El frijol es un grano importante en la canasta básica de muchas familias salvadoreñas, pero en el

transcurso del tiempo ha sufrido un aumento en los precios de forma histórica provocando una
inflación del 7.03% en el mes de enero del presente año lo cual se ve reflejado en el frijol de seda
que se cosecha a nivel local. Según datos del MAG (Ministerio de Agricultura y Ganadería) la libra
de frijoles logro alcanzar los $1.30 por libra, algo que representa un aumento de más del 46% con
respecto al año 2022.

Sin embargo, en 2022 se vivió una depresión tropical llamada Julia que según La Cámara
Salvadoreña de Medianos y Pequeños Productores Agropecuarios (CAMPO) estima que las
pérdidas que ocasiono la tormenta Julia en el área del cultivo de frijol, ascienden a 158,655
quintales y 1,391 manzanas donde se realizaba el cultivo de café, es por eso que este suceso afecto
a consumidores y a propietarios de pequeños negocios tales como las pupuserías en donde se
reporta una alza de hasta $40 en el quintal de frijol corriente, en comparación con el año pasado y
según un informe realizado por el MAG, el quintal de frijol corriente nacional, que se usa
mayormente para las pupusas ha subido $43 (77 %), al pasar de $55.80 a $98.80. El quintal de frijol
corriente importado está $46.30 (87 %) más caro, con un precio de $99.30 por quintal. 

Es por eso que en marzo del 2022 el Gobierno salvadoreño implementó 14 medidas contra la
inflación, entre estas el monitoreo constante en los diferentes mercados y plazas para evitar la
subida desmedida de precios, sin embargo, no tuvo mucho impacto, lo cual se vio reflejado en las
cifras obtenidas.

Pero, ¿Qué factores influyeron para generar este aumento de precio?

Anteriormente representantes del sector agrícola identificaron que las alzas pertenecían a una
especulación en el mercado, pues factores como la crisis de suministros afectaron
significativamente al rubro.

Entidades como la Defensoría del Consumidor (DC) y el MAG han realizado estudios para verificar
los motivos detrás de estos aumentos y se les ha impuesto sanciones a los comercios que han
realizaron incrementos injustificados.

El precio de los frijoles como de otros alimentos como lo es el huevo ha sido algo que ha
preocupado a la población en las ultimas semanas, en un contexto de encarecimiento que se ve
reflejado en los precios de la canasta básica alimentaria. Según las cifras que maneja la Oficina
Nacional de Estadística y Censos (ONEC), la Canasta básica urbana ya superó los $245, mientras
que la Canasta básica Rural se colocó en $185.26, lo que las convierte en las más caras de los
últimos 21 años, es decir, desde 2001, año en el que inician los registros que maneja el gobierno.