MARIOLOGÍA

María es una criatura en relación con los otros tratados de la teología, ella no es una figura
aislada:
• Trinidad. María fue elegida por el Padre dentro del plan de la salvación como templo
del Espíritu Santo y madre del Hijo de Dios. La redención es obra de la Trinidad.
• Cristología. María participa de la vida y del misterio de Cristo.
• Eclesiología. La unión con Cristo crea en María una relación con la Iglesia (LG 8)
• Antropología. El inicio y culmen de la divinización de la criatura, modelo de
acogimiento de la Palabra de Dios.
• Escatología. María es la anticipación de aquello que será la Iglesia y el mismo
hombre.
• Ecumenismo. Figura fundamental dentro de la historia de la salvación y es necesaria
para el desarrollo del ecumenismo. Aun permanece la diferencia entre católicos y
protestantes sobre el papel de María, pero se proyecta una apertura sobre el diálogo.
I. MARÍA EN LA SAGRADA ESCRITURA
1. María en el AT
1.1 Vocación de María
La llamada siempre es personal e irrepetible, sin embargo, siempre hay ciertas semejanzas
en las diversas llamadas. Cada vocación es también una vocación en cierto sentido
cristológica y soteriológica, pues toda esta en función de Cristo.
Respecto a la vocación de María existen dos vertientes: a) quienes sostienen su presencia por
doquier y b) los que la reducen a nada o la niegan. Los primeros la ven en todos los símbolos
(Arca de Noé, Arca de la Alianza) y en todas las prefiguraciones femeninas (Judith, Esther,
Betsabé, Rebeca, Abigaíl, Débora, Rut).
Algunos otros tienen una visión fundada sobre el paralelismo Eva–María en la misión
corredentora de María, madre y socia de Cristo. Unión entre la maternidad física y
maternidad de gracia. Se dice también que, María por ciertos aspectos esta unida a Cristo y
por otros esta también vinculada a la Iglesia.
1.2 Mujeres en el AT
Entre los relatos del AT que preparan la venida del Mesías, se encuentran los relatos de las
mujeres fieles y justas que desempeñaron papeles importantes, en ellas se puede descubrir
una cierta relación con la Virgen María:
• Sara. Siendo estéril por intervención de Dios concebirá un hijo, Isaac (Gen 17, 16-
19; 18, 10-14).
• Ana. Tenía amargura en el alma por no poder tener hijos. Oró al Señor y prometió
consagrar a su hijo al servicio de Dios si le concedía su favor, pasado el tiempo, Dios
 se acordó de ella y dio a luz un hijo que llamó Samuel. Se da un paralelismo entre el
canto de Ana y el cántico de María (1 Sam 2, 1-10).
• Raquel. Siendo estéril engendra a Benjamín y José (salvador del pueblo de Israel).
Es figura de maría que en el dolor da a Jesús, igual que Raquel en el dolor antes de
morir engendra a Benjamín (Gen 29, 18).
• Rebeca. Rebeca supo mostrarse como una mujer caritativa y eso gusto a Dios, quien
la escogió como esposa de Isaac y madre de Esaú y Jacob.
• Betsabé. La figura de Betsabé es esencial para entender la genealogía de Cristo,
puesto que fue la madre del rey Salomón, el cuarto hijo del rey David.
• Abigail. Su nombre significa “La felicidad de mi padre”, fue una mujer hermosa y en
contraste con otras mujeres , está descrita también como “sensata” e “inteligente”.
• Débora. Con la cooperación a la victoria de Israel profetiza que ayuda a salvar a su
pueblo (Jue 4, 6-11)
• Rut. “Saciada” “llena de gracia”, modelo de fidelidad, de amor a su marido, de
pobreza (Rut 4, 13)
• Judith. Libro tipológico que indica el peligro del pueblo de Israel por el que pasara
gracias al intervención de Yahvé por mediación de una mujer. Judith se identifica con
todo el pueblo de Israel. En el Apocalipsis María se identifica con el nuevo pueblo de
Israel que es la Iglesia (Jdt 13, 20; 15, 18).
• Ester. Figura de María que fue predilecta entre todas las mujeres e intercede por el
pueblo, y es liberado Israel. Es la contraposición entre soberbios, poderosos y los
pequeños (Est 2, 7)
1.3 Símbolos mariológicos
Paraíso. Dios preparó la tierra virgen para la creación de Adán. María es la tierra preparada
para el nuevo Adán.
Arca. Como María el arca es símbolo de la salvación universal (Gen 8, 4). El arca portaba la
presencia de Dios entre los pueblos, de María se ha dicho: “El Señor esta contigo”.
Paloma. Símbolo de la pureza tomado por los padres y por el Magisterio.
Arcoíris. El arcoíris anuncia el final de la tempestad, así María anuncia el fin de la tempestad
del pecado. Unión entre el cielo y la tierra (Gen 8, 21- 9, 16)
Zarza Ardiente. Es la presencia de Dios en la zarza como la presencia de Dios en el seno de
María. (Ex 3, 1-11).
Bastón de Moisés y Arón. Cuando florece sin razón natural así mismo el concebimiento de
Jesús.
Templo de Salomón. En el se encuentra la Gloria de Dios, así por medio de María la Gloria
se hace próxima al hombre.
La nube. Cubría al pueblo de Israel por su peregrinar en el desierto, María cubre con su manto
a la humanidad.
1.4 Textos por Adaptación
Llegando a su presencia, todos a una voz la bendijeron diciendo: «Tú eres la exaltación de
Jerusalén, tú el gran orgullo de Israel, tú la suprema gloria de nuestra raza» (Jdt 15, 9).
Por haber liberado al pueblo, los ancianos la aclaman "gloria de Jerusalén y honor de la raza";
lo aplican análogamente a María por adaptación.
Yahveh me creó, primicia de su camino, antes que sus obras más antiguas. Desde la
eternidad fui fundada, desde el principio antes que la tierra. Cuando no existían los abismos
fui engendrada, cuando no había fuentes cargadas de agua… (Pr 8, 22ss)
Antes de los siglos, desde el principio, me creó, y por los siglos subsistiré (Eco 24, 9).
Pasajes que hablan de la Sabiduría divina. A María la ven como "Trono de Sabiduría". Y la
eternidad del Plan Redentor de Dios. La unión de María con Cristo en la obra de la salvación.
1.5 Textos mariológicos discutidos
¿hasta cuándo has de vagar de acá para allá, oh hija renegada? Pues Yahveh ha creado una
cosa nueva en la tierra: la mujer cortejará al varón (Je 31, 32).
S. Agustín, S. Cipriano y S. Atanasio, se cuestionan si es realmente un texto mariológico.
Por su parte san Jerónimo dice que: es la promesa clara de la Encarnación virginal del Verbo
(de un hombre) en el seno de una mujer, sin la participación del hombre. Se creía fuera una
interpretación tradicional (padres), pero se descubrió que no (S. XIX): él es caso único en tal
interpretación. La traducción que hizo es inexacta.
… Escucha, hija, y mira y aplica tu oído; olvida tu pueblo y tu mansión paterna. Codicia el
rey tu belleza; él es ahora tu señor… recordaré tu Nombre por todas las generaciones, con
lo cual los pueblos te alabarán por siempre jamás (Sal 45).
Es un salmo mesiánico que en sentido pleno se cantan las bodas de un rey (Cristo). El título
de reina se aplicará solo por adopción a María, la reina que ahí aparece, ya que la palabra
olvida a tu pueblo, parece un hecho de infidelidad y esa esposa seria Israel.
Cantar de los cantares. Desposorios de Yahvé con Israel; de ahí los padres ven a Cristo que ama a
su Iglesia por ser María prototipo de la misma, los padres le aplicaron a María algunos pasajes, no
todo (como se hará desde el S. XII).

