FACULTAD DE DERECHO Y HUMANIDADES

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

“Ausencia de uno de los Deudores a causa de fallecimiento en

la Obligación Mancomunada y responsabilidad de los
herederos”

AUTORES:
Chafloque Valuis Vania
Jaramillo Monzón Zaida Edna
Rodas Fenco Jose Miguel
Ríos Cruz María Estefany
Rodriguez Airac Claudia
Zavala Coronel Angie Brigithe
(orcid.org/0000-0002-9292-5275)
(orcid.org/0000-0002-3842-4920)
(orcid.org/0000-0002-9160-5085)
(orcid.org/0000-0003-0499-2548)
(orcid.org/0000-0002-9205-1977)
(orcid.org/0000-0002-6303-8052)

ASESOR:
Dr. Merchan Gordillo Mario
Augusti (orcid.org/0000-0003-2381-
8131)

LINEA DE INVESTIGACION:
Derechos de Familia, Derechos Reales, Contratos, Responsabilidad Civil
Contractual y extracontractual y Resolución de Conflictos

LÍNEA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL UNIVERSITARIA:

Fortalecimiento de la democracia, ciudadanía y cultura de paz

CHIMBOTE - PERÚ
(2023 - I)
 ÍNDICE:

I. INTRODUCCIÓN:...........................................................................3
II. ARGUMENTACIÓN:.......................................................................5
III. CONCLUSIONES:.........................................................................11
REFERENCIAS:

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 I. INTRODUCCIÓN:

Desde que la sociedad moderna se rige por el intercambio de prestaciones, y con

ellos sus obligaciones, para esto es preciso mencionar la obligación mancomunada,
hay que aclarar que los sujetos tanto del acreedor como del deudor deben estar
compuestos por más de una personas, y que estén vinculados a una misma
obligación, cuando esto se presenta en una obligación se le identifica como
mancomunadas, teniendo como regla general, tener más de una persona en el
lugar del deudor y más de una persona en el lugar de acreedor, esto para que sea
aplicable la regla de solidaridad o la mancomunidad de obligaciones.

Una obligación mancomunada es aquella en la cual 2 a más personas se obligan

colectivamente a consumar la misma obligación. Cada obligado es responsable por
el cumplimiento total de la adeudo, pero la ausencia de uno de los deudores en una
obligación mancomunada puede generar varios desafíos y complicaciones, pueden
darse varios problemas. Al dejar un incumplimiento parcial de la obligación, deja a
los demás deudores en una situación desfavorable; esto generaría una inestabilidad
en la repartición de la obligación de la deuda entre los deudores restantes. Si los
demás deudores tienen que asumir la porción del deudor ausente, pueden resultar
perjudicados al tener que pagar más de lo acordado inicialmente, esta deuda puede
complicar el proceso de cobro para el acreedor.

La ausencia como el fallecimiento de uno de los deudores es algo que no podemos

predecir, esta ausencia no prevista puede generar conflictos entre los demás
deudores, pueden surgir disputas sobre quién debe asumir la parte proporcional del
deudor fallecido, lo cual puede dar lugar a litigios adicionales y agravar la situación y
pondría en peligro los derechos del acreedor. Esta inseguridad al acreedor de un
posible incumplimiento parcial, reparto desigual de la carga, dificultades en la
ejecución y conflictos entre los deudores restantes nos realizamos la siguiente
interrogante: ¿la ausencia de uno de los deudores de una obligación mancomunada,
a causa de fallecimiento, genera responsabilidad en los herederos?, esta situación
puede poner en peligro los derechos exigibles por el acreedor, por ello

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consideramos necesario analizar la doctrina y cómo actúa para resolver el problema
descrito.
A fin de encaminar la investigación, los autores tuvieron a bien delimitar como
objetivo general: Determinar hasta cuanto es la responsabilidad de los herederos
con respecto a la deuda del causante de una obligación Mancomunada; y como
objetivos específicos: a) Detallar los conceptos más relevantes acerca de
obligaciones mancomunadas, b) Establecer las implicancias del fallecimiento de un
deudor de obligación mancomunada y c) Describir la clase de responsabilidad de los
herederos del causante de una obligación mancomunada.

