escrito.”

La necesaria protección del fiador obliga a considerarla como una forma solemne relativa.

Los contratos formales solemnes relativos son aquellos en donde el incumplimiento de la forma no
permite alcanzar enteramente el fin querido por las partes pero el negocio no es nulo, pues vale
como un contrato por el cual las partes se obligaron a cumplir con la formalidad expresada.

e. efectos entre fiador y el acreedor y entre el deudor y el fiador

Sección 2°: efectos entre el fiador y el acreedor

Beneficio de excusión:

Art. 1583: “el acreedor solo puede dirigirse contra el fiador una vez que haya excutido los bienes
del deudor. Si los bienes excutidos solo alcanzan para un pago parcial el acreedor solo puede
demandar al fiador por el saldo.”

El beneficio de excusión es el derecho que goza el fiador de exigir al acreedor que excuta o ejecute
los bienes del deudor antes de que agreda sus propios bienes. Si bien el acreedor puede reclamar
directamente al fiador el cumplimiento de la obligación principal, se expone a que este le oponga
el beneficio de excusión y paralice su pretensión hasta que ejecute de manera efectiva la totalidad
de los bienes del deudor principal (es una excepción dilatoria).

El acreedor no puede negarse a percibir un pago parcial del deudor como consecuencia de la
ejecución de sus bienes y solo podrá demandar al fiador por el saldo.

Supuestos de deudores principales solidarios: cuando varios deudores principales se han obligado
solidariamente y solo uno de ellos ha dado fianzas, el fiador no solo tendrá derecho a que se
excutan previamente los bienes del afianzado, sino también los de todos los otros deudores. Es
una solución de equidad que obliga a los deudores a pagar antes que el fiador y es una
consecuencia lógica del carácter subsidiaria de la fianza (hasta tanto no se ejecuten los bienes de
todos los deudores solidarios no podrá agredirse al fiador de uno de ellos).

Fiador del fiador: “el que afianza a un fiador goza del beneficio de excusión respecto de este y del
deudor principal” (art. 1585, párrafo 2). El acreedor deberá ejecutar en primer termino al deudor
principal, luego al primer fiador y recién entonces esta en condiciones de dirigir su acción contra el
segundo fiador (también llamado subfiador).

La subfianza podrá ser simple o solidaria y el subfiador tendrá los mismos derechos y obligaciones
que la ley establece para el fiador principal. Aunque el fiador no goce del beneficio de excusión, no
hay obstáculo alguno para que lo tenga el subfiador.

Casos en que el fiador carece del beneficio de excusión:

 el fiador no puede invocar el beneficio de excusión si el deudor principal se ha presentado


en concurso preventivo o ha sido declarada su quiebra. La quiebra implica que el pasivo
del deudor es superior a su activo, el efecto principal que trae el decreto de quiebra es el
desapoderamiento de todos los bienes del deudor, pasando todos a integrar la masa de
quiebra y quedando en manos de los acreedores. En este caso, el acreedor queda sin
posibilidad de ejecutar los bienes del deudor, por lo que puede ir directamente con el
fiador.
 Tampoco puede invocar cuando el deudor no puede ser demandado judicialmente en el
territorio de nuestro país. La persona que afianza al deudor que no puede ser
demandando en la república sabe que no podrá oponer esta excepción y no puede alegar
su ignorancia
 Tampoco puede invocar cuando el deudor carece de bienes en la república. Se busca que
el acreedor no tenga que hacer un esfuerzo excesivo, como seria buscar los bienes del
deudor en el exterior.
 Tampoco cuando lo ha renunciado expresamente. Esta renuncia debe ser clara.
 Aunque el art. 1584 no lo mencione expresamente, el beneficio de excusión tampoco es
invocable cuando se trate de fianzas solidarias y principal pagador.

Beneficio de división: Art. 1589: “si hay más de un fiador, cada uno responde por la cuota a que se
ha obligado. Si nada se ha estipulado, responden por partes iguales. El beneficio de división es
irrenunciable.”

El beneficio de división es el derecho de cada fiador de pagar solamente la parte proporcional de


la deuda, en caso de incumplimiento del afianzado, ello impide al acreedor exigir a ninguno de los
fiadores sino la cuota que le corresponda. Los fiadores contraen una obligación simplemente
mancomunada.

