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SENTENCIA CONSTITUCIONAL 0297/2004-R

Sucre, 5 de marzo de 2004

Expediente:                    2003-07946-15-RAC

Distrito:                          Cochabamba

Magistrada Relatora:   Dra. Elizabeth Iñiguez de Salinas

En revisión, la Sentencia cursante de fs. 66 a 68, pronunciada el 20 de noviembre de 2003 por la Sala
Civil Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial de Cochabamba, dentro del recurso de
amparo constitucional interpuesto por  Moisés  Sejas Montecinos contra Lineth Tapia Patiño y Juan
Luis Ledezma, Jueces Técnicos del Tribunal de Sentencia No. 1 de la Capital, Herminia Nikole
Ugarte, Lucio Almaraz Murillo y Jhonny Nina Siles, jueces ciudadanos,  alegando haberse vulnerado
su derecho a la defensa y la garantía del debido proceso.  

   

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1.      Contenido del recurso

I.1.1.   Hechos que motivan el recurso

En la demanda presentada el 2 de septiembre de 2003 (fs. 22 a 29 vta.), el recurrente aduce que 


dentro del  juicio oral  promovido a instancia del Ministerio Público y el querellante In Jim Shim, el 11
de junio de 2003, dentro del  plazo previsto por el art. 240 del Código de procedimiento penal (CPP),
ofreció prueba de descargo. Del mismo modo se recibió la declaración de Servando Jiménez
Montaño, testigo propuesto  por el Ministerio Público,  quien  aseguró, entre otras cosas, que el
predio   que  su persona transfirió a Jong Man Park es de su propiedad y que el mismo fue afectado
en una mínima parte por la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE).  Con la finalidad de desvirtuar
lo señalado por dicho testigo,  refiere que su defensora solicitó se acepte como prueba
extraordinaria una certificación expedida el 8 de agosto de 2003 por el Sub Registrador de Derechos
Reales de Sacaba, en la que consta  que  el referido testigo transfirió a terceras personas la totalidad
de su terreno de 10 hectáreas y que al presente no le queda terreno alguno para transferir   y  por el
contrario se habría excedido en tres hectáreas toda vez que enajenó una extensión de 13 hectáreas.

Señala que igualmente presentó fotocopias legalizadas de algunos actuados dentro de la demanda
voluntaria de mensura y deslinde seguida por Servando Jiménez Montaño, donde se evidencia que
propuso como su perito al Topógrafo Franklin Boscou Chavarría, quien señaló que el fundo de
Jiménez fue afectado en un 50% por ENDE, que esa área  fue definida y que la parte  individual
cultivable cuya extensión superficial es de 10 hectáreas se encuentra afectada por ENDE. 

Aduce que la Presidenta del Tribunal de Sentencia, previo traslado al Ministerio Público como a la
parte querellante, rechazó la prueba extraordinaria con el argumento que en el memorial de 10 de
junio de 2003, ofreció como prueba literal un documento de transferencia y no una certificación de
Derechos Reales y que estaría intentando judicializar una prueba diferente a la ofrecida, sin
considerar que el art. 335.1) CPP  establece  la posibilidad de  que sobrevenga  la necesidad de
producir prueba extraordinaria como ocurre en su caso  para desvirtuar la declaración  testifical,  con
la que nace la necesidad de producir la referida prueba extraordinaria.

Indica que posteriormente el Tribunal rechazó igualmente la prueba literal consistente en un


documento expedido por Derechos Reales el 11 de julio de 2003, donde consta la transferencia de
un lote  que realizó a favor de Jong Man Park, cuyos datos coinciden plenamente con los señalados
en el memorial de ofrecimiento de prueba.

