Está en la página 1de 8

La producción de caña de azúcar en Venezuela crecerá un 18 % este año respecto a 2021, según

las previsiones del gremio, dijo este lunes a Efe la Federación de Asociaciones de Cañicultores
(Fesoca).

Los productores azucareros esperan que la producción alcance las 2,80 millones de


toneladas frente a las 2,37 millones del año pasado.

Es el segundo año consecutivo de crecimiento de la producción luego de que en 2020 se


produjeran 2,13 millones, cifra alcanzada tras una caída progresiva desde el 2006, cuando se
produjeron 9,02 millones de toneladas.

El presidente de Fesoca, José Ricardo Álvarez, explicó a Efe que el mayor acceso a insumos y
químicos esenciales para la producción permitió que el sector creciera en productividad, pero no
en superficie sembrada, que se mantiene estancada en 55.000 hectáreas debido, principalmente,
a la falta de financiación.

La zafra inició a principios de año en los estados occidentales de Lara y Portuguesa, donde se
ubican las centrales azucareras más grandes del país, y en la región central de Aragua, y se espera
que culmine en agosto próximo.

Actualmente, solo están operando las cuatro centrales del sector privado, mientras que las 11
que están en manos del Estado venezolano no están trabajando, aseguró Álvarez.

El pasado 11 de mayo, el presidente Nicolás Maduro instó a los distintos sectores productivos a
destinar el 20 % de su producción a exportación, una meta que el sector agricultor no está en
capacidad de alcanzar, según dijo a Efe el presidente de la Confederación de Asociaciones de
Productores Agropecuarios (Fedeagro), Celso Fantinel.

“Que nosotros logremos producir, que la producción primaria esté en capacidad de exportar hoy
día un 20 % es quitarle alimentos a los venezolanos, porque el déficit, en algunos rubros, es hasta
del 60 %”, afirmó.

Caracas, 28 dic (EFE).- La producción de caña de azúcar en Venezuela cerró la temporada


de 2022 con un crecimiento del 19 % con respecto al año pasado, dijo este miércoles a EFE
la Federación de Asociaciones de Cañicultores (Fesoca).

Los productores lograron cosechar este año 2,81 millones de toneladas, cuando en 2021 el
cultivo llegó a las 2,36 millones, según las cifras facilitadas por el presidente de la
federación, José Ricardo Álvarez.

Es el segundo año consecutivo de crecimiento de la producción luego de que en 2020 se


produjeran 2,13 millones, tras una caída progresiva desde el 2006, cuando se cosecharon
9,02 millones de toneladas.
Álvarez explicó que el sector recuperó rentabilidad al vender la cosecha a los productores
industriales en dólares, una moneda que ha adoptado la mayoría del país ante la constante
devaluación de la moneda local -el bolívar- frente a la divisa estadounidense, que ha sido de
un 72 % en lo que va de año.

Además, el Estado venezolano, que mantenía el monopolio de importación y


comercialización de insumos, ha cedido permisos a actores privados para que importen
químicos y otros suministros esenciales para el cultivo.

La zafra 2022 inició a principios de año en los estados Lara y Portuguesa (oeste), donde se
ubican las centrales azucareras más grandes del país, y en la región central de Aragua.

Actualmente, solo están operando las cuatro centrales que están en manos del sector
privado, mientras que las 11 controladas por el Estado no están trabajando, de acuerdo con
Fesoca. EFE

https://www.swissinfo.ch/spa/venezuela-producci%C3%B3n_producci%C3%B3n-de-ca
%C3%B1a-de-az%C3%BAcar-en-venezuela-creci%C3%B3-un-19---en-la-temporada-
2022/48166802

La zafra que inició en diciembre 2021 y que culminará en junio aportará al


país tres millones de toneladas de caña de azúcar, lo que representa que se
cubrirá la demanda de la población en un 50%. Así lo informó José Ricardo
Álvarez, presidente de la Federación de Asociaciones de Cañicultores de
Venezuela (Fesoca), quien alertó que esta producción está en manos de
cuatro centrales azucareros privados porque los que intervino o expropió el
Gobierno, no están en capacidad ni de moler ni de refinar.

