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GUIA PS.4TO.

DESARROLLO COGNITIVO

¿Qué es el desarrollo cognitivo?


Cuando hablamos del desarrollo cognitivo, nos referimos a las diversas etapas que consolidan la
capacidad innata del ser humano para pensar, razonar y utilizar sus herramientas mentales. Es
un proceso paulatino, que tiene sus inicios en la infancia temprana, y que motiva el deseo del
individuo de entender su entorno e integrarse a la sociedad.

Los estudiosos de este proceso separan y delimitan sus etapas progresivas, para poder
comprender en qué momento de la vida se adquieren determinadas destrezas mentales. En ello
intervienen, claro está, las condiciones objetivas (físicas, sociales, emocionales) en que el
individuo se desarrolle. A este crecimiento específico de las capacidades se le conoce
como aprendizaje cognitivo.

En la descripción de dichas etapas, diversos estudiosos como Jean Piaget, Toldan, Gestalt y
Bandura han propuesto sus aproximaciones a un sistema científico que las comprenda. La más
conocida quizás sea la Teoría del desarrollo cognitivo del suizo Piaget, la cual sirve de
basamento para diversas aproximaciones educativas centradas en el enriquecimiento de la
experiencia infantil o la “educación abierta”.

Las teorías de Piaget aportaron no sólo en este campo, sino en el de la comprensión de la


inteligencia humana, del aprendizaje y de las diversas formas de pensamiento.

Teoría Piaget

Piaget propuso su teoría sobre la naturaleza y el desarrollo de la inteligencia humana a mediados


del siglo XX, y revolucionó la comprensión que al respecto se tenía. Según sus postulados, el
desarrollo cognitivo se da a través de una serie de etapas diferentes y reconocibles, cuyo
inicio se da en la infancia y requiere de la percepción, adaptación y manipulación del entorno, a
medida que el infante explora activamente el mundo.

Las cuatro etapas del desarrollo cognitivo propuestas por Piaget son:

 Etapa sensorio-motora o sensiomotriz. La fase inicial del proceso, que inicia el nacimiento y
culmina la aparición del lenguaje articulado simple (hacia los dos años de edad). Es una
etapa exploratoria, en la que el individuo intenta recabar la mayor cantidad posible a partir
de su interacción con el entorno, ya sea mediante juegos, movimientos no siempre
voluntarios, y una consideración egocéntrica del universo dividida entre el “yo” del sujeto y
“el entorno”. En esta etapa también se aprende que los objetos del mundo, incluso si no
están claramente diferenciados, permanecen aunque no los estemos viendo.
 Etapa preoperacional. Esta segunda etapa tiene lugar entre los dos y los siete años, y se
caracteriza por el aprendizaje de los roles ficticios, es decir, la posibilidad de ponerse en el
lugar de otro, de actuar y de emplear objetos de carácter simbólico. El pensamiento
abstracto sigue siendo dificultoso, al igual que el lógico, y en su lugar el pensamiento
mágico es frecuente.
 Etapa de las operaciones concretas. Entre los siete y los doce años de edad, esta es la etapa
en que el pensamiento lógico empieza a conducir a conclusiones válidas, aunque
cuesten aún los grados más complejos de abstracción. Se pierde cierta tendencia
al egocentrismo en el individuo.
 Etapa de las operaciones formales. La última de las etapas del desarrollo cognitivo,
comprendida entre los doce años y la adultez, es el período en que el individuo adquiere la
capacidad de manejo del pensamiento abstracto, pudiendo obtener conclusiones válidas a
partir de situaciones del todo hipotéticas, no vividas, logrando así pensar sobre pensar, es
decir, alcanzar el pensamiento metafísico y el razonamiento hipotético deductivo.

Debemos notar que, aunque se encuentren explicadas linealmente, estas etapas no ocurren
separadas las unas de las otras, ni como peldaños perfectamente definidos, sino que el tránsito
entre una y otra es difuso, variando de acuerdo al caso.

Actividad:

1. ¿Explique cuál es la naturaleza de la inteligencia según Piaget?


2. Para Piaget el proceso de inteligencia operativa implica dos procesos. Explique cada uno
de ellos.
3. Piaget propuso cuatro etapas del desarrollo cognitivo. Explique cada uno de ellos y
señale sus principales características.

. Piaget propuso cuatro etapas

PERSONALIDAD
¿Qué es la personalidad?

Por personalidad se entiende el conjunto de dinámicas psíquicas que son características de una


misma persona, es decir, a su organización mental interior, que determina el modo en que dicha
persona responderá ante una situación determinada.

Dicho de otro modo, la personalidad es un patrón de actitudes, pensamientos y sentimientos


recurrentes, que son más o menos estables a lo largo de la vida de un individuo y que permiten
cierto grado de predictibilidad respecto a su modo de ser.

