El Acuerdo de Escazú es un tratado internacional firmado por 24 países de América Latina y el

Caribe en 2018, cuyo objetivo es garantizar el acceso a la información ambiental, la participación

ciudadana en la toma de decisiones ambientales y el acceso a la justicia en asuntos ambientales .
El tratado lleva el nombre de la ciudad de Escazú, en Costa Rica, donde se llevó a cabo la última
ronda de negociaciones.

El Acuerdo de Escazú es el primer tratado en América Latina y el Caribe que aborda

específicamente los derechos de acceso a la información, la participación y la justicia en asuntos
ambientales. Busca promover la transparencia en la gestión ambiental, la inclusión de la
ciudadanía en los procesos de toma de decisiones y la protección de los defensores de los
derechos humanos en temas ambientales.

El tratado es vinculante para los países que lo han firmado y entrará en vigor una vez que sea
ratificado por al menos 11 de los países firmantes. Hasta la fecha, solo 12 países han ratificado el
Acuerdo de Escazú.

En resumen, el Acuerdo de Escazú es un tratado internacional que busca garantizar el acceso a la

información ambiental, la participación ciudadana en la toma de decisiones ambientales y el
acceso a la justicia en asuntos ambientales en América Latina y el Caribe.

Colombia es uno de los países que establecieron el acuerdo en septiembre de 2018, y se

convirtieron en el país número 12 en hacerlo. El acuerdo fue ratificado por Colombia en agosto de
2020, convirtiéndose en el primer país de la región en hacerlo.

El acuerdo es especialmente importante en Colombia, ya que el país ha sido históricamente

afectado por conflictos relacionados con la explotación de recursos naturales y la deforestación, lo
que ha tenido graves consecuencias ambientales y sociales. El Acuerdo de Escazú busca proteger
los derechos de las comunidades y vulnerables, promover la transparencia y la rendición de
cuentas en asuntos ambientales, y fomentar la cooperación regional para enfrentar los desafíos
ambientales comunes.
El Convenio de Viena es un tratado internacional adoptado en 1980 por la Conferencia de las
Naciones Unidas sobre los Contratos de Compraventa Internacional de Mercaderías, que entró en
vigor en 1988. El objetivo del convenio es establecer un marco uniforme para la compraventa
internacional de mercancías, con el fin de reducir las barreras comerciales y promover la eficiencia
y la seguridad en las transacciones comerciales internacionales.

El Convenio de Viena se aplica a los contratos de compraventa de mercancías entre empresas de

diferentes países que tendrán su sede en países que han ratificado el convenio. El tratado
establece reglas uniformes en cuanto a la formación del contrato, las obligaciones de las partes, la
entrega y la transferencia de riesgos y la resolución de conflictos.

El convenio es considerado uno de los principales instrumentos internacionales para la

armonización del derecho comercial internacional, y ha sido adoptado por más de 90 países.
Además, el convenio es especialmente relevante para el comercio electrónico, ya que establece
reglas uniformes para las transacciones comerciales a través de medios electrónicos.

En resumen, el Convenio de Viena es un tratado internacional que establece reglas uniformes para
la compraventa internacional de mercancías, con el objetivo de reducir las barreras comerciales y
promover la eficiencia y la seguridad en las transacciones comerciales internacionales.

Colombia hizo el Convenio de Viena en mayo de 1970 y lo ratificó en diciembre de 1981. La

ratificación del convenio por parte de Colombia significa que el país se compromete a respetar y
aplicar las normas y principios del derecho internacional de los tratados, incluyendo la obligación
de cumplir de buena fe las obligaciones establecidas en los tratados.

El Convenio de Viena es particularmente importante para Colombia, ya que el país ha celebrado

numerosos tratados internacionales en diferentes áreas, como el comercio, la cooperación en
materia de seguridad, los derechos humanos y el medioambiente, entre otros. El convenio
establece los requisitos y procedimientos para la celebración y entrada en vigor de los tratados, así
como las reglas para su interpretación y aplicación. Además, el convenio establece las
circunstancias en las que un tratado puede ser modificado o terminado, lo que es especialmente
relevante para Colombia, que ha enfrentado y conflictos para la terminación de tratados
internacionales en el pasado.