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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE NICARAGUA, LEÓN

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN Y


HUMANIDADES
DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN SOCIAL

2023: Juntas y Juntos Vamos Adelante

COMPONENTE CURRICULAR
Comunicación Ambiental
PLAN DE ESTUDIOS 2020

Dosier elaborado por: MSc. Isabel Mendoza Delgadillo

León, Nicaragua, febrero, 2023.

¡A la libertad por la universidad!


UNIDAD I: INTRODUCCIÓN A LA COMUNICACIÓN AMBIENTAL

1. Introducción
Este componente se ubica en el Tercer Semestre, forma parta del área de
FormaciónBásica de la carrera, es de carácter obligatorio, tiene asignado tres
créditos académicos,con 45 horas presenciales por semestre. Es de carácter
teórico -práctico. Se relacionacon Géneros Periodísticos, Periodismo en Radio,
Televisión, Marketing Digital,Divulgación, Publicidad y Propaganda, Prácticas
en Radio, Prácticas en Televisión yCátedra Abierta I, II, III y IV y Periodismo y
Taller de Prensa Escrita.
Sin embargo su énfasis radica en adoptar elementos que vallan en
consonancia con losObjetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en la cobertura
de eventos medio ambientalesde interés público o particular. Este componente
es la especialización de la profesiónperiodística en todo lo relativo al medio
ambiente, la ecología, la fauna, la flora, el marcojurídico y la naturaleza en
general.
El objetivo final es lograr el buen manejo de la teoría, el uso de adecuado de
lainformación recopilada y las orientaciones para las buenas prácticas
ambientales. Deigual manera valora la función de la nota informativa ambiental
como elemento de lacomunicación social al servicio de la comunidad.
Este componente es un espacio que permite a los estudiantes acercarse a la
realidadlocal, conocer los ecosistemas, los recursos renovables y no
renovables, para generaropiniones, críticas y propuesta de solución a
situaciones problemáticas, partiendo delanálisis de temas del contexto
nicaragüense y mundial, lo que motiva al desarrollo de laComunicación Social
dando respuesta a los desafíos de la Agenda 2030.

Competencias a desarrollar en el Componente

1. Maneja con propiedad aspectos teóricos y técnicos de temas


medioambientales, usa la fotografía, el audio o video, para usarlos como
herramienta de comunicación masiva en donde se presenta a los
estudiantes con bibliografía, a través de gráficas, infografías y objetos
propios en el medio, hace debate, análisis, comparación y la reflexión.
2. Domina aspectos del marco jurídico referente a medio ambiente para el
desempeño de los Medios de Comunicación Social a nivel nacional e
internacional y contextualizar en prodel desarrollo integral de la
sociedad, mediante análisis, preguntas de control, comparación y el
debate.

3. Ejercita la cobertura periodística de temas relacionados al medio


ambiente, las temáticas que publicitan los diarios nacionales y el uso de
las TICS para la protección, uso racional y conservación de los recursos
naturales, mediante aportes de teóricos que han desarrollado el
ejercicio, indagando bibliografía, haciendo análisis y reflexionando al
respecto.

4. Domina conceptos y parámetros de Responsabilidad Social Ambiental y


su presencia en los Medios de Comunicación Social para contribuir al
desarrollo sostenible, conociendo la vulnerabilidad de acciones ante
desastres naturales y la obligatoriedad del Estado nicaragüense y la
cooperación internacional, por medio de la realización de debates,
análisis, críticas, exposición individual o grupal.

El desarrollo de las competencias asignadas se logrará mediante las


estrategias de aprendizaje basadas en la exposición, la explicación, la
comparación, el ejercicio práctico y la ejemplificación.

El docente presenta el tema, haciendo uso de la planeación en Secuencias


Didáctica, para el cual usa material bibliográfico (Power Point, texto Wordo en
PDF, uso de diarios impresos y remisión a sitios web)realizando discusión
sobre temas concretos del contexto nacional, los cuales son presentados o
debatidos en los medios escritos o digitales. El estudiante hace reflexión sobre
el tema y genera discusión entre grupos de clases. Para fortalecer sus
conocimientos intelectuales. Conoce páginas web o textos especializados en
medio ambiente o desarrollo sostenible, comparando los Medios de
Comunicación y sus particularidades en coberturasde eventos
medioambientales.
Permitirá dotar a los participantes en técnicas de comunicación práctica y guías
para relacionarse con los medios de comunicación (prensa, internet, radio y
televisión) incidiendo en el cambio climático, como problema socioambiental de
la humanidad y la sostenibilidad. Así mismo usar las nuevas tecnologías de la
comunicación audiovisual y las tecnologías de la comunicación y la
información (TIC), como instrumentos de apoyo que le permitan tomar contacto
con la realidad de la información ambiental.

En el aula se hace la discusión, el debate, la ponencia basada en el tema


planeado de acuerdo al contexto nacional, debatido en los Medios de
Comunicación, donde el estudiante tiene la oportunidad de opinar, criticar,
sugerir y recomendar de manera personal.

Evaluación de los Aprendizajes.

-Evaluación Parcial: Tres exámenes parciales escritos con un valor del 60%
con una escala de calificación de 0 a100.

-Evaluación Sistemática: (Trabajos escritos, exposiciones, comprobaciones


de lecturas, asistencia y participación en la exposición el debate durante la
clase, con una escala de valor de 0 a 60 pts por cada examen parcial.

Nota Final: Se obtendrá del promedio de los tres parciales

Nota Mínima: Para aprobar es de 60 puntos,

El/a estudiante que no logre alcanzar la nota mínima de aprobación pasa a


realizar II Convocatoria, en la fecha habilitada para tales efectos

Uso de metodologías activas participativas en el aula, de campo, plenarias,


conferencia de prensa o cobertura, seminarios participativos y discusiones de
grupos.
UNIDAD I: INTRODUCCIÓN A LA COMUNICACIÓN AMBIENTAL

1) Introducción a la Comunicación Ambiental

La Comunicación Ambiental se vale de todos los recursos, teorías y técnicas


comunicacionales para difundir conocimientos, crear conciencia y cambiar las
prácticas que resultan perjudiciales para el medio ambiente. En este sentido,
resulta un estudio transdisciplinario tanto de la Comunicación Social, como de
la Ecología que nos permite comprender cómo funciona la biosfera y los
procesos bio-geo-químicos que mantienen la vida en el planeta.

Sirve subrayar que la Educación Ambiental y la Comunicación Ambiental


surgieron juntas, como procesos inseparables, y que desde la Conferencia de
Tibilisi de la UNESCO (1978) ya ha recorrido un importante camino de
experiencias y aportes teóricos. En este sentido, la Comunicación Ambiental
es un proceso de comunicación educativa, que no busca simplemente
transmitir información y mensajes, sino de educar y formar al ciudadano a
través de procesos comunicacionales sistemáticamente organizados que
influyan en el cambio de actitudes, valores, prácticas y comportamientos,
pues los actuales están llevando al deterioro irreversible de la biosfera.

Con frecuencia las alusiones a la comunicación ambiental reconocen las


amplias posibilidades que ésta ofrece, junto con la educación, para mejorar
en las personas y las sociedades la capacidad de entender la crisis ambiental
que se vive, y actuar en consecuencia. Sin embargo, esta valoración no se ha
traducido hasta ahora en discusiones y consensos por parte de los
especialistas de la comunicación y de la educación ambiental que tengan por
objeto consolidar el cuerpo teórico de esta disciplina emergente y necesaria
acorde a los retos ambientales que enfrenta la humanidad.

Esta situación mantiene en el rezago la creación de fundamentos teóricos


para este campo comunicacional, retrasando también el desarrollo de
objetivos y metodologías que permitan concretar y sistematizar su práctica en
nuestro país y, junto con ello, el surgimiento de paradigmas sociales
favorables a la sustentabilidad. Aunque en naciones como Alemania,
Canadá, Estados Unidos y Argentina existen importantes avances en este
sentido, el contexto específico de México, complejo por su gran diversidad
cultural y biológica, requiere de conceptos y esquemas propios, acordes con
las múltiples necesidades y contextos que confluyen en su territorio.

En el presente artículo se proponen algunos elementos para establecer


algunas definiciones conceptuales básicas de este campo, pertinentes a la
realidad nacional en general y, en lo particular, a la situación de los
ecosistemas forestales y las personas que viven en ellos.
Hacia un andamiaje conceptual Por ser la comunicación la principal
categoría para la construcción de un concepto de comunicación ambiental,
es necesario aproximarse a aquella a través de una visión de complejidad11
que atienda la multidimensionalidad del campo, y que permita distinguir los
principios ontológicos, gnoseológicos y axiológicos, e incluso filosóficos, que
éste contiene.

En dicho propósito se requirió desarrollar un ejercicio de razonamiento12


para visualizar en forma simultánea las diversas dimensiones que inciden
en la conceptualización de la comunicación, con el fin de poder aprehender
el concepto de la manera más completa posible.

El primer paso fue conocer el significado que otorgan a la comunicación


algunos autores hispanoamericanos contemporáneos, cuyas propuestas
son más aproximadas al encuentro social que a las teorías “tradicionales”
relativas a los medios y la comunicación masiva.

Encontramos que, para Martín-Barbero (2008), la comunicación representa


una dimensión constitutiva de la vida social; Portal (2008) la describe como
una entidad conformadora de procesos culturales tendientes a la formación
y consolidación de la subjetividad individual y colectiva; Galindo (1987) y
Martín Serrano (1986/2009) la explican como una entidad que resulta
central en la reproducción social y que es clave en las perspectivas de
cambio y de transformación social; para Massoni (2008), se trata de un
fenómeno cognitivo sociocultural, en tanto que León (2009) la concibe como
un “proceso, práctica, espacio y columna vertebral de los significados del
mundo y de las acciones e interacciones de los sujetos sociales” (p. 64). Por
su función en los procesos educativos, se integra en esta definición la
dimensión pedagógica de la comunicación en su relación con el
conocimiento, tal como lo plantean Freire ((1969/1994, 1970/1975,
1973/1981) y Kaplún (1997, 1998), entre otros.13.

Breve historia
La comunicación ambiental, rompiendo con la teoría retórica tradicional,
surgió en los Estados Unidos alrededor de la década de 1980. 4 Los
investigadores comenzaron a estudiar la comunicación ambiental como una
teoría independiente debido a la forma en que los activistas ambientales
usaban imágenes y palabras para persuadir a su público. Desde entonces,
la teoría de la comunicación ambiental ha alcanzado múltiples hitos, incluida
la creación de la revista Comunicación ambiental (en inglés, Environmental
Communication) en 2007.5

La información ambiental en los medios de comunicación

Los medios de comunicación pueden y deben desempeñar un papel


fundamental en la conciencia ambiental de la sociedad, y sin embargo no
conceden al medio ambiente la importancia que éste merece. Por su parte, los
periodistas ambientales están mejor preparados y tienen cierta conciencia de
grupo, pero aún deben enfrentarse a muchas dificultades.

Aunque temas como el terrorismo sean en estos momentos las noticias


estrella, el cambio climático será a largo plazo un hecho aún más noticioso por
los billones de personas a los que afectará. Los medios de comunicación
pueden y deben aprovechar su potencial para concienciar a la sociedad
incrementando la cantidad y calidad de información ambiental que ofrecen, ya
que la realidad ha demostrado que determinados problemas, sean ambientales
o de otra índole, adquieren relevancia en el momento en que aparecen en los
medios. ¿Pero están éstos concediéndoles la importancia y el lugar que
merecen? ¿Hasta qué punto puede hablarse de la existencia de un periodismo
ambiental?

Los medios no deberían ser meros informadores

Las cuestiones ambientales no escapan de la enorme influencia que tienen los


medios de comunicación como movilizadores sociales, especialmente la
prensa, que origina un volumen considerable de información sobre el medio
ambiente, y la televisión, cuyo impacto en la población es incluso mayor
(gráfico ( 3)).
Según un estudio realizado por Juan Díez Nicolás (2004), el 65 por ciento de
los españoles reconoce estar “poco” o “nada” informado acerca del medio
ambiente, frente a un 29 por ciento que dice estar “muy bien” o “bastante”
informado. El Quinto Programa de Acción Medioambiental de la Unión
Europea, aprobado en febrero de 1993, puso de manifiesto la necesidad de
facilitar al ciudadano más y mejores datos, información y educación públicas y
formación profesional en materia ambiental, pero no estableció el rol –y a día
de hoy sigue sin hacerlo– de los medios de comunicación ni hizo referencia
alguna a la importancia de integrar a los medios en las estrategias de
educación ambiental.

Hace ya cinco años, durante el III Congreso Nacional de Periodismo Ambiental


celebrado en Madrid, se apuntó una serie de características de un nuevo
modelo de comunicación ambiental, entre las que se destacó la que se conoce
como “ecoalfabetización”, es decir, la educación ambiental a través de
información sobre cuestiones relacionadas con el medio ambiente difundidas
por los medios de comunicación.

No obstante lo anterior, existen discrepancias sobre si los medios de


comunicación deben actuar como meros informadores de la realidad ambiental
o si, partiendo de la idea de que la objetividad absoluta no existe, deben
implicarse como educadores. Una tercera postura, ingenua a mi entender, es la
de quienes lanzan un llamamiento al denominado “periodismo sostenible” ( 6),
un nuevo tipo de periodismo ambiental basado en la compatibilidad de las
ideas anteriores. Los medios, a mi entender, deberían aprovechar su potencial
para contribuir de manera activa a que la ciudadanía adquiera una
concienciación ambiental sólida e incluso complementar a otras instituciones
sociales como el colegio o la familia en su papel pedagógico. A este respecto
es significativa la opinión de la Agencia Europea de Medio Ambiente al referirse
a los medios de comunicación: «Pueden tener un importante efecto sobre la
recepción pública de las realidades del entorno y eventualmente sobre esas
realidades mismas. Bajo unas condiciones determinadas, los medios pueden
afectar a las costumbres personales, aunque esos efectos sean siempre
dependientes del contexto y multifuncionales. El impacto de los medios sobre la
sociedad puede ser más perceptible cuando se descubren realidades
desconocidas y divertidas, preferencias y posibles caminos de actuación que
influyen en la elección final de opiniones específicas» (Centre d’Estudis
d’Informació Ambiental, 1999) ( 7).

Principios de la comunicación Ambiental

Antes que hablemos de los principios de la comunicación ambiental, daremos


una pequeña introducción a lo que es la comunicación ambiental.

“La comunicación ambiental puede ser definida como el proceso de


desarrollo e intercambio de mensajes entre diversos actores con el
objetivo de promover la extensión de conocimientos, actitudes y
comportamientos proambientales y sostenibles” (Castro, 1999).

Cuando hablamos del medio ambiente hacemos referencia a realidades


asociadas con la flora, fauna y ecosistemas. La comunicación ambiental está
vinculada a la naturaleza y a las consecuencias en ella derivadas del
cambio climático, la cual informa sobre problemas ambientales,
interrupciones o alteraciones que provoca la actividad humana en las
dinámicas naturales.
La comunicación ambiental ayuda a crear reflexiones que dirijan a una
reconfiguración para propiciar el cambio cultural y así prevenir problemas
ambientales y no debería ser una simple estrategia para lograr ciertos
objetivos, sino todo un campo de investigación que implique análisis éticos,
políticos, ideológicos y de relaciones de poder.

Los principios de la Comunicación Ambiental

Según Teresa Flores Bedregal es necesario desarrollar principios filosóficos


y éticos ambientales para que el comunicador ambiental oriente su accionar:

1. El respeto por todas las formas de vida o la biodiversidad


El ser humano comparte el planeta con millones de especies, muchas de
las cuales están en extinción como resultado de las actividades humanas.
En consecuencia, el comunicador ambiental adopta como meta defender la
vida en todas sus formas y manifestaciones, no sólo porque de ellas
depende nuestra sobrevivencia sino por su valor intrínseco. Este es un principio
ético fundamental.

2. La visión no antropocéntrica


Considera que el ser humano no es el centro de la vida en el planeta sino
una especie más, pero con mayores responsabilidades por su capacidad
particular tanto de comprender los procesos evolutivos, como de
transformar su entorno. En consecuencia, la naturaleza no puede únicamente
estar al servicio de los intereses humanos, sino que tiene derechos inherentes.

3. La defensa de la diversidad cultural


El proceso de la globalización tiende a la homogeneización cultural.
Sin embargo, es necesario comprender que las diferentes culturas y etnias
del planeta son el resultado de miles de años de evolución y su rico
acerbo cultural no debería perderse. Actualmente, no sólo muchas especies
están amenazadas de extinción, sino también muchas culturas, lenguas y, en
particular, los pueblos indígenas. Estas culturas tienen un gran bagaje de
conocimientos sobre su medio ambiente, las especies y diferentes
percepciones de su medio natural favorables a su conservación. Por tanto, la
diversidad cultural constituye parte integral de la biodiversidad.

4. Pensar globalmente y actuar localmente


Los problemas ambientales no están restringidos a un determinado país
o región, sino implican una red de interrelaciones ligadas a ciclos naturales que
se producen en todo el planeta y que es necesario comprender para percibir
sus implicaciones locales. Sin embargo, para tener algún impacto nuestra
actividad debe ser local respondiendo a los problemas específicos que se
presentan en el medio donde vivimos.

5. La sostenibilidad
El concepto de sostenibilidad se refiere a un proceso que puede mantenerse
a lo largo del tiempo, sin colapsar o deteriorarse. «Una sociedad
sostenible es aquella que puede persistir en el tiempo y que es lo
suficientemente visionaria, flexible y sabia para no socavar los sistemas
físicos y sociales que la mantienen.» (Meadows et. Alt., 1992)

6. Estilos de vida ambientalmente sanos


Las sociedades altamente industrializadas promueven estilos de vida
de sobreconsumo y de desperdicio. Los ambientalistas piensan,
contrariamente, que tenemos que adoptar un modelo de vida que considere
nuestro impacto en el planeta y evitar consumir una serie de productos
innecesarios que crean más basura y contaminación. En este sentido, la
comunicación ambiental promueve el cambio de las actitudes y las
prácticas personales consumistas, hacia modelos de vida sostenibles.

7. La solución pacífica de conflictos


Las filosofías ambientales son pacifistas, pues entienden que los
conflictos militares, las guerras y el uso de armas nucleares, químicas o
bacteriológicas tienen devastadores impactos en el planeta. Mientras que la
negociación de los conflictos en base a la participación y al consenso
producen cambios más estables y durables al tomar en cuenta diferentes
intereses.
8. El respeto a la libertad de expresión y diversidad de opiniones
Las diferentes percepciones y opiniones de las personas enriquecen a
la sociedad y a la cultura. Las opiniones, por muy disímiles que sean a las
nuestras, tienen validez, porque por muy amplios y objetivos que tratemos de
ser, nuestra visión como individuos será limitada a nuestra experiencia
personal. Además la libertad de expresión ayuda a recomponer equilibrios
frecuentemente rotos por las estructuras de poder.