El sentido de todo el libro es la relación de Yahvé fiel con Israel infiel; y en María no hubo
tal infidelidad.
1.6 Textos mariológicos (ciertos)
Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: él te pisará la cabeza
mientras acechas tú su calcañar (Gen 3, 15).
L. Rethius (protestante) usa la palabra “Proto-evangelio”: presentado en la Biblia. como un
"Oráculo de Yahvé" no de un profeta “Yo pondré en enemistad entre ti y la mujer...”, por
estar puesto en su boca; con ello se le da el máximo de autoridad; en su estructura se da una
triple oposición: Serpiente - Mujer; Serpiente - Linaje de la Mujer; linaje de la Serpiente -
Linaje de la Mujer.

María será aquella Dentro de la tradición

mujer, que castiga a regia (A.T.) la "madre
la serpiente y por esa El linaje (de la mujer)
del señor" (rey) tiene
acción se glorifica la es Cristo.
su importancia; es
mujer. llamada "Gebiráh".

Es lógico que haya unión entre el
Mesías y su madre, y así ser esto
prueba de que se trata de María; pero
no convence ya que en el texto hay
una separación entre ellos dos (están
en distintos versículos); el linaje sería
una descendencia colectiva.
Tiene también el A Eva se le considera la mujer
que vence transfiriéndose esta
sentido de victoria a María. Eva se
proclamación de una encuentra en sentido literal
estrecho y a María en sentido
sentencia de castigo.
tipológica.