La importancia del estudio en cuestión, reside en que permite identificar,

comprender y ponderar la situación en que se pueden encontrar los herederos de un
causante, quien mediante acto inter vivos, se constituyó en un deudor de una
obligación mancomunada. Si bien es cierto, no se establece nuevas teorías, pero si,
en base a la doctrinas y legislación existentes , se realiza un análisis de utilidad
para: iniciar futuras investigaciones y como información de relevancia social.

A efectos de consolidar la doctrina en la cual se basó la investigación, a

continuación, se describen teorías relevantes para el estudio:
Las obligaciones mancomunadas, a decir que cuando estamos frente a este
supuesto, cualquier persona considerada como acreedor, siempre que aparezca
más de uno, tiene la potestad de exigir la totalidad de la prestación a la parte pasiva
que sería la deudora, pudiendo ser esta una a más personas, y de ser el caso
último, este está forzado a efectuar de manera ineludible la integridad de la
prestación. Según Manuel Faus (2022), constituyen que todos los acreedores
actúan juntamente contra la otra parte denominada deudora o deudores de ser el
caso y estos a su vez realizan de forma o manera grupal o conjunta la prestación.

A fin de dilucidar la argumentación del actual ensayo, se propuso la siguiente

hipótesis: la ausencia de uno de los deudores, a causa de fallecimiento, SI
genera responsabilidad de los herederos en la obligación mancomunada.

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 II. ARGUMENTACIÓN

Las obligaciones mancomunadas surgen cuando dos o más personas asumen de

forma conjunta una responsabilidad o deuda. En este tipo de obligaciones, los
deudores o acreedores son responsables de cumplir con la totalidad de la
obligación, esta obligación se divide entre ellos la parte proporcional
correspondiente, cada uno de los deudores está forzado a ejecutar por completo la
obligación y a esto se le llama responsabilidad solidaria, pero ninguno de ellos está
obligado a cumplir más allá de su parte proporcional. Esto significa que, si uno de
los deudores no cumple con su parte, los demás deudores deben responder por la
porción que les corresponde, según Castillo (2018).

En el tema de obligaciones mancomunadas y obligación divisible, no hay ningún

impedimento para su aplicación, ello se sustenta en lo establecido por Código Civil,
art,1182 ambas tiene la misma consecuencia jurídica, debido a que las normas de
obligación divisible es aplicada en las mancomunadas, por otro lado hay que
señalar en ciertos juristas tiene el peculiar hábito de consignar esto en sus
contratas, con la intención de una notable seguridad al meritorio, que a los obligados
se le responsabiliza “solidariamente y mancomunadamente”. Ergo, esto es una
antítesis debido a que no se puede exigir juntamente de forma coligada y asociada a
más de dos deudores, puesto a que son distintas para contraer una obligación, esto
según (Osterling, 2018, pág.317)

En ese contexto, es menester clasificar las obligaciones las obligaciones

mancomunadas; estas se subdividen en 3 tipos: Obligación divisible, el objeto o
prestación que constituye la obligación puede ser cumplido o dividido en partes
claramente identificables y separables. Cada parte de la obligación es independiente
y puede ser cumplida de manera individual por cada deudor. En este tipo de
obligación, si uno de los deudores incumple con su parte, los demás deudores no
están obligados a cubrir su porción faltante. Cada deudor es responsable
únicamente de su parte proporcional de la deuda. Además, si uno de los deudores
paga su parte, se extingue su obligación, sin que esto afecte a los demás deudores.
Los acreedores también pueden recibir la consumación de la responsabilidad de
manera fraccionada, aceptando el pago parcial de cada deudor. Otra de las
clasificaciones la