“Existen cuatro centrales azucareros en el país operativos. Los dos más


grandes son el Central Azucarero Portuguesa y el Central Azucarero
Molipasa, ambos del estado Portuguesa y operan al 80% de su capacidad
instalada. El Palmar, en el estado Aragua y La Pastora, en el municipio
Torres del estado Lara operan al 30% de su capacidad. En este momento
hay 11 centrales azucareros en manos del Gobierno. No sabemos en qué
situación están. Pero lo que sí vemos es que no están moliendo ni
refinando”, comunicó.
Afirmó que tras la aprobación de la Ley Antibloqueo en 2021 por la
Asamblea Nacional que domina el PSUV, tres centrales azucareros del país
que habían sido expropiados han pasado a manos de privados, pero aún no
han arrancado. “El oficialismo intentó hacer un experimento con el Central
Azucarero Santa Elena en Portuguesa, el central Cumanacoa en Sucre, pero
no fue una experiencia positiva, las personas que colocaron como directivos
no conocen del negocio y le quedaron mal a los productores de caña en la
zona. En cuanto al central Pío Tamayo en Morán (Lara), no está en
capacidad de moler ni de refinar”, destacó.

Miembros del sindicato del Central Pío Tamayo informaron a LA PRENSA


que las operaciones están paralizadas, a pesar que desde hace más de un
año esta empresa fue entregada en calidad de comodato al Consorcio
Veinca C.A. Los trabajadores que fueron absorbidos por la nómina privada
reclaman mejores salarios.

Fuerte contracción
La producción de caña de este año representa un 20% de incremento, en
comparación con el año pasado. “En 2021 apenas se molieron dos millones
366 mil toneladas de caña. La escasez de gasoil hizo que se quedaran en el
campo unas 300 mil toneladas”, expresó José Ricardo Álvarez.

De acuerdo con el presidente de Fedeagro, Celso Fantinel, el año pasado se


lograron sembrar unas 55 mil hectáreas de caña de azúcar, cuando en
2009 el registro era de 125 mil hectáreas de caña cultivadas.

“En el año 2014, año en que la economía de Venezuela comenzó a


contraerse se produjeron seis millones de toneladas de caña, hoy apenas el
50%”, enfatizó Álvarez.

Lara golpeada
Por su parte, Ricardo Álvarez, presidente de la Asociación de Cañicultores
del municipio Torres, en el estado Lara, informó que el Central Azucarero
La Pastora, aunque opera al 30% de su capacidad, este año con inversión
privada tuvo mejoras en su infraestructura.

“El problema que tenemos en Carora es la escasez de gasoil que se


mantiene, no llega con regularidad. Para que el Central Pastora esté
operativo al 100% de su capacidad, debería recibir diariamente 5 gandolas
de gasoil (190 mil litros de gasoil diarios). Pero está recibiendo 2 gandolas
diarias y a veces 1”, alegó.

Según el presidente de Fesoca, en estados como Portuguesa y Aragua han


llegado a convenios con el gobierno regional y funcionarios militares de las
Zonas Operativas de Defensa Integral para mejorar la distribución del
gasoil.

Piden aumentar precio del azúcar


Representantes de Fesoca están exigiendo al Gobierno que sincere precios
del kilo de azúcar a puerta de central.

“Ya hubo un incremento en el azúcar en anaqueles, los precios van desde


1.20 centavos de dólar el kilo de azúcar empaquetada hasta 1.40 centavos
de dólar. Pero a los productores en el campo nos pagan el kilo en 90
centavos de dólar y con esta misma tarifa tenemos un año, a pesar que los
gastos de producción han aumentado, se paga más caro el gasoil, sobre
todo cuando hay que recurrir a la compra en el mercado negro, y porque
los agroquímicos, como los fertilizantes han tenido un repunte en sus
precios aún estando fijados en dólares. Queremos que el Gobierno permita
que el precio del azúcar a puerta de corral sea a un dólar”, indicó Ricardo
Álvarez, presidente de la Asociación de Cañicultores de Carora.

Destaca que en ese municipio actualmente sobreviven 16 cañicultores,


cuando en 2014 habían 250.
Texto de La Prensa de Lara.

