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INSTITUTO DE FORMACIÓN DOCENTE ACADEMO

PROFESORADO EN EDUCACION ESCOLAR BASICA 1° Y 2° CICLOS


CONOCIMIENTO DEL SISTEMA DE LAS LENGUAS CASTELLANA Y GUARANI
PARA SU ENSEÑANZA.
Profesora: Lic. Sonia Raquel Portillo Vázquez.

Semestre: 2°

Total de puntos: 5 pts.

Estudiante: Laura Gabriela Gutiérrez Rodríguez.

ENSAYO N°1 LA DESERCIÓN ESCOLAR EN PARAGUAY.


Al hablar de deserción escolar nos referimos a cuando, por diversas causas, el niño/a se aparta
de sus estudios, lo que provoca una serie de consecuencias para; primeramente, al niño, luego
a las instituciones educativas, y también a sus familias.

Este trabajo tiene como objetivo general identificar los factores que inciden en la deserción
escolar, también analizar los perfiles de los posibles desertores, que permitan tomar acciones
para lograr la permanencia escolar y la exitosa culminación de la educación.

Hay distintas formas de entender la deserción escolar:

- Según su duración la deserción puede ser temporal o definitiva. Es cuando algunos niños que
abandonan la escuela pueden matricularse al año siguiente (deserción temporal) mientras que
en otros casos los estudiantes que abandonan no retornan al sistema educativo.

- Según su alcance, puede ser del establecimiento educativo o del Sistema educativo en
general. Tradicionalmente el primer caso no se entiende como deserción sino como traslado,
pero debe generar reflexiones a los establecimientos educativos sobre su capacidad para
retener a los estudiantes.

- Según la temporalidad, que reconocería el momento (o momentos) de la trayectoria en la


que ocurre, podría reconocerse según los niveles educativos en que ocurre: preescolar,
primaria, secundaria, media o universitaria, o incluso los grados escolares.

La exclusión escolar es uno de las mayores catástrofes de la educación paraguaya, y afecta a


miles de niños y niñas, que, por diversos motivos, se ven obligados a dejar la escuela a partir
del séptimo grado, de acuerdo a los datos del MEC.

En Paraguay, 6 de cada 10 niños y niñas que se matriculan en el primer grado, abandonan la


secundaria antes de llegar al tercer año de la media, según datos oficiales del Ministerio de
Educación y Ciencias (MEC, 2015)

El mayor proceso de deserción se da entre los estudiantes que tienen entre 13 y 14 años,
sobre todo las niñas que residen en zonas rurales, quienes dejan los estudios principalmente
por razones económicas (sus familias no tienen el dinero suficiente para costear los gastos
educativos) o porque los contenidos que les enseñan no son los más adecuados para el
contexto en el que viven y no consideran que les sean útiles.

Cuando las razones económicas son la principal causa de abandono de la escuela, los niños y
niñas se ven forzados a trabajar para contribuir con el sustento propio o familiar, lo que se da
especialmente con los varones de zonas rurales y de hogares pobres, quienes se dedican a
actividades de subsistencia mínima, que no les permiten pensar en un futuro en mejores
condiciones de vida.

Además de los niños, niñas y adolescentes que deben dejar el sistema educativo, miles más
corren el riesgo de caer en la misma situación porque ingresaron tardíamente al sistema
educativo, repitieron el año o viven en zonas rurales, alejados de los centros de enseñanza.

La exclusión también se da por falta de estimulación durante el proceso de desarrollo del niño
en la primera infancia, sobreedad que se arrastra durante la primaria, problemas de
aprendizaje y falta de medidas correctivas o apoyo suficiente para superar las posibles
deficiencias, contenidos pedagógicos que no se perciben como pertinentes para el futuro,
entre otros motivos.

Paraguay cuenta con una oportunidad única para despegar, el bono demográfico, ya que el
56% de su población tiene menos de 30 años de edad. Sin embargo, solo el 40% de ellos, los
que al menos terminan sus estudios básicos, podrá participar activamente del desarrollo
económico del país.

Un total de 106.596 jóvenes entre 13 y 17 años de edad no reciben educación en este rango de
edad.

Entre las principales causas es no tener una escuela cercana en su comunidad, otra causa
resaltante es la necesidad de trabajar a temprana edad debido a la situación económica de las
familias. También figura el embarazo precoz, en el caso de las mujeres. Son casi 4.000 niñas
que no van a la escuela y 2.235 niños.
Para combatir la deserción escolar en Paraguay, se analizan algunas claves; hace falta una
buena política de Estado con buen presupuesto para hacer frente a las carencias, pero también
mentores y profesores comprometidos porque sin dudas hoy en día los Niños, niñas y
adolescentes se aburren fácilmente, ya que la falta de motivación en aula es una de las princi-
pales causas de abandono y deserción escolar. 

También es urgente la necesidad de innovar en los métodos de enseñanza, que se promueva el


aprendizaje mediante el uso de las nuevas tecnologías para dinamizar la enseñanza, así como
ajustar la infraestructura de nuestras escuelas y colegios para recibir a personas con distintos
tipos y grados de discapacidad.

Otra de las formas de evitar el abandono escolar es que la educación sea gratis y cuando un
niño no va, el docente indague el motivo de por qué dejó de ir, hacerle un seguimiento y
encontrar solución al problema.

A continuación, haremos una pequeña comparación entre un alumno que abandona sus
estudios escolares y un alumno que culmina de forma satisfactoria sus estudios.

 El alumno piensa que, al dejar sus estudios, tendrá más tiempo libre, menos
preocupación, piensa que ya va a comenzar a trabajar enseguida y así lograra una
independencia económica.
La realidad va a ser muy diferente, porque no va a saber nada, no va a ganar un sueldo
digno, no va tener una carrera que a largo plazo le servirá de sustento y al final va a
terminar mas estresado que cuando estaba estudiando.
Para terminar, es justo y necesario pensar e implementar nuevas estrategias para enfrentar
esta situación que golpea a muchas familias, que no solo es el drama de los niños y ado-
lescentes de familias pobres, sino de todo el país, pues con los niveles actuales de abandono
escolar difícilmente nuestra sociedad pueda soñar con un futuro más promisorio.

Es importante incentivar a nuestros niños y jóvenes a no bajar los brazos y dejar que
abandonen sus estudios por buscar una salida más rápida a cualquier situación o problema que
se les presente en sus vidas.

Y nosotros mismos, como estudiantes de Formación Docente, debemos estar comprometidos


a nuestros estudios. A cumplir con honestidad y con responsabilidad los trabajos que se nos
asignan para el día de mañana culminar de forma satisfactoria con nuestra carrera y ser
educadores productivos para el país.

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