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constituye, la Obligación conjunta, cada uno de los deudores está obligado a cumplir
con la totalidad de la obligación. Sin embargo, la obligación se divide entre ellos de
forma proporcional o igualitaria, según lo acordado o establecido por la ley. En este
caso, si uno de los deudores no cumple con su parte, los demás deudores pueden
ser requeridos para pagar la porción faltante. Además, si uno de los deudores paga
la deuda en su totalidad, puede reclamar a los demás deudores que le reembolsen
su parte proporcional. Los acreedores tienen derecho a demandar a cada uno de los
deudores el acatamiento de la totalidad de la responsabilidad, pero solo pueden
recibir la parte proporcional que les corresponde. Y, por último, tenemos, la
Obligación parcial, cada uno de los deudores está obligado a cumplir con la
integridad de la obligación, pero se establece que el acreedor solo puede requerir a
cada obligado el pago de una parte determinada de la deuda. En este caso, cada
deudor tiene una obligación indivisible y no puede liberarse pagando su parte
proporcional. Si uno de los deudores paga más de su parte, no puede reclamar a los
demás deudores el reembolso de lo pagado en exceso. Sin embargo, el acreedor no
se le está permitido requerir el acatamiento de la responsabilidad a los demás
deudores por encima de la parte establecida para cada uno. Esto significa que el
acreedor solo puede recibir la parte respectiva a cada deudor y no puede exigir
más. En este contexto, es importante detallar que, acorde a la legislación las
obligaciones solidarias no son de presunción, sólo lo es el título o ley de la
obligación establecida esto en conformidad con el Art.1183 de nuestro código. En el
tema de obligaciones divisibles regulan en el art. 1172,1173 y el art. 1174 del
Código Civil Peruano se señala a este con un principio de dividir el crédito o deuda
ya que son similares, siendo una obligación menos exigente para codeudores. En la
obligación indivisible en conformidad con el art. 1175 a.1181 del Código Civil
Peruano, en cuanto a las obligaciones mancomunadas hay que señalar que se rigen
por las normas de obligación divisible.
El fallecimiento de uno de los deudores en una obligación mancomunada en el
Código Civil en los artículos 1172,1173 y 1174 regula las obligaciones divisibles,
pero las obligaciones mancomunadas solo se mencionan en el artículo 1182, donde
establece que este tipo de obligaciones se guían por las normas de las obligaciones
divisibles. En este tipo de obligaciones cada deudor es responsable únicamente por
su parte proporcional de la deuda. Esto implica que la deuda se considera divisible,
ya que se puede separar en porciones que corresponden a cada deudor. El
beneficio
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de la división es una regla que establece que cada deudor en una obligación
mancomunada tiene el derecho de exigir que la deuda sea dividida o separada en
partes iguales entre ellos. Esto significa que cada deudor sólo será responsable de
su parte proporcional de la deuda y no de la totalidad. El privilegio de la partición
puede ser ejercido por cualquier deudor mancomunado, y su objetivo es proteger a
cada deudor de tener que pagar más de lo que le corresponde. Asimismo, el artículo
1174 establece “El beneficio de la división no puede ser opuesto por el heredero del
deudor encargado de cumplir la prestación, por quien se encuentre en posesión de
la cosa debida o por quien adquiere el bien que garantiza la obligación”. Soria, A.
(2016) menciona que este artículo reside en que, si existe un obligado de prestación
divisible, y este falleciera este falleciera sus deudas pasan a formar parte de su
patrimonio y deben ser pagadas con los activos que dejó a sus herederos. Si uno de
los herederos es designado como encargado para cumplir con la obligación
contraída por el causante, normalmente se espera que cumpla íntegramente con
dicha obligación utilizando los recursos heredados. Esto significa que el encargado
no podría excusarse de cumplir completamente la obligación alegando que otros
coherederos podrían cumplirla de manera fraccionada. Se entiende de lo
mencionado por Soria que, si uno de los deudores fallece y sus herederos admiten
la responsabilidad de cumplir con la obligación, el heredero encargado no puede
excusarse del cumplimiento íntegro de la deuda. En resumen, si un heredero es
designado para cumplir con una obligación mancomunada o divisible por parte del
causante o de mutuo acuerdo con los otros coherederos, ese heredero está
obligado a cumplir la prestación en su totalidad y no puede excusarse parcialmente
basándose en el beneficio de la división.
Emerge un serio inconveniente en el ámbito de las obligaciones, en las que se ha
convenido un vínculo jurídico entre acreedor y deudor y fallece este último. En
consecuencia, es menester determinar si frente a la defunción del deudor, existe la
posibilidad que el acreedor se vea afectado en la exigencia y/o cumplimiento de sus
derechos inherentes. En palabras de Magro (2019), el problema empeora si además
de la existencia de obligaciones reales e incumplidas en vida del deudor, sino que
además por el vínculo jurídico el plazo del cumplimiento de la prestación seguía
vigente al instante de la defunción, es decir quedó pendiente su cumplimiento.
Emerge un serio inconveniente en el ámbito de las obligaciones, en las que se ha
convenido un vínculo jurídico entre acreedor y deudor y fallece este último. En
consecuencia, es menester determinar si frente a la defunción del deudor, existe la
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posibilidad que el acreedor se vea afectado en la exigencia y/o cumplimiento de sus

