personalidad humana y aparece definida en las fuentes romanas como la facultad natural que tiene cada uno de hacer lo que quiera siempre que no se lo impida la fuerza o el derecho.
La esclavitud es la negación de la libertad.
Considerada institución del derecho de gentes. Justiniano la definió como: institución del derecho de gentes contraria a la naturaleza en virtud de la cual un hombre es sometido al dominio de otro. La sociedad romana mantuvo mucho tiempo la institución de la esclavitud en contradicción con el concepto mismo de la libertad. La división en libre y siervos subsistió a pesar de algunos autores que pretendieron abolirla. Recién en el derecho imperial se introdujeron algunas reformas regulando la esclavitud, sirvieron para atenuar sus consecuencias sociales y jurídicas. La ocupatio bellica fue probablemente la causa originario de la esclavitud. El amo tenia potestad absoluta sobre el esclavo. Se ejercía sobre la persona y bienes del esclavo. El amo podía dar muerta al esclavo, tenia sobre él derecho de vida y muerta. Podía castigarlo, venderlo y abandonarlo. La dominica potestas, en cuya virtud el amo tenia estos derechos, estaba limitado por la acción de los sensores y la opinión publica. La legislación romana no pudo dejar de reconocer que el esclavo era un ser humano capaz de generar relaciones jurídicas. Podía realizar válidamente algunos actos, para hacer adquirir alguna cosa para el amo o para ser instituido heredero por extraños. Otra prueba de que la legislación romana consideraba al esclavo mas como persona que como cosa se encuentra en el hecho de haber declarado religioso el lugar en que era sepultado. En cuanto a lo patrimonial el derecho romano estableció que la incapacidad patrimonial de “servus” fuera corregida por el peculio. Es cierto que los bienes que integraban el peculio del esclavo no le pertenecían en propiedad pero como le era permitido realizar toda clase de actos que tendieran a acrecentar el peculio se tiene que su primitiva incapacidad sufrió una modificación importante. La esclava no podía contraer justas nupcias. Sus uniones eran irregulares. Los hijos habidos fuera de justas nupcias seguían la condición de la madre en el momento del parto.
Este principio se atenuó mas adelante al
establecerse que el hijo de una esclava nacía libre a condición de que la madre hubiese gozado de libertad en algún momento durante el tiempo que mediaba entre la concepción y el alumbramiento. Las causas posteriores al nacimiento estaban previstas en el derecho de gentes y también en el derecho civil. Las reglas del Ius Gentium determinaban que eran esclavos los hombres libres que caían en cautividad por causa de guerra. El derecho romano debía reconocer también que sus ciudadanos perdieran la libertad cuando caían prisioneras pero los legisladores se vieron obligados a arbitrar algunas medidas tendientes a atenuar el rigorismo. El postiliminium( de limite, frontera, post, después): si un ciudadano romano lograba evadirse de la prisión o recuperar su libertad mediante el pago de un rescate, recobraba todos sus derechos y se consideraba que nunca había estado en cautividad. Solo producía efectos en los casos de guerra con pueblos extraños pero no cuando se trataba de guerras civiles, en este caso los prisioneros no eran esclavos sino proscriptos. La Fictio Legis Corneliae: eran validos todos los actos realizados por el ciudadano romano que moría en prisión. Se consideraba que el ciudadano había fallecido en el momento mismo de ser tomado prisionero, antes de perder la capacidad inherente a su condición y en virtud de tal ficción, el testamento otorgado con anterioridad conservaba su eficacia.
También se convertía en esclavo el deudor que dejara de pagar su
deuda dentro de los plazos previstos por la ley.
Si una mujer libre convivía con un esclavo no obstante la
prohibición del dueño de éste, quedaba reducida a la esclavitud. Igual pena para el hombre libre mayor de 20 años que se vendía como esclavo, defraudando al comprador de buena fe y reivindicando luego su libertad para distribuir el precio de la venta con el supuesto vendedor. El ladrón sorprendido en flagrante delito lo mismo que el liberto ingrato con su patrono eran igualmente reducidos a la esclavitud.
Los condenados a trabajar en las minas o
luchador con las fieras o como gladiadores eran también siervos.
