TEORIA DE SISTEMAS:

El enfoque sistémico de la administración o teoría general de sistemas es un

paradigma que ha transformado la forma en que se concibe la administración de

empresas. Algunas características de este enfoque son:

Se fundamenta en la teoría general de sistemas, que afirma que las propiedades de los

sistemas no pueden describirse significativamente en los términos de sus elementos

separados, sino que deben estudiarse globalmente, involucrando todas las

interdependencias de sus partes.

Define la organización como un subsistema del ambiente general, orientada hacia

objetivos y que se constituye por la interacción entre los subsistemas técnicos,

estructurales, humanos, coordinados por un subsistema administrativo.

Visualiza a la organización como un sistema abierto, en constante intercambio con su

entorno.

Considere que el éxito organizacional depende de la interacción e interdependencia

entre los subsistemas, la sinergia entre los subsistemas y la interacción entre los

componentes internos de la organización empresarial (sistema cerrado) y los

componentes externos (sistema interno).

Propone un enfoque integrador y multidisciplinario, que busca la comprensión de la

organización como un todo y no como la suma de sus partes.

Este enfoque ha sido aplicado en diversas áreas de la administración, como la

administración educativa, la administración de empresas y la historia de la

administración. En general, el enfoque sistémico de la administración ha permitido una

visión más amplia e integrada de las organizaciones, lo que ha llevado a una mayor

eficiencia y eficacia en la gestión empresarial.

¿Qué es un sistema abierto y cómo se relaciona con la teoría de sistemas?

Un sistema abierto es aquel que tiene interacciones externas y propicia el intercambio

continuo de materia, energía y/o información con el exterior. Algunas características

de los sistemas abiertos son:

Importación de energía: los sistemas abiertos importan alguna forma de energía del

ambiente externo.

Transformación: los sistemas abiertos transforman la energía importada en una forma

que puede ser utilizada por el sistema.

Exportación: los sistemas abiertos exportan algún tipo de residuo al ambiente externo.

Adaptación: los sistemas abiertos se adaptan a los cambios en el ambiente externo

para mantener su equilibrio interno.

Interdependencia: los sistemas abiertos están interconectados con su ambiente

externo y dependen de él para su supervivencia.

La teoría de sistemas abiertos se relaciona con la teoría de sistemas en general, ya que

ambos enfoques consideran que los sistemas son conjuntos de elementos

interdependientes que interactúan con su ambiente. La teoría de sistemas abiertos, en

particular, se enfoca en los sistemas que tienen interacciones externas y que están en

constante intercambio con su ambiente. Esta teoría ha sido aplicada en diversos

campos, como la física, la biología, la informática y la administración, y ha permitido

una mejor comprensión de los sistemas complejos y adaptativos.

_ ¿Cómo se puede aplicar la teoría de sistemas abiertos para mejorar la eficiencia de

una organización

La teoría de sistemas abiertos puede ser aplicada en la gestión de organizaciones para

mejorar su eficiencia de diversas maneras, tales como:

Mantener una comunicación constante con el entorno externo para adaptarse a los

cambios y mantener su competitividad. Importar recursos financieros, humanos,

tecnológicos, entre otros, para mantener su funcionamiento. Exportar residuos de

manera responsable y minimizar su impacto ambiental. Establecer relaciones

adecuadas con su entorno y mantener una comunicación constante con él.

Fomentar la interdependencia entre los subsistemas de la organización para lograr una

mayor sinergia y eficiencia. Establecer una estructura organizacional adecuada que

permita la coordinación de las diversas funciones de la organización. Establecer claros

objetivos y medidas para lograr una mayor eficiencia en la gestión de los recursos.

Fomentar la innovación y la creatividad para adaptar a los cambios en el entorno

externo y mejorar la eficiencia de la organización.

En general, la teoría de sistemas abiertos implica que las organizaciones deben estar

en constante interacción con su ambiente externo y adaptarse a él para mantener su

equilibrio interno y su supervivencia. Esto implica una gestión adecuada de los

recursos, una comunicación efectiva con el entorno y una responsabilidad social y

ambiental en la gestión de los residuos. Además, implica una estructura organizacional

adecuada que permita la coordinación de las diversas funciones de la organización y el

establecimiento de objetivos claros y medibles para lograr una mayor eficiencia en la

gestión de los recursos.