Este término, tomado de la psicología, es de uso corriente en el lenguaje cotidiano, pero su


origen se encuentra en el término latino «persona», que era la máscara empleada por los actores
del teatro de la antigüedad, a la hora de representar personajes reconocibles.

Así, inicialmente dicha palabra tenía que ver con los roles encarnados por los actores, y de
algún modo luego se trasladó a otras áreas de la vida, pasando a ser «personas» únicamente los
ciudadanos de pleno derecho (y no, por ejemplo, los esclavos). Eventualmente el término
engendró el adjetivo «personal» y de allí provino personalidad.

Hoy en día entendemos que la personalidad es una serie de rasgos mentales que permiten
distinguirlo de los demás, y que además son más o menos fieles a sí mismos a lo largo del
tiempo. Sin embargo, la personalidad puede cambiar, modificarse paulatinamente a partir del
tiempo y de las experiencias vividas.

Características de la personalidad

La personalidad es un patrón funcional coherente consigo mismo (aunque no exento de


contradicciones), generalmente consolidado y resistente al cambio. Sin embargo, es capaz de
operar de forma diferente en situaciones distintas, dado que se trata de formas psíquicas
interiorizadas, que no dependen tanto del afuera.

Por otro lado, los elementos de la personalidad tienen que ver no sólo a las respuestas ante
estímulos y situaciones determinadas, sino también al estilo de vida,
las creencias y motivaciones, e incluso las concepciones del mundo.
Componentes de la personalidad

Conforme a la escuela y el modelo de pensamiento del psicoanálisis, especialmente de los


estudios de Sigmund Freud (1856-1939), la personalidad de los individuos está conformada por
tres factores importantes que operan en conjunto y por separado:

 El Yo. También conocido como lo consciente o la consciencia, es el componente de nuestra


mente del cual más percepción tenemos, ya que está constantemente diciéndonos dónde
estamos y haciendo qué, o cómo estamos. Ello implica tanto la percepción del mundo
externo, como los pensamientos y el mundo interior. Su función es brindarnos un Principio
de realidad respecto a la existencia.
 El SuperYo. Comprendido como el conjunto de interiorizaciones que definen el «deber ser»
sobre a nosotros mismos, es decir, es la instancia en donde se encuentran grabadas las leyes
existenciales, sociales, culturales, etc., que provienen del exterior, y que sirven para
brindarnos un Principio de perfeccionamiento respecto de nosotros mismos.
 El Ello. Identificado como el inconsciente de Freud (aunque no son sinónimos), se refiere al
contenido bloqueado o reprimido de nuestra mente, que se vincula con nuestras necesidades
primarias y biológicas, como la alimentación, la reproducción, etc. Está encargado de
brindarnos el Principio del placer.

Factores de la personalidad

Conforme al modelo de los Grandes Cinco (Big Five, en inglés), todas las personalidades están
determinadas por una serie de factores que se dan en distinta proporción en cada individuo.
Estos cinco factores son:

 Factor O (de Openness o apertura). Se refiere al grado de apertura que un individuo presenta


respecto a las nuevas experiencias, al cambio y la variedad, e incluso la curiosidad. Los
individuos dotados de gran apertura son inquietos, imaginativos, originales y deseosos
de valores no convencionales. Su polo opuesto lo constituyen sujetos más conservadores en
lo social y en la vida, que prefieren el ámbito familiar y las experiencias más controladas.
 Factor E (de Extraversion o extroversión). La extroversión se refiere a un alto grado de
sociabilidad y de interés por situaciones sociales, por la compañía de otros y la tendencia a
evitar la soledad. Los individuos extrovertidos requieren de estimulación social constante y
están muy volcados al mundo externo, a diferencia de sus opuestos, los introvertidos, que le
rehúyen a las situaciones sociales, se sienten a gusto en su mundo interior y suelen valorar
la soledad.
 Factor C (de Conscientiousness o responsabilidad). Alude al autocontrol, la planificación y
el compromiso, tanto en la organización como la ejecución de las tareas. También se la
conoce como “voluntad de logro” y los individuos que la poseen en altas dosis suelen ser
los llamados workaholics o adictos al trabajo, que manifiestan altísimos grados de
compromiso con las tareas emprendidas. Por el contrario, sus opuestos son personas poco
confiables y poco comprometidas, informales o laxos con sus principios morales.
 Factor A (de Agreeableness o amabilidad). Se refiere a las tendencias interpersonales,
específicamente a la empatía y la capacidad de vínculo con el otro. Las personas con alto
nivel de amabilidad tienden a ser consideradas, altruistas, confiadas y solidarias, mientras
que las personas con baja amabilidad tienden a relacionarse de maneras más hostiles.
 Factor N (de Neuroticism o neuroticidad). Este último rasgo tiene que ver con la
inestabilidad emocional fruto de ansiedad, preocupación y percepciones catastróficas de las
cosas, que son consecuencia de la imposibilidad de la mente de prever y controlarlo todo.
Las personas con alto nivel de neuroticidad suelen ser ansiosas, estresadas, poco sociables,
y pueden incurrir a menudo en la depresión, la irritabilidad o la vulnerabilidad. Por el
contrario, los bajos niveles de este rasgo tienden a personalidades más estables, menos
preocupadas por el control y más relajadas.