9. La veracidad y la exactitud


Otro de los principios de la comunicación ambiental es la exactitud y veracidad
de la información son la condición indispensable para que nuestros mensajes
tengan la autoridad necesaria para producir los cambios sociales necesarios.
No es fácil ser lo suficientemente precisos y exactos al difundir información
científica porque la ciencia está en permanente evolución y
nuestros conocimientos son necesariamente parciales. Sin embargo, en base a
los conocimientos disponibles, a la consulta con los especialistas y de todos los
actores involucrados podremos lograr la confiabilidad necesaria. Con este
fin, es necesario que los comunicadores se autoeduque permanentemente
para estar al día de los nuevos adelantos y descubrimientos científicos
que pueden contradecir ciertas premisas que las dábamos por
irrefutables.

10. Actores activos Los comunicadores ambientales deben ser sujetos


activos de cambio para lograr sociedades sostenibles. 
Es indispensable el concurso activo de todos aquellos que sea por motivos
racionales, éticos, religiosos o por sensibilidad humana o con las otras
especies, ante la gravedad de los problemas sociales y ambientales
que enfrentamos.

Área de estudio y de Prácticas

Según J. Robert Cox, el campo de la comunicación ambiental se compone de


siete áreas principales de estudio y práctica:
1. Discurso y retórica ambiental
2. Periodismo mediático y medioambiental
3. Participación pública en la toma de decisiones ambientales
4. Campañas de promoción y marketing social
5. Colaboración ambiental y resolución de conflictos
6. Comunicación de riesgos
7. Representaciones de la naturaleza en la cultura popular y el marketing
ecológico 13

Teoría de la Comunicación Ambiental

Para comprender las formas en que la comunicación ambiental tiene un efecto


en los individuos, los investigadores creen que la visión que uno tiene del
medio ambiente da forma a sus puntos de vista de diversas formas. El estudio
general de la comunicación ambiental consiste en la idea de que la naturaleza
"habla". En este campo, existen teorías en un esfuerzo por comprender las
bases de la comunicación ambiental.10

Discurso material - simbólico

Los investigadores ven la comunicación ambiental como simbólica y material.


Argumentan que el mundo material ayuda a moldear la comunicación como la
comunicación ayuda a moldear el mundo.10 La palabra medio ambiente, un
símbolo principal en la cultura occidental, se usa para dar forma a la
comprensión cultural del mundo material. Esta comprensión brinda a los
investigadores la capacidad de estudiar cómo reaccionan las culturas al
entorno que las rodea.10

Relaciones con la naturaleza humana mediadora

Los seres humanos reaccionan y se forman opiniones basadas en el entorno


que les rodea. La naturaleza juega un papel en las relaciones humanas. Esta
teoría se esfuerza por establecer una conexión entre las relaciones humanas y
la naturaleza. Esta creencia está en el centro de la comunicación ambiental
porque busca comprender cómo la naturaleza afecta el comportamiento
humano.11 Los investigadores señalan que puede haber una conexión con esta
teoría y la fenomenología.

Teoría activista aplicada

Es difícil evitar el "llamado a la acción" cuando se habla de comunicación


ambiental porque está directamente relacionado con temas como el cambio
climático, los animales en peligro de extinción y la contaminación. Sin embargo,
es posible informar al público sobre el cambio ambiental y, al mismo tiempo,
brindar soluciones a estos problemas.10

Como sugiere la siguiente sección, hay muchas divisiones de estudios y


prácticas en el campo de la comunicación ambiental, una de las cuales son las
campañas de promoción y marketing social. Aunque este es un tema amplio,
un aspecto clave de las campañas ambientales exitosas es el lenguaje utilizado
en el material de la campaña. Los investigadores han descubierto que cuando
las personas están preocupadas e interesadas por las acciones ambientales,
se adaptan bien a los mensajes con un lenguaje asertivo; Sin embargo, las
personas que están menos preocupadas e interesadas por las posturas
ambientales, son más receptivas a mensajes menos asertivos. 12 Aunque las
comunicaciones sobre temas ambientales a menudo tienen como objetivo
impulsar a los consumidores que ya perciben el tema que se promueve como
importante, es importante que estos productores de mensajes analicen a su
público objetivo y adapten los mensajes en consecuencia.

Concepto de Comunicación ambiental

Una aproximación conceptual


No existe en el entorno académico una postura unánime sobre qué es
exactamente el periodismo ambiental, y algunas definiciones resultan
incompletas porque reducen las competencias de esta especialidad a aspectos
relacionados con la naturaleza. El periodista Joaquín Fernández (1995),
probablemente quien más aportaciones ha hecho a su estudio en España,
sostiene que en la actualidad se habla de periodismo ambiental «para designar
a esta especialidad periodística, cargada de futuro, que se ocupa de la
actualidad relacionada con la naturaleza y el medio ambiente y en especial de
aquellos aspectos que tienen que ver con su degradación». Si bien esto no
parece incorrecto, creo necesario avanzar algunos pasos y aportar una
definición más adaptada a una actividad cuyas competencias han crecido
espectacularmente en las últimas décadas como consecuencia del propio
desarrollo de la interacción del hombre con la Tierra. Así pues, puede decirse
que se trata de una especialización periodística que se ocupa de la información
de actualidad generada por la interacción del ser humano con los seres vivos y
con su entorno, tanto el natural como el creado por el propio hombre.

El término de “periodismo ambiental” suele confrontarse con otros incluso más


habituales y biensonantes, aunque menos rigurosos como “periodismo verde” o
“periodismo ecológico”. Lo ecológico suele relacionarse más con una postura
de militancia, propensa al conflicto y a la lucha por unos ideales, y también son
muchos los profesionales de medios generalistas los que lo relacionan con
quienes se mueven en el ámbito de las publicaciones especializadas. A finales
de 1994, la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA) fijó
definitivamente el término periodismo ambiental y así los profesionales de la
especialidad «se desvinculaban de las confusiones que podía acarrear el
nombre ‘ecológico’ por su carga ideológica y se reafirmaban en lo ambiental
como un ejercicio profesional» (Fernández Reyes, 2003).

El periodismo ambiental como especialidad tiene, como se verá más adelante,


una larga trayectoria en España, y sin embargo los estudios sobre ella se
reducen fundamentalmente a las publicaciones del mencionado Joaquín
Fernández ( 1) y a los sucesivos encuentros celebrados por la APIA, cuya
sexta convocatoria se celebra este año. La mayoría de los investigadores
todavía sitúa esta especialidad dentro de áreas como el periodismo científico, a
pesar de que cuenta con identidad propia y con muchos y diversos contenidos.
Algunos estudiosos y organizaciones –Joaquín Fernández, Francisco Esteve y
Javier Fernández del Moral, o la OCDE– han elaborado listas de los que
consideran los campos que abarca. A ellos añado mi propia propuesta:
– Protección de la naturaleza: deforestación, incendios forestales, suelo,
biodiversidad, espacios protegidos, fauna y flora.

– Agua: contaminación de ríos, mares, costas, planes hidrológicos.

– Contaminación: agrícola, acústica, atmosférica, capa de ozono, efecto


invernadero, cambio climático, vertidos.

– Residuos: urbanos, tóxicos, atmosféricos, incineración, reciclaje, vertederos.

– Desarrollo sostenible: turismo rural, problemas de población, salud,


educación ambiental, desarrollo económico y protección del medio.

– Investigación: nuevas tecnologías, energías renovables, estudios de impacto


ambiental.

– Administración ambiental y organizaciones ecologistas.

La Comunicación Ambiental se propone como uno de los aspectos en las


cuales las organizaciones, gobiernos, organismos de cooperación y la
ciudadanía en general tienen el deber de intervenir para evitar
consecuencias catastróficas.

Imagínate un mundo sin agua dulce, sin lluvia, ni fruta, sin cosechas para
comer y siempre viviendo bajo un calor insoportable. Ese paisaje parece
sacado de una película de terror, ¿verdad? Pues puede ser más real de lo
que te imaginas, ya que si no valoramos y cuidamos nuestros recursos
naturales, llegará un tiempo no muy lejano en el cual estaremos obligados a
sobrevivir en un mundo desértico y lamentable. Debido a todo ello, es
necesario trabajar desde ahora para remediar este desequilibrio ambiental
que nos ha tocado vivir.

 Este término se ha hecho muy popular en los últimos años y, de forma


breve, hace alusión al derecho que tenemos todos los seres humanos
de estar bien informados sobre los dilemas ambientales.

La comunicación ambiental es "la difusión de información y la


implementación de prácticas de comunicación que están relacionadas con
el medio ambiente".

Al principio, la comunicación ambiental era un área de comunicación estrecha;


sin embargo, hoy en día, es un campo amplio que incluye investigaciones y
prácticas sobre cómo los diferentes actores (instituciones, estados, personas)
interactúan con respecto a temas relacionados con el medio ambiente y cómo
los productos culturales influyen en la sociedad hacia los temas ambientales. 1

La comunicación ambiental también incluye las interacciones humanas con el


medio ambiente. 2 Esto incluye una amplia gama de posibles interacciones,
desde la comunicación interpersonal y las comunidades virtuales hasta la toma
de decisiones participativa y la cobertura de los medios ambientales. Desde la
perspectiva de la práctica, Alexander Flor define la comunicación ambiental
como la aplicación de enfoques, principios, estrategias y técnicas de
comunicación para la gestión y protección ambiental. 3

“La comunicación ambiental puede ser definida como el proceso de


desarrollo e intercambio de mensajes entre diversos actores con el objetivo
de promover la extensión de conocimientos, actitudes y comportamientos
proambientales y sostenibles” (Castro, 1999).14 feb 2022

https://www.youtube.com/watch?v=e_xtpPddDNY
Características de la Comunicación Ambiental

-Promueve Campañas, es rápida, simultanea , clara , precisa.

-Utiliza Medios Masivos y Virtuales dirigidas a todo Público.

-Promueve la Conservación y Preservación de los diferentes Ecosistemas,


además del cambio de Comportamiento de los seres humanos.

-Se lucha por el desarrollo sostenible y el desarrollo del planeta.

Estrategias en la Comunicación Ambiental

Las estrategias ambientales son actividades orientadas a generar una


conciencia hacia el ecosistema, así como acciones concretas que logren
una reducción en los problemas ambientales con resultados medibles,
evitando por todos los medios la contaminación.

Estrategia

Es una serie de acciones planificadas que ayudan a tomar decisiones y a


conseguir los mejores resultados posibles. Mefalopulus y Kamlonguera
(2008) definen a la estrategia como una serie de acciones bien planificadas
que se propone lograr ciertos objetivos a través del uso de métodos,
técnicas y enfoques de comunicación.

Estrategia de comunicación

Una estrategia de comunicación es una serie de acciones que se proponen


lograr ciertos objetivos a través del uso de métodos, técnicas y enfoques de
comunicación. Pérez y Merino (2008) definen a la estrategia como una serie
sistemática y bien planificada de acciones que combinan diferentes
métodos, técnicas y herramientas, para lograr un cambio concreto u
objetivo, utilizando los recursos disponibles, en un tiempo determinado.

“De esta definición se puede deducir que antes de empezar a pensar en la


estrategia de comunicación se deben tener en cuenta objetivos muy claros.
Estos objetivos ayudan a determinar el cómo enfrentar la solución de los
problemas. Los objetivos son la base de la estrategia. Una vez que los
objetivos están definidos, es necesario evaluar los recursos disponibles para
perfeccionar la estrategia de comunicación” (Pérez y Merino, 2008,
Definición.de. Recuperado: http://Definición.de/estrategia).

Además, Cárdenas y otros (2008) indica que, si se quiere lograr una buena
estrategia de comunicación, ésta debe ser transversal a la organización,
debe apoyar todas las actividades y los productos que se desarrollen para
fortalecer la identidad.

La estrategia debe indagar en la parte interna de la organización, para


conocer los diferentes mercados a los que apunta la empresa, los clientes
que compraran en ella, su filosofía de vida, su forma de pensar y expresar:
su cultura; sólo así se logrará conocer a fondo a los públicos y será posible
que la organización tenga en cuenta los diferentes factores cuando actúe
para comunicar y promocionar sus productos o servicios.

Es en este ambiente donde la comunicación y sus elementos empiezan a


tener un rol significativo, en la medida que implica poner a circular mensaje,
contenidos y factores socioculturales que tengan en cuenta la realidad
organizacional, sus metas estratégicas, pero también las necesidades,
demandas y expectativas del mercado, es decir del consumidor.

Para lograr lo anterior, Cárdenas y otros (2008) indican que es necesario


hacer uso de la comunicación con sentido estratégico, tanto para el
reconocimiento de la realidad contextual de la organización, como para la
recolección de la información, y por ende para la gestión de la comunicación
mediante la creación de estrategias que permitan crear sinergia entre las
diferentes personas que conforman la organización, la organización como
ente social y empresarial, y los clientes que compran sus productos.

Importancia de la Comunicación Ambiental

La comunicación ambiental es una herramienta fundamental para informar y


concientizar a la sociedad sobre temas relacionados con el medio ambiente y el
desarrollo sostenible. La comunicación ambiental tiene varias ventajas y
beneficios, entre los que se pueden mencionar:

 Permite transmitir información relevante y precisa sobre temas ambientales, y


promover una cultura de cuidado del medio ambiente.
 Favorece la toma de decisiones informadas y responsables en cuanto a la
protección y conservación del medio ambiente.
 Contribuye a la construcción de una cultura de responsabilidad ambiental en la
sociedad, y a la promoción de actitudes y conductas más sostenibles.
 Fomenta la participación y el compromiso de la comunidad en el desarrollo de
iniciativas y proyectos ambientales.
 Ayuda a prevenir y solucionar problemáticas ambientales, y a mitigar los
impactos negativos del desarrollo sobre el medio ambiente.
 En general, la comunicación ambiental es una herramienta valiosa para
promover el desarrollo sostenible y el cuidado del medio ambiente, y para
construir una sociedad más responsable y comprometida con la protección del
medio ambiente.

Tipos de Comunicación Ambiental

 La comunicación ambiental se puede clasificar en diferentes tipos según su


enfoque, su objetivo y su público destinatario. A continuación, se presentan
algunos de los tipos de comunicación ambiental más comunes:
 Comunicación informativa: se enfoca en proporcionar información relevante y
precisa sobre temas ambientales, y en concientizar sobre las problemáticas y
desafíos que enfrenta el medio ambiente.

 Comunicación persuasiva: se enfoca en convencer y motivar a la audiencia a


adoptar conductas y actitudes más sostenibles y responsables con el medio
ambiente. 

 Comunicación participativa: se enfoca en involucrar a la comunidad y a


diferentes sectores de la sociedad en el desarrollo de proyectos y iniciativas
ambientales.

 Comunicación educativa: se enfoca en enseñar y formar a la audiencia sobre


temas ambientales, y en desarrollar habilidades y competencias para el
cuidado del medio ambiente.

 Comunicación institucional: se enfoca en difundir la política ambiental de una


institución o empresa. Por ejemplo, una empresa de manufactura emite un
comunicado sobre un certificación de carbono cero.

 Comunicación Ambiental y Educación ambiental


La comunicación ambiental y la comunicación educación son términos que
coexisten juntos, es decir, uno no puede existir sin el otro. Para ser más
precisos, diremos que la educación es la práctica de enseñar a quienes
carecen de información. Entendiendo esto, debemos indicar que la
comunicación ambiental se presenta cuando un especialista tramite técnicas e
información sobre temas de conservación ambiental y desgaste ambiental
a personas que desconocen esos temas.

El presente siglo se ha caracterizado, sin duda alguna, por la presencia de


grandes naturales. El descontrol de nuestro ecosistema ha traído consigo
muchos efectos devastadores en nuestro planeta como, por ejemplo, el
deshielo de los glaciaros, lo cual ha causado deslaves y tsunamis. Estos
fenómenos han acabado con miles de vidas, sin embargo, las consecuencias
de no conservar el ambiente van mucho más allá.

La Comunicación Ambiental se propone como uno de los aspectos en las


cuales las organizaciones, gobiernos, organismos de cooperación y la
ciudadanía en general tienen el deber de intervenir para evitar
consecuencias catastróficas.

Imagínate un mundo sin agua dulce, sin lluvia, ni fruta, sin cosechas para
comer y siempre viviendo bajo un calor insoportable. Ese paisaje parece
sacado de una película de terror, ¿verdad? Pues puede ser más real de lo que
te imaginas, ya que si no valoramos y cuidamos nuestros recursos naturales,
llegará un tiempo no muy lejano en el cual estaremos obligados a sobrevivir en
un mundo desértico y lamentable. Debido a todo ello, es necesario trabajar
desde ahora para remediar este desequilibrio ambiental que nos ha tocado
vivir.

Comunicación Ambiental: Definición

Sabemos que la comunicación es la trasmisión de ideas, sentimientos e


información a los demás, pero, ¿qué es la comunicación ambiental? ¿Será
que debes hablarle a los animales y arboles?

La respuesta lógica a esta pregunta es un simple y rotundo no. Este término se


ha hecho muy popular en los últimos años y, de forma breve, hace alusión
al derecho que tenemos todos los seres humanos de estar bien
informados sobre los dilemas ambientales.

La madre tierra es nuestro hogar y nuestra principal fuente de vida. Ella nos
provee de todo lo necesario para vivir, como el agua, el sol, el aire, plantas y
miles de recursos más que nos permiten seguir existiendo. ¿Qué pasaría si la
tierra dejara de existir? Pues es muy sencillo: ningún ser vivo lograría
sobrevivir, y he aquí la relevancia de la comunicación ambiental. A través de
ella, nos podemos concientizar y aprender cómo hacer de la tierra un mejor
lugar para vivir. Pero lo más importante es convertirla en un lugar adecuado
para dejar como herencia a las generaciones futuras.

Importancia de la Comunicación Ambiental

La comunicación ambiental es una herramienta fundamental para informar y


concientizar a la sociedad sobre temas relacionados con el medio ambiente y el
desarrollo sostenible. La comunicación ambiental tiene varias ventajas y
beneficios, entre los que se pueden mencionar:

 Permite transmitir información relevante y precisa sobre temas ambientales, y


promover una cultura de cuidado del medio ambiente.
 Favorece la toma de decisiones informadas y responsables en cuanto a la
protección y conservación del medio ambiente.
 Contribuye a la construcción de una cultura de responsabilidad ambiental en la
sociedad, y a la promoción de actitudes y conductas más sostenibles.
 Fomenta la participación y el compromiso de la comunidad en el desarrollo de
iniciativas y proyectos ambientales.
 Ayuda a prevenir y solucionar problemáticas ambientales, y a mitigar los
impactos negativos del desarrollo sobre el medio ambiente.
 En general, la comunicación ambiental es una herramienta valiosa para
promover el desarrollo sostenible y el cuidado del medio ambiente, y para
construir una sociedad más responsable y comprometida con la protección del
medio ambiente.
Comunicación Ambiental y Educación ambiental

La comunicación ambiental y la comunicación educación son términos que


coexisten juntos, es decir, uno no puede existir sin el otro. Para ser más
precisos, diremos que la educación es la práctica de enseñar a quienes
carecen de información. Entendiendo esto, debemos indicar que la
comunicación ambiental se presenta cuando un especialista tramite técnicas e
información sobre temas de conservación ambiental y desgaste ambiental
a personas que desconocen esos temas.