También se conviertan en esclavos los que
dejaban de cumplir ciertas obligaciones como los que se sustraían al servicio militar y los que no se inscribían en el censo. La primera división de los hombres en ingenuos y libertos se encuentra en las Institutas de Justiniano. Ingenuo: el que es libre desde el nacimiento, ya haya nacido del matrimonio de ingenuos, de dos libertinos, o de un liberto y un ingenuo. Era indispensable no haber perdido nunca la libertad. Si un hombre nacía libre, pero perdía su libertad aunque recobrándola luego, ya no era ingenuo, sino libertino. Si un esclavo adquiría o recuperaba su libertad por uno de los medios legalmente establecidos tenia la condición de liberto. Las reglas para determinar si un hombre podía disfrutar de las prerrogativas reconocidas al liberto fueron las sgtes. A) el hijo habido en matrimonio legitimo seguía la condición del padre al tiempo de la concepción. B) siendo el matrimonio ilegitimo el hijo seguía la condición de la madre al tiempo del alumbramiento. El esclavo recobraba la libertad por medio de la manumisión, normalmente. Pero el derecho romano consagró algunas normas en cuya virtud era posible conseguir el mismo efecto “sine manumissione”, por imperio de la ley. Los casos para obtener la libertad sin el consentimiento del dueño fueron: 1- el abandono de un esclavo gravemente enfermo. 2- la prostitución de la esclava. 3- el esclavo que denunciara al asesino de su dueño, falsificación de monedas o al que presentaba a un desertor del ejercito. Definición: la Manumisión es el otorgamiento de la libertad a un esclavo. El esclavo manumitido era elevado a la categoría de ciudadano. El simple otorgamiento no era suficiente para producir este efecto. Era de rigor la intervención del Estado, por sí o por medio de sus representantes. La manumisión importaba además un menoscabo del patrimonio del dueño, por lo que el acto debía rodearse de ciertas solemnidades. Había casos en los que el esclavo adquiría la libertad por el simple consentimiento del dueño - de manera que las manumisiones podían ser solemnes y no solemnes. Los modos civiles previstos por el derecho romano fueron tres: MANUMISIO VINDICTA: deriva del nombre de un esclavo Vindicio, que habiendo descubierto la conspiración de los hijos de Bruto, la denunció y la República en señal de agradecimiento le concedió la libertad. El otorgamiento de la libertad se cumplía mediante un proceso simulado de reivindicación. El dueño y el esclavo debían comparecer ante un magistrado, el Pretor, Cónsul o Gobernador de provincia. Y éstos concedían al esclavo su libertad. En el acto intervenía una tercera persona que hacía el papel de reivindicante de la libertad del esclavo. (Adsertor libertatis). Este reclamaba del magistrado la libertad del esclavo al tiempo que le tocaba la cabeza con una varilla llamada vindicta, como el dueño no se oponía a la reclamación formulada por el adsertor, el magistrado procedía a confirmar la declaración hecha en su presencia quedando el esclavo en consecuencia libre y dueño de si mismo. MANUMISSIO PER TESTAMENTUM: el dueño del esclavo al mismo tiempo que disponía de sus bienes, incluía en el testamento la declaración de que otorgaba su libertad a determinados siervos. Dos modalidades: - directa libertas: cuando el testador disponía que tal esclavo quedara libre empleando los términos: “Stiochus liber esto” el acto producía sus efectos desde el momento mismo en que el esclavo favorecido aceptara la herencia. -Fideicomissaria libertas: el testador encargaba al heredero, legatario, fideicomisario la concesión de su libertad a determinado siervo. El beneficiario quedaba obligado al cumplimiento del encargo recibido pudiendo el esclavo ejercer una acción y exigir la ejecución de la voluntad manifestada en el testamento. MANUMISSIO PER CENSUM: cuando el dueño del esclavo inscribía a éste en el censo que se realizaba periódicamente. Esta inscripción debía hacerse por el dueño mismo, o por otra persona con su consentimiento. Esta anotación le otorgaba la libertad y con ella la condición de hombre libre. MANUMISSIO IN ECLESIA: sustituyó a la manumissio censu que fue abolida en tiempos de Vespasiano. Constantino dispuso que si el amo formulaba una declaración en las iglesias, en presencia de autoridades eclesiásticas y de fieles, el esclavo quedaba libre. Las formas no solemnes fueron admitidas desde fines de la República. El amo podía otorgar su libertad a sus esclavos expresando su voluntad en presencia de algunos amigos ( manumissio inter amicos) La manumissio per epistolam tenia lugar cuando el dueño del esclavo manifestaba su voluntad mediante carta. Manumissio per mensam se verificaba cuando el amo admitía que el esclavo se sentara en su mesa. Cuando la manumisión era solemne el esclavo adquiría su libertad y con ella la condición de ciudadano con todos los derechos inherentes a esta condición. Era una libertad plena, de derecho que le confería capacidad jurídica. Cuando la manumisión se daba a través de alguna forma no solemne su libertad era de hecho, revocable a voluntad del amo y estaba expuesto a retornar a su antigua condición. Gozaba de una libertad que carecía de protección jurídica. Augusto dictó dos leyes a fin de limitar el numero de las manumisiones. 