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TEMA 3: EL SISTEMA FONOLÓGICO​ ​DEL ESPAÑOL

1. Introducción: el concepto de norma


La diversidad interna del español tiene repercusión en la norma del idioma. Podemos encontrar
dos formas de interpretar la norma​: como conjunto de reglas a la que tenemos que adecuarnos
o como la concepción de la norma como lo normal o lo usual a lo que tienden los hablantes de
dicha lengua. Los dos conceptos se unen en un aspecto esencial, la ​importancia del uso​, es decir,
que la norma emana del uso. Tanto es así que el uso puede convertir algo en normal. El uso es,
por tanto, el criterio de corrección. Cambia el uso, cambia la norma.
En realidad, podemos hablar de ​varias normas dependiendo de la zona geográfica, del modo de
expresión (oral o escrito), de la situación comunicativa (informal o formal) y del nivel
sociocultural de los hablantes. Sin embargo, por encima de todas, está la ​supranorma​, que es el
punto en común de todas ellas. Según Lope Blanch, el ​uso formaría parte de la supranorma.
Puede ocurrir que:
❖ Un uso estuviese respaldado por una o más normas nacionales, pero fuese menos
justificado gramatical y culturalmente. Por ejemplo: la caída de la ​d intervocálica sería un
fenómeno correcto a nivel nacional pero no es correcto gramaticalmente.
❖ Un uso, estando respaldado por una o más normas nacionales, estuviese igualmente
justificado gramatical y socioculturalmente. Por ejemplo, el ​seseo está respaldado por
varias normas.
En definitiva, el ​español modélico o ejemplar aspira a la aceptación de una misma norma para
toda la comunidad, partiendo de la aceptación y el respeto de la diversidad interna. Por ello, las
academias de la lengua deberían determinar lo que resulta más frecuente en las distintas normas
del español.
En cualquier caso, hay que resaltar que la lengua panhispánica constituye un ideal al que pueda
aspirar cualquier ​habitante culto​, pues, como señala Manuel Alvar: «El buen uso no tiene
geografía, es la realidad habitual de fuentes cultas, cuya pronunciación sería aceptada como
buena en cualquier sitio del mundo hispánico». Es decir, ese español panhispánico debería estar
libre de vulgarismos y dialectalismos, sin estar marcado en ninguna parte del mundo hispánico.

