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ÁCIDOS ORGÁNICOS EN NUTRICIÓN PORCINA:
EFICACIA Y MODO DE ACCIÓN
F.X. Roth
Institute of Nutrition Sciences
Technical University of Munich
1.- INTRODUCCIÓN
Los efectos positivos de la adición de ácidos orgánicos o de sus sales sobre los
rendimientos de lechones han sido demostrados en numerosas ocasiones (ver por ejemplo los
trabajos de Kirchgeβner y Roch, 1982a, 1988, 1991; Gabert y Sauer, 1994; Roth y
Kirchgeβner, 1998). El efecto promotor del crecimiento de los ácidos orgánicos es
particularmente evidente en las semanas que siguen al destete. Lechones destetados a las 3-4
semanas de edad manifiestan a menudo una baja ganancia de peso, bajo consumo y diarrrea,
lo que puede ser el resultado de un desarrollo incompleto del aparato digestivo. De acuerdo
con Kidder y Manners (1978) esto se refiere fundamentalmente a una secreción insuficiente de
HCl y de amilasa, lipasa y tripsina pancreática. Una baja secreción de HCl puede ser también
causa de proliferación de bacterias intestinales con efectos perjudiciales para el lechón. Esto
explicaría la especial susceptibilidad de los lechones a los desórdenes digestivos. El uso de
antibióticos como aditivos en el pienso para prevenir la diarrea está sujeta a controversia
pública por la selección potencial de estirpes resistentes a bacterias patógenas. Como
consecuencia, hay un interés creciente en el desarrollo de aditivos “biológicos”.
inodoras y más fáciles de manejar en el proceso de fabricación del pienso, como consecuencia
de su forma sólida y menos volátil. También son menos corrosivas. Las sales tienen además
un menor efecto negativo sobre el consumo que algunos ácidos cuando se emplean dosis
elevadas. Más que como acidificantes de la dieta, los ácidos orgánicos son conocidos como
agentes conservantes.
Cuadro 1.- Propiedades físicas y químicas de los ácidos orgánicos más utilizados
Sustancia
Ac. Fórmico
Acidez
pKa
3,75
como acidificantes de la dieta
Solubilidad P. molecular,
en H2O
++
g/mol
46,0
Energía
bruta, kJ/g
5,8
Present.
Líquida
Ac. Acético 4,75 ++ 60,1 14,8 Líquida
Ac. Propiónico 4,88 ++ 74,1 20,8 Líquida
Ac. Láctico 3,88 + 90,1 15,1 Líquida
Ac. Fumárico 3,03/4,38 - 116,1 11,5 Sólida
Ac. Cítrico 3,14/4,76/6,39 + 210,1 10,3 Sólida
Ac. Sórbico 4,76 - 112,1 26,5 Sólida
Formato Ca - - 130,1 3,9 Sólida
Formato Na - ++ 68,0 3,9 Sólida
Propionato Ca - + 186,2 16,6 Sólida
El cuadro 2 resume resultados de trabajos sobre el efecto promotor del crecimiento de
ácidos monocarboxílicos añadidos a diferentes niveles a piensos de lechones destetados a 3-4
semanas de edad. En todos los experimentos la alimentación fue individual y ad libitum, las
condiciones higiénicas fueron estándar y la duración fue de alrededor de 6 semanas. Las tres
primeras semanas los lechones recibían una dieta pre-starter (23% PB; 13,4 MJ EM/kg) y las
tres siguientes una dieta de arranque (18,5% PB; 13 MJ EM/kg). Los piensos se formularon de
acuerdo con los estándares de la Sociedad de Fisiología de la Nutrición (GFE, 1987) y fueron
isoenergéticos e isonitrogenados.
Cuadro 2.- Efecto de la suplementación con ácidos monocarboxílicos sobre los rendimientos de
lechones al destete
1 2 4
Nivel de inclusión de ácido en la dieta. Peso inicial, kg .3Ganancia diaria de peso, g. Porcentaje de
5
aumento/disminución sobre el control. Indice de conversión (g/g). 6Porcentaje de mejora/reducción
del FCR con respecto al control. *Diferencia significativa (P < 0,05) respecto al control.