Excepciones que puede poner oponer el fiador: Art. 1587: “el fiador puede oponer todas las
excepciones y defesas propias y las que correspondan al deudor principal, aun cuando este las haya
renunciado”.

El hecho de que el deudor renuncie a invocar una excepción o defensa propia, no puede obstar a
que el fiador haga valer tal excepción o defensa, resulta inadmisible que el deudor principal
empeore la situación del fiador. El fiador podrá invocar cualquier causa de liberación o de nulidad
o rescisión de la obligación, que hubiese sido renunciada por el deudor.
Intervención en el juicio entre acreedor y deudor: el fiador puede ser demandado junto con el
deudor o citado como tercero, en ambos casos deberá oponer todas las excepciones que tenga
pues la consecuencia del juicio será que la sentencia tendrá los efectos de la cosa juzgada contra el
y, en segundo caso, que no podrá oponer en una posterior acción las defensas que omitió deducir
en esta.

Subsistencia del plazo otorgado al deudor. El art. 1586 establece que el fiador cuenta con todo el
plazo otorgado al deudor principal para cumplir con la obligación, aun en el caso de que este
hubiera presentada en concurso preventivo o se hubiera declarado en quiebra. Para eludir esta
disposición el acreedor deberá convenirlo de manera expresa.

La norma se dirige a los contratos de tracto sucesivo. Cuando se trata de un contracto de tracto
sucesivo, el incumplimiento parcial del deudor no faculta al acreedor a cobrar toda la deuda al
fiador, sino que este podrá cumplir la obligación de la manera convenida, a menos que se hubiera
acordado lo contrario de manera expresa.

Relaciones entre el fiador y el deudor:

Derecho del fiador a obtener garantías suficientes del deudor:

Las obligaciones del deudor para con el fiador comienzan recién cuando este ha pagado su deudo
y el debe reintegrarle lo pagado. El art. 1594 confiere al fiador el derecho a obtener el embargo de
los bienes del deudor u otras garantías suficientes. Veamos estos hechos:

a) Cuando se le demanda judicialmente el pago al fiador. La demanda judicial promovida


revela que deberá cumplir la obligación en un corto tiempo.
b) Cuando vencida la obligación, el deudor no la cumple. El incumplimiento del deudor,
además de generar un evidente riesgo de insolvencia, agrava la situación del fiador, en
tanto comenzaran a devengarse los intereses moratorios.
c) Cuando el deudor se ha obligado a liberarlo en un tiempo determinado y no lo hace. Nada
importa si el deudor se obligo a liberar al fiador en el momento de darse la fianza o en un
acto posterior; lo que importa es el incumplimiento de la promesa
d) Cuando han transcurrido cinco años desde el otorgamiento de la fianza, excepto que la
obligación afianzada tenga un plazo más extenso. Vencido el plazo indicado, el fiador
puede trabar el embargo sobre los bienes del deudor, excepto que la obligación afianzada
tenga un plazo más extenso, sea implícito o expresamente.
e) Cuando el deudor asume riesgos distintos a los propios del giro de sus negocios, disipa sus
bienes o los da en seguridad a otras operaciones. En todos estos casos, el deudor pone
riesgo sus bienes, lo cual pone en duda la posibilidad de que el fiador pueda recuperar lo
que se vea obligado a pagar.
f) Cuando el deudor pretende ausentarse del país sin dejar bienes suficientes para el pago de
la deuda afianzada. Si ello ocurre, es claro que el fiador será perjudicado finalmente. El
mismo derecho a embargar o trabar otras medidas cautelares debe reconocerse al fiador
cuando el deudor ya se ha marchado, ya que si se lo concede cuando es solo una
expectativa, con mayor razón corresponderá otorgarlo cuando la expectativa ya esta
consumada.

Subrogación en los derechos del acreedor: Art. 1592: “el fiador que cumple con su prestación
queda subrogado en los derechos del acreedor y puede exigir el reembolso de lo que ha pagado,
con sus intereses desde el día del pago y los daños que haya sufrido como consecuencia de la
fianza.”