S. Justino, refiriéndose al proto-evangelio admite el plan divino de la salvación y la

correspondencia entre la reparación del pecado y la caída.
S. Irineo, ha visto en el un texto de profecía mesiánica. Estas interpretaciones las realizan
con base de lo que han recibido de otros, por quienes fue revelado el Evangelio.
S. Isidoro de Sevilla, interpreta el texto en sentido mariológico confirmado que ya se
realizaba desde los primeros siglos.
Sin embargo, no hay que negar que fue un proceso: con gran dispersión de opiniones en las
interpretaciones y convergencia en una interpretación autentica
Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una doncella está encinta y va
a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel (Is 7, 14).
Sentido mesiánico y mariológico del texto. Parece que el oráculo es demasiado solemne, para
decir solamente que sería virgen hasta el momento de la concepción, por lo tanto, hay algo
que se añade. Si solo fuera la madre del Emmanuel para que se emplea el termino virgen, hay
algo que va más allá de la maternidad. La novedad está en el hecho de que aquella mujer que
será la madre del Mesías será virgen en el momento de la concepción y se conservara siempre
virgen. Es un mesianismo en el sentido literal (si no fuera así se usaría otra figura típica).
Mas tú, Belén Efratá, aunque eres la menor entre las familias de Judá, de ti me ha de salir
aquel que ha de dominar en Israel, y cuyos orígenes son de antigüedad, desde los días de
antaño. Por eso él los abandonará hasta el tiempo en que dé a luz la que ha de dar a luz.
Entonces el resto de sus hermanos volverá a los hijos de Israel (Mi 5, 1-2)
En la tradición judaica se anuncia este nacimiento misterioso del Mesías, de allí que, el texto
de Miqueas tenga sentido mariológico.
Conclusión respecto al AT. La presencia de María en los textos del AT no aparece por sí
misma. Es necesario el recurso a la interpretación de la Iglesia y a una revelación ulterior y
plena. Los caminos históricos-salvíficos de Dios desembocan en María y se prolongan en
Cristo y en la Iglesia.
2. María en el NT
María, la Madre de Jesús es un título que cualifica a María con un vínculo cristológico
especial. María se integra a los discípulos desde una perspectiva eclesiológica.
2.1 Primera etapa: Pablo y Marcos, testimonios antiguos
En Gálatas se realiza la única referencia de María en la teología Paulina

Pero, al llegar la plenitud de los tiempos, envió Dios a su Hijo, nacido de mujer, nacido
bajo la ley, para rescatar a los que se hallaban bajo la ley, para que recibiéramos la
filiación adoptiva (Gá 4, 4-5).

Texto muy importante: La persona de María:

• Por su antigüedad • No está todavía bien
(49 y 57 dC) precisada
• Por su • Permanece en el
condicionamiento anonimato
histórico-salvífico • Su función es
• Por su incidencia en indispensable en la
ulteriores verdades encarnación
cristológicas y kenótica y salvífica
mariológicas del Hijo de Dios

La plenitud de los tiempos no se refiere al centro cronológico de la historia, sino al centro

escatológico. El nacido de mujer no significa fragilidad y bajeza de la creatura humana. María
pertenece al mundo de los humildes, de los hombres marcados por la historia. Existe una
vinculación mariológica-cristológica.
María en el Evangelio de Marcos
Vuelve a casa. Se aglomera otra vez la muchedumbre de modo que no podían comer. Se
enteraron sus parientes y fueron a hacerse cargo de él, pues decían: «Está fuera de sí» (Mc
3, 20-21)
Se puede destacar como existe una clara incomprensión de parte de la familia de Jesús
respecto a su misión. Desean llevárselo pues creen que se ha vuelto loco, la familia quiere
reintegrar por la fuerza al miembro separado, desean obligar a Jesús para que se ocupe de su
persona, todo esto los lleva a tener un enfrentamiento muy fuerte.
Llega su madre y sus hermanos, y quedándose fuera, le envían a llamar. Estaba mucha gente
sentada a su alrededor. Le dicen: ¡Oye!, tu madre, tus hermanos y tus hermanas están fuera
y te buscan. Él les responde: ¿Quién es mi madre y mis hermanos? Y mirando entorno a los
que estaban sentados en corro, a su alrededor, dice: «Estos son mi madre y mis hermanos.
Quien cumpla la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre» (Mc 3, 31-
35).
Ante la advertencia de la familia, Jesús responde al estilo sapiencial: sus gestos y palabras
son significativas; relega a la parentela, incluso a la madre; proclama la verdadera familia, la
que hace la voluntad de Dios.
"Salió de allí y vino a su patria, y sus discípulos le siguen. Cuando llegó el sábado se puso
a enseñar en la sinagoga. La multitud, al oírle, quedaba maravillada, y decía: «¿De dónde
le viene esto? y ¿qué sabiduría es ésta que le ha sido dada? ¿Y esos milagros hechos por sus
manos? ¿No es éste el carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, Joset, Judas y
Simón? ¿Y no están sus hermanas aquí entre nosotros?» Y se escandalizaban a causa de él.
Jesús les dijo: «Un profeta sólo en su patria, entre sus parientes y en su casa carece de
prestigio.» Y no podía hacer allí ningún milagro, a excepción de unos pocos enfermos a
quienes curó imponiéndoles las manos." "Y se maravilló de su falta de fe. Y recorría los
pueblos del contorno enseñando" (Mc 6, 1-6).
El texto presenta tres problemas: la posición de los familiares de Jesús; La insólita
designación de: hijo de María; la cuestión de los «hermanos de Jesús» (Elvidio dirá que son
hermanos y verdaderos hijos de María, Epifanio sostiene que son hermanastros de otro
matrimonio de José y Jerónimo indica que son hijos de María de Cleofás).
2.2 Segunda etapa: Mateo y Lucas: reflexión más desarrollada
En el Evangelio de Mateo encontramos la prueba que dentro del ámbito judío-cristianismo
palestinense, existe una profundización teológica abierta al universalismo.
De esta realidad participa el dato de María:
• No entra por azar.
• Pertenece al plan salvífico anunciado en la antigua alianza y realizado plenamente en
la nueva.
Mateo refuerza el papel de María en cuanto «Madre de Jesús». Foco de atención de la
genealogía de Cristo. La maternidad virginal de María adquiere su sentido último en su
reiterada referencia al Espíritu Santo. Mateo pone la concepción virginal bajo el signo del
cumplimiento de la Escritura. La intención de Mateo es clara cuando sitúa el evento del
nacimiento virginal del Mesías bajo el designio divino a través del esquema profecía-
cumplimiento. Además, a diferencia de Marcos, Mateo coloca a María dentro del plan divino,
ya que su maternidad virginal posee una función cristológica, es decir, muestra la auténtica
identidad de Cristo como dato que se ha constituido en objeto de profecía.
"Todavía estaba hablando a la muchedumbre, cuando su madre y sus hermanos se
presentaron fuera y trataban de hablar con él. Alguien le dijo: «¡Oye! ahí fuera están tu
madre y tus hermanos que desean hablarte.» Pero él respondió al que se lo decía: «¿Quién
es mi madre y quiénes son mis hermanos?» Y, extendiendo su mano hacia sus discípulos,
dijo: «Estos son mi madre y mis hermanos. Pues todo el que cumpla la voluntad de mi Padre
celestial, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre.» (Mt 12, 46-50)
Se ha limitado a presentar la función materna de María en vista del nacimiento del Mesías
Emmanuel. Atenúa la dureza de la familia de Jesús. Relata el episodio de la madre y los hermanos
de Jesús de forma menos cruda (cf. v 46). Su clímax real intenta mostrar la íntima conexión con una
nueva y más amplia familia constituida ahora por sus discípulos (connotación eclesiológica).