Comunicación del riesgo ambiental

Las nuevas generaciones se caracterizan por ser muy conscientes de los


problemas que tiene nuestro planeta. Esto se debe a que sus padres y
maestros les han dado una adecuada educación ambiental cuando eran niños.
Veamos el claro y conocido ejemplo del agujero en la capa de ozono, el cual ha
sido causado por los gases tóxicos emitidos en la quema de gasolina, por
mencionar un factor. Ese tema es conocido por casi todos los jóvenes y, de
hecho, es muy improbable que este tema no haya sido tratado en escuelas o
conferencias.
La forma de vida consumidora y derrochadora que tienen los seres humanos es
definitivamente algo negativo para la Tierra. Continuar con esta tendencia nos
llevará al agotamiento total de los recursos naturales y al desplome
inevitable del ecosistema. Muchos creen que los procesos naturales son
insignificantes y que el cambio climático es solo una teoría, no obstante, lo
cierto es que cada proceso natural tiene su propósito.

Es importante que todos sepamos qué está pasando en nuestro mundo y qué
consecuencias traerá esto en nuestra calidad de vida. A pesar de los grandes
esfuerzos de nuestros padres, maestros y tutores en trasmitir valores
ambientales a través de la educación ambiental, hay que reconocer que aún
falta un largo camino por recorrer. Todavía se deben hacer muchos esfuerzos
para que todos los jóvenes y las generaciones que vienen sepan cómo valorar
y resguardar nuestro medio ambiente.

Ejemplos de Comunicación Ambiental

A continuación, presentamos algunos ejemplos de comunicación ambiental:

 Campañas publicitarias que promueven el reciclaje de basura y la reducción del


consumo de energía.
 Programas educativos y actividades lúdicas que enseñan a los niños a cuidar el
medio ambiente.
 Eventos y ferias que promueven el consumo de productos orgánicos y
sostenibles.
 Estrategias de comunicación que involucran a la comunidad en proyectos de
conservación y restauración de ecosistemas.
 Charlas y conferencias sobre el cambio climático y las medidas que se pueden
tomar para mitigarlo.
 Campañas de sensibilización que informan sobre las consecuencias del
uso de plásticos y otros materiales contaminantes.
 Iniciativas que promueven el transporte público y el uso de vehículos
ecológicos.
 Publicaciones y material educativo que enseñan a ahorrar agua y
energía en el hogar y en la empresa.
 Redes sociales y plataformas digitales que difunden información y
consejos sobre temas ambientales.
 Exposiciones y actividades culturales que promueven el cuidado del
medio ambiente.
En estos ejemplos, se pueden observar diferentes formas en las que la
comunicación ambiental puede ser utilizada para informar y concientizar sobre
temas ambientales, y para promover la participación y el compromiso de la
sociedad en la protección y conservación del medio ambiente

Educación ambiental

La problemática actual respecto a la contaminación y cambio climático ha


hecho que el medio ambiente esté en boca de todos y ha aumentado la
preocupación de los ciudadanos por las posibles consecuencias que tiene un
tratamiento nocivo al medio que nos rodea.

Términos como Desarrollo Sostenible, (Desarrollo presente que no


comprometa las capacidades del futuro para satisfacer sus necesidades), están
sonando continuamente en los medio de comunicación y los distintos gobiernos
del mundo intentan establecer medidas para llevarlo a cabo.

Al ser un tema de actualidad y que nos concierne a todos, es importante que


sea explicado y conseguir que llegue a toda la población, por ello se crean
campañas de sensibilización y concienciación medioambiental. La educación
es fundamental para conseguir los objetivos propuestos y por ello surge una
disciplina que es la Educación Ambiental.

La Educación Ambiental es un proceso que dura toda la vida y que tiene como
objetivo impartir conciencia ambiental, conocimiento ecológico, actitudes y
valores hacia el medio ambiente para tomar un compromiso de acciones y
responsabilidades que tengan por fin el uso racional de los recursos y poder
lograr así un desarrollo adecuado y sostenible.

Los objetivos de este tipo de educación vienen definidos por la


UNESCO, y son los siguientes:
- Toma de conciencia: concienciar a la gente de los problemas relacionados
con el medio.
- Conocimientos: ayudar a interesarse por el medio.
- Actitudes: adquirir interés por el medio ambiente y voluntad para
conservarlo.
- Aptitudes: ayudar a adquirir aptitudes para resolver el problema.
- Capacidad de evaluación: evaluar los programas de Educación Ambiental.
- Participación: desarrollar el sentido de la responsabilidad para adoptar
medidas adecuadas.

La educación tiene que iniciarse lo más pronto posible ya que de esta


manera, si los niños son capaces de identificar y solucionar problemas
ambientales en edad temprana, podrán continuar con ello en la edad adulta
y ser capaces de tomar una decisión, dando posibles respuestas a la
problemática que tenemos en la actualidad. Además es imprescindible que
los niños se sensibilicen con el medio y cojan hábitos sostenibles ya que el
concepto de Desarrollo Sostenible les afecta a ellos y tendrán que ser
capaces de racionalizar sus recursos para no comprometer los de futuras
generaciones.

Los objetivos de la Educación Ambiental para niños son los


siguientes:

- Concienciar a los pequeños de los problemas ambientales y mostrarse


sensibles ante ellos.
- Fomentar interés en la participación y mejora del medio. - Desarrollar la
capacidad de los pequeños de informarse acerca de cosas que no saben
del medio que les rodea.
- Ampliar los conocimientos del entorno próximo. Es responsabilidad tanto
de los colegios como de los padres fomentar la educación de los niños
ayudándoles a comprender el medio ambiente y realizando actividades
relativas a la Energía, Paisaje, Aire, Agua y la Vida Silvestre.

La Educación Ambiental puede ser vista como una actividad divertida para
los niños, procurando que adquieran conocimientos sobre su entorno y
aprendan a respetarlo para que en un futuro sean capaces de gestionar de
la mejor manera sus actividades para que éstas sean menos perjudiciales
para el medio ambiente.
En este manual se van a exponer diferentes actividades sencillas y baratas
que los padres pueden realizar con los hijos para fomentarles un interés por
el medio ambiente en su forma experimental. A su vez se explicarán
algunos términos y curiosidades para que los niños aprendan cosas nuevas
sobre el medio que les rodea.

2) Teóricos del Periodismo Ambiental

Jaime Incer Barquero


Camilo Lara

3) Temas ambientales
La cobertura ambiental todavía es insuficiente

Aunque las informaciones ambientales cuentan ahora con más prestigio que
nunca –en los años 90 ganaron diez premios Pulitzer, mientras que fueron
nueve entre los años 60, 70 y 80– y la cobertura de cuestiones
medioambientales por parte de los medios ( 4) ha aumentado claramente en
las últimas décadas, ésta todavía es insuficiente. Según se desprende de
la Segunda Encuesta Nacional de la Percepción Social de la Ciencia y la
Tecnología (TNSdemoscopia, 2004), presentada en noviembre de 2004, el
porcentaje de información ambiental que recibimos de los medios en España
(2,99 sobre 5) es inferior a nuestro grado de interés informativo por el medio
ambiente (3,48 sobre 5).
Los medios de comunicación se rigen por unos procedimientos rutinarios y su
forma de seleccionar la información está muy estandarizada. Con frecuencia
nos hacen llegar informaciones sobre catástrofes ambientales, incendios
forestales o accidentes químicos, y uno se pregunta por qué se escogen esos
hechos restringidos dentro de la gran gama de temas ecológicos cuando sólo
constituyen una pequeña porción de lo que los ambientalistas denominarían
problemas o temas ambientales.

Para los reporteros de prensa el factor dramático de los sucesos supone contar
con una noticia atractiva, mientras que la televisión se guía más por factores
como la disponibilidad de imágenes visuales que por el interés científico, lo cual
implica que la mayoría de las noticias ambientales se conciba de manera
sensacionalista. Todo ello refuerza la tendencia del público a subestimar los
riesgos de carácter crónico de males como el efecto invernadero o el deterioro
de la capa de ozono –a cuya solución, por otra parte, creen poder aportar
poco– y a fijar su atención en los sucesos repentinos o llamativos, sin reparar
en la calidad de la información que se les está ofreciendo.

No obstante, la espectacularidad de determinados sucesos no siempre es


negativa. Hechos como el desastre del petrolero Prestige hicieron saltar las
alarmas sobre la destrucción de la naturaleza y, gracias a la enorme cobertura
que de ellos hicieron los medios de comunicación, se acrecentó la
sensibilización de una opinión pública cada vez más preocupada por el
entorno.
En parte como consecuencia de la tendencia a primar los sucesos más
llamativos, los medios acaban creando una imagen parcial de los hechos.
Suelen tratar informaciones concretas y a menudo simples sobre
acontecimientos puntuales que realmente forman parte de procesos largos y
realidades complejas con numerosas implicaciones científicas técnicas que no
suelen explicarse (Caja España, 1999). Esto evidencia que el carácter científico
de muchas cuestiones relacionadas con el medio ambiente no es fácilmente
trasladable a la cobertura de noticias.
La Agencia Europea de Medio Ambiente corrobora algunos de los datos
anteriores en sus estudios, como puede comprobarse en el gráfico ( 1).

Dificultades del periodista ambiental

Los periodistas que optan por dedicarse a la información ambiental cuentan


ahora con una mejor preparación que hace años, bases de datos antes casi
inexistentes o inaccesibles, y cierta conciencia de grupo ( 5). No obstante, los
pasos que se han dado siguen siendo insuficientes y estos profesionales
siguen encontrando impedimentos que dificultan su tarea.

– Necesidad de especialización

Junto con las limitaciones de espacio, tiempo y medios, la falta de preparación


es la principal causante de que la información transmitida no siempre sea todo
lo rigurosa e imparcial que debiera. Siempre y cuando el concentrarse en el
medio ambiente no le lleve a desvincularse del resto de la información, nada
mejor que la especialización periodística puede ayudar a formar profesionales
capacitados para traducir las cuestiones ambientales al lenguaje común. A esto
se suma la necesidad de tener conocimientos de campos como biología,
química, gestión y auditoría ambiental, o derecho, entre otros, para poder
abordar temas aparentemente muy dispares. Ante esta difícil tarea, es
necesario que se fomente la especialización tanto desde la etapa formativa en
la universidad como desde los propios medios de comunicación.

Los responsables de los medios buscan la rentabilidad y siguen mostrando


reticencias a contratar a profesionales especializados en detrimento de los
periodistas todoterreno capaces de cubrir cualquier tipo de información. Al no
existir una sección o espacio fijos para el medio ambiente –que no se crean por
considerar que no interesan al público y posiblemente por falta de una
concienciación de los propios responsables–, no ven necesaria la contratación
de especialistas. Se trata de una especie de círculo vicioso del que estoy
convencida que podría salirse con un cambio de actitud hacia el periodismo
ambiental por parte de las instituciones académicas. Sobre éstas opina la
profesora Rocío Zamora (1994): «En España, en comparación con (…) los
países anglosajones, sobre todo Estados Unidos, no existe una oferta
académica destacada, al menos en lo que respecta a la formación universitaria
de grado y de licenciatura. (…) Únicamente queda la posibilidad de abrir vías a
la especialización científica a través de las asignaturas optativas y seminarios
de libre configuración que compiten (…) con una amplia gama de otros cursos
y especialidades».

4) Fuentes periodísticas ambientales

– Las fuentes
Existe un problema añadido a la citada complejidad relacionado con las fuentes
utilizadas por los periodistas ambientales. Éstos, y en mayor medida los que no
cuentan con la preparación necesaria, recurren con demasiada frecuencia a las
instituciones públicas por entender que el representar su uso legítimo del poder
(¿?) las convierte en fuentes de información autorizadas. Y aunque existe la
creencia generalizada de que los expertos e investigadores pueden aportar
conocimientos objetivos y juicios independientes, la comunidad científica
todavía juega un papel secundario como fuente de información (Centre
d’Estudis d’Informació Ambiental, 1999).

Las organizaciones ecologistas también persiguen la cobertura informativa de


sus actividades, pero estos colectivos tienden a verse como agrupaciones de
activistas contrarios al poder establecido. Con frecuencia se considera más
relevante desde el punto de vista informativo la forma que adquieren sus
protestas que el propio contenido de éstas, que acaba por trivializarse o
simplificarse en exceso. Las ONG, por su parte, ocupan un lugar secundario
como fuentes de información ambiental con respecto a las oficiales o las
científicas.

– Dependencia del medio para el que trabajan


Otra de las principales dificultades a las que se enfrentan estos profesionales
es su dependencia con respecto a los medios para los que trabajan, que a
menudo se muestran reacios a otorgar a la temática ambiental la atención que
merece. Los más optimistas polemizan sobre si es más adecuado crear una
sección específica sobre información ambiental o si por el contrario se debería
tratar de ecologizar todas las secciones, aunque la realidad es que el medio
ambiente todavía se incluye mayoritariamente en áreas como la de Sociedad.

De cualquier modo, aun en el caso de aquellos medios que hacen un hueco a


la información ambiental, no debe olvidarse que a veces sus alianzas basadas
en intereses económicos y políticos disminuyen su supuesta neutralidad a la
hora de cubrir este tipo de acontecimientos. Sirva como ejemplo la prestigiosa
revista Time, que en los últimos años apenas ha publicado números especiales
sobre medio ambiente, uno de los cuales salió a la luz en agosto de 2002, justo
antes de la Cumbre de Johannesburgo. Este especial se hizo en parte porque
numerosos anunciantes tenían interés en que se les asociase con un mensaje
de sensibilización con el entorno mientras durase dicha Cumbre.

– Los receptores

Los medios no son los únicos culpables de que el medio ambiente no goce de
más protagonismo. Debido a que se enfrentan a un influjo enorme e incesante
de información, los ciudadanos se ven obligados a seleccionar e interpretar las
partes de las noticias que tienen algún significado relevante para sus intereses
y valores personales. Los receptores parecen prestar cada vez más atención a
cuestiones de sociedad, entretenimiento o deportes en detrimento de otros
como el medio ambiente, que los españoles sitúan en décimo lugar de un total
de catorce temáticas ordenadas según el grado de interés informativo que
despiertan (TNSdemoscopia, 2004).

El periodista ambiental español Javier Rico (2001) señala con gran acierto dos
características que impiden que la información ambiental cale hondo en los
receptores. Por un lado, el carácter de información dura, negativa, y hasta
sucia, sobre todo en la parte marcadamente ambiental –contaminación,
residuos, sequía, energía nuclear–, que se ve compensada a veces por el área
de naturaleza –flora, fauna, paisajes–. Por otra parte, como ya se señaló antes,
el hecho de que este tipo de información juega con el medio o largo plazo en
cuanto a los efectos las grandes problemáticas, como son la disminución de la
capa de ozono o del cambio climático, que en consecuencia no interesan
demasiado porque no se conciben como algo próximo (gráfico  (2)).

5) Ejemplos (Caso prácticos)

https://www.monografias.com/docs/Comunicacion-ambiental-F3GZ86YBZ

https://www.scielo.org.mx/pdf/comso/n25/n25a9.pdf
http://www.lineaverdemunicipal.com/Recursos-educacion-ambiental/Introduccion-
educacion-ambiental.pdf

https://todosobrecomunicacion.com/comunicacion-ambiental/
https://es.wikipedia.org/wiki/Comunicaci%C3%B3n_ambiental

https://www.cincovientos.com/principios-de-la-comunicacion-ambiental/

Teresa Flores Bedregal, La Paz, Bolivia.n Comunicación para el


Desarrollo Sostenible de Latinoamérica

Castro, Ricardo de (1999) Retos y oportunidades de la comunicación


para el cambio ambiental. Ciclos, 5, Ilustraciones: Freepick
http://biblioteca.usac.edu.gt/tesis/16/16_1682.pdf

https://telos.fundaciontelefonica.com/archivo/numero068/la-
informacion-ambiental-en-los-medios-de-comunicacion/

UNIDAD II: MARCO JURÍDICO PARA EL MEDIO AMBIENTE

1) Leyes nacionales nicaragüenses


La legislación ambiental en Nicaragua no es nueva, así como no son
nuevos los problemas que enfrentan las comunidades por el cumplimiento
de un ambiente saludable, la implementación de un modelo de desarrollo
sostenible y por consiguiente, de su derecho.

Hoy más que nunca es preciso entender la correcta aplicación del derecho
ambiental y poder influir constructivamente en la toma de decisiones de los
órganos encargados de la administración legislativa y su justa gerencia.

En nuestro país, con la puesta en vigencia de la Constitución Política de


Nicaragua en 1987, y la incorporación del tema ambiental en la misma, este
se convierte en un nuevo derecho de obligatoria protección por parte del
Estado al medio ambiente y como un deber a cumplir por todos los
ciudadanos.

La publicación del Compendio Jurídico de Medio Ambiente y Recursos


Naturales parte de la idea de poner en relieve la existencia de un emergente
derecho ambiental en nuestro país.

El reconocimiento a la participación ciudadana, su esfuerzo por mantener un


ambiente saludable para las presentes y futuras generaciones. Este material
no pretende ser único, sino contribuir a una mayor producción doctrinaria en
la materia y servir como promotor de conocimiento.

De la misma manera servir a la imperiosa y ardua tarea que tenemos los


movimientos sociales en la capacitación a la ciudadanía y otros tomadores
de decisión comprometidos con la búsqueda de soluciones en pos del
desarrollo sostenible.

Este trabajo constituye uno de los primeros esfuerzos dentro de esta índole,
por lo que deberá ser el trabajo a continuar dentro de este movimiento
integrado por adolescentes, jóvenes y adultos. Finalmente, nuestro
agradecimiento a la Organización Panamericana de la Salud; Oficina de
Acceso a la Información Pública y Biblioteca Parlamentaria de la Asamblea
Nacional; Al Doctor Félix González; a los Ex presidentes de la Comisión de
Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Asamblea Nacional: Carlos
García y Francisco Jarquín; a los diputados: René Núñez Téllez, Edwin
Castro Rivera, Odel Íncer Barquero, Wilfredo Navarro y los diputados que
integran la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Raomir Manzanarez

Este compendio Jurídico recupera y facilita el acceso a frutos del trabajo en


Nicaragua orientado a superar el reto que significa para el derecho
contribuir a conformar las dimensiones económica, social y ambiental del
desarrollo sostenible en sus diferentes esferas temáticas e intersectoriales y
a canalizar el debate y los conflictos que se suscitan en su búsqueda.

El Informe “Nuestro Futuro Común” de la Comisión Mundial sobre Medio


Ambiente y Desarrollo, preparado para las Naciones Unidas (NU) en 1987,
enunció los alcances de desarrollo sostenible. En la Conferencia de NU
sobre Medio Ambiente y Desarrollo de Río en 1992, se asoció el desarrollo
con condiciones ambientales adecuadas y en el Principio 1 de su
Declaración se estableció que los seres humanos constituyen el centro de
las preocupaciones relacionadas con el desarrollo sostenible y tienen
derecho a una vida saludable y productiva en armonía con la naturaleza. La
Declaración Final de la Conferencia de las NU sobre Desarrollo Sostenible
de 2012, Río + 20, en el apartado I sobre Visión Común, incluye
reconocimiento a la importancia de que las personas influyan en sus vidas y
su futuro, participen en la adopción de decisiones y expresen sus
inquietudes; y resalta la necesidad de forjar alianzas de personas,
gobiernos, sociedad civil y sector privado.