Subrogarse en los derechos del acreedor importa poder ejercer todas las acciones, privilegios y
garantías que el acreedor tenia contra el deudor, sin importar si tales beneficios son anteriores o
posteriores a la constitución de la fianza. El derecho del fiador existe aun en el caso de que se
hubiese obligado o hubiera pagado en contra de la voluntad del deudor.

Esta acción también comprende la acción de reembolso.

El derecho principal del fiador es a subrogarse en el derecho del acreedor para recuperar lo
efectivamente pagado. Esto significa que si el fiado ha transigido con el acreedor por una suma
menor que la realmente adeudada, su derecho se limita a lo pagado y no podrá pretender cobrar
la deuda originalmente contraída por el deudor.

Una vez pasada la acción de reembolso el fiador puede reclamar también los intereses desde el día
del pago y la indemnización de todos los perjuicios que hubiese sufrido con motivo de la fianza
(incluso daño moral).

Reclamo del fiador al deudor principal incapaz: el fiador no puede excusar su responsabilidad en la
incapacidad del deudor principal. El tema a resolver ahora es si ese fiador puede o no repetir del
deudor incapaz lo pagado.

Pago hecho por el fiador de codeudores solidarios: hay dos supuestos diferentes:

1. Cuando el fiador afianza a varios deudores que se han obligado solidariamente. Si el fiador
pago la obligación, tendrá derecho a repetir el total de lo pagado contra cualquiera de los
deudores afianzados
2. Cuando el fiador afianza a uno de esos deudores solidarios. Solo podrá repetir el total de
lo pagado contra el deudor afianzado. Con respecto al resto de los deudores solidarios,
solo podrá reclamar la parte que a cada uno corresponda

Obligación del fiador de comunicar al deudor el pago que hace: el fiador no solo debe comunicar el
pago que ha hecho, sino también el que propone hacer.

f. cofiadores

El cofiador que cumple la obligación accesoria en exceso de la parte que le corresponde, queda
subrogado en los derechos del acreedor contra los otros cofiadores.
Cuando hay más de un fiador, es necesario establecer la relación que existe entre ellos. Depende
de si renunciaron o no a su derecho de división. Si renunciaron deben la totalidad, mas allá de la
acción de repetición que tengan contra los restantes cofiadores. Si no renunciaron, deben la parte
correspondiente de la deuda al acreedor.

si un fiador resulta insolvente, la pérdida es soportada por los cofiadores, incluso el que realiza el
pago, hay que diferenciar entre fiadores simplemente mancomunados y solidarios, según si algún
fiador ha pagado al acreedor o todavía nadie lo ha hecho.

Si nadie pago todavía, y los fiadores se han obligado de manera simplemente mancomunada, la
obligación de cada uno de ellos se limita al pago de su parte correspondiente, por lo que la
insolvencia de uno es absorbida directamente por el acreedor. En cambio si se obligaron
solidariamente, aunque nadie haya pagado aun, responden por el fiador insolvente y su parte
proporcional se divide entre ellos.

Si uno de los fiadores ha pagado la totalidad de la deuda, y su obligación es simplemente


mancomunada, tiene derecho a reclamar lo pagado en exceso a los restantes cofiadores, pero si
uno resultara insolvente, recae sobre la cabeza de quien pago en exceso. Si el fiador solidario ha
pagado la totalidad de la deuda, es razonable que pueda repetir contra sus cofiadores la parte
proporcional, mas la parte del cofiador insolvente.

g. extinción

Existen varios supuestos:

a) Extinción de la obligación principal. Extinguida la obligación principal por cualquiera de los


