Canto de la Sibila

En todas las iglesias de la isla de Mallorca el 24 de diciembre, durante la misa del Gallo, un
muchacho o una muchacha recorre la iglesia en procesión entonando una canción litúrgica
cuyo origen se remonta a la Baja edad media y que se sigue haciendo en la actualidad, este
es el Canto de la Sibila, patrimonio inmaterial de la humanidad.

El nombre de Sibila viene de la profetisa griega y romana, que inspirada por Apolo eran
capaces de profetizar las cosas que iban a ocurrir en el futuro. Este personaje aparece en el
cristianismo como una profetisa que anuncia el juicio final.

El canto sigue la melodía gregoriana que tiene estas características:

1. El ritmo está sometido a la letra en latín
2. Sólo existe una línea melódica y se canta a capella, es decir, sin acompañamiento
instrumental. (Puede existir acompañamiento de música en los momentos en los que
las voces no cantan)
3. Todas las piezas son cantos litúrgicos, es música de iglesia.
4. Suele cantarse a coro para crear un efecto más "celestial" y profundo acompañado
por el eco de la iglesia.

Como antiguamente el latín no era una lengua de uso común, excepto por los monjes, estas
músicas se utilizaban para emocionar al fiel, conmover y sorprender. Aquí la Sibila mientras
canta porta una espada y es acompañada de dos niños que la siguen durante la procesión,
creando una imagen parecida al de un ángel anunciador.