En el apartado IV sobre Marco institucional para el desarrollo sostenible, se


resalta la importancia de fortalecer las tres dimensiones del desarrollo
sostenible: económica, social y ambiental.
En el apartado V. Marco para la acción y el seguimiento, en las esferas
temáticas se incluyen consideraciones específicas sobre: Erradicación de la
pobreza; Seguridad alimentaria y Nutrición y agricultura sostenible; Agua y
saneamiento; Energía; Turismo sostenible; Transporte sostenible; Ciudades
y asentamientos humanos sostenibles; Salud y población, entre otros.

Este compendio inicia con la Constitución Política que en su artículo 60


establece que los nicaragüenses tienen derecho de habitar en un ambiente
saludable y en su artículo 105 reconoce obligaciones del Estado en relación
con Prólogo La Constitución Política de Nicaragua puesta en vigencia en
1987, incorporó temas nunca antes contenidos como la Autonomía de la
Costa del Caribe, el tema ambiental, el derecho a la alimentación y otros.

En el Art. 102 del Capítulo I, señala nuestra Constitución “Los recursos


naturales son patrimonio nacional. La preservación del ambiente y la
conservación, desarrollo y explotación racional de los recursos naturales
corresponden al Estado; éste podrá celebrar contratos de explotación
racional de estos recursos, cuando el interés nacional lo requiera”.

Es clara la obligación que nuestra Constitución plantea tanto para el Estado


como para los ciudadanos y de allí se deriva la necesidad de elaborar,
discutir y aprobar leyes que permitan la preservación, la conservación y el
desarrollo de este patrimonio nacional que son los recursos naturales. Por
ello, es que hoy junto con los Jóvenes Ambientalistas y la Organización
Panamericana de la Salud, en el marco de las actividades de la Feria
Nacional de la Tierra, estamos presentando este compendio jurídico sobre
el medio ambiente y los recursos naturales aprobados por la Asamblea
Nacional. S

on un total de diecisiete leyes que han sido aprobadas en los últimos años
por la Asamblea Nacional que constituyen la base para la legislación
ambiental en Nicaragua, cuyo fundamento es la Constitución Política de la
República y los Tratados y Convenios Internacionales y Regionales,
suscritos y ratificados por el país en esta materia.
Estos instrumentos están orientados a la protección, conservación,
regulación y aprovechamiento sostenible de los recursos naturales de la
Nación. No está de más recordar que el hombre se ha encargado en el
último siglo de deteriorar su ambiente vital, al grado que hoy estamos
sufriendo los más inestables cambios climáticos de los últimos años y
estamos a punto de heredar, si no cambiamos nuestro comportamiento, un
sitio inseguro para Presentación servicios públicos básicos que incluyen
transporte, energía, agua e infraestructura vial, entre otros.

Las leyes aquí agrupadas comprenden diferentes aspectos de las


dimensiones del desarrollo, tales como educación y valores ambientales,
protección de los recursos naturales y del hábitat humano, delitos
ambientales, energía, minería, régimen jurídico del Gran Canal
Interoceánico y de creación de la autoridad correspondiente.

En conformidad con el Modelo de Salud Familiar y Comunitario adoptado


por el Ministerio de Salud, el cual da importancia a acciones participativas
de actores sociales para prevenir la enfermedad y proteger el ambiente y la
salud, el compendio incluye la Ley 722, Ley Especial de Comités de Agua
Potable y Saneamiento (CAPS), orientada a potenciar el trabajo de
organizaciones comunitarias, gobiernos locales e instituciones en beneficio
de ambientes saludables para habitantes con limitaciones de acceso o
calidad a estos servicios básicos. Reconocemos y felicitamos a la Asamblea
Nacional por la gestión participativa y aprobación de estas leyes, y al
Programa Feria Nacional de la Tierra de la Asociación Club de Jóvenes
Ambientalistas por abogar y divulgar tópicos relevantes para el ambiente, la
salud y el desarrollo sostenible. Reiteramos nuestro interés de acompañar y
apoyar su gestión ante estas u otras iniciativas, como los que ahora asumen
para avanzar hacia una gestión integral de los residuos.

Dr. Jorge Luis Prosperi


Representante de la OPS/OMS en Nicaragua
La Constitución Política de Nicaragua puesta en vigencia en 1987, incorporó
temas nunca antes contenidos como la Autonomía de la Costa del Caribe, el
tema ambiental, el derecho a la alimentación y otros. En el Art. 102 del
Capítulo I, señala nuestra Constitución “Los recursos naturales son
patrimonio nacional. La preservación del ambiente y la conservación,
desarrollo y explotación racional de los recursos naturales corresponden al
Estado; éste podrá celebrar contratos de explotación racional de estos
recursos, cuando el interés nacional lo requiera”. Es clara la obligación que
nuestra Constitución plantea tanto para el Estado como para los ciudadanos
y de allí se deriva la necesidad de elaborar, discutir y aprobar leyes que
permitan la preservación, la conservación y el desarrollo de este patrimonio
nacional que son los recursos naturales. Por ello, es que hoy junto con los
Jóvenes Ambientalistas y la Organización Panamericana de la Salud, en el
marco de las actividades de la Feria Nacional de la Tierra, estamos
presentando este compendio jurídico sobre el medio ambiente y los
recursos naturales aprobados por la Asamblea Nacional. Son un total de
diecisiete leyes que han sido aprobadas en los últimos años por la
Asamblea Nacional que constituyen la base para la legislación ambiental en
Nicaragua, cuyo fundamento es la Constitución Política de la República y
los Tratados y Convenios Internacionales y Regionales, suscritos y
ratificados por el país en esta materia. Estos instrumentos están orientados
a la protección, conservación, regulación y aprovechamiento sostenible de
los recursos naturales de la Nación. No está demás recordar que el hombre
se ha encargado en el último siglo de deteriorar su ambiente vital, al grado
que hoy estamos sufriendo los más inestables cambios climáticos de los
últimos años y estamos a punto de heredar, si no cambiamos nuestro
comportamiento, un sitio inseguro para el desarrollo de la vida a las futuras
generaciones. De allí la importancia de retomar los conocimientos
ancestrales de nuestros aborígenes que vivían en armonía con la
naturaleza, que respetaban sus leyes y que restituían lo que
lamentablemente el hombre podía destruir. El objetivo de esta publicación,
que no es un trabajo completo, es contribuir a la divulgación del marco legal
al que hemos hecho referencia, en el entendido que también hay muchas
leyes, que sin ser ambientales, contienen importantes componentes para el
mejoramiento y cuido del medio ambiente. Queda pues en sus manos este
esfuerzo inicial de recopilación de las leyes ambientales para que las
estudiemos, la divulguemos y que como ciudadanos velemos especialmente
por el cumplimiento.

Ing. René Núñez Téllez


Presidente
Asamble Nacional

Constitución Política de Nicaragua

Artículo 60.- Los nicaragüenses tienen derecho de habitar en un ambiente


saludable. Es obligación del Estado la preservación, conservación y rescate
del medio ambiente y de los recursos naturales.

Artículo 102.- Los recursos naturales son patrimonio nacional. La


preservación del ambiente y la conservación, desarrollo y explotación
racional de los recursos naturales corresponden al Estado; éste podrá
celebrar contratos de explotación racional de estos recursos, cuando el
interés nacional lo requiera.

Artículo 177.- Los municipios gozan de autonomía política administrativa y


financiera. La administración y gobiernos de los mismos corresponden a las
autoridades municipales. La autonomía no exime ni inhibe al Poder
Ejecutivo ni a los demás poderes del Estado, de sus obligaciones y
responsabilidades con los municipios. Se establece la obligatoriedad de
destinar un porcentaje suficiente del Presupuesto General de la República a
los municipios del país, el que se distribuirá priorizando a los municipios con
menos capacidad de ingresos.

El porcentaje y su distribución serán fijados por la ley. La autonomía es


regulada conforme la Ley de Municipios, que requerirá para su aprobación y
reforma de la votación favorable de la mayoría absoluta de los diputados.
Los gobiernos municipales tienen competencia en materia que incida en el
desarrollo socio-económico de su circunscripción.

En los contratos de explotación racional de los recursos naturales ubicados


en el municipio respectivo, el Estado solicitará y tomará en cuenta la opinión
de los gobiernos municipales antes de autorizarlos.

La Ley de Municipios deberá incluir, entre otros aspectos, las competencias


municipales, las relaciones con el gobierno central, con los pueblos
indígenas de todo el país y con todos los poderes del Estado, y la
coordinación interinstitucional.

Artículo 180.- Las comunidades de la Costa Atlántica tienen el derecho de


vivir y desarrollarse bajo las formas de organización social que
corresponden a sus tradiciones históricas y culturales.

El Estado garantiza a estas comunidades el disfrute de sus recursos


naturales, la efectividad de sus formas de propiedad comunal y la libre
elección de sus autoridades y diputados. Asimismo garantiza la
preservación de sus culturas y lenguas, religiones y costumbres.

Artículo 181.- El Estado organizará, por medio de una ley, el régimen de


autonomía para los pueblos indígenas y las comunidades étnicas de la
Costa Atlántica, la que deberá contener, entre otras normas: las
atribuciones de sus órganos de gobierno, su relación con el Poder Ejecutivo
y Legislativo y con los municipios, y el ejercicio de sus derechos. Dicha ley,
para su aprobación y reforma, requerirá de la mayoría establecida para la
reforma a las leyes constitucionales. Las concesiones y los contratos de
explotación racional de los recursos naturales que otorga el Estado en las
regiones autónomas de la Costa Atlántica, deberán contar con la aprobación
del Consejo Regional Autónomo correspondiente. Los miembros de los
consejos regionales autónomos de la Costa Atlántica podrán perder su
condición por las causas y los procedimientos que establezca la ley.
MARENA

El Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (MARENA) está a cargo


de coordinar y dirigir la política ambiental del estado y promover el
aprovechamiento sostenible de los recursos naturales de la Nación. Sus
principales atribuciones están dirigidas al control, normación y regulación de
la gestión ambiental y los recursos naturales. Su visión, misión y
organización están definidas de cara a transferir y compartir
responsabilidades con la sociedad civil y mejorar de forma continua su
gestión técnica, administrativa y financiera.

2) Convenio o acuerdos internacionales

Convenios Internacionales Medio Ambientales ratificados por Nicaragua,


que inciden en la protección de las Áreas Protegidas, la Biodiversidad y
Calidad Ambiental. Alcance Global

1. Convención para la Protección de la Flora, de la Fauna y de las Bellezas


Escénicas Naturales de los Países de América. a. Gaceta Diario Oficial No.
107 del 22 de Mayo de 1946.

2. Convenio Internacional para la Conservación del Atún del Atlántico y sus


dos Protocolos. Suscritos el 14 de Mayo de 1966.
a. Decreto Ejecutivo No. 62-2003, de Adhesión al Convenio Internacional
para la Conservación del Atún del Atlántico y sus dos Protocolos. Gaceta
Diario Oficial No. 177 del 19 de Septiembre de 2003.
b. Decreto Legislativo No. 3721, de Aprobación de la Adhesión al Convenio
Internacional para la Conservación del Atún del Atlántico y sus dos
Protocolos. Gaceta Diario Oficial No. 245 del 26 de Diciembre de 2003.
3. Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional
Especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas. Suscrito el 02 de Febrero
de 1971.
a. Decreto Ejecutivo No. 21-96, Adhesión a la Convención Relativa a los
Humedales de Importancia Internacional. Gaceta Diario Oficial No. 206 del
31 de Octubre de 1996.
b. Decreto Legislativo No. 1599, De Aprobación de la Adhesión a la
Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional. Gaceta
Diario Oficial No. 38 de 24 de Febrero de 1997.
c. Instrumento de Adhesión, Convención relativa a los Humedales de
Importancia Internacional. Gaceta Diario Oficial No. 114 del 18 de Junio de
1997.

4. Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas


de Fauna y Flora Silvestre (CITES). Aprobado del 12 de Febrero al 02 de
Marzo de 1973.

a. Decreto Ejecutivo No. 7. Ratificación de la Convención sobre el Comercio


Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre. Gaceta
Diario Oficial No. 164 del 23 de Julio de 1977.

5. Convenio Internacional para prevenir la Contaminación por los Buques,


1973, y su Protocolo de 1978, conocidos como MARPOL 73/78, sus
Protocolos y Enmiendas. Celebrados el 02 de Noviembre de 1973 y 17 de
Febrero de 1978 respectivamente.

b. Decreto Ejecutivo No. 68-99, De Adhesión al Convenio Internacional para


prevenir la Contaminación por los Buques, 1973, y su Protocolo de 1978,
conocidos como MARPOL 73/78, sus Protocolos y Enmiendas. Gaceta
Diario Oficial No. 109 del 09 de Junio de 1999.
c. Decreto Legislativo No. 2425, Aprobación de la Adhesión al Convenio
Internacional para prevenir la Contaminación por los Buques, 1973, y su
Protocolo de 1978, conocidos como MARPOL 73/78, sus Protocolos y
Enmiendas. Gaceta Diario Oficial No. 231 del 02 de Diciembre de 1999.
6. Convención para la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural.
Aceptación por Nicaragua el 17 de Diciembre de 1979.
a. Decreto Ejecutivo No. 448, Aprobación de la Convención para la
Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural. Gaceta Diario Oficial
No. 142 del 24 de Junio de 1980.

7. Convenio de Cartagena para la Protección y Desarrollo del Medio Marino


en la Región del Gran Caribe. Suscrito el 24 de Marzo de 1983.

a. Decreto Legislativo No. 3320. De Aprobación del Convenio de Cartagena


para la Protección y Desarrollo del Medio Marino en la Región del Gran
Caribe. Gaceta Diario Oficial No. 206 del 30 de Octubre del 2002.
b. Decreto Ejecutivo No. 6-2005, Ratificación del Convenio para la
Protección y el Desarrollo del Medio Marino en la Región del Gran Caribe y
su Protocolo Anexo. Gaceta Diario Oficial No. 23 del 02 de Febrero de 2005.

8. Protocolo de Cooperación para Combatir los Derrames de Hidrocarburos


en la Región del Gran Caribe. Suscrito el 24 de Marzo de 1983.
a. Decreto Legislativo No. 3319. De Aprobación del Protocolo de
Cooperación para combatir los Derrames de Hidrocarburos en la Región del
Gran Caribe. Gaceta Diario Oficial No. 206 del 30 de Octubre del 2002.

9. Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. Suscrito


por Nicaragua el 09 de Diciembre de 1984.
a. Decreto Legislativo No. 2374. Aprobación de la Convención de las
Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar y sus Anexos. Gaceta Diario
Oficial No. 204 del 26 de Octubre de 1999.
b. Decreto Ejecutivo No. 14-2000, Ratificación de la Convención de
Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar y sus Anexos. Gaceta Diario
Oficial No. 30 del 11 de Febrero de 2000.
c. Ratificación de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho
del Mar y sus Anexos. Gaceta Diario Oficial No. 145 del 2 de Agosto del
2000.
d. Declaración de Nicaragua al ratificar la Convención de Naciones Unidas
sobre el Derecho Del Mar de 1982. Gaceta Diario Oficial No. 145 del 02 de
Agosto del 2000.

10. Convenio de Viena para la protección de la Capa de Ozono. Aprobado


el 22 de Marzo de 1985.
a. Decreto Ejecutivo No. 11-93, Adhesión y Ratificación del Convenio de
Viena para la Protección de la Capa de Ozono. Gaceta Diario Oficial No. 22
del 01 de Febrero de 1993.

11. Protocolo de Montreal Relativo a las Sustancias agotadoras de la Capa


de Ozono. Aprobado el 16 de Septiembre de 1987.
a. Decreto Ejecutivo No. 11-93, Adhesión y Ratificación del Protocolo de
Montreal Relativo a las Sustancias agotadoras de la Capa de Ozono y sus
anexos. Gaceta Diario Oficial No. 22 del 01 de Febrero de 1993.
b. Decreto Legislativo No. 2303. Aprobación de Enmiendas de 1990 y 1992
al Protocolo de Montreal Relativo a las Sustancias Agotadoras de la Capa
de Ozono. Gaceta Diario Oficial No. 135 del 15 de Julio de 1999.
c. Decreto Ejecutivo No. 104-99, Ratificación de la aprobación de
Enmiendas de 1990 y 1992 al Protocolo de Montreal Relativo a las
Sustancias Agotadoras de la Capa de Ozono. Gaceta Diario Oficial No. 168
del 02 de Septiembre de 1999.
d. Instrumento de Ratificación de Enmiendas al Protocolo de Montreal.
Gaceta Diario Oficial No. 110 del 12 de Junio del 2000.

12. Convenio de Basilea sobre el control de los Movimientos


Transfronterizos de los Desechos Peligrosos y su Eliminación. Adoptado el
22 de Marzo de 1989.
a. Decreto Ejecutivo No. 20-96, de Adhesión al Convenio de Basilea sobre
el Control de los Movimientos Transfronterizos de los Desechos Peligrosos
y su Eliminación. Gaceta Diario Oficial No. 206 del 31 de Octubre de 1996.
b. Decreto Legislativo No. 1601. De Aprobación de Adhesión al Convenio de
Basilea sobre el Control de los Movimientos Transfronterizos de los
Desechos Peligrosos y su Eliminación. Gaceta Diario Oficial No. 38 del 24
de Febrero de 1997.
c. Instrumento de Adhesión, Convenio de Basilea sobre el control de los
Movimientos Transfronterizos de los Desechos Peligrosos y su eliminación.
Gaceta Diario Oficial No. 114 del 18 de Junio de 1997.

13. Convención Interamericana para facilitar la asistencia en caso de


desastres. Suscrita por Nicaragua el 21 de Abril de 1992.
a. Decreto Legislativo No. 1734, de Aprobación de la Convención
Interamericana para facilitar la asistencia en caso de desastres. Gaceta
Diario Oficial No. 203 del 24 de Octubre de 1997.
b. Decreto Ejecutivo No. 1-98, Ratificación de la Convención Interamericana
para facilitar la asistencia en caso de desastres. Gaceta Diario Oficial No. 25
del 06 de Febrero de 1998.

14. Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.


Suscrito el 09 de Mayo de 1992.
a. Decreto Legislativo No. 1010. De Aprobación de la Convención Marco de
las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Gaceta Diario Oficial No.
123 del 03 de Julio de 1995.

15. Convenio sobre la Diversidad Biológica. Suscrito el 13 de Junio de 1992.


a. Decreto Legislativo No. 1079. De Aprobación del Convenio sobre la
Diversidad Biológica. Gaceta Diario Oficial No. 215 del 15 de Noviembre de
1995.
16. Convenio Internacional sobre responsabilidad civil por daños causados
por la Contaminación de las Aguas del Mar por Hidrocarburos de 1969 y su
Protocolo de 1976.
a. Decreto Legislativo No. 1161, Aprobación de la Adhesión al Convenio
Internacional sobre responsabilidad civil por daños causados por la
Contaminación de las Aguas del Mar por Hidrocarburos de 1969 y su
Protocolo de 1976. Gaceta Diario Oficial No. 226 del 30 de Noviembre de
1995.
b. Decreto Ejecutivo No. 37-94, de Adhesión al Convenio Internacional
relativo a la Intervención en Alta Mar en casos de contaminación por
Hidrocarburos de 1969 y su Anexo. Gaceta Diario Oficial No. 174 del 20 de
Septiembre de 1994.

