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Hechos 2:38, 1 Pedro 3:21, Colosenses 2:12
ENFOQUE DOCTRINAL:
Y es así que nosotros creemos, a la luz del estudio sano de los escritos bíblicos,
que el bautismo no es un medio de salvación, por el contrario, sólo se bautizan
los que ya han sido salvos por haber entregado sus vidas a Cristo Jesús. A
continuación, paso a explicar todo esto en orden:
ENFOQUE HERMENÉUTICO:
HECHOS 2:38
1 PEDRO 3:21
El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias
de la carne, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) por la
resurrección de Jesucristo
Son muchos los que creen tener una irrefutable prueba bíblica de que el
bautismo realmente salva en este versículo. Vamos a responder a esto,
mostrando los claros errores que se han cometido para defender esa postura. Y
luego, daremos la correcta interpretación.
Los que usan 1 Pedro 3:21 para decir que el bautismo salva: (1) Jamás
demuestran que Pedro se está refiriendo al bautismo en agua. (2) Ponen exceso
de énfasis en las palabras “nos salva” a propósito, descuidando al mismo tiempo
todo el pasaje. (3) Dividen el verso a la mitad hasta donde les conviene,
eliminando así la parte más importante para la correcta interpretación. Nunca
se debe quitar una frase de un verso para sustentar o defender una doctrina, las
doctrinas tienen que fundamentarse en el estudio sistemático y ordenado de los
pasajes completos de la Biblia.
COLOSENSES 2:12
Sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con
él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.
Este es otro de los versos usados para decir que el bautismo en agua salva.
Pero, como podrán notarlo, Pablo está hablando del bautismo en el sentido
espiritual, del bautismo real no de la representación. Es fácil darse cuenta de
ello con leer el verso anterior en la que Pablo expresa: “En él también fuisteis
circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros el cuerpo
pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo” (v.11). Como ven, al seguir la
ilación de Pablo, nos percatamos de que él está hablando de una circuncisión,
pero “no hecha a mano”, y esto se refuerza al considerar la frase de
complemento: “al echar de vosotros el cuerpo pecaminoso carnal”, y añade: “en
la circuncisión de Cristo”. Nuevamente, está hablando de la identificación del
creyente con Cristo. La circuncisión de Cristo no puede ser de aspecto físico
porque ya vimos que Pablo se oponía a ello. Es un sello, una circuncisión
espiritual ¿A qué se refiere? al perdón de Cristo: “Y a vosotros, estando muertos
en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él,
perdonándoos todos los pecados,” (v.13).
Según el contexto, los maestros legalistas estaban obligando a los gentiles a
guardar la ley y judaizar. Esto era identificarse con Moisés y el Antiguo Pacto a
través de rituales como la circuncisión y otras ordenanzas. Pero Pablo les está
diciendo que ellos ya están identificados con Cristo, y por ello no deben
preocuparse por lo externo. Puesto que Dios ha comenzado en ellos su obrar, y
ahora seremos semejantes a Cristo. Así que, el énfasis debe ponerse sobre lo
espiritual no sobre lo carnal o terrenal.
Me gusta como lo explica Porter, en relación con Colosenses 2:12 – “La palabra
bautismo tenía varias acepciones en la literatura del tiempo de Pablo.
Originalmente, se utilizaba en el oficio de tintorería, para denotar el proceso de
meter alguna tela en la tinta varias veces para cambiarle color. El resultado del
bautismo era que éste y la tela se hacían iguales, idénticos, de tal manera que en
adelante, ya no se podía pensar en la una sin pensar en el otro. Así fue como la
palabra se empezó a utilizar para significar identificación. La oración que
estamos estudiando tiene más sentido si la traducimos con ese vocablo. Es por
ella que fuimos sepultados juntamente con él. En Romanos 6:4–10, el apóstol
alude a la misma verdad: estamos muertos al pecado, porque nos hemos
identificado con el Salvador y estamos vivos para Dios (Romanos 6:11).”
(Porter)
Qué diferente es analizar estas palabras según el contexto en la que han sido
empleadas. En Romanos 6, la identidad del creyente le lleva a un plano de
victoria sobre los pecados mundanales. En Gálatas 3, su identidad le hace vivir
en libertad de la opresión religiosa. Y en Colosenses 2, dicha identidad le hace
saberse y luego sentirse completamente perdonado. El creyente es completo en
Cristo, es libre y es victorioso, para que ahora pueda ser un testimonio externo
de la gracia de Dios en Cristo para todos los que le rodean, no sólo por la
ceremonia de iniciación sino por la misma calidad de vida que desprenden de
su nueva identidad en Cristo.