derechos inherentes. En palabras de Magro (2019), el problema empeora si además

de la existencia de obligaciones reales e incumplidas en vida del deudor, sino que
además por el vínculo jurídico el plazo del cumplimiento de la prestación seguía
vigente al instante de la defunción, es decir quedó pendiente su cumplimiento. El
Código Civil no contempla el fallecimiento del deudor como una fuente de
prescripción de la obligación mancomunada, por ende, se debe tener en
consideración las pautas principales de la sucesión mortis causa en las relaciones
jurídicas. Por otro lado, el que la muerte del sujeto signifique la pérdida de la
personalidad civil ello no se replica en las obligaciones mancomunadas. En la
misma tendencia, con respecto a la responsabilidad ya demostrada de los
herederos de una codeudor de una obligación ,mancomunada; en el Art. 844 del
Código Civil Peruano, nos hace mención sobre la herencia, señalando que al existir
más de un heredero, cada heredero vendría a ser co propietario de los bienes que
deja el fallecido, estos a su vez asumen los derechos y obligaciones del deudor que
deja la herencia, que sería el derecho sobre los bienes así como el cumplimiento de
las deudas que posee el fallecido.
Por otro lado, en el Art. 869 del Código Civil Peruano menciona sobre la carga
de que pesa sobre los herederos, quienes se harán cargo de los gastos del funeral o
de incineración de ser el caso. También del tratamiento o diferentes gastos sobre el
último mal que hubiera tenido. Y por último este artículo menciona que los gastos
de administración estarían sujetos a la herencia. Con relación al tema en concreto,
en el Art. 1187 del C.C.P., nos habla sobre la transmisión de obligación solidaria,
que consiste en que, si uno de los deudores solidarios fallece, los deberes de este
último que sería su deuda, será dividida entre los herederos en proporción a la
herencia que fue transmitida conforme a su respectiva partición.

Para entender el tema analizamos el Art. 871 del C.C.P., donde nos señala sobre
las deudas que recaen sobre la masa hereditaria, haciéndonos mención que la
obligación de los herederos es pagar las deudas que dejó el fallecido, si fuese uno
el heredero pagará la deuda sólo el importe del bien heredado, en el caso de ser
varios herederos, estos se partirían la herencia (bien), y conforme a la proporción de
la partición sería su deuda. Esto implica que las deudas que dejó el fallecido no
podrían dañar o afectar el patrimonio personal del o de los herederos, ya que estos
solo pagaron la deuda en proporción a su herencia. En el caso de que haya varios
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herederos, la herencia se divide entre ellos en proporción a la partición establecida.
Cada heredero será responsable de pagar la deuda en oficio de su proporción de
intervención en la sucesión. Esto implica que las deudas no podrán dañar o afectar
el patrimonio personal de los herederos más allá de la parte correspondiente a su
herencia.
Si solo hay un heredero, ese heredero asumirá la responsabilidad de pagar las
deudas, pero solo hasta el valor de los bienes heredados. Esto significa que, si el
valor total de los bienes heredados es menor que el monto total de las deudas, el
heredero solo estará obligado a pagar hasta el valor de esos bienes. No se verá
afectado su patrimonio personal más allá de lo heredado.

Con relación al punto precedente encontramos excepciones sobre las obligaciones

de los herederos. Art. 1192 C.C.P., la primera excepción sería que las obligaciones
que deja el deudor son personalísimas, ya que solo por su cualidad personal solo
este podrá realizarlo, aquí el ejemplo acorde a esta situación sería que el deudor
sea un cantante y su obligación sea cantar en un concierto, siendo esta obligación
que no podrá realizar otra persona ya que el deudor fue contratado en calidad de
cantante profesional, en pocas palabras las obligaciones de carácter personalísimos
no son transmisibles a terceros. En el segundo caso la ley expresamente prohíbe la
transmisión de una deuda cuando es referida con la SUNAT (multas). El tercer caso
es cuando el fallecido o deudor haya pactado en vida con la contraparte o su
acreedor que no sean transmitidas a sus herederos, con esto cabe la posibilidad
que podemos pactar en vida la no transferencia de nuestra deuda a los herederos.