17. Convención de las Naciones Unidas de lucha contra la Desertificación


en los países afectados por Sequía Grave o Desertificación. a. Decreto
Legislativo No. 1795. De Aprobación de la Convención de las Naciones
Unidas de Lucha contra la Desertificación en los Países Afectados por
Sequía Grave o Desertificación, en particular en África. Gaceta Diario Oficial
No. 240 del 17 de Diciembre de 1997.

18. Acuerdo sobre el Programa Internacional para la Conservación de los


Delfines. Suscrito el 21 de Mayo de 1998.
a. Decreto Legislativo No. 2246. Aprobación del Acuerdo sobre el Programa
Internacional de Conservación de Delfines. Gaceta Diario Oficial No. 103 del
01 de Junio de 1999.
b. Decreto Ejecutivo No. 91-99, de Ratificación del Acuerdo sobre el
Programa Internacional de Conservación de Delfines. Gaceta Diario Oficial
No. 168 del 02 de Septiembre de 1999.

19. Convenio de Rotterdam sobre el procedimiento de Consentimiento


Fundamentado Previo aplicado a ciertos Plaguicidas y Productos Químicos
Peligrosos Objeto de Comercio Internacional. Aprobado el 10 de Septiembre
de 1998.
a. Decreto Ejecutivo No. 15-2008. De Adhesión al Convenio de Rotterdam
sobre el procedimiento de Consentimiento Fundamentado Previo aplicado a
ciertos Plaguicidas y Productos Químicos Peligrosos Objeto de Comercio
Internacional. Gaceta Diario Oficial No. 97 del 23 de Mayo del 2008.
b. Decreto Legislativo No. 54-30, Aprobación de la Adhesión al Convenio de
Rotterdam sobre el procedimiento de Consentimiento Fundamentado Previo
aplicado a ciertos Plaguicidas y Productos Químicos Peligrosos Objeto de
Comercio Internacional. Gaceta Diario Oficial No. 159 del 19 de Agosto de
2008.
20. Protocolo de Kioto de la Convención Marco de las Naciones Unidas
sobre el Cambio Climático. Suscrito el 11 de Diciembre de 1998.
a. Decreto Legislativo No. 2295. Aprobación al Protocolo de Kyoto de la
Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
Gaceta Diario Oficial No. 133 del 13 de Julio de 1999.
b. Decreto Ejecutivo No. 94-99, Ratificación del Protocolo de Kyoto de la
Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
Gaceta Diario Oficial No. 168 del 02 de Septiembre de 1999.

21. Protocolo de Cartagena sobre Seguridad de la Biotecnología del


Convenio de Diversidad Biológica. 24 de Mayo de 2000.
a. Decreto Legislativo No. 3248, Aprobación del Protocolo de Cartagena
sobre Seguridad de la Biotecnología del Convenio de Diversidad Biológica y
sus Anexos. Gaceta Diario Oficial No. 56 del 21 de Marzo de 2002.
b. Decreto Ejecutivo No. 63-2002, Ratificación del Protocolo de Cartagena
sobre Seguridad de la Biotecnología del Convenio de Diversidad Biológica y
sus Anexos. Gaceta Diario Oficial No. 121 del 28 de Junio de 2002.

22. Convenio Internacional para la Reglamentación de la Caza de la


Ballena. 02 de Diciembre de 1946. a. Decreto Ejecutivo No. 108-2002,
Adhesión al Convenio Internacional para la Reglamentación de la Caza de
la Ballena. Gaceta Diario Oficial No. 240 del 18 de Diciembre de 2002.
b. Decreto Legislativo No. 35-69, Aprobación de la Adhesión al Convenio
Internacional para la Reglamentación de la Caza de la Ballena. Gaceta
Diario Oficial No. 98 del 28 de Mayo de 2003.

23. Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicas Persistentes.


Suscrito el 23 de Mayo de 2001.
a. Decreto Legislativo No. 4346. Aprobación del Convenio de Estocolmo
sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPS) y sus Anexos. Gaceta
Diario Oficial No. 159 del 17 de Agosto del 2005.
b. Decreto Ejecutivo No. 64-2005, Ratificación del Convenio de Estocolmo
sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP´s). Gaceta Diario Oficial
No. 199 del 14 de Octubre de 2005.

Convenios y Acuerdos Regionales ratificados por Nicaragua, que


inciden en la protección de las Áreas Protegidas, la Biodiversidad y
Calidad Ambiental. Alcance Regional Centroamérica

1. Convenio Constitutivo de la Comisión Centroamericana de Ambiente y


Desarrollo, CCAD. Suscrito el 12 de Diciembre de 1989.
a. Decreto Legislativo No. 323. Apruébese Convenio Constitutivo de la
Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo. Gaceta Diario Oficial
No. 180 del 20 de Septiembre de 1990.

2. Convenio para la Conservación de la Biodiversidad y la Protección de


áreas silvestres prioritarias de América Central. 05 de Junio de 1992.
a. Decreto Legislativo No.1009. De Aprobación del Convenio para la
Conservación de la Biodiversidad y Protección de Áreas Silvestres
Prioritarias en América Central. Gaceta Diario Oficial No. No.123 del 03 de
Julio de 1995.

3. Acuerdo Regional sobre Movimiento Transfronterizo de Desechos


Peligrosos. Suscrito el 11 de Diciembre de 1992.
b. Decreto Legislativo No. 1373. Gaceta Diario Oficial No. 133 del 16 de
Julio de 1996. a. Decreto Ejecutivo No. 14-96, de Ratificación del Acuerdo
Regional sobre Movimiento Transfronterizo de Desechos Peligrosos. Gaceta
Diario Oficial No. 140 del 26 de Julio de 1996.

4. Convenio Centroamericano para la Restitución y el Retorno de Objetos


Arqueológicos, Históricos y Artísticos.
a. Decreto Legislativo No. 2079, Aprobación de la Convención
Centroamericana para la Protección del Patrimonio Cultural. Gaceta Diario
Oficial No. 216 del 12 de Noviembre de 1998.
b. Decreto Ejecutivo No. 36-99, Ratificación del Convenio Centroamericano
para la Restitución y el Retorno de Objetos Arqueológicos, Históricos y
Artísticos. Gaceta Diario Oficial No. 68 del 14 de Abril de 1999.

5. Convenio Regional sobre Cambio Climático. Aprobado por Nicaragua 29


de Octubre de 1993.

6. Convención Centroamericana para la Protección del Patrimonio Cultural.


Suscrito el 26 de Agosto de 1995.
a. Decreto Legislativo No. 2079, Aprobación de la Convención
Centroamericana para la Protección del Patrimonio Cultural. Gaceta Diario
Oficial No. 216 del 12 de Noviembre de 1998.

7. Convenio Regional para el Manejo y Conservación de los Ecosistemas


Naturales Forestales y el Desarrollo de Plantaciones Forestales. Suscrito
por Nicaragua el 29 de Octubre de 1993.
a. Decreto Legislativo No. 1910, de aprobación del Convenio Regional para
el Manejo y Conservación de los Ecosistemas Naturales Forestales y el
Desarrollo de Plantaciones Forestales. Gaceta Diario Oficial No. 136 del 22
de Julio de 1998.
b. Decreto Ejecutivo No. 39-99, Ratificación del Convenio Regional para el
Manejo y Conservación de los Ecosistemas Naturales Forestales y el
Desarrollo de Plantaciones Forestales. Gaceta Diario Oficial No. 68 del 14
de Abril de 1999.

8. Declaración Conjunta del Gobierno de Nicaragua y La Unión Mundial


Para La Naturaleza. Gaceta Diario Oficial No. 193 del 08 de Octubre de
1998.

9. Tratado de Libre Comercio Centroamérica - Estados Unidos de América -


República Dominicana (CAFTA- DR). 2006.
a. Decreto A.N. No. 4371. Aprobación del Tratado de Libre Comercio
Centroamérica - Estados Unidos de América - República Dominicana
(CAFTA- DR). Gaceta Diario Oficial No. 199 del 14 de Octubre del 2005.
3) LEY CREADORA DEL COLEGIO DE PERIODISTAS DE NICARAGUA

LEY No. 372, Aprobada el 6 de Marzo del 2001

Publicado en La Gaceta, Diario Oficial No. 70 del 16 de Abril del 2001

EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DE NICARAGUA

Hace saber al pueblo nicaragüense que:

LA ASAMBLEA NACIONAL DE LA REPÚBLICA DE NICARAGUA

En uso de sus facultades;

HA DICTADO

La siguiente:

LEY CREADORA DEL COLEGIO DE PERIODISTAS DE NICARAGUA.

CAPITULO I

DISPOSICIÓN ÚNICA

Artículo 1.- Créase el Colegio de Periodistas, con sede en la ciudad de


Managua, como una institución de duración indefinida, con personalidad
jurídica y patrimonio propios; capaz de contraer derechos, obligaciones y con el
objeto de regular el ejercicio del periodismo en Nicaragua.

Artículo 2.- El Colegio de Periodistas contará con filiales en cada


Departamento y Regiones Autónomas del país; que se regirán por la presente
Ley.

CAPITULO II

OBJETO Y FINALIDADES

Artículo 3.- El Colegio de Periodistas de Nicaragua tiene por objeto y fines:

a) Constituir y dirigir el registro de inscripción de periodistas y profesionales a


fines.

b) Promover la superación, tecnificación, protección y regulación de la


profesión periodística en Nicaragua.

c) Defender la libertad de expresión, información y comunicación que establece


la Constitución Política de Nicaragua, como derecho de todos los ciudadanos.

d) Representar y defender los intereses legítimos de sus integrantes ante


cualquier circunstancia que se relaciones con el ejercicio de la profesión.

e) Procurar que los periodistas cuenten con un mecanismo de asistencia y


prevención social.

f) Velar por el cumplimiento de las normas éticas que sean aprobadas para
preservar la realización y ejercicio de un periodismo honesto, responsable y
veraz.

g) Estimular y mantener el espíritu de unidad de los periodistas.

CAPITULO III
DEFINICIÓN PROFESIONAL

Artículo 4.- Se consideran periodistas los nicaragüenses y/o extranjeros


residentes que a la fecha de entrada en vigencia de esta Ley tengan por
ocupación principal, regular y retribuida el ejercicio del periodismo o
profesionales a fines en un medio de comunicación social, y los que en el futuro
cumplan al menos con uno de los siguientes requisitos.

a) Los que ostenten el título universitario de periodista, extendido por una


universidad nicaragüense legalmente autorizada o por una universidad
extranjera, cuando se hayan hecho las equivalencias de la carrera de
periodismo que tengan aprobado el tercer año y que el Colegio les extienda
una licencia transitoria, previo registro en el mismo.

b) Los estudiantes activos de la carrera de periodismo que tengan aprobado el


tercer año y que el Colegio les extienda una licenciatura transitoria, previo
registro en el mismo.

c) Los que al momento de entrar en vigencia esta Ley, estén ejerciendo o


hayan ejercido el periodismo durante cinco años, aunque no tengan el título, ni
sean egresados de una escuela de periodismo.

d) Los reporteros gráficos con al menos tres años de experiencia.

Artículo 5.- También se consideran periodistas, los ciudadanos extranjeros que


siendo profesionales de la información en su país de origen, que se acrediten
ante el Colegio de Periodistas y residan legalmente en Nicaragua, de acuerdo a
las Leyes migratorias nacionales siempre y cuando en los países de origen
correspondiente exista el principio de reciprocidad para con los periodistas
nicaragüenses.

CAPITULO IV

DEL EJERCICIO PROFESIONAL


Artículo 6.- Para ejercer el periodismo o profesiones a fines será necesario
contar con credencial del Colegio de Periodistas de Nicaragua, la que se
obtendrá mediante la presentación de los documentos demostrativos de las
circunstancias relacionadas en el arto. 4. de esta Ley.

Una vez que la documentación presentada se hubiese encontrado en regla, el


Colegio de Periodista de Nicaragua le entregará al interesado la credencial que
lo acredite como tal, dentro de los quince días hábiles subsiguientes a la fecha
de presentación de su solicitud. Caso contrario, le hará saber mediante
resolución motivada las razones por las que le niega este derecho.

Serán objeto de reglamentación estatutaria los cargos que dentro de las


empresas o medios de comunicación privados o estatales, deben desempeñar
periodistas acreditados por el Colegio de Periodistas de Nicaragua.

La infracción a esta reglamentación será considerada como ejercicio ilegal del


periodismo y se sancionará por la autoridad de policía de oficio o a solicitud de
parte, de conformidad con los artos. 29 y 31 del Reglamento de
Policía (vagancia).

Artículo 7.- No estará sujeta a esta Ley, las publicaciones y transmisiones de


colegios, universidades o instituciones de interés social, ni las contribuciones
esporádicas de particulares o las columnas y programas de caracteres
científicos, técnicos o literarios, artísticos, culturales y religiosas.

4) La sostenibilidad medioambiental

Sostenibilidad ambiental: La pandemia originada por el Covid-19 pudo haber


cubierto el mundo de miedo, de ansiedades alimentadas por impactantes
noticias, de tristeza por la lejanía con los seres que hoy el corazón añora más
que nunca.
Sin embargo, este virus también ha descubierto la bondad y generosidad de la
gente ocultas quizás por el trajín del día a día, ha ayudado a rescatar el lazo
familiar perdido por la vorágine del trabajo, pero también ocurrió algo
importante: esta cuarentena mundial ha permitido darle un respiro a la
naturaleza, a disfrutar de un aire menos sucio y ver un espacio libre de la
contaminación humana.

Es importante destacar este último enfoque y reflexionar cuán importante es


mantener una relación armoniosa con nuestro medioambiente, el espacio
vital en el que vivimos, sobre todo en estos tiempos que invitan a la
desesperanza.

¿Qué es la sostenibilidad ambiental?

Antes debemos preguntarnos ¿qué entendemos por medioambiente? Según el


Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) es
definido como el “conjunto de factores naturales, sociales, económicos y
culturales que rodean al hombre”. Conociendo este concepto, entonces
comencemos a responder a la pregunta ¿qué es la sostenibilidad ambiental?

La sostenibilidad ambiental es el equilibrio generado por la relación armónica


entre el ser humano y la naturaleza que lo rodea y de la cual forma parte, y que
esta relación permanezca a lo largo del tiempo, es decir, sea sustentable.
¿Qué implica la sostenibilidad ambiental?

Una de las razones que soportan la sostenibilidad ambiental es el fomento


de una cultura que hace posible que las personas tomen conciencia del
impacto ambiental de sus actividades, de los productos y servicios que ofrecen
las industrias y de las actividades cotidianas.

Implica promover el desarrollo económico y alcanzarlo, pero sin amenazar, ni


degradar el ambiente, es decir, el impacto en el ambiente debe ser mínimo. De
esta manera, no se comprometen los recursos naturales, tanto para las
generaciones presentes como para las del futuro.

¿Cuáles son las ventajas de la sostenibilidad ambiental?

Algunas ventajas de la sostenibilidad ambiental, según Revitaliza Consultores,


a nivel de una organización empresarial están relacionadas con:

 Adherirse a compromisos de sostenibilidad ambiental de las empresas


genera racionalidad en la gestión.
 Fomenta la participación y confianza de todos los que integran la
organización.
 Las empresas que aplican medidas de sostenibilidad ambiental generan
imagen de marca y prestigio ecoamigable.
 Al cumplir las normativas medioambientales, se logra evitar incurrir en
delitos, sanciones, multas o demandas.
 Ayuda a las empresas a mejorar el posicionamiento respecto a posibles
licitaciones, subvenciones y recursos financieros.

¿Qué se busca con la sostenibilidad ambiental?

Como hemos mencionado, la sostenibilidad ambiental busca proteger el


medioambiente donde se desarrolla el hombre y minimizar en el mayor grado
posible el efecto o impacto de las actividades humanas en él. Pone especial
interés en:

Cuidado del agua: se debe hacer un consumo razonable del agua. Frente a la
escasez, el ahorro debe ser considerado como mandatorio en la conducta
humana e industrial.

Consumo de energía: el uso de nuevas fuentes de energía que tengan menos


incidencia en el ambiente, (energía eólica y solar). Es importante fomentar una
cultura de ahorro de energía.

Consumo de combustible: minimizar el consumo de combustible, promover el


uso compartido de vehículos, de bicicletas, etc.

Reciclaje: colocar contenedores de reciclaje en lugares de fácil acceso y con


una clara señalización del material que debe depositarse en cada uno de ellos.
Es importante aprovechar los residuos generados para darles un nuevo uso.
Fundación Wiese y la sostenibilidad ambiental

La Fundación Wiese cuenta con el Programa del Fondo Emprendedor,


plataforma creada por la para impulsar la innovación social en el Perú.

El trabajo de Llama Pack, una de las empresas sociales que forman parte del
primer portafolio del Fondo Emprendedor, está relacionado directamente con
la sostenibilidad ambiental. Es una empresa social que surge para incluir a los
comuneros del Valle Sagrado de los Incas (Cusco) en la dinámica económica
del turismo local, mediante el uso de las llamas como animales de carga en los
paseos ofrecidos por las agencias de viajes. Esta propuesta tiene como valor
agregado la protección del ecosistema andino. Si deseas conocer más de los
emprendimientos sociales te invitamos a seguir este
enlace: http://bit.ly/FondoEmpren
Bibliografía

1.file:///C:/Users/DirectorComSocial/Downloads/Convenios%20y
%20Acuerdos%20Internacionales%20Nicaragua.pdf

2.http://legislacion.asamblea.gob.ni/Normaweb.nsf/($All)/
DAE623A61D096888062570A100581085?OpenDocument

3.https://www.fundacionwiese.org/blog/es/que-es-la-sostenibilidad-
ambiental-y-como-impacta-en-nuestras-vidas/

UNIDAD III: LA COBERTURA MEDIO AMBIENTAL

1) Política Editorial Ambiental

La política ambiental se refiere a las acciones que el gobierno toma para


cuidar y proteger el medio ambiente, como resultado de la interacción de los
intereses políticos económicos y sociales, para conservar las bases
naturales de la vida humana y conseguir un desarrollo sostenible.

Política editorial ambiental de los medios

En la tarea de transformación ambiental, la educación y los medios de


comunicación, como en muchos otros campos, es clave. Por eso, toda
política pública sub-sectorial (agua, fauna, flora, aire, cambio climático, etc)
debe incluir forzosamente un componente con el papel de los medios de
comunicación como instrumento de acción ambiental.

Para lo cual nuestras sugerencias en el propósito de hacer más eficiente el


papel de los medios de comunicación en la gestión y política pública
ambiental, son: focalizar la conciencia ambiental, antes que nada, en las
familias; hacer énfasis de civilidad ambiental, en las escuelas y colegios de
primaria sin descuidar el manejo de conocimiento científico en el
bachillerato; especializar el periodismo ambiental (se necesita más
conocimiento, pero sobre todo mejor manejo de pedagogía); visibilizar las
tesis y monografías sobre las problemáticas ambientales.

