Está en la página 1de 6

ANALISIS LEGAL DE LOS CONSULTORES DE LINEA Y PERSONAL

EVENTUAL

El artículo 233 de la Constitución Política del Estado, señala: “Son servidoras y


servidores públicos las personas que desempeñan funciones públicas. Las servidoras y
los servidores públicos forman parte de la carrera administrativa, excepto aquellas
personas que desempeñen cargos electivos, las designadas y los designados, y quienes
ejerzan funciones de libre nombramiento”.

Por su parte, el artículo 5 de la Ley Nº 2027 “Estatuto del Funcionario Público”,


clasifica a los servidores públicos en: Funcionarios electos, Funcionarios designados,
Funcionarios de libre nombramiento, Funcionarios de carrera y Funcionarios
interinos.

A su vez, el artículo 6 de la precitada norma legal prevé: “No están sometidas al presente
Estatuto ni a la Ley General del Trabajo, aquellas personas que, con carácter eventual o
para la prestación de servicios específicos o especializados, se vinculen contractualmente
con una entidad pública, estando sus derechos y obligaciones regulados en el respectivo
contrato y ordenamiento legal aplicable y cuyos procedimientos, requisitos, condiciones y
formas de contratación se regulan por las Normas Básicas del Sistema de Administración
de Bienes y Servicios”, disposición concordante con el artículo 60 del de las Normas
Básicas de Administración de Personal, aprobadas mediante Decreto Supremo Nº 26115.

De lo referido, se establece que cualquier persona no incluida en la clasificación del artículo


5º de la Ley Nº 2027 deberá estar sujeta únicamente a lo estipulado en su contrato y en los
términos de referencia que formen parte del mismo.

Por otra parte, existiendo una amplia jurisprudencia con relación a los consultores de
línea como a personal eventual corresponde citar las Sentencias Constitucionales
Nrs.0165/2005-R de 28 de febrero de 2005 y 789/2010-R de 02 de agosto de 2010,
respectivamente, que señalan:

Sentencia Constitucional Nº 0165/2005-R de 28 de febrero de 2005

(…) De lo referido precedentemente, se colige que para invocar la aplicación tanto de la


Ley General del Trabajo como del Estatuto del Funcionario Público, indiscutiblemente
se precisa tener una relación de dependencia, asalariada en el caso de la Ley General del
Trabajo y con cualquier entidad del Estado en lo que respecta al Estatuto del
Funcionario Público, vínculos que en la especie no ha demostrado el recurrente, pues lo
que suscribió con el SEDEGES fue un contrato en el que asumió la calidad de Consultor
para realizar un trabajo específico para la entidad contratante, sujeto a un régimen
especial que es el de Consultoría, es decir que pactaron las condiciones sobre las cuales
el primero realizaría y prestaría un servicio y el segundo pagaría el mismo, así se
evidencia -sin lugar a dudas- de las cláusulas tercera a quinta, séptima y décima del
contrato, donde se detallan la naturaleza, lugar de servicios, contraprestación,
obligaciones de las partes, sujeción al Sistema de Administración de Bienes y Servicios
y la inexistencia de relación laboral o vínculo obrero patronal con el contratado.
Consecuentemente queda por demás evidente que el recurrente no tiene calidad de
trabajador asalariado ni de servidor público, por lo que no puede alegar que se le
aplique la Ley General del Trabajo y menos exigir ser sometido a los alcances de
las disposiciones del Estatuto citado, pues su contratación está regida por el DS
27328 que regula los procesos de Contratación de Bienes, Obras, Servicios
Generales y Servicios de Consultoría, lo que hace inviable la tutela solicitada. (Las
negrillas son nuestras).

Sentencia Constitucional Nº 789/2010-R de 02 de agosto de 2010

(…) En el mismo sentido, el art.60 del DS 26115, Normas Básicas del Sistema de
Administración de Personal (NBSAP) de 16 de marzo, señala que: “No están sometidos
a la Ley del Estatuto del Funcionario Público ni a las presentes Normas Básicas aquellas
persona que con carácter eventual o para la prestación de servicios específicos o
especializados se vinculen contractualmente con una entidad pública, estando sus
derechos y obligaciones regulados en el respectivo contrato y ordenamiento legal
aplicable y cuyo procedimiento, requisitos, condiciones y formas de contratación se
regulan por las Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y
Servicios” (…) De la revisión de la documentación cursante en el expediente
administrativo, se concluye que el accionante, al momento de su destitución mantenía
una relación laboral eventual vigente con el SENASAG, a través de un contrato de
prestación de servicios a plazo fijo cuya fecha de vencimiento era el 31 de diciembre de
2007, adquiriendo por tanto la categoría legal de personal eventual con cargo a la
partida 12100, persé, se hallaba alcanzado por el art. 60 del DS 26115 (NBSAP).
(Las negrillas son nuestras).

