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Temperamento
El temperamento es la personalidad, la forma de vida, las reacciones o el
comportamiento de una persona. Es también una vocación o habilidad plasmada en el
arte o el comercio, o la capacidad de sobreponerse a la adversidad. El temperamento
asume la capa instintivo-emocional de la personalidad, sobre la cual se formará el
carácter de una persona con la ayuda del intelecto y la voluntad. A su vez, nuestra
personalidad y temperamento determinarán nuestro carácter. Cada persona tiene un
temperamento que la hace única, porque el temperamento se relaciona con la forma
en que las personas se relacionan naturalmente con su entorno.
El temperamento determina nuestra capacidad para adaptarnos al cambio y las cosas
nuevas, nuestro estado de ánimo, nuestra tendencia a ser activo o pasivo y nuestra
disposición. El temperamento se determina sobre la base de las características del
sistema nervioso humano y está relacionado con influir en el equilibrio hormonal.
Cabe señalar que en psicología hasta el siglo XX, se pensaba que el estudio del
temperamento jugaba un papel importante para comprender cómo son y cómo se
comportan las personas.
Tipos de temperamento
En la antigüedad, los médicos creían que existían cuatro temperamentos principales,
según el predominio de uno u otro humor en el cuerpo: optimismo, melancolía, mal
genio y flema. Temperamento optimista
El temperamento optimista
Caracteriza a las personas sociables y alegres, abiertas y flexibles a los cambios, activas
y que disfrutan de la vida. Es un temperamento típico de personas con cambios de
humor y un sistema nervioso rápido y equilibrado. Impaciente
Las personas de mal genio son
ágiles, activas, sociables, resolutivas
y dominantes. Quieren que se haga
su voluntad y por lo tanto tienen
ideas y opiniones fuertes. A pesar
de todo, suelen ser flexibles a la
hora de cambiar. Son ambiciosos y,
por lo tanto, se fijan metas altas,
por lo que tienen autocontrol, autosuficiencia e independencia. Su sistema nervioso es
fuerte, rápido y desequilibrado.
Vigor
Personas tranquilas, lentas, retraídas, serias y analíticas. Casi nunca pierden los
estribos. Sin embargo, son menos sensibles al cambio. Prefieren los pensamientos a los
sentimientos. Así que es un placer hacer negocios con ellos. Se caracterizan por un
sistema nervioso lento y equilibrado.
Tendencias melancólicas
Un temperamento melancólico caracteriza a las personas tristes, soñadoras, analíticas
y retraídas, muy sensibles y ansiosas de perfección. No son muy flexibles con los
cambios, pero son muy confiables porque nunca desisten de lo que han iniciado. Este
es un excelente temperamento artístico, pero también muy propenso a la depresión y
el pesimismo. Tienen un sistema nervioso débil.

