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AFECCIONES
2. Amenorrea secundaria. Ausencia de menstruaciones
ENDOCRINOMETABÓLICAS durante el tiempo correspondiente a 6 ciclos menstrua-
MÁS FRECUENTES les o más.
- Disfunción hipotálamo-hipofisaria (DHH). rísticas muy particulares, que difieren de las secundarias en
- Anorexia nerviosa. cuanto a sus causas –como hemos visto en el acápite ante-
- Obesidad exógena. rior–, pero también difieren en el pronóstico.
- Hiperprolactinemia no tumoral. En la mayoría de los casos las causas de la amenorrea
- Medicamentosas. primaria pueden determinarse con la valoración clínica, o
- Causas psíquicas. sea, anamnesis y examen físico, sobre todo aquellas debi-
- Seudociesis. das a alteraciones orgánicas.
- Retraso puberal. El diagnóstico suele confirmarse con un mínimo de
b) Orgánicas: pruebas de laboratorio, entre las que no pueden faltar la
- Síndrome de Sheehan. cromatina nuclear en mucosa oral y, si es necesario, tam-
- Hipopituitarismo (de cualquier causa). bién el cariotipo. Estas pruebas permiten detectar alteraciones
- Tumores hipofisarios (funcionantes o no). cromosómicas que dan lugar a trastornos gonadales, tales
- Prolactinomas (micro y macro). como la disgenesia gonadal y el síndrome de resistencia a
- Displasia olfato-genital. los andrógenos, este último conocido también como femi-
- Síndrome de Laurence-Moon-Biedl. nización testicular o síndrome de Morris.
- Síndrome de Prader-Willi. En ocasiones es necesario realizar ultrasonido y/o
- Tumores supraselares o hipotalámicos. laparoscopia ginecológica para comprobar la existencia de
4. Gonadales: una causa uterovaginal o gonadal. Las causas uterovaginales
a) Disgenesia gonadal –síndrome de Turner y sus va- se hallan en el 10 % de las pacientes con amenorrea prima-
riantes. ria, mientras que las disgenesias gonadales se encuentran
b) Disgenesia gonadal mixta. en el 25 % de los casos, aproximadamente. El resto de las
c) Disgenesia gonadal pura. pacientes suele estudiarse de manera similar a las que pre-
d) Síndrome de Noonan. sentan amenorrea secundaria.
e) Hipoplasia ovárica constitucional. Al confeccionar la historia clínica de las pacientes que
f) Síndrome de resistencia a los andrógenos. consultan por amenorrea secundaria debemos investigar
g) Síndrome de ovarios resistentes. posibles factores predisponentes, tales como cambios im-
h) Castración pre o pospuberal (de cualquier causa). portantes de peso corporal, ingestión de fármacos –en espe-
i) Tumores ováricos (funcionantes o no). cial contraceptivos hormonales con solo progestágenos y
j) Posovaritis. tranquilizantes–, trastornos psicológicos, estrés emocional
k) Síndrome de ovarios poliquísticos (SOP). y sobrecarga de ejercicios.
5. Adrenales: También es necesario interrogar sobre la existencia de
a) Hiperplasia adrenal congénita. síntomas de disfunciones endocrinas, historias de cirugía
b) Defectos enzimáticos de debut pospuberal. abdominal o ginecológica, historia de infecciones o infla-
c) Tumores virilizantes. maciones del aparato reproductor y síntomas climatéricos.
d) Síndrome de Cushing. No obstante, siempre debe tenerse presente que la causa
e) Insuficiencia adrenal crónica. más común de amenorrea secundaria es el embarazo, y
6. Otras causas: habitualmente es lo primero que hay que descartar.
a) Síndrome de sobresupresión –uso de contracepti-
vos hormonales inyectables con solo progestá-
genos e implantes.
b) Diabetes mellitus complicada o con mal control Examen físico
metabólico.
c) Disfunción tiroidea (hiper o hipotiroidismo).
El examen físico, como en todo paciente, tiene que ser
d) Desnutrición grave.
minucioso; en particular hay que buscar signos de altera-
e) Enfermedades cerebrales.
ciones orgánicas del aparato reproductor, así como mani-
f) Enfermedades caquectizantes.
festaciones clínicas de trastornos funcionales u orgánicos
g) Síndrome de Werner.
del sistema endocrino, en especial signos de hipogona-
h) Uremia.
dismo, hiperandrogenismo o virilización. No podemos ol-
i) Distrofia miotónica. vidar que en ocasiones la amenorrea es consecuencia de un
tumor hipotálamo-hipofisario, ovárico o suprarrenal.
Diagnóstico
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
En la valoración diagnóstica es necesario tener en cuen-
ta si la paciente presenta una amenorrea primaria o se- Si la valoración clínica no permite hacer una conclu-
cundaria, ya que las primarias reúnen un grupo de caracte- sión diagnóstica, entonces son necesarios los exámenes
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complementarios; entre estos los primeros que deben indi- les, al igual que los estudios anatómicos de los ovarios y de
carse son aquellos que permiten diagnosticar el embarazo. la región hipotálamo-hipofisaria.
En este sentido la determinación cualitativa de la subunidad Aunque el estudio citogenético –cromatina nuclear y
beta de la gonadotropina coriónica (HCG) es una prueba cariotipo– es más útil en el diagnóstico de la amenorrea
sencilla y rápida, con gran sensibilidad y especificidad; primaria, en algunas pacientes con amenorrea secundaria
también puede utilizarse con este fin la ultrasonografía estos estudios pueden ser útiles e incluso necesarios, como
ginecológica. ocurre en casos con variantes del síndrome de Tunner,
En las pacientes que no están embarazadas se indi- hipoplasia ovárica constitucional, síndrome de Nooman y
can, en primer lugar, las determinaciones de hormonas poligonosomías.
folicoestimulantes (FSH), prolactina (PRL) y estradiol (E2) Las llamadas pruebas dinámicas endocrinas, estimula-
plasmático. La FSH es útil para diferenciar las causas ová- ción ovárica con gonadotropina menopáusica humana
ricas en las cuales se encuentra elevada, de las hipotálamo- (HMG) y estimulación hipofisaria con la hormona liberadora
hipofisarias, en las que se suele encontrar disminuida, de gonadotropina (LHRH), ofrecen poca información adi-
aunque a veces está normal. La determinación de PRL es cional a la obtenida con la determinación basal de FSH y
muy importante en estos casos. En algunas series la LH, por esto resultan con frecuencia innecesarias. Además,
hiperprolactinemia funcional o tumoral es la causa de la su interpretación es engorrosa, por lo que se reservan para
amenorrea secundaria hasta en el 30 %; sin embargo, la casos muy específicos, que son manejados por personal
hiperprolactinemia rara vez causa amenorrea primaria. Los muy especializado.
niveles elevados de PRL obligan a descartar la existencia La prueba de estimulación del eje hipotálamo-hipófiso-
de un tumor hipofisario de un hipotiroidismo primario. gonadal con citrato de clomifeno se ha demostrado que
La determinación de E2 mide el funcionamiento tiene muy baja sensibilidad y especificidad, por lo que en
folicular ovárico; se encuentran niveles disminuidos tanto la actualidad ha caído en desuso por su escaso valor diag-
en las amenorreas de causa ovárica como en las hipotálamo- nóstico.
-hipofisarias. Una medición aislada tiene poco valor diag-
nóstico; mayor valor tienen las mediciones seriadas o du-
rante pruebas dinámicas.
La determinación en plasma de la otra gonadotropina Tratamiento
hipofisaria, la hormona luteinizante (LH), tiene mucho
menor valor diagnóstico en las amenorreas que la FSH.
En la mayoría de las pacientes el tratamiento suele ser
En las pacientes con causa ovárica hipotálamo-
relativamente sencillo, siempre y cuando se haya logrado
hipofisaria se encontrará elevada o disminuida, respecti-
establecer el diagnóstico correcto. Por tanto, el tratamien-
vamente, junto a la FS; su mayor valor es en el síndrome de
to debe ser causal siempre que sea posible. A continuación
ovarios poliquísticos donde es frecuente hallar niveles ele-
expondremos estos esquemas en forma resumida y simplifi-
vados, mientras que los FSH son normales.
cada, pero antes es importante recordar que el objetivo pue-
En las pacientes en que se sospecha un tumor en la
de variar en cada caso particular, lo que depende de la causa
región hipotálamo-hipofisaria se realizará estudio anató-
de la amenorrea y de los deseos de fertilidad de la paciente;
mico de la hipófisis, que incluye el estudio neurooftal-
de ahí se deriva la importancia del diagnóstico precoz en
mológico (fondo de ojo y campos visuales) y la imageno-
cada caso. En algunas solo se logran sangramientos perió-
logía de la región. El proceder más sencillo es la radiografía
dicos sin ovulación ni fertilidad, mientras que en otras se
simple de la silla turca, de gran especificidad pero de muy
logra restitución completa del ciclo menstrual ovulatorio y
baja sensibilidad, por lo que con frecuencia son necesarios
recuperación de la fertilidad. Así, difiere el tratamiento se-
otros exámenes más sofisticados, como la tomografía axial
gún el caso que se trate:
computarizada contrastada de la hipófisis y la resonancia
magnética nuclear. Estas investigaciones deben ser realiza-
das e indicadas por personal especializado. 1. Amenorrea fisiológica. Es obvio que la amenorrea del
El estudio anatómico del útero y los ovarios, con embarazo y el puerperio no necesita de ningún trata-
frecuencia, es necesario en las pacientes con amenorrea miento. La amenorrea posmenopáusica se trata con la
secundaria. La ultrasonografía ginecológica es útil para co- terapia hormonal de reemplazo, si no existe ninguna
nocer el volumen de los ovarios y si en ellos hay folículos, contraindicación absoluta.
quistes o tumores, así como establecer el estado del 2. Amenorrea uterovaginal. Se utiliza el tratamiento qui-
endometrio, información que permite el diagnóstico de cau- rúrgico corrector en la imperforación del himen y en
sas uterinas y/o gonadales; también puede ser necesaria la las atresias vaginales. En las sinequias uterinas pueden
laparoscopia ginecológica para visualizar el aparato ser necesarias la dilatación cervical y de la cavidad
reproductor. uterina, así como el uso de dispositivos intrauterinos
En la disfunción hipotálamo-hipofisaria (DHH) las durante cierto tiempo. Estas adherencias intrauterinas
determinaciones hormonales, PRL, FSH, H y E2 son norma- pueden administrarse también por histeroscopia. En
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las atrofias endometriales y en el déficit de respuestas es el clomifeno, por supuesto, después de realizar un
del endometrio a las hormonas ováricas debe valorarse estudio completo de ambos miembros de la pareja, por
la posibilidad de hacer implantación de endometrio en lo que estas pacientes, deben remitirse a las consultas
la cavidad uterina. especializadas existentes.
La amenorrea de la agenesia uterovaginal y la debida a En las amenorreas primarias hipotálamo-hipofisarias
una histerectomía no necesitan tratamiento; estas alte- de causa orgánica, como en los síndromes dismorfoló-
raciones del aparato reproductor pueden ser tributarias gicos, generalmente es necesario estrogenizar a la pa-
de tratamiento por otras razones y no por la amenorrea.
ciente, para lo que se usa etinilestradiol, en dosis de
La primera debe corregirse quirúrgicamente para lo-
dos a cuatro veces mayor a la utilizada en los contra-
grar que la paciente tenga relaciones sexuales satisfac-
ceptivos hormonales modernos, en forma continuada,
torias y la segunda solo se trata si la histerectomía se
acompañó de ooforectomía bilateral, caso en el cual se hasta alcanzar el desarrollo de los caracteres sexuales
usará la terapia hormonal de reemplazo, como en la secundarios. Algunos autores recomiendan asociar
amenorrea posmenopáusica; por supuesto, después de progestágenos durante esta fase de estrogenización para
estar seguros que la cirugía no fue debida a un cáncer evitar que se produzca hiperplasia endometrial. Otros
del aparato reproductor. autores prefieren hacer una estrogenización con dosis
3. Amenorrea hipotálamo-hipofisaria. Entre estas tene- menores, que es más lenta, pero evita muchos efectos
mos una causa muy particular por tener un tratamiento secundarios. Con posterioridad se comienza una tera-
muy específico, nos referimos a la amenorrea por pia sustitutiva de mantenimiento, en forma similar a la
hiperprolactinemia. Si la hiperprolactinemia es fun- descrita en las pacientes con DHH.
cional o idiopática, sin tumor hipofisario, se indicará La mayoría de las amenorreas hipotálamo-hipofisarias
tratamiento con medicamentos antiprolactínicos, como de causa orgánica son secundarias y la paciente ya ha
son la bromocriptina y la lisurida. En fecha reciente ya tenido el desarrollo de los caracteres secundarios sexua-
se comercializan medicamentos de acción prolongada les, pero las lesiones de esta región pueden acompañarse
y con menos efectos secundarios como la cabergolina. de síntomas y signos de desfeminización, lo que hay
Si la amenorrea es consecuencia de un microprolac-
que tener en cuenta en el momento de indicar trata-
tinoma hipofisario, el tratamiento de elección también
miento. Si la lesión causal es tumoral, debe valorarse el
son los fármacos mencionados anteriormente. El trata-
miento quirúrgico de la amenorrea hiperprolacti- tratamiento quirúrgico con el neurocirujano. Cuando
némica solo se reserva para las pacientes que presentan la lesión, la cirugía o la radioterapia han provocado
un macroprolactinoma, sobre todo si tienen compro- déficit de otras esferas endocrinas, además de la go-
miso neurooftalmológico por crecimiento tumoral nadotrópica, se debe indicar tratamiento sustitutivo de
extraselar. El manejo de estas pacientes es de la compe- las hormonas deficitarias, junto a la terapia con
tencia del endocrinólogo y del neurocirujano. estrógenos y progestágenos, que es la que soluciona la
El resto de las amenorreas hipotálamo-hipofisarias fun- amenorrea.
cionales de manera habitual se tratan y se solucionan Las pacientes de este grupo que desean embarazo solo
al eliminar la causa que las produce, tal como ocurre pueden tratarse con la administración de gonadotro-
con la anorexia nerviosa, obesidad exógena, medica- pinas exógenas, en primer lugar HMG ó FSH para lo-
mentos, trastornos psíquicos y seudociesis, o al alcan- grar el crecimiento y maduración folicular, y cuando el
zarse la maduración del eje en las pacientes con retraso folículo tiene un desarrollo adecuado se administra
puberal. HCG para romper el folículo y provocar la ovulación.