En este marco normativo y jurisprudencial, se considera que el personal eventual y


consultores de línea no están considerados como servidores públicos.

El artículo 15 del Reglamento aprobado por Decreto Supremo N° 23318-A, modificado


por Decreto Supremo N° 26237, determina quienes son sujetos de responsabilidad
administrativa, indicando:

Artículo 15. (Sujetos de responsabilidad administrativa) Todo servidor


público es pasible de responsabilidad administrativa. Lo son asimismo los ex
servidores públicos a efecto de dejar constancia y registro de su
responsabilidad. Toda autoridad que conozca y resuelva procesos internos
disciplinarios deberá enviar copia de la Resolución final ejecutoriada a la
Contraloría General de la República para fines de registro. (Resaltado y
subrayado fuera de texto).

Establecido lo anterior, se debe señalar que:

La Ley Nº 2027, del 27 de octubre de 1999, “Estatuto del Funcionario Público”, en su


artículo 4 establece que servidor público es: “(…) aquella persona individual, que
independientemente de su jerarquía y calidad, presta servicios en relación de
dependencia a una entidad sometida al ámbito de aplicación de la presente Ley”.
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

A su vez, la precitada Ley Nº 2027, en su artículo 5 clasifica a los servidores públicos


en: funcionarios electos, funcionarios designados, funcionarios de libre nombramiento,
funcionarios de carrera y funcionarios interinos.

Y en su artículo 6, prevé:

No están sometidas al presente Estatuto ni a la Ley General del Trabajo, aquellas


personas que, con carácter eventual o para la prestación de servicios específicos o
especializados, se vinculen contractualmente con una entidad pública, estando sus
derechos y obligaciones regulados en el respectivo contrato y ordenamiento legal
aplicable y cuyos procedimientos requisitos, condiciones y formas de contratación se
regulan por las Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y Servicios.
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

Disposición concordante con el artículo 60 de las “Normas Básicas de Administración de


Personal”, aprobadas mediante Decreto Supremo Nº 26115, del 16 de marzo de 2001.

Por otra parte, también es necesario señalar que el Tribunal Constitucional, en relación a
la situación del personal eventual, ha expresado lo siguiente:

Sentencia Constitucional Plurinacional N° 0542/2015-S2 del 22 de mayo de 2015

(…) de antecedentes procesales se evidencia que los accionantes, no se identifican con


la clasificación de servidores públicos establecidos en el art. 5 del EFP,
adecuándose más bien su situación a la catalogación descrita en el art. 6 de mismo
cuerpo normativo, toda vez que, entre los accionantes y la ABT, representada
entonces por el demandado, se suscribieron los Contratos de Trabajo Eventual CE-
ABT 133/2014 y CE-ABT 137/2014; por lo tanto, sus derechos y obligaciones se
hallan establecidos en tales documentos; por lo que, las emergencias que resulten de
la relación contractual entre los accionantes y la entidad pública (ABT), así como su
retiro, deben sujetarse a las previsiones contractuales, previamente definidas”.

(…) por cuanto, al tratarse de funcionarios de carácter eventual, que prestan servicios
específicos o especializados; por lo que, al no ser servidores públicos ni de carrera ni
provisorios, no están sometidos al presente Estatuto ni a la Ley General del Trabajo, y
por lo tanto, sus derechos y obligaciones se halla regulados en el correspondiente
contrato. (Resaltado y subrayado fuera de texto).

Sentencia Constitucional Plurinacional N° 0671/2017-S1 del 12 de julio de 2017

(…) el art. 6 del EFP, establece que existen otras personas que prestan servicios al
Estado, sin encontrarse sometidas a dicha norma ni a la Ley General del Trabajo;
es decir, sin adquirir la calidad de funcionario público ni trabajador, estando sus
derechos y obligaciones regidos por un determinado contrato; lo cual acontece en el
caso de autos, pues el accionante suscribió con la entidad demandada el Contrato
Administrativo de Personal Eventual VOBO/PT-RHPE-005/2017, para la prestación de
servicios como Pesador; estipulándose como tiempo de duración a partir del 21 de enero
al 31 de diciembre de 2017; de donde se tiene que, las emergencias que resulten de esa
relación contractual, deben sujetarse a las previsiones del tenor de sus cláusulas (…) en
consecuencia, al estar sus derechos y obligaciones regulados al Contrato Administrativo
de Personal Eventual VOBO/PT-RHPE-005/2017 y al no encontrarse dentro de los
alcances de la Ley General de Trabajo ni del Estatuto del Funcionario Público, se tiente
que la entidad demandada no lesionó sus derechos al trabajo ni a la estabilidad laboral;
y, al no poder operar en su caso la destitución laboral previo proceso
administrativo o judicial, por la naturaleza jurídica del Contrato al que se sujetó
voluntariamente; asimismo, tampoco se vulneró su derecho al debido proceso.
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