medios legales (pago, compensación, novación, transacción, confusión, renuncia o
remisión de deuda, imposibilidad de pago, resolución o rescisión del contrato, etc.) queda
también extinguida la fianza, puesta que siendo una obligación accesoria, sigue la suerte
de la principal.
1. Pago: el pago de la obligación extingue la fianza siempre que sea hecha por el
deudor.
2. Prescripción: no extingue la deuda sino la acción.
3. Remisión de la deuda: la remisión de la deuda es la entrega voluntaria que el
acreedor hace al deudor del documento en donde consta la deuda, produce los
efectos de pago y por lo tanto extingue la obligación principal.
4. Compensación: el deudor principal puede oponer al acreedor la compensación de
su deuda con la del crédito que él tenga contra el propio acreedor, pero no podrá
oponer la compensación de su deuda con la que el acreedor tenga con su fiador.
b) Por haber ocurrido cualquiera de las causas enumeradas en el art. 1596: “la fianza se
extingue por las siguientes causales especiales:
A. Si por hecho del acreedor no puede hacerse efectiva la subrogación del fiador en
las garantías reales o privilegios que accedían al crédito al tiempo de la
constitución de la fianza
B. Si se prorroga el plazo para el cumplimiento de la obligación garantizada, sin
consentimiento del fiador
C. Si transcurren cinco años desde el otorgamiento de la fianza general en garantía
de obligaciones futuras y estas no han nacido
D. Si el acreedor no inicia acción judicial contra el deudor dentro de los sesenta días
de requerido por el fiador o deja perimir la instancia.”

NOVACION: Art. 1597: “la fianza se extingue por la novación de la obligación principal aunque el
acreedor haga reserva de conservar sus derechos contra el fiador.

La fianza no se extingue por la novación producida por el acuerdo preventivo homologado del
deudor, aun cuando se haya hecho reserva de las acciones o derechos contra el fiador.”

La extinción de la fianza por novación de la deuda principal es absoluta y no puede subsistir


aunque se haya hecho esa reserva.

EVICCION: Art. 1598: “la evicción de lo que el acreedor ha recibido en pago del deudor no hace
renacer la fianza.”

La aceptación de otra cosa por el acreedor ha provocado la novación de la deuda originaria y por
ello el fiador queda definitivamente liberado aunque aquel pierda luego la cosa recibida.

2. a. renta vitalicia. Concepto. Forma.

Concepto: Art. 1599: “contrato oneroso de renta vitalicia es aquel por el cual alguien, a cambio de
un capital o de otra prestación mensurable en dinero, se obliga a pagar una renta en forma
periódica a otro, durante la vida de una o más personas humanas ya existentes, designadas en el
contrato.”

El contrato oneroso de renta vitalicia obliga a una de las partes a entregar a la otra un capital
(dinero o bienes) a cambio de lo cual este asume el compromiso de pagar una renta durante la
vida de una persona o más personas designadas en el contrato. Nada se opone a que haya una
renta vitalicia gratuita, en cuyo caso deberán aplicarse análogamente las disposiciones de la
donación.

Caracteres:

1. Oneroso, las ventajas hacia una de las partes le son concedidas a cambio de otra
prestación
2. Bilateral, ambas partes se obligan recíprocamente.
3. Aleatorio, las ventajas o desventajas dependen de un acontecimiento incierto
4. Tracto sucesivo, la obligación del deudor se prolonga en el tiempo y se cumple
periódicamente
5. Consensual, porque se perfecciona por el solo acuerdo de voluntades
6. Formal, la ley exige la instrumentación por escritura publica
7. Nominada, regulada por el código (Art. 1599 y sgtes)

FORMA: art. 1601: “el contrato oneroso de renta vitalicia debe celebrarse en escritura pública.”

Se establece la necesidad de que el contrato sea formalizado mediante escritura pública. Si el


capital transmitido fuera un inmueble, se regirá por la regla general del artículo 1017 inciso A
(forma, escritura pública, inmuebles). Cualquiera fuera la naturaleza de los bienes objeto del
contrato, deberá formalizarse por escritura pública en virtud del artículo 1017 inc. D, el cual dice
que deberán ser hechos por obra pública todos los contratos que las partes o la ley así lo
dispongan.

El contrato de renta vitalicia estará encuadrado dentro de la categoría de los contratos formales,
por tanto no producirá sus efectos propios mientras no se hubiera otorgado la formalidad
requerida. Dado que en el código no establece la figura de la sanción de nulidad, resulta aplicable
el artículo 1018 que opera la conversión del contrato en otro que genera la obligación de ambas
partes de otorgar el instrumento requerido.

b. reglas subsidiarias

Art. 1600: “si el contrato es a favor de tercero, respecto de este se rige en subsidio por las reglas de
la donación, excepto se haya convenido en razón de otro negocio oneroso.”

