Kenia Mendoza García 178926

ENSAYO PPA 2

El video que escogí habla del estrés y la ansiedad dando a conocer que son dos
términos que se utilizan a menudo indistintamente, pero que en realidad son
diferentes. Aunque ambos pueden tener consecuencias negativas para la salud
mental y física, existen diferencias importantes entre ellos. El estrés es una
respuesta natural del cuerpo a una situación que se percibe como amenazante o
desafiante. Esta respuesta se desencadena cuando el cerebro percibe una situación
como una amenaza y libera hormonas del estrés, como el cortisol y la adrenalina y,
puede ser una respuesta temporal a una situación puntual o crónico si se prolonga
en el tiempo.

Por otro lado, la ansiedad es una respuesta emocional negativa persistente que se
experimenta en anticipación a una situación futura. La ansiedad puede ser causada
por una variedad de factores, como la preocupación excesiva, la inseguridad y el
miedo, y puede manifestarse en síntomas físicos como sudoración, palpitaciones
cardíacas y tensión muscular.

Considero que es importante diferenciar ambos conceptos ya que estos pueden

afectar negativamente la salud mental y física si se prolongan en el tiempo, y es
importante aprender a controlar adecuadamente estas respuestas emocionales.

En cuanto a las estrategias de manejo, el manejo del estrés se enfoca en la

implementación de estrategias de afrontamiento, como la meditación, el ejercicio y
la terapia cognitivo-conductual. Mientras tanto, el manejo de la ansiedad se enfoca
en el aprendizaje de técnicas de relajación, la identificación y el control de
pensamientos y emociones negativas. Cabe mencionar que ambas emociones se
pueden derivar de un momento de sufrimiento como lo es el duelo, y en una
conferencia impartida el día 12 de abril se dieron detalles acerca de las estrategias
a seguir durante este proceso:

1. Permítete sentir: Es importante permitirse sentir todas las emociones que

surgen durante el proceso de duelo. No trates de negar tus sentimientos o
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suprimirlos. Si te sientes triste, enojado, confundido o cualquier otra emoción,

permítete sentirla y procesarla.
2. Busca apoyo: Busca a alguien en quien puedas confiar, como amigos,
familiares, terapeutas o grupos de apoyo. Compartir tus sentimientos con
alguien que te escucha puede ayudarte a procesarlos y a sentirte más
conectado.
3. Cuida tu cuerpo: El duelo puede ser emocionalmente agotador y es
importante cuidar tu cuerpo para mantenerte saludable. Asegúrate de dormir
lo suficiente, hacer ejercicio y comer bien.
4. Encuentra maneras de honrar a la persona fallecida: Encuentra formas de
honrar a la persona que has perdido.
5. Busca ayuda profesional si es necesario: Un terapeuta puede ayudarte a
procesar tus emociones y a encontrar maneras de seguir adelante.

Esto va de la mano con la información que se dio en la conferencia a la que asistí

el día 19 de abril de 2023 donde se abarcó el tema de las emociones y se explicó
que estas son una parte fundamental de nuestra experiencia humana, aunque a
menudo se nos enseña a reprimirlas o negarlas, aceptarlas es esencial para nuestra
salud mental y bienestar emocional.

Aceptar nuestras emociones significa reconocerlas y darles espacio sin juzgarlas ni

criticarlas. Es importante entender que todos los sentimientos son válidos y
normales, y que no hay emociones buenas o malas. Negar o reprimir puede llevar
a la acumulación de tensión emocional y hacer que nuestras emociones se
manifiesten de formas no saludables. Por ejemplo, la represión de la ira puede llevar
a la explosión en algún momento posterior. Adicional a esto, las emociones
reprimidas pueden llevar a conflictos interpersonales y a la disminución de las
relaciones saludables. La aceptación de estas nos ayudará a aprender a
comunicarnos con los demás de manera efectiva para empezar a construir
relaciones más saludables y empáticas.