Así también, el Tribunal Supremo de Justicia, mediante Auto Supremo N° 520 del 24
de julio de 2015, ha expresado lo siguiente:

(…) la norma determina que quien celebra con la administración pública un contrato
administrativo, por el acuerdo sólo adquiere el carácter de titular de una relación
contractual, ello claro dentro del marco de acción de lo inscrito en el contrato, sin que
tal situación implique una transformación en servidor público. El régimen del servidor
público y de su responsabilidad se encuentra definido y regulado en la Ley, de lo
que se desprende que de ninguna manera un contrato administrativo puede dotar al
contratado, condiciones de servidor público, ya que éstos ejercen sus funciones
dentro de un régimen especial, en la forma prevista por los arts. 232 y sgts. de la
CPE, la Ley del Estatuto del Funcionario Público (LEFP) y normas conexas (…).
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

En ese marco, se establece que quienes ejercen como personal eventual, no están
considerados como servidores públicos, estando sus derechos y obligaciones
regulados en el respectivo contrato que suscriben con la entidad pública, por ende no
son sujetos de responsabilidad administrativa.

ANALISIS LEGAL SOBRE LA DESIGNACION DE LA AUTORIDAD


SUMARIANTE

Los artículos 12 y 13, del “Reglamento de la Responsabilidad por la Función Pública”


aprobado mediante Decreto Supremo N° 23318-A modificado por el Decreto Supremo
N° 26237 de 29 de junio de 2001, establecen:

Artículo 12. (Autoridad legal competente).

a) la prevista en las normas específicas de la entidad o en su defecto, el


servidor público designado por el máximo ejecutivo en la primera
semana hábil del año; (Negrillas y subrayado fuera de texto)

Artículo 13. (Naturaleza de la responsabilidad administrativa)

La responsabilidad administrativa emerge de la contravención del


ordenamiento jurídico administrativo y de las normas que regulan la
conducta del servidor público. (Negrillas y subrayado fuera de texto).

Asimismo, la Resolución Administrativa N° SSC/IRJ/043/2004, emitida por la ex


Superintendencia de Servicio Civil (ahora Dirección General del Servicio Civil),
señala:

“El Sumariante o autoridad legal competente para conocer el sumario


administrativo y el recurso de revocatoria, es el servidor público designado por el
máximo ejecutivo en la primera semana hábil del año, precautelando de esta manera
la garantía constitucional del debido proceso en su elemento del derecho al juez natural,
independiente, imparcial y competente”. (Resaltado y subrayado fuera de texto).

Por su parte, el artículo 15 del Reglamento aprobado por Decreto Supremo N° 23318-A,
modificado por Decreto Supremo N° 26237, determina quienes son sujetos de
responsabilidad administrativa, indicando:

Artículo 15. (Sujetos de responsabilidad administrativa) Todo servidor público es


pasible de responsabilidad administrativa. Lo son asimismo los ex servidores públicos
a efecto de dejar constancia y registro de su responsabilidad. Toda autoridad que
conozca y resuelva procesos internos disciplinarios deberá enviar copia de la
Resolución final ejecutoriada a la Contraloría General de la República para fines de
registro. (Resaltado y subrayado fuera de texto).

De la normativa citada precedentemente se llega a establecer que la autoridad


legal competente (Autoridad Sumariante) en una entidad puede ser la que se
encuentra prevista en normas específicas o en su defecto el servidor público,
nombrado por la Máxima Autoridad Ejecutiva, en la forma y tiempo determinado
y que son sujetos de responsabilidad administrativa los servidores y ex servidores
públicos.

En tal sentido, por lo señalado anteriormente, no correspondería contar con una


Autoridad Sumariante, ya que tal designación debe recaer en un servidor público de la
Empresa Boliviana de Alimentos y Derivados (EBA); sin embargo, dicho personal
eventual no estaría exento del establecimiento de indicios de responsabilidad civil y/o
penal dependiendo del caso.

A mayor abundamiento, se debe señalar que:

La Ley Nº 2027, del 27 de octubre de 1999, “Estatuto del Funcionario Público”, en su


artículo 4 establece que servidor público es: “(…) aquella persona individual, que
independientemente de su jerarquía y calidad, presta servicios en relación de
dependencia a una entidad sometida al ámbito de aplicación de la presente Ley”.
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

A su vez, la precitada Ley Nº 2027, en su artículo 5 clasifica a los servidores públicos


en: funcionarios electos, funcionarios designados, funcionarios de libre nombramiento,
funcionarios de carrera y funcionarios interinos.