En derecho podemos definir a la herencia como un acto jurídico, en donde

cualquier persona traspasa, transmite o cede su bienes, derechos y obligaciones, a
un ciudadano o a un grupo de ciudadanos que se le dominaran herederos, luego de
su fallecimiento. En el Código Civil Peruano encontramos cuatro (04) tipos de
sucesiones:

Sucesión en general: En el Libro IV Sección primera del C.C.P. Hace referencia que
este proceso se genera desde el fallecimiento de una persona, todos los recursos,
facultades y responsabilidades, son transmitidos a su sucesores siempre y cuando
constituyan herencia; en segundo lugar, la Sucesión testamentaria: Es un acto
personalísimo de cualquier persona que en usanza de sus potestades físicas y
mentales, realiza el testamento y pudiendo disponer de todos sus bienes, en forma
total o parcial, formule su correspondiente heredad dentro de los parámetros de los
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estatutos y con los formulismos previstos en el ordenamiento jurídico los transfiere
después de su muerte. Así también la Sucesión intestada: Este documento es
realizado por el Juez o el notario, donde señalan a los herederos legales en caso no
existiera un testamento o se hubiera declarado no válido, también puede haber
caducado por falta de comprobación judicial. En otro caso el heredero forzoso
fallece antes o puede renunciar a dicha herencia. Y, por último, Masa hereditaria:
Comprende dos aspectos que son masa hereditaria bruta y neta, en la primera
es el total de los bienes, derechos y obligaciones que deja el causante y el
segundo es el resultado de la sustracción de deudas, gastos u otros a la primera en
mención.

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III. CONCLUSIONES
Las obligaciones mancomunadas es pedirle al deudor el pago que solo le
corresponde como parte, así sean más acreedores, en cambio si hay más
deudores como una obligación solidaria, los acreedores le pueden pedir a
cualquier deudor la prestación, y si hay un deudor éste podría dar el integro a
los acreedores.

Si uno de los deudores fallece y sus herederos asumen la responsabilidad de

cumplir con la obligación, el heredero encargado no puede excusarse del
cumplimiento íntegro de la deuda, es decir, si existe un deudor de prestación
divisible, y este deudor fallece, sus deudas pasan a formar parte de su
patrimonio y deben ser pagadas con los activos que dejó a sus herederos. Si
uno de los herederos es designado como encargado para cumplir con la
obligación contraída por el causante, normalmente se espera que cumpla
íntegramente con dicha obligación utilizando los recursos heredados. Esto
significa que el encargado no podría excusarse de cumplir completamente la
obligación alegando que otros coherederos podrían cumplirla de manera
fraccionada.

Si existiera más de un heredero, cada heredero vendría a ser co propietario de

los bienes que deja el fallecido, estos a su vez asumen los derechos y
obligaciones del deudor que deja la herencia, que sería el derecho sobre los
bienes, así como el cumplimiento de las deudas que posee el fallecido. La
carga que pesa sobre los herederos, implica hacerse cargo de los gastos del
funeral o de incineración de ser el caso. También del tratamiento o diferentes
gastos sobre el último mal que hubiera tenido, los gastos de administración
estarían sujetos a la herencia.

Los herederos son responsables de pagar las deudas dejadas por el fallecido.
Sin embargo, la cantidad que cada heredero debe pagar depende de si son
varios herederos o uno solo. En el caso de varios herederos, la deuda se divide
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en proporción a la partición de la herencia, protegiendo así el patrimonio
personal de los herederos más allá de su parte correspondiente.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

Magro, V. (15 de diciembre de 2019). LEFEBVRE.

https://elderecho.com/se-extinguen-las-obligaciones-del-avalista-con-la
-muerte-del-avalado

Soria, A. (2016). Las obligaciones y sus modalidades. Soria, A., Derecho de

obligaciones. Modalidades, efectos e inejecución (pp. 1-78). Lima:
Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas.Derecho de obligaciones
1er cap.pdf (upc.edu.pe)

Castillo, M. (2018). Derecho de obligaciones.13 Derecho de las obligaciones

con sello.pdf (pucp.edu.pe)

Osterling, F. (2018). Obligaciones mancomunadas y solidarias. Obligaciones

mancomunadas y solidarias - Sección Primera. Las obligaciones y sus
modalidades - Compendio de Derecho de las Obligaciones - Libros y
Revistas - VLEX 378204534

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 ANEXOS
REPORTE TURNITIN

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