La contaminación por ruido es un flagelo de difícil control. Ante esto se han


conformado movimientos que propugnan por la toma de conciencia con
respecto al abuso indiscriminado de la naturaleza, pero en el caso de la
contaminación acústica no se ha tenido esa suerte, porque al ruido no se le
da importancia.

En Nicaragua se necesita motivación y esclarecimiento acerca de los daños


que causa la contaminación acústica, para que la población y las
instituciones tomen conciencia del problema. En el caso de otros países, la
lucha es para que se cumplan las leyes y se realice un mejor trabajo en
defensa del medio ambiente.

Nuestro objetivo es motivar y apoyar a los medios de comunicación en su


labor a favor del medio ambiente y por un desarrollo sostenible,
específicamente, por un desarrollo acústicamente sostenible.

El propósito de trabajar en colaboración, desde la perspectiva de tres países


(Argentina, España y Nicaragua), es aprovechar la experiencia en la lucha
contra el ruido, para apoyar iniciativas en países con menor desarrollo.

En este trabajo analizamos conceptos de desarrollo sostenible y su


adecuación al desarrollo acústicamente sostenible; definiciones de ética y
deontología, aplicadas al periodismo.

Abordamos algunos conceptos de ruido y efectos de éste en la población.


Finalmente planteamos propuestas para el trabajo de los medios de
comunicación, las cuales tienen como fundamento el análisis de la realidad
en lo que respecta a la contaminación acústica, análisis de publicaciones
con temática alusiva, consultas a periodistas y nuestra experiencia en el
campo de la acústica y la comunicación.

El periodismo y los medios de comunicación

El periodismo se ha considerado tradicionalmente como el “cuarto poder”, a


la par de los tres poderes institucionales clásicos de una nación (Ejecutivo,
Legislativo y Judicial).5

Cuando se ejerce sin presiones, con libertad de prensa y económica, y


autorregulado por normas éticas y morales, constituye un agente moderador
y un instrumento de control social de primer orden, capaz de investigar y
denunciar acciones inapropiadas (corrupción, incompetencia, etc.) de los
poderes constituidos y otros estamentos sociales. Pero también ayuda a la
difusión de ideas, preceptos e iniciativas, genera o apoya propuestas y las
somete a la opinión popular; moviliza, educa, entretiene.

Es interesante analizar el papel de la información y la comunicación en las


constituciones. Según el Art.66 de la Constitución Política de Nicaragua,
“Los nicaragüenses tienen derecho a la información veraz. Este derecho
comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas, ya
sea de manera oral, por escrito, gráficamente o por cualquier otro
procedimiento de su elección” [12].

El Art.68 va más allá, se refiriere a los medios de comunicación, a los que


se asigna gran responsabilidad en el desarrollo: “Los medios de
comunicación, dentro de su función social, deberán contribuir al desarrollo
de la nación. /Los nicaragüenses tienen derecho de acceso a los medios de
comunicación social (...)”. La censura previa está especialmente prohibida,
lo cual crea las condiciones para el disenso, la crítica.

La Constitución de la Nación Argentina [13] no es tan explícita en cuanto a


la importancia de los medios de comunicación. La información veraz queda
limitada a la que se debe recibir en la relación de consumo: “Los
consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen derecho, en la
relación de consumo (...); a una información adecuada y veraz (...)”. (Art.42).
5

En Nicaragua se reconoce constitucionalmente el Poder Electoral [12],


artículo 7). Sin embargo, podría considerarse que es de actuación periódica
y restringida en el tiempo y en cuanto a su cometido. 9

El Art.41 requiere que las autoridades provean información ambiental:


“Todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado,
apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas
satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las
generaciones futuras; (...) Las autoridades proveerán a la protección de este
derecho, (...) y a la información y educación ambientales. (...).” La única
alusión explícita al periodismo está en el Art.43, en referencia a la
inviolabilidad del secreto de las fuentes de información periodística.

Dado que el Art.75, inciso 22 da jerarquía constitucional, entre otros, a la


Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Art.19 de dicha
Declaración pasa a tener tal entidad: “Todo individuo tiene derecho a la
libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser
molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones
y opiniones, y el de difundirlas sin limitación de fronteras, por cualquier
medio de expresión.” La Constitución Española [14], en el Art.20 protege los
siguientes derechos: “A expresar y difundir libremente los pensamientos,
ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de
reproducción. / (...) / A comunicar o recibir libremente información veraz por
cualquier medio de difusión. (..). / El ejercicio de estos derechos no puede
restringirse mediante ningún tipo de censura previa (...).” La comparación de
estos textos muestra la importancia de la institución periodística. Aunque en
todos los casos se prohíbe la censura, ello no evita la autocensura,
provocada, por ejemplo, por temor a represalias económicas, incluidas las
del propio Estado. VI.
Los medios de comunicación frente al ruido Los medios de comunicación
tienen un importante rol en la prevención de la contaminación del ambiente
en general. Es necesario profundizar esta acción al caso particular de la
contaminación acústica, lo cual puede lograrse por medio de las siguientes
acciones:

1. Educación asistemática. Ésta incluye:

a. Publicación de artículos de información general sobre cuestiones


relacionadas;

b. Entrevistas a especialistas o personas vinculadas de una u otra forma


con el control del ruido, como oficinas de control, gestión o política
ambiental, políticos y legisladores, vecinos, médicos, investigadores;

c. Artículos de opinión;

d. Artículos informativos sobre cuestiones técnicas: medición del ruido,


efectos, formas de prevención, legislación existente, cómo se ataca el
problema en otros países;

e. Relacionar la contaminación acústica con otros tipos de contaminación


ambiental;

f. Promover concursos infantiles y juveniles, relacionados con la prevención


del ruido. 10

2. Denuncia. Por ejemplo, señalar la inexistencia de normativas o


legislación (Nicaragua), o la falta de aplicación de la existente (Argentina), o
actos de corrupción relacionados con el control (o la falta de control);
publicar cartas de lectores en las que se expongan problemas acústicos;
publicar editoriales sobre el tema.
3. Política positiva. Cuando los mismos medios pueden constituir agentes
contaminadores acústicos (medios audiovisuales: radio o TV), adoptar y
mantener políticas internas activas, transparentes, documentadas, públicas
y auditadas, para evitar contaminar acústicamente.

4. Promoción de Investigación. Encomendar investigaciones científicas o


periodísticas en colaboración con universidades, entes municipales de
control, etc. Por ejemplo, estudios estadísticos sobre cómo valora la
población el ruido al que está sometida.

Es previsible que un medio de comunicación encuentre dificultades para


implementar estas acciones. Reconocerlas es un paso importante para
contrarrestarlas. En primer lugar puede haber carencias de infraestructura:
oficinas de redacción ruidosas, con teléfonos fijos y celulares sonando
permanentemente, impresoras, conversaciones, equipos de aire
acondicionado ruidosos (particularmente perturbadores en salas de
locución, estudios de radio y televisión y ambientes para entrevistas),
equipos de audio obsoletos o ruidosos, etc.

Estas condiciones de trabajo insensibilizan gradualmente al personal con


respecto a esta problemática, creando la sensación de que es algo
inevitable, lo cual se traslada a la falta de tratamiento de problemas
similares en la sociedad.

En segundo lugar puede haber falta de hábito o de condiciones para recurrir


a las fuentes primarias de información, inclusive las de dominio público
(como Internet, bibliotecas, etc.). Mucha información se encuentra en
idiomas extranjeros, y esto, a veces, impone restricciones.

Por otra parte, la dinámica mediática requiere tiempos de reacción muy


cortos frente a una información cambiante y rápidamente obsolescente,
tiempos en apariencia incompatibles con la profundización de los temas.
Esto a veces origina artículos con errores conceptuales [15] que deben
evitarse. En cuestiones técnicas, como el ruido, no basta la intuición o las
nociones populares.

El periodista debe evitar publicar material sin fundamento. En tercer lugar, la


comunicación de temas técnicos, precisos y accesibles para la población,
requiere técnicas apropiadas.

Cuando es el propio especialista quien escribe, su producción debería ser


supervisada por un editor, para evitar desajustes estilísticos. Por último, los
medios suelen carecer de políticas sobre la contaminación acústica. Estas
políticas deberían cubrir los diversos aspectos de la labor editorial o medial.
Una emisora que cubre frecuentemente el tema, pero a la vez contamina
con ruido de fondo sus programas (¡incluidos los referidos a la
contaminación acústica!) está enviando un mensaje ambiguo.

Está disgregando el concepto de la praxis: “haz lo que digo y no lo que


hago”. Las políticas deberían ser explícitas y, como en los sistemas de
calidad, documentadas y conocidas por el personal [16].

Debería reconocerse el papel como medio de educación social, y no sólo de


comunicación. Se suelen considerar a los medios como formadores de 11
opiniones; también son formadores de conciencia. En este contexto, las
políticas adoptadas deberían contemplar un espacio específico (un
porcentaje del total) y estable destinado al tema, distribuido en editoriales,
información general, artículos de opinión, artículos técnicos.

2) La agenda de medios nacionales y la agenda para cobertura


ambiental

Las y los comunicadores se especializan en diversos temas desde sociales,


políticos, farándula, hasta los ambientales y con una visión en la
agroecología.
Hacer periodismo ambiental conlleva a que estos profesionales se
especialicen desde una visión integral y adquieran nuevos conocimientos
que los hagan elaborar materiales informativos que ayuden a la población a
comprender las aristas del mundo ambiental.

Periodismo ambiental

SIMAS
En la guía “Qué es y cómo hacer periodismo ambiental”, escrita por la
periodista estadounidense Barbara Fraser, se presentan definiciones y se
establece de forma sencilla un manual que puede ayudar a los
comunicadores interesados en mejorar sus reportes desde un enfoque
ambientalista.

La guía parte de la reflexión de la periodista a partir del taller de Periodismo


Ambiental dictado por Comunicaciones Aliadas, en el 2015, a 16 periodistas
egresados de diferentes universidades peruanas.

En el manual se plantean aspectos básicos que los periodistas deben tomar


en cuenta cuando realizan un reportaje con rigurosidad desde los diversos
temas ambientales que aborden. Fraser señala que el “trabajo como
periodista ambiental es conectar la búsqueda de respuestas de un científico
con las preguntas que se hacen tus lectores”. Y aconseja “no intimidarse
ante los artículos científicos”, y consular y pedir apoyo a un especialista.

La periodista explica que en la guía se propone la construcción de


reportajes con rigurosidad, ética y enfoques atractivos para la gente que
desea hacer y conocer sobre temas ambientales.

Finalmente la Fraser señala que “hay muchas razones diferentes por las
cuales nos hacemos periodistas ambientales, pero nuestra misión es muy
similar: contar historias que ayuden a las personas a entender mejor cómo
es que los seres humanos nos relacionamos con el mundo natural que nos
rodea, la forma en que este afecta nuestras vidas y el impacto que tenemos
en él. Como periodistas ambientales, tenemos la oportunidad de plantear
temas que otras personas no tienen en cuenta, o preguntar sobre prácticas
que son muy buenas (y pueden servir de ejemplo) o muy malas (y deben
ser cambiadas)”.

Mayor especialización

Raúl Martínez, comunicador ambiental de Radio Camoapa, señala que en


Nicaragua el periodismo está en deuda con el medioambiente por la falta de
rigurosidad con que se abordan los pocos temas que se publican en medios
de comunicación tradicionales.

La ingeniera Lucia Sequeira coordinadora del Proyecto Alianzas reconoce


como positivo el esfuerzo que se realiza en Camoapa y en otros municipios
del país para publicar temas ambientales, pero también considera que en
términos generales el periodismo en Nicaragua le falta trabajar más temas
ambientales que sean de interés para la población.

El productor Álvaro García dijo que en el país lo que hay es divulgación y


vocería institucional, pues son pocos los periodistas que se arriesgan a
hacer periodismo investigativo en general y más cuando se trata de temas
específicos como los ambientales.

El Servicio de Información Mesoamericano sobre Agricultura Sostenible


(SIMAS) ha elaborado diversos materiales que están a disposición de
periodistas, en particular de aquellos que habitan comunidades rurales en
donde la comunicación es un tema importante para la población.

Desde la primera parte de la guía para comunicadores rurales:


Comunicación de ida y vuelta para el desarrollo local, se plantea como base
el Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: “Todo
individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho
incluye el no ser molestado a causas de sus opiniones, el de investigar y
recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de
fronteras, por cualquier medio de expresión”.
La guía es un primer comienzo para darle el poder de la palabra a las
comunidades en donde la comunicación de ida y vuelta es clave para su
desarrollo. En la segunda parte, se brinda una explicación de los medios de
comunicación tradicionales y su efecto en la sociedad, mientras que la
tercera parte da ejemplos prácticas de cómo hacer comunicación rural y
estrategias de comunicación para ayudar en el desarrollo de las
comunidades.

3) El periodista ambiental digital y las TIC

Tecnología de la Información y Comunicación Ambiental

Los avances tecnológicos potenciados por la aparición de Internet también


están contribuyendo a los problemas ambientales. La contaminación del
aire, la lluvia ácida, el calentamiento global y la reducción de fuentes
naturales también son el resultado de las tecnologías en línea. Por lo tanto,
han surgido nociones como "sitios web ecológicos" para ayudar a abordar
este problema. Los “sitios web verdes” están asociados con las políticas
favorables al clima y tienen como objetivo mejorar el hábitat natural de la
Tierra. Las fuentes renovables, el uso del color negro y lo más destacado de
las noticias ambientales son algunas de las formas más fáciles y
económicas de contribuir positivamente a los problemas climáticos. 7 El
término antes mencionado está bajo el paraguas de Green Computing, que
tiene como objetivo limitar la huella de carbono, el consumo de energía y
beneficiar el rendimiento informático. 7 8

Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) son el conjunto


de herramientas que procesan, administran y comparten la información a
través de soportes tecnológicos, por ejemplo, las computadoras, teléfonos
móviles, tabletas, televisores y radios, computadoras, celulares, tabletas,
televisores, son reproductores de audio y video. quizá esta oración no sea
necesaria. En nuestras sociedades, las TIC están transformando la
educación, cambiando la forma de enseñar y la manera de aprender. A
diferencia de épocas anteriores, las tecnologías permiten hoy en día la
comunicación instantánea a través de enormes distancias geográficas,
superando las fronteras y creando una interconexión mundial que es un
componente de la globalización. Las TIC ofrecen a las personas, más allá
de su religión, color, raza, sexo o ubicación geográfica, una diversidad de
recursos para aprender, tales como materiales didácticos, foros de
discusión, chat, mensajerías, clases en línea o videoconferencias. Es decir,
las TIC pueden complementar, enriquecer y transformar la educación. Para
conocer y apropiarnos del uso de las TIC, en esta guía, se aborda de
manera fácil y práctica, el uso de las TIC, sus potencialidades y
oportunidades para mejorar la comunicación.

Bibliografía.
1. https://medioambiente.uexternado.edu.co/el-uso-de-medios-de-
comunicacion-como-accion-para-el-desarrollo-de-la-politica-publica-
ambiental/
2. https://core.ac.uk/download/pdf/35254707.pdf

3. https://www.simas.org.ni/noticias/1685/promover-mas-la-agenda-
periodistica-ambiental/

4. file:///C:/Users/DirectorComSocial/Downloads/Guia_TIC_1.pdf

UNIDAD IV: RESPONSABILIDAD SOCIAL AMBIENTAL; DESARROLLO


SOSTENIBLE

1) La disminución de la biodiversidad

Causas de la pérdida de biodiversidad


Las causas y las consecuencias de la pérdida de la biodiversidad son uno de
los grandes y graves retos a los que se enfrenta el planeta en la actualidad.
Aunque las razones son variadas, la actividad humana es una de los
principales factores que influye en la extinción de las especies. Conocer qué es
y cuáles son las causas de la pérdida de biodiversidad es fundamental para
comenzar a revertir la situación y asegurar el futuro de la vida en la Tierra.

Antes de conocer cuáles son las causas de la pérdida de biodiversidad, es


importante saber qué es y cuál es su importancia. La biodiversidad es la
variedad de seres vivos que habitan el planeta. El término engloba tanto a
organismos individuales como a aquellos ecosistemas que conforman los seres
vivos como bosques, selvas, ríos, mares, océanos… ¿Te imaginas cuáles
pueden ser las consecuencias de la pérdida de la biodiversidad, un bien tan
preciado para la vida en la Tierra?

A continuación analizaremos cuáles son los primeros motivos de la extinción de


especies y qué efectos irreversibles pueden producirse como consecuencia de
este fenómeno.

¿Cuáles son las causas de la pérdida de la biodiversidad?

La importancia de la biodiversidad se encuentra en sí misma, es decir, en el


valor natural que posee la vida de todos los seres vivos y los ecosistemas que
crean. Genera un equilibrio entre las especies que hace que el planeta sea
diverso y rico en ellas.

Pero, además, supone un bien de enorme valor para el ser humano. Su


cuidado y conservación ayuda a la supervivencia de los humanos ya que de ahí
obtienen alimentos, agua, materias primas y recursos naturales esenciales.

 
 

Causas de la pérdida de biodiversidad

Conocer las causas de la pérdida de biodiversidad es relevante para tener en


cuenta el grave problema que suponen y cómo se han acelerado en las últimas
décadas. El número de especies en peligro de extinción es cada vez más
elevado, tanto en el medio terrestre como en el acuático.

Las causas de la extinción de especies y pérdida de la biodiversidad pueden


resumirse en los siguientes factores:

 Sobre-explotación del medio natural. El uso descontrolado de los


recursos naturales. El ser humano extrae estos recursos por encima de
la capacidad natural de un ecosistema determinado para regenerarse.

 Pérdida de los hábitats de las especies. La destrucción o modificación


de los hábitats naturales para suplir las necesidades humanas ponen en
peligro a las especies que los habitan. La deforestación, la
transformación de selvas y bosques o el drenaje de humedales son
algunas de las prácticas más extendidas en cuanto a la reducción parcial
o completa de un ecosistema.

 Contaminación del medio ambiente. La presencia de agentes


contaminantes en el agua, en el aire y en el suelo produce una
alteración nociva en todos los ecosistemas. Aunque la contaminación
tiene causas naturales, las más graves proceden de la actividad
humana. La contaminación es una de las causas de pérdida de
biodiversidad en mayor extensión.

 Introducción de especies exóticas invasoras. Las especies invasoras


son aquellas que producen cambios en los ecosistemas a los que llegan
al desplazar a las especies que se encontraban allí de manera natural.
Las especies que deben marcharse pueden llegar a morir y extinguirse.
La introducción de estas especies puede ser voluntaria o involuntaria, y
ha crecido en los últimos años.

 Efectos del cambio climático. Según avanzan los efectos del cambio


climático, puede convertirse en la causa principal de esta pérdida de
biodiversidad. Las alteraciones que está produciendo en todos los
ecosistemas del planeta ocasionan que muchas especies no puedan
sobrevivir al no poder adaptarse a las nuevas condiciones climáticas.
Esto provoca un incremento de las especies amenazadas.