Alega que contra la Resoluciones  de 22  de agosto del año en curso, que rechazó la prueba
extraordinaria aludida, interpuso el recurso de Reposición que fue rechazado contra el que no existe
recurso ulterior; en cuanto a la segunda resolución de 25 de agosto anunció apelación restringida
que se hará efectiva cuando se dicte sentencia,  que la misma  se emitirá prescindiendo de la prueba
esencial cuya incorporación se reclama, por lo que  se requiere de la protección inmediata del
recurso de amparo, no siendo aplicable a su caso el principio de subsidiariedad.

I.1.2.Derechos y garantías supuestamente vulnerados

           

El actor estima que se ha vulnerado su derecho a la defensa y la garantía del debido proceso.  

I.1.3.Autoridades recurridas y petitorio

De acuerdo a lo relatado plantea recurso de amparo constitucional contra Lineth Tapia Patiño y Juan
Luis Ledezma, jueces técnicos del Tribunal Primero de Sentencia de la Capital, Herminia Nikole
Ugarte, Lucio Almaraz Murillo y Jhonny Nina Siles, jueces ciudadanos, solicitando se revoque las
resoluciones de 22 y 25 de agosto y se incorpore la  prueba rechazada.   

I.2.Audiencia y Resolución del Tribunal de amparo constitucional

En la audiencia pública celebrada el 20 de noviembre de 2003 cuya acta corre a fs. 65 y vta. se
suscitaron las siguientes actuaciones:

I.2.1.Ratificación del recurso

El recurrente ratificó su demanda por intermedio de su abogada.

I.2.2.Informe de las autoridades recurridas

Las autoridades recurridas informaron por escrito que cursa de fs. 62 a 64, lo siguiente: a) el Tribunal
Primero de Sentencia radicó  la acusación presentada por el Ministerio Público y la acusación
particular de In Jim Shim contra Moisés Sejas Montesinos por el delito de estelionato; b) en la
audiencia pública del juicio oral de 22 de agosto de 2003, se recibió la declaración de Servando
Jiménez Montaño testigo propuesto por ambas partes; c)la defensora solicitó que en aplicación del
art. 335 CPP existía la necesidad de producir prueba extraordinaria,  solicitud que fue corrida en
traslado a la parte acusadora que pidió la exclusión de dicha prueba  que data de 1995 invocando el
art. 172 CPP, escuchando a las partes el Tribunal negó la admisión de dicha prueba por no ser de
reciente obtención mediante el correspondiente Auto, contra el que la defensa planteó recurso de
Reposición, que fue a su vez rechazado; d) el 25 de agosto  de 2003, la abogada defensora solicitó se
introduzca la prueba signada con la letra D-12 documento de transferencia entre Moisés Sejas
Montesinos e In Jim Shim, el Tribunal al evidenciar que la prueba era distinta a la ofrecida y señalada
con la letra D-12, rechazó la misma mediante resolución que fue impugnada por la defensa;  e) el
Tribunal en el primer caso, no ha vulnerado derecho alguno toda vez que el recurrente  conforme
señala el art. 340 CPP debió ofrecer su prueba dentro del plazo de diez días; f) en el segundo caso si
bien la prueba fue ofrecida dentro de dicho plazo, (documento de transferencia entre   In Jin Shim),
sin embargo  no corresponde a la ofrecida (documento de transferencia entre Moisés Sejas
Montecinos e In Jim Shim), y lo que se pretendió judicializar fue un documento certificado alodial de
Derechos Reales; g)  aceptar la introducción  de la supuesta prueba extraordinaria distinta a la
ofrecida sería violar el art. 338 CPP; h) el recurrente no tomó en cuenta que en el proceso penal rige
el principio de preclusión y que la prueba extraordinaria según la doctrina  penal, es aquella que
ninguna de las partes sabía de su existencia y que al ser importante para una de las partes se
anuncia como tal; i) no se realizó valoración de la prueba ni dictó sentencia encontrándose
pendientes los  recursos de apelación y casación y que al ser el recurso de amparo de carácter
subsidiario se declare improcedente el recurso.