Forma parte de nuestro canal en Telegram y mantente informado


del acontecer político y económico de
Venezuela https://t.me/Descifrado

https://www.descifrado.com/2022/02/22/produccion-de-azucar-en-venezuela-solo-cubre-el-
50-de-la-demanda-nacional/

Consumo

En el año comercial 2021/22, FAS Caracas prevé un aumento del 73% en el consumo interno hasta
510.000 toneladas, en comparación con la estimación oficial del USDA de 295.000 toneladas el año
comercial 2020/21. Esta estimación se basa en una mayor producción nacional y en el aumento de
las importaciones de azúcar crudo. Históricamente, el consumo anual de Venezuela es de
aproximadamente 1,3 millones de toneladas, pero la reciente caída a 510.000 toneladas
representa un consumo per cápita de aproximadamente 18 kilogramos, debido al bajo poder
adquisitivo de los venezolanos. FAS Caracas también está aumentando las estimaciones del
consumo interno en el año comercial 2020/21 a 510,000 TM, un 73 por ciento más que la
estimación del USDA, basado en el aumento de la producción y un aumento significativo de las
importaciones de azúcar refinado, principalmente de Brasil y Colombia por tierra (ver sección de
Comercio). Al menos 70.000 toneladas de la oferta nacional total de azúcar refinada de Venezuela
(510.000 toneladas) se destinan al programa de subsidio alimentario del régimen de Maduro,
conocido comúnmente como Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP). Las cajas del
CLAP proveen asignaciones mensuales de productos alimenticios básicos y generalmente incluyen
un kilo de azúcar refinada, por caja, a cerca de 2,4 millones de familias. En su nivel máximo
histórico de consumo, en el año comercial 2014/2015, el mercado venezolano representó 1,3
millones de toneladas y se repartió a partes iguales entre el consumo industrial y el consumo
humano. Posteriormente, en el año comercial 2018/2019, el consumo industrial disminuyó un 70
por ciento, pasando de 500.000 TM a 150.000 TM. En el mismo año, el consumo humano
disminuyó un 31%, pasando de 510.000 a 350.000 toneladas. Actualmente, la distribución del
consumo es de un 70 por ciento de consumo humano y un 30 por ciento de consumo industrial.
La Federación Nacional de Asociaciones de Cañicultores de Venezuela (Fesoca) estima que el último ciclo de
siembra y cosecha del rubro cerró con una molienda de 2,8 millones de toneladas de caña y 229.599 toneladas
de azúcar producida.

Caracas. La zafra 2021-2022 de caña de azúcar culminó como la segunda


consecutiva con aumento en la producción, pero la contracción del consumo y
otros problemas como la falta de crédito y los aranceles se mantienen y
profundizan.

La Federación Nacional de Asociaciones de Cañicultores de Venezuela (Fesoca)


estima que el último ciclo de siembra y cosecha del rubro cerró con una molienda
de 2,8 millones de toneladas de caña y 229.599 toneladas de azúcar producida.

Las cifras evidencian una recuperación importante en el sector si se toma en


cuenta que, en la zafra 2019-2020, la producción cayó a 1,9 toneladas, su nivel
más bajo en tiempos contemporáneos. Sin embargo, aún se mantiene lejos de
las seis millones de toneladas de caña producidas hace 10 años.
Este martes 24 de agosto el presidente del Banco Central de Venezuela (BCV),
Calixto Ortega, informó que en el segundo trimestre de 2022 el PIB del sector
privado aumentó 18,7 % respecto al mismo período de 2021, aunque las cifras
siguen sin divulgarse en la página del ente emisor.

Los datos del BCV coinciden parcialmente con la recuperación de la cañicultura.


Fesoca estima que entre los cuatro centrales azucareros privados (y solo una del
Estado) la producción aumentó entre 17 % y 19 %.

Pero los productores de caña de azúcar coinciden en que, en términos generales, la contracción del consumo
aún limita su despegue. Pese a ello, el presidente de Fesoca, José Ricardo Álvarez, asegura que de mantenerse
el ritmo actual el sector primario podría abastecer a la totalidad del consumo nacional.

En 2021, la Confederación de Productores Agropecuarios (Fedeagro) ubicaba en


770.000 toneladas el consumo total de azúcar en el país, cuando décadas atrás
llegó a superar el millón de toneladas.

Durante la asamblea de Fedeagro, que se llevó a cabo en Mérida en julio pasado, el


presidente de Fesoca había señalado que  la producción de caña de azúcar debía
enfrentarse a una fuerte competencia  con Brasil y Colombia.
“A veces no solo competimos con los agricultores de otros países, sino con los
sistemas y músculos financieros de esos países que les permiten estar más
avanzados en temas como la investigación. Una de las grandes tragedias en
Venezuela es la falta de políticas agrícolas consistentes, y la primera de ellas
es la falta de investigación para poder competir”, explicó Álvarez.