2. Fonología (fonema) y fonética (alófono)


Antes de comprender la diferenciación entre fonología y fonética, debemos asimilar los términos
lengua y ​habla​. Según Saussure, en el ​lenguaje se encontraban dos aspectos fundamentales: la
lengua, que es el modelo general y constante que está en la conciencia de todos los miembros de
una comunidad lingüística, y el habla, que es la realización concreta de la lengua en un momento
y lugar determinados en cada uno de los miembros de una comunidad lingüística. Es decir, la
lengua es un fenómeno social, mientras que el habla es individual. Lo que hace posible que dos
individuos se entiendan entre ellos es la existencia de la lengua, un modelo lingüístico común,
pero lo que reproducen cada uno al hablar es un acto de habla, personal, único e irrepetible
exactamente. Sin los actos concretos de habla, la lengua no existiría y estos actos no servirían
para la comunicación; pero sin la lengua, que establece la norma, no podrían entenderse
correctamente entre ellos. Por tanto, son realidades unidas en lo que conocemos como el lenguaje.
Todo lo que pertenece al lenguaje, es decir, tanto a la lengua como al habla, tiene dos facetas: el
significante (​ la expresión, los elementos fónicos que lo componen) y el ​significado (​ el contenido,
lo que pretende decir); ambos constituyen el signo lingüístico.
Con todo lo anterior se justifica que la disciplina encargada del estudio de los sonidos del
lenguaje se divida en la fonología, que estudia el significante en la lengua, y la fonética, que
estudia el significante en el habla. Así, se pueden definir de la siguiente manera:
❖ Fonología​. Rama de la lingüística aplicada que estudia los elementos fónicos de una
lengua desde el punto de vista de su función en el sistema de la comunicación lingüística.
❖ Fonética​. Rama de la lingüística aplicada que estudia los elementos fónicos de una lengua
desde el punto de vista de su producción, de su constitución acústica y de su percepción.
El objeto de estudio de la ​fonología es el ​fonema​, el cual puede ser definido como: la unidad
lingüística más pequeña, desprovista de significado, formada por un haz simultáneo de rasgos
distintivos. Los ​rasgos distintivos son aquellas características funcionales dentro de la lengua, es
decir, aquellas que permiten diferenciar a un fonema de otro. Por ejemplo, ​beso (​ /b/, /e/, /s/, /o/) y
peso (​ /p/, /e/, /s/, /o/) solo se diferencian en el primer sonido. Ambos sonidos, /b/ y /p/, son
consonánticos, oclusivos y bilabiales; pero se diferencian en su sonoridad: mientras el primero es
sonoro, el segundo es sordo. De esta forma, la sonoridad entre oclusivos resulta un rasgo
distintivo en español y hace a /b/ y a /p/ fonemas diferentes.
Por otra parte, la diferencia de pronunciación de /b/ en posición intervocálica (que sería la
aproximante [β]) y la /b/ entre consonante y vocal (explosiva [b]) no es un rasgo pertinente, y por
tanto no separa a un fonema de otro. Por ejemplo en la /b/ de ​ese beso y ​un beso​. Estos serían
alófonos ​de /b/. Frente al fonema, que es una realidad invariable, los alófonos son variantes de
cada fonema. Las ​variantes pueden ser: ​combinatorias ​o ​contextuales ​cuando las realizaciones de
un fonema no aparecen nunca en el mismo contorno, como en el caso anterior; o ​libres (​ también
llamadas ​estilísticas ​o ​facultativas)​ , cuando las realizaciones aparecen en el mismo contorno,
como las realizaciones relajadas de ​ch /​ tʃ/ ​en Canarias. Todas estas variantes son estudiadas por
la fonética.
Dentro de la fonética nos encontramos con ​tres ramas​: la fonética ​articulatoria​, que se centra en
los sonidos desde el punto de vista fisiológico; la ​acústica​, que estudia la fonética a través de las
ondas sonoras; y la ​auditiva​, que estudia los mecanismos de percepción del sonido.
En conclusión, la fonología y la fonética estudian ​lo mismo desde puntos de vista diferentes​.
Mientras la fonología tiene una percepción más abstracta cuando estudia el sistema, la fonética
tiene una concepción más pragmática. La fonología establece el número de oposiciones utilizadas
y sus relaciones mutuas. La fonética determina, con sus diferentes métodos, la naturaleza física y
fisiológica de las distinciones comprobadas. Así, sin el análisis físico y fisiológico de todos los
hechos de pronunciación, el lingüista ignoraría la naturaleza real de las oposiciones establecidas.
Los dos estudios son interdependientes y se completan. Sería inútil priorizar uno sobre el otro.
3. Sistema fonológico del español
La distinción fonológica fundamental en español, como en casi todas las lenguas, es el de ​vocales
y consonantes​, que forman dos sistemas diferenciados. La diferencia entre ambos tipos de
fonemas se justifica, por un lado, por ​razones articulatorias​, ya que en las vocales no se ponen
obstáculos a la salida del aire (son sonoras), y en las consonantes sí. Y, por otro, por razones ​de
distribución​, pues los fonemas vocálicos son los únicos capaces de constituir el núcleo silábico (si
la sílaba termina en vocal, que es lo más común en el español, se denomina sílaba abierta).

3.1. El sistema vocálico


En la variante estándar del español hay ​cinco fonemas vocálicos​: /i/, /e/, /a/, /o/, /u/. Estos cinco
fonemas se suelen corresponder con las ​grafías ​i, e, a, o, u (​aunque en los dígrafos gu ​y qu ​la u e​ s
muda). Pero hay excepciones, el fonema /i/ se escribe con ​y en ciertas palabras, además de en la
conjunción ​y​; y /u/ puede corresponder también a la grafía ​w en préstamos del inglés. Los rasgos
fonológicos distintivos que caracterizan a cada uno de ellos son los de ​grado de abertura
(mínima en /i/, /u/; media en /e/, /o/ y máxima en /a/) y ​el lugar de articulación ​(anterior o
palatal en /i/, /e/; central en /a/ y posterior o velar en /o/, /u/). Se crea así una estructura
fonológica triangular.