Los resultados muestran que los ácidos fórmico, láctico y sórbico mejoran la ganancia
de peso y el índice de conversión en hasta un 22,1 y 7,5; 8,1 y 1,8; y 26,7 y 6,5%,
respectivamente. La suplementación con ácido acético o propiónico tuvo poco o ningún
F.X. ROTH
efecto. Las causas de la variabilidad de la respuesta obtenida son el tipo de ácido, la dosis
utilizada, el efecto depresivo sobre el consumo y el estado sanitario de los animales. Las dosis
más efectivas en el intervalo estudiado fueron 1,2% de ácido fórmico, 1,6% de ácido láctico y
2,4% de ácido sórbico. Estos aditivos pueden también reducir la incidencia de diarrea, tal
como se observa en diferentes estudios (Roth y Kirchgeβner, 1997). Además de los ácidos
monocarboxílicos, que con la excepción del ácido sórbico son productos del metabolismo
bacteriano en el tracto intestinal, hay otros ácidos que se utilizan como aditivos en piensos de
lechones que son metabolitos intermedios naturales del ciclo del ácido cítrico. Entre estos
ácidos di- o tri-carboxílicos, los ácidos fumárico y cítrico se han utilizado desde hace mucho
tiempo en piensos de lechones. El cuadro 3 muestra algunos de los resultados obtenidos. La
adición de ácido fumárico, cítrico y málico mejoraron la ganancia de peso y el índice de
conversión en hasta un 11,6 y 7,0; 18,7 y 8,7; y 4,0 y 4,8%, respectivamente. Las dosis
óptimas en el rango estudiado fueron dos: 4,5 y 2,4%, respectivamente. La suplementación del
pienso de lechones con los ácidos succínico, adípico o tartárico no tuvo en cambio efectos
positivos. En el caso del ácido tartárico, hubo incluso una reducción del crecimiento
dependiente de la dosis. La principal causa del efecto escaso o negativo de estos ácidos estuvo
en su baja palatabilidad.
Cuadro 3.- Efecto de la suplementación con ácidos di- o tri-carboxílicos sobre los rendimientos
de lechones después del destete
han demostrado efectos positivos sobre los rendimientos de lechones (Cuadro 4). Cuando los
piensos de lechones fueron suplementados con formato sódico, formato cálcico o diformato
potásico, la ganancia de peso y el índice de conversión mejoraron en un 4,9 y 5,4; 9,3 y 4,6; y
22,9 y 7,5%, respectivamente. Con respecto a los efectos promotores del crecimiento del
ácido fórmico libre, las sales no fueron tan efectivas a igual concentración de anión en el
suplemento. Las sales resultaron más efectivas cuando se utilizaron en combinación con el
ácido libre (Kirchgeβner y Roth, 1990). El diformato potásico producido por una nueva
tecnología se une a una cierta cantidad de ácido libre sin evaporación, lo que hace que este
compuesto sea particularmente eficaz y deseable para su uso en la alimentación práctica (Roth
et al., 1996).
Cuadro 4.- Efecto de la suplementación con formatos sobre los rendimientos de lechones
después del destete
Formatos
Na-formato
Ca-formato
%1
0,9
1,8
2,7
1,3
BW2
5,6
5,6
5,6
6,7
DWG3
458
471
444
452
%∆∆4
+2,0
+4,9
-1,1
+7,1
FCR5
1,59*
1,61*
1,57*
1,78*
∆%6
-4,2
-3,0
-5,4
-3,8
Referencia
Kirchgeßner y
Roth, 1987a
Kirchgeßner y
2,6 6,7 415 -1,7 1,79 -3,3 Roth, 1987b
Ca-formato 1,3 7,0 459 +9,3 1,65* -4,6 Kirchgeßner y
Roth, 1990
K-di- formato7 0,4 7,5 518 +7,2 1,57 -1,3 Paulicks
0,8 7,5 509 +5,4 1,55 -2,5 et al., 1996
1,2 7,5 535 +10,8 1,58 -0,6
1,6 7,5 559* +15,7 1,53* -3,8
2,0 7,5 589* +22,9 1,49* -6,3
2,4 7,5 543 +12,4 1,47* -7,5
2,8 7,5 557 +15,3 1,50* -5,7
1
Nivel de inclusión de ácido en la dieta. 2Peso inicial, kg 3Ganancia diaria de peso, g 4Porcentaje de
aumento/disminución sobre el control 5Indice de conversión (g/g). 6Porcentaje de mejora/reducción
del FCR con respecto al control. 7Producido por FormiTM Norsk Hidro a.s., Oslo.
*Diferencia significativa (P < 0,05) respecto al control.
Cuadro 5.- Efecto de la suplementación con ácidos inorgánicos sobre los rendimientos
Easter, 1986
Clorhídrico 3,0 7,0 211* -38,0 2,04 +6,0 Giesting y
Easter, 1986
1,4 5,8 329* -16,5 1,48 +1,0 Eidelsburger
et al., 1992
Cloruro 0,33 7,3 445 +3,6 1,55 +1,3 No publicado
1
cálcico
(CaCl2 ∙ 2H20)
0,66
1,00
7,3
7,3
389
397
-8,4
-7,6
1,54
1,56
+0,7
+2,0
Nivel de inclusión de ácido en la dieta. 2Peso inicial, kg. 3Ganancia diaria de peso, g. 4Porcentaje de
aumento/disminución sobre el control. 5Indice de conversión (g/g). 6Porcentaje de mejora/reducción
del FCR con respecto al control. *Diferencia significativa (P < 0,05) respecto al control.
alimentos, así como su capacidad tampón, disminuyen debido a la acción del ácido. Por tanto,
es posible alcanzar un valor bajo de pH gástrico más rápidamente, lo que favorece la acción
de la pepsina y la digestión proteica. Esto es especialmente importante en lechones, en los que
las secreciones clorhídrica y gástrica no están completamente desarrolladas. En consecuencia,
los efectos promotores del crecimiento de los ácidos orgánicos pueden ser debidos a un
aumento de la digestibilidad de los nutrientes. Además, la acción antimicrobiana de estos
productos conduce también a una reducción de la densidad de microorganismos y de sus
metabolitos en el tracto digestivo. Finalmente, algunos ácidos orgánicos tienen un elevado
contenido en energía que parece ser completamente metabolizable.