Un grupo algo especial lo constituyen las mujeres con Todas las pacientes con amenorrea hipotálamo-
amenorrea por DHH; en ellas la conducta depende esen- hipofisaria de causa orgánica deben ser atendidas en
cialmente del deseo de fertilidad inmediata o no. Si no consultas multidisciplinarias muy especializadas.
se desea embarazo, se administrarán estrógenos y 4. Amenorreas gonadales u ováricas. La mayoría de las
progestágenos; en general, es suficiente el uso de algu- pacientes de este grupo causal se presentan con ame-
nas de las píldoras contraceptivas modernas combina- norrea primaria y manifestaciones clínicas de déficit
das, ya sean de dosis fijas o trifásicas, que contienen estrogénico, de severidad variable. Por tanto, con fre-
etinilestradiol en bajas dosis como estrógenos de 35 g cuencia es necesario suministrar estrógenos a la pa-
o menos y levonorgestrel o noretindrona como ciente y luego administrar terapia sustitutiva, para lo
progestágenos. que pueden utilizarse los esquemas descritos en el
También pueden utilizarse píldoras con otros acápite anterior. En los casos de este grupo que consul-
progestágenos como gestodeno o desogestrel. Si se tan por amenorrea secundaria, que no necesitan
desea embarazo, en primer lugar se indicarán drogas estrogenización, se administran estrógenos y proges-
ovulatorias de acción hipotálamo-hipofisarias como tágenos en dosis sustitutivas.
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 845
En general, las pacientes con amenorrea de causa ová- a) Adenoma productor de TSH.
rica no responden a ningún tipo de tratamiento ovulato- b) Mola hidatiforme.
rio; por consiguiente, la fertilidad de las mismas solo c) Coriocarcinoma.
se logra mediante técnicas modernas de reproducción 2. Hipertiroidismo independiente de TSH:
asistida, con uso de óvulos o embriones donados. a) Destrucción tiroidea:
Un caso especial en este grupo es el de las pacientes - Tiroiditis silente.
con síndrome de ovarios poliquísticos que sí suelen - Tiroiditis subaguda.
responder de forma favorable a los fármacos estimula- - Tiroiditis posparto.
dores de la ovulación. En realidad, la amenorrea de - Tiroiditis subaguda de Quervain’s.
ellas no es solo de causa ovárica, pues a la misma con- - Posadministración de I131.
tribuyen otros trastornos endocrinos cuya fisiopatoge- b) Origen autoinmune:
nia no está totalmente esclarecida. - Bocio tóxico difuso o enfermedad de Graves
5. Amenorreas adrenales y otras causas de amenorrea. El Basedow.
tratamiento específico de la enfermedad de base, ya - Tiroiditis de Hashimoto.
sea suprarrenal, tiroidea, diabetes mellitus, enferme- c) No precisadas:
dad sistémica o de otro tipo, casi siempre es suficiente - Adenoma tóxico variante único o multinodular.
para solucionar la amenorrea. - Job Basedow.
3. Hormonas tiroideas de origen no tiroideo:
a) Estroma ovárico.
b) Metástasis de carcinoma tiroideo.
Seguimiento
En nuestro medio y a cualquier edad, la causa más
La periodicidad con que deben ser vistas las pacientes frecuente es el bocio tóxico difuso o enfermedad de Graves
que sufren amenorrea está en relación directa con la causa Basedow, la que se considera una enfermedad autoinmune,
que origina el trastorno y con los deseos de fertilidad de las organoespecífica; en la cual el cuadro clínico resulta de la
mismas. Por tanto, no puede establecerse un esquema que acción de las inmunoglobulinas estimulantes de la tiroides
sea aplicable a todas ellas, sino que el seguimiento debe TSI sobre el receptor tiroideo para la TSH y cuya prevalen-
adaptarse a las características de cada caso. cia en personas mayores de 50 años es del 0,5 %.
La enfermedad de Graves Basedow junto con la
tiroiditis de Hashimoto y el hipotiroidismo primario for-
man parte de la llamada enfermedad autoinmune de la
tiroides.
HIPERTIROIDISMO
1. Hipertiroidismo dependiente de tirotrofina (TSH) y sus- Se encuentra piel fina, húmeda, caliente, a veces con
tancias similares: zonas de hiperpigmentación o vitiligo, taquicardia,
846 Temas de Medicina General Integral
hipertensión arterial sistólica, hiperreflexia osteotendinosa, tamaño mediano (entre 40 y 60 g). En nuestro medio la
hipercinesia, temblor en las manos, atrofia de la muscula- causa más frecuente es el bocio tóxico difuso.
tura proximal de las extremidades y onicólisis.
Se aprecia aumento del tamaño de la tiroides, cuyas
características pueden orientar hacia la causa del hiperti-
roidismo, de manera que si es difuso e indoloro, tiene con- Hipertiroidismo y embarazo
sistencia elástica, con soplo y thrill, apoyan el diagnóstico
de la enfermedad de Graves Basedow; la presencia de un La gestación constituye una situación fisiológica en la
nódulo único sugiere enfermedad de Plummer; un bocio que clínicamente resulta difícil establecer el diagnóstico
multinodular puede indicar una u otra causa –variante de hipertiroidismo, por lo que se deberá sospechar su pre-
nodular de Graves Basedow o bocio multinodular tóxico–; sencia cuando existan antecedentes de disfunción tiroidea,
la presencia de dolor hace pensar en la tiroiditis subaguda pérdida de peso, palpitaciones, astenia, hiperemesis
y su ausencia en una tiroiditis silente, u otras afecciones gravídica e intolerancia al calor, acompañado de bocio o no.
que producen TSH o sustancias similares como la gona-
datropina coriónica.
La oftalmopatía o manifestación ocular que acompaña
al Graves Basedow, se divide según su patogenia en dos Tormenta tiroidea
subgrupos:
Es la complicación más temida –por suerte casi
1. Oftalmopatía tiroxínica. Comprende la mirada brillan- erradicada en nuestro medio– de la hiperfunción tiroidea;
te, la retracción palpebral, signo de Von Graeffe, la au- se caracteriza por nerviosismo extremo, hiperpirexia,
sencia de parpadeo, sensación de arenilla y lagrimeo; hiperreflexia osteotendinosa, psicosis –signo más típico–,
estos síntomas mejoran al controlar la hiperfunción ictericia, hepatomegalia –señal de necrosis hepática–, tem-
tiroidea. blor generalizado, disnea, deshidratación e hipotensión.
2. Oftalmopatía infiltrativa. Se debe a cambios inflama- Habitualmente se desencadena por estrés físico, psíquico,
torios que ocurren en el tejido adiposo retroorbitario y quirúrgico, parto, posadministración de I131.
en los músculos extrínsicos del ojo; clínicamente se El diagnóstico se hace sobre la base de la impresión
caracteriza por: edema periorbitario, exoftalmos clínica, pues el estudio de función tiroidea solo confirma
(protusión ocular), parálisis de los músculos extrínse- el hipertiroidismo.
cos oculares, quemosis, daño del nervio óptico, de la
retina y de la córnea (queratitis), habitualmente secun-
dario a la incapacidad para cerrar los ojos. Este tipo de
oftalmopatía puede preceder al hipertiroidismo o pre- EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
sentarse en sujetos eutiroideos y aun con hipotiroidis-
mo. Es más frecuente en hombres.
Se harán ante sospecha clínica al encontrar un índice
de tirotoxicosis (IT) mayor que 19 (tabla 29.1 ) y se confir-
La dermopatía o mixedema pretibial es el aumento
mará el diagnóstico ante niveles elevados de tiroxina libre,
de volumen duro que ocupa el dorso de ambos pies y el determinados como hormona libre o como índice de tiroxina
tercio inferior de ambos miembros inferiores, cubierto de T4 libre, el que se determina de la manera siguiente: T4 t ó
piel engrosada e hiperpigmentada. En ocasiones, se asocia CT3 x100 = valores mayores de 150 ó PBI/CT3 x100 = valo-
con dedos en palillo de tambor y uñas en vidrio de reloj, lo res mayores de 8, para valores de T4T +152-144 mmol/L y
que resulta en la llamada acropaquía tiroidea. para valores de PBI = 3-7 g/dL, donde:
El cuadro completo de la enfermedad de Graves
Basedow consta de: hipertiroidismo con bocio, oftalmopatía T4 t: tiroxina total.
y dermopatía; lo menos frecuente es la presentación en un CT 3: captación de triyodotironina.
paciente con las tres manifestaciones antes mencionadas. PBI: yodo unido a proteínas.
Tabla 29.1
Astenia +2 Bocio +3 –3
Disnea de esfuerzo +1 Hiperquinesia –2
Palpitaciones +2 Tremor +1
Prefiere el frío +5 Manos calientes +2 –2
Prefiere el calor –5 Manos húmedas +1 –1
Sudación +3 Pulso > 90/min +3
Nerviosismo +2 < 80/min –3
Apetito aumenta +3 F. auricular +4
Apetito disminuye –3 Signo Von Graeffe +1
Peso aumenta +3 Retracción palpebral +2
Peso disminuye +3 Exoftalmos +2
1. Antitiroideas de síntesis (ATS). Son los fármacos fun- 1. Cirugía. Es el método que produce un eutiroidismo
damentales para el tratamiento del hipertiroidismo; pue- más rápido; la operación que se debe realizar es la
den ser empleados como único tratamiento –embara- tiroidectomía subtotal, y estará indicada en niños, en
pacientes con grandes bocios o bocios nodulares, o
zo, niños y jóvenes, adultos con bocios pequeños, en
ante fracaso o rechazo al tratamiento con ATS.
las recidivas– o como coadyuvantes de la administra- Como efectos indeseables se señalan hipotiroidismo
ción de I131 y previo a la cirugía. Se usan en dosis de definitivo, que ocurre en el 80 % de los pacientes
300 a 450 mg/día, única o fraccionada, de pro- 10 años después de operados; hipoparatiroidismo, pa-
piltiouracilo o metiltiouracilo, o de 30 a 45 mg de rálisis recurrencial y recidiva del hipertiroidismo, en-
metimazol, hasta lograr el eutiroidismo aproximada- tre otros.
mente entre 6 y 8 semanas; la conducta posterior de- 2. I131. Se considera el método más efectivo, popular, fácil
penderá de las condicionales siguientes, si se emplean de administrar y menos costoso para el control de la
los ATS como: enfermedad. La dosis propuesta es de 6 000 rads
[60 Gray (Gy)] de inicio y si es necesario se indicarán
a) Único tratamiento para el hipertiroidismo se dismi-
dosis subsiguientes de 30 Gy, con una frecuencia me-
nuyen 50 mg –5 mg mensual hasta llegar a la dosis dia de 9 meses.
mínima que mantenga el eutiroidismo– como pro-
medio de 100 a 150 mg/día, la que se mantiene
durante 2 años; luego suspender y observar evolu-
ción. Si hay recidiva, se deberá pasar a otro tipo de PARTICULARIDADES DEL TRATAMIENTO
tratamiento (medidas definitivas).
b) Como coadyuvante al I131 se suspenderá 1 semana
1. Hipertiroidismo y embarazo. El tratamiento ideal es la
antes de administrar el radiofármaco y se reiniciará administración de ATS; el único medicamento a em-
1 semana después con igual dosis; luego continua- plear es el propiltiouracilo, de 300 a 450 mg/día hasta
rá de igual forma que en el apartado anterior, es lograr eutiroidismo; luego disminuir hasta dar la me-
decir, disminuirá a razón de 50 mg/mes hasta sus- nor dosis que mantenga el mismo. Si al momento del
pender; según evolución posterior, se administrará parto la dosis de propiltiouracilo es igual o menor que
nueva dosis del radioyodo. 100 mg/día, es posible emplear la lactancia materna.
