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Lo que cada miembro de la clase aporte para identificar los problemas centrales en
un caso, analizarlos y proponer soluciones, es tan importante como el contenido
mismo del caso.
Los casos enseñ an pensamiento crítico y las habilidades para resolver problemas.
Cabe destacar que el MdC es prá cticamente obligatorio para el estudiante que está
interesado en el proceso en lugar del producto, debido principalmente a que
muchos de los problemas que se presentan en la vida cotidiana se presentan en
forma de casos.
2. Planificación de actividades:
Después de que cada uno de los miembros del equipo ha leído, estudiado y
analizado los problemas en el caso, se pueden utilizar las siguientes preguntas
bá sicas: ¿cuá l o cuá les son los problemas bá sicos planteados en el caso? y ¿de qué
informació n se dispone para analizarlo? Con estas preguntas guía pueden discutir
el caso dentro del equipo.
Una vez finalizada la discusió n, los miembros del equipo logran llegar a un
consenso respecto a la mejor solució n del problema, por lo que deben entregar su
aná lisis y opinió n sobre los problemas planteados.
Dichos aná lisis son presentados y dado que los diferentes equipos tienen distintos
á ngulos de aná lisis y contenidos, pueden tener conclusiones diferentes.
Por lo tanto, los estudiantes descubren que no existe una ú nica respuesta correcta,
sino que dependiendo del punto de vista a través del cual se analice la
problemá tica, pueden lograrse diversas soluciones factibles.
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Ademá s, debe señ alar la parte del estudio que no se ha analizado completamente,
debe comentar todo el proceso y hacer que los estudiantes reflexionen sobre sus
propios métodos de aná lisis y elaboren sobre el foco del caso y los puntos difíciles.
Por ú ltimo, debe permitir a los estudiantes analizar los méritos y las deficiencias
de su aná lisis e inspirarlos a tener una reflexió n profunda. Ademá s, el resumen no
es ofrecer respuestas está ndar, sino dejar que los estudiantes sepan có mo pensar
desde diferentes á ngulos.
Cabe destacar que no existe una ú nica forma de aplicació n del MdC, la metodología
se adapta segú n dó nde se quiera aplicar y con qué fines.
Resultados:
El aprendizaje en clase supera sustancialmente el aprendizaje previo a la clase y
estimula aú n má s el aprendizaje después de clases.
Condiciones previas:
Hay respeto mutuo entre el profesor y los estudiantes, y entre los estudiantes.
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El caso, los materiales de apoyo, las preguntas de asignació n y el plan de enseñ anza
está n bien diseñ ados y son parte de un mó dulo efectivo y de la estructura del
curso.
Construye sobre los comentarios de los demá s, critica y debate diferentes puntos
de vista.
Mantiene una escucha activa y respetuosa de los argumentos de sus compañ eros.
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Primero, la retenció n del conocimiento parece ser mayor cuando los estudiantes
son participantes activos en el proceso de aprendizaje en lugar de receptores
pasivos.
Los autores sostienen ademá s que el objetivo del MdC es enseñ ar una gama de
habilidades (diagnó stico, aná lisis, evaluació n, resolució n de problemas, toma de
decisiones, entre otros) que los estudiantes puedan aprender para comprender e
interpretar los acontecimientos del siglo XXI.
Uno de los aspectos sobresalientes de la utilizació n del MdC es que se alienta tanto
al profesor como a los estudiantes a adquirir el arte de escuchar.
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Se basa en la idea de que no hay respuestas correctas, solo que algunas son
mejores que otras.
Los casos tradicionales han sido criticados por ser documentos independientes
que describen a un protagonista que enfrenta una decisió n con un conjunto de
datos empaquetados en los que basar la decisió n.
La investigació n fuera del caso puede ser desalentada; puede que no haya tiempo
para ello en un programa de asignatura repleto de casos diseñ ados para alentar a
los estudiantes a adquirir há bitos de toma de decisiones (Harvard Business School,
2008).