Este articulo contempla el supuesto en que el beneficiario de la renta es una persona distinta de
quien ha entregado el capital (se estipula a favor de terceros).

El contrato de renta vitalicia puede obligar al deudor de la renta a pagarla a la misma persona que
le ha transmitido le capital, en cuyo ambos revestirán recíprocamente los caracteres de deudor y
acreedor, pero puede darse el caso en que se establezca que la renta debe ser pagada a una
persona distinta de aquella que ha entregado el capital. En este caso, el contrato hace surgir un
derecho a favor de un tercero beneficiario.

La ley presume que el constituyente de la renta (estipulante en el contrato a favor de terceros) ha


realizado un sacrificio (la entrega del capital) para que la ventaja sea recibida por otro. El código
presume que en este supuesto se ha configurado una liberalidad a favor de un tercero por lo cual
deben aplicarse supletoriamente las normas sobre el contrato de donación.

La aplicación subsidiaria implicara valorar la capacidad del estipulante según las reglas del art.
1548 (capacidad para donar) y el art. 1549 (para aceptar donaciones). También debe tenerse en
cuenta las prohibiciones del art. 1550 (prohibiciones de donación) para quienes han sido tutores o
curadores reciban donaciones de sus pupilos hasta tanto no se haya operado la rendición de
cuentas. Este contrato no puede bajo apariencia de onerosidad encubrir la disposición de un bien,
que si fuera por donación podría atacarse mediante acciones de colación o reducción, con la
finalidad de que quien no pudo ser beneficiario en calidad de donatario reciba a titulo de renta el
valor del mismo bien (inoficiosidad de las donaciones art. 1565).

La anulación del beneficio a favor del tercero no implicara la nulidad del contrato, ya que el
deudor de la renta deberá cumplir su obligación a favor del constituyente de la misma.

Claro que también el mencionado artículo deja la puerta abierta la posibilidad de que la
vinculación entre el estipulante (constituyente de la renta) y el beneficiario exista otra relación de
carácter oneroso que excluye la calificación de “liberalidad”. Mediante este procedimiento, puede
retribuirse el servicio que el beneficiario ha prestado al estipulante o compensarse alguna otra
prestación de carácter oneroso que este hubiera cumplido a su favor.

c. renta. Periodicidad de pago

Art. 1602: “la renta debe pagarse en dinero. Si se prevé esta prestación en otros bienes que no son
dinero, debe pagarse por su equivalente en dinero al momento de cada pago.

El contrato debe establecer la periodicidad con que se pague la renta y el valor de cada cuota. Si no
se establece el valor de las cuotas, se considera que son de igual valor entre sí. La renta se devenga
por un periodo vencido; sin embargo, se debe la parte proporcional por el tiempo transcurrido
desde el ultimo vencimiento hasta el fallecimiento de la persona cuya vida se toma en
consideración para la duración del contrato.”

Se establece el carácter de obligación de dar dinero de la renta a abonar. El contrato debe indicar
los periodos por los que se devenga la renta y el valor de cada cuota. A falta de fijación de este se
presume la igualdad entre las distintas cuotas.

La obligación que asume el deudor de la renta constituye una obligación de dinero. Si se hubiese
pactado en otros bienes o servicios, estos podrán ser convertidos en dinero (siguiendo el régimen
del código anterior).

Cuando la renta se hubiera fijado en otro tipo de bienes, se aplicara la norma referida a la
cuantificación del valor del art. 772 (el monto deberá referirse al valor real al momento que
corresponda tomar en cuenta para la evaluación de la deuda) con el fin de fijar el monto en pesos.

Si la renta se fijara en moneda extranjera, se aplicaran los artículos 765 (si se establece dar
moneda extranjera, se deberá entender como obligación de dar cosa y el obligado puede
terminarla dando su equivalente en dinero) y 766 (el deudor debe entregar la cantidad
correspondiente de la especie designada).