En la articulación del fonema /a/ la lengua ocupa una posición baja dentro de la boca y las
mandíbulas y labios se abren, por lo que la cavidad bucal se agranda (abertura máxima); en las
vocales cerradas se produce un estrechamiento de la cavidad, en la /i/ el cuerpo de la lengua se
eleva hacia el paladar duro (abertura mínima, localización palatal), mientras que en la /u/ el dorso
de la lengua se eleva hacia atrás, en dirección al velo del paladar (abertura mínima, localización
velar). Las vocales /e/ y /o/ se distinguen entre sí por su localización, y se caracterizan por tener
una abertura interna entre la /a/ y, respectivamente, la /i/ y la /u/.

No obstante, el sistema vocálico español ​no es tan rígido como parece, ya que hay determinadas
comunidades de habla que presentan variaciones. Sin irnos más lejos, tenemos el ejemplo de la
Andalucía de la e, como la llamaba Dámaso Alonso.

Por otra parte, los ​rasgos ​no​ distintivos​ de las vocales en español son:
❖ El lugar de resonancia. Todas son orales, ya que el velo del paladar permanece adosado a
la faringe en su emisión; excepto cuando van entre nasales, pues ahí se convierten en
oral-nasales en zonas de Andalucía y de las Antillas.
❖ La duración. Frente al latín o al alemán, el español no diferencia entre largas y breves.

Por último, mencionaremos la función de las vocales /i/ e /u/ en los diptongos como ​semivocales
o semiconsonantes​, dependiendo de si son descendentes o ascendentes. En esos casos,
corresponden a [j] y a [w] respectivamente.

/i/ palatal cerrada

/u/ velar cerrada

/e/ palatal media

/o/ velar media

/a/ central abierta


3.2. El sistema consonántico
Los diecinueve fonemas diferentes que conforman el español y su equivalencia con las grafías de
la lengua escrita quedan recogidos en este recuadro:

Fonema Descripción fonológica Grafía(s)

/p/ Oclusiva bilabial sonora p

/t/ Oclusiva linguodental sorda t

/k/ Oclusiva linguovelar sorda qu+(e, i), c+(a,o,u), k

/b/ Oclusiva bilabial sonora b, v, w

/d/ Oclusiva linguodental sonora d

/g/ Oclusiva velar sonora g+(a, o, u), gu+(e, i)

/f/ Fricativa labiodental sorda f

/s/ Fricativa alveolar sorda s

/θ/ Fricativa interdental sorda z+(a, o, u), c+(e, i)

/x/ Fricativa linguovelar sorda j, g+(e, i)

/ʝ/ Fricativa palatal sonora y

/tʃ/ Africada palatal sorda ch

/l/ Lateral alveolar sonora l

/ʎ/ Lateral palatal sonora ll

/m/ Nasal bilabial sonora m

/n/ Nasal alveolar sonora n

/ɲ/ Nasal palatal sonora ñ

/r/ Rótica vibrante alveolar sonora r-, -r- (tras consonante),


-rr-

/ɾ/ Rótica percusiva alveolar sonora -r, -r- (entre vocales)


Cabe recordar que no todos los fonemas consonánticos se hallan en todas las variedades del español. En
concreto, los fonemas /θ/ y /ʎ/ solo se dan en una minoría de zonas o de hablantes, mientras que no
existen en las variedades más extendidas, lo que da lugar a los fenómenos dialectales del seseo y ceceo,
por un lado, y del yeísmo, por otro.

