INTRODUCCIÓN: El presente resumen tiene como propósito presentar un breve resumen acerca de la lectura “Prospectiva estratégica: más allá del plan estratégico” del autor Alfonso Chung Pinzás, sobre la correspondencia existente entre la prospectiva estratégica y la planificación estratégica. Se realiza un acercamiento al tema expuesto mediante el análisis lógico, sobre la prospectiva y la planificación estratégica, a partir de la lectura señalada. La lectura enfoca el estudio de diversas técnicas de análisis de escenarios a largo plazo, respondiendo a la siguiente interrogante ¿cómo concatenar la formulación de los diversos planes estratégicos de una organización hacia un futuro deseado en el largo plazo?; para esto se analizan y comparan tres herramientas principales tales como el Forecasting, el Foresight y la Prospectiva Estratégica, proponiéndose el esquema de la “Escalera Estratégica” como unión de los diversos planes estratégicos y el escenario futuro. La investigación de la prospectiva y la planificación estratégica buscan minimizar los fracasos empresariales; la prospectiva estratégica trata de facilitar a los directivos tomar las decisiones en el presente mediante la construcción de posibles escenarios futuros, mientras que la planificación estratégica establece los procesos y recursos que permiten alcanzar los propósitos deseados a futuro; aunque estos términos tienen concordancias, no son iguales. Por lo que este trabajo tiene como objetivo resaltar las semejanzas y diferencias que existen entre la planificación estratégica y la prospectiva estratégica desde el punto de vista teórico. DESARROLLO De este resumen y la lectura, se determinó que las Prospectiva y la Planificación Estratégica a pesar de tener muchos fuertes en común, pueden ser tomadas como premisas independientes de estudio, puesto que la primera busca imaginar los escenarios futuros de una empresa para así construirlos, y la segunda administra los recursos de manera óptima para alcanzar los objetivos empresariales. Según la lectura, La prospectiva, sea cual sea, constituye una anticipación (preactiva y proactiva) para iluminar las acciones presentes con la luz de los futuros posibles y deseables. Prepararse ante los cambios previstos no impide reaccionar para provocar los cambios deseados. Dentro de la lógica del triángulo griego, el color azul de la anticipación sólo puede transformarse en el verde de la acción con el amarillo de la adaptación de los actores implicados. Aquí aparecen dos errores simétricos a evitar. El primero consiste en pensar en voz alta con los expertos al servicio de la acción, olvidando la adaptación No es una buena idea querer imponer una buena idea. El segundo consiste en desechar a los expertos y la materia azul de las evaluaciones para dar la palabra al pueblo y otorgar privilegios a la materia amarilla de los consensos actuales. Sin prospectiva cognitiva, la prospectiva participativa se vuelve vacía y gira en redondo hacia el presente. El deal de consenso de las actuales generaciones es muchas veces un acuerdo momentáneo para que nada cambie y para transmitir a las futuras generaciones la carga de nuestras irresponsabilidades colectivas. Una prospectiva como la descrita, aunque sea participativa, es contraria a la definición misma del desarrollo sostenible. Consagra el triunfo de los egoísmos individuales a corto plazo (solo son injustas las desigualdades de las que no nos aprovechamos) en detrimento de los intereses colectivos a largo plazo. Las decisiones valientes a afrontar en el futuro son raramente consensuadas, y si la prospectiva debe ser participativa, la estrategia en la que se inspira vuelve a los representantes electos, y estos deben ofrecer acto de voluntad y de valentía para evitar la trampa y la demagogia participativa. La lectura deja implícito que la humanidad tiene sed de futuro, es decir de esperanza, y esta necesidad colectiva se explota mejor si está canalizada por métodos. Es necesario visualizar el direccionamiento que tiene la planificación estratégica frente a la prospectiva, para identificar los objetivos que tiene cada uno de los temas de estudio. Al hablar de direccionamiento los resultados se remiten al rumbo que ha de tomar cada una de los temas a tratar, es decir, hacia donde va dirigida la planificación estratégica y cuál es el rumbo de la prospectiva, se ha de tomar en cuenta que, el direccionamiento de la planificación estratégica es un enfoque gerencial que permite a la alta dirección determinar un rumbo claro, y promover las actividades necesarias para que toda la organización trabaje en la misma dirección. Al tener la planificación estratégica un enfoque gerencial, muestra que la misma aporta con el camino a seguir y además provee de elementos (estrategias), que ayudarán a hacer frente al futuro imprevisto a largo plazo, involucrando tanto a primeros, segundos y terceros. CONCLUSIÓN Los conceptos de prospectiva, estrategia, planificación están en la práctica íntimamente ligados, cada de ellos conlleva el otro y se entremezcla: de hecho, hablamos de planificación estratégica, de gestión y de prospectiva estratégica. Cada uno de estos conceptos representa un referente de definiciones, de problemas y métodos donde la especificidad de cada uno de ellos es tan evidente. ¿Cómo reencontrarlos? ¿existen grandes aproximaciones entre ellos?. A estas preguntas respondemos sin dudarlo. Existe una caja de herramientas y los gestores bien informados hacen buen uso de la misma para así crear un lenguaje común y multiplicar la fuerza del pensamiento colectivo, reduciendo en lo posible los inevitables conflictos. Para todo esto es necesario recordar los conceptos fundamentales de la planificación y su historia. Sin duda el direccionamiento tanto de la Prospectiva como de la Planificación van de la mano, ya que estas dos premisas forman parte de un todo; por un lado, la Planificación muestra el camino y las estrategias para llegar a los objetivos y por otro lado la Prospectiva analiza y ejecuta los imprevistos a largo plazo, es decir se complementan entre sí.