"Y sucedió que, cuando acabó Jesús estas parábolas, partió de allí. Viniendo a su patria, les
enseñaba en su sinagoga, de tal manera que decían maravillados: «¿De dónde le viene a
éste esa sabiduría y esos milagros? ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre
María, y sus hermanos Santiago, José, Simón y Judas? Y sus hermanas, ¿no están todas
entre nosotros? Entonces, ¿de dónde le viene todo esto?» Y se escandalizaban a causa de él.
Mas Jesús les dijo: «Un profeta sólo en su patria y en su casa carece de prestigio.» 58.Y no
hizo allí muchos milagros, a causa de su falta de fe." (Mt 13, 53-58)
Respecto al comportamiento de los nazarenos ante Jesús, convertido ya en un famoso maestro
y taumaturgo, Mateo acentúa su «escándalo» e «incredulidad». Pero ha tenido buen cuidado
en no colocar a los familiares de Jesús entre sus opositores. De hecho, sufren también con
Jesús el desprecio de parte de sus paisanos.
Se puede concluir del pensamiento mariano de Mateo que: presenta a María como la madre
virginal del Mesías y Madre asociada al destino de su Hijo.
Lucas
A Lucas y Juan debemos la valoración plena de María. La sitúan directamente en escena en
los misterios de la infancia y de la vida pública de Cristo. Revelan su misión y su
espiritualidad
San Lucas: profundiza en el alcance teológico de los sucesos. Supera la concepción
biológico-natural de la maternidad de María.
La anunciación (Lc 1, 26-38) es el relato de una vocación, la cual muestra la complacencia
Divina en María: Llena de gracia, el Señor es contigo (Lc 1, 28), no temas, porque has
encontrado gracia ante Dios (Lc 1, 30).
La visitación de María a su prima Isabel (Lc 1, 39-56). La inserción de maría en la historia
de la salvación queda plasmada en dos expresiones: Esclava del Señor (Lc 1, 38) y Bendita
tú entre las mujeres (Lc 1, 42).
En el Magníficat (Lc 1, 46-55) se aprecia como: María espera al Salvador; su canto es el
canto de los pobres; dos actitudes prácticas que todo cristiano está invitado a compartir.
En el nacimiento de Jesús (Lc 2, 1-20) se hacen 5 referencias a la Virgen:
• Humildad
• Se cumplió el tiempo del parto (6)
• Da a luz a su primogénito (7)
• María es presentada con José y el niño recostado en el pesebre (16)
• María guarda en su corazón todos estos recuerdos y los medita (19)