Y en su artículo 6, prevé:

“No están sometidas al presente Estatuto ni a la Ley General del Trabajo, aquellas
personas que, con carácter eventual o para la prestación de servicios específicos o
especializados, se vinculen contractualmente con una entidad pública, estando sus
derechos y obligaciones regulados en el respectivo contrato y ordenamiento legal
aplicable y cuyos procedimientos requisitos, condiciones y formas de contratación se
regulan por las Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y Servicios”.
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

Disposición concordante con el artículo 60 de las “Normas Básicas de Administración de


Personal”, aprobadas mediante Decreto Supremo Nº 26115, del 16 de marzo de 2001.

Por otra parte, también es necesario señalar que el Tribunal Constitucional, en relación a
la situación del personal eventual, ha expresado lo siguiente:

Sentencia Constitucional Plurinacional N° 0542/2015-S2 del 22 de mayo de 2015

(…) de antecedentes procesales se evidencia que los accionantes, no se identifican con


la clasificación de servidores públicos establecidos en el art. 5 del EFP,
adecuándose más bien su situación a la catalogación descrita en el art. 6 de mismo
cuerpo normativo, toda vez que, entre los accionantes y la ABT, representada
entonces por el demandado, se suscribieron los Contratos de Trabajo Eventual CE-
ABT 133/2014 y CE-ABT 137/2014; por lo tanto, sus derechos y obligaciones se
hallan establecidos en tales documentos; por lo que, las emergencias que resulten de
la relación contractual entre los accionantes y la entidad pública (ABT), así como su
retiro, deben sujetarse a las previsiones contractuales, previamente definidas”.

(…) por cuanto, al tratarse de funcionarios de carácter eventual, que prestan servicios
específicos o especializados; por lo que, al no ser servidores públicos ni de carrera ni
provisorios, no están sometidos al presente Estatuto ni a la Ley General del Trabajo, y
por lo tanto, sus derechos y obligaciones se halla regulados en el correspondiente
contrato. (Resaltado y subrayado fuera de texto).

Sentencia Constitucional Plurinacional N° 0671/2017-S1 del 12 de julio de 2017


(…) el art. 6 del EFP, establece que existen otras personas que prestan servicios al Estado,
sin encontrarse sometidas a dicha norma ni a la Ley General del Trabajo; es decir, sin
adquirir la calidad de funcionario público ni trabajador, estando sus derechos y
obligaciones regidos por un determinado contrato; lo cual acontece en el caso de autos, pues
el accionante suscribió con la entidad demandada el Contrato Administrativo de Personal
Eventual VOBO/PT-RHPE-005/2017, para la prestación de servicios como Pesador;
estipulándose como tiempo de duración a partir del 21 de enero al 31 de diciembre de 2017; de
donde se tiene que, las emergencias que resulten de esa relación contractual, deben sujetarse a las
previsiones del tenor de sus cláusulas (…) en consecuencia, al estar sus derechos y obligaciones
regulados al Contrato Administrativo de Personal Eventual VOBO/PT-RHPE-005/2017 y al no
encontrarse dentro de los alcances de la Ley General de Trabajo ni del Estatuto del Funcionario
Público, se tiente que la entidad demandada no lesionó sus derechos al trabajo ni a la estabilidad
laboral; y, al no poder operar en su caso la destitución laboral previo proceso
administrativo o judicial, por la naturaleza jurídica del Contrato al que se sujetó
voluntariamente; asimismo, tampoco se vulneró su derecho al debido proceso. (Resaltado y
subrayado fuera de texto).

Así también, el Tribunal Supremo de Justicia, mediante Auto Supremo N° 520 del 24
de julio de 2015, ha expresado lo siguiente:

(…) la norma determina que quien celebra con la administración pública un contrato
administrativo, por el acuerdo sólo adquiere el carácter de titular de una relación
contractual, ello claro dentro del marco de acción de lo inscrito en el contrato, sin que
tal situación implique una transformación en servidor público. El régimen del servidor
público y de su responsabilidad se encuentra definido y regulado en la Ley, de lo
que se desprende que de ninguna manera un contrato administrativo puede dotar al
contratado, condiciones de servidor público, ya que éstos ejercen sus funciones
dentro de un régimen especial, en la forma prevista por los arts. 232 y sgts. de la
CPE, la Ley del Estatuto del Funcionario Público (LEFP) y normas conexas (…).
(Resaltado y subrayado fuera de texto).

En ese marco, se establece que quienes ejercen como personal eventual, no están
considerados como servidores públicos, estando sus derechos y obligaciones
regulados en el respectivo contrato que suscriben con la entidad pública, por ende no
son sujetos de responsabilidad administrativa y tampoco pueden ser designados
como Autoridad Legal Competente (Autoridad Sumariante) en virtud de que tal
designación debe recaer sobre servidores públicos; sin embargo, no se encontraría
exentos de responsabilidad civil o penal que corresponda.

También podría gustarte