c) Previo a la cirugía, se administran ATS hasta que el Como efectos indeseables tenemos: no lactancia ma-
terna, bocio en el feto o hipotiroidismo fetal. En algu-
paciente esté eutiroideo; luego asociar lugol de 7 a
nas paciente de difícil control se podrá indicar
10 días antes de la fecha prevista para la interven- tiroidectomía subtotal durante el 2do. trimestre.
ción quirúrgica, 1 gota (8 mg) 3 veces al día, au- 2. Hipertiroidismo en el anciano. El tratamiento de elec-
mentar 1 gota cada día hasta 5 gotas 3 veces al día; ción es el I131, en dosis de 90 Gy, previo control del
antes de la operación. Se puede suspender el ATS al hipertiroidismo con ATS.
iniciar el lugol. 3. Oftalmopatía. En primer lugar es necesario lograr una
2. Betabloqueadores. Mejoran rápidamente los síntomas función tiroidea normal; en casos de Graves Basedow
del paciente; se emplean asociados a ATS, previo uso se debe preferir como tratamiento para el hipertiroi-
de I131 y de la cirugía. El medicamento más empleado dismo la tiroidectomía total; lo segundo será proteger
el globo ocular con lentes oscuros, no exposición al
es el propranolol, en dosis promedio de 120 mg/día –se
sol, ambientes secos, lágrimas artificiales, protección
puede llegar hasta 140 mg/día–. En caso de cirugía, se al dormir, entre otras, y desde el punto de vista especí-
debe mantener la dosis hasta 1 semana después de la fico se aconseja emplear inmunosupresores (imurán o
tiroidectomía. La preparación preoperatoria se hará con glucocorticoides), radioterapia externa o cirugía
lugol. descompresiva de la órbita y la corrección de las ano-
Si se asocia al I131 se puede administrar este medica- malías de los párpados.
mento durante todo el período entre una y otra dosis. 4. Tormenta tiroidea:
3. Carbonato de litio. Mejora los síntomas, sobre todo la a) Ingreso en una sala de cuidados intensivos.
depresión, y disminuye los niveles de tiroxina, pero b) Medidas de soporte: garantizar una hidratación
entre 6 y 8 semanas de tratamiento se pierde la inhibi- adecuada –emplear solución glucosada–, con nu-
trientes y vitaminas del complejo B.
ción con la que reaparecen los síntomas. Se emplea
c) Tratar la fiebre con medidas externas y/o acetami-
como coadyuvante para tratamiento con I131, en dosis nofeno.
de 200 mg cada 8 h, durante 6 u 8 semanas como d) Emplear digitálicos y diuréticos, si existe insufi-
máximo. ciencia cardíaca.
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 849
e) Hidrocortisona: de 100 a 300 mg por vía e.v. (bolus); 3,5 % y afectaba fundamentalmente a las mujeres mayores
luego de 50 a100 mg cada 8 h, hasta que el paciente de 70 años (59:1000). En ese trabajo también se encontró
esté estable. que la presencia de anticuerpos antitiroideos circulantes es
f) Medidas específicas: propiltiouracilo, de 900 a un factor de riesgo para el HP. En otras latitudes, la preva-
1 200 mg por v.o. en una dosis, luego de 300 a lencia de esta afección varía entre 0,5 y 7 %, en dependen-
600 mg/día en 3 dosis. cia de las características de la población estudiada: edad,
g) Yoduro de sodio: 1 g por vía e.v., disuelto en solu- sexo y yodo ambiental.
ción salina, lentamente, a pasar en 30 min; repetir Las manifestaciones clínicas dependen del tiempo de
cada 8 ó 12 h, según respuesta clínica. También se evolución de la enfermedad, de la edad al diagnóstico y de
puede usar solución de lugol, 20 gotas por v.o. la causa.
cada 8 h. Basado en la causa del hipotiroidismo del adulto, se-
h) Propranolol: de 20 a 80 mg/cada 6 h, o 1 a 2 mg/cada gún localización anatómica de la lesión y las característi-
5 min por vía e.v., hasta dar 10 mg. cas humorales, tenemos:
i) En algunos casos es preciso emplear plasmaféresis
o diálisis peritoneal y más raramente la tiroidectomía 1. Primarios o tiroideos:
total. a) Tiroxina total (T4t) baja y tirotrofina (TSH) alta,
con respuesta aumentada de TSH pos TRH (hormo-
na hipofisioria liberadora de trofina):
- Atrofia idiopática.
Rehabilitación - Agenesia de la tiroides.
- Defectos en la hormonosíntesis.
- Pos I131 o cirugía.
En general, estos pacientes quedan sin limitación físi- - Tiroiditis Hashimoto.
ca ni psíquica, excepto cuando existe oftalmopatía malig- - Bociógenos.*
na donde se proscribe: trabajos con exposición al sol, pol- - Enfermedades infiltrativas.
vo, ambiente seco, escasa iluminación y que requieran gran - Déficit o exceso de yodo.
precisión. 2. Secundarios o hipofisarios:
a) T4t y TSH bajas, no respuesta de TSH pos TRH:
- Tumores hipofisarios.
- Procesos inflamatorios.
HIPOTIROIDISMO - Infecciones de la región hipofisaria.
- Necrosis hipofisiaria.
- Sección quirúrgica del tallo hipofisario.
Daysi Navarro Despaigne 3. Terciarios o hipotalámicos:
Ivet Salas Mainegra a) T4t y TSH bajas con respuesta TSH pos TRH:
- Tumores supraselares.
El cuadro clínico que resulta del déficit de función del - Craneofaringeoma.
eje hipotálamo-hipófisis-tiroides, se conoce como - Trauma craneal.
hipotiroidismo. A continuación se muestran las causas más - Procesos inflamatorios, infecciosos o infiltrativos
frecuentes del hipotiroidismo; en la práctica clínica diaria, del hipotálamo.
las causas tiroideas, conocidas como hipotiroidismo pri- 4. Periféricos:
mario (HP), son las más frecuentes; es por eso que en este a) T4E y TSH altas:
acápite nos referiremos fundamentalmente a ellas. - Resistencia periférica congénita a hormonas
tiroideas (HT).
* Medicamentos: amiodarona, antitiroides de síntesis, contrastes yodados, carbonato de litio, sulfamidas, sulfonilureas,
PAS y fenilbutazona.
850 Temas de Medicina General Integral
entre la 5ta. y 6ta. décadas de la vida; asimismo, tarda va- desencadenado por: exposición al frío, uso de depresores
rios años en manifestarse en su totalidad. del sistema nervioso, infecciones y traumatismos graves.
La presencia de bocio sugiere origen autoinmune Al examen físico se encuentra: piel fría y seca, hipoter-
(tiroiditis de Hashimoto), dishormonogénesis tiroidea, uso mia, bradicardia, hipotensión arterial y toma de la con-
de bociógenos o bocio endémico. Los hipotiroidismos ciencia (coma).
secundarios y terciarios se caracterizan por ausencia de bo- De los complementarios llama la atención la hipogli-
cemia, hiponatremia y aumento de enzimas musculares.
cio, la piel es fina y arrugada, existe aumento de la sensibi-
El estudio de la función tiroidea solo sirve para confir-
lidad al frío y constipación, entre otros, y se acompaña,
mar el hipotiroidismo.
además, de los síntomas neurológicos correspondientes
según la localización de la afección hipotálamo-hipofisaria,
así como de otros déficits endocrinos. Existe el llamado
hipotiroidismo primario subclínico o baja reserva tiroidea, EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
donde el paciente habitualmente está asintomático o pue-
de presentar hipertensión arterial de difícil control o sínto-
mas depresivos. Su diagnóstico se confirma ante valores de
TSH basal elevados o con hiperrespuesta de TSH a la TRH; El diagnóstico positivo anatómico y etiológico se hace
por el cuadro clínico y al encontrar niveles plamáticos dis-
en presencia de valores de T4E es normal.
minuidos de hormonas tiroideas –T4t ó T3t ó PBI.
Como grupos de riesgo tenemos: sujetos con antece-
La localización anatómica se hará según los resultados
dentes familiares de tiroidopatías, sobre todo si presentan, de los niveles de TSH, tanto basales como pos TRH.
además, bocio, anticuerpos antiTg y/o antiperoxidasa po- Para precisar la causa, se debe determinar: niveles de
sitivos, hiperlipoproteinemias, o son mujeres mayores de anticuerpos antitiroideos (antiTg y antiperoxidasa), excre-
70 años de edad. ción urinaria de I127, gammagrafía tiroidea, ultrasonido de
la tiroides y la BAF. En los casos hipotálamo-hipofisarios
1. Hipotiroidismo primario manifiesto en el adulto. Sus se emplearán los estudios imagenológicos correspondien-
síntomas son: cefalea, fatiga, aumento de peso, apetito tes como: rayos X simple de silla turca, TAC y resonancia
disminuido, constipación, somnolencia diurna, magnética nuclear de hipófisis y/o de cerebro. En ocasio-
parestesia, intolerancia al frío, aumento de volumen de nes, será preciso realizar estudio funcional del resto de la
la cara, manos y pies, bradipsiquia, disfunción sexual, función hipofisaria –determinar niveles de prolactina,
trastornos menstruales y caída del cabello. gonadotropinas y ACTH, entre otras.
Al examen clínico se observan signos como: facies
abotagada; piel seca, fría, áspera y amarilla; pelo seco,
quebradizo y pierde la cola de la ceja; edema duro de
los miembros inferiores; voz ronca, bradicardia,
Diagnóstico diferencial
bradipsiquia, disminución de los ruidos cardíacos,
hipertensión arterial y galactorrea. Clásicamente, el HP de larga evolución se debe dife-
2. Hipotiroidismo primario subclínico. Sospecharlo en renciar del síndrome nefrótico, donde las características del
sujetos con presencia de hipertensión arterial –hi- edema, piel, bradicardia y nivel de hormonas tiroideas per-
perlipoproteinemia y/o depresión de difícil tratamien- miten establecer la diferencia.
to, con anticuerpos antitiroideos circulantes, sobre En los hipotiroidismos secundarios el diagnóstico di-
todo si son familiares de pacientes con tiroidopatías. ferencial se hará con: anorexia nerviosa, hipopituitarismos
totales de cualquier causa, en los que los antecedentes psi-
3. Hipotiroidismo primario en niños y adolescentes. Ca-
quiátricos o la historia obstétrica permitirán establecer la
racterizado por retardo del crecimiento y la madura-
diferencia –en el primer caso no existe hipotiroidismo, en
ción ósea. el segundo el déficit tiroideo forma parte del cuadro
4. Hipotiroidismo en el recién nacido. Sospechar si hay clínico.
hernia umbilical, llanto «ronco», dificultad para la de- Los exámenes complementarios estarán dirigidos a:
glución, constipación, persistencia del íctero fisioló-
gico y/o retardo psicomotor. 1. Confirmar la hipofunción tiroidea: determinar niveles
5. Hipotiroidismo primario en el anciano. Habitualmen- de T4t y como método alternativo los niveles de yodo
te es oligosintomático, por lo que se debe sospechar unidos a proteínas (PBI).
ante la presencia de: anorexia, constipación, depre- 2. Precisar su causa.
sión, artritis, sordera o somnolencia. 3. Buscar sus complicaciones: hemograma –anemia lige-
La complicación más temida del hipotiroidismo es el ra macrocítica o por déficit de hierro–, niveles de
coma mixedematoso –en nuestro medio no es fre- colesterol plasmáticos (estarán elevados), electrocar-
cuente–, que se caracteriza por comienzo insidioso,
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 851
diograma –bradicardia sinusal, microvoltaje, entre necesitar de 10 a 15 días para ser suprimido. Se administran
otros–, telecardiograma –aumento de la silueta cardía- 1 vez al día. La l-T3 se absorbe mejor, su vida media es de 1 día
ca–, electromiografía –retardo en la velocidad de con- y sus niveles sanguíneos son fluctuantes y pierden su efec-
ducción–. Si bien estos exámenes son importantes, lo to en menos de 1 semana. Necesita fraccionamiento de la
fundamental es establecer la hipofunción tiroidea. dosis diaria.
La dosis de comienzo dependerá de la edad del pacien-
te, intensidad del hipotiroidismo y la presencia de compli-
caciones.
RUTA DIAGNÓSTICA
hipofunción tiroidea, antes de cualquier intervención so- congénito, donde el retraso en el tratamiento conduce a
bre la hipófisis. retardo en la maduración del SNC.
8. Estos factores son potenciados si se trata de mayores A los pacientes con síntomas o signos típicos se les
de 35 años y del sexo femenino. realizará una glucosuria parcial –tiras reactivas o Benedict–
inmediatamente. Si esta es positiva, se les buscará la pre-
sencia de cuerpos cetónicos en la orina –tiras reactivas,
tabletas o reacción de Imbert–; si esta también es positiva,
Normas y procedimientos se trata de una cetosis o cetoacidosis, por lo que deben ser
enviados al cuerpo de guardia para tratamiento intensivo.
para la detección, diagnóstico Si solamente se comprueba glucosuria, se les realizará
y clasificación de la diabetes mellitus glicemia de inmediato para comprobar el diagnóstico de
diabetes.
y de la tolerancia a la glucosa Si la glicemia en ayunas es negativa, se les realizará
alterada una prueba de tolerancia a la glucosa; si esta es negativa, se
repetirá cada 2 años a las pacientes con TGA previa y TGA
potencial, o en cualquier momento que aparezcan nuevos
índices de sospecha.