Circuncisión y presentación de Jesús (Lc, 2, 21-40). A María se le dice que una espada le
atravesara el corazón. Aquella que fue presentada con José como la fiel observante de la
ley, está ligada al drama del rechazo de su pueblo.
El niño Jesús perdido (Lc 2, 41-52). La escena es muy enigmática, pero lo que más llama la
atención es la respuesta que da Jesús a su madre a la pregunta:
“Hijo ¿por qué nos has hecho esto?” (Lc 2,48). A lo que Jesús responde: “¿No sabíais que
yo debía estar en la casa de mi Padre?” (Lc 2,49)
María sigue siendo la mujer creyente que acepta la palabra de Dios y se deja guiar por ella.
Síntesis de la mariología en san Lucas:
• Presenta muchas características de María
• Ejemplo de discípulo y seguidor de Jesús.
• Acoge la Palabra de Dios con fe; la guarda y la medita en su corazón
• Es por excelencia la peregrina de la fe
• Pronuncia el “Sí” y lo actualiza
• María nos recuerda que Dios escoge lo pequeño.
2.3 Tercera etapa: Juan y Apocalipsis
Juan sitúa a María en dos momentos decisivos: la cumbre de su misión salvífica (Jn 19, 25-
27) y la primera manifestación mesiánica de Cristo (Jn 2, 1-12).
Juan traza la personalidad religiosa de María, que hace de ella la anticipación perfecta de la
Iglesia y la primera cristiana. En María convergen todas las dimensiones espirituales
características de la línea mística de los pobres de Yahvé en el AT y que serán canonizadas
por las bienaventuranzas evangélicas.
En las bodas de Caná (Jn 2, 1-12), María advierte que no hay vino, así revela una confianza
incondicional en su Hijo. María representa la expectación mesiánica del pueblo de Israel.
María aparece como la figura esposa de la mujer, la virgen de Israel, la Iglesia virgen y madre,
es la nueva y eterna alianza.
María al pie de la cruz (Jn 19, 25-27). La escena de María junto a la cruz y las palabras de Jesús
hacia ella: mujer ahí tienes a tu hijo… María representaría al pueblo elegido de la antigua alianza y
al nuevo pueblo de Dios, reunido por el sacrificio pascual de Cristo. Acoger a la madre indica que
ella entra en lo profundo de la vida del discípulo, forma parte de la vida de la comunidad.
María es el bien precioso que tiene el discípulo.
La síntesis de la mariología en san Juan puede describirse de la siguiente manera:
• María es una figura especial en la comunidad juánica
• Aparece en dos momentos
• FE: “Libro de los signos”
• AMOR PERSEVERNTE: “Libro de la exaltación”
• Mujer: Activa en la comunidad
• Símbolo femenino del pueblo de Dios
Apocalipsis
La referencia mariana la encontramos en todo el capitulo 12. La gran señal que aparece en el
cielo tiene un trasfondo del A.T, anuncia la enemistad entre la mujer y la serpiente, la figura
de la mujer evoca a la nueva Jerusalén, la madre del pueblo mesiánico. La luna bajo sus pies
significa que se le asegura a la mujer la victoria, no sucumbirá a las vicisitudes terrenas.
María aparece en profunda relación con su Hijo, con la Trinidad, con Israel, con la Iglesia,
en ella se entrecruzan las líneas fundamentales del antiguo y del nuevo pacto, en ella se
celebra la alianza entre el cielo y la tierra.
De la lectura del cap. 12 se deduce que:
• Iglesia es perseguida
• Pueblo peregrino que continuamente engendra al Mesías
• Relato con carácter cristológico y eclesiológico
• María Madre el Mesías
• Imagen del Pueblo de Dios
II. MARÍA EN LA TRADICIÓN DE LA IGLESIA (Dogmas)
1. La maternidad divina en la tradición de la Iglesia
Hablar de la maternidad divina de María nos remonta a los primeros siglos de nuestra fe,
pues desde los orígenes del cristianismo, se reconocía el papel fundamental de la María en la
obra salvífica de Dios a favor de los seres humanos y su cooperación en este plan.
Desde que se proclamó este dogma hacia el 431, concretamente en Éfeso, debemos señalar
que lo que llevo a la Iglesia a definir solemnemente la maternidad divina de María fue la
motivación profundamente cristológica, es decir, que, a través del conocimiento de Jesús,
lleva como consecuencia el conocer a su madre. La maternidad divina de María es el principio
fundamental del que derivan los argumentos marianos.
Jesús tiene dos naturalezas: es verdadero Dios y es verdadero hombre. María es Madre de
una de las personas divinas, por eso es Madre de Dios. La realidad específica de María la
distingue del resto de la humanidad, es un privilegio único que le une íntimamente al Hijo.
El CV II en LG en su capítulo VIII, No. 61 indica que: María es Madre de dios y de la Iglesia.
Afirma que María fue predestinada desde la eternidad como Madre de Dios; por ser ella la Madre de
Cristo, nuestro señor y salvador, no debemos olvidar que, al ser sus discípulos, nos la dejo encargada
en la persona de Juan, por eso es nosotros la hemos acogido pues ella nos trajo al autor de nuestra
salvación (Jn 19, 27)

2. La Inmaculada en la Tradición
Decir que María es Inmaculada significa que: fue inmune del pecado original, desde el inicio
de su existencia humana (Pio IX, Inefabilis Deus).
Los pasajes en los que se apoya la fundamentación bíblica son: todos los que afirman la
maternidad divina, que es exigencia para la concepción inmaculada:
• El saludo del ángel, “llena de gracia” (Lc 1, 28). El ángel llama a María
"KEJARITOMENE”, posee la gracia. Es privilegio específico debido a la que sería Madre
de Dios, comprende todo el arco de la vida, pues no se hace referencia a un tiempo
determinado de la vida.
• Enemistad pondré entre ti y la mujer (Gen 3, 15). En el proto-evangelio porque la
enemistad desde el inicio con el Diablo equivale a ausencia del pecado original (el pecado es
la amistad con Satán).

Hasta el Concilio de Éfeso (431). El paralelismo antitético Eva-María. Ya en el Siglo. II

María viene contrastada con Eva, asociada al Nuevo Adán; de ahí la primera diferencia
respecto a todo otro h. (cfr. S. Justino 32 y S. Ireneo). La llaman "Causa de salvación". El
proto-evangelio de Santiago finge una concepción, si no virginal, al menos sí milagrosa,
abriendo así la puerta a la consideración de esa concepción como enteramente santa.
Los padres griegos desean indicar la relación entre maternidad divina y exigencia de pureza; de
ello surge la excepcionalidad de María entre todos los redimidos:

• Gregorio Nazianceno. En María se da una purificación antes de la anunciación.