En caso de que el valor real de la renta se viese disminuido sustancialmente como consecuencia de
haberse modificado por acontecimientos extraordinarios las circunstancias existentes al tiempo de
su celebración, será aplicable la teoría de la imprevisión.
Que se establezca que si la renta es en entrega de bienes, y que se fija el precio en dinero en el
momento del pago, es para mantener el valor de la renta actualizada.

Periodicidad: es un elemento esencial del contrato de renta, siguiendo los lineamientos del viejo
código. Las partes pueden pagar de forma mensual, trimestral, semestral, etc. Al fijar la
periodicidad del pago, con seguridad, las partes determinaran cual es el monto de cada una de las
cuotas. En caso de que se omitiera, la norma fija la igualdad de las cuotas entre si.

Muerte del cabeza de renta durante el transcurso de un periodo.

Viejo código: Si la renta se había pagado por adelantada, y la muerte del cabeza de renta ocurría
durante el periodo pagado por adelantado, lo pagado quedaba a favor del acreedor.

Nuevo código: el deudor deberá solo la suma que corresponda al lapso comprendido entre el
comienzo del periodo y la muerte del cabeza de renta. Si el pago fue efectuado por adelantado, el
beneficiario deberá reintegrar la suma cobrada de más.

d. pluralidad de beneficiarios

Art. 1603: “la renta puede contratarse en beneficio de una o más personas existentes al momento
de celebrarse el contrato, y en forma sucesiva o simultanea. Si se establece para que la perciban
simultáneamente, a falta de previsión contractual, les corresponde por partes iguales sin derecho
de acrecer.

El derecho a la renta es transmisible por actos entre vivos y por causa de muerte.”

Nada obsta que el contrato de renta vitalicia se celebre a favor de más de una persona. Cualquier
combinación es posible.

Si se establece que la percepción del beneficio será sucesiva, habrá que fijar cual es el término
durante el cual la cobrara el primero. En rentas establecidas a favor de terceros con finalidad de
prestarles asistencia, puede ser el caso en que se establezca a favor de varios hermanos en forma
sucesiva, extinguiéndose respecto de cada uno a determinada edad. También que la cobren en
manera simultánea mientras todos sean menores de edad (si alguno fuera cabeza de la renta, la
muerte de este produciría la extinción del derecho de renta de todos).

A falta de estipulación, los beneficiarios son simultáneos y no sucesivos.

Como consecuencia del contrato, el beneficiario de la renta ha incorporado a su patrimonio el


derecho a la percepción de dicha renta. Si el beneficiario ha tenido por finalidad satisfacer sus
propias necesidades, es probable que se haya considerado su propia vida para fijar el plazo de la
renta. En cambio, si la duración del contrato no depende de la vida del beneficiario y este fallece
antes, sus herederos adquirirán el derecho a percibir la renta. Nada obsta que se estipule lo
contrario.
No existe impedimento legal alguno para que exista una transferencia del derecho. El código
anterior establecía la nulidad de la clausula que prohibiera al acreedor ceder la renta, pero el de
ahora no mencionada nada, por lo que se entiende que pueden convenirse clausulas que
restrinjan esta posibilidad.

e. acciones

ACCION DEL CONSTITUYENTE O SUS HEREDEROS:

Art. 1604: “el que entrega el capital, o sus herederos, pueden demandar la resolución del contrato
por falta de pago del deudor y la restitución del capital.

En igual caso, si la renta es en beneficio de un tercero se aplica lo dispuesto en el art. 1027.”

Se establece la aplicación a este contrato de la resolución legal por incumplimiento o clausula


comisoria tacita que permitirá que el constituyente de la renta pueda ante la falta de pago de la
renta optar entre la demanda por incumplimiento o la resolución del contrato. En este caso podrá
requerir la restitución del capital entregado. Respecto de la renta vitalicia que tenga por
beneficiario a un tercero distinto al constituyente de la renta, el tercero tendrá la facultad de
demandar el cumplimiento del contrato. La facultad de resolver el contrato solo la tendrá el
constituyente.

Si el deudor de la renta incumple su obligación frente al tercero que ha sido beneficiario de esta
sin haber sido parte del contrato es aplicable el art. 1027, en virtud del cual el tercero tendrá
facultad para demandar el cumplimiento de la prestación pero no para resolver el contrato del
cual no ha sido parte.

