Hola, mi nombre es Estella, y
esta es mi experiencia hasta
mis 22 años con esta
enfermedad situación
denominada esquizofrenia…
Yo vivo en la ciudad de
Londres en el reino unido, es
una ciudad muy bonita y
tranquila…
Pero siguiendo con mi vida la
verdad ha sido bastante dura
desde que perdí a mi madre a
los 7 años, ustedes pueden
llegar a pensar que una niña a
esa edad no puede afrontar
esos problemas, pero la verdad,
yo no le tomaba importancia y
no sabía lo que me estaba
pasando hasta que entré a la
secundaria…
Recuerdo que en la etapa de
primaria todo fue fácil debido
a que ninguno de mis
compañeros sabía lo que
pasaba conmigo, yo era una
niña normal, pero callada,
socializaba poco, no era por la
muerte de mi madre, solo no
me gustaba hablar demasiado,
en casa me enseñaron que los
niños son más útiles si no
dicen nada…
A mi padre le encantaba que
me vistiera de una forma
femenina, porque claro eso era
lo que hubiese querido mi
madre, pero a mí no me
gustaba la forma de pensar de
mis padres, digo mis padres
porque “papa” siempre hablaba
como si mi madre siguiese
viva.
Al ser poco sociable pasando
los 10 años muchos
compañeros se burlaban de mi
por ser la “rara” del colegio,
pero mi amigo Kyle era el
único que me aceptaba tal
como era, lo cual me traía más
problemas con los profesores,
pero no sabía el por qué…
Al pasar la etapa de la
adolescencia todo iba bien
hasta que hablamos sobre el
tema de enfermedades
mentales en una clase.
No tenía idea de lo que me
pasaba, para mí todo era
normal, solo lo evadía.
En casa no todo iba tan bien,
mi padre se volvió más estricto
conmigo y decía que mamá no
estaría contenta con mi
comportamiento…
Día tras día el pensamiento y
las cosas que llegaba a decir mi
padre, se me hacían más raras
llegue a pensar que él estaba
loco, ahora que está muerto lo
entendí todo… para mi padre
mamá aún seguía viva y me
hizo creer eso, aunque ella no
estaba conmigo desde aquel
día.
No recuerdo con exactitud
como mi madre murió, pero
recuerdo que era un día
nublado y estaba a punto de
llover, mi madre era muy dulce
con todos y me trataba con
mucho cariño.
Ese día salimos a cenar por el
día de la madre, cuando papá
llego del trabajo…
Resulta que al restaurante que
fuimos no era el mejor…
Al momento de traernos el
postre, cuando mi madre lo
comió dijo que sentía algo
extraño que le raspaba la
garganta, nosotros no sabíamos
que era… antes de seguir con
su muerte cabe aclarar que ella
era una persona asmática lo
que significa que tenía
problemas respiratorios por lo
que debía cargar siempre con
su inhalador pero ese día no lo
traía…
Bueno el problema de la
virutilla empeoraba con el
tiempo, mi madre pensó que
comiendo más pasaría, pero en
vez de mejorar empeoraba…
Fue entonces que mi madre
empezó a atragantarse y yo
veía a todos preocupados, mi
padre llamando médicos, las
personas que estaban en el
restaurante aturdiéndonos con
las miradas y yo…
Yo no sabía qué hacer ni lo
que estaba sucediendo, total
era una pequeña niña que solo
tenía 7 años… si hubiese
intentado hacer algo habría
perjudicado más…
Yo también me sentí mal por la
pérdida de mi madre cada vez
que íbamos al cementerio le
prendíamos unas velitas en su
honor…
Pero pueden llegar a pensar
que desde es día todo era más
sencillo con mi padre
repitiéndome a cada rato que
“a mi madre no le gustaría mi
comportamiento, no le gustaría
mi apariencia, no le gustaría lo
que soy hoy en día” …
Pero la verdad me sentía peor,
más despreciada… no solo por
mi padre, sino que también por
mi madre que para todos ya
estaba muerta menos para el…
Como mi padre no logro
salvarla, se sentía culpable y
creo que esa era la razón
principal por la cual el actuaba
como si ella aun estuviera con
nosotros…
Regresando a mi adolescencia
yo era una chica muy tranquila
no tenía muchos amigos
excepto Kyle que iba en la
misma secundaria que yo,
todos me miraban de la misma
manera que en primaria, con
desprecio y angustia, pero aun
no sabía el por qué…
Cuando llegaba del colegio a
casa solo me enceraba en mi
habitación, lo cual enfurecía
más a mi padre, él decía que
era una hija muy rebelde que
no hacía nada solo me
encerraba para no estar con
el…
En el colegio mientras me
encontraba hablando con Kyle
en el pasillo una profesora me
llamo la atención por lo que
estaba haciendo.
Me tomo del brazo fuertemente
y me llevo de prisa sin que me
pudiera despedir de Kyle, se
dirigió a una oficina oscura y
escalofriante conmigo en la
cual me pregunto ¿porque
actuaba de esa manera? y ¿qué
era lo que me pasaba?, yo no la
entendía hasta que me dijo por hablando a la nada imaginando
qué… a alguien…