I.2.3.Resolución 

La Sentencia cursante de fs. 66 a 68 pronunciada el 20 de noviembre de 2003 por la Sala Civil


Segunda de la Corte Superior del Distrito Judicial de Cochabamba Cruz, declaró improcedente el
recurso, bajo estos fundamentos: 1) la apelación restringida anunciada por el recurrente será
resuelta después que se dicte la sentencia y siempre que se concrete la misma; 2) en aplicación del
art. 96.3) de la Ley del Tribunal Constitucional (LTC) el recurso de amparo constitucional no procede
contra las resoluciones judiciales que por cualquier otro recurso puedan ser modificadas o
suprimidas aún cuando no se haya hecho uso de dicho recurso.

II. CONCLUSIONES

Hecha la debida revisión y compulsa de los antecedentes se llega a las conclusiones que se señalan
seguidamente:

   II.1.          En el proceso penal seguido por el Ministerio Público y la acusación particular de In Jin
Shim, contra Moisés Sejas Montecinos por la supuesta comisión del delito de estelionato el Tribunal
Primero de Sentencia,  mediante Auto de 22 de agosto de 2003, rechazó la prueba extraordinaria 
presentada por la defensa del imputado, con el fundamento que la literal presentada data de 1995,
que los hechos no son recientes y  la misma no se adecua a las reglas de la prueba extraordinaria
porque no surge del debate que se realizó en el juicio. La defensa interpuso recurso de reposición
que fue igualmente rechazado, con el argumento que se trata de un recurso que procede contra las
providencias de mero trámite (fs. 40).

   II.2.          En la audiencia de 25 de agosto del año en curso, el Tribunal recurrido aceptó mediante
providencia la exclusión probatoria planteada por el representante del Ministerio Público contra la
prueba signada con la letra D-12, por no corresponder a la prueba anunciada y que el documento de
transferencia no fue presentado en Secretaría, la defensa anunció apelación incidental que el
Tribunal hizo constar (fs. 42), sin embargo contraviniendo el art 123 CPP no resolvió  la exclusión de
prueba mediante Auto ni advirtió si esa resolución era  recurrible por quienes y en qué plazo.

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

El recurrente  arguye que las autoridades recurridas han vulnerado el derecho a la defensa y la
garantía del debido proceso, al haberle rechazado la prueba extraordinaria que ofreció en audiencia
como resultado de la declaración de un testigo de contrario, así como al  excluir  una prueba ofrecida
oportunamente. En ese sentido, corresponde, en revisión, analizar si en la especie se debe otorgar la
tutela pretendida.

III.1.  El amparo constitucional ha sido instituido como un recurso extraordinario que otorga
protección inmediata contra los actos ilegales y las omisiones indebidas de autoridades o
particulares que restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir derechos y garantías
fundamentales de la persona, reconocidos por la Constitución y las Leyes, siempre que no existiera 
otro recurso legal para dicha protección.

III.2.  La Jurisprudencia  Constitucional  en la SC 1082/2003-R señala “(:..) cuando el art. 19 CPE,


establece que `...se concederá el amparo solicitado siempre que no hubiere otro medio o recurso
legal para la protección inmediata de los derechos y garantías restringidos, suprimidos o
amenazados..`, lleva implícito el mandato del legislador constituyente de que  las supuestas lesiones
a los derechos fundamentales y garantías constitucionales se reparen en la jurisdicción ordinaria, y
sólo en defecto de ésta, y siendo cierta y efectiva la lesión al derecho invocado, la jurisdicción
constitucional otorgue la tutela, salvo los casos de daño irreparable, en los que la protección
resultaría ineficaz, por tardía ( así, SC 462/2003-R entre otras).”