ACCION DEL TERCERO BENEFICIARIO:

Art. 1605: “el tercero beneficiario se constituye en acreedor de la renta desde su aceptación y tiene
acción directa contra el deudor para obtener su pago. Se aplica en subsidio de lo dispuesto en el
art. 1028.” (1028=relaciones entre las partes).

Se dispone expresamente uno de los efectos propios de la estipulación de terceros. Una vez que el
tercero acepto el beneficio nace para el una acción directa respecto del deudor. Su relación es
directa y no por subrogación del constituyente de la renta.

Existe una estipulación a favor de tercero cuando un contrato tiene una estipulación a favor de
alguien que no es parte del mismo.

El deudor de la renta podrá oponer al tercero excepciones resultantes del mismo contrato u otras
que se funden en otras relaciones que mantenga con el.

f. extinción
El contrato se extingue por las sgtes causas:

1. Fallecimiento de aquel cuya vida determina la duración del comisario. Concluye


naturalmente el contrato oneroso de renta vitalicia por el fallecimiento de la persona cuya
vida ha sido tomada en cuenta en el acuerdo.
2. Conclusión del contrato por resolución: puede ser por:
A. Falta de pago, al constituyente o a sus herederos, le da derecho a estos a
demandar la resolución del contrato y en tal caso la restitución del capital
constituyente.
B. No otorga las garantías (el deudor de la renta) a las que se comprometió o si la
garantía dada disminuye y no cubre sus obligaciones conforme lo acordado.
C. También se resuelve si la persona cuya vida se toma en consideración para la
duración del contrato, no es el deudor de la renta y dentro de los 30 días de
celebrado el contrato fallece por propia mano (suicidio) o por una enfermedad
que padecía al momento de celebrarse el contrato. En este supuesto, el contrato
de renta vitalicia se resuelve de pleno derecho y deben restituirse las
prestaciones. Una enfermedad sobrevenida después o un accidente que
ocasionen la muerte, son ineficientes para provocar la resolución del acuerdo.

¿Qué sucede cuando el deudor de la renta mata al constituyente acreedor cuya vida ha sido
tomada en cuenta para la duración del contrato? La doctrina entiende que el crimen ha hecho
cesar el cumplimiento del contrato por culpa del deudor, los herederos del acreedor pueden
reclamar los daños derivados de este incumplimiento, a cuyo fin habrá que calcular las rentas que
pudo percibir el fallecido (tomando en cuenta su vida probable). Claro que esto aplica a cuando la
persona actúa con dolo, ya que si el deudor medio con culpa, el fallecimiento debe considerarse
accidental y el deudor queda liberado de seguir pagando la renta.

El contrato será de ningún efecto si la persona cuya vida sirvió de base para fijar la duración de la
renta no existía el día de la formación del contrato, no importa si no existía o si dejo de existir (no
está regulado expresamente en nuestro código, si en el derogado).

3. a. juegos y apuestas. Concepto

Capitulo 25: contratos de juego y de apuesta

Art. 1609: “hay contrato de juego si dos o mas partes compiten en una actividad de destreza física
o intelectual, aunque sea solo parcialmente, obligándose a pagar un bien mesurable en dinero a la
que gane.”

La definición del contrato de juego hace referencia al acuerdo de voluntades vinculado a la


interacción entre las partes en relación a una actividad de destreza física o intelectual, que genera
para el perdedor la obligación de pagar un bien que pueda ser medido en dinero.
No está de mas señalar que los contratos de juego y apuesta son bilaterales (las partes se obligan
recíprocamente, aunque podría ser plurilateral), onerosos (ya que la celebración del contrato de
juego prevé el cumplimiento de una obligación de dar un bien mensurable en dinero) y aleatorios
(en tanto las ventajas o perdidas dependen de un hecho futuro e incierto respecto del momento
en que se los celebro). También debemos aclarar que es un contrato no formal (Art. 969) y
nominado (Art. 970).

El artículo menciona que pueden nacer obligaciones exigibles de la competencia física o


intelectual. El antiguo código regulaba en cambio, solo lo relacionado a destreza física.