• Orígenes. María no tuvo pecados graves, sólo deficiencias en la fe.
• Tertuliano, Cirilo de Alejandría, Juan Crisóstomo. Indican que María sólo tuvo pecados
leves.
• San Efrén. En María no hay ninguna impureza.
• San Ireneo. Establece un paralelismo entre María y Eva (desde el primer momento sin la
mínima mancha. Así la nueva creación debe empezar con la “nueva Mujer” considerada
como una persona que no tiene relación con el pecado.
Los padres latinos:

• San Ambrosio. María es íntegra de toda mancha de pecado.

• San Agustín. Niega todo pecado personal en María, pero de una expresión suya poco clara
parece deducirse que no la creyó exenta de pecado original. S. Agustín, entre los padres de la
 I. latina, rechaza la Inmaculada concepción, (aunque afirma la santidad de María); mientras,
otros padres la niegan porque sostienen que sólo Cristo es perfectamente santo; por ello María
habría pecado al menos venialmente. Pues si María fue concebida de forma normal, no se
libera de los efectos de la concupiscencia, se daba algún nexo con el pecado original.
Desde el Concilio de Éfeso. Ya en el Siglo VII hay en Irlanda una fiesta a la Inmaculada, y luego
extendida a toda Europa. En pro de la Asunción y Inmaculada hay un Pseudo Agustín (s X- XII). S.
Bernardo escribe sobre ello, y la asemeja a Cristo, dándole atributos de El (Letanías); con ello hay
devoción, pero no corriente teológica clara. Sólo en el s. XV, como reacción contra Lutero; así el
"Mariale" del Pseudo Alberto Magno.
Planteamiento del dogma

La 1ª dificultad que surge frente al dogma es la aparente incompatibilidad de la redención