El gremio de cañicultores proyecta que este año los centrales privados muelan 2.950.000 toneladas de caña,
equivalentes a 248.895 toneladas de azúcar. Fesoca asegura que políticas como la relajación de controles e
imposición de impuestos y aranceles a productos importados han dado un respiro a la producción y calculan
que este año podría aumentar 30 % más.

Caracas. “Con optimismo y buenas expectativas” toman los cañicultores el inicio


de la zafra 2021-2022 luego de que en el período anterior, que culminó en agosto
del año pasado, la producción privada de azúcar de caña en los centrales superó
las 193.000 toneladas con más de 2,32 millones de toneladas de cañas molidas, el
primer incremento anual en los últimos tres años.

Las cifras estimadas por la Federación Nacional de Asociaciones de Cañicultores


de Venezuela (Fesoca) revelan que, respecto a la zafra 2019-2020 que estuvo
marcada parcialmente por la pandemia, el aumento de la producción fue de 19 % y
para este año, de mantenerse y/o mejorarse las condiciones que impulsaron el
incremento, esperan cerrar con un 30 % adicional (248.895 toneladas).

José Ricardo Álvarez, presidente de Fesoca, destacó el efecto que tuvieron las reuniones con entes
gubernamentales para acceder a combustible y operar tanto en campo como en fábrica, así como las políticas
arancelarias, como IVA e impuestos aduanales, que fueron aplicadas a los azúcares importados.

Desde 2018 el gobierno de Nicolás Maduro permite la libre importación y los


productores denuncian que la medida genera “competencia desleal” pues
generalmente llegan con precios inferiores a los que se fabrican en el país.

La decisión consensuada de “proteger” la producción nacional de azúcar, aseguran


los cañicultores, ha llevado a que la actividad ahora abarque entre 30 % y 40 % del
consumo en el país. El productor Juan Gabriel Guédez, presidente de la Sociedad
de Cañicultores del estado Portuguesa (SOCA-Portuguesa) resalta que, de
mantenerse los aumentos anuales de 20 % en la producción, en dos años se
podría abastecer al total del mercado.

De acuerdo con las últimas cifras del Instituto Nacional de Nutrición (INN),
hasta 2014 el consumo solamente de azúcar refinadp era de 21,6 kg per cápita
al año, equivalente a un aproximado de 691.200 toneladas. En 2021 la
Confederación de Productores Agropecuarios (Fedeagro) estimaba en 770.000
toneladas el consumo total de azúcar en el país y ya alertaban sobre una
disminución significativa respecto a décadas atrás cuando llegó a superar el
millón de toneladas.
La crisis económica y social que atraviesa Venezuela desde hace, al menos, ocho
años hundió el consumo y el gasto en alimentos de los hogares en mínimos
históricos. Desde 2013 la economía nacional se contrajo más de 70 % y apenas el
año pasado empezó a mostrar signos de incipiente recuperación en ciertos
sectores, entre ellos la producción agrícola.

Hasta 2019 el Ministerio de Agricultura y Tierras estimaba en 4.380.304 toneladas


la producción nacional de caña de azúcar, una caída de 50 % respecto a lo que se
produjo diez años atrás. Los cañicultores aseguran que las políticas de
liberalización de precios y relajamiento de controles han representado un alivio
para el sector desde hace tres años, puesto que se ha normalizado, por ejemplo, el
acceso a insumos y la fijación de costos de producción.

Fesoca calcula entre $2300 y $3800 el costo de producción por hectárea de


caña de azúcar tomando en cuenta gastos como siembra, resiembra, riego,
transporte, entre otros costos directos e indirectos. El costo promedio por
tonelada de caña lo ubican en $37 y el de tonelada de azúcar en $452,37.
Ante ello, el gremio pide que las autoridades autoricen el precio a puerta de fábrica
de $1,08 por kg (actualmente se ubica entre $0,80 y $0,90 por kg), lo que según
sus estimaciones pondría el precio al consumidor en $1,18 por kg. En el mercado
municipal de Quinta Crespo, por ejemplo, el kilo de azúcar refinado se vende entre
$1,20 y $1,50 al menos desde finales de 2020, mientras que en cadenas de
supermercado el precio promedio es de $1.

También podría gustarte