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Procesal Penal?
Por
Autor Invitado
-
6 marzo, 2023
Por José Molina Cayo, estudiante de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Martín de
Porres. Integrante del Taller “Florencio Mixan Mass” de la Universidad Mayor de San Marcos.
Practicante del Área Penal del Estudio Payet, Rey, Cauvi, Pérez Abogados
I. Introducción
El presente artículo tomó más tiempo de lo esperado, pero lo suficientemente necesario para
reflexionar. Inició a partir de un trabajo respecto al control de plazo, pero no logró concretarse
rápidamente. En dicho artículo se identificó la conclusión de la investigación preparatoria en el
derecho comparado. Fue ahí donde se advirtió de la institución colombiana de la “formulación
de la imputación” (artículo 286° y siguientes del Código de Procedimientos Penales), que
consiste en la sustentación por parte del representante del Ministerio Público -en audiencia
judicial- de la imputación contra el investigado. De la misma manera, se encontró una institución
bastante parecida en el Código Nacional de Procedimientos Penales de México (artículos 310° y
311°).
Hasta ahí resulta una institución absolutamente válida, pero el fundamento final que hizo retomar
el artículo fue lo sostenido por el Fiscal Alcides Chinchay en una conferencia virtual del 21 de
julio de 2022 sobre el valor de la declaración del imputado[1]. En este conversatorio, el profesor
Chinchay criticó por qué el fiscal debe leer la acusación en etapas posteriores cuando los sujetos
procesales ya declararon, formularon excepciones y hasta observaron el requerimiento. En ese
sentido, indicó que resultaría inoficioso que el Fiscal pierda tiempo “oralizando” una imputación,
cuando esta ya es de conocimiento del imputado y de los demás sujetos procesales.
Así pues, de una revisión de nuestro Código Procesal Penal (CPP) podemos observar que el
artículo 336° establece que el Ministerio Público solamente comunica al Poder Judicial la
disposición de Formalización y Continuación de la Investigación Preparatoria. Es decir, este
artículo nos retrotrae al antiguo Código de Procedimientos Penales en donde primaba la
escrituralidad, a diferencia del artículo 286° del código adjetivo colombiano o los artículos 310°
y 311° del código adjetivo mexicano en donde se establece la necesidad de comunicar –en
audiencia- la imputación contra el investigado.
Sobre la base de dicha reflexión, en las siguientes líneas se abordará la viabilidad de incorporar
la institución de “formulación de la imputación” en nuestro CPP.
El inciso 3)[2] del artículo 336° establece el principal punto de análisis y crítica al cuerpo
normativo nacional. En mi opinión, este inciso nos remonta a una etapa gris y oscura de la historia
del proceso penal peruano, el cual constituyó el “sistema inquisitivo” reflejado directamente en
el proceso sumario, en donde no predominaba la oralización (audiencia de presentación de cargos
e informes orales).
Con esta audiencia no solamente se notifica o “comunica” la imputación fiscal, sino que el
procesado se entera de manera directa y cierta de los cargos que se le imputan.
III. Análisis de los artículos 286°, 288° y 289° del Código de Procedimientos Penales de
Colombia
La base normativa que impulsó la idea de la modificación del artículo 336° del CPP surgió a
partir de los artículos 286°, 288° y 289° del cuerpo normativo colombiano en donde se regula la
institución denominada “formulación de imputación”. El artículo 286° indica lo siguiente:
“La formulación de la imputación es el acto a través del cual la Fiscalía General de la Nación
comunica a una persona su calidad de imputado, en audiencia que se lleva a cabo ante el juez de
control de garantías”
Para entender esta institución es importante traer a colación la exposición de motivos del proyecto
de ley 906 de 2004:
“(…) se define como el “acto de comunicar, en audiencia ante el juez que ejerce la función de
control de garantías, a la persona, su calidad de imputado”. Con este acto procesal se pretende
única y exclusivamente informar a la persona que existe una investigación en su contra, por
hechos que eventualmente pueden comprender su responsabilidad penal, para que así el imputado
en asocio de su defensor técnica pueda comenzar a preparar de modo eficaz su actividad
defensiva respecto de la eventual acusación en ciernes”
Esta comunicación de la imputación debe contener la individualización concreta del imputado y
la relación clara y sucinta de los hechos jurídicamente relevantes en un lenguaje claro y
comprensible, toda vez que los imputados deben comprender con exactitud los hechos que se le
imputan, de no hacerlo el Juez deberá exigir al Ministerio Público que realice una imputación
clara.
“el investigado no tiene la posibilidad de controvertir los cargos, pues la finalidad de esa
actuación es que tenga conocimiento de los mismos y, así, pueda preparar la defensa”
El segundo criterio es más garantista y estimamos que es el correcto. Para esta posición, en la
audiencia de “formulación de la imputación” la defensa técnica del procesado podrá cuestionar
la sindicación fiscal y así efectuarse un debate sobre la imputación. Esta posición surge a partir
de la nula posibilidad de que el imputado pueda defenderse ni mucho menos pedir una aclaración
de la tesis fiscal.
IV. Análisis de los artículos 310 y 311 del Código Nacional de Procedimientos Penales de
México
Al igual que sucede en Colombia, el cuerpo normativo mexicano establece una audiencia de
“formulación de la imputación”. Esta se encuentra regulada en los artículos 310° y 311° del
Código Nacional de Procedimientos Penales de México.
“El agente del Ministerio Público podrá formular la imputación cuando considere oportuna la
intervención judicial con el propósito de resolver la situación jurídica del imputado.
A diferencia del código colombiano, la normativa mexicana establece que el juez de control (juez
de garantías) podrá solicitar al representante del Ministerio Público aclaraciones o precisiones a
la imputación formulada, lo cual brinda una mayor facultad al juez de controlar la imputación.
Sobre la base del principio de economía procesal ¿por qué se debería esperar una audiencia de
tutela de derechos para la precisión de la imputación si esta se puede realizar previamente en una
audiencia de formulación de la imputación? o ¿por qué se debería esperar una audiencia de tutela
de derechos para la precisión de la imputación si esta se efectúa sobre la base de la disposición
de formalización y continuación de la investigación preparatoria?
Resulta innecesario esperar meses para alcanzar una imputación precisa, cuando esta resulta
factible que se obtenga una vez formalizada la investigación preparatoria. Peor aún, resulta
innecesario que a estas alturas suframos de investigaciones formalizadas sin un grado correcto
de imputación, no obstante, esto es un cuestionamiento que no entraremos en el presente trabajo.
Sobre la base de todos los argumentos antes descritos, considero que sí resulta viable modificar
el artículo 336. En nuestra opinión, se podría establecer de la siguiente manera:
Referencias:
[2] “3. El Fiscal, sin perjuicio de su notificación al imputado, dirige la comunicación prevista en
el artículo 3° de este Código, adjuntando copia de la Disposición de formalización, al Juez de la
Investigación Preparatoria”
[3] Inciso 4) del artículo 71° del Código Procesal Penal: “4. Cuando el imputado considere que
durante las Diligencias Preliminares o en la Investigación Preparatoria no se ha dado
cumplimiento a estas disposiciones, o que sus derechos no son respetados, o que es objeto de
medidas limitativas de derechos indebidas o de requerimientos ilegales, puede acudir en vía de
tutela al Juez de la Investigación Preparatoria para que subsane la omisión o dicte las medidas de
corrección o de protección que correspondan. La solicitud del imputado se resolverá
inmediatamente, previa constatación de los hechos y realización de una audiencia con
intervención de las partes”