universal de Cristo con la exención de María del pecado original. La solución no llega hasta
el s. XIII.
Los ss XII-XIV están llenos de controversias; la oposición surge sólo en Oriente por influjo
del agustinismo: si María no hubiese sido redimida del pecado original, la redención de Cristo
no habría sido universal.
S. Anselmo, aunque acepta este punto, da la respuesta: María fue Inmaculada en previsión
de los méritos de Cristo; definió mejor el concepto de pecado original como la "ausencia de
justicia" ante Dios, y no como una mancha física, fetal. Por ello antes de la concepción de
Cristo, María fue glorificada, purificada, de otro modo la naturaleza de María permanecería
aficionada a el pecado, así muestra la excelencia de la Santidad de María.
Para S. Bernardo y Pedro Lombardo la dificultad se encuentra en que sólo hay ausencia de
mancha original si la concepción es virginal (y María no fue concebida así); en esta línea va
S. Alberto. Sto. Tomás ve dificultad en la redención de Cristo dejaría de ser universal. ( S.
Th. III q. 27, a 1, ad resp.)
En pro está un discípulo de S. Anselmo, Eadmero: distingue la acción divina que puede evitar
la herencia original; lo cree debido a la dignidad de la Madre de Dios; y sobre todo su
argumento (vuelto clásico) "Potuit, decuit, fecit". William Ware y su discípulo, Scoto, la
defienden en previsión de los méritos de Cristo, la redención que preserva es mucho más
perfecta. Si María no fuese preservada contrae por derecho el pecado original.
Mayronis: si uno es concebido según la concupiscencia contrae por derecho el pecado
original, pero de hecho puede ser preservado por Dios, del hecho de no tener pecado original.
Desde Éfeso hasta el siglo XIV
En la Iglesia oriental. Éfeso, con la definición de la maternidad divina de María, es un punto decisivo
en el camino de su glorificación. Los autores posteriores acentúan más y más su grandeza,
prescindiendo de la dificultad que supone el dogma de la redención universal. Entre ellos aflora la
idea de una santidad total, pero no es universalmente aceptada (Zeoteknos de Livias, Andrés de
Creta). La fiesta de la Natividad de María que se celebraba en oriente se extendió a Occidente y tuvo
gran influencia en la comprensión y aceptación del dogma por el pueblo.
En la Iglesia occidental. Mientras los teólogos se muestran contrarios al dogma, el sensus fidelium lo
afirma cada vez con más fuerza. La idea agustiniana sobre la redención universal y la transmisión del
pecado original por la concupiscencia inherente al acto sexual de la generación frenan grandemente
el desarrollo del dogma. Eadmero de Inglaterra es el 1º que lo defiende con su argumento: "Dios pudo
hacerlo, lo quiso, luego lo hizo". La solución la halló Guillermo de Ware y fue desarrollada por Duns
Scoto: la redención preservativa de Cristo no exceptúa a María de la redención universal, sino que la
hace objeto de una redención más excelente.
Desde el s. XIV hasta la definición dogmatica
El Concilio de Basilea (1439). La teoría extendida por Scoto se impone siglo y medio después en el
Concilio de Basilea, que aprueba el decreto definitorio e instaura la fiesta para todo el mundo. La
definición no tiene valor por tratarse de un concilio cismático, pero pone de manifiesto la fuerza
adquirida por la tesis inmaculista.
Otras intervenciones del magisterio: Sixto V aprueba la misa y el oficio de la fiesta en 1476. Trento
declara que no es intención suya incluir a María en la universalidad del pecado original. Pío V
condena como errónea la afirmación de Bayo según la cual María había estado sujeta al pecado
original. Alejandro VII afirma en 1661 que casi todos los católicos admiten la Inmaculada
Concepción de María. Clemente XI instituye la fiesta de la Inmaculada Concepción como día de
precepto.
D. Triunfo de la teología de la Inmaculada: Con Trento aumenta mucho el estudio, pues, aunque
aparentemente haga una declaración de neutralidad, en el fondo manifiesta fe en la Inmaculada. En
Italia, Belarmino, Salmerón, Salazar; Pedro Canicio (Alemania), Grinon de Monfort (Francia)...
Desde el s. XV crece el número de universidades. que no sólo defiende el dogma, sino que exige
jurarlo a los académicos (París, Colonia, Maguncia)43. En el 1439 el Conc. de Basilea había definido
el dogma, pero por haber iniciado este concilio como cismático, fue inválidado tal definición
María se aparece a una monja Labourè, pidiéndole grabe una medalla con la inscripción: "Oh María,
concebida sin pecado, tened piedad de nos que hemos recurrido a vos" El obispo lo hizo
discretamente, pero tuvo enorme éxito; es antes de la definición. Pío IX interpretó la fórmula del
Conc. de Trento como defensa de la Inmaculada, y con la certeza de que nada en la Escritura ni en la
Tradición se opone.
Pío IX en su definición sostiene: Que María es (Virgen) Inmaculada desde el primer momento de ser
persona. Que esto es una Gracia, privilegio de Dios, no común entre los hombres por los méritos de
su Hijo, Salvador (no se le llama 'Redentor') No se dice nada de las consecuencias del pecado. Que
es doc. revelada, y por tanto, dogma.
3. La virginidad de María
La Virginidad de María es una virginidad física definida por la Iglesia como perpetua, por lo tanto,
María no tuvo relaciones con José. en el parto y después del mismo.
Lc habla del ángel que visita a una virgen; y la concepción que le propone es virginal
María es (Lc 1, 35)
virgen antes Y lo mismo lo dice José (Mt 1, 20)
Tanto Lc y Mt ven cumplirse a si la profecía (Is 7, 14)
Virginidad en el parto
• Según ciertos autores Is.7,14 ya lo sugiere, (por poner en el mismo tiempo y unidos, los
verbos concibe y da a luz).
• Y Lc 2,7 lo confirmaría, donde se ve a María actuando en seguida después del parto, por no
haber sufrido al dar a luz.
• En el fondo sólo se aclara con la Tradición.
• La Tradición lo confirma desde Ignacio de Antioquia; sobre todo al rechazar las acusaciones
de ebionitas y agnósticos.( Jesús habría nacido de la acción de José)
• Los paganos (Celso y Carpócrates acusan a María de adulterio). Esta doctrina de S. Ignacio
la confirman los primeros símbolos de la fe (DS 10-30)
• S.Ireneo (parto milagroso, sin dolor), en base a Eva y Is.7,14.
• En el s.IV sostenida por S. Zenón de Verona, S. Ambrosio, S. Agustín, S. Hilario, P.
Capadocios
• Varios sínodos (El sínodo Romano de 393, el de Milán) condenan a los opositores
• Algunos de los atacantes lo hicieron en realidad para contrarrestar a los maniqueos que decían
que Cristo sólo tenía cuerpo espiritual.
• La definición se hizo en el Sínodo Romano del 649, con Martín I (DS 503)
María es virgen después del parto
• La voluntad de María es expresa (Lc. 1,34) ¿Por qué iba a cambiar de opinión, si Dios no se
lo pedía? Además, si Ella la iba a perder después, ¿Por qué iba Dios a hacer un milagro para
conservar antes (y durante) su virginidad?
• Virginidad perpetua: ya afirmada por S. Epifanio (374, DS 44) Las fórmulas, sin embargo,
las encontramos sólo en el s.V entre obispos africanos (S. Dídimo de Alejandria, S. Atanasio.
• Constantinopla II (año 553) le otorgó a María el título de "siempre virgen" (aeiparthenos)
• Paulo IV lo define (DS 1880)
• La virginidad se le quiere reducir sólo a una virginidad "moral"; ya Trifón, en el s.II (judío
refutado por S. Justino) pretende lo mismo) se refería al mito de las relaciones dioses -
mujeres, dando origen a hombres especiales. Así no habría virginidad física en María. Para
apoyar tal actitud se sostiene que la virginidad biológica nunca fue definida por la Iglesia.
La respuesta la encontramos analizando Jn 1,13 ("No de la carne, ni por voluntad de varón, sino de
Dios, ha(n) nacido". ¿A quién se refiere, a Cristo o a los cristianos? Si se lee en singular; los textos
NT en griego no lo favorecen; sólo ciertos padres la favorecen (quizás por tener textos en singular en
sus manos); Tertuliano la aplica a los cristianos; hoy se prefiere el singular (referido a Cristo).
La asunción de María
La asunción se entiende como la glorificación corporal, anticipada de María, como se encontrarán en
el cielo los justos después de la resurrección final.
 Ap 12,1 • María, Nueva Eva, está unida
especialmente a Cristo, en su
lucha y victoria sobre Satán.
• Para S. Pablo esta victoria fue
victoria sobre pecado y muerte
(Rm. 5; 6; 1Cor. 15; 21)
• La especial participación de María
Gen 3, 15 en esta victoria está ya en su
Asunción.

