ANALISIS DE LA SENTENCIA Nº 00854 DE LA SALA POLITICO-
ADMINISTRATIVA, MAGISTRADO MALAQUÍAS GIL RODRIGUEZ.
POR: RICARDO JOSE CONTRERAS OVIEDO. C.I.: V-25.418.537
Inicialmente en fecha 14 de octubre de 2022 la Sala Político-Administrativa (SPA)
recibe por parte del Juzgado de Sustanciación el cuaderno separado abierto con ocasión de las medidas cautelares de prohibición de enajenar y gravar, designación de una Junta Administradora Ad Hoc y un Veedor, requeridas por el abogado Enrique Quevedo apoderado de la entidad BANCOEX proveniente de la demanda incoada contra la sociedad mercantil PROMEPLAS, esto con ocasión del “CONTRATO DE CREDITO PARA LA ADQUISICION DE ACTIVOS FIJOS” que ambas partes suscribieron con el fin de un PROYECTO DE EXPORTACION, la parte demandante expone que dichos fondos destinados a materializarse en créditos para los particulares derivan del fisco público, lo que infiere en una inversión a cargo del estado a través de BANCOEX. Dicha relación entre ambas partes inicio en virtud de la solicitud de financiamiento bancario efectuada por PROMEPLAS para la adquisición de activos fijos en modalidad Pre-Embargue, (la principal finalidad de estos esquemas es financiar el ciclo productivo de la empresa, desde la compra de materia prima hasta la exportación del producto final), por un monto de USD 897.478,42, la parte mencionada se comprometió al pago en un plazo de 5 años. La empresa PROMEPLAS solo pagó las 4 cuotas correspondientes al período de gracia, incumpliendo con las restantes 20 cuotas por un monto de USD. 44.873,92 y para el 11 de julio de 2022 presentaba una deuda de USD. 1.321.071,85 correspondientes al capital más los intereses de financiamiento y de mora.
Partiendo de lo anteriormente expuesto y declarado por la parte demandante del
caso, esta solicita que sean decretadas las medidas cautelares siguientes: 1.- Designación de Administrador Ad Hoc, 2.- En caso de no ser acordada la solicitud de designación de Administrador Ad Hoc se designe un Veedor Judicial, 3.- La prohibición de enajenar y gravar los bienes y acciones propiedad de la demandada y que se condene a la entidad PROMEPLAS a cancelar los gastos y perjuicios causados por el proceso a BANCOEX.
Atendiendo a la solicitud anteriormente expuesta en primer lugar la Sala Político-
Administrativa estima que se cumplió el requisito de “fumus boni iuris” exigido para el otorgamiento de las medidas cautelares solicitadas, esto establece que si existen unas obligaciones no cumplidas que fueron contraídas por la parte demandada lo que impone derechos a la entidad bancaria demandante, lo que lleva a la Sala a decretar con base en el ordinal 3° del artículo 588 del código de procedimiento civil, la medida cautelas de prohibición de enajenar y gravar sobre los bienes inmuebles situados en la Republica pertenecientes a la sociedad PROMEPLAS, lo cual constituye una clara limitación al derecho de propiedad de la parte con respecto a dichos bienes, así mismo decreta procedente la medida cautelar innominada en la prohibición de enajenar y gravar las acciones de la empresa y para esto se ordena notificar al registrador mercantil primero del estado Táchira para que estampe la nota marginal en el acta constitutiva de la empresa y una vez realizado notificar a la sala, también ordena que la entidad BANCOEX gestione los trámites para la selección y nombramiento de la Junta Administrativa Ad Hoc para la parte demandada con el fin de garantizar la correcta operatividad y funcionamiento de la misma.
Por último se acuerda la designación de un Veedor Judicial a la sociedad
PROMEPLAS para que ejerza funciones de supervisión, control y vigilancia del manejo de la empresa, revisión de los balances, realización de inventarios, con el fin de realizar un informe a la Sala de la situación que acontece en dicha sociedad.
Esta sentencia de la Sala político-administrativa responde a la garantía de la tutela
judicial efectiva, la cual está prevista en el artículo 26 de la constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el cual le confiere a la entidad demandante el acceso a los órganos de justicia para hacer valer los derecho e intereses que tiene contra la parte demandada, con la solicitud de las medidas cautelares expuestas para así tener obtener la seguridad del cumplimiento por parte del demandado, o mejor dicho, para resguardar la apariencia del buen derecho invocado y garantizar las resultas del juicio como así lo establece el artículo 104 de la Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, y como también lo respalda el artículo 585 del código de procedimiento civil que establece que serán efectivas las medidas preventivas solo cuando exista riesgo manifiesto de que quede ilusoria la ejecución del fallo.
Introducción al derecho internacional privado: Tomo III: Conflictos de jurisdicciones, arbitraje internacional y sujetos de las relaciones privadas internacionales