Nuestra doctrina distingue entre 3 tipos de juegos, dependiendo de su regulación:

1. Juegos tutelados: los regulados entre los artículos 1609 y 1610 del código, que son
aquellos que requieren alguna destreza física o intelectual entre los participantes, los
cuales generan una obligación exigible judicialmente
2. Juegos tolerados: aquellos que no generan obligaciones exigibles, pero para los cuales se
prevé la irrepetibilidad de lo pagado
3. Juegos prohibidos: aquellos a los que no se reconoce ningún efecto jurídico valido entre
las partes

b. facultades del juez

Art. 1610: “el juez puede reducir la deuda directamente originada en el juego si resulta
extraordinaria respecto a la fortuna del deudor.”

La potestad de reducir la deuda por parte del juez ya se encontraba en el código derogado. Esta
norma se inspira en la equidad y protección de la persona en todas las actividades desligadas en la
esfera de la vida privada. Apunta a la necesidad de evitar el sobreendeudamiento y también el
abuso de derecho.

El juez debe evaluar: el tipo de juego implicado, el patrimonio del deudor y el monto de la deuda
del juego en cuestión.

c. acción para exigir su cumplimiento

d. oferta publica

Art. 1612: “las apuestas y sorteos ofrecidos al publico confieren acción para su cumplimiento.
El oferente es responsable frente al apostador o participante. La publicidad debe individualizar al
oferente. Si no lo hace, quien la efectúa es responsable.”

El artículo busca proteger a quien participa en sorteos y apuestas ofrecidos al público. Se


responsabiliza al oferente frete al apostador y participante, y se establece que la publicidad debe
individualizarlo; en caso de no hacerlo, extiende la responsabilidad al que efectúa dicha
publicidad. Los contratos de juego y apuesta hoy suelen utilizarse como contratos accesorios de
otros contratos (compraventa, locación, mutuo, etc.) con la finalidad de incentivar el consumo y,
como tal, se han constituido en un medio legitimo para favorecer el intercambio en el mercado.

Los sorteos y apuestas realizados por oferta pública se asocian a la oferta de algún producto o
servicio y se utilizan como incentivo para el consumo de bienes o servicios; por lo que podemos
decir que constituye un modo de captar clientes, y cuando esto ocurre, se trata de una relación de
consumo. El apostador se encontrara en una posición de vulnerabilidad, por lo que la norma viene
a brindar un equilibrio a la relación entre las partes, dando herramientas de protección al sujeto
que puede ser vulnerable.

El régimen protectorio general en materia de relaciones de consumo parece aplicable, pero con la
aplicación de este nuevo apartado en el código se prevén normas protectorias mas especificas, lo
que refuerza la tutela protectora del apostador o participante

La norma brinda protección al participante o apostador en cuatro instancias:

1. Le reconoce acción judicial para exigir el cumplimiento contra el oferente de la apuesta o


sorteo
2. Responsable al oferente frente al apostador o participante
3. Se instituye el deber de individualizar al oferente en la publicidad.
4. Se responsabiliza a quien realiza la publicidad en el caso de no cumplir con la
individualización del oferente.

e. juegos y apuestas regulados por el estado

Art. 1613: “los juegos, apuestas y sorteros reglamentados por el estado nacional, provincial, o
municipios, están excluidos de este capítulo y regidos por las normas que los autorizan.”

En este caso se trata de actividades que están reguladas por normas establecidas por la
administración de carácter público. Se refiere al juego explotado, promovido y reglamentado por
el estado nacional, provincial o municipal.

Argumentos a favor de que el estado explote y reglamente los juegos de azar: parten de la premisa
de la ineficacia de las prohibiciones para erradicar el juego, por lo que se afirma que “el estado al
monopolizar la explotación de los juegos de azar, persigue encausar el juego que es propio de la
actividad humana, para contrarrestar en lo posible dos situaciones: (1) la generación de conductas
adictivas en especial en niños y jóvenes a través de estrictos controles y (2) el abuso de los
inescrupulosos que se desenvuelven en la clandestinidad, sacando provecho y beneficio de los
sectores más desprotegidos y necesitados de nuestra sociedad. Además la recaudación puede ser
destinada a la satisfacción de diversas necesidades sociales.

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