Tipos de personalidad

Existen muchas y muy diversas formas de clasificación de la personalidad, dependiendo del


enfoque psicológico o psicoanalítico y del método específico que se emplee para comprenderla.
Por citar un ejemplo, el psicoanalista Carl Gustav Jung (1875-1961) propuso una clasificación
de 8 tipos de personalidad, que son:

 Pensamiento-introvertido. Aquellas personalidades que están más interesadas por las ideas


que por los hechos, es decir, por su realidad interior que por los demás. Son propensas a las
reflexiones, los pensamientos abstractos o los desafíos teóricos.
 Sentimental-introvertido. Personalidades contenidas en su propio mundo emocional, poco
propensas a lidiar con el mundo exterior, pero capaces de hacerlo a partir de lo emotivo, en
lugar de lo reflexivo del caso anterior. Son propensas al apego, pero en un círculo íntimo y
cerrado.
 Sensación-introvertido. Típica de artistas y creadores, esta es la personalidad más
preocupada por la experiencia subjetiva del ser, lo cual puede conducirlos a vivir en un
mundo irreal, construido a su propia medida.
 Intuición-introvertido. La típica personalidad de los soñadores, es decir, de quienes están
más pendientes de lo que pasará, lo que podría pasar o lo que les gustaría que pasara, que
con el presente real. Están, a su manera, en contacto con su contenido inconsciente y pueden
ser talentosos creadores.
 Pensamiento-extrovertido. Aquellas personalidades más interesadas en los hechos y en el
afuera, que su mundo interno, sobre todo como fuente de teorías y reflexiones, ya que se
vincula racionalmente con el mundo. Sus emociones y sensaciones son, por ende,
reprimidas, y suele descuidar sus vínculos socio-afectivos.
 Sentimiento-extrovertido. Es el perfil de las personas más empáticas, sociales y ajustadas al
entorno comunitario, típicas de aquellos a quienes gusta cuidar de los demás o que se
sienten bien protegiendo a terceros. Su actividad intelectual se enmarca necesariamente en
lo que sienten.
 Sensación-extrovertido. Se vincula con lo real a partir de las sensaciones que le evoca, es
decir, prestando mucho interés a lo que el entorno real y los demás le hacen sentir. Es la
personalidad típica de quienes viven en busca del placer, y por lo tanto suelen buscar
nuevos estímulos constantemente.
 Intuición-extrovertido. La personalidad del aventurero, de quien cambia de perspectivas una
vez que consigue el objetivo deseado, pero nunca para de moverse. Suelen ser carismáticos
y entusiasman a terceros con sus ideas, siéndole fiel a su intuición más que a sus
sentimientos y sus razonamientos.

Trastornos de personalidad

Los trastornos de personalidad son rasgos de la personalidad que se muestran inflexibles,


desadaptativos, en lugar de contribuir a la adaptación y al desempeño vital. Sabotean el
desempeño social o emocional de los individuos, y a menudo conducen a complicaciones más
serias.

No suelen tener cura o tratamiento fácil, ya que forman parte de la personalidad del sujeto, o
sea, son parte de él.

Los trastornos de personalidad pueden ser muy distintos entre sí y siempre obedecen a
condiciones sumamente particulares del paciente, pero a grandes rasgos pueden resumirse en
tres grupos:0

 Personalidades excéntricas y raras, como el Trastorno de Personalidad Paranoide, Trastorno


de Personalidad Esquizoide o Trastorno de Personalidad Esquizotípico.
 Personalidades erráticas, emocionales y teatrales, como el Trastorno de Personalidad
Histriónico, Trastorno de la Personalidad Antisocial, Trastorno de la Personalidad
Naricisista o Trastorno Límite de Personalidad.
 Personalidades con marcada ansiedad, como el Trastorno de Personalidad Dependiente,
Trastorno de Personalidad Obsesivo-Compulsivo, Trastorno de la Personalidad Evitativo.

ACTIVIDAD

1¿Qué es el desarrollo de la personalidad?

2.-Realizar un mapa conceptual sobre el desarrollo de la personalidad.

3. Exposición acerca del tema, tríptico, Ppt.

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