Ese mismo día llamaron a mi Después de eso hablaron con

padre al colegio, lo cual mi padre no escuche mucho
empeoraría nuestra relación solo que me llevarían a un cita
entre padre e hija… con el psicólogo del colegio al
día siguiente, pues en ese
momento él no estaba.
Los profesores le dijeron a mi
padre que yo me la pasaba
hablando sola ese comentario
lo dejo alarmado pues era
bastante extraño ese tipo de
comportamiento en mí, aunque
no parecía importarle mucho,
yo les explique que no estaba
hablando sola y mucho menos
estaba loca que era lo que
parecían pensar, les conté
sobre mi amigo Kyle lo cual Al siguiente día fui al colegio
los dejo atemorizados y yo no como cualquier otro día, solo
entendía por qué… que había algo raro, mi padre
ya me estaba esperando en la
entrada…
Hasta que me dijeron que
nunca existió algún alumno
llamado Kyle solo era yo

Me dijo que me llevaría a un
internado para que no tuviese
nunca más esos
pensamientos…
Entonces fue que me llevaron a
ese internado, yo me negaba,
pero Kyle me dijo que estaría
conmigo siempre, yo no sabía
en realidad si Kyle era mi
imaginación o en realidad
existía…
Después de un año en el
internado me acostumbré, fue
fácil en realidad debido a que
nunca tuve amigos en ninguna
escuela…
Al salir del internado después
de 3 años me sentía bien con
Kyle a mi lado, pensé que
después de un largo tiempo el
desaparecería, pero no lo hizo
así que siguió en mi trayecto
de vida…
Al pasar los 19 empezó a
marearme cada día mas, al
punto que no era normal, se lo
dije a mi psicóloga, porque
si…
Tenía una psicóloga desde mis
14 años, ella me dijo que
prometía no decirle a nadie,
pero sin embargo fue donde mi
padre y le conto…
Por lo cual mi padre decidió
mandarme a un manicomio,
pero yo me preguntaba ¿Por cuenta de nuevo que estaba en
qué? Si me sentía bien, mi el manicomio cuando me dio
psicóloga decía que solo me ansiedad y empecé a temblar…
sentía bien porque viví casi
toda mi vida con esta situación,
pero que en realidad no estaba
bien, ella decía que yo a veces
hacia cosas que no debía, como
lastimarme, un día le pregunte
¿lastimarle cómo? Y me agarro
torpemente el brazo y me
mostro las heridas…

A las 2 horas me desperté…

me sentí atrapada, amarrada,
resulta que me pusieron en una
camilla porque me desespere y
grite, fui a la cocina agarre un
cuchillo y empecé a amenazar
al personal…