3.3. Neutralización de oposiciones fonológicas. Archifonemas


La oposición de los rasgos distintivos hace más fácil la comunicación. No obstante, en algunos
casos, estando la consonante en posición implosiva, aquel rasgo que establecía la oposición se
pierde y da lugar al ​archifonema​. El archifonema es, por tanto, la unidad resultante de la
neutralización​ de una oposición.
En español tenemos ​5 archifonemas: /B/, /D/, /G/, /N/ y /R/ como resultado de la neutralización
de la oposición de los fonemas /p/-/b/, /t/-/d/, /k/-/g/, /m/-/n/ y /r/-/ɾ/ en posición implosiva. La
existencia de estos es discutida en el mundo académico, así como el concepto mismo de fonema.

No es lo mismo la neutralización que la ​desfonologización​. Se neutraliza cuando dos fonemas que


están en oposición pierden el rasgo distintivo que establecía la oposición, por lo que esa
oposición se diluye. La desfonologización es que se pierde un fonema, no un rasgo de él.

4. Principales desajustes con el sistema ortográfico​ ​(desajustes como 1.3. de T4a)


La ortografía del español es una de las que más se aproxima al ideal de ser un fiel reflejo de la
pronunciación (una letra por fonema). Sin embargo, sigue sin ser una escritura fonémica y no nos
exime de poder tener dificultades ortológicas aun conociendo las normas ortográficas. Las
sucesivas reformas han tratado de reducir las distancias existentes, procurando mantener un
equilibrio entre la necesidad de la práctica de la escritura y el respeto hacia el patrimonio
lingüístico y cultural que esta representa. En español existen 24 fonemas (19 consonánticos y 5
vocálicos) y 27 grafemas. Encontramos 5 tipos de desajustes entre fonemas y grafemas:

1. A un grafema le corresponden más de un fonema:


● Al grafema ​c​ le corresponden los fonemas /k/ (oclusivo) y /θ/ (/s/ en zonas de seseo).
❖ Al grafema ​g​ le corresponden los fonemas /g/ y /x/.
❖ Al grafema ​r​ le corresponden los fonemas /r/ (vibrante) y /ɾ/ (percusiva).
❖ Al grafema ​w​ le corresponden los fonemas /b/ y /u/.
❖ Al grafema ​y​ le corresponden los fonemas /i/ y /ʝ/ (ye); /ʎ/ (yeístas).
❖ Al grafema ​x​ le corresponden los fonemas /s/ y /x/.
2. A un grafema le corresponde un conjunto fonemático:
❖ Al grafema ​x​ le corresponde el conjunto fonemático /ks/ (si se tienen en cuenta los
archifonemas sería /Gs/), aunque en ciertos casos sea pronunciado diferente.
3. A más de un grafema le corresponde un mismo fonema:
❖ A los grafemas ​b, v, w​ les corresponde el fonema /b/.
❖ A los grafemas ​z, c​ les corresponde el fonema /θ/.
❖ A los grafemas ​c, k​ les corresponde el fonema /k/.
❖ A los grafemas ​i, y​ les corresponde el fonema /i/.
❖ A los grafemas ​g, j​ les corresponde el fonema /x/.
❖ A los grafemas ​u, ü, w​ les corresponde el fonema /u/.
4. A un dígrafo o conjunto de grafemas le corresponde un solo fonema:
❖ Al dígrafo ​ch​ le corresponde el fonema /tʃ ͡ /.
❖ Al dígrafo ​ll​ le corresponde el fonema /ʎ/.
❖ Al dígrafo ​rr​ le corresponde el fonema /r/.
❖ Al conjunto grafemático ​qu​ (precediendo e, i) le corresponde el fonema /k/.
❖ Al conjunto grafemático ​gu​ (delante de las vocales e, i) le corresponde el fonema /g/.
❖ Al conjunto hi+vocal (posición inicial de sílaba precedido de vocal) corresponde /ʝ/.
5. A un grafema no le corresponde ningún fonema:
❖ La letra ​h​, cuando no constituye conjunto grafemático con c, no tiene ningún fonema.
❖ La letra ​u​ en ​gue, gui, que, qui​ no suena. Para diferenciar que sí suena se pone diéresis.

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