 
Consecuencias de la pérdida de biodiversidad

Si no frenamos las causas de la pérdida de biodiversidad tendrán un efecto


irreversible y pondrán en peligro la supervivencia del resto de especies en la
Tierra. Entre las consecuencias de la pérdida de biodiversidad se puede
destacar:

 Extinción de especies. La alteración y destrucción de


ecosistemas hace que muchas especies estén en peligro de extinción.
Esto puede producir un efecto dominó, dado que la pérdida de unas
especies puede conducir a la de otras, así como influir en el ser humano.

 Aparición y extensión de plagas. Los desequilibrios en los


ecosistemas pueden provocar la proliferación de plagas, que conducen a
la destrucción de áreas vegetales.

 Amenaza a la supervivencia del ser humano. La desaparición de la


biodiversidad tiene una consecuencia directa en la vida del ser humano,
ya que pone en peligro su alimentación, salud y bienestar.

 Aumento de las emisiones de CO2. La biodiversidad del planeta juega


un papel muy importante para el equilibrio de los ecosistemas
terrestres y acuáticos, pero también para el aire y la atmósfera. La
capacidad de los bosques y los océanos para absorber CO2 disminuye
si sus ecosistemas se ven afectados y su biodiversidad, reducida.

 Sequía. La pérdida de bosques tiene, entre otras, la consecuencia de


que los árboles no pueden filtrar agua a los acuíferos, reduciendo el
agua para consumo humano y creando zonas cada vez más áridas
debido a la erosión del suelo.

 Pérdida del patrimonio genético que nos puede ayudar a comprender


mejor la naturaleza.

Como se ha podido observar, la biodiversidad desempeña un papel


fundamental en el mantenimiento de la vida en la Tierra. En nuestras manos
está frenar las causas y evitar las consecuencias de la pérdida de la
biodiversidad.
a) El Periodismo Ambiental

1) Primeros pasos del periodismo ambiental

Aunque la expresión periodismo ambiental empezó a perfilarse en las décadas


de 1970 y 1980 (Fernández, 2001), desde hace más de tres siglos la prensa ha
demostrado tener buenos conocimientos de algunos problemas relacionados
con la degradación de la naturaleza, de cómo éstos afectan a la vida cotidiana
y a la salud de las personas y de que, al menos en parte, tienen solución.
Puede afirmarse, por tanto, que aunque apenas existían periodistas dedicados
en exclusiva a ello y ni siquiera se hacía uso de ese nombre, el periodismo
ambiental ya estaba ahí.

Una de sus primeras muestras claras en España data de 1888, fecha en que la
prensa se hizo eco de una manifestación de carácter ecologista producida en la
localidad onubense de Río Tinto, cuyos agricultores protestaban por la «lluvia
que quema las cosechas» y que en realidad era lluvia ácida provocada por la
quema del mineral de esa zona. A comienzos del siglo XX ya aparecían
noticias sobre los primeros parques nacionales. La publicación en 1902 de un
debate sobre la Ley de Caza en El Heraldo de Madrid o el hecho de que
España fuera en 1905 el primer país del mundo donde se celebraba la fiesta
del árbol, son buenos ejemplos de un incipiente periodismo ambiental.
A nivel mundial, el verdadero inicio del tratamiento de la problemática ecológica
dentro de los espacios mediáticos suele situarse en la década de 1960 ( 2) en
Estados Unidos. La publicación del libro Silent Spring ( 3) de Rachel Carson, la
celebración por primera vez del Día de la Tierra el 22 de abril de 1970, y el
accidente de un petrolero en el canal de Santa Bárbara en California, que
produjo la contaminación de 2.000 km² de litoral, fueron para muchos los
causantes de que los medios de comunicación comenzasen a prestar más
atención a las cuestiones ambientales (Martínez Valdés, 2003). Pero aun así, a
comienzos de los años 70 la mayoría de los responsables de medios de
comunicación de todo el planeta todavía no estaba familiarizada con la
temática ambiental y sólo algunos medios contaban con periodistas
especializados en ella.
En España, durante los años de la transición un grupo de periodistas
procedentes de distintos medios de comunicación, todos ellos dedicados a la
información ambiental, llegó a celebrar una reunión. Su intención era constituir
una agrupación bajo el nombre de Periodistas Ecologistas; una iniciativa que
nunca llegó a ver la luz, pero que constituye una de las primeras muestras de
interés por parte de unos profesionales cuyas reivindicaciones ambientales
solían ir acompañadas de motivaciones ideológicas.

La Cumbre de Rio de Janeiro de 1992, que contó con la presencia de más de


120 líderes internacionales, fue considerada la puesta de largo del periodismo
ambiental internacional. Sobre ella opinó el periodista español Arturo Larena
(2002): «No nos engañemos. Los medios como empresas periodísticas tienen
todavía escaso interés en estos temas y uno de los aspectos positivos de Rio
fue que consiguió elevar el grado de concienciación de la opinión pública, que
muchos gobiernos hayan reconocido formalmente acciones que los grupos
conservacionistas defienden desde hace tiempo y que los medios dejen de ver
esta información como un bicho raro. Aunque puede resultar pretencioso, se
puede asegurar que ‘depende de los medios, en especial de la televisión, la
salvación de la biodiversidad de la tierra’».

Los años posteriores a la Cumbre de Rio coincidieron con un periodo de


decadencia derivado, en parte, de una nueva política empresarial de los
medios que primaba la eficacia y la rentabilidad frente a la especialización
(Fernández, 2001); aunque ciertos eventos dispararon de nuevo la atención
pública a la temática en las siguientes décadas siguiendo un patrón de
ascensos y descensos en todo el mundo. Al parecer estos ciclos de atención se
dan en función del grado de espectacularidad del hecho; es decir, «parece que
algo espectacular tiene que ocurrir para concebir al medio ambiente como un
tema saliente para los medios» (Hester y Gonzebach, 1995).
La cobertura ambiental todavía es insuficiente

Aunque las informaciones ambientales cuentan ahora con más prestigio que
nunca –en los años 90 ganaron diez premios Pulitzer, mientras que fueron
nueve entre los años 60, 70 y 80– y la cobertura de cuestiones
medioambientales por parte de los medios ( 4) ha aumentado claramente en
las últimas décadas, ésta todavía es insuficiente. Según se desprende de
la Segunda Encuesta Nacional de la Percepción Social de la Ciencia y la
Tecnología (TNSdemoscopia, 2004), presentada en noviembre de 2004, el
porcentaje de información ambiental que recibimos de los medios en España
(2,99 sobre 5) es inferior a nuestro grado de interés informativo por el medio
ambiente (3,48 sobre 5).
Los medios de comunicación se rigen por unos procedimientos rutinarios y su
forma de seleccionar la información está muy estandarizada. Con frecuencia
nos hacen llegar informaciones sobre catástrofes ambientales, incendios
forestales o accidentes químicos, y uno se pregunta por qué se escogen esos
hechos restringidos dentro de la gran gama de temas ecológicos cuando sólo
constituyen una pequeña porción de lo que los ambientalistas denominarían
problemas o temas ambientales.

Para los reporteros de prensa el factor dramático de los sucesos supone contar
con una noticia atractiva, mientras que la televisión se guía más por factores
como la disponibilidad de imágenes visuales que por el interés científico, lo cual
implica que la mayoría de las noticias ambientales se conciba de manera
sensacionalista. Todo ello refuerza la tendencia del público a subestimar los
riesgos de carácter crónico de males como el efecto invernadero o el deterioro
de la capa de ozono –a cuya solución, por otra parte, creen poder aportar
poco– y a fijar su atención en los sucesos repentinos o llamativos, sin reparar
en la calidad de la información que se les está ofreciendo.

No obstante, la espectacularidad de determinados sucesos no siempre es


negativa. Hechos como el desastre del petrolero Prestige hicieron saltar las
alarmas sobre la destrucción de la naturaleza y, gracias a la enorme cobertura
que de ellos hicieron los medios de comunicación, se acrecentó la
sensibilización de una opinión pública cada vez más preocupada por el
entorno.
En parte como consecuencia de la tendencia a primar los sucesos más
llamativos, los medios acaban creando una imagen parcial de los hechos.
Suelen tratar informaciones concretas y a menudo simples sobre
acontecimientos puntuales que realmente forman parte de procesos largos y
realidades complejas con numerosas implicaciones científicas técnicas que no
suelen explicarse (Caja España, 1999). Esto evidencia que el carácter científico
de muchas cuestiones relacionadas con el medio ambiente no es fácilmente
trasladable a la cobertura de noticias.

La Agencia Europea de Medio Ambiente corrobora algunos de los datos


anteriores en sus estudios, como puede comprobarse en el gráfico ( 1).

Dificultades del periodista ambiental

Los periodistas que optan por dedicarse a la información ambiental cuentan


ahora con una mejor preparación que hace años, bases de datos antes casi
inexistentes o inaccesibles, y cierta conciencia de grupo ( 5). No obstante, los
pasos que se han dado siguen siendo insuficientes y estos profesionales
siguen encontrando impedimentos que dificultan su tarea.
– Necesidad de especialización
Junto con las limitaciones de espacio, tiempo y medios, la falta de preparación
es la principal causante de que la información transmitida no siempre sea todo
lo rigurosa e imparcial que debiera. Siempre y cuando el concentrarse en el
medio ambiente no le lleve a desvincularse del resto de la información, nada
mejor que la especialización periodística puede ayudar a formar profesionales
capacitados para traducir las cuestiones ambientales al lenguaje común. A esto
se suma la necesidad de tener conocimientos de campos como biología,
química, gestión y auditoría ambiental, o derecho, entre otros, para poder
abordar temas aparentemente muy dispares. Ante esta difícil tarea, es
necesario que se fomente la especialización tanto desde la etapa formativa en
la universidad como desde los propios medios de comunicación.
Los responsables de los medios buscan la rentabilidad y siguen mostrando
reticencias a contratar a profesionales especializados en detrimento de los
periodistas todoterreno capaces de cubrir cualquier tipo de información. Al no
existir una sección o espacio fijos para el medio ambiente –que no se crean por
considerar que no interesan al público y posiblemente por falta de una
concienciación de los propios responsables–, no ven necesaria la contratación
de especialistas. Se trata de una especie de círculo vicioso del que estoy
convencida que podría salirse con un cambio de actitud hacia el periodismo
ambiental por parte de las instituciones académicas. Sobre éstas opina la
profesora Rocío Zamora (1994): «En España, en comparación con (…) los
países anglosajones, sobre todo Estados Unidos, no existe una oferta
académica destacada, al menos en lo que respecta a la formación universitaria
de grado y de licenciatura. (…) Únicamente queda la posibilidad de abrir vías a
la especialización científica a través de las asignaturas optativas y seminarios
de libre configuración que compiten (…) con una amplia gama de otros cursos
y especialidades».

Conclusiones: propuestas para una mejora

Para que la información ambiental ocupe el lugar que merece en los medios de
comunicación sería conveniente que éstos se replanteasen una serie de
cuestiones, para lo cual expongo las siguientes sugerencias a modo de
conclusiones:

1. información medioambiental todavía representa un porcentaje muy pequeño


de la cantidad total de información ofrecida por los medios de comunicación. Es
necesario que éstos den más protagonismo a la actualidad ambiental mediante
la creación de secciones o espacios fijos para esa temática, algo que sólo
harán cuando lo consideren informativamente rentable, es decir, cuando tengan
la seguridad de que un número considerable de consumidores mostrará interés
por ella.

2. a despertar ese interés en el público, uno de los principales problemas que


se debe resolver es la complejidad que rodea al ámbito del medio ambiente,
promoviendo desde las instituciones académicas la especialización de
periodistas en esta materia que sean capaces de transmitir la información en
un lenguaje asequible.

3. bién debe fomentarse dicho interés con el lema ecologista «piensa


globalmente, actúa localmente». Es decir, relacionando los temas ambientales
del ámbito nacional o internacional con otros similares que afectan al
ciudadano más directamente para hacer que se sienta más implicado, y al
mismo tiempo ofrecerle información práctica sobre qué puede hacer a favor del
medio ( 8).
4. Debería evitarse en la medida de lo posible que el público relacione la
temática ambiental con hechos negativos procurando un enfoque constructivo y
destacando tanto lo positivo de las informaciones ambientales como el carácter
reivindicativo y crítico.

5. Los medios de comunicación pueden y deben aprovechar su potencial para


fomentar la concienciación ambiental de la ciudadanía mediante la
“ecoalfabetización”.

2) Los riesgos y las catástrofes “naturales”

El ser humano es parte de la Naturaleza, sin embargo, hasta el momento, no


ha logrado conseguir respuestas a todas sus inquietudes sobre lo que sucede a
su alrededor.

Día tras día la naturaleza, a través de fenómenos naturales como las lluvias, el


nacimiento y muerte de hombres y mujeres, de plantas y animales, el calor, los
movimientos de tierra, el frío, el canto de los pájaros, los ríos, los días y las
noches, los vientos, las olas del mar, nos demuestra que no estamos solos en
la Tierra y que todos los seres que la habitamos debemos compartirla sin
agredirnos y respetarnos mutuamente.
Los seres humanos debemos mantener la equidad en el Planeta, viviendo en
armonía con los demás elementos de la naturaleza (animales, montañas,
árboles, ríos, mar, plantas, etc ). Debemos también estudiar, investigar,
conocer y entender los diferentes fenómenos naturales que suceden a nuestro
alrededor, sin temerles, pero sí respetándolos como un elemento más de
nuestro maravilloso mundo.

La historia nos dice que hombres y mujeres hemos hecho muchos esfuerzos
por convivir armónicamente con la naturaleza, pero también nos dice, que no
siempre ha sido así, y que más de una vez los diferentes fenómenos
naturales y los seres humanos -a través de sus actividades- se han agredido y
han roto el equilibrio del planeta, provocando graves daños al entorno, a las
personas y a sus bienes, lo que generalmente se denomina como desastre

Un desastre se produce cuando se dan estas tres condiciones al mismo


tiempo:

 Si se produce un fenómeno natural, o un fenómeno causado por el ser


humano cerca de zonas pobladas.

 Si la gente vive en lugares peligrosos, como por ejemplo cerca de


un volcán activo, en laderas con peligro de deslizamientos, o cerca de ríos que
pueden desbordarse.

 Si, además, el fenómeno natural debido a ciertas actividades humanas


provoca muchos daños, particularmente en aquellos lugares en donde no se ha
tomado ninguna medida preventiva.

   
A la primera condición la definiremos como amenaza, a la segunda
como vulnerabilidad y a la tercera como riesgo.

Amenaza
Una amenaza es un fenómeno natural o causado por el ser humano que puede
poner en peligro a un grupo de personas, sus cosas y su ambiente, cuando no
son precavidos.

Entre las amenazas naturales podemos citar:

 Deslizamientos

 Erupciones volcánicas

 Fenómeno El Niño

 Huracanes

 Tornados

 Incendios forestales

 Inundaciones  

 Maremotos o tsunamis 

 Sequías  

 Sismos y terremotos

 Tormentas eléctricas

Vulnerabilidad

Es la incapacidad de resistencia de las personas cuando se presenta


una amenaza, o la incapacidad para reponerse después de que ha ocurrido
un desastre debido al crecimiento de la población, el deterioro y contaminación
del ambiente y el aumento de la pobreza. Ejemplo, las personas que viven en
la planicie son más vulnerables ante las inundaciones que las que viven en
lugares más altos.

La vulnerabilidad depende de diferentes factores internos, tales como la edad y


la salud de la persona, las condiciones higiénicas y ambientales así como la
calidad y condiciones de las construcciones y su ubicación en relación con
las amenazas.

Riesgo

El riesgo es la probabilidad de que una amenaza se convierta en un desastre.


La vulnerabilidad o las amenazas, por separado, no representan un peligro.
Pero si se juntan, se convierten en un riesgo, o sea, en la probabilidad de que
ocurra un desastre.

Sin embargo los riesgos pueden reducirse o manejarse. Si somos cuidadosos


en nuestra relación con el ambiente, y si estamos conscientes de nuestras
debilidades y vulnerabilidades frente a las amenazas existentes, podemos
tomar medidas para prepararnos y prevenir los desastres. A todas estas
acciones las llamamos Gestión del Riesgo.

   

¿Qué podemos hacer para prevenir los desastres?

Las personas podemos evitar o disminuir el impacto de los desastres, por eso


es importante conocer sobre la prevención y la mitigación.

La prevención y la mitigación son todas las acciones que hacemos para


asegurarnos de que no suceda un desastre o, si sucede, que no nos perjudique
tanto como podría hacerlo. La mayoría de los fenómenos naturales no pueden
impedirse; pero entendiéndolos y entendiendo nuestras condiciones
de vulnerabilidad, podemos hacer que los probables desastres sean menos
dañinos. Ejemplo: podemos reducir los daños que causa un sismo si
construimos casas más resistentes y en lugares donde el suelo sea sólido.
   

¿Qué es la prevención? Es la aplicación de medidas para evitar que un


evento se convierta en un desastre. Por ejemplo, sembrar árboles previene
la erosión y los deslizamientos, y también puede prevenir las sequías.

¿Qué es la mitigación? Son medidas para reducir la vulnerabilidad frente a


ciertas amenazas. Por ejemplo, hay formas de reforzar las construcciones con
el fin de asegurar nuestras casas, escuelas u hospitales para que no se caigan
con los efectos de un terremoto o un huracán.

La prevención y mitigación comienzan por:

 Conocer cuáles son las amenazas y riesgos a los que estamos expuestos en


nuestra comunidad.

 Reunirnos con nuestra familia y los vecinos y hacer planes de prevención de


desastres para reducir esas amenazas y riesgos, o evitar que nos hagan daño.

 Realizar lo que planeamos para reducir nuestra vulnerabilidad. No es


suficiente hablar sobre el asunto, hay que tomar acciones.

Los niños y niñas desempeñan un papel muy importante en las acciones


previstas en los planes de prevención de desastres. Ellos y ellas pueden:

 Realizar actividades escolares sobre prevención de desastres que


promuevan la participación de toda la comunidad

 Informar y motivar a sus familias y su comunidad sobre las amenazas


naturales para que tomen medidas preventivas

Ayudar con sus acciones y actitudes a instaurar una �cultura de


prevención� real y duradera, ya que cuando sean adultos tendrán una
mayor comprensión de los fenómenos naturales, los efectos de las acciones
humanas y de las consecuencias de un mal manejo del ambiente, así como
de la necesidad de promover un desarrollo armonioso con la naturaleza.

3) La perspectiva del periodismo ambiental

Así como resultaría extraño que un colega se defina a si mismo como un


“periodista humanitario” o un periodista especializado en Humanidad, descreo
de las etiquetas

-no siempre malintencionadas- que encasillan nuestro oficio como si fuera


posible que la realidad, nuestra materia por excelencia, se diseccione para su
análisis.

Del mismo modo que el reivindicado periodismo de género, el ambiental no


puede ser una especialización sobre un fragmento de la vida que discurre, sino
que constituye un punto de mira, una perspectiva sobre el todo que ayuda a
elaborar un producto periodístico más profundo y de calidad. O al menos eso
es lo que yo pienso.

Veamos, por ejemplo, un tema clásico de la agenda del periodista ambiental: la


biodiversidad. Este paraguas engloba los bosques, la industria forestal, el agua,
el aire, la contaminación, el suelo, la desertificación, la conservación de fauna,
los pueblos originarios, su conocimiento tradicional, la pesca, la agricultura, la
seguridad alimentaria, la minería, la energía, las grandes obras de
infraestructura y así.