Carácter
El término marcar es de origen griego y significa "marcar", "cortar". En general, la
personalidad es cómo una persona suele comportarse en ciertas situaciones. Por lo
general, la personalidad se define por una característica dominante o importante en la
forma de ser de una persona. Por ejemplo, si tiendes a ser generoso y generoso, serás
visto como desinteresado; Si tiendes a estar enojado o irritable por mucho tiempo, o te
cuesta perdonar los errores de otras personas, dirán que eres malo. En cualquier caso,
esto es una generalización.
Además de usarse para referirse al comportamiento habitual de alguien, la palabra
carácter se usa en el habla común con muchos significados. Por lo tanto, se dice que
una persona que es muy consecuente con sus creencias tiene personalidad o es una
persona de carácter.
Asimismo, es común distinguir entre fuertes y débiles, buenos y malos, según
diferentes escalas de juicio, que a menudo involucran irritabilidad, paciencia,
templanza y constancia, o servilismo. , dependiendo del contexto. En psicoanálisis, la
personalidad es la organización mental básica de un individuo, reflejada en una
respuesta fija o estructurada. Esta organización corresponde a la forma en que una
persona normalmente trata de armonizar las motivaciones internas (Id), las
limitaciones impuestas por el mundo externo (principios prácticos) y los principios
morales y éticos (Principios metafísicos del ego). Desde el punto de vista psicoanalítico,
la personalidad es el resultado de una confluencia de varios factores, entre ellos la
fuerza del ello, la influencia del entorno (especialmente de los padres) y la protección
que el ego busca en la infancia frente a otros factores. .
Personalidad y temperamento
La personalidad está relacionada con el temperamento, y los dos términos a menudo
se consideran sinónimos. Sin embargo, existen importantes diferencias entre ellos.
Descripción general:
La personalidad consiste en un conjunto de cualidades que una persona adquiere
durante el aprendizaje. El temperamento es una disposición humana constitutiva. La
personalidad se forma por la interacción de una persona con su entorno. El
temperamento se deriva de la genética biológica y es innato. Factores que inciden en
su formación:
El entorno social influye en la formación de la personalidad. La formación del
temperamento está determinada por factores biológicos y está relacionada con
funciones endocrinas y neurológicas. La personalidad comienza a formarse en la
infancia y se refuerza en la edad adulta. La personalidad se forma al nacer y se
manifiesta desde los primeros meses de vida. Posibilidad de modificar:
La personalidad cambia con la experiencia a medida que el individuo interactúa con el
entorno social. El temperamento es difícil de cambiar, aunque algunas de sus
manifestaciones pueden ser ajustadas por la personalidad. personalidad y
personalidad
La personalidad es uno de los factores que componen la personalidad, junto con el
temperamento. Si la personalidad es la respuesta dominante a ciertas situaciones,
entonces, por el contrario, la personalidad es una combinación compleja y variada de
las virtudes, vicios, inclinaciones, sentimientos y pensamientos de una persona. En
otras palabras, es la integración de las características cognitivas y afectivas de una
persona.
 Motivación
La motivación se define como “un conjunto de factores internos o externos que
condicionan parcialmente las acciones de una persona”. En otras palabras, se dice que
cuando alguien está motivado, sus acciones y energía van hacia una meta en
particular. La motivación ahora se define a menudo como la clave del éxito
precisamente porque es la fuerza impulsora detrás de otras habilidades para
establecer objetivos, como la fuerza de voluntad, la perseverancia, el optimismo y una
actitud positiva, entre otras. Por ello, las empresas que consiguen motivar a sus
empleados son un 50% más productiva. ¿Te imaginas cómo puedes aplicar esto en tu
vida?
Cabe señalar que la motivación puede ser determinada por factores internos o
externos. Por esta razón, se hace una distinción entre motivación intrínseca y
extrínseca.
¿Cuál es la diferencia entre motivación intrínseca y extrínseca?
Si bien está claro que tanto la motivación intrínseca como la extrínseca juegan un
papel clave en cualquier estrategia exitosa, no son ni deben ser lo mismo. ¿Conoces la
diferencia entre motivación intrínseca y extrínseca?
La motivación intrínseca es algo que nace dentro de cada persona y no depende de
ningún estímulo externo. Las recompensas que obtienes al promover este tipo de
motivación son puramente íntimas: amor propio, satisfacción personal, independencia,
fuerza interior, confianza, etc.
La motivación extrínseca, por otro lado, es un conjunto de acciones que realiza para
obtener una recompensa externa. El ejemplo más común es la motivación económica,
pero la motivación extrínseca no es solo el deseo de aumentar los salarios. La
motivación extrínseca requiere la validación personal de un tercero: el cumplido o el
apoyo psicológico son aspectos clave de la motivación extrínseca.
La motivación es la clave del éxito
No hay un motivo "bueno" o "malo". Para lograr cualquiera de tus objetivos, debes
lograr un equilibrio entre la motivación interna y externa, tanto individual como
colectiva. En este sentido, existen diversos estudios sobre la importancia de la
motivación tanto en el ámbito personal como profesional, pero sin duda una de las
teorías más conocidas sobre la motivación intrínseca es la teoría de la
autodeterminación (Edward Deci y Richard Ryan, 1975). .
En esta teoría, psicólogos y profesores de la Universidad de Rochester argumentan que
la motivación intrínseca surge en las personas cuando se satisfacen diferentes
necesidades:

 Debe ser autónomo

  Necesito atar
Debes ser competente. En otras palabras, cuando el comportamiento y el cambio de
comportamiento de una persona están motivados por un deseo personal de mejorar y
lograr esa sensación de logro, sin la intención de una recompensa externa, entonces se
puede afirmar que la motivación es intrínseca y que este tipo de motivación a menudo
conduce a disociación de la serotonina. .

Experiencias y Aprendizaje
Una experiencia de aprendizaje es un conjunto de actividades que llevan al alumno a
enfrentarse a una situación, problema o problema desafiante. Esto sucede en etapas
consecutivas y, por lo tanto, requiere múltiples sesiones. Estas actividades son
poderosas (desarrollan un pensamiento complejo y sistemático), consistentes y
coherentes (deben tener interdependencia y una secuencia lógica). Además, para ser
considerados auténticos, deben tener una referencia directa al contexto real o
simulado y, en lo posible, estar hechos en ese contexto. Las experiencias de
aprendizaje son planeadas intencionalmente por el docente, pero también pueden ser
sugeridas en consulta con los estudiantes, donde los estudiantes pueden incluso
sugerir acciones para resolver problemas por sí mismos.
Experiencias educativas que ayuden a nuestros niños y niñas a estar a la altura de lo
que saben. Ven la realidad del contenido que están aprendiendo en clase y ayudan a
conectarlo con el contexto que los rodea.