Yo le dije a mi psiquiatra que

Yo le pregunté exaltada quien
no recordaba haber hecho eso,
me había hecho eso, empezó a
tampoco pedí perdón, ¿por qué
llorar y gritar, hasta que me di
lo haría?, ellos me están
prohibiendo de mi libertad, es
un secuestro, pero
lamentablemente es un
secuestro justificado por mi
padre, no por mi…
Ese día me sentí frustrada,
tenía unas manillas en las
muñecas y en los tobillos
amarrados a la camilla para
que no pudiese moverme, ¿Por
qué?, yo no necesitaba ser
controlada por nadie, era
consciente de lo que hacía,
aunque por los miles de
psicólogos que pase dijeran
que no, yo era consiente, o eso
era lo que creía…
cuando mi padre se dignaba a
venir a visitarme solo me decía
que era una hija rebelde, que
yo ya hubiese muerto si no
fuera porque el “trabajo toda
su maldita vida para pagar este
manicomio, en lugar de tener
unas lindas vacaciones con
mamá” cada vez que el venia
me repetía eso, lo cual hacia
que me sienta cada vez
frustrada, la última vez que
vino le dije que mi madre no
existía y que yo jamás le pedí
que pagara un manicomio, no
le dije que gastara sus ahorros
en mí, nunca le pedí que
ayudara con mi tratamiento, yo
podía ser una persona normal
si cuando era una niña él no
me hubiera repetido ¡todos los
malditos días que mi madre no
estaría orgullosa de mi!…
 decía que era una excusa más
Ya estaba arta y mi padre para salir del manicomio y
jamás entendió eso, claro que dejarme sola, en un mar de
le grite pero no entienden las llantos y gritos… como ya era
razones, era lo más de costumbre…
comprensiva con mi padre de
lo que una niña normal de 7
años hubiera podido ser, yo
intentaba no causar problemas
en mi casa, por eso me
encerraba en mi habitación, no
era rebelde solo no me
gustaban los gritos y peleas…

Mi padre ese día se puso mal,

empezó a decir que no se
sentía bien, yo sin embargo
seguí gritando, necesitaba
desahogar todo lo que no había
desahogado durante 15 años de
mi vida y los doctores no
entendían mi pasado, ¡mi
pasado era demasiado duro
como para que lo entendieran!
En ese momento se llevaron a
mi padre porque le dolía
fuertemente el pecho, yo solo
A los 3 días en la fecha de
18/06/2023 me anunciaron que
mi padre había fallecido por un
paro cardiaco por mi culpa, ahí
sentí calma, jamás había
sentido tanta paz en mi vida,
me sentía muy bien, los
médicos solo me decían que
como me podía sentir bien con
la muerte de mi padre, pero es
que ellos no sabían la tortura
que fue vivir esos 12 años
cerca de él…
A los 2 días me mostraron un
papel que decía (última cuota
anual de 10.000 dólares del
“hospital real de Belem” en la
fecha 20/06/2022 hasta la
fecha 21/06/2023), la verdad
era lo que menos me
importaba.

Ese mismo día fui a mi casa y

dormí en la cama de mamá, me
ahogué en lágrimas, alcohol y
gritos, los vecinos llamaron a
la policía, me dijeron que debía
desalojar esta vivienda para el
día de mañana y que se
quedarían con todo…
Al día siguiente fui al
restaurante donde sucedió el
accidente de mi madre, no me
importo nada, ni la gente ni los
meseros, lo único que me dolía
dejar era a Kyle…

Aunque ya no lo mencione el
seguía aquí, pero lo que me
confortaba era saber que si yo
me iba él se iría conmigo, así
que sin más pensamientos de
angustia entre al restaurante,
me senté en una mesa y pedí
un vaso de agua, bebí el agua
sabiendo que sería mi última
bebida y cuando eran las 11:45
am rompí el vaso y sin
pensarlo 2 veces lo puse en mi
cuello, al ver a una niña
gritando se me partió el alma,
recordé el día que mama
murió, no quería lastimar a esa
inocente niña…

Pero ya era demasiado

sufrimiento para mi seguir
viviendo, después de ver a la
niña fui apretando cada vez
más el vaso roto contra mi
cuello, hasta que ya no sentí
nada, no me dolía nada…

Fue un alivio, nadie puede

sentirse más feliz en la hora de
su muerte de lo que yo me
sentí…