¿Y si el tema es el cambio climático? Además del los impactos en el clima que


tiene el aumento de la temperatura, mas vale que el periodista ambiental pueda
abordar temas como economía, política, leyes, comercio, energía, consumo,
residuos, transporte, salud, cooperación internacional, alimentación, pobreza,
migraciones, etc.

Y es que la materia que la convención reserva al periodista ambiental es casi


tan vasta como la realidad misma. No hay un tema que no se encuadre dentro
de las conflictivas relaciones entre Humanidad y Naturaleza. ¿Cómo aislar
entonces al ambiente en un módulo de análisis?

La colega de Costa Rica Cinthya Flores Mora sostiene que “el periodismo
ambiental es multidimensional y transversal. Más que una especialización se
puede entender como una adecuación del periodismo en contraposición a la
palabra ‘especialidad’ que sugiere el desarrollo de solo una parte del proceso”.
Coincido.

¿Y cómo actúa lo transversal? La UNESCO sostiene que “transversalizar es el


proceso de incorporar lo que puede ser visto como marginal a los asuntos
medulares y al proceso central de toma de decisiones de una organización”.
Imagínense por un segundo si esta cualidad se incorporara a un gobierno.

“Ambiente” no sería una secretaría o un ministerio con una agenda de


desarrollo sustentable que avanza en paralelo –si avanza- a otras carteras que
no reparan en seguir construyendo centrales nucleares o grandes represas,
sino que sería parte de la concepción de toda la Administración.

Lo mismo ocurriría en una redacción si el periodismo ambiental en lugar de ser


una especificidad fuera una mirada holística. Me dirán que para organizar la
información un medio necesita mantener secciones pero ¿puede nuestra
formación seguir teniendo al periodismo ambiental como una especialidad que
la mayoría de los colegas ignora?

Analicemos lo que ocurre cuando sólo en la sección de mujeres las periodistas


se especializan en cuestiones de género. Puede ocurrir que mientras ellas dan
cuenta del incremento de feminicidios producto de la violencia machista, en la
sección policial se describa el homicidio brutal de una mujer por parte de su
pareja como un “crimen pasional” o producto de una “celopatía”. Esta
concepción arcaica, que revela falta de actualización, ¿no es, lisa y llanamente,
mal periodismo?

Por otra parte, no es cierto que para cubrir los temas ambientales haya que ser
un científico devenido en periodista de divulgación. ¿Y cómo es que nació
entonces este periodismo de especialistas en ambiente? Si bien desde que
existe el periodismo hay crónicas sobre contaminación, el periodismo ambiental
como un nicho específico explotó en torno a la Cumbre de la Tierra en Río de
Janeiro hace casi 20 años.

En aquella reunión convocada por Naciones Unidas levantó vuelo el concepto


de “desarrollo sustentable” y, en un ambiente de optimismo –que no es el que
sobrevuela ahora las cumbres del clima- los llamados “temas ambientales”
ganaron espacio. Nacieron entonces los suplementos verdes o dedicados a
muchos de los temas silenciados hasta entonces por la redacción.

Pero todo lo bueno tiene un final. Cuando los anunciantes advirtieron el tenor
de los cuestionamientos al sistema que trae consigo la mirada ambiental,
retiraron sus apoyos y con ellos desaparecieron las páginas específicas y los
programas “ecológicos” de televisión y radio pasaron a ocupar espacios
marginales.

Frente a esta derrota que se manifiesta muy claramente en nuestros países –


me refiero a la familia de los que estamos en un estadio atrasado del
desarrollo-, pienso si el “periodismo ambiental” no habrá sido una trampa.
Eliminadas las secciones verdes, los periodistas ambientales se sientan a
esperar la carástrofe y nada cambia porque la redacción no se enverdeció.
Sigue con las anteojeras puestas.

Me pregunto ¿por qué solo algunos periodistas deberíamos tener la


perspectiva ambiental para analizar con mayor corrección el fragmento de
realidad que nos toca en el reparto diario de tareas? ¿No será mejor que toda
la redacción haga la necesaria –urgente, diría- actualización, capacitación,
“upgrade” o como quieran llamarla?

Por el momento lo que existe es una brecha. Algunos descubren que el


llamado periodismo ambiental es una forma de abordar la realidad que los
satisface porque los ayuda a entender cuestiones que de otra forma
permanecen inconexas e indiferentes a las transformaciones. Otros –por última
vez aclaro que esto es lo que yo creo-, los que adoptamos esta perspectiva
hacemos nuestro trabajo con más alegría, con pasión, y sobre todo sin cinismo,
ese malestar que se propaga por las redacciones como una epidemia sin que
nadie entienda muy bien cuándo y cómo se originó.

4) Estudio de casos latinoamericanos

La situación ambiental de América Latina y el Caribe es cada día más


inquietante. Esta es una región rica en recursos naturales y en biodiversidad
pero que, pese a los esfuerzos de los Gobiernos nacionales, es testigo de
cómo su deterioro avanza inexorablemente. Las políticas ambientales
pueden ser políticas explícitas o implícitas; las primeras son aquellas que
tienen objetivos ambientales declarados, en tanto que las segundas son las
que tienen consecuencias ambientales no declaradas, generalmente
negativas. Es evidente la ventaja con que operan las políticas implícitas, y
contemplamos como las autoridades ambientales no siempre cuentan con las
atribuciones necesarias para influir en los grandes proyectos de
infraestructura, en las formas que adopta la modernización de la agricultura o
en la orientación de las inversiones nacionales y extranjeras. Todo esfuerzo
en favor de la sostenibilidad ambiental entra en conflicto con un estilo de
desarrollo en que sigue primando la explotación de los recursos naturales
con escasa agregación de valor. Los empeños de la Comisión Económica
para América Latina y el Caribe (CEPAL) para entender en profundidad la
relación entre desarrollo y medio ambiente se remontan a la década de 1970
y se nutrieron en sus inicios del trabajo realizado en el marco del proyecto de
la CEPAL y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente
(PNUMA) “Estilos de desarrollo y medio ambiente en la América Latina”, que
le permitió por primera vez a la Comisión incorporar la dimensión ambiental
en su pensamiento económico. Desde esa época, la CEPAL ha brindado
apoyo a los países de la región en sus esfuerzos por dar mayor 8 Comisión
Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) sostenibilidad ambiental
a sus estrategias y políticas de desarrollo, objetivo que ha tenido un alcance
limitado. La tarea de lograr una mayor sostenibilidad ambiental se torna cada
día más compleja, pues a las particulares características y procesos de
deterioro ambiental que enfrenta cada país se suman crecientemente los
efectos negativos del cambio climático. Consciente de estas complejidades,
la CEPAL recurrió a la visión de un grupo de personalidades con una
destacada trayectoria académica, pública e internacional para que, sobre la
base de sus conocimientos y experiencias, contribuyeran a ofrecer una
comprensión en profundidad de la dinámica del desarrollo actual y su
relación con el medio ambiente. A este grupo, por la relevancia de su
quehacer desde los orígenes de la reflexión sobre la sostenibilidad en
nuestra región, lo hemos denominado “pensadores fundacionales del
desarrollo sostenible”. La profundidad e importancia de sus planteamientos
se expone en las siguientes páginas. Su contribución servirá de insumo para
el trigésimo octavo período de sesiones de la Comisión y estamos
convencidos de su utilidad y oportunidad para los países de la región. No
obstante, hemos de señalar que estos análisis constituyen puntos de vista
personales de los miembros de este grupo y que, pese a obvias
convergencias y encuentros, son por cierto independientes y autónomos del
pensamiento de la CEPAL. Quisiera destacar y agradecer en particular a
Nicolo Gligo, quien ha encabezado el esfuerzo de recopilar el material y
coordinar la preparación del libro que presentamos. Junto con Osvaldo
Sunkel, son sembradores de la semilla de la sostenibilidad en las inquietudes
de la CEPAL y maestros que inauguraron caminos fecundos que he tenido la
oportunidad de recorrer. Reconozco también el apoyo de Joseluis
Samaniego, Director de la División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos
Humanos de la CEPAL, y del Proyecto EUROCLIMA de la Comisión
Europea, puntales indispensables para la materialización de la iniciativa que
toma forma en estas páginas.

5) Problemáticas en diferentes escalas de análisis especial ambientales

Los problemas ambientales suelen afectar más a las áreas urbanas: las


ciudades, sean más grandes o más pequeñas, concentran un mayor número
de población y espacios industriales, producen más residuos, tienen
un índice de vehículos más alto, los espacios naturales son más
pequeños, el aire está contaminado, entre otras cuestiones. ¡Y todo esto,
claro está, incide en nuestra salud y bienestar!

Principales problemas ambientales en las zonas urbanas

Desde hace algunas décadas existe una tendencia mundial a alza en lo que se
refiere al desplazamiento de millones de personas desde las zonas rurales
a las grandes ciudades en busca de oportunidades. Esta situación se hace
más notoria en países y regiones con altos índices de desigualdad y pobreza.

La superpoblación en muchas capitales del mundo es ya una realidad, algo que


no sólo preocupa desde el punto de vista demográfico sino también de
sostenibilidad. Repasa algunos de los problemas medioambientales de las
ciudades:

 Falta de zonas verdes

Las ciudades, en su mayoría, cuentan con pocos espacios verdes,


especialmente aquellas con planificaciones urbanísticas más antiguas y,
por tanto, menos preocupadas por la calidad del ambiente urbano y del
planeta. Numerosos estudios, como este planteado por la ciudad de
Burgos, defienden que los parques son esenciales para purificar el aire,
aportan mayor calidad de vida y son espacios de interacción y relajación
para los ciudadanos. Sin árboles y plantas no hay fotosínteis, de manera
que el aire no se renueva y empeora su calidad: esto influye directamente
en la salud de las personas y provoca, por ejemplo, enfermedades
respiratorias.

 Contaminación acústica 

Las fábricas, el exceso de vehículos, los centros comerciales, los locales


de ocio nocturno… La exposición a un nivel de ruido demasiado alto y de
forma continuada repercute en nuestros oídos, pero también en otros
aspectos de nuestra vida: causa problemas coronarios, agresividad,
problemas hormonales, entre otros.

 Contaminación visual

En las áreas urbanas se concentran un gran número de datos visuales:


anuncios, carteles, escaparates… Y todos ellos hacen que nuestro
cerebro se mantenga constantemente activo, lo cual puede
desencadenar estrés o cefaleas. Ante ello, muchas ciudades en el mundo
y en nuestro país, como es el caso de Ourense, trabajan insistentemente
en diseñar normativas que garanticen un equilibrio de la comunicación
visual con los espacios públicos en donde se exhiben.

Acumulación de basura y de aguas residuales

La acumulación de los residuos es un problema a tener muy en cuenta en


las ciudades: una vez se deposita desde nuestros hogares, un fallo en su
gestión puede acabar desencadenando problemas con insectos o
roedores. Pero, yendo más allá, una mala gestión en las plantas de
tratado de residuos puede acarrear terribles consecuencias para el
entorno, tal como sucede con las aguas residuales, que muchas veces
son vertidas en los ríos o en el mar. No obstante, este es uno de los
problemas ambientales que más se ha frenado en las últimas décadas.

 Congestión de tráfico
El exceso de vehículos en las ciudades provoca problemas de
contaminación del aire y empeora la calidad de vida de los ciudadanos:
es causa de estrés y de diferentes problemas de salud, por lo que es uno
de los problemas ambientales que más hay que tener en cuenta de cara
al futuro. Las ciudades con más habitantes son, por defecto, las que más
sufren estos problemas. Nueva York, Ciudad de México, Pekín o Río
der Janeiro son algunos ejemplos claros de ello.

Las ciudades y áreas urbanas se ven expuestas a muchos otros problemas


ambientales. Sin embargo, como casi siempre, en nuestra mano está tomar
medidas para revertir, en la medida de lo posible, su impacto sobre nuestro
entorno más inmediato. Hoy puede es buen día para empezar, por eso te
damos algunas ideas. ¡Sigue leyendo!

Consejos para solucionar los problemas ambientales de tu ciudad

No obstante la gravedad de estos hechos, las ciudades y áreas urbanas se


ven expuestas a otros problemas ambientales. Como casi siempre, en nuestra
mano está tomar medidas para revertir, en la medida de lo posible, su impacto
sobre nuestro entorno más inmediato. Hoy puede es buen día para empezar a
tomar partido; por eso te damos algunas ideas. Toma nota de ellas:

 Apuesta por desplazarte en transporte público o, siempre que te sea


posible, en bicicleta o a pie.
 Exige al ayuntamiento de tu ciudad que tome medidas para regular los
vertidos y emisiones de las industrias cercanas.

 Ahorra energía de cualquier tipo. Aunque la energía eléctrica no implica


directamente un proceso de combustión, su producción sí que la precisa
en el caso de las centrales térmicas. Fomenta el ahorro de energía
mediante los sistemas de regulación de la temperatura de los edificios, el
aislamiento térmico y el rendimiento de las calefacciones.

 No practiques conductas ruidosas en casa: gritos, taconeos, portazos,


utilización de electrodomésticos en períodos de descanso.

 Reclama una buena gestión de las zonas verdes, con especies


autóctonas que mantengan el ecosistema.

 Utiliza materiales biodegradables siempre que tengas oportunidad de


ello.

 Practica un consumo responsable y recicla lo que puedas.

Hay muchas más cosas que puedes poner en práctica (¿cuántas más se te
ocurren?) sin que supongan ningún esfuerzo extra en tu día a día, y pueden
llegar a tener muchísimos efectos beneficiosos sobre la ciudad y sobre sus
habitantes: ¿te imaginas que todo el mundo fuera al trabajo en bicicleta o
caminando? Es cuestión de salud pero también de conciencia mediambiental:
si el planeta está sano, nuestra salud estará a salvo. ¿Todavía te quedan
dudas?

6) Responsabilidad Social Ambiental; aportes responsabilidades

Lo que se conoce como responsabilidad social ambiental no es otra cosa


que una serie de acciones y esfuerzos que llevan a cabo las empresas para
compatibilizar sus actividades comerciales y corporativas con la preservación
del medioambiente y de los entornos en los que operan. ¿Habías oído antes
este término?

Esto se debe a que la preocupación por el medioambiente se ha


convertido en uno de los puntos estratégicos de muchas empresas en la
actualidad. Y es que si no cuidamos el planeta, las consecuencias pueden ser
devastadoras.

Por eso, resulta fundamental concienciarnos y concienciar a los que nos


rodean de la importancia de los pequeños gestos y acciones
cotidianas, los cuales, pese a que en apariencia pasan desapercibidos, a largo
plazo adquieren un papel importante.

En nuestras manos está aplicar y enseñar a las siguientes generaciones


a reciclar, a utilizar menos papel, a llevar bolsas de tela al supermercado,
entre otras acciones, pues nuestro ejemplo es sin duda la mejor referencia.

Y si estas buenas prácticas las trasladamos al sector empresarial, nos


encontramos con las políticas de responsabilidad social ambiental, que son
su manual de actuación para cuidar el planeta.
Aspectos de la responsabilidad social ambienta

La responsabilidad social ambiental también puede entenderse como


el compromiso que adquieren las compañías para preservar y cuidar el
medio ambiente. El objetivo es evaluar todos los recursos naturales que la
empresa utiliza para la creación de sus productos o servicios, por ejemplo el
agua, la energía eléctrica o las materias primas que se utilizan para el
embalaje, entre otros.

De hecho, el interés de las empresas por el medio ambiente está muy


relacionado con las demandas de los consumidores. Cada vez es más común
que sus clientes sean personas con “conciencia ambiental”, es decir, que
tienen un estilo de vida en el que se preocupan por el medioambiente y al
realizar sus compras cotidianas exigen que los productos o los servicios que
requieren se acoplen a su forma de pensar y de vivir.

En marcha el “marketing ecológico”

Si estás leyendo este post es probable que a la hora de decidirte a comprar un


producto sea importante para ti que su fabricación cumpla ciertos requisitos de
respeto por el medioambiente.
Quizás hayas oído hablar del “marketing ecológico” o “marketing verde”, que
nace, precisamente, derivado de esta nueva corriente de consumidores
“verdes”. Las compañías ponen en marcha las estrategias de marketing
ecológico de dos maneras diferentes. Una de ellas se centra en el área
comercial y empresarial y hace referencia a los procesos de creación de los
productos.

La finalidad es poner en marcha las medidas oportunas para no dañar al


medio ambiente y comercializar un producto o un servicio final que no cree
ningún tipo de contaminación, que no genere desperdicios y que se haya
creado optimizando recursos.

La otra estrategia del marketing ecológico se centra en el área social, es decir,


se promueven iniciativas para concienciar a su personal interno y a sus clientes
externos de la necesidad de proteger y cuidar el medio ambiente.

IKEA, uno de los ejemplos de responsabilidad social ambiental

Una de las empresas que en la actualidad más se asocia al concepto de


responsabilidad social ambiental es la multinacional IKEA. De hecho, la
empresa sueca lleva muchos años comprometida con estrategias sostenibles.

La responsable de sostenibilidad de IKEA Ibérica, Mercedes Gutiérrez, ha


explicado que aprovechan la sostenibilidad para “innovar, transformar nuestro
negocio, mejorar las inversiones y descubrir nuevas oportunidades
comerciales”. Los resultados de esta estrategia hablan por sí solos: la empresa
vendió 46,9 millones de euros en 2013 en soluciones sostenibles para el
hogar.

La clave, según apunta Gutiérrez, reside en “romper el mito de que la


sostenibilidad es un lujo”. De hecho, se calcula que en todo el mundo los
clientes de IKEA compraron 12 millones de bombillas led que ayudaron, en su
conjunto, a ahorrar 86 millones de euros en sus recibos de electricidad.
Pero la multinacional sueca no es la única empresa con una estrategia de
marketing ecológico. Existen otras igualmente exitosas en este aspecto, por
ejemplo la compañía estadounidense Envión, la francesa CitiGreen, la marca
californiana de tejados Seglet, los mercados comunitarios
de StorkBrokers, entre otras.

Así pues, conseguir un mundo más sostenible y más cuidado es tarea de


todos. Cada uno en la medida de nuestras posibilidades y de nuestra
responsabilidad, empezando por nuestra vida cotidiana y contagiando el
respeto por el medioambiente. Y siempre con un fin y un objetivo común:
trabajar para dejar un planeta verde y saludable a los que vienen tras
nosotros.

Bibliografía:
1. https://www.fundacionaquae.org/wiki/causas-perdida-biodiversidad/
2. https://www.eird.org/fulltext/ABCDesastres/teoria/desastres.htm
3. https://www.losquesevan.com/periodismo-ambiental-como-mirada-de-la-
realidad.1480c
4.https://blog.oxfamintermon.org/responsabilidad-social-ambiental-la-
conciencia-colectiva-para-mejorar-el-mundo/#:~:text=Lo%20que%20se
%20conoce%20como,entornos%20en%20los%20que%20operan.
5. https://blog.oxfamintermon.org/sabes-que-problemas-ambientales-son-
mas-frecuentes-en-la-ciudad/

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