Detección
Ayunas 4,4-6,7 4,4-6,7 5,5-7,8 5,5-7,8 1. Diabetes mellitus. Pacientes con síntomas y signos clá-
(80-120) (80-120) (100-140) (100-140) sicos de hiperglicemia y cifras de estos confirmadas, es
decir, 7,8 mmol/L (120 mg/dL) o más en ayunas, o
pacientes con 11,1 mmol/L (200 mg/L) 2 h después de
En general, las cifras que se toman como diagnóstico una prueba de sobrecarga de 75 g de glucosa.
dependen del origen y procesamiento de la sangre. En el
2. Diabetes mellitus insulinodependiente (DMID). Aque-
orden práctico estas cifras se pueden considerar indistinta-
llos pacientes diabéticos que de no ser tratados con
mente al utilizar los métodos de glucosa-oxidasa, gluco-
insulina presentan rápidamente cetoacidosis diabéti-
kinasa, ortotolouidina o Somogyi-Nelson. Cada facultativo
debe conocer el método que utiliza su laboratorio, para ca. La insulinopenia es característica y la mayoría de
familiarizarse con las cifras de glicemia en sangre total o los casos comienza en la niñez o juventud, aunque
plasma, venoso o capilar. puede aparecer a cualquier edad.
Otro elemento a tener en cuenta es que cuando no exis- 3. Diabetes mellitus no insulinodependiente (DMNID).
tan síntomas ni signos, una sola prueba de tolerancia a la Son aquellos pacientes que no presentan fácilmente
glucosa positiva no será suficiente para hacer el diagnósti- cetoacidosis, aun sin usar insulina. Se controlan habi-
co definitivo. En estos casos será necesario repetir la prue- tualmente con dieta o hipoglicemiantes por vía oral.
ba un tiempo después, para confirmar el diagnóstico. Un grupo de estos pacientes, después de un largo tiem-
po de evolución, pueden requerir insulina para estar
bien controlados, o pueden hacer cetoacidosis bajo
circunstancias especiales como estrés o infecciones.
Clasificación 4. Diabetes mellitus relacionada con malnutrición
(DMRM). Se refiere a un tipo de diabetes observada en
algunos países tropicales subdesarrollados, que apare-
1. Clases clínicas: ce habitualmente en jóvenes con historia de deficien-
a) Diabetes mellitus (DM). cia nutricional, delgados, con necesidades de insulina
- Insulinodependiente (DMID): moderadas o altas y ausencia de cetosis.
- No insulinodependiente (DMNID): Si este síndrome se asocia con fibrosis, calcificaciones
. Obesos. pancreáticas y anomalías de la función pancreática
. No obesos. exocrina, se denomina diabetes fibrocalculosa; cuan-
- Relacionada con malnutrición (DMRM): do no existen estos elementos, se le considera diabe-
. Diabetes pancreática fibrocalculosa. tes por déficit proteico.
. Diabetes pancreática por déficit proteico. 5. Tolerancia a la glucosa alterada (TGA). Pacientes con
- Otros tipos relacionados con ciertas condiciones o niveles de glucosa en ayunas, no diagnosticados, y
síndromes: grado de intolerancia a la glucosa entre normal y dia-
. Pancreatopatías. bético. Estos pacientes tienen un riesgo mayor de de-
. Causas hormonales. sarrollar aterosclerosis que la población no diabética.
. Inducida por medicamentos. 6. Diabetes gestacional (DMG). Se catalogan como dia-
. Anomalía de la insulina o el receptor. béticas gestacionales aquellas pacientes con cifras de
. Ciertos síndromes genéticos. glicemia patológicas (de TGA ó DM) durante el emba-
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 855
cardiovascular–, previa interconsulta, y en pacientes mañana –antes del desayuno– y 1/3 en la tarde, entre las
en los que no se controla su peso con glibenclamida o 6:00 y 7:00 p.m –antes de la comida–, aunque cada pacien-
tolbutamida y que además no necesitan insulina. te tiene un perfil glicémico particular que obliga a utilizar
En casos especiales y previa interconsulta se podrá otras proporciones y horarios.
ensayar la asociación con glibenclamida o tolbutamida. Se indicará en casos de:
b) Glicemia en ayunas y/o posprandial menores que g) Tratamiento adecuado de cualquier sepsis del tracto
200 mg/dL (11,1 mmol/L) en plasma venoso en el urinario.
80 % de las veces que se evalúen. h) No usar inyecciones de medios de contrastes para
c) Glucosuria de 24 h menor que el 10 % de carbo- exploraciones radiográficas, sobre todo si la creati-
hidratos ingeridos en el día –el 60 % de las nina es mayor que 3 mg/dL.
glucosurias parciales negativas. 2. Pie diabético:
d) Colesterol sanguíneo menor que 240 mg/dL a) Informar al paciente de este peligro si no logra un
(6,2 mmol/L).
buen control metabólico, especialmente aquellos
3. Descontrol grave. Contempla el resto de los casos.
de más de 40 años de edad, con malos hábitos hi-
giénicos, con más de 10 años de evolución, obesos,
hipertensos, fumadores y sedentarios.
b) Detectar aquellos pacientes con: deformidades
Prevención de las complicaciones podálicas como hallux valgus, dedos en martillo,
en garra o en maza; subluxaciones de dedos; pie
Si bien la piedra angular para la prevención de las com- equino, pie varo o valgo o sus combinaciones; o
plicaciones en la mayoría de los diabéticos es la obtención con trastornos de la marcha.
del control metabólico estricto, también la eliminación de c) Puntos de mayor presión en dedos o pies, que se
ciertos factores de riesgo para la macro y microangiopatía manifiestan por eritemas e hiperqueratosis, ya sean
es necesario tomarla en cuenta. La práctica sistemática de circunscritas o difusas, únicas o múltiples.
ejercicios físicos y la adopción de un estilo de vida apro- d) Onicomicosis, crecimiento anormal de las uñas,
piado de autocontrol, así como las visitas periódicas al uñas encarnadas, paroniquias, epidermofitosis inter-
médico, constituyen elementos indispensables para lograr digital u otras puertas de entrada para agentes quí-
esta prevención. micos, físicos o biológicos.
e) Úlceras (o antecedentes) o amputaciones previas.
f) Piel seca, trastornos del trofismo, disminución o au-
sencia del vello cutáneo y cambios de coloración.
MEDIDAS GENERALES g) Disminución o ausencia de pulsos, abolición o dismi-
nución de la sensibilidad y/o motilidad voluntaria.
1. Mantener al paciente con un control metabólico es- h) Calcificaciones arteriales, osteoporosis, fracturas
tricto, en caso de glicemias plasmáticas por debajo de patológicas u otras alteraciones óseas o articulares.
140 mg/dL (7,8 mmol/L) en ayunas y posprandial. 3. Cardiopatía isquémica y enfermedades cerebrovascu-
2. Control de la obesidad y de los lípidos sanguíneos, lares. Informar al paciente sobre la mayor frecuencia de
mediante dieta para mantener el peso ideal, baja en infarto del miocardio y accidentes vasculares ence-
grasa animal, colesterol, azúcares refinados y sal, pero fálicos en los portadores de diabetes, en especial si no
rica en fibras dietéticas. hay buen control metabólico, en los casos con hiper-
3. Control de la tensión arterial por debajo de 140/90 mmHg. colesterolemia, práctica del hábito de fumar, no con-
4. Eliminar el hábito de fumar. trol de la tensión arterial, obeso, sedentario y más de
5. Práctica sistemática de ejercicios físicos. 40 años de edad.
6. Asistencia regular a consulta. 4. Retinopatía diabética.
7. Aseo personal y cepillado correcto de los dientes, así a) Informar la posibilidad de la complicación si no
como el cuidado sistemático de los pies. hay un buen control, especialmente a los diabéti-
cos que hayan debutado a edades tempranas y/o
con más de 10 años de evolución.
b) Realizar fondo de ojo todos los años:
MEDIDAS ESPECÍFICAS - Si hay retinopatía no proliferante con edema ma-
cular: cada 4 ó 6 meses.
- Si hay retinopatía proliferante, cada vez que se de-
1. Nefropatía diabética: termine por el nivel secundario o terciario.
a) Informar al paciente de este peligro si no logra un c) Velar por el cumplimiento del tratamiento indicado,
buen control, especialmente en diabéticos de de- así como la concurrencia sistemática a las consul-
but temprano y/o de más de 10 años de evolución. tas de oftalmología.
b) Recomendar la ingesta adecuada de líquidos. d) Recordar que el control de la hipertensión arterial,
c) No retener micciones por más de 3 h. el hábito de fumar y una glicemia plasmática me-
d) Evitar dietas hiperproteicas. nor que 140 mg/dL (7,8 mmol/L), son indispensa-
e) Evitar instrumentación uretral innecesaria. bles en estos casos.
f) Evitar el uso de drogas nefrotóxicas (kanamicina, e) Si hay hemorragias y revascularización, se deben
ciclosporina, etc.). evitar las hipoglicemias.
860 Temas de Medicina General Integral
2. Todas las embarazadas diabéticas deben ser remitidas - Coma hiperosmolar y/o láctico.
a la consulta provincial de diabetes y embarazo. - Hipoglicemia severa sin recuperación.
3. Toda diabética en edad fértil debe ser remitida a la - Infecciones graves.
consulta de riesgo preconcepcional. 6. Todos los diabéticos insulinodependientes deben ser
4. Diabéticos insulinodependientes inestables, con aler- enviados una vez al año para chequeo anual a centros
gia a la insulina, resistentes a la insulina (más de 100 U de atención al diabético.
al día), de difícil control -aquellos pacientes con más 7. Diabéticos que comienzan o para educación intensiva,
de tres consultas consecutivas con criterios de mal con- remitirlos al centro diurno de los centros provinciales
trol metabólico-, enviarlos al centro de atención al dia- de atención al diabético.
bético e endocrinólogo provincial. 8. A los pacientes con hiperlipoproteinemias, remitirlos
5. Diabéticos con complicaciones crónicas:
al centro de atención al diabético:
a) Remisión al servicio de oftalmología a los pacien-
tes con oftalmopatías: glaucoma, catarata, reti- a) Hiperlipoproteinemias tipos I, IIb, III y V.
nopatía proliferante y no proliferante –con hemo- b) Hiperlipoproteinemias tipos IIa, IV, que no son con-
rragias y/o compromiso de la mácula. troladas después de tres consultas consecutivas.
b) Remisión al servicio de nefrología a los pacientes
con complicaciones renales: sepsis renales recurren- Para asegurar una buena interrelación entre los dife-
tes, nefropatía diabética clínica (albuminuria mante- rentes niveles del sistema, utilizar la historia clínica
nida), edemas, hipertensión e insuficiencia renal. ambulatoria, el libro del diabético e informes escritos en
c) Remisión de los pacientes con complicaciones vascu- ambos sentidos.
lares periféricas al servicio de angiología si hay:
- Signos inflamatorios en miembros inferiores;
dolor de aparición brusca.
- Hiperqueratosis, pérdida del vello, frialdad, ciano- Adaptación y rehabilitación
sis, palidez.
- Lesiones ulcerosas.
- Claudicación intermitente. En realidad, el programa educativo al diabético ya
- Dolor en reposo. constituye un elemento de adaptación y rehabilitación de
- Disminución, ausencia o soplos en pulsos peri- estos pacientes; sin embargo, existen algunos aspectos,
féricos. como escolares, orientación profesional y laboral, que de-
- Calcificaciones arteriales. ben ser enfatizados en este acápite; asimismo, lo relativo a
- Lesiones asintomáticas que se hagan dolorosas. la presentación de algunas complicaciones específicas, todo
- Lesiones óseas, fracturas patológicas, osteoporosis. lo cual debe ser remitido al nivel correspondiente del Sis-
- Linfangitis. tema Nacional de Salud.
- Gangrena seca o húmeda.
- Otras lesiones microangiopáticas (retinopatías).
1. Escolares. A estos pacientes es necesario, además de
d) Remisión al servicio de ortopedia si:
asegurarles el tratamiento adecuado, evitarles la sobre-
- Deformidades óseas.
protección familiar, tan frecuente en este período, para
- Deformidades podálicas.
- Trastornos de la marcha. lo cual la participación en campamentos vacacionales
e) Remisión al servicio de neurología: de verano para niños diabéticos tiene un papel de gran
- Mononeuropatía asimétrica: comienzo brusco, utilidad.
dolor, parálisis especialmente en II, VI, III y VIII Los maestros que atienden a estos niños estarán in-
pares craneales, peroneo, ciático, cubital, media- formados de las características de esta enfermedad –co-
no, largos torácicos. mo la poliuria y la polidipsia–, para facilitar la com-
- Polineuropatía periférica: comienzo insidioso, prensión de ciertas situaciones en la escuela, además
hipo o apalestesia, pérdida de sensibilidad, hipo o de los síntomas y factores relacionados con la hi-
arreflexia con parestesias, disestesias o hiperalgesia perglicemia, cetoacidosis y la hipoglicemia y, por con-
con atrofia muscular o sin ella, trastornos tróficos, siguiente, la conducta a seguir en estos casos.
disminución de la sudación. 2. Adolescentes. Es imprescindible conocer las compli-
- Sistema nervioso autónomo: impotencia –puede caciones del paciente joven, para poder aconsejarlo
ser vascular, neurológica o psíquica–, eyaculación dentro de la gama de oficios y profesiones hacia las
retrógada, vejiga neurogénica –diuresis matutina cuales se sienten atraidos y dirigir la atención hacia
mayor que 400 mL–, trastornos digestivos, taqui- aquellas recomendables al respecto.
cardia, otros. Se mantienen estudios que permiten una definición
f) Remisión al servicio de urgencia: científica de la problemática profesional del diabético
- Cetoacidosis diabética. y la legislación al respecto.