Los 4 primeros siglos. Veneración del sepulcro de la Virgen en Getsemaní y celebración de

la fiesta de la dormición de María.
Persuasión de la gran santidad de María; se ignoran las circunstancias del fin de su vida
El silencio de los Padres en este periodo se puede explicar porque los escritos patrísticos no
son el único medio de la Tradición y porque ofrecía el peligro de deificación de María
hablar de la Asunción en medios cristiano-paganos.
En los Padres hallamos estos principios para deducir el dogma.
María recapitulación de Eva, no caída, no tuvo que sufrir la pena de lo que no tuvo.
De maternidad y virginidad: el cuerpo de María estuvo rodeado de grandes misterios y no
parece que fuese sujeto a la muerte.
De unión perfecta entre el Hijo y la Madre y de honra del Hijo para con la Madre: no la
honraría si la dejase corromperse
Teodosio de Alejandría sostiene que: La maternidad divina es el fundamento de la Asunción que
se orienta a la mediación y comunicación de la redención a toda la humanidad.

Zeoteknos de Livias indica que: Las razones de la Asunción son la maternidad divina de María,
su virginidad y su dignidad sobre todos los bienaventurados.

El emperador Mauricio (582-602) fija la fecha del 15 de agosto para la fiesta mariana con el
título de Dormición de María.
El Papa Sergio explica el sentido de la fiesta de la Asunción.
En Oriente, desde el s. VII, abundan los testimonios a favor. En Occidente, el Martirologio
de Abdón cita la fiesta de agosto como Venerable memoria de la Dormición de María
III. MARÍA EN EL MAGISTERIO DEL S. XX Y XXI
1. Lumen Gentium cap 8
Las ideas más destacadas del capítulo son las siguientes:
• María es la madre de Dios redentor
• Es la hija predilecta de Dios Padre, por eso por ser la hija que más quiere Dios no le
niega nada de lo que pide para nosotros.
• Es el sagrario del Espíritu Santo ya que lo tuvo por nueve meses en su alma formando
al Hijo de Dios.
• Su gracia es tanta que supera a todas las demás criaturas por eso ella puede
comunicárnosla si se la pedimos.
• Es la madre de los discípulos de Jesús ya que Él mismo en el Calvario le dijo a Juan,
que nos representa a nosotros, “he ahí a tu madre”. Por lo tanto ella acepta a todos
como hijos suyos.
• Desde el primer instante fue enriquecida con una santidad especial.
• Es el modelo de todas las virtudes, especialmente la fe, la caridad y la obediencia. Fe
cuando creyó sin ver y sin entender lo que el ángel le había dicho; y creyó que ese
hijo que tuvo era Dios. Caridad cuando fue con prontitud a ayudar a Isabel o cuando
ayudó a los esposos en las bodas de Caná. Obediencia cuando tuvo que aceptar que
Pilato mande matar a su hijo.
• Es señal de esperanza y de consuelo porque el triunfo que ella ya consiguió en el cielo
nos da a nosotros la esperanza de que también lo podemos conseguir, y puede
comprender a todos los que sufren y darles consuelo, ya que ella misma padeció
muchos dolores.
• Es modelo de afecto maternal hacia los discípulos de su hijo.
• Llevada al cielo no dejó su oficio salvador ya que nos cuida porque somos hermanos
de Jesús.
• Todo lo que se haga en su honor conduce a que su Hijo sea más conocido, Dios más
glorificado y los mandamientos más cumplidos.
• Tiene cuatro grandes títulos: es Abogada por que intercede por los que están en
peligro de condenación, es Mediadora porque pide en favor de los que no se creen
dignos de pedir directamente un favor a Jesús, es Auxiliadora brindando una ayuda
muy especial a quien está padeciendo necesidad espiritual o material, y es Socorro
porque favorece al que no es capaz de ayudarse a sí mismo cuando está en una
situación muy difícil.
• María es nuestra madre en el orden de la gracia, es decir que tenemos dos mamás: la
que nos dio el cuerpo; y la Virgen María.
• Entre todos los santos debemos venerarla en primer lugar, es decir que el Concilio
aprueba la devoción a la santísima Virgen.
• Debemos imitar sus virtudes.
• Se conserva la doctrina de la Iglesia Católica acerca de las imágenes, es decir que se
acepta tener imágenes, cuadros, medallas y estampas de la Virgen ya que la imagen
de una persona amada aumenta el amor.
• Se recomienda que todos encomienden a Ella su vida y su apostolado rezándole
diariamente, pidiéndole su ayuda, encomendándole aquellas almas que deseamos
salvar con nuestro apostolado.
• Se pide que todos la honren devotísimamente, o sea, no de un modo ordinario, sino
con fiestas muy especiales, adornando sus imágenes y cuadros, peregrinando hacia
sus santuarios, repartiendo estampas suyas, novenas, etc.