III.3.  De modo general  la prueba ofrecida se judicializa o produce  en juicio, con la acusación  o al
contestar la misma; ello no significa, que las partes no puedan ofrecer o producir pruebas
adicionales durante el juicio oral, tal es el caso de la prueba extraordinaria a que hace referencia el
art. 335 CPP, que es aquella que surge en el desarrollo del juicio, cuya naturaleza y pertinencia debe
ser debatida en la audiencia a objeto de su admisión o su rechazo;  en caso de que la misma fuera
rechazada por el Juez o tribunal, la parte perjudicada con esa decisión, de acuerdo a procedimiento,
tiene el derecho  a hacer uso de los recursos que la Ley franquea y ante la subsistencia del rechazo,
anunciar que hará uso del recurso de apelación restringida  (art. 407 CPP).

Esta exigencia se explica porque en función a lo dispuesto por el art. 407 CPP, cuando existe un
defecto de procedimiento -como es el caso-, el interesado debe reclamar oportunamente, su
saneamiento o efectuar reserva de recurrir salvo los casos expresamente señalados por los arts. 169
y 370 del citado código.

III.4. En el caso presente, ante  el  rechazo de la prueba extraordinaria y del recurso de reposición la
defensa del recurrente debió anunciar el  recurso de apelación restringida  como era su obligación, 
omisión que pretende subsanar  a través del recurso de amparo, por consiguiente al no haber
agotado aún las instancias ordinarias  que la Ley  le otorga,  conforme  al sistema de recursos
establecidos en el art. 407 del Código de Procedimiento Penal, no  se abre la tutela que brinda el
amparo constitucional por su carácter subsidiario y extraordinario, lo que impide ingresar a conocer
el fondo del asunto, cuya revisión es facultad de las autoridades jurisdiccionales superiores, sólo en
el caso en el que dichas instancias se hubieran agotado, o cuando  el daño fuese irreparable por falta
de oportunidad, es posible invocar la tutela inmediata del amparo. 

            Por otra parte en cuanto a la decisión adoptada en la audiencia de 25 de agosto  en  la que  el 
Tribunal,  excluyó  la prueba producida por la defensa del recurrente,  actuado  que si bien  resulta
indebido  y coarta  el derecho a la defensa por cuanto no es admisible  la exclusión de la prueba
mediante una providencia sino a través  de un auto debidamente fundamentado, se omitió además
comunicar a las partes si esa Resolución era recurrible o no como manda el art. 123 CPP, no se
puede soslayar el hecho de que la defensa  no interpuso el recurso de reposición previsto en el art.
401 CPP observando tales irregularidades y menos anunció la interposición del recurso de apelación
restringida conforme al art. 407 CPP,   por consiguiente al no haber  agotado esa vía, es de aplicación
el art. 96-3)  LTC, por el principio de subsidiariedad que caracteriza al recurso de amparo como se
dijo anteriormente.   

De todo lo  expuesto, se concluye que la Corte de amparo, al haber declarado  improcedente el
recurso,  ha evaluado  correctamente los datos del proceso  y  las normas aplicables al mismo.

POR TANTO
El Tribunal Constitucional, en virtud de la jurisdicción que ejerce por mandato de los arts. 19.IV,
120.7ª CPE, 7 inc. 8) y 102.V LTC, con los fundamentos expuestos APRUEBA la Sentencia cursante de
fs. 66 a 68 pronunciada el 20 de noviembre de 2003 por la Sala Civil Segunda de la Corte Superior del
Distrito Judicial de  Cochabamba;

Sin costas ni multa por ser excusable.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional.

No interviene el Decano Dr. Willman Ruperto Durán Ribera por no haber conocido el asunto.

 Fdo. Dr. René Baldivieso Guzmán

     PRESIDENTE

        Fdo. Dra. Elizabeth Iñiguez de Salinas

   MAGISTRADA

                                           

                            Fdo. Dr. José Antonio Rivera Santivañez                   

       MAGISTRADO

Fdo.  Dra. Martha Rojas Alvarez

                                        MAGISTRADA

                       

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