862 Temas de Medicina General Integral
3. Adultos. Aquellos pacientes que presentan limitacio- agudas más graves de la diabetes mellitus, aunque la CAD
nes físicas a causa de las complicaciones relacionadas se produce con mayor frecuencia en los pacientes que pa-
con la diabetes serán orientados, según el programa a decen diabetes mellitus tipo I; también los pacientes diabé-
la rehabilitación de cada uno de ellos y a su incorpora- ticos tipo II son vulnerables a presentarla en determinadas
ción a las asociaciones específicas como la Asociación condiciones.
Nacional del Ciego (ANCI), la de impedidos físicos Hoy, con un mayor conocimiento de la patogenia y,
(ACRIFLIM), etc. por ende, un mejor tratamiento, se ha producido un cambio
espectacular en el pronóstico de esta complicación, lo que
ha reducido la mortalidad a menos del 5 % por esta causa;
sin embargo, todavía se producen fracasos terapéuticos de-
Profesiones u oficios no recomendables bidos, fundamentalmente, a fallos al realizar un diagnósti-
co precoz y a desconocimientos acerca de cómo tratar esta
al paciente diabético complicación.
Diagnóstico positivo
CETOACIDOSIS DIABÉTICA
CUADRO CLÍNICO
El examen físico puede revelar respiración de Kuss- 2. Bajo nivel de bicarbonato (menor que 15 mEq/L).
maul, aliento cetónico, fiebre, diferentes grados de deshi- 3. Bajo pH menor de 7,3.
dratación –lengua seca, hipotonía de globos oculares, plie- 4. Cetonemia mayor que 5 mmoL.
gue cutáneo y taquicardia.
El estado de conciencia no guarda una buena correla-
ción con los niveles de glicemia, cetonemia, iones de
hidrógeno o de electrólitos, pero hay correlación positiva Tratamiento
entre el grado de osmolaridad plasmática y el estado de
conciencia. Las convulsiones no son frecuentes; si se pre- Tratamiento preventivo. La educación diabetológica
sentan, son índice de mal pronóstico. El examen físico pue- es el pilar fundamental para evitar la cetoacidosis, de ahí la
de revelar, además, manifestaciones clínicas dependientes importancia del seguimiento en el área de salud por el mé-
de los factores desencadenantes. dico de familia, la adecuada relación médico-paciente y, a
su vez, un nivel correcto de comunicación con los niveles
secundario y terciario de atención.
El paciente educado raras veces presenta esta compli-
Diagnóstico diferencial cación, de ahí la importancia de una educación donde se le
enseñen los aspectos fundamentales de la diabetes, el
autocontrol, el manejo de la dosis de insulina ante situacio-
Se debe tener en cuenta que los diabéticos pueden pre- nes especiales, la prevención de los factores precipitantes y
sentar estado de coma por causas ajenas a la cetoacidosis
el reconocimiento de los síntomas y signos de la cetoacidosis
diabética, como son:
diabética.
1. Coma hipoglicémico. Ante un estado preacidótico, si el paciente entiende lo
2. Coma hiperosmolar. que está sucediendo y sabe qué hacer, es muy probable que
3. Acidosis láctica. esta no se desencadene.
4. Accidentes vasculares encefálicos.
5. Traumas encefálicos.
6. Meningoencefalitis.
7. Infarto cerebral. TRATAMIENTO DE LA CETOSIS
8. Infarto del miocardio.
9. Pancreatitis aguda. Si se trata de un diabético insulinodependiente, si no
10. Abdomen agudo (médico o quirúrgico). hay toma del estado general, sin vómitos ni hiperven-
11. Cetoacidosis alcohólica. tilación, con el sensorio presente, el tratamiento puede rea-
12. Intoxicación por salicilatos y otras sustancias ácidas. lizarse en el cuerpo de guardia sin necesidad de hospitali-
13. Uremia. zación.
14. Ayuno prolongado con cetosis.
1. Al inicio se tomará muestra de sangre para determinar
glucemia, así como muestra de orina para determinar
glucosa, cuerpos cetónicos, leucocitos, presencia de
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS hematuria, cilindros y bacterias.
2. Cada 1 h se tomará muestra de orina para determina-
Cetosis: ciones de glucosa y cuerpos cetónicos.
3. Se tomará muestra de sangre cada 1 h para determinar
1. Glicemia. La hiperglicemia no siempre es proporcio- glucemia.
nal al grado de cetosis; generalmente es superior a 4. Se le ofrecerá agua bicarbonatada fría –125 mL con 5 g
250 mg/dL (13,8 mmol/L). de bicarbonato de sodio–, con una frecuencia horaria.
2. La glucosuria suele ser intensa. 5. Si el paciente no se ha inyectado su dosis habitual de
3. Cetonemia superior a 2 mmol y menor que 5 mmol. insulina lenta, se le administrará junto con insulina
4. Cetonuria. Se presenta en grados variables. regular (simple), a razón de 0,1 UI/kg de peso corporal
5. Reserva alcalina superior a 15 mEq/L. por vía i.m.; la insulina regular se seguirá administran-
do con una frecuencia horaria, hasta resolver la cetosis.
Cetoacidosis. En este caso, el diagnóstico definitivo
6. Cuando la glucosuria disminuye (glucosuria ligera + ó
se hará ante la presencia de:
++), los intervalos de las inyecciones pueden espaciar-
1. Hiperglicemia mayor que 250 mg/dL (mayor que se de 2 a 4 h y comenzar la alimentación (jugos de fruta
13,8 mmol/L). o leche) para evitar hipoglicemias.
864 Temas de Medicina General Integral
7. Es obligada la búsqueda de posibles factores desenca- dos si se presentara shock o la presión sistólica se man-
denantes para tratarlos simultáneamente; con este pro- tuviera por debajo de 80 mmHg.
ceder evitamos la cetoacidosis o un coma. 9. Administrar antibióticos de amplio espectro si existen
8. Una vez resuelta la cetosis se procederá al reajuste de signos de infección o si se han utilizado procederes
la dosis de insulina lenta. cruentos o la gravedad del paciente no permite esperar
el resultado de los exámenes bacteriológicos,.
10. Administrar oxígeno a razón de 5 L/min si la PO2 está
por debajo de 80 mmHg.
TRATAMIENTO DE LA CETOACIDOSIS 11. Evitar el uso sistemático de sondas nasogástricas; usarla
solo si existe retención gástrica, ya que puede provo-
car una broncoaspiración.
La cetoacidosis diabética es una emergencia médica
que exige un diagnóstico precoz y un tratamiento que debe Los objetivos del tratamiento de la cetoacidosis son:
ser realizado en una unidad de cuidados intensivos, por un
equipo de salud experimentado; el tratamiento no debe 1. Mejorar el volumen circulatorio y la perfusión de los
obedecer a ningún esquema prefabricado y las recomenda- tejidos.
ciones deben ser solo una guía para la acción; la atención 2. Disminuir el nivel de glucosa en suero.
por parte del médico debe ser personal y constante hasta la 3. Eliminar los cetoácidos del suero y de la orina a un
recuperación del paciente. ritmo constante.
El tratamiento es dinámico e individual; se tendrá en 4. Corregir el desequilibrio electrolítico.
cuenta la edad, estado vascular, presencia de infecciones, 5. Identificar las causas precipitantes y corregirlas, si es
grado y duración de la acidosis, duración y tiempo de dura- posible.
ción de la diabetes; mientras menor es la duración, mayor
es la sensibilidad a la insulina.
presión capilar pulmonar (PCP) o, en su defecto, la presión 40 mEq/L de potasio –2/3 como cloruro y 1/3 como fosfato–.
venosa central (PVC) para evaluar la hidratación con ma- Nunca pasar los 40 mEq/L de potasio.
yor efectividad y precisión, y evitar la descompensación Una vez que se restablezca la alimentación oral, el res-
cardiovascular. tablecimiento de potasio se efectuará preferentemente por
esta vía.
INSULINOTERAPIA
BICARBONATO DE SODIO
Al confirmarse el diagnóstico de cetoacidosis diabéti-
ca, si el paciente está consciente se le administrará insulina Cuando la hidratación y la insulinoterapia son ade-
regular, a razón de 0,4 U/kg de peso; la mitad como bolo cuadas, rara vez se necesita bicarbonato de sodio para solu-
intravenoso y la otra mitad por vía i.m.; en caso de pacien- cionar la cetoacidosis.
tes en estado de coma o con deshidratacón severa, ingresa- Entre las desventajas del tratamiento con bicarbonato
dos en unidad de cuidados intensivos, se administrarán de se encuentran:
5 a 7 U de insulina regular por hora, en forma de infusión
continua. 1. El empeoramiento de la hipocalemia.
Si la glicemia no disminuye el 10 % en la 1ra. hora, se 2. Producción de acidosis paradójica del sistema nervio-
duplicará la dosis de insulina cada 2 h, hasta alcanzar so central.
11,1 mmol/L y se pasará por vía e.v. solución de dextrosa 3. Empeoramiento de la acidosis intracelular a causa de
al 5 % en solución salina al 0,45 %, si el sodio es mayor que la elevada producción de dióxido de carbono.
14 mEq/L o en solución salina al 0,95 %, si el sodio es me-
4. Prolongación del metabolismo de cetoaniones.
nor que 140 mEq/L a 100 250 mL/h, con administración
de 5 a 7 U de insulina regular por vía subcutánea o en
En general, se recomienda no administrar bicarbonato
infusión endovenosa, para mantener la glicemia entre 8,8 y
si el pH es mayor que 7,0; si el pH se encuentra entre 6,9 y
11,1 mmol/L.
7,0, administrar 44 mmoL de bicarbonato de sodio en 250 a
500 mL de una solución salina al 0,45 %, a pasar en un
tiempo de 30 a 60 min. Si el pH es de 6,9, se administrarán
POTASIO 88 mmoL, hasta que el pH sea mayor que 7,0; se añadirán
15 mEq de potasio por cada 44 mmoL de bicarbonato para
prevenir la hipocalecemia.
Durante el tratamiento de la cetoacidosis con hidra-
tación e insulina se produce una rápida disminución de la
concentración plasmática de potasio, durante las primeras
horas del tratamiento. Este hecho ha tratado de explicarse TRATAMIENTO CON FOSFATO
mediante varios mecanismos:
1. Entrada de potasio a la célula al corregir la acidosis. Hasta el momento, los estudios realizados no han de-
2. Pérdida urinaria de potasio al hidratar al paciente. mostrado los beneficios clínicos del uso del fosfato en los
3. Dilución por la propia hidratación. pacientes con cetoacidosis; sin embargo, se ha planteado
4. Mayor penetración de potasio en la célula por influen- que en estos pacientes el fosfato en el organismo disminu-
cia de la insulina. ye aproximadamente 1 mmoL/kg, debido a las grandes pér-
didas en la orina, secundarias a la diuresis osmótica.
El desarrollo de hipocalemia es potencialmente el tras- Durante la sustitución del déficit de potasio el empleo
torno electrolítico que más amenaza la vida del paciente de 2/3 de potasio en la forma de cloruro y 1/3 en forma de
durante el tratamiento. Si el K+ sérico es mayor que 5,5 mEq/L, fosfato potásico resuelven casi siempre las necesidades del
no administrar potasio, pero controlarlo cada 22 h, si es mismo.
mayor que 3,3 y menor que 5,5 mEq/L. Se administrará de
20 a 30 mEq de potasio en cada litro de infusión intravenosa;
como existe un déficit de fosfato se suministran 2/3 como
cloruro de potasio y 1/3 como fosfato para mantener nive- Seguimiento
les en suero de 4 a 5 mEq/L; las siguientes valoraciones del
potasio se harán cada 4 ó 6 h.
Si al inicio del tratamiento el potasio sérico es menor Cuando los pacientes poscetoacidóticos se encuentran
que 3,3 mEq/L en la solución salina inicial, añadimos en estado de confusión mental o son incapaces de ingerir
866 Temas de Medicina General Integral
alimentos, se les debe dar líquidos glucosados por vía 10. Recurrencia del coma. Reevaluación clínica del pa-
intravenosa, dextrosa al 5 % en solución salina al 0,45 % de ciente y del esquema terapéutico empleado.
100 a 250 mL/L –en dependencia del estado de hidratación– 11. Edema cerebral. No es frecuente en el adulto; se produ-
y se les administrará insulina regular en escala deslizante ce por suministro excesivo de líquidos, por rápido des-
cada 4 h, hasta que el paciente sea capaz de ingerir alimen- censo de la glucemia o suministro demasiado rápido
tos por vía oral, momento en que se suspendierán los líqui- de sodio.
dos intravenosos y se le indicará una dieta basada en tres El paciente suele quejarse de cefalea intensa y presen-
comidas al día y una merienda a la hora de dormir. Se utili- ta vómitos en proyectil, visión borrosa, somnolencia y
zará la misma escala deslizante de insulina regular admi- coma profundo. Debe administrarse de inmediato:
nistrada antes de cada comida y a la hora de dormir. Ade- furosemida 40 mg por vía e.v.; la dosis puede repetirse
más, estos pacientes deben recibir insulina NPH u otra cada 4 a 6 h, hasta lograr mejoría clínica; en su defecto,
insulina de acción intermedia, de 15 a 20 U entre las 9 y suministrar manitol al 20 %, de 8 a 10 mL/kg de peso,
10 de la noche o fraccionada en dos dosis: 12 U antes del sin pasar de 250 mL en 1 h; puede repetirse igual dosis
repartida en 24 h –estas dosis se administrarán cada 4 a
desayuno y 8 U a las 10 de la noche, hasta que se restablez-
6 h–. Cuando indicamos estos medicamentos, en espe-
ca su dosis de mantenimiento.
cial la furosemida, debemos tener precaución de que el
paciente no se deshidrate por sobredosis, por lo que se
recomienda vigilar estrechamente la diuresis y el gra-
do de hidratación.
Situaciones que se deben tener 12. Edema pulmonar no cardiogénico. Es una complica-
en cuenta frente a una cetoacidosis ción rara, aunque potencialmente mortal; se presenta
durante el tratamiento de la CAD, cuando se realiza
diabética una hidratación excesiva.
13. Alcalosis metabólica iatrogénica. Administrar cloru-
ro de amonio total de miliequivalentes por litro en
1. La demora en hacer el diagnóstico y de iniciar el trata- 24 h = peso en kg x exceso de base x 0,3; utilizar la
miento puede agravar el coma. mitad de la dosis en 300 a 500 mL de dextrosa al
2. Si comprobamos la presencia de un hemograma con 5 %, con un goteo lento (40 gotas/min). Vigilar la
hemoconcentración y elevado conteo de leucocitos tensión arterial estrechamente. También se puede em-
sin desviación hacia la izquierda, debe repetirse cuan- plear acetazolamida: 500 mg por vía e.v. cada 6 u 8 h,
do mejore la hidratación del paciente para reevaluarlo. hasta lograr su corrección.
Cuando existe infección bacteriana, por lo general, el
conteo de leucocitos sobrepasa los 25 000/mm3 con
desviación hacia la izquierda.
3. Los pacientes con infección pueden ser más bien Pronóstico
hipotérmicos y no hipertérmicos.
4. Cuando en la orina se comprueba leucocituria y traza Está determinado por:
de albúmina, debe esperarse que mejore clínicamente
el paciente para darle interpretación correcta; si persis- 1. Duración del diagnóstico y tratamiento de la cetoaci-
te esta alteración, pensar en sepsis urinaria. dosis.
5. Cuando un paciente con una osmolaridad plasmática 2. Duración y grado de inconciencia.
de 300 mOsm/kg se encuentra con confusión mental o 3. Presencia de shock.
en estado de coma, la alteración sensorial se puede 4. Gravedad de la cetoacidosis.
deber a otras condiciones no relacionadas con la 5. Gravedad de la deshidratación.
cetoacidosis. 6. Estado del aparato circulatorio.
6. Acidosis hiperclorémica. Administrar bicarbonato de 7. Complicaciones presentes.
sodio en las dosis señalada anteriormente. 8. Edad del paciente.
7. Anuria. Si a las 6 h de iniciado el tratamiento no hay
diuresis, se restringirán los líquidos administrados se-
gún la eliminación –diuresis y pérdidas insensibles–,
vigilar el potasio y, además, los electrólitos, e investi- FACTORES QUE SI NO SE TOMAN EN CUENTA
gar la causa. PUEDEN LLEVAR A LA MUERTE
8. Hipopotasemia. Se acompaña de debilidad muscular,
pérdida de los reflejos tendinosos, respiración suave y
distensión abdominal. Puede ser causa de paro cardía- 1. Poca educación del paciente en cuanto a conocimien-
co. tos de su enfermedad y sus complicaciones, lo que no
9. Hiperpotasemia. La administración rápida de potasio permite identificar los síntomas prodrómicos de la
puede inducir un paro cardíaco. cetoacidosis.
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 867
Tabla 29.3
Clasificación IMC
como parte del tratamiento de la enfermedad. En masa corporal o índice de Quetelet (kg/m2), que se calcu-
general, esta enfermedad es de muy difícil manejo médi- la como peso en kilogramos entre talla en metros cua-
co, ya que los pacientes se desalientan con facilidad cuan- drados y su resultado es en kg/m2 de superficie corporal.
do siguen el tratamiento por algún tiempo; para lograr La correlación de IMC con la grasa corporal determina-
resultados favorables es necesario tomar medidas serias da mediante la densidad corporal es de 0,7 a 0,8. El IMC
de educación nutricional que impliquen cambios en la puede utilizarse también para revalorar los riesgos para
conducta ante la ingestión de alimentos, tratamiento die- la salud asociados con el sobrepeso y puede ser una guía
tético y un paso muy importante: el apoyo psicológico a de la cantidad de grasa que tiene el individuo. El grado
los pacientes. de grasa corporal u obesidad puede medirse mediante el
Actualmente, el tratamiento preventivo es el primer grosor del pliegue cutáneo.
punto en la lucha contra esta enfermedad, así como una Las mediciones de este pliegue plantean el problema
campaña de educación sanitaria que comience en el mo- de que las ecuaciones utilizadas para calcular la grasa cor-
mento del ingreso de los niños en el círculo infantil para poral varían con la edad, el sexo y el trasfondo étnico. La
evitar la mayor extensión de la misma. grasa corporal aumenta con la edad, aun cuando la suma
de las determinaciones cutáneas permanezcan estables.
Este hallazgo implica que, con la edad, la grasa se acu-
mula en localizaciones no subcutáneas. En relación con
Definición y determinación la circunferencia de la cintura o abdomen y de las cade-
ras o glúteos proporciona un índice de la distribución
de la grasa corporal regional de la grasa y sirve también como guía para
y de su distribución valorar los riesgos para la salud. La circunferencia de la
cintura se determina en su zona más estrecha, por enci-
ma del ombligo, y la de las caderas, sobre la máxima
Tanto el sobrepeso corporal como la distribución de protrusión de los glúteos.
la grasa corporal son factores útiles para predecir los La grasa abdominal –relación androide-ginecoide
riesgos para la salud asociados con la obesidad, por lo alta– es característica de los hombres y recibe el nombre de
que es indispensable una definición clara de dichos tér- obesidad androide o de la parte superior del cuerpo. La
minos. grasa de las caderas –relación androide/ginecoide baja– es
El sobrepeso es el aumento de peso corporal por en- típica de las mujeres y se denomina obesidad ginecoide
cima de un patrón dado en relación con la talla. o de la parte inferior del cuerpo.
Por otra parte, la obesidad consiste en un porcentaje La tomografía axial computadorizada (TAC) y la reso-
anormalmente elevado de la grasa corporal y puede ser nancia magnética nuclear (RMN) proporcionan cálculos
generalizada o localizada. Para determinar si una per- cuantitativos de la grasa regional y determinan la propor-
sona es obesa o simplemente tiene sobrepeso debido al ción entre la grasa abdominal y extraabdominal. Las ondas
aumento desu masa muscular, hay que recurrir a técni- ultrasónicas aplicadas a la piel son reflejadas por la grasa y
cas y normas de cuantificación del peso corporal de la el músculo y otras interfases, por lo que también proporcio-
misma en el organismo. nan una medida del grosor del tejido adiposo en determina-
das regiones. Por último, puede utilizarse la activación de
neutrones en la totalidad del organismo para identificar la
composición química de sus tejidos, gracias a los distintos
Medidas antropométricas espectros de emisión. Se trata de un procedimiento caro y
disponible en muy pocos centros.
En resumen, es imposible calcular la cantidad de grasa
Para apoyar el diagnóstico de obesidad se utilizan corporal mediante distintos métodos. Desde el punto de
otros medios, entre ellos están: vista práctico, tres son los métodos más útiles: las determi-
Las medidas antropométricas, de ellas la talla y el naciones de la altura y el peso, expresadas preferentemente
peso, la circunferencia del tórax, la cintura, las caderas o como IMC, que proporcionan un cálculo sobre el grado de
las extremidades y el pliegue cutáneo son más fáciles de sobrepeso; el análisis de la impedancia bioeléctrica, que
aplicar y el entrenamiento de los investigadores es fácil. permite un cálculo cuantitativo de la grasa total y, valorar
Entre las más frecuentemente empleadas está el peso la distribución regional de la grasa; el método más utiliza-
estándar para la talla: es el peso promedio para la esta- do es la proporción entre la circunferencia del abdomen o
tura, sexo y edad determinados. Debemos recordar siem- cintura y la de los glúteos o caderas, aunque también puede
pre que el peso estándar para la talla influye en la estruc- emplearse el grosor del pliegue cutáneo subescapular.
tura ósea y el desarrollo muscular del individuo. Es posi- Utilizando una o varias técnicas, se llega a determi-
ble relacionar el peso y la talla de varias maneras. De nar cuáles son los componentes principales del organis-
todas ellas la más útil es la proporción llamada índice de mo.
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 869
vación directa de las personas obesas tiende a apoyar la gracias al aumento de tamaño de los adipocitos ya exis-
conclusión de que eligen y comen más alimentos, y lo tentes, sin que se eleve su número total o lo haga en escasa
hacen más a menudo y de una forma más rápida que las medida.
personas de peso normal. Las influencias ambientales Una disminución brusca del peso, probablemente está
externas como la luz y el ruido, también pueden modifi- acompañada de una reducción del tamaño de las células
car la cantidad y calidad de los alimentos ingeridos por grasas. Sin embargo, datos recientes sugieren que también
las personas obesas, más de lo que lo hacen en las perso- en las personas adultas podría cambiar el número de células
nas delgadas. La exactitud del cálculo de energía podrá grasas. Un incremento mantenido de la grasa del cuerpo
ser menor en los primeros. llevaría al aumento del número de células grasas; al contra-
Sin embargo, el aumento de peso en los adultos proba- rio, una reducción prolongada de la grasa corporal podría
blemente se debe a una mayor disminución en el gasto dar lugar, posiblemente, a una disminución del número de
energético y no al aumento de la ingesta alimentaria, que, adipocitos. El tamaño, el número y la distribución de los
en realidad, parece disminuir con la edad. adipocitos son útiles para clasificar la obesidad y pronosti-
car el resultado de los distintos métodos terapéuticos. Las
personas obesas con aumentos del 75 % o más por encima
del peso deseable, casi siempre tienen mayor número de
TEJIDO ADIPOSO células adiposas, mientras que los que padecen grados me-
nores de sobrepeso pueden ser hipercelulares, pero es mu-
Más del 90 % de la energía corporal se almacena en cho más probable que solo tengan aumento de tamaño de
forma de triglicéridos en el tejido adiposo. Las proteínas sus adipocitos.
proporcionan cantidades importantes, pero menores. Los La duración de la reducción de peso después del trata-
depósitos de glucógeno son, en comparación, diminutos, miento dietético satisfactorio de la obesidad es más corta, y
aunque constituyen una fuente esencial de glucosa durante la velocidad con que se vuelve a aumentar de peso es ma-
el ejercicio y el ayuno a corto plazo. yor en las personas con obesidad hipercelular que en los
El tejido adiposo tiene dos funciones principales: la que solo tienen una obesidad hipertrófica. La identifica-
síntesis y el almacenamiento de ácidos grasos en los ción de la adiposina, un péptido secretado por los adipocitos,
triglicéridos, y el almacenamiento de ácidos grasos como puede proporcionar un indicio sobre la forma en que fun-
fuente de energía metabólica. ciona este sistema.
Los triglicéridos son almacenados en las células adi-
posas que difieren en número y tamaño entre una región y
otra, y entre un organismo y otro. Las mujeres tienen gene-
ralmente más grasa glútea que los hombres. El número total Riesgos para la salud asociados
de células adiposas en las personas cuya obesidad comen- al exceso de peso
zó durante la infancia es mayor. El almacenamiento de gra-
sa en los primeros meses de la vida se produce, sobre todo,
por el incremento del tamaño de las células adiposas ya Existe una relación global entre el IMC y el exceso de
existentes. mortalidad. Hay una mortalidad mínima tanto para hom-
Hacia el final del primer año de vida, el tamaño de los bres como para mujeres en los individuos con un IMC de
adipositos virtualmente se duplica, mientras que su núme- 22 a 25 kg/m2. Las desviaciones del IMC por encima o por
ro total apenas cambia, de forma que es casi idéntico en los debajo de estos límites se asocian con un aumento de la
niños obesos que en los que no lo son. En los niños delga- mortalidad muy evidente en las personas con un IMC de
dos el tamaño de las células grasas disminuye después del 30 kg/m2. En la medida en que este índice se aproxima a
primer año. 40 kg/m2 la pendiente se vuelve cada vez más pronunciada.
Los niños obesos, en cambio, mantienen durante toda Asimismo, es evidente que la mortalidad aumenta cuando
la infancia el gran tamaño de los adipocitos que desarrolla- el IMC cae por debajo de 20 kg/m2.
ron durante el primer año de vida. La mortalidad debida al cáncer de pulmón aumenta
Las células grasas se multiplican en número a lo largo según disminuye el IMC, mientras que la mortalidad por
de los años de crecimiento, en un proceso que suele termi- enfermedad cardiovascular se eleva y acompaña dicho ín-
nar en la adolescencia. El número de adipocitos en los ni- dice. En ambos extremos de la curva en que se relaciona el
ños obesos aumenta de forma más rápida que en los niños IMC con la mortalidad, las causas de muerte son distintas.
delgados, hasta alcanzar el nivel de los adultos hacia los 10 ó Algunos cánceres y enfermedades respiratorias y digesti-
12 años de edad. Los datos disponibles en la actualidad vas suponen una excesiva mortalidad asociada con pesos
indican que después de la pubertad se producen cambios corporales bajos (IMC menor que 20 kg/m2), mientras que
agudos en los depósitos grasos del organismo, sobre todo, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes mellitus, las
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 871
alteraciones de la vesícula biliar y otros cánceres justifi- droide-ginecoide y relación cintura-caderas. Algunos
can el exceso de mortalidad en las personas con sobrepeso auto-res como Vague han sugerido que el predominio de la
e IMC mayor que 30 kg/m2. grasa ab-dominal suponía un mayor riesgo de diabetes y de
Está claro que los sujetos obesos desarrollan diabe- enfermedad cardiovascular. Se ha investigado la rela-
tes mellitus más frecuentemente que aquellos de peso nor- ción entre la distribución de la grasa, y la morbilidad y
mal o delgados. Así, por ejemplo, la Comisión Nacio- mortalidad en cinco estudios prospectivos, para los que
nal de Diabetes Mellitus de Estados Unidos en 1975, se- utilizó como indicadores de la distribución de la grasa
ñaló que el riesgo de diabetes era duplicado en los tanto la relación androide-ginecoide, como la relación
sobrepesos, quintuplicado en aquellos con obesidad mo- cintura caderas o la medición del pliegue cutáneo
derada y multiplicado por un múltiplo de 10 en los obe- subescapular o una combinación de los pliegues cutá-
sos severos. La causa no está clara, pero se conoce que en neos.
los obesos la insulina circulante se incrementa y hay una Todos los estudios mostraron una clara distinción y un
resistencia periférica a la acción de la misma. Se sugiere aumento significativo del riesgo de muerte, diabetes,
que la producción aumentada en los islotes de Langerhans hipertensión, ataque cardíaco y accidente vascular cerebral
lleva a un fallo de las células beta (Sims et al, 1973). Este en las personas con obesidad de la parte superior del cuerpo.
fallo está aparejado con una alta demanda de insulina,
que es la consecuencia de la obesidad.
bilis más saturada en colesterol y, en consecuencia, b) Según la distribución de la grasa del cuerpo. Tan-
mayor riesgo de formación de cálculos. to los hombres como las mujeres con obesidad de
la parte superior del cuerpo presentan mayor ries-
go de enfermedad cardiovascular, hipertensión
arterial y diabetes. Por otra parte, la obesidad de
¿Mejora la salud la parte inferior del cuerpo parece involucrar un
riesgo para la salud mucho menor.
con el adelgazamiento? 2. Clasificación etiológica. Existen diversas causas
etiológicas de la obesidad.
En estudios realizados se han obtenido datos que su- a) Las enfermedades endocrinas pueden producirla,
gieren que la reducción de peso podría ser beneficiosa. Tanto aunque solo en raras ocasiones y, en general, en
en los hombres como en las mujeres que consiguieron adel- grado moderado:
gazar y mantienen un peso más bajo, la mortalidad dismi- - El hiperinsulinismo secundario a los tumores de
nuye hasta situarse en los límites normales para la edad y el células insulares del páncreas o la inyección de
sexo. El descenso del 10 % de peso estuvo acompañado de cantidades excesivas de insulina, lo que provoca
un descenso de la glicemia de 0,14 mmol/L, disminución aumento de la ingesta alimentaria y crecimiento
del colesterol sérico, caída de la tensión arterial sistólica y de los depósitos de grasa, pero de una magnitud
reducción del ácido úrico sérico. modesta.
- Una obesidad algo más importante se observa en
casos de aumento de la secreción de cortisol en el
síndrome de Cushing.
Tipos clínicos de obesidad - Hipotiroidismo.
- Hipogonadismo, donde se producen alteraciones
en la distribución de la grasa en el cuerpo.
Factores genéticos en la obesidad. En la obesidad hu- b) La inactividad física desempeña un papel significa-
mana, los factores genéticos se expresan de dos maneras tivo en el desarrollo de la obesidad.
distintas. En primer lugar, existe un grupo de rara obesidad En la sociedad moderna del bienestar, los aparatos
dismórfica en el que la influencia genética es de importan- que ahorran energía también disminuyen el gasto
cia fundamental. En segundo lugar, existe un sustrato energético y pueden contribuir a la tendencia a en-
genético sobre el que actúan los factores ambientales para gordar.
inducir el desarrollo de la obesidad. Los estudios en fami- c) La dieta es otro factor etiológico importante en la
lias demostraron que la obesidad tiene carácter familiar, obesidad, pero también desempeña un papel en el
pero no se separan estrictamente los factores genéticos de desarrollo de la obesidad humana. Datos epidemio-
los ambientales. Por otra parte, el IMC de los padres bioló- lógicos recientes, referentes a mujeres, indican que
gicos aumentaba al tiempo que lo hacía el de sus hijos. las que tienen sobrepeso comen más grasa total y
más ácidos grasos saturados que las de peso nor-
mal. Por tanto, una dieta rica en grasa puede incre-
mentar el riesgo de obesidad en las personas ya
Clasificación de la obesidad dispuestas a sufrirla.
3. Clasificación según la edad de aparición:
a) Obesidad progresiva de la infancia: es una forma
1. Clasificación anatómica. Se basa en el número de
hipercelular de obesidad. Se trata de individuos que
adipocitos y en la distribución de la grasa.
desarrollan la anomalía en edades tempranas y que
a) En cuanto al número de adipocitos. En muchos in-
muestran una desviación continua hacia el aumen-
dividuos con problemas de obesidad desde la in-
fancia, el número de adipocitos puede ser de 2 a to de peso a partir de ese momento. En la actuali-
4 veces superior al normal. Los individuos con gran dad, en el recién nacido es imposible detectar for-
número de estas células tienen una obesidad hi- ma alguna de obesidad, ni siquiera la progresiva de
percelular. Esto permite distinguirlos de los que la infancia. Los pesos de los recién nacidos que
padecen otras formas de obesidad, en los que el después se hacen obesos no difieren, en general, de
número total de adipocitos es normal, pero el tama- los que luego tendrán un peso normal. El período
ño de cada uno de ellos es más grande. En general, crítico de la aparición de la obesidad progresiva
todos los tipos de obesidad se asocian con un au- de la infancia son los dos primeros años de edad,
mento del tamaño de los adipocitos, pero solo algu- y luego, entre los 4 y 11 años de edad. La forma
nos presentan un incremento de su cifra total. más grave comienza en este último período y, a
partir de ahí, puede seguir progresando. La obesi-
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 873
dad de comienzo infantil suele ser hipercelular y menos de 800 kcal/día como dieta muy baja en calorías.
puede ser resistente al tratamiento. Así, las dietas pueden ser: dieta baja en calorías, muy
b) Obesidad que comienza en la edad adulta: tiende a baja en calorías, balanceadas, altas en proteínas con míni-
ser hipertrófica con grandes adipocitos. ma cantidad de carbohidratos, de un solo alimento, de
reducción o eliminación de un nutriente, balanceada en
proteínas y carbohidratos, vegetarianas y dietas altas en
fibra, de fórmula, miscelánea y dietas «mágicas».
Enfoques del tratamiento 1. Dietas balanceadas. Estas dietas consisten en una mez-
cla de proteínas, carbohidratos y grasas en aproxima-
El manejo del peso para individuos obesos requiere un damente las mismas proporciones que consume la po-
plan de por vida. Es un procedimiento dinámico en el cual blación no sometida a dieta.
el paciente y el médico disponen y evalúan objetivos pe- Este tipo de dieta es probablemente la más utilizada de
riódicamente, y para lograrlo emplean varias estrategias. todas porque es la autoindicada por el paciente o se ha
El propósito del médico y la enfermera de familia es el indicado por profesionales de la salud que no están
de ayudar a los pacientes a cambiar sus hábitos alimentarios, relacionados con la enfermedad en la naturaleza de la
a hacer ejercicios físicos y a tener una actitud general psi- misma (obesidad). El consejo estándar es «comer en
cológica que produzca un cambio total en el estilo de vida. pequeñas porciones». Lo racional es que una reduc-
Los pacientes necesitan información sobre la fisiolo- ción de la cantidad de alimentos ingeridos es el trata-
gía, fisiopatología y la causa de la enfermedad, incluyendo miento de la obesidad.
factores que regulan el peso corporal y la ingesta de los 2. Dietas de un solo alimento. Está basada en la monotonía
alimentos. y la simplicidad. A los pacientes se les indica comer un
La educación nutricional es quizás el aspecto más im- solo alimento en todas las comidas. En ocasiones, se
portante para un programa completo de control del peso. hacen algunas variaciones o adiciones de una muy li-
Una información del contenido calórico y nutritivo de los mitada selección de otros nutrientes. Este tipo de dieta
alimentos esenciales para la salud de los pacientes, es nece- es aburrido, se desarrolla una aversión a un solo ali-
saria para que ellos puedan elegir con conocimientos su mento y la ingestión comienza a ser una autolimitante,
selección diaria de alimentos. por lo que la dieta de un solo alimento tiene la virtud
Hay diversas formas de comprender la obesidad y de de la simplicidad para los pacientes que tengan la difi-
enfocar su tratamiento. Existen modelos ambientales, cultad para limitar la ingesta. Comer otros alimentos
metabólicos y de otros tipos que pueden ser utilizados. como los que no se le prescriben en la dieta de un solo
En general, el tratamiento se divide en: alimento significa romperla.
3. Eliminación o reducción de uno o más nutrientes. Las
1. Balance energético y pérdida de peso. dietas que hacen una estricta restricción o que elimi-
2. Ejercicio y gasto energético. nan una o más fuentes de energía usualmente limitan
3. Terapia conductual. los carbohidratos o las grasas. La restricción de
4. Tratamiento medicamentoso. carbohidratos causa cetonemia, una rápida pérdida de
5. Tratamiento quirúrgico. peso inicial, y los pacientes refieren que produce una
6. Tratamiento de la obesidad masiva. reducción del apetito. La disminución de las grasas
produce una reducción en la densidad calórica de la
dieta y puede reducir el nivel en el cual el peso corpo-
ral puede ser regulado. Raramente, la limitación de las
BALANCE ENERGÉTICO Y PÉRDIDA DE PESO grasas limita o elimina las proteínas, pero estas dietas
son peligrosas.
Los términos dieta baja en calorías y dieta muy baja en
calorías (VLCD) han sido usados para definir una variedad
de dietas con diferentes valores calóricos. Un elevado nú-
mero de investigadores han definido las VLCD como una EVALUACIÓN DE LOS RIESGOS ASOCIADOS
ingestión inferior a 500 cal diarias. CON LA OBESIDAD
Una definición oficial hecha en 1979 por un comité de
expertos, bajo el auspicio de la Oficina de Investigaciones
Como todo tratamiento entraña algún riesgo, la prime-
para las ciencias de la vida de la Federación Americana de
ra cuestión esencial radica en decidir si el tratamiento es
la Sociedad de Biología Experimental, después del desas-
adecuado y valorar luego el riesgo asociado con la adiposi-
tre acaecido con el seguimiento de la dieta líquida rica en
dad. Para ello pueden utilizarse dos variantes distintas:
proteínas cuando se reportaron 60 muertes a la Administra-
ción de Alimentos y Drogas, declaró toda dieta que tuviera
874 Temas de Medicina General Integral
1. El riesgo asociado con el grado de desviación de la En sentido cualitativo, los tratamientos que reducen
normalidad del peso corporal. Las personas con bajo la ingesta energética tienen mayores probabilidades
peso tienen mayor riesgo de sufrir enfermedades res- de producir una disminución de peso que los basados en
piratorias, tuberculosis, enfermedades digestivas y aumentar el gasto energético. Como todas las energías
algunos tipos de cánceres. Las personas con nutritivas proceden de los alimentos, es posible reducir
sobrepeso, por su parte, presentan mayor predispo- la ingesta energética a cero (inanición).
sición a las enfermedades cardiovasculares y de la Por su parte, el gasto energético tiene un nivel míni-
vesícula biliar, la hipertensión arterial y la diabetes. mo asociado con la energía necesaria para mantener la
Un peso corporal que produce un IMC de 20 a 25 kg/ temperatura corporal, reparar los tejidos y mantener
m2 no supone un aumento del riesgo a causa del peso. las funciones vitales del corazón y del resto de los órga-
Cuando el IMC es menor que 20 ó 25 kg/m2, los ries- nos. Así, permaneciendo en cama y no desarrollando ac-
gos aumentan de forma curvilínea. Las personas con tividad física alguna, se reduce el gasto energético, aproxi-
IMC de 25 a 30 kg/m2 tienen un riesgo bajo; cuando madamente 0,8 kcal/min (1 150 kcal/día) para un adulto
es de 30 a 35 kg/m2 el riesgo es moderado, entre 35 de peso normal. Una actividad física mayor puede au-
y 40 kg/m2 el riesgo es elevado, y cuando es mayor mentar este gasto en dos a cuatro veces en 24 h.
que 40 kg/m2 el riesgo es muy alto. Por tanto, para producir una reducción inicial de
2. La distribución de la grasa corporal es asimismo una peso, la disminución en la ingestión alimentaria es lo
guía útil para evaluar los riesgos. Cuanto mayor sea la más recomendable, mientras que parece que el aumento
proporción de grasa abdominal o truncal, mayor será del gasto energético mediante el incremento de la activi-
el riesgo. dad es especialmente atractivo como tratamiento a lar-
go plazo para mantener un menor peso corporal.
2. Hiperlipidemia. Aumento de uno de los componen- Tipo I. Presencia de quilomicrones en estado de ayu-
tes lipídicos o más de ellos. no.
3. Hiperlipoproteinemia. Aumento de una de las Tipo IIa. Aumento de las beta-lipoproteínas.
lipopro-teínas o más, presencia de quilomicrones cir- Tipo IIb. Aumento de beta y prebeta-lipoproteínas,
culantes en estado de ayuno o su tiempo de perma- con predominio de las primeras.
nencia prolongado, presencia de lipoproteínas anor- Tipo III. Presencia de prebeta-lipoproteínas anormales
males, o más de uno de estos trastornos asociados. («banda ancha») y de betalipoproteínas, con predomi-
Los términos hiperlipidemia e hiperlipoproteinemia nio de las primeras.
suelen utilizarse como sinónimos. Tipo IV. Aumento de prebeta-lipoproteínas.
4. Dislipoproteinemia –por uso, también dislipidemia–. Tipo V. Aumento de quilomicrones y prebeta-lipopro-
Presencia de hiperlipoproteinemia, hipo-HDL-coles- teínas.
terolemia; alteraciones en la estructura y composición 5. Según su patogenia:
de las lipoproteínas, con hiperlipoproteinemia o sin a) Primarias. Las que están determinadas genética-
ella; o más de uno de estos trastornos asociados. Este mente. Pueden presentarse en más de un miembro
término se aplica, en especial, a los trastornos lipopro- de una familia, familiares (monogénicas); o en un
teicos de la diabetes mellitus tipo II, que pueden pre- miembro aislado, esporádica (poligénicas).
sentarse, incluso, después de alcanzada la euglicemia. b) Secundarias. Las que están determinadas por una
enfermedad, trastorno metabólico específico, há-
bito higienodietético o agente farmacológico. Re-
gresan al curarse la enfermedad, compararse el tras-
Clasificación torno metabólico o eliminarse el agente causal.
- Endocrinometabólicas:
. Acromegalia.
1. Según densidad (g/mL): . Diabetes mellitus descompensada.
a) Quilomicrones: las menos densas de todas las . Glucogenosis.
lipoproteínas. D < 0,94. . Gota.
b) Lipoproteínas de muy baja densidad (LBD)=VLDL . Hiperadrenocorticismo.
(very low density lipoproteins). D=0,94-1,006. . Hipercalcemia idiopática.
c) Lipoproteínas de densidad intermedia (LDI)=IDL . Hiperparatiroidismo.
(intermediate density lipoproteins). D=1,006-1,019. . Hipotiroidismo.
d) Lipoproteínas de baja densidad (LBD)=LDL (low . Lipodistrofia generalizada.
density lipoproteins). D=1,019-1,063. . Lipoidosis.
e) Lipoproteínas de alta densidad (LAD)=HDL (high . Obesidad.
density lipoproteins). D=1,063=1,210. - Hepatopatías:
f) Lipoproteína (a)=Lp(a) minus=Lp(a) pequeña Lp(a). . Hepatoma.
D=1,055-1,095. . Obstructivas (intra y extrahepáticas).
2. Según migración electroforética: - Nefropatías:
a) Quilomicrones: no migran; se mantienen en el pun- . Insuficiencia renal crónica.
to de aplicación del suero o plasma en la placa . Nefrosis.
electroforética. - Medicamentosas:
b) Beta-lipoproteínas: las que menos migran; su ban- . Antihipertensivos.
da queda próxima a la de los quilomicrones. . Contraceptivos hormonales.
c) Alfa-lipoproteínas: son las que más migran y que- . Diuréticos.
dan próximas al ánodo. . Esteroides anabólicos.
d) Prebeta-lipoproteínas: su banda queda entre las ban- . Estrógenos (premenopausia).
das de las lipoproteínas alfa y beta. . Progestágenos.
e) La Lp(a), por la presencia de la apo(a) tiene una . Retinoides.
migración más rápida que las LDL y queda inclui- - Estrés:
da en la banda prebeta. . Shock operatorio.
3. Equivalencia entre las dos clasificaciones: . Quemaduras.
a) Quilomicrones = quilomicrones. . Fatiga.
b) VLDL= prebeta-lipoproteínas. - Tóxicos:
c) LDL= beta-lipoproteínas. . Sales de mercurio.
d) HDL= alfa-lipoproteínas. . Sales de uranio.
4. Según Fredrickson, Levy y Lees, modificada por la - Otras:
OMS –basada en el patrón electroforético:
876 Temas de Medicina General Integral
Diagnóstico positivo
Determinaciones lipídicas
CUADRO CLÍNICO y lipoproteicas
Sus síntomas son infrecuentes y no patognomónicos.
1. Procedimiento general:
Puede presentar dolor abdominal en las hipertrigliceri-
a) Las determinaciones deben realizarse tras un perío-
demias severas; se ha señalado la posibilidad de artralgias,
do de ayuno de 10 a 12 h.
incluso poliartritis, que pueden semejar la de la fiebre reu-
b) El régimen higiénico y dietético debe ser el habitual.
mática aguda, así como tendinitis (tendón de Aquiles) en la
c) No debe realizarse durante una enfermedad inter-
hipercolesterolemia familiar homocigótica.
currente. Debe esperarse entre 1 y 3 meses posre-
Entre sus signos pueden presentarse las lesiones deno-
solución de la misma.
minadas xantomas, de las cuales hay varios tipos: planos
d) Se preferirá realizar de manera ambulatoria.
(palmares y xantelasma), eruptivos (glúteos), tendinosos
e) No se suspenderá la medicación que pueda estar
(extensores de manos y pies y tendón de Aquiles) y tube-
utilizando el paciente de forma habitual. Sí se valo-
rosos (codos y glúteos). rarán sus acciones, al interpretar los resultados.
Aproximadamente el 50 % de las personas con xan- 2. Obtención de la muestra: La muestra usualmente uti-
telasma (regiones palpebrales) no tiene aumento en sangre lizada es la sangre venosa, obtenida en posición de
de lípido alguno. Puede encontrarse arco senil periquerá- sentado.
tico (gerontoxón); también hepatomegalia y esplenomegalia Puede utilizarse suero o plasma. El suero tiene la ven-
en pacientes con hipertrigliceridemia, así como lactescencia taja de no obtener fibrinógeno. Si se va a utilizar el
de los vasos retinianos (lipemia retinalis), si esta es severa. plasma, debe utilizarse EDTA como anticoagulante.
Tanto el suero como el plasma deben separarse lo más
pronto posible y conservarse a 4 oC.
Las determinaciones en suero total deben realizarse
Detección del paciente antes de transcurrir 48 h a partir de su extracción.
En caso contrario deben congelarse las muestras
dislipoproteinémico para su posterior procesamiento. En el caso de que
el proceso analítico implique la separación de las
lipoproteínas, el suero no puede congelarse y debe
1. Estudio poblacional. Actualmente, estudiar a toda la
agregársele una solución conservadora para evitar
población no es factible en la mayoría de los países,
la ocurrencia de peroxidación, proteólisis y conta-
ni práctico en país alguno. Por medio del pesquisaje
minación bacteriana. Cualquiera que sea el caso,
selectivo se hacen las determinaciones de lípidos en
para el procesamiento de las muestras no deben trans-
sangre a aquellas personas que tienen posibilidades
currir más de 5 días.
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 877
Tabla 29.5
canzar dependerán de los niveles lipídicos y lipoproteicos en la tabla anterior, las restricciones mayores son en gra-
iniciales y los factores de riesgo no lipídicos de enferme- sas saturadas y colesterol, que no son nutrientes esencia-
dad vascular presentes. les.
En los pacientes con riesgo alto –dos o más factores de Las fuentes de obtención de estos nutrientes serán:
riesgo no lipídicos asociados, se descuenta uno si el HDL-
colesterol es menor que 1,55 mmol/L= 60 mg/dL– las me- 1. Grasas saturadas. Se encuentran en productos como la
tas serán más estrictas. leche y sus derivados, las carnes –res, cerdo, carnero,
En general, las medidas terapéuticas son: aves de corral– y el aceite de palma y coco. La hidro-
genación produce cambios en la estereoisomería de
1. Plan alimentario. los ácidos grasos saturados –cambios de posición de
2. Medidas higiénicas. cis a trans–, que también determinan aumento del
3. Actividad física. colesterol.
4. Medicamentos. 2. Grasas monoinsaturadas. Principalmente el ácido
5. Otros procederes. oleico, que se encuentra en el aceite de oliva, de canola
y algunas variedades de girasol, entre otros.
3. Grasas poliinsaturadas. Hay dos grandes categorías, los
denominados omega-6 y omega-3. El ácido linoleico,
PLAN ALIMENTARIO el más importante de los omega-6, esencial, se encuen-
tra en los aceites de soya, maíz y girasol, entre otros.
Algunos tipos de pescados marinos (salmón, atún) son
Son varios los planes alimentarios diseñados a través la principal fuente de ácidos grasos omega-3. Los áci-
del tiempo para la corrección de los trastornos metabólicos dos grasos que predominan en esta clase son el ácido
lipoproteicos. Uno de los más recientes, diseñado para la eicosapentanoico y docosa-hexanoico. No se reco-
hipercolesterolemia, pero útil para cualesquiera de los ti- mienda la ingestión de aceite de pescado como suple-
pos de dislipoproteinemia, pacientes diabéticos y obesos mento, porque no se conocen sus efectos indeseables
con los ajustes pertinentes e incluso para la población a largo plazo; sí, el consumo de pescado como fuente
general, es el que se estructura basado en el esquema que de proteína.
se muestra en la tabla 29.6. Se comienza por la primera 4. Colesterol. Se encuentra solamente en productos
etapa; si no se alcanzan los niveles lipoproteicos pro- animales: leche, todas las carnes –res, puerco, carne-
puestos, se pasa a la segunda etapa. ro, pollo, pescado, langosta, camarones y calamares–
, tanto en los músculos como en la
Tabla 29.6 grasa, yema del huevo y, particular-
mente, en las vísceras –hígado,
Nutriente Etapa I Recomendación Etapa II páncreas y cerebro.
5. Proteína. Puede utilizarse todo tipo
Grasa total - 30 % de las calorías de alimento proteico, animal y vege-
totales - tal –soya, en especial, entre estas últi-
Ácidos grasos mas–, pero hay que tener en cuenta su
saturados 8-10 % - <7% contenido en grasa saturada y co-
Ácidos grasos lesterol. Algunos expertos consideran
poliinsaturados - Hasta 10 % - que el consumo elevado de proteínas
Ácidos grasos durante mucho tiempo puede ser in-
monoinsaturados - Hasta 15 % - sano.
Carbohidratos - 55 % o más - 6. Carbohidratos. El 55 % de las ca-
Proteínas - 15 % aprox. - lorías debe provenir de
Colesterol < 300 mg/día - < 200 mg/día carbohidratos simples (mono y
Calorías totales - Para alcanzar y mantener disacáridos) y complejos digeribles
el peso deseable - (almidones). Más de la mitad de los
carbohidratos dige-ribles deben ser
carbohidratos complejos de diferen-
La dieta terapéutica debe ser nutricionalmente ade- tes vegetales, frutas y granos, pues los alimentos que
cuada, agradable al paladar, contemplar las preferencias del los contienen también son fuentes de vitaminas, mi-
paciente, proveer alimentos de todos los grupos –carnes, nerales y fibra. Se recomiendan seis o más raciones
cereales, frutas, vegetales, etc.–, facilitar el alcance del de una combinación de pan, cereales y legumbres, y
peso deseable y su mantenimiento, y garantizar el aporte cinco o más raciones de frutas y vegetales.
necesario de vitaminas, minerales y fibras. Como se aprecia 7. Contenido calórico. El exceso de peso puede asociar-
Afecciones endocrinometabólicas más frecuentes 879
Pabuccu, R; Atay, V; Orhon, E; Urman, B; Ergun, A. Hysteroscopic Sidhu, PS; Nauva, RP; Maher, VMG; MacSweeney, JE; Neuwirth,
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