1- Aelia sentia: quedo prohibido manumitir en fraude de acreedores. Los menores de 20 años estaban inhabilitados para dar libertad a sus esclavos. Si los esclavos eran menores de 30 años no podían ser manumitidos, salvo que se demostrase una causa justa. Las manumisiones acordadas en contravención a estas disposiciones eran declaradas nulas. Fufia caninia: tenía por objeto restringir las manumisiones testamentarias. La ley dispuso que para que el testamento tenga eficacia se debía identificar al esclavo por su nombre. Las manumisiones debían acordarse en proporción al numero de esclavos que tuviera cada señor. El que poseía de 1 a 2, podía manumitirlos libremente; de 3 a 10, la mitad; de 10 a 30 la tercera parte; de 30 a 100, la cuarta parte; de 100 a 500, la quinta parte. Modos solemnes, se elevaba a la condición de ciudadano. Sin embargo no significaba la ruptura del vinculo que unía a libertos y patrones. Liberto ciudadano: esclavo que había sido manumitido por algunos de los modos solemnes, a pesar de lo cual no podía ejercer las magistraturas y su derecho al voto era ejercitable únicamente en los comicios por tribus. En el derecho privado le estaba reconocido el ius conubium, y el ius commercium. Libertos latinos: prohibición de ejercer derechos políticos pero gozaban del ius connubium, y del ius commercium, aunque en forma restringida. Le estaba prohibido otorgar testamentos, adquirir los bienes que se le dejare en calidad de herederos o legatarios, salvo que se hicieran ciudadanos en el plazo de cien días. Se les facilitó la obtención de la ciudadanía ya por concesión del Emperador, por manumisión solemne o por haber realizado algún trabajo particularmente especializado, como construir naves, edificios. Libertos dediticios: su libertad era extremadamente limitada. Pesaba sobre ellos la amenaza de ser reducidos nuevamente a la condición de esclavos si penetraban en Roma o en cien millas en su rededor. No gozaban de derechos políticos ni privados, de modo que su situación era por demás penosa, sin ninguno de los derechos acordados a los libertos de las otras categorías. El Iura patronatus o patronato compendiaba las obligaciones del liberto con el manumisor en estas tres relaciones: 1- el obsequium: el liberto debía cumplir ciertos deberes en beneficio del patrón, respeto y consideración y algunas limitaciones especialmente referidas a su aptitud legal para promover demandas contra aquel sin expresa autorización previa del magistrado, debía prestarle alimentos en todos los casos que el patrón se viera necesitado de ellos; 2- Las operae: promesas que hacia el liberto de prestar algunos servicios al antiguo señor en virtud de una obligación de carácter moral, no susceptible de cumplimiento forzoso, aunque mediaban pactos y estipulaciones; 3- El Ius tutelae et succesionis. Acordaba al patrón el derecho de suceder al liberto que se moría ab intestado y a ejercer la tutela. Por el lado del patrón existían igualmente algunas obligaciones como la de suministrar alimentos al liberto en casos de necesidad así como prestarle asistencia en juicio. Introdujo reformas que simplificaron considerablemente las formalidades de la manumisión. Despareció la manumissio censu, porque el censo había dejado de existir. La manumissio vindicta se simplificó, bastando una simple declaración ante el magistrado. La manumissio testamento se extendió extraordinariamente declarándose válidas las manumisiones acordadas, incluso en testamento nulo. Se crearon otras formas no solemnes. Ej. Cuando el dueño manifestaba su voluntad de consentir el casamiento de su esclava con un nombre libre, aquella quedaba libre, lo mismo cuando no oponía objeciones a la unión. Otra reforma: la abolición de las disposiciones mediante las cuales se habían establecido diferencias entre libertos ciudadanos, latinos juianos y dediticios, quedando todos ellos asimilados. Se abolió la distinción entre genuinos y libertos. La extinción del derecho de patronato siguió subordinada a la buena voluntad de los patrones. Eran libres jurídicamente, pero de hecho estaban sujetos al dominio de otra persona, como consecuencia de un error, por cuya causa eran poseídos como esclavos. El hombre libre contratado por los responsables de los juegos para participar en los combates de gladiadores constituye un ejemplo. Esta situación subsistió hasta que fueron prohibidos los juegos por Constantino. En la misma situación se encontraban los deudores insolventes entregados a sus acreedores por disposición del magistrado, situación que subsistió hasta que el principio de la responsabilidad patrimonial fue sustituido por el personal, por la lex pateliae papiria. El filiusfamilia dado en macipium(modo solemne de traspasar el dominio). Institución que apareció en Roma, al final de la República. El colono era un hombre libre, jurídicamente , capaz de contraer matrimonio, de obligarse, de adquirir bienes, pero estaba inhabilitado para realizar ciertos actos de disposición sin consentimiento del dueño de la tierra que cultivaba. No podía ejercer las magistraturas. Estaba adscripto a la tierra: era un accesorio de ella Podía ser objeto de reivindicación si huía, como un esclavo. Si el fundo se vendía, también se vendía el colono, porque en caso de separación el acto se consideraba nulo. La situación del colono era intermedia entre el hombre libre y el esclavo. En principio el colonato era de carácter perpetuo, no obstante podía extinguirse por confusión (cuando el colono adquiría la tierra que cultivaba)