Cuadro 6.- Efecto de la suplementación con ácidos orgánicos sobre los rendimientos de
cerdos en crecimiento-cebo
De acuerdo con sus elevada eficacia nutritiva, el ácido fórmico ha sido utilizado para
obtener información preliminar sobre su modo de acción. La suplementación con ácido
fórmico influye positivamente en la digestibilidad de los nutrientes (Eckel et al., 1992). Las
mejoras obtenidas fueron más claras para la proteína (hasta un 4%) que para la energía (hasta
un 2%) y fueron más evidentes justo después del destete que a edades más avanzadas. Para la
digestión óptima de la proteína en el intestino, se requiere la conversión de pepsinógeno en
pepsina. Para ello, es necesario que el pH sea inferior a 5,0. Por otra parte, la pepsina alcanza
su actividad máxima a un pH comprendido entre 2,0 y 3,5 (Taylor, 1959). La acidificación de
la dieta reduce su capacidad tampón y puede facilitar la digestión gástrica de la proteína y
aumentar su digestibilidad.
F.X. ROTH
Figura 1.- Algunos aspectos del modo de acción de los ácidos orgánicos y sus sales
favoreciendo la acción de la pepsina digestión gástrica
Cuadro 7.- Efecto de la suplementación con ácido fórmico sobre el conteo de microorganismos1
β ner et al., 1992b)
en diferentes segmentos del tracto gastrointestinal de lechones (Kerchgeβ
1
Unidades formadoras de colonias en log10/g materia fresca.
a,b
Difieren significativamente (P<0,05) del control.
XVI Curso de Especialización FEDNA
ÁCIDOS ORGÁNICOS EN NUTRICIÓN PORCINA: EFICACIA Y MODO DE ACCIÓN
impide su multiplicación. Hay algunas referencias bibliográficas de que tanto el ácido
fumárico como el propiónico reducen el crecimiento microbiano intestinal (Bolduan et al.,
1988; Sutton et al., 1991; Gedek et al., 1992). Estos resultados indican que los efectos
promotores del crecimiento de los ácidos orgánicos pueden ser explicados parcialmente por su
efecto inhibitorio sobre la población microbiana en el tracto gastrointestinal. Esta inhibición
supondría una reducción de las necesidades metabólicas de la microflora y, por tanto, un
incremento de la disponibilidad de energía y nutrientes de la dieta para el animal, que resulta
en un mayor crecimiento y una mayor eficacia alimenticia. La reducción del número de
coliformes puede también tener efectos positivos sobre la salud del lechón. En este contexto,
tiene interés que la adición de ácidos orgánicos resultó en una disminución en la severidad y
frecuencia de diarreas en los lechones, mientras que la adición de sustancias con actividad
tampón tuvo el efecto contrario.
debido a las menores cantidades presentes de metabolitos tales como amoníaco, aminas o
toxinas. La suplementación de la dieta con ácido fumárico, cítrico o propiónico no afectó al
pH o a las concentraciones de Cl+ y ácidos grasos volátiles en estómago o intestino delgado
(Sutton et al., 1991; Risley et al., 1992).
5.- IMPLICACIONES
Las mejoras de rendimientos que se obtienen mediante la acidificación del pienso han
sido discutidas en relación con la disminución del pH y de la capacidad tampón. Sin embargo,
no ha sido posible todavía conseguir un efecto promotor del crecimiento en lechones mediante
F.X. ROTH
6.- REFERENCIAS
Physiol. Anim. Nutr. 67 148-156.
ROTH F.X. y KIRCHGEßNER, M. (1988) Landwirtsch. Forsch. 41: 253-258.
ROTH, F.X. y KIRCHGEßNER, M. (1989) Landwirtsch. Forsch. 42: 168-174.
ROTH, F.X., KIRCHGEßNER, M. y PAULICKS, B.R. (1996) Agribiol. Res. 49: 307-317.
ROTH, F.X. y KIRCHGEßNER, M. (1997) Proc. 7th Int. Symp. Dig. Phys. Pig., pp. 498-
501, St. Malo, France.
ROTH, F.X. y KIRCHGEßNER, M. (1998) J. Anim. Feed Sci. 7: 25-33.
ROTH, F.X., KIRCHGEßNER, M. y EIDELSBURGER, U. (1993) Agribiol. Res. 46: 229-
239.
SCHULZ, E. y OSLAGE, J.J. (1982) Landbauforschung Völkenrode 32: 152-156.
SINGH-VERMA, S.B. (1973) Forsch. 26: 95-114.
SUTTON, A.L., MATTHEW, A.G., SCHEIDT, A.B., PATTERSON, J.A. y KELLY, D.T.
(1991) Proc. 5th . Int. Symp. Dig. Phys. Pigs. pp. 442-447, Wageningen, Netherlands.
TAYLOR, W.